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Universidad de Los Andes

Postgrado de Nutrición Clínica


IAHULA - Mérida
Lcda. Luisa G. Contreras B.
Residente 1

UNIDAD IV. SISTEMA RESPIRATORIO

Tema 10. Aparato respiratorio


En los seres humanos, el sistema respiratorio está formado por las vías aéreas, pulmones y
músculos respiratorios que hacen posible el intercambio de gases tanto hacia adentro, a nivel
celular, como hacia afuera del organismo. En los alveolos pulmonares las moléculas de oxígeno y
dióxido de carbono se intercambian pasivamente, por difusión entre el entorno gaseoso y la sangre.
De esta forma el sistema respiratorio promueve la oxigenación y la eliminación del dióxido de
carbono que es una sustancia de desecho del metabolismo celular. También cumple la función de
mantener el balance entre ácidos y bases en el cuerpo a través de la eficiente remoción del CO 2 de
la sangre.

10.1. Respiración
El proceso respiratorio puede dividirse en 2 fases, la primera que llamaremos respiración externa,
que es el proceso de intercambio de O 2 y CO2 entre la sangre y la atmósfera y puede dividirse a su
vez en cuatro etapas principales:
 La ventilación pulmonar o intercambio del aire entre la atmósfera y los alvéolos pulmonares
mediante la inspiración (entrada de aire a las vías respiratorias) y la espiración (salida de
aire).
 La difusión de gases o paso del oxígeno y del dióxido de carbono desde los alvéolos a la
sangre y viceversa, desde la sangre a los alvéolos.
 El transporte de gases por la sangre y los líquidos corporales hasta llegar a las células y
viceversa.
 Y, por último, la regulación del proceso respiratorio.
Por otra parte, la respiración interna es el proceso de intercambio de gases entre la sangre de los
capilares y las células de los tejidos en donde se localizan esos capilares.

10.2. Metabolismo celular y necesidad de consumo de oxígeno


Los organismos aerobios complejos requieren de sistemas de captación, transporte y aporte de
oxígeno para que este llegue a los tejidos, lugar en donde es pieza fundamental del metabolismo
energético, en el que se realiza la síntesis de ATP, molécula energética necesaria para la economía
celular. Este transporte de oxígeno es un proceso que requiere del complejo y completo
acoplamiento de los sistemas respiratorio, cardiovascular y sanguíneo, responsables de la
oxigenación tisular.
Este concepto es lo que algunos autores han denominado "la función respiratoria de la sangre", que
consiste en el aporte, entrega o liberación de oxígeno (O 2) a los tejidos para que se lleve a cabo el
metabolismo oxidativo de los nutrientes (carbohidratos, lípidos y proteínas) y la captación de CO 2
producto de desecho de dicho proceso.
La liberación de O2 desde el aire alveolar hasta la mitocondria requiere de la función integral del
corazón, los pulmones y la microcirculación los cuales tienen como función primaria generar un flujo
de sangre oxigenada a los tejidos para sostener el metabolismo aerobio.
Este sistema debe incorporar mecanismos eficientes para mantener el aporte de O 2 con las grandes
fluctuaciones en su consumo de oxígeno (VO 2) celular y mecanismos adaptativos para corregir la
falla de cualquier componente del sistema, así como también debe corresponder regionalmente de
acuerdo al estado metabólico: durante el reposo, el ejercicio y durante diferentes estados de
enfermedad.
A nivel celular un suministro continuo de O 2 es necesario para el mantenimiento de las estructuras y
las funciones fisiológicas generales y específicas de cada célula en particular. En una serie de
reacciones de óxido-reducción controladas por enzimas (cadena respiratoria celular), el oxígeno se
acopla como el aceptor final de electrones. A su vez la cadena respiratoria está acoplada a la
fosforilación oxidativa, proceso en el cual se sintetiza ATP a partir de ADP y Pi.
Esta es la vía metabólica más eficiente por medio de la cual las células derivan energía de los
sustratos de los alimentos y es la responsable de suplir los requerimientos energéticos celulares.
Con excepción de la oximioglobina presente en las células musculares, el oxígeno no es
almacenado en los tejidos corporales, razón por la cual se hace necesario el aporte continuo de
oxígeno. Cuando éste es insuficiente, los tejidos producen energía a través de vías anaerobias
menos eficientes (Por ejemplo, Glucólisis anaerobia), que producen acumulación de hidrogeniones
(H+) y por consiguiente un cambio en el pH sanguíneo y tisular que de perpetuarse en tiempo no es
compatible con la vida.

