Universidad Tecnológica de Honduras

Alumna:
Eunice Lizbeth Montes Ortega 201730060014

“EL DEBIDO PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO”

ASIGNATURA:
Prá ctica Procesal Administrativa

CATEDRÁTICO:
Abg. Isaac Gallegos.

Fecha:
Martes 14 de abril de 2020.
 Ensayo 3

“El Debido Proceso Administrativo”

Eunice Montes Ortega (2020).

Para lograr obtener un mejor conocimiento acerca del Debido Proceso

Administrativo y entender cuál es el alcance de éste como una normativa jurídica, se debe
tener en cuenta tres aspectos importantes en todas las actuaciones de la Administración
como lo son el aspecto formal, estructural y material del mismo. Estos aspectos nos
permitirán tener una mejor comprensión acerca del debido proceso administrativo dentro de
sus alcances como una norma constitucional que ha sido desarrollada reglamentariamente
de donde se han obtenido conductas, normas y derecho fundamental objetivo y subjetivo.

Enrique Rojas Franco en su material El Debido Procedimiento Administrativo (2011),

presenta un análisis sobre la manifestación y aplicación del debido proceso como derecho y
como garantía de protección, así como un principio esencial en el procedimiento
administrativo. Para comenzar, nos dice que la Justicia Administrativa “es un concepto
sustantivo y procesal, el cual establece que la actividad de la administración pública debe
orientarse a la realización o satisfacción de intereses públicos concretos con el pleno
respeto a los derechos intereses públicos.”, es decir, que es el proceso que se sigue ante un
tribunal para resolver controversias que puedan llegar a existir entre particulares y el
Estado. La Justicia Administrativa cumple con su fin cuando dicta y ejecuta actos aplicando
de manera correcta las normativas y cumpliendo de manera efectiva sus actividades. La
Justicia Administrativa, se originó durante la Revolución Francesa, ésta aspiraba a instaurar
una forma de gobierno que pusiera a la Ley por encima de los hombres; esta idea se
fundamentaba en los escritos de Jean-Jacques Rousseau, quien decía “un pueblo libre
obedece, pero no sirve; tiene jefes, pero no dueños; obedece a las leyes, pero nada más
que a las leyes y es por fuerza de las leyes por lo que no obedece a los hombres.”, en éste
sentido hacía referencia a que los hombres eran gobernados pero a su vez, eran seres libres.
Pero es en 1789, que todo cambia en donde la administración daría paso hacia la regulación
o limitación legal tanto en su organización como su actividad, éstas se ajustarían y
limitarían a las disposiciones de las leyes.
 En el año 1971, Francia señala en su primera constitución revolucionaria, el
sometimiento de la actividad administrativa a la Ley, y es entonces que surge el principio
de legalidad como pieza fundamental para el del Derecho Público en general y en especial
del Derecho Administrativo, es ahí donde se le otorga la función controladora a al consejo
de Estado, también llamado Consejo de Ministros.

En cuanto al concepto de Procedimiento Administrativo, en ésta ocasión haremos

uso de una definición muy clara hecha por un especialista en Derecho Público originario de
Costa Rica, el abogado Eduardo Ortiz Ortiz en su material Nulidades del acto
administrativo en la ley general de administración pública (1981), que dice “…es el
conjunto de actos preparatorios concatenados según un orden cronológico y funcional,
para verificar la existencia de la necesidad pública a satisfacer y de los hechos que lo
crean, así como para oír a los posibles afectados y voceros de intereses conexos, tanto
públicos como privados, especialmente estos últimos, con el fin de conformar la decisión
en la forma que mejor los armonice con el fin público a cumplir…” en resumen es el
desarrollo formal de las acciones que se requieren para concretar la intervención
administrativa necesaria la realización de un acto administrativo. El principal propósito del
procedimiento administrativo es el que se dicta en un acto administrativo final y que el
mismo resuelva la petición de la parte interesada, sea esta favorable o desfavorable. Cuando
el procedimiento administrativo pueda ser impugnado, éste permite la posibilidad ya sea de
recursar o impugnar el acto final haya sido dictado en el marco del procedimiento
constitutivo. Al final podríamos decir que el objetivo del Procedimiento Administrativo es
el de asegurar el cumplimiento de los fines de la administración, siempre con el debido
respeto a los derechos subjetivos y a los intereses legítimos de las gobernados, de acuerdo a
la normativa jurídica. Con esto, también se trata de exponer que se busca el respeto de las
garantías, así como garantizar la vigencia efectiva de los principios de derecho sobre los
que se asienta todo el sistema institucional y que valen no solo para garantizar intereses
legítimos de los particulares, sino el interés público. Debemos recordar que dentro del
procedimiento administrativo existen diferentes principios que son pilares fundamentales
para guiar los procedimientos y que el no respetar los mismos, acarrea la nulidad de todo lo
actuado.
 Entendemos como Debido Proceso, como el derecho que tiene toda persona a que se
le respeten los principios y garantías de naturaleza procesal. Es una garantía que debe estar
presente en toda clase de procesos, no solo en aquellos de orden penal, sino también en los
de naturaleza civil, administrativo de cualquier otro tipo. El Magistrado del Tribunal
Constitucional de Costa Rica, Rodolfo Piza Escalante define el debido proceso como el que
“envuelve comprensivamente el desarrollo progresivo de prácticamente todos los derechos
fundamentales de carácter procesal o instrumental, como conjuntos de garantías de los
derechos de goce —cuyo disfrute satisface inmediatamente las necesidades o intereses del
ser humano—, es decir, de los medios tendientes a asegurar su vigencia y eficacia.” De
manera que no solo se busca que la ley no solo sea irracional o arbitraria, sino que los
medios que se eligieron tengan una concordancia existente y sustancial con su objeto.

En conclusión podemos decir que el debido proceso se aplicará a toda clase de

actuación administrativa, que a nadie le impondrán obligaciones o le declararán
responsabilidades sino conforme a las normas ya existentes, que se respetarán
cuidadosamente las competencias de las diferentes autoridades y que se observarán
plenamente las formas adecuadas de cada actuación.
Bibliografía.
1. Enrique Rojas Franco (2011). El Debido Procedimiento Administrativo.
2. Bernardo Carbajal. (2010). Alcance y Limitaciones del Debido Proceso en el
Procedimiento Administrativo.
3. Julián Pérez Porto. (2008). Procedimiento Administrativo
https://definicion.de/procedimiento-administrativo/