Está en la página 1de 3

MODELOS DE IMPROVISACIÓN

La musicoterapia ha adaptado y adquirido diversos modelos de improvisación como


técnicas activas para obtener unos resultados terapéuticos específicos.

El objetivo es facilitar un espacio seguro donde la expresión fluya espontánea, libre y


creativamente,  mediante la ejecución de un instrumento música, el uso de la voz o el
mismo movimiento producido por el cuerpo. Dejamos de lado los resultados estéticos
y sacrificamos la belleza artística, en favor de potenciar la libertad y creatividad.

Hay técnicas más sencillas de utilizar que otras; aquí trataremos de facilitar una
pequeña síntesis de los rasgos más importantes de cada una de ellas.

Improvisación Musical de Schmoltz

El ritmo se usa como base para la libre expresión de los usuarios. Se toca un pulso o
ritmo sencillo en forma de obstinato, y a partir de él se tratará de crear una música o
ritmo en comunidad. Este formato es idóneo para entender la comunicación musical –
no verbal-, y las dinámicas individuales y grupales –forte y piano-.

Es una manera muy simple de tocar juntos, que apenas requiere dirección, y da
resultados de forma directa, sin necesidad de tener conocimientos previos; esta
técnica nos permite dejar espacio para la exploración de los instrumentos. Es
importante orientar un poco sobre la ejecución y los recursos si observamos que hay
una inhibición resultante por el exceso de libertad: no es ningún problema, pero
debemos liderar un poco la situación si esta situación se da.

Diálogo musical de Orff-Schuelwerk

La música se usa como medio para dialogar. Se puede usar para aprender la forma
musical de pregunta-respuesta, planteando como un juego organizado, o permitiendo
que se interrumpan.

En este tipo de actividad se trabaja el autocontrol, escuchando activamente y


respetando el turno de tocar, la responabilidad y el liderazgo. Es un modelo muy
divertido de usar, ya que se presenta como un juego, y nos permite enseñar cuestiones
musicales de forma natural, para facilitar la comunicación -nuestro primer objetivo-.

En la musicoterapia esta metodología se aplica con la representación de las


emociones: duda, odio, amor, alegría, miedo…

Técnica de la Terapia Productiva de Friedmann, Alemania

Este modelo de improvisación se centra en el ámbito social, ya que está ideado para
la improvisación en grupo.

Los recursos principales que se utilizan son variados:

 Paisajes sonoros: imitar la naturaleza (un río, una tormenta, una selva, etc).

 Ilustraciones musicales: podemos poner música a una temática, como puede


ser la maternidad, la familia, un circo, etc.

 Cuentos musicales: ponemos sonido a diferentes momentos o elementos de una


narración o historia.

 Improvisación predeterminada: en este caso se decide una estructura o forma


antes de comenzar la música, con lo que todo el grupo tiene que identificar en
qué lugar del desarrollo se encuentran y avanzar conjuntamente. También se
puede crear un marco melódico o rítmico que determinará en gran parte la
improvisación.

También se usa el diálogo musical, juegos de contrastes –rápido y lento, forte y


piano, grave y agudo…– etc.

Este modelo de improvisación nos vale perfectamente para enseñar una gran variedad
de conceptos y contenidos curriculares de la educación musical, permitiendo que la
enseñanza y la creatividad se den en conjunto.

Técnicas de conducción

Ya hemos visto cómo se utilizan tanto la improvisación libre como de forma


predeterminada, pero además de estas dos maneras, también puede ser dirigida.
El director se convierte en compositor de la música que se crea en conjunto. Este
modelo de improvisación se ha extendido mucho entre músicos profesionales, pero
también en la educación musical y en la musicoterapia. Técnicas como
el soundpainting o los círculos de percusión nos ayudan a crear música de forma
dirigida.

Estos recursos son muy gratificantes, ya que el resultado musical y estético es más
agradecido, la música queda más ordenada, y al haber un conductor que guía al grupo
es más fácil hacer cortes o cambios bruscos dentro de la forma musical. Esta forma
de improvisación nos permite  ubicar y equilibrar los roles grupales que surgen y se
adoptan, trabajar sobre la sociabilidad y los valores humanos.

También podría gustarte