Aporte de Oxígeno (DO2)

Es el volumen de oxígeno aportado a los tejidos por unidad de tiempo. Se expresa en ml/min y
frecuentemente se corrige por masa corporal (en ml/kg/min) o por el área de superficie corporal
(ml/min/m2). Teóricamente este transporte de oxígeno desde la atmósfera hasta la mitocondria
puede dividirse en dos fases:
Una primera fase que consiste en el movimiento de oxígeno del alvéolo pulmonar hasta el capilar
pulmonar. Aquí se une a la Hemoglobina (Hb) de esta forma se transporta a los tejidos. Este paso
depende de la fracción inspirada de oxígeno (FIO 2), la relación ventilación perfusión, la integridad de
la membrana alvéolo capilar, la afinidad de la hemoglobina por el oxígeno y la concentración
plasmática de hemoglobina. Una pequeña cantidad de oxígeno se transporta disuelto en el plasma y
éste depende básicamente del coeficiente de solubilidad y de la relación entre la presión atmosférica
y la presión parcial de oxígeno en el plasma.
Una segunda fase que consiste en el movimiento de oxígeno de la microcirculación hasta la célula.
El aporte de Oxígeno (DO2) es el producto del gasto cardíaco (volumen eyectado cada minuto por el
corazón) y el contenido arterial de oxígeno (CaO 2). El contenido arterial de oxígeno (CaO 2)
corresponde a la suma del oxígeno unido a la hemoglobina con el oxígeno disuelto en el plasma
CaO2 = (Hgb x 1.39 xSaO2) + (0,003 x PaO2)

CaO2 =( Hgb x 1.39 xSaO2 )+(0,003 x Pa O2)

Consumo de Oxígeno (VO2)


Es el volumen de oxígeno consumido por los tejidos corporales por unidad de tiempo. Se expresa en
ml/min y cuando se corrige con el peso corporal se expresa en ml/kg/min. En otras palabras es la
cantidad de oxígeno que es tomada de la microcirculación por los tejidos. Esta variable está
determinada por los requerimientos metabólicos de oxígeno (MRO 2), que a su vez dependen de la
actividad y la tasa metabólica basal.
Los cambios en el nivel de VO 2 indican cambios en los niveles de la actividad metabólica. El
consumo de oxígeno se puede aumentar por fiebre, sepsis, actividad muscular (en actividades tales
como pelear, respirar, moverse, convulsionar o temblar). Por otra parte, el VO 2 puede ser reducido
con antipiréticos y antibióticos (en caso de fiebre o infección), sedación y relajación muscular (en
reposo o durante el sueño). Este consumo de O 2 es calculado por la ecuación de Fick como el
producto del GC y de la diferencia en el contenido de oxígeno entre la sangre arterial y la sangre
venosa.

V O 2=GC x(Ca O 2−Cv O 2 )

En otras palabras el consumo de O 2 (VO2) (ml O2/min) = Gasto Cardíaco (GC) (dl/min) x Diferencia
arterio-venosa de O2 (CaO2 - CvO2)
El rango normal de VO2 depende de la tasa metabólica basal y cualquier actividad física
superimpuesta. En reposo, el consumo de oxígeno de un adulto usualmente va de 3 a 3.5 ml/kg/min.
Realizando un ejercicio intenso, el VO 2 puede llegar a 60 a 70 ml/kg/min en atletas sanos.

Por otra parte la tasa de extracción de oxígeno (ERO 2), es la fracción liberada de O 2 desde la
microcirculación y consumido por los tejidos. Esta fracción define el balance entre el aporte de O 2
(DO2) y consumo de O2 (VO2). Es posible calcularla mediante el siguiente algoritmo

ERO2 =VO2 / DO2=CaO 2−CvO 2 /CaO 2


El cociente resultante puede ser multiplicado por 100 para expresarlo como porcentaje de la
siguiente manera
ERO2= (VO2/DO2)x100

La ERO2 normal es de 0.2 a 0.3 (20- 30%) indicando que el 20-30% del oxígeno liberado (aportado)
por los capilares es tomado por los tejidos. Así, sólo una pequeña fracción de oxígeno disponible en
la sangre capilar es usada para soportar el metabolismo aerobio.
En la mayoría de los tejidos la tasa de extracción de oxígeno es ajustable y en condiciones donde el
aporte (DO2) está alterado (disminuido), esta tasa puede aumentar de 0.5 a 0.6.

En atletas entrenados, la ERO 2 puede ser tan alta como 0.8 durante ejercicio máximo, haciéndose
evidente que los ajustes en la extracción de O 2 juegan un papel importante en el mantenimiento del
VO2 cuando el DO2 es variable.

Se conoce como aporte de oxígeno crítico (DO 2 Crítico), al valor de DO 2 por debajo del cual el VO 2
llega a ser dependiente del suministro. En este punto la producción de energía en las células llega a
ser limitada por el oxígeno (disoxia). En condiciones normales, cuando disminuye el aporte de
oxígeno (DO2), se mantiene el consumo basal de oxígeno. Sin embargo si ese aporte llega a ser
muy bajo, este consumo baja proporcionalmente al aporte y las funciones celulares se empiezan a
comprometer.
10.3. Anatomía del sistema respiratorio
El sistema respiratorio está formado por los órganos relacionados con el intercambio de O 2 y CO2, y
consta de nariz, boca, faringe, laringe, tráquea, bronquios y los pulmones. Asimismo, el sistema
respiratorio anatómicamente puede dividirse en tracto respiratorio superior que incluye: la nariz y la
cavidad nasal, los senos paranasales, laringe y la tráquea; y tracto respiratorio inferior que incluye
los pulmones, los bronquios y bronquiolos; y los alvéolos.

Pulmones
Los pulmones son dos órganos con forma de pirámide truncada, compuestos por un tejido esponjoso
de color gris rosáceo. Ocupan la mayor parte del espacio en el pecho o tórax. Su función principal es
conducir el oxígeno, necesario para que las células puedan ejecutar sus procesos metabólicos
aerobios y lleven a cabo sus funciones normales, contribuyendo además en la eliminación del CO 2
excretado. Los pulmones están rodeados por una membrana denominada pleura. Están separados
entre sí por el mediastino, un área que contiene el corazón y los vasos sanguíneos principales, la
tráquea, el esófago, el timo y los ganglios linfáticos.
El pulmón derecho tiene 3 secciones conocidas como lóbulos. El pulmón izquierdo tiene 2 lóbulos
con sus correspondientes bronquios principales, dentro de los pulmones, los bronquios principales
se dividen en bronquios más pequeños; luego, en estructuras cilíndricas de menor diámetro
llamados bronquiolos; y los bronquiolos terminan en sacos de aire llamados alvéolos.

10.3.1. Vías respiratorias

El aparato respiratorio humano consta de los siguientes elementos:

