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El objeto de los contratos son las 

obligaciones que el crea y que esas obligaciones a su vez


tienen por objeto prestaciones (sea de dar cosas, de hace o de no hacer); además que todo
contrato es un acto jurídico.
 objeto del contrato >> son >> obligaciones que el crea
 obligaciones >> tienen por objeto >> prestación: dar, hacer o no hacer.
 todo contrato es un acto jurídico.

 OBJETO INMEDIATO DEL CONTRATO: obligaciones que el crea, modifica o extingue.


 OBJETO MEDIATO DE UN CONTRATO: prestaciones de esas obligaciones ya sea de
hacer, dar o no hacer.

Un contrato informático puede ser en sentido amplio u objetivo, que abarca todos aquellos


convenios cuyo objeto sea un bien o servicio informático, independientemente de la vía por la
que esto se celebre. El objeto del contrato sería la prestación de un servicio informático y en
sentido restringido o formal, son aquellos contratos cuyo perfeccionamiento se da por
vía informática; cual sea su objeto. Debemos recordar que a estos últimos se les conoce
también como contratos electrónicos.

Partes del contrato


USUARIO
Son aquellos que reciben la prestación de dar o hacer por parte de los proveedores, y están
constituidos por el sector público o privado.
Principales obligaciones
 Informar al proveedor cual es el objetivo que busca, así como la envergadura
del sistema que desea contratar, del equipo que posee en ese momento (si es que lo hay) y,
finalmente, del cuadro económico.
 Pagar el precio determinado o determinable al proveedor por la prestación del servicio
de mantenimiento.
Derechos del usuario
 En caso de que el proveedor ocasione que el usuario se vea comprometido en
infracciones, el acreedor tiene el derecho a que el proveedor se haga cargo de cualquier
gasto que le ocasione una defensa en juicio.
 Recibir la prestación requerida siempre que esté dentro de los términos pactados.
PROVEEDORES
Son los encargados de la prestación de dar, hacer y fundamentalmente constituidos por los
constructores, distribuidores y vendedores de equipos; así como los prestadores de servicios
informáticos.
Principales obligaciones
 Aconsejar al usuario; es decir, indicarle cuál es la manera adecuada para satisfacer sus
necesidades informáticas y de qué modo debe disponerse a su utilización
 Mantener en condiciones óptimas el funcionamiento de los equipos que le indique el
usuario de forma específica en el contrato
 Asegurar el rendimiento de las prestaciones durante un periodo de garantía establecido
en el contrato
Derechos del proveedor
 Requerir al usuario los datos o informaciones complementarias que pudieran haber sido
omitidas por desconocimiento, inexperiencia o por considerarlas irrelevantes a los fines del
negocio.
 Recibir el pago por la prestación realizada.

Actualmente resulta fácil para los usuarios acceder a través de Internet a cualquier contenido
que les interese (ya sea música, vídeos, videojuegos), pudiendo descargarlos o bien
simplemente acceder a ellos de forma online.

Estas actuaciones constituyen, frecuentemente infracciones de copyright –conocidas


comúnmente como piratería– dado que se están realizando copias de obras sin el
consentimiento del titular de los derechos de autor y exceden habitualmente del concepto de
copia privada al tratarse de explotaciones colectivas y en masa e incluso lucrativas.

En cambio, en el comercio electrónico indirecto, las partes celebran un contrato en el que las
prestaciones deben ejecutarse fuera de la red.

Tratándose de la adquisición o transmisión de bienes muebles o inmuebles, la entrega no podrá


realizarse virtualmente, sino que será necesario que la ejecución del contrato se realice offline;
claro está, no obstante, que parte de las obligaciones del contrato podrán ejecutarse
electrónicamente –por ejemplo, el pago del precio podrá realizarse a través de una pasarela de
pagos o un TPV virtual.

Tratándose de servicios, éstos pueden prestarse por el obligado tanto virtualmente como en la
vida real.

Por ejemplo, un Bufete Jurídico puede resolver una consulta haciendo recomendaciones al
usuario sobre una actuación adecuada a su interés; la consulta podrá reflejarse en un
documento electrónico y transmitirse electrónicamente al usuario (en cuyo caso estaríamos de
nuevo ante comercio electrónico directo), o bien puede también imprimirse en papel y enviarse
por correo o telefax (estando, entonces, dentro del ámbito del comercio electrónico indirecto).

En todos los casos, el contrato se habrá celebrado en la red, ya que no hablaríamos de


contratación electrónica en caso contrario, cuando se trate de webs meramente informativas
que no se utilizan para comerciar o contratar en línea.

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