Papagos Un Pueblo Indigena de México PDF

Pápagos
Pueblos Indígenas del México Contemporáneo
Predominio de la naturaleza. Desierto de Altar, Sonora.

Fotógrafo: Erik Reyes Lamothe, 1997.
Fototeca Nacho López, cdi.
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http://www.cdi.gob.mx
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Nota sobre la autora
Neyra Patricia Alvarado Solís es doctora por la Universidad de París X, Nanterre, e investigadora del Centro de Investi-
gación y Estudios Superiores en Antropología Social. Sus áreas de especialización son historia oral, medicina tradicio-
nal y ritual, especialmente entre los mexicaneros (nahuas de Durango).
Fotografía 1a. de forros y portadilla: Reunión informal. Sonora.

Fotógrafo: Ramón Jiménez, 1978.
Fotografía página 5: Figura tallada en madera. Quitovac, Sonora.

Fotógrafo: Erick Reyes Lamothe, 1997.

Pápagos
Neyra Patricia Alvarado Solís

CDI
972.004
C65
PÁPAGOS
Alvarado Solís, Neyra Patricia
Pápagos / Neyra Patricia Alvarado Solís. -- México : CDI, 2007.
47 p. : maps., retrs., tabs. – (Pueblos Indígenas del México Contemporáneo)
Incluye bibliografía
ISBN 978-970-753-091-1
1. INDIOS DE SONORA – PÁPAGOS 2. PÁPAGOS – UBICACIÓN GEOGRÁFICA 3.

PIMERÍA ALTA – GEOGRAFÍA FÍSICA 4. INDIOS DE ARIZONA – PÁPAGOS 5. INDIOS DE
ESTADOS UNIDOS – PÁPAGOS 6. PÁPAGOS – ORGANIZACIÓN SOCIAL 7. PÁPAGOS –
POLÍTICA Y GOBIERNO 8. PÁPAGOS – ORGANIZACIÓN SOCIAL 9. PÁPAGOS -
ORGANIZACIÓN SOCIAL 10. PARENTESCO – PÁPAGOS 11. PÁPAGOS – RELACIONES
INTRAÉTNICAS 12. PÁPAGOS – RITOS Y CEREMONIAS 13. MITOLOGÍA PÁPAGO I. t. II.
Ser.
Catalogación en la fuente: GYVA
D.R. © 2007 Neyra Patricia Alvarado Solís
Primera edición, 2007
D.R. © 2007 Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas

Av. México Coyoacán 343, Col. Xoco, Delegación Benito Juárez,
C.P. 03330, México, D.F.
ISBN 978-970-753-091-1 / Pápagos
ISBN 978-970-753-006-5 / Pueblos Indígenas del México Contemporáneo
http://www.cdi.gob.mx.
Queda prohibida la reproducción parcial o total del contenido de la presente obra, sin contar previamente con la au-
torización del titular, en términos de la Ley Federal del Derecho de Autor y, en su caso, de los tratados internacionales
aplicables. La persona que infrinja esta disposición se hará acreedora a las sanciones legales correspondientes.
Impreso y hecho en México

PáPagos
Pápagos
Los PáPagos y La frontera internacionaL

los pápagos (tohono o’odham),1 cuyo territorio se dividió a raíz de la iNs-
tauracióN de la froNtera iNterNacioNal al firmarse el tratado gadseN eN
1854, coNformaN actualmeNte uN grupo iNdígeNa ubicado eN el Norte de
méxico. Este territorio se conocía históricamente como Pimería Alta o Papaguería,
nombres que aparecen en crónicas y documentos de viajeros que dejaron testimo-
nio de ese pueblo desde el siglo xvii (Kino; 1919) hasta fines del siglo xix (Lumholtz;
1990). La división ha propiciado cambios en la población que quedó en uno y en
otro lado de la frontera, en los actuales estados de Sonora (México) y Arizona (Es-
tados Unidos). Estos cambios han sido el resultado de la inclusión de los habitantes
en políticas diferentes y propias de cada país. En Estados Unidos fue la conforma-
ción de la Reservación de la Nación Tohono O’odham ( nto) con una constitución
propia, pero limitada por la de ese país. En México es la existencia de comunidades
y ejidos, producto de las reformas y políticas agrarias, con un gran número de po-
blación que ha emigrado al otro lado de la frontera.
1
Se escribe o’odham u o’otham.

Pueblos indígenas del México conteMPoráneo
Fibras vegetales y cesto. El Bajío, Sonora.

