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AUD.PROVINCIAL SECCION N. 28
MADRID
SENTENCIA: 00249/2010
SECCIÓN 28
t6
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SENTENCIA nº 249/2010
Ha comparecido en esta alzada la parte apelante, representada por el Procurador de los Tribunales
D. Juan Manuel Caloto Carpintero y defendida por la Letrada Dª Margarita Pineda Arnáiz y la parte apelada
representada por la Procuradora Dña. Margarita López Jiménez .
ANTECEDENTES DE HECHO
PRIMERO. La parte dispositiva de la Sentencia recurrida es del siguiente tenor: "Que desestimando
como desestimo la demanda interpuesta por el Procurador D. Juan Manuel Caloto Carpintero, en nombre y
representación de D. Miguel Ángel , Dª Celia , Dª Gema y D. Blas contra VILLA PAZ CUENCA, S.L.,
representada por la Procuradora Dª Margarita López Jiménez, en impugnación de los acuerdos adoptados
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por la Junta General del día 29 de junio de 2006, debo absolver y absuelvo a la demandada de los
pedimentos formulados en su contra, y todo ello con expresa condena en costas a los actores".
Ha intervenido como Ponente el Ilmo. Sr. Magistrado D. Gregorio Plaza González, que expresa el
parecer del Tribunal.
FUNDAMENTOS DE DERECHO
PRIMERO. Por medio de la demanda interpuesta por D. Miguel Ángel , Dª Celia , Dª Gema y D. Blas
se interesaba la declaración de nulidad de pleno derecho de los acuerdos adoptados en la Junta General
Ordinaria de Accionistas de 29 de junio de 2006, de la entidad VILLA PAZ CUENCA, S.L., por defectos en la
válida constitución de la Junta y por vulneración del derecho de información al no responderse a las
preguntas formuladas en la Junta.
A través del recurso interpuesto se introducen cuestiones irrelevantes en relación al objeto de las
actuaciones y a los términos en que se sustenta dicho recurso, por lo que debemos centrar su alcance en el
motivo que se relaciona en su primer apartado, que no es otro que el error en la valoración de las pruebas
que se atribuye a la sentencia dictada en primera instancia al entender vulnerados los apelantes su derecho
de información, en concreto respecto a la los extremos interesados en la Junta por no ser contestados en
dicho acto.
El Consejo de Administración de VILLA PAZ CUENCA, S.L. acordó convocar a los socios a Junta
General Ordinaria para su celebración el día veintinueve de junio de 2006, en el despacho notarial de D.
José María Regidor Cano, con su asistencia a fin de levantar acta de dicha Junta. El primer punto del orden
del día se refería a los siguientes extremos: "Aprobación de la gestión efectuada por el Consejo de
Administración durante el ejercicio social iniciado el 1 de enero y cerrado el 31 de diciembre de 2005, así
como de las cuentas anuales abreviadas de dicho ejercicio (Balance, Cuenta de Pérdidas y Ganancias y
Memoria). Aplicación de resultados. Informe de Auditoría."
Con fecha 12 de junio de 2006 fue recibida por los socios demandantes la convocatoria de la Junta,
solicitando por medio de escrito remitido el día 15 de junio (folios 113 a 117) que les fuera enviada copia
gratuita de todos los documentos que iban a ser sometidos a la aprobación de la Junta.
Con fecha 23 de junio de 2006 se recibe la documentación solicitada, comprensiva de la copia de las
cuentas anuales del ejercicio 2005 (Balance, Cuenta de Pérdidas y Ganancias y Memoria) y del informe de
auditoría del ejercicio 2005 elaborado por el auditor de cuentas de la sociedad (folios 118 a 129).
Según consta en el acta notarial de la Junta (folios 130 y ss.), y en lo que aquí interesa, el Sr. Miguel
Ángel hizo entrega de un escrito firmado por los socios Señores Blas Gema Miguel Ángel y la
representación de Dª Gema y Dª Celia en el que se solicitaba información relativa a las cuentas anuales de
la Sociedad.