Fosas nasales: Son dos amplias cavidades cuya función es permitir la entrada y salida del aire, el
cual se humedece, filtra y calienta a través de unas estructuras llamadas cornetes.
Faringe: Estructura con forma de tubo situada en el cuello y revestido de membrana mucosa;
conecta la cavidad bucal y las fosas nasales con el esófago y la laringe.
Laringe: Es un conducto que permite el paso del aire desde la faringe hacia la tráquea y los
pulmones. En la laringe se encuentran las cuerdas vocales que dejan entre sí un espacio llamado
glotis.
Cuerdas vocales. Son dos repliegues situados en la laringe que vibran cuando el aire los
atraviesa produciendo la voz.
Glotis. Es la porción más estrecha de la luz laríngea, espacio que está limitado por las
cuerdas vocales.
Epiglotis: La epiglotis es un cartílago situado encima de la glotis que obstruye el paso del
bolo alimenticio en el momento de la deglución evitando que este se vaya al sistema
respiratorio. Marca el límite entre la orofaringe y la laringofaringe.
Tráquea: Es un conducto en forma de tubo que tiene la función de hacer posible el paso del aire
entre la laringe y los bronquios. Su pared está reforzada por un conjunto de cartílagos con forma de
C que dificultan que la vía se colapse por compresión externa sobre el cuello. La tráquea da origen a
los dos bronquios principales que se dividen en bronquios secundarios o lobares. Cada bronquio
lobar se divide en bronquios terciarios o segmentarios que se dividen en bronquiolos. El bronquiolo
continúa el proceso de ramificación y da origen al bronquiolo terminal de donde dividen en
bronquiolos respiratorios que es donde se encuentran los sacos alveolares.
Bronquio: Conducto tubular fibrocartilaginoso que conduce el aire desde la tráquea hasta los
bronquiolos.
Bronquiolo: Conducto que conduce el aire desde los bronquios hasta los alvéolos.
Alvéolo: Los alveolos están situados al final de las últimas ramificaciones de los bronquiolos. Tienen
la forma de pequeños sacos y son el lugar en el que se produce el intercambio de gases con la
sangre. Su pared es muy delgada, pues está constituida por una capa unicelular, es decir formada
por una única célula. Sumando los dos pulmones, el organismo humano dispone de alrededor de
300 millones de alveolos que si se desplegaran en su totalidad ocuparían una superficie de 60 m²,
esta enorme superficie es la que hace posible obtener la cantidad de oxígeno necesaria para las
funciones vitales.
Músculos intercostales: Músculos situados en el espacio existente entre dos costillas consecutivas.
Tienen un importante papel para movilizar el tórax durante la inspiración.
Diafragma: Músculo que separa la cavidad torácica de la cavidad abdominal. Cuando se contrae
baja y aumenta el tamaño de la cavidad torácica provocando la inspiración. Cuando se relaja sube,
disminuye el tamaño de la cavidad torácica y favoreciendo la espiración.
Pleura y cavidad pleural: La pleura es una membrana serosa que recubre ambos pulmones. Consta
de dos capas, la pleura parietal en contacto con la pared del tórax y la pleura visceral en contacto
con los pulmones. Entre ambas capas queda un espacio que se llama cavidad pleural. La presión en
la cavidad pleural es menor que la presión atmosférica lo cual hace posible la expansión de los
pulmones durante la inspiración.

10.3.2. Circulación pulmonar


Se divide en circulación nutricia pulmonar, que es la que lleva sangre oxigenada a los tejidos
pulmonares y la circulación pulmonar funcional por otro lado que inicia en la arteria pulmonar que
conduce sangre desoxigenada hacia los capilares alveolares donde la hemoglobina contenida en los
glóbulos rojos liberan dióxido de carbono proveniente de la circulación sistémica y recoge oxígeno
como parte del intercambio gaseoso de la respiración, oxigenando la sangre que va luego al corazón
a través de las venas pulmonares para ser bombeada hacia todos los tejidos del organismo y
oxigenarlos. Luego de oxigenar todos los órganos y tejidos, regresa a la aurícula derecha del
corazón a través de las venas Cavas inferior y superior, comenzando la circulación pulmonar o
circulación menor nuevamente.

10.4. Funciones del sistema respiratorio

1. La ventilación pulmonar, que consiste en los movimientos de inhalación y exhalación


2. La respiración externa cuyo propósito es el intercambio de gases entre los pulmones y el
torrente sanguíneo
3. La respiración interna que se da mediante el intercambio gases entre el torrente sanguíneo y
los tejidos del cuerpo
4. La Fonación
5. El olfato
Referencias consultadas

Barrett K., Barman S., Boitano S., Brooks H. (2013). Fisiología Médica: Introducción a la estructura y
la mecánica pulmonar. 24 ed. (34): 621-39
Dvorkin M., Cardinali D. (2010). Best & Taylor . Bases Fisiológicas de la Práctica Médica Editorial
Médica Panamericana, S. A. 14ª Edición
Guyton, A y Hall, J. (2012). "Tratado de Fisiología médica". 12ª Edición. Interamericana-McGraw-Hill.
Madrid.

Youtube: https://youtu.be/lxpUncIP5mM

Artículo científico:
https://revistanutricionclinicametabolismo.org/index.php/nutricionclinicametabolismo/article/view/88/2
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