Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El tratamiento de las lesiones recientes de los tendones flexores de los dedos es difícil. A
pesar de los progresos constantes en la precisión del diagnóstico, las técnicas de sutura y
los protocolos de rehabilitación funcional, no existe un consenso sobre su reparación. Sin
embargo, la mayoría de los autores admiten algunas reglas, como el tratamiento urgente
y la movilización precoz. En cambio, otros son objeto de discusión, como la elección de
la vía de acceso, del hilo y de la técnica de sutura o del protocolo de rehabilitación. En
este artículo se revisan las distintas técnicas y alternativas posibles.
© 2016 Elsevier Masson SAS. Todos los derechos reservados.
Palabras clave: Tendones flexores; Kleinert; Duran; Strickland; Tsuge; Kessler; Tang
Zona 1
Zona 2
Zona T 1
Zona T 2 Zona 3
Zona T 3
Zona T 4 Zona 4
Nutrición tendinosa
La nutrición tendinosa procede de dos fuentes: el
líquido sinovial que circula por la vaina digital y el sistema
microvascular de los vínculos.
Las vainas digitales rodean los tendones flexores de los
tres dedos centrales desde la articulación interfalángica
distal hasta la zona del pliegue palmar distal (Fig. 2). Al
nivel del pulgar y del meñique, la vaina se extiende desde
la articulación interfalángica (distal) hasta la muñeca.
Estas dos vainas radial y cubital pueden comunicarse y
dar lugar a los flemones en reloj de arena. Cada vaina está Figura 3. Representación esquemática de las inserciones y
constituida por una lámina visceral y otra parietal, lo que de la vascularización tendinosas. Cada tendón recibe su vas-
crea un espacio virtual de nutrición y de deslizamiento. cularización de dos vínculos (uno corto y uno largo). FDS:
De forma parecida a una jeringa y su émbolo, el desplaza- flexor digitorum superficialis; FDP: flexor digitorum pronfundus.
miento de los tendones flexores profundo y superficial en 1. Rama para el vínculo corto; 2. rama para el vínculo largo;
el canal digital moviliza la circulación del líquido sinovial 3. arteria digital común; 4. vínculo corto; 5. vínculo largo.
y favorece la nutrición tendinosa. Entre los vínculos se encuentran zonas pauci o avascu-
Los vínculos, dos cortos y uno largo, se fijan a la cara lares, sobre todo en la cara palmar del tendón.
dorsal del tendón flexor (Fig. 3). Los vínculos cortos están
destinados uno a la inserción del flexor profundo y el
otro a la del flexor superficial. El vínculo largo se extiende Sistema de polea
desde el flexor superficial al flexor profundo. La vasculari-
zación de los vínculos proviene de arterias retrotendinosas En la zona 2 durante su paso por el canal digital, los ten-
procedentes de las arterias colaterales digitales mediante dones flexores están apoyados sobre el esqueleto óseo por
arcadas anastomóticas metafisarias. un sistema de poleas que se oponen al efecto de cuerda de
proximal. El muñón tendinoso puede continuar retrayén- Las lesiones tendinosas parciales en la zona 2 pueden
dose entre el momento del traumatismo y la reparación si provocar un bloqueo en la vaina sinovial por un callo cica-
el paciente sigue solicitando su dedo en flexión. Se acon- tricial hipertrófico. Las actitudes de los diversos autores
seja una inmovilización en flexión de la muñeca y de son discordantes. Algunos recomiendan no realizar nin-
los dedos mediante una férula dorsal antes de la inter- guna reparación de las lesiones que afectan hasta a un
vención, así como evitar la evaluación tendinosa activa 60%, e incluso al 75% del cuerpo tendinoso, sobre todo en
durante la exploración física. En la fase peroperatoria, no los niños [39] . Otros, por el contrario, recomiendan reparar
se debe recuperar el muñón proximal con una pinza para la lesión parcial mediante una sutura continua o con un
no crear lesiones tisulares al nivel de la zona de sección punto cuadrado. Es preferible realizar una resección tan-
tendinosa. Para no pinzar el muñón proximal, pueden gencial cuando la sección es menor del 50% de la zona
emplearse dos técnicas: el «ordeño» y la utilización de un de sección del tendón, y una sutura mediante un punto
drenaje. El ordeño consiste en comprimir el antebrazo cuadrado cuando la sección es superior al 50% [40] .