"En el ejercicio legítimo de nuestro derecho de información como socios (artículo 51 LSRL ) y a la
vista de las cuentas anuales de la sociedad que se nos han remitido el pasado 23 de junio, solicitamos que,
en el acto de la Junta y sin perjuicio de otras cuestiones que se planteen, se nos informe verbalmente sobre
los siguientes extremos relativos a las cuentas anuales de la sociedad:
a. Relación de acreedores a largo y corto plazo de la sociedad, con expresión de los importes que se
les adeudan.
b. Desglose de la partida "Sueldos y Salarios" que figura en la cuenta de pérdidas y ganancias, con
mención del número de trabajadores que han prestado sus servicios durante el ejercicio 2005 a la sociedad.
c. Relación de los principales gastos que se han recogido en la partida "Otros gastos de explotación"
de la Cuenta de Pérdidas y Ganancias, por importe de 77.775¿44 euros, y explicación general del
incremento de esta partida respecto al ejercicio anterior.
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d. Asimismo explicación de los motivos que han determinado la enorme reducción de los ingresos de
explotación de la sociedad durante el ejercicio 2005.
ingresos, con especial concreción de los relativos a la explotación de ajos, cerealística y cinegética de
la finca propiedad de la sociedad.
recibido subvenciones oficiales a la explotación agrícola durante el ejercicio 2005, e importe de las
mismas.
g. Explicación de los Administradores sociales sobre los motivos por los que se producen las grandes
pérdidas consignadas en las cuentas anuales de la sociedad durante el ejercicio 2005.
h. Aclaración sobre si se han adquirido bienes o maquinaria durante el ejercicio 2005, con expresión
de los bienes comprados en dicho caso."
Ante la solicitud de información verbal en el acto de la Junta sobre dichos extremos, el Presidente de
la Junta, Señor Rafael , manifestó (folio 136) que ninguno de los firmantes del escrito, en ningún momento,
habían solicitado información de cualquier categoría o datos sociales al Órgano de Administración
competente, ni tan siquiera al Órgano Auditor, lo que implica una manifiesta desconsideración a la actividad
social, con la patente finalidad de la preparación procesal de la subsiguiente e inmediata impugnación de los
acuerdos sociales. El Secretario de la Junta, Sr. Jose Ramón , manifestó que para evitar distorsiones
verbales, procedería a la más inmediata contestación por escrito a todos y cada uno de los puntos
solicitados.
Dicha información fue remitida con todo detalle, como se desprende del documento obrante a los
folios 166 a 169 de las actuaciones, por el Presidente del Consejo de Administración y por el Secretario. El
escrito se encabezaba del siguiente modo:
"Según consta en el Acta Notarial de la Junta General Ordinaria de VILLA PAZ CUENCA, S.L.
celebrada ante Notario el pasado 29 de junio de 2006, Ustedes incorporaron un escrito al Acta solicitando
una larga lista de aclaraciones contables sobre las cuentas anuales del ejercicio 2005 sometidas a
aprobación en el punto primero del Orden del Día.
SEGUNDO. Considera la recurrente que la documentación no fue remitida a los socios hasta el
viernes día 23 de junio de 2006, lo que suponía un retraso que limita sus posibilidades para efectuar
cualquier solicitud de información y que ello representaba una actuación obstruccionista. Añade que la "total
ausencia en la Junta de los administradores sociales" y la designación como Presidente de la Junta del
Letrado Don. Rafael lleva a pensar que no existe voluntad por parte de los órganos de administración de la
sociedad de prestar ningún tipo de información a los socios. A su entender, además, se trataba de una
negativa de plano a la información, puesto que la justificación facilitada en el acto de la Junta por el
Consejero Sr. Alberto para efectuar una contestación por escrito fue "para evitar distorsiones verbales",
según manifestó, no por falta de documentación o conocimiento. Había además cuestiones de carácter
genérico que tampoco se contestaron porque la negativa a contestar a las preguntas fue absoluta y de
plano. Por otra parte, se argumenta que no puede ser reprochado a los socios el que no solicitaran
información con antelación a la Junta, tanto porque requerían el asesoramiento de terceros y no recibieron
la documentación hasta el citado día 23 de junio, como por el hecho de que ningún precepto legal les
impone solicitar información al órgano de administración con anterioridad a la Junta. Concluye a este
respecto el recurso afirmando que no puede explicarse que en el seno de una sociedad familiar, cuya única
actividad se centra en la actividad agrícola y cinegética de una sola finca, no se puedan explicar ni aclarar
las cuestiones más elementales en relación a esa explotación.
Dado que en el recurso, que reproduce los términos de la demanda, se entremezclan muy diversas
cuestiones, debemos reiterar que deben quedar al margen aspectos que carecen de relevancia alguna en
orden al motivo de impugnación, y que dicho motivo se centra en la falta de información en la propia Junta,
aspecto éste que es el analizado en la sentencia recurrida a la que se reprocha la errónea valoración de la
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prueba.
Como señala la Sentencia del Tribunal Supremo de 7 de octubre de 1997 , el Juez que recibe la
prueba puede valorar la misma de forma libre, aunque nunca de manera arbitraria, transfiriendo la apelación
al Tribunal de la segunda instancia el pleno conocimiento de la cuestión, pudiéndose en la alzada verificar si
en la valoración conjunta del material probatorio se ha comportado el Juez de instancia de forma ilógica,
arbitraria, contraria a las máximas de experiencia o a las normas de la sana crítica o si, por el contrario, la
conjunta apreciación de la prueba es la procedente por su adecuación a los resultados obtenidos en el
proceso, siendo constante la jurisprudencia en señalar cómo la especial naturaleza del recurso de apelación
permite al Tribunal conocer íntegramente la cuestión resuelta en primera instancia, pudiendo no sólo
revocar, adicionar, suplir y enmendar las sentencias de los inferiores, sino dictar, respecto de todas las
cuestiones debatidas, el pronunciamiento que proceda, lo que posibilita que la Sala pueda examinar de
nuevo todo el material probatorio y la actividad jurídico-procesal desarrollada en primera instancia y, en
definitiva, resolver si el pronunciamiento de la resolución impugnada ha sido o no correcto en atención a las
circunstancias de hecho y resultados probatorios de la causa, como anotan las Sentencias del Tribunal
Supremo de 19 de febrero y 19 de noviembre de 1991 y 4 de febrero de 1993 . En el caso que nos ocupa la
valoración realizada por el Ilmo. Sr. Magistrado a quo resulta plenamente lógica y racional, de manera que
no puede sustituirse por la parcial e interesada valoración de la demandante.
Ninguna duda cabe sobre la trascendencia otorgada al derecho de información de los socios, que
acertadamente se pone de relieve en la sentencia recurrida, como instrumental del derecho de voto (entre
otras muchas, SSTS de 22 de mayo de 2002 , 12 de noviembre de 2003 y 29 de julio de 2004 ). El Tribunal
Supremo ha señalado además que tal derecho no es ilimitado, de modo que no debe impedirse el normal
funcionamiento de la sociedad y ha de ser ejercitado de buena fe, como todos los derechos subjetivos ( STS
de 10 de noviembre de 2004 , entre otras, junto a las que allí se citan).
En relación a los acuerdos de aprobación de las cuentas sociales, la LSRL contemplaba tres cauces
de información: A) la entrega de los documentos que han de ser sometidos a la aprobación de la Junta
(artículo 86.1 ); B) el examen de la contabilidad por socios que representen al menos el cinco por ciento del
capital social (artículo 86.2 ) y C) la verificación de las cuentas anuales, si la sociedad no está obligada a
ello, a solicitud de socios que representen al menos el cinco por ciento del capital social (artículo 86.3 LSRL
en relación al artículo 205.2 LSA ).
Basta remitirse al propio recurso interpuesto para comprobar la situación de enfrentamiento existente
entre los socios, que se manifiesta por otra parte en la Sentencia de esta misma Sala de fecha 9 de marzo
de 2006 , referida en esa ocasión a la impugnación de los acuerdos adoptados en la Junta General de
VILLA PAZ CUENCA, S.L. de 30 de junio de 2004, basada, entre otros motivos, en que los hoy recurrentes
también consideraron vulnerado su derecho de información. El grado de litigiosidad alcanzado se manifiesta
igualmente en la contestación por escrito que efectúa la sociedad a la solicitud de información, cuando al
responder a la última de las preguntas formuladas por escrito presentado en la Junta, referida a las pérdidas
de 2005, se indica que "además de la bajada de ingresos, los gastos de explotación se han visto
incrementados (.), sobre todo y al igual que en los últimos cinco ejercicios, en los gastos de profesionales
independientes a consecuencia de las reiteradas demandas judiciales de los socios Miguel Ángel y Celia ,
contra los que la sociedad mantiene abierta una querella por administración desleal, apropiación indebida y
estafa" (folio 168) .
En este clima hay que valorar la tensión que se genera en la Junta (incluso en el apartado de ruegos
y preguntas, folio 137, se hace constar que "se reiteran diversas manifestaciones judiciales de pleitos
pendientes entre la Sociedad y los socios, que no son atinentes al objeto de la presente Junta") y las
precauciones que pretende adoptar la sociedad al facilitar la información.
Precisamente las observaciones en la Junta Don Jose Ramón , que remite a la contestación por
escrito "para evitar distorsiones verbales" no puede desligarse de la previa manifestación del propio
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Presidente de la Junta, Don Rafael , que se ve sorprendido porque la información que se solicita a través de
un escrito no se hubiera efectuado previamente, añadiendo que tal actuación persigue la finalidad de
preparar una nueva impugnación de acuerdos.
Atendiendo a las circunstancias expuestas, no resulta irrazonable que se intente evitar cualquier
motivo de impugnación ofreciendo una información precisa, ante un cúmulo de datos solicitados de manera
sorpresiva en la propia Junta que resultan complejos, como acertadamente valoró el Ilmo. Sr. Magistrado a
quo en la sentencia recurrida. La información solicitada debe ser valorada atendiendo a dichas
circunstancias, teniendo en cuenta además que las preguntas formuladas se encuentran estrechamente
relacionadas unas con otras, incluso en los aspectos más generales. Basta examinar la contestación por
escrito (folios 166 a 168) para comprobar que, lejos de constituir una obstrucción de los derechos del socio,
se ofrece una información con todo detalle, e incluso en el apartado correspondiente a las pérdidas de 2005
se hace mención a distintos factores, cifras y porcentajes que expliquen convenientemente la situación
reflejada en este aspecto de la contabilidad, como conclusión de la relación de datos previamente ofrecida.
De todo ello se desprende que la sociedad pretendía responder a una solicitud compleja de
información efectuada en el mismo acto de la Junta con la mayor precisión posible, para evitar que se
generen nuevos motivos de impugnación, y efectivamente así se hizo. Ello no puede merecer reproche
alguno.
Por último, ya hemos destacado que el Tribunal Supremo se refiere también a la necesidad de que el
derecho sea ejercitado de buena fe. No debemos olvidar que la supuesta vulneración del derecho de
información se sustenta en el hecho de que las preguntas presentadas por medio de un escrito en el acto de
la Junta no se respondieron en el mismo acto. Si apreciamos el desarrollo de la Junta, tras las
manifestaciones del Presidente y del Secretario de la Junta a las que hemos hecho referencia, no se hace
constar manifestación alguna del solicitante (folio 136). Es decir, cuando se remite al socio a la contestación
por escrito no efectúa éste objeción alguna que pusiera de manifiesto que se estaban vulnerando sus
derechos, simplemente se guarda silencio para luego proceder a la impugnación objeto de las actuaciones.
Esta actitud no muestra un sincero y leal interés en obtener la información para formar la voluntad, sino la
instrumentalización de la petición para articular motivos de impugnación. La observancia del principio de
buena fe impone que, ante cualquier hipotética infracción que vulnere los derechos del socio en el acto de la
Junta, ésta sea denunciada, permitiendo, en su caso, su reparación. Nada de esto sucedió, lo que impone la
desestimación del recurso.
TERCERO. Las costas derivadas de esta alzada deben ser impuestas a la parte apelante, tal y como
dispone el artículo 398.1 de la Ley de Enjuiciamiento Civil en relación a su artículo 394 .
FALLAMOS
Remítanse los autos originales al Juzgado de lo Mercantil, con testimonio de la presente resolución, a
los efectos pertinentes.
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Así, por esta nuestra Sentencia, de la que se llevará certificación al rollo, lo pronunciamos, mandamos
y firmamos.
PUBLICACION.- Dada y pronunciada fué la anterior Sentencia por los Ilmos. Sres. Magistrados que la
firman y leída por el/la Ilmo. Magistrado Ponente en el mismo día de su fecha, de lo que yo el/la Secretario
certifico.