Oraciones Iniciales

Guía: Abre señor mis labios

Todos:  y mi boca anunciara tu alabanza
Guía:  Ven, OH Dios, en mi ayuda.
Todos:  Apresúrate, señor, a Socorrerme.

Guía:  Ave maría purísima del refugio

Todos: sin pecado concebida
Guía:   Por la señal de la santa cruz,
Todos:  De nuestros enemigos líbranos señor, dios nuestro.

En el nombre del padre y del hijo y del espíritu santo. Amén.

Acto de Contricción

¡Señor mío Jesucristo! Dios y hombre verdadero, me pesa de todo corazón haber
pecado, porque he merecido el infierno y perdido el cielo, y sobre todo, porque
te ofendí a ti, que eres bondad infinita, a quien amo sobre todas las cosas.
Propongo firmemente, con tu gracia, enmendarme y alejarme de las ocasiones de
pecar, confesarme y cumplir la penitencia. Confío me perdonarás por tu infinita
misericordia.          Amén.

¡OH Virgen de Guadalupe que nos has descubierto en tu Santo

Rosario, con que poder vencer a nuestros enemigos, el escudo para
defendernos de sus asaltos y la escala que nos conducirá al Paraíso,
ayúdanos cuando a ti recurramos con esta oración y has que
podamos merecer por ella todas las gracias necesarias, no solo para
nosotros si no también para los que amamos, para los pobres
pecadores, para los moribundos y por las almas del purgatorio y
todo el mundo cristiano.            Amén.
Adiós, Reina del Cielo
Adiós, Reina del cielo,
Madre del Salvador.
Adiós, oh Madre mía.
Oración por los Sacerdotes
Adiós, adiós, dios.
1.
De tu divino rostro
Me alejo con pesar; ¡OH JÉSUS! Sacerdote Eterno, guarda a
Permíteme que vuelva tus Sacerdotes bajo la protección de tu
Tus plantas a besar.
Sagrado Corazón donde nada pueda
2.
Adiós, Reina del cielo,
mancillarlos, guarda inmaculadas sus
Madre del Salvador, manos ungidas que tocan cada día tu
Dulce prenda adorada, Sagrado Cuerpo, guarda inmaculados sus
De mi sincero amor. labios diariamente teñidos con tu
3. Preciosa Sangre, guarda puros y
De tu divino rostro
despojados de todo afecto terrenal sus
La belleza al dejar,
corazones que TÚ has sellado con la
permíteme que vuelva
Tus plantas a besar. sublime marca del sacerdocio. Que tu
4. Santo Amor los rodee y los preserve del
A dejarte, oh María, contagio del mundo. Bendice sus tareas
No acierta el corazón; apostólicas con abundante fruto, y haz
Te lo entrego, Señora,
que las almas confiadas a su celo y
Dame tu bendición.
dirección sean su alegría acá en la tierra
5.
Adiós, hija del Padre; y formen en el cielo su hermosa e
Madre del hijo adiós; inmarcesible corona. Amén.
Del Espíritu Santo,
Oh casta esposa, adiós. Que la paz del Señor y la dulzura de su
6.
Santo Espíritu sean siempre con
Adiós, oh Madre Virgen,
nosotros.
Más pura que la luz;
Jamás, jamás me olvides
Delante de Jesús. Amén

7.
Adiós, del cielo encanto,
Mi delicia y mi amor;
Adiós, Oh madre mía,
Adiós, adiós, adiós.
OH Dios, cuyo unigénito hijo, con su vida, muerte y resurrección, nos alcanzó el
premio de la Vida Eterna; concédenos, a los que recordamos estos misterios del
Santo Rosario, imitar lo que contienen y alcanzar lo que prometen. Por el mismo
Jesucristo, nuestro señor.   Amén.

OH señora mía OH madre mía, yo me ofrezco, enteramente a ti, y en prueba de

mi filial afecto, te ofrezco desde ahora, mis ojos, mis oídos, mi lengua y mi
corazón, en una palabra todo mi ser, ya que soy tuyo OH madre de bondad,
guárdame y defiéndeme como cosa y posesión tuya.             Amén.
ORACION A LA VIRGEN DE GUADALUPE
OH purísima virgen de Guadalupe a quien amo tiernamente como a mi verdadera y
dulcísima madre; dígnate admitirme en tu sagrada presencia. Aquí vengo en
unión de los ángeles y de los santos a ofrecerte uno de los 46 rosarios con que
deseo honrarte.
Este numero debe serte muy agradable puesto que lo has escogido para que sea
el de las estrellas que adornan tu regio manto, también vengo soberana señora a
pedirte el remedio de las necesidades públicas y de las particulares que me
aquejan.

(Aquí menciona cada uno las necesidades propias o agradecimientos)

¡A quien he de recurrir sino a ti que eres mi madre! Muéstrame la suave

compasión que le mostraste a San Juan Diego, verdad es que no la merezco
porque no tengo las virtudes de aquel piadoso indio.
Mas espero de tu misericordia que me darás un corazón puro y amante como el
suyo para saber agradecerte, entonces podré oír en el fondo de mi alma que
alivias mis penas con aquellas mismas dulces palabras que dijiste “hijito mío… por
que te afliges? ¿No estoy aquí que soy tu Madre…? ¿Por ventura no estas
acogido bajo  mi amparo?”. ¿Se te ofrece otra cosa?

Si, Madre mía dulcísima, si se me ofrece otra cosa, además de la gracia que te
estoy pidiendo, te suplico que bendigas a toda tu nación mexicana, para que
venga a ella el Reino de Jesucristo, de un modo especial protege a los que te son
devotos, para que formando tu Familia Intima en esta vida, tengamos la dicha de
formar tu corte predilecta allá en el CIELO donde contigo alabaremos
eternamente al PADRE, a tu HIJO y al ESPIRISU SANTO, AMEN.

DESPEDIDA

Adiós madre mía, dame tu bendición, antes de que yo abandone este lugar y
recibe mi agradecimiento por los consuelos que de ti eh recibido y concédeme la
gracia de alabarte siempre en la eternidad amén.                                

ORACION FINAL

Dulce madre, no te alejes ….

Virgen de Guadalupe inmaculada María, a tus pies esta un pecador que siempre
ah deseado amarte con todo su corazón, pero no ah sabido, manifestarte su
deseo, que no sé ah conducido como tu verdadero devoto, sin embargo que
consuelo tan grande eh recibido siempre que con fe té eh invocado.
Recuerdo que desde pequeñito tu imagen ah sido para mí muy querida y en las
grandes aflicciones de la vida encontré en tu santuario, tranquilidad resignación y
paz, hoy vengo a implorar una vez mas, seguro de lo que pido serán oído, vengo a
pedirte mucho por que sé que mucho puedes y por que necesito mucho de tu
auxilio, mis penas mis deseos y necesidades tú las conoces, por que las madres
conocen siempre el corazón de sus hijos alcánzame lo que Deseo si lo que deseo
es para mi bien eterno y si así no fuere dame resignación y un grande amor a ti
madre mía Virgen de Guadalupe AMEN