DeL nombre PáPago Kino identifica en los ríos Altar, Con-

Posiblemente el nombre de pápago pro- cepción y Sonoyta. La denominación
venga del término papabotas, “pima co- de piatos posiblemente sea una contrac-
medor de frijol”, aunque en los textos ción de pimas altos, gileños y zimarro-
históricos se encuentran diferentes de- nes, que son otras de las designaciones.
nominaciones. Para Fontana (1989, p. De todos los nombres mencionados só-
37), los nombres de sobaipuris y jipu- lo sobrevivieron los de pimas y pápa-
ris se consideran variaciones del térmi- gos. Los pimas se conocen también co-
no “soba”, que alude a la población que mo ribereños, por vivir en las cercanías

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Jagüey. Quitovic, Sonora.


na continúa utilizándolo. Se usa en do-

cumentos oficiales de la actual Nación
El nombre de pápago se usa
Tohono O’odham: en el Programa de
en documentos oficiales
Desarrollo Pápago de 1949, en la Cons-
de la actual Nación titución actual, aprobada en 1986, en la
Tohono O’odham. que mencionan a “los miembros de la
nto, formalmente conocida como tribu
pápago…”.
de los ríos, y se diferencian así de los Como una forma de manifestarse en
pápagos, que habitaban en el desierto. el exterior y con un discurso propio, en
El nombre común de este pueblo, en Arizona decidieron autodenominarse to-
la investigación antropológica, ha sido hono o’odham, “gente del desierto”, y al
el de pápago; todavía en 1989, Fonta- nombre de “pápago” le adjudicaron una
Paisaje. Sonora.

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Dos generaciones.
El Bajío. Sonora.

Verde (ejido), Pozo Prieto, Sonoyta, Ca-

Los Tohono o’odham borca y Puerto Peñasco. Debido a esta
nombran a los pápagos movilidad los municipios registrados 2
con población pápago son Altar, Piti-
de Sonora (tribu
quito, Trincheras, Ures y General Plu-
o’odham de Mexico) Nación tarco Elías Calles. Esto hace un total de
o’odham de México, 67 pápagos bilingües.
pero los pápagos
de Sonora se llaman eL territorio
a sí mismos pápagos. La Papaguería o Pimería Alta es un ex-
tenso territorio delimitado por los prime-
ros misioneros que ahí llegaron, quienes
connotación despectiva. De tal forma tomaron como base la población asen-
que los tohono o’odham (to) nombran a tada en la ribera de los ríos Magdalena,
los pápagos de Sonora —tribu o’odham Altar, Concepción y Sonoyta (en el ac-
de Mexico— Nación O’odham de Méxi- tual Sonora) y los ríos Santa Cruz, San-
10 co. No obstante, los pápagos de Sonora ta Rosa, San Pedro y Gila (en el actual
se llaman a sí mismos pápagos, y para Arizona). La población que habitaba la
ello emplean frases distintivas respecto a Papaguería tenía dos tipos de residen-
los de la nto como “los de la Nación” y cia. Lumholtz (1990, p. 26) señala que
dicen “nosotros los pápagos”. a la habitación de verano se le llama-
Para los pápagos y tohono, o’odham ba “campos”, oóitak, y a la de invier-
significa “gente”, y, al igual que los pi- no, “pozos”. Esta división en el tipo de
mas, hablan la misma lengua, pero con residencia estaba ligada a las prácticas
variantes lingüísticas a las que también agrícolas y rituales de petición de lluvia
denominan o’odham. Esta lengua forma en los “campos”; dichas prácticas se da-
parte de la familia lingüística yuto-azteca. ban en el verano, época en que se asen-
El número de población pápago varía taban varias familias juntas durante las
a causa de la constante movilidad que lluvias, para posibilitar el cultivo; mien-
tienen como migrantes temporales (Ca-
borca, Sonoyta) o definitivos (Tucson,
2
Cuadro 1 de los Indicadores socioeconómicos de
Phoenix, Arizona). En Sonora hay ha-
los pueblos indígenas de México, 2002, Serrano et
bitantes en Quitovac, Las Norias, Pozo al. (coords.), pág. 1.

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11
Patio. Sonora.

12
Vivienda. El Bajío, Sonora.

tras que los “pozos” eran lugares de re- El desplazamiento inverso se da en las
sidencia que permitían esencialmente visitas a lugares sagrados o para ver a la
las prácticas de cacería al disponer de familia. Prácticamente no existen regis-
fuentes de agua después de las lluvias tros históricos sobre la construcción de
y en donde los animales se acercaban
a beber (Underhill; 1940, p. 14). Este
cambio de residencia dejó de realizar- Hay familias que se
se en la época contemporánea, aunque desplazan por temporadas
vemos familias o individuos desplazarse de Sonora a Arizona para
por temporadas de Sonora a Arizona pa- trabajar como asalariados.
ra trabajar como empleados asalariados.

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13
Petrograbado. El Bajío, Sonora.


la vivienda tradicional; solamente al- peregrinaciones, atraídas por los yaci-

gunas descripciones nos narran la exis- mientos de sal, pues, además de que la
tencia de casas circulares de carrizo, en intercambiaban, tenía un carácter ritual
donde se preparaba la bebida fermenta- en la iniciación del chamán.
da del fruto del saguaro para el ritual de La población no permanecía en un
petición de lluvias. Hoy en día, las vi- lugar fijo, debido a los cambios de ha-
viendas son de concreto en las ciuda- bitación, los intercambios y las guerras;
des, y en las comunidades cuentan con de éstas, la más conocida hasta finales
patios con cercas de cactos. del siglo xix fue la que sostuvieron los
El territorio pápago se ubica en el pápagos contra los apaches.
desierto sonorense, y comprende, en- Con la firma del tratado Gadsen en
tre otros, el estado de Sonora en Méxi- 1854, la Papaguería se vio dividida,
co y el de Arizona en Estados Unidos. lo que derivó en una nueva organiza-
En México se le llama desierto de Altar ción del territorio. En la expedición de
a la zona donde colindan Sonora y Ari- Lumholtz en 1909-1910 (1990, p. 158),
zona y se ubican algunas comunidades el autor menciona haber encontrado a
14 pápago. La flora de esta región desérti- ingenieros y geólogos mexicanos deli-
ca consiste en una extensa variedad de mitando la línea fronteriza; la población
matorral xerófilo y cactos, como el sa- local los llamaba “inspectores” o “cela-
guaro, que posee propiedades alimenta- dores”. Esta frontera, con el tiempo, fue
rias y rituales. De la fauna alada y te- modificando los desplazamientos de la
rrestre, el coyote, el venado, el águila y población; hoy en día se han tornado
el búho presentan también característi- complicados por la falta de documen-
cas rituales por ser personajes de la mi- tos de ciudadanía que exige cada país
tología pápago. En tiempos remotos, al y por los respectivos permisos de visi-
Golfo de California llegaban numerosas ta. De manera que la organización del
territorio se cristalizó en Arizona con
la conformación de reservaciones, y en
El territorio pápago se ubica México quedaron las comunidades y los
en el desierto sonorense, ejidos de acuerdo.
y comprende, entre otros, Inicialmente existieron tres reser-
los estados de Sonora y de Arizona. vaciones en la Papaguería (Thompson;
1951): San Xavier (1874), Gila Bend

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1
Laguna sagrada. Quitovac, Sonora.

Fotógrafo: Fernando Rosales, 2005.

(1882) y Pápago (entre 1911 y 1938). La cual muchos pensaron que el terreno
Reservación Pápago era la más grande cercado correspondía a las 19 000 hec-
y se hallaba dividida en nueve distri- táreas. Esto ha generado peticiones le-
tos; actualmente, la división del territo- gales de restitución, aunque sin ningún
rio en Estados Unidos es de 11, conver- resultado. Se afirma que los sitios sagra-
tidas en distritos las dos reservaciones dos quedaron del lado mexicano. Pozo
más pequeñas: Gila Bend y San Xavier. Verde, Pinacate, Quitovac, Sonoyta, San
Sells es el centro político-administrativo Francisco y Magdalena son lugares don-
de los 11 distritos, que son Baboquivari, de se llevan a cabo actividades rituales
Chukut kuk, Gu Achi, Gu vo, Hichiwan, entre pobladores de ambos lados de la
Pisinemo, Schuk Toak, San Xavier, San frontera.
Lucy (Gila Bend), Sells y Sif Oidak.
Las comunidades pápago de Sono- organización sociaL
ra son Quitovac, Las Norias, Pozo Ver- Inicialmente los jesuitas y posteriormen-
de (ejido), Pozo Prieto, aunque hay va- te los franciscanos instauraron el orden
rios de sus habitantes en las ciudades colonial en la Papaguería o Pimería Al-
1 de Sonoyta, Caborca y Puerto Peñas- ta, de tal forma que a través de las mi-
co, entre otras. Pobladores de algunos siones impulsaron la conversión de los
de estos asentamientos han emigrado habitantes, ya fuera por convencimiento
a las ciudades (Caborca, Sonoyta, Tuc- o por la fuerza. Respecto a la organiza-
son, Phoenix) en busca de trabajo. Sin ción española, nombraron gobernado-
embargo, su territorio continúa siendo res, capitanes, alcaldes, fiscales mayo-
identificado como territorio pápago por res, ordinarios y doctrineros (Fontana;
el gobierno estatal, y es vigilado por los 1989, pp. 56-60). Estos nombramientos
propios pápagos.3 Existen problemas de no funcionaron del todo, ya que en al-
delimitación territorial; por ejemplo, en
Quitovac se estima la superficie comu-
nal en 19 000 hectáreas cuando la su-
Jesuitas y franciscanos
perficie cercada es de 12 000, ante lo
impulsaron la conversión
de los habitantes
3
En Las Norias y Pozo Prieto existe una persona a través de las misiones.
que se turna para vigilar el ganado, ya que estas
localidades están deshabitadas.

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1
Eugenio Velasco Ortega, presidente del Consejo de Vigilancia, y acompañante, resguardándose del sol.
Quitovac, Sonora.

1
Cruces de madera. Quitovac, Sonora.


PáPagos
El líder ceremonial estaba a cargo de cuidar el humo,

hacer el fuego, decidir la fecha de las ceremonias
y nombrar a los oficiales de guerra, caza y juegos.
gunos lugares el gobernador no siempre El moderno gobierno pápago ya no

podía fungir como líder ceremonial; es- representa al Consejo ni a los líderes es-
te último estaba a cargo de cuidar el hu- pirituales antes mencionados. El gobier-
mo, hacer el fuego, decidir la fecha de no de la nto está conformado por tres
las ceremonias y nombrar a los oficia- ramas independientes: la legislativa, re-
les de guerra, caza y juegos (Underhill; presentada por el Consejo; la ejecutiva,
1939, pp. 72-74). El Consejo era el po- por el presidente de la nto, y la judi-
der de la comunidad, decidía sobre la cial, por la justicia to. Solamente la ra-
guerra, el trabajo agrícola, la caza, las ma legislativa tiene dos representantes
fechas de las ceremonias, los juegos con o sus alternos —elegidos en cada dis-
otros pueblos y la aprobación de la ins- trito de la reservación—, que se gobier- 1
talación de nuevos residentes (idem, p. nan solos, excepto cuando existen asun-
78). Al parecer, existían los dos tipos de tos relacionados con otro distrito. Sus
autoridad político-religiosa, según la po- acuerdos deben transmitirlos al Consejo
blación de que se tratara. Los ancianos de la nto. A través de éste se organizan
nombraban al líder de guerra, y el cargo actos religiosos como el wi:gita en Qui-
podía ser de por vida o se lo daban ca- tovac, la peregrinación a Magdalena de
da vez que se requiriera, como en el ca- Kino (México) y la carrera de la unidad
so de San Xavier (idem, p. 77). (Arizona).
Esta información nos permite afirmar Los habitantes de los distritos son las
que no existía un gobierno central; tam- personas registradas en el censo del 1 de
bién Lumholtz (1990) mencionaba que enero de 1937 (Sells y Gila Bend) y en
el Consejo se organizaba entre las fami- el del 1 de enero de 1940 (San Xavier),
lias que se reunían en un mismo campo así como su descendencia y los que han
y ellos mismos decidían sobre los asun- sido enrolados en la nto al compro-
tos que les concernían durante el tiem- bar ser o’odham. Pueden ingresar otros
po que permanecían juntos. miembros si el Secretario del Interior

20
Capilla. Quitovac, Sonora.


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21
Iglesia, Quitovac, Sonora.

de Estados Unidos lo aprueba. General- Este reglamento excluye a los pápa-

mente, la nto solicita pruebas para que gos de México, ya que no forman par-
un individuo muestre que es de sangre te de los censos; en las dos campañas
india tohono o’odham, en medio grado de enrolamiento impulsadas por la nto,
o más.4 muchos quedaron fuera para obtener
sus credenciales como miembros. En la
4
El hijo(a) de padres o’odham es considerado primera campaña, la nto dio prioridad
o’odham. El hijo(a) solamente de madre o pa- a los más ancianos; en la segunda, sólo
dre o’odham es considerado mitad o’odham.
De esta forma se va perdiendo el derecho a ser algunos hicieron los trámites. De modo
o’odham. que cuando los pápagos de México vi-

de más edad, al parecer, son quienes

En la fiesta de San Francisco participan activamente en la organiza-
se reúnen los indígenas, para festejar ción del wi:gita. Otros tipos de organi-
su imagen dándole a la celebración zaciones religiosas se hallan vinculadas
un carácter pluriétnico. a las fiestas patronales, como las pere-
grinaciones a Magdalena, San Francis-
co y Sonoyta, lugares en donde cuidan
sitan la nto o Arizona, éstos llegan con una imagen de San Francisco, ya sea las
familiares que viven fuera del territorio autoridades eclesiásticas (Magdalena y
de la reservación. San Francisco) o una familia, como en
El gobierno de las comunidades el caso de Sonoyta.
pápago de Sonora está constituido por Es en la fiesta de San Francisco, el
el presidente de bienes comunales o eji- 4 de octubre, cuando, para festejar su
dales y sus respectivos secretarios. Los imagen, se reúnen los indígenas, dándo-
asuntos comunes se discuten en asam- le a la celebración un carácter pluriétni-
blea y cuando se trata de proyectos gu- co. Por ejemplo, a la fiesta de San Fran-
22 bernamentales dirigidos a los pápagos, cisco (en San Francisquito, comunidad
se reúnen a través de sus representantes, pápago) llegan seris y yaquis, además
también en asambleas. Algunos miem- de los pápagos de Sonora y Arizona, pa-
bros afirman que los Fondos Regiona- ra bailar pascola, hacer las velaciones y
les, organización conformada durante procesiones y participar en el baile.
el salinismo (1988-1994), operan como
la instancia mayor que reúne a los pápa- Parentesco rituaL
gos. En 1977, el Instituto Nacional Indi- A pesar de que se habla de un siste-
genista (iNi) promovió la elección de un ma de parentesco bilateral (Underhill;
gobernador de la tribu pápago de Sono- 1939, p. 34; Baarson; 1969), en térmi-
ra (Ortiz; 1995), cargo que han ocupado nos rituales se reconoce un tipo de pa-
varios individuos. En algunos municipios rentesco de linaje que funciona entre
hay un regidor indígena, como sucedió dos mitades: buitre y coyote. No existe
en 2002 en el municipio de Sonoyta, cu- mayor información al respecto y resulta
yo regidor era de Quitovac. difícil establecer los nexos de parentes-
Respecto a la organización religiosa, co de la ceremonia de la lluvia (wi:gita).
los funcionarios públicos y las personas Hoy en día tampoco es posible verifi-

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23
Estudiantes de la comunidad pápago. Quitovac, Sonora.


carlo, pues las relaciones entre los parti- dos Unidos. El grupo de este país ocupó
cipantes del wi:gita en Quitovac, como el lugar de las rancherías aledañas y so-
lo señala Galinier (1991, pp. 511-513), lamente algunos de sus miembros man-
son entre miembros de varias familias tienen nexos de descendencia reales o
que no tienen parentesco alguno, y só- ficticios con la familia original de Qui-
lo se distingue la participación de dos tovac (idem).
grupos: anteriormente un grupo de Qui- El nuevo estatus de sociedad transna-
tovac y otro conformado por rancherías cional ha modificado las relaciones en-
aledañas y, desde 1940, un grupo de tre los pápagos y los tohono o’odham,
Quitovac y otro constituido por pápa- respecto a las formas antiguas de orga-
gos de la reservación de Sells en Esta- nización. Actualmente, en los casos en
24
Escuela albergue de la tribu pápago. Quitovac, Sonora.


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2
Adolescentes pápago. Quitovac, Sonora.


que los pápagos no mantienen una re-

lación con el territorio de Quitovac, los
La existencia de la frontera
estadounidenses son quienes manipu-
lan su participación en el wi:gita, con
ha traído grandes cambios
lo que excluyen a los verdaderos resi- para la población.
dentes5 y definen su participación bajo La lengua o’odham ha dejado
criterios de afiliación o de tipo territo- de hablarse en ambos lados.
rial en un sentido estrictamente religio-
so (idem).
Este sentido religioso por parte de los te tipo de aseveraciones, los pápagos de
tohono o’odham se manifiesta en otras Sonora responden: “pero si nosotros es-
actividades, fundamentalmente en la re- tamos como ustedes: ustedes tienen una
lación que establecen con los pápagos nación y distritos; nosotros tenemos co-
de Sonora. munidades, ejidos y municipios”.
Para los pápagos de Estados Uni-
una nueva inDianiDaD dos resulta fundamental la construcción
2 Para la población, como ya se mencio- de una nueva indianidad en el contex-
nó, la existencia de la frontera ha traído to de ese país. Como punto de parti-
grandes cambios. La lengua o’odham ha da, han creado un nuevo nombre con
dejado de hablarse en ambos lados, aun- el cual se autodenominan, nombre que
que hay un mayor número de hablantes forma parte de su reivindicación como
en Arizona. Al respecto, la población indios. Pápago “comedor de frijol” era
pápago de Sonora dice que los jóvenes una distinción de la población del de-
de la nto ya no hablan la lengua, como sierto respecto a la ribereña; no obstan-
sucede con los de sus comunidades. Los te, decidieron tomar la denominación
miembros de la nto anteponen el hecho pima: tohono o’odham, es decir “gente
de conformar una nación, lo que no ocu- del desierto”; sólo cambiaron el térmi-
rre entre los pápagos de Sonora. Ante es- no, cambio indispensable en esta nueva
perspectiva india.
La organización política también
5
Durante una noche del wi:gita de 1989, ni los contribuye a la construcción de la nue-
pápagos de Quitovac ni ningún extranjero tuvieron
va indianidad: los consejos de Cultura y
derecho de presenciar las actividades nocturnas; sólo
los visitantes de Selles (Galinier; 1991, p. 498). de Asuntos Internos tienen las funciones

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2
Taller artesanal. El Bajío, Sonora.


2
Corral de ganado. Quitovac, Sonora.


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2
Familia Velasco Ortega. Foto tomada con la autorización del presidente del Consejo de Vigilancia.
Quitovac, Sonora.
de preservar y cultivar las artes nativas, y a las asociaciones que organizan pro-
oficios (habilidades) y tradiciones; auto- yectos para beneficio o para propósitos
rizar y establecer los estatutos, y regular caritativos.
a las corporaciones públicas o privadas La creación de la frontera ha aca-
rreado problemas entre los pobladores
que viven en un lado y en otro. De ello
La frontera también les dan cuenta, a manera de testimonios, en
representa a los pápagos un libro publicado por la nto (Castillo
un problema para cruzar y Cowan; 2001); en él expresan los pro-
de un lado a otro. blemas legales que padecen para cruzar
la línea. Esencialmente se trata de per-

30
Panteón de la comunidad. Quitovac, Sonora.


PáPagos
sonas que no pueden visitar a sus fami- ba que “para los de la nto todo es sa-
lias que viven ya sea en Sonora o en Ari- grado; por eso no quieren hablar de na-
zona por la falta de pasaporte o visa. Si da”. En efecto, estos silencios abundan
no pueden comprobar que nacieron en en las conversaciones que se establecen
territorio estadounidense —puesto que con ellos. Evitan hablar de la tierra co-
las mujeres dan a luz en sus domicilios, mo tierra madre y del espacio en donde
aun si tienen credencial de la nto—, a se celebra el wi:gita.
los tohono o’odham les es difícil cruzar La nto pretende controlar las accio-
a territorio mexicano para ver a su gen- nes de los pápagos de Sonora. Les pi-
te o asistir a las fiestas, pues para regre- den que no hablen con cualquiera so-
sar se enfrentan con varios problemas. bre lo que hacen. En otros ámbitos, la
Sin embargo, para muchos la frontera es nto ha intervenido en asuntos políticos
una línea imaginaria; no se trata de un que incumben a la población pápago de
deseo, ya que este argumento fortalece Sonora, como las elecciones de gober-
esta construcción de indianidad y forma nador indígena de la tribu pápago y las
parte del sentido religioso antes men- elecciones de regidores indígenas en los
cionado. municipios, lo que genera descontento 31
en el resto de la población.
estrategias comunicativas Para la nto solamente el goberna-
con eL extranjero dor indígena —cargo creado en el año
Los tohono o’odham tienen prohibido 1977 por el Gobierno Mexicano— o los
hablar con extranjeros, y con los pro- ancianos, elders —de los cuales ya hay
pios pápagos de México, sobre cues- muy pocos—, son las personas con au-
tiones que ellos mismos definen como toridad y prestigio.
sagradas. Una joven pápago comenta- Siguiendo este discurso, para los de
Arizona la frontera es una línea imagi-
naria, no existe, y el territorio de la nto
“Para los de la Nación llega hasta Sonora, donde se hallan los
Tohono O’odham todo es espacios rituales. En Quitovac, el lugar
del wi:gita; Pinacate es donde vive Mon-
sagrado; por eso no quieren
tezuma o el Hermano Mayor (personaje
hablar de nada.” que creó al mundo pápago); habita den-
tro de una cueva. En Pinacate, es donde

comenzó el mundo. Aquí existen varios ta indianidad. Sería muy sencillo expli-
cráteres, y los miembros de la nto cele- car que enfrentarse a una sociedad que
bran prácticas rituales cada año. exige la justificación de ser indio para
Aun cuando en la literatura antropo- poder continuar conservando un terri-
lógica existen descripciones del wi:gi- torio y un presupuesto es el argumento
ta o de la ceremonia de sentarse a be- en esta construcción. Un ejemplo sobre
ber en Santa Rosa, Arizona (Lumholtz; esto lo dan los pápagos de Sonora: en
1990; Underhill; 1946), México es el te- una de las campañas de enrolamiento a
rritorio que les permite definir su nueva la nto, ellos mismos comentan que “sa-
indianidad. Aquí se ve una contradic- lían pápagos por debajo de las piedras”
ción en lo que afirman los miembros de para obtener la membresía y los bene-
la nto, respecto a que los lugares sagra- ficios que ello conlleva. Con todo, el
dos quedaron en territorio mexicano, ya problema es más complejo: la significa-
que en Arizona también se celebran ce- ción de los espacios sagrados del lado
remonias. Se trata de un argumento en mexicano, tanto para los miembros de
esta construcción. Ya se ha visto que los la nto como para los pápagos de Sono-
32 de la nto son quienes regulan la parti- ra; saber quiénes de la nto participan
cipación del wi:gita de Quitovac. activamente en esta nueva indianidad o
Pareciera que los pápagos de Sono- si se trata solamente de un discurso ofi-
ra se mantuvieran estáticos ante tal fe- cial; indagar cuál es el sentido de recu-
nómeno. Muchos cuestionan esta acti- perar algunas prácticas rituales (wi:gita)
tud de control; algunos la aprueban si e inventar nuevas (culto en los cráteres
se benefician con prestaciones y apo-
yos, como los permisos para pasar a Es-
tados Unidos. La fragmentación
La fragmentación de la sociedad y de la sociedad y la poca
la poca población de habla o’odham en
población de habla o’odham
ambos países ha generado en Estados
en ambos países ha generado
Unidos la necesidad de sentirse indio,
aunque deseen practicar el estilo de vi- en Estados Unidos
da norteamericano y aunque muchos la necesidad
no pisen el desierto. Es quizás el argu- de sentirse indio.
mento de la necesidad de construir es-

PáPagos
33
Viviendas y entorno ecológico. Sonora.


34
Centro comunitario digital. Quitovac, Sonora.


PáPagos
jugaba, la cual se metió en la ropa de su

El Hermano Mayor creó madre y se volvió bebé; nació con hoci-
el mundo pápago al entrar co de puerco y garras de águila. Al cre-
al cuerpo de la ogresa cer, se comía a los niños; la gente acu-
y cortarle el corazón dió al Hermano Mayor para preguntarle
en dos partes. cómo desaparecerla, pues devoraba a
sus prójimos. Hicieron una danza, fu-
maron cigarro y cuando se durmió, jun-
y carrera de la unidad) con participa- taron leña en una cueva y le prendie-
ción de la población que habita en am- ron fuego. Así murió (Bahr et al., 1994,
bos lados de la frontera. pp. 141-146; Fontana, 1989, p. 39). El
En las prácticas rituales encontramos Hermano Mayor creó el mundo pápago
el argumento de ser papágo. Se trata de al entrar al cuerpo de la ogresa y cor-
actividades profundas de la cultura, que tarle el corazón en dos partes; vive en
ponen de manifiesto a colectividades y una cueva de Pinacate y al parecer to-
permiten la representación del mundo mó forma de un sapo petrificado. El co-
en un sistema. Éstas se hallan en trans- razón petrificado de la ogresa, llamado 3
formación y reformulación. Los rituales “santita”, se conservó por muchos años
y el paisaje constituyen instrumentos de en una cueva de Quitovac, y se presen-
identidad. taba en el wi:gita en una canasta acom-
Como en la mayoría de los grupos pañada de plumas de águila (Rodríguez
indígenas del país, el mito fundador se et al.; 1993, p.147).
relaciona con la visión del mundo pápa- El nacimiento del mundo se da a par-
go y sus rituales. tir del sacrificio del ancestro fundador,
la ogresa, a quien se celebra representa-
eL mito funDaDor, La ogresa da por el corazón petrificado (Galinier;
En la mitología pápago aparece un per- 1991, pp. 512-513) y que se conserva
sonaje, Ho’ok, monstruo antropófago a en la canasta mencionada durante el wi:
quien el Hermano Mayor (I’itoy para los gita en Quitovac.6
to, Montezuma para los pápagos de So-
nora y Siuuhu para los pimas) dio muer-
6
Rodríguez et al. (1993; p.149) menciona que la
te tras una petición colectiva. La ogresa canasta fue robada del cerro de la Petaca en 1936,
nació de una pelota con la que su padre por un extraño a la comunidad.

