Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
nuevo amanecer
Un profeta llorón no tan llorón
Texto
Lamentaciones 3:22-24
Contenido a saber
Juan 1 dice que Jesús es: Dios, creador, vida, palabra, luz y el
cordero de Dios que quita el pecado.
1
Si andamos en luz tenemos comunión con él y unos con otros.
1Jn. 1:7
El pecado como el odio al hermano te saca directamente de la
luz (comunión y santidad). 1 Jn. 2:9-11
“aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo.” Jn.1:9
En su paso por la tierra no hay dudas de que Jesús hizo exactamente esto él
como hombre trajo y nos alumbró con la luz de Dios. Sin embargo hubo un momento
en el que esa comunión se cortó, Jesús (como hombre digo) dejó de recibir
y por lo tanto de reflejar la imagen de Dios. Cuando él estaba en la cruz siendo
cerca del medio día
“Ya era alrededor del mediodía, y la tierra se llenó de oscuridad hasta las tres de la tarde. La luz del
sol desapareció…” Lc. 23:44-45
“A eso de las tres de la tarde, Jesús clamó en voz fuerte: «Eli, Eli, ¿lema sabactani?», que significa
«Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?»”. Mt. 27:46
“todo fue creado por medio de él y para él… Y todas las cosas en él subsisten (él mantiene unida
toda la creación. NTV)” Col. 1:16-17. “…Y quien sustenta todas las cosas. He. 1:3”
Reflexiones:
1) Creo que con cada amanecer se renueva la fe, ver el sol alumbrar te
permite recordar que aquél a quién le confiaste la salvación de tu alma
sigue siendo el único salvador, sigue estando a la diestra de Dios y
permanece en plena e íntima comunión con el Padre.
2
La leche se vence, el café se vacía, el auto se desvaloriza y la ropa pasa
de moda. Pero la misericordia de Dios es NUEVA con cada amanecer.
Reflejemos la luz de Jesús. “Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como
en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma
imagen, como por el Espíritu del Señor.” 2 Co. 3:18.
Que así como la misericordia de Dios se renueva para con vos cada día
que tú misericordia para con quienes te rodean también sean nuevas
cada día, no te canses de perdonar, de soportar, de amar, de bendecir,
de servir. Él no se cansa con vos.