para empujar el muñón proximal en sentido distal. La Cuando existen lesiones asociadas, su reparación es
maniobra del ordeño puede ser insuficiente. En este caso, indisociable de la de los tendones flexores, en un orden
se puede colocar un drenaje en el canal digital a partir de lógico. La estabilización ósea es la primera etapa, seguida
la zona de lesión y después empujarlo en sentido proximal de la reparación tendinosa, y después de las anastomosis
hasta contactar con el muñón proximal, lo que indica la microquirúrgicas vasculares y nerviosas, para finalizar con
zona de retracción del muñón. A continuación, se realiza la cobertura cutánea. La osteosíntesis debe ser estable para
una contraincisión en esta zona para recuperar el muñón permitir la movilización precoz. Una posible exposición
proximal, tras haberlo fijado al drenaje con un punto tran- de la reparación tendinosa por una pérdida de sustancia
sitorio (o, mejor, definitivo), traccionando de él en sentido cutánea debe cubrirse, si es preciso mediante un colgajo
distal. local. La rehabilitación se difiere cuando se ha realizado
Cuando la reparación tendinosa es prominente y entra una reparación microquirúrgica, sobre todo nerviosa, para
en conflicto con el sistema de poleas, está indicado realizar evitar solicitarla.
una sección parcial o total de las poleas. Las principa-
les poleas que deben respetarse son las poleas A2 y A4,
que se fijan en la falange proximal y la falange interme-
dia, respectivamente. Desempeñan un papel primordial Lesiones tendinosas
en la flexión completa y de la flexión contra resisten-
cia de la cadena digital. Cuando existe un conflicto, está
en las zonas 3-4-5
indicado realizar plastias de ampliación de las poleas
La reparación de las lesiones de los tendones flexores en
mediante resección parcial, incisión lateral o incisión
la zona 3, en la palma, suele plantear pocos problemas de
medial. Muchos autores coinciden en señalar que es posi-
volumen excesivo o de adherencias. En caso de conflicto,
ble incidir la polea A2 justo en los dos tercios de su
la polea A1 puede abrirse, como en la cirugía del dedo en
longitud y la polea A4 en toda su longitud si las otras
resorte.
poleas están intactas [34] . Según Lalonde, la realización de
La reparación de las lesiones de los tendones flexores
la reparación tendinosa bajo anestesia local pura permite
en la zona 4, en el túnel carpiano, requiere una sección
evaluar la reparación tendinosa solicitando al paciente
del retináculo de los flexores para poder acceder al aparato
que realice una flexión activa peroperatoria. La abertura
tendinoso y proteger el nervio mediano y el arco palmar
de las poleas se efectúa a demanda, dependiendo de los
superficial.
conflictos entre los tendones reparados y las poleas [35] .
La reparación de las lesiones de los tendones superfi-
Se utiliza preferentemente la plastia en omega [36] Con-
ciales en la zona 5, reunidos en láminas tendinosas en
siste en realizar una incisión lateral subperióstica en un
el antebrazo, plantea el problema de la identificación de
lado de la polea para ampliar el espacio existente bajo
los muñones proximales y distales cuando se lesionan
ella. Algunos autores han mostrado que era posible incidir
varios tendones. Suele tratarse de lesiones multitisulares
la polea a ambos lados para aumentar aún más el espa-
que entran en el marco de las lesiones tendinonervio-
cio [37] . Cuando estas poleas están totalmente rotas, se
sas y vasculares en la muñeca, en su grado máximo con
deben reparar e incluso reconstruirlas de urgencia.
una hemisección anterior en la muñeca [41] . Cuando se
Las opiniones respecto a la vaina digital son divergen-
trata de un intento de suicidio, es obligatorio realizar un
tes. Algunos autores recomiendan un cierre de la vaina
tratamiento psiquiátrico.
mediante sutura para favorecer la nutrición intratecal [38]
del tendón mediante una sutura continua de PDS 5/0 o
6/0, mientras otros consideran que no es de interés [12] .