3
Bomba de agua potable, la cual abastece a la comunidad de Quitovac. Sonora.


PáPagos
La santita o virgen (idem, 1991, p. tiene características terapéuticas colec-

493), términos heredados de la religión tivas. En ella se muestra el nexo de los
católica, son los nombres dados al co- pápagos con el ancestro fundador sacri-
razón que se encontraba en la cueva de ficado —como lo refleja el referido mi-
las inmediaciones de Quitovac. Ho’ok to— al presentar el corazón petrificado
representa un aspecto caótico, el agua, de la ogresa junto con plumas de águi-
la inundación que fue detenida por el la dentro de una canasta. En palabras de
Hermano Mayor, y cabe la posibilidad Bahr (Galinier; 1991, p. 513), esta cere-
de que la lluvia tan esperada en verano monia permite la confluencia de todos
sea una de sus características benéficas. los grupos de pápagos con un sentido de
El nombre de Ho’ok recuerda el tér- nación independiente. El mito también
mino tepehuano del sur de A’ok, “el dia- evoca el movimiento del mundo con el
blo”, uno de los personajes de la danza cual se instaura el tiempo pápago: dete-
en las fiestas patronales de los pápagos y ner la inundación, petrificar el corazón
un ser que vive en un ojo de agua. Es im- de la ogresa y del Hermano Mayor re-
portante mencionar el parentesco lingüís- presentado por un sapo, así como dar-
tico de ambas lenguas: las dos pertenecen le importancia a la danza antes de sa- 3
a la rama tepimana de la familia lingüísti- crificar a la ogresa. Vemos también que
ca yuto-azteca (pápago, pima y tepehua- el número cuatro es el que rige múlti-
no). En este sentido, ambos términos alu- ples actividades rituales. Galinier (1991)
den a este parentesco lingüístico y a una plantea que la menstruación representa
cercanía cultural en el tiempo. el paradigma pápago, ya que a la joven
El wi:gita es una ceremonia que se se le recluye durante los cuatro días de
celebra para atraer la lluvia; además su primera regla. Este número está direc-
El wi:gita es una ceremonia que se celebra con el propósito

de atraer la lluvia; además tiene características terapéuticas
colectivas. En ella se muestra el nexo de los pápagos
con el ancestro fundador sacrificado.

tamente asociado a cualidades de Ho’ok,

como se verá más adelante, en su rela- Los pápagos dividen
ción con la sal, el mar y la Luna. el tiempo en verano
y en invierno: cada una
Las temPoraDas
de estas dos temporadas rige
Los pápagos dividen el tiempo en dos
temporadas: el verano y el invierno, que
también dos tipos
rigen dos tipos de habitación, la de los de habitación, la de los
“campos” y la de los “pozos”. Esta divi- “campos” y la de los “pozos”.
sión de la habitación permite las prácti-
cas agrícolas y las de caza-recolección
respectivamente; ambas aún existen, pe- el calendario estaba regido por la Luna,
ro de forma aislada. es decir, por Ho’ok, la ogresa marítima-
Los rituales más importantes se dan lunar. Es evidente que la Luna es suma-
en temporada seca. Se trata de rituales mente importante para los grupos del
que atraen la lluvia. En el caso pápa- desierto, pues, para los indios del no-
3 go de Quitovac es el wi:gita, ceremonia reste, marcaba las etapas de crecimien-
que se lleva a cabo en la primera luna to de la vaina del mezquite, su alimento
llena de julio-agosto, cuando se cele- esencial.
braba la ceremonia del vino del sagua-
ro, cuya espuma en su preparación re- Luna-mar-reProDucción
presentaba a la lluvia.7 Los ritos de paso de las jóvenes pápago
Los pápagos enfatizan la importancia representan la regeneración y la repro-
de la lluvia, puesto que el sol intenso ducción, pues, como ya se mencionó, en
durante la temporada seca exige la rege- su primera menstruación eran recluidas,
neración de la naturaleza precisamente y además debían mostrar su destreza en
con las lluvias. En cuanto a los pápagos, las tareas femeninas y en el baile. Esta
Lumholtz (1990, p. 76) menciona que reclusión muestra el carácter de conta-
minación de la sangre menstrual, lo que
7
En el norte de la actual Reservación Pápago, se evoca el sentido de reproducción.
distinguía el wi:gita que se efectuaba en noviem- En el caso pápago, la menstruación
bre, de la ceremonia del “sentarse a beber” que se
llevaba a cabo en agosto. En Quitovac es