Parece preferible no obstinarse en volver a cerrar la vaina
digital para volver a rodear los muñones tendinosos repa-
Rehabilitación
rados, ni, al contrario, realizar una resección extensa para postoperatoria
exponerlos.
Respecto a la reparación del flexor superficial, la primera La rehabilitación postoperatoria es un elemento esen-
regla que debe respetarse consiste en reparar las lesiones cial para lograr un buen resultado funcional tras la
del flexor superficial, porque proporciona, por una parte, reparación quirúrgica de las lesiones recientes de los ten-
independencia funcional y fuerza al dedo y, por otra parte, dones flexores de los dedos. La rehabilitación es difícil,
la vascularización de todo el aparato flexor a través de los porque debe tener en cuenta dos objetivos contrapuestos:
vínculos. La reparación tendinosa consiste en un punto en por una parte, prevenir las adherencias tendinosas causan-
U de PDS 4/0, e incluso de un punto cuadrado según la téc- tes de limitación de la movilidad y, por otra parte, evitar el
nica de Kessler. La sutura suele ser difícil debido al aspecto riesgo de ruptura precoz. Todos los protocolos de rehabili-
aplanado de las bandeletas tendinosas en la zona 2. La tación recomiendan la movilización precoz, pero existen
segunda regla que debe respetarse es la de favorecer el diferencias en cuanto al momento en el que comienza la
deslizamiento adecuado y sin tensiones de la reparación movilización activa y pasiva. Se considera movilización
en el canal digital. De este modo, cuando la reparación precoz toda aquella que comienza antes de la 1.a semana
de los tendones flexores superficial y profundo provoca postoperatoria, idealmente entre el 2.◦ y el 4.◦ día, es
un bloqueo en el canal digital a pesar de una plastia de decir, antes del inicio de la fase de síntesis intratendinosa
ampliación de la polea, no queda otra solución que sacri- de colágeno. Se han descrito cuatro métodos principales
ficar una bandeleta de flexor superficial resecándola hasta de rehabilitación: inmovilización completa, protocolo de
el quiasma tendinoso. Kleinert, protocolo de Duran y protocolo de Strickland.
Conclusión [9] Gan BS, Huys S, Sherebrin MH, Scilley CG. The effects of
ultrasound treatment on flexor tenon healing in the chicken
limb. J Hand Surg [Br] 1995;20:809–14.
La movilización precoz es el único de los principios de
[10] Wada A, Kubota H, Akiyama T, Hatanka H, Miura H, Iwa-
reparación de las lesiones recientes de los tendones flexo-
mamoto Y. Effect of absorbable polydioxanone flexor tendon
res de los dedos sobre el que existe un consenso. Otros repair and restricted active mobilization in a canine model. J
son motivo de controversia: material utilizado, tipo de Hand Surg [Am] 2001;26:398–406.
reparación, protocolo de rehabilitación. Se espera que se [11] Alavanja G, Dailey E, Mass DP. Repair of zone II fle-
produzcan avances a partir de la bioingeniería, como los xor digitorum profundus lacerations using varying suture
tejidos de interfase para limitar las adherencias o matri- sizes: a comparative biomechanical study. J Hand Surg [Am]
ces biológicas que liberen factores de crecimiento para 2005;30:448–54.
acelerar la cicatrización tendinosa. [12] Wu YF, Tang JB. Recent developments in flexor tendon repair
techniques and factors influencing strength of the tendon
repair. J Hand Surg [Eur] 2014;39:6–19.
[31] Schrumpf MA, Lee AT, Weiland AJ. Foreign-body reaction [39] Stahl S, Kaufman T, Bialik V. Partial lacerations of flexor
and osteolysis induced by an intraosseous poly-L-lactic acid tendons in children: primary repair versus conservative treat-
suture anchor in the wrist: case report. J Hand Surg [Am] ment. J Hand Surg [Br] 1997;22:377–80.
2011;36:1769–73. [40] Maire N, Hendriks S, Gouzou S, Liverneaux PA, Facca S.
[32] MacCallister WV, Ambrose HC, Katolik LI, Trumble TE. Support for partial lesions of the flexor tendons of the fingers:
Comparison of pullout button versus suture anchor for zone a retrospective study of 36 cases. Chir Main 2014;33:130–6.
I flexor tendon repair. J Hand Surg [Am] 2006;31:246–51. [41] Alnot Jy, Liverneaux P. Recent injurie’s of the nerve of the
[33] Grant I, Pandya A, Mahaffey PJ. The re-attachment of tendon wrist and hand. Rev Prat 1994;44:2446–50.
and ligament avulsions. J Hand Surg [Br] 2002;27:337–41. [42] Kleinert HE, Kutz JE, Atasoy E, Stormo A. Primary repair of
[34] Tang JB, Chang J, Elliot D, Lalonde DH, Sandow M, Vögelin flexor tendons. Orthop Clin North Am 1973;4:865–76.
E. IFSSH Flexor tendon committee report 2014. J Hand Surg [43] Moriya K, Yoshizu T, Maki Y, Tsubokawa N, Narisawa H,
[Eur] 2014;39:107–15. Endo N. Clinical outcomes of early active mobilization follo-
[35] Lalonde DH. Wide-awake flexor tendon repair. Plast wing flexor tendon repair using the six-strand technique: short
Reconstr Surg 2009;123:623–5. and long term evaluations. J Hand Surg [Eur] 2015;40:250–8.
[36] Bakhach J, Sentucq-Rigal J, Mouton P, Boileau R, Panconi B, [44] Chesney A, Chauhan A, Kattan A, Farrokhyar F, Thoma A.
Guimberteau JC. The Omega pulley plasty. A new technique Systematic review of flexor tendon rehabilitation protocols in
to increase the diameter of the annular flexor digital pulleys. zone II of the hand. Plast Reconstr Surg 2011;127:1583–92.
Ann Chir Plast Esthet 2005;50:705–14. [45] Strickland JW. Results of flexor tendon surgery in zone II.
[37] Barthel L, Taleb C, Pereira A, Prunieres G, Hendriks S, Facca Hand Clin 1985;1:167–79.
S, et al. Enlargement of the flexor pulleys by an omega plasty: [46] Tanaka T, Amadio PC, Zhao C. Flexor digitorum profun-
a study comparing the release of one or both sides of the A2 dus tendon tension during finger manipulation. J Hand Ther
and/or A4 pulley. Ann Chir Plast Esthet 2015 [Epub ahead of 2005;18:330–8.
print]. [47] Tang JB. Indications, methods, postopoerative motion and
[38] Bellemère P, Ardouin L. Réparation primitive des tendons outcome evaluation of primary flexor tendon repairs in
fléchisseurs en zone 2. Chir Main 2014;33(Suppl.):28–43. Zone 2. J Hand Surg [Eur] 2007;32:118–29.
C. Taleb, MD.
P. Liverneaux, MD, PhD (philippe.liverneaux@chru-strasbourg.fr).
Service de chirurgie de la main, SOS main, CCOM, Hôpital universitaire de Strasbourg, FMTS, Université de Strasbourg, Icube CNRS 7357,
10, avenue Baumann, 67400 Illkirch, France.
Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Taleb C, Liverneaux P. Lesiones recientes de los tendones flexores
de los dedos. EMC - Técnicas quirúrgicas en ortopedia y traumatología 2016;8(4):1-10 [Artículo E – 44-388].
Disponibles en www.em-consulte.com/es
Algoritmos Ilustraciones Videos/ Aspectos Información Informaciones Auto- Caso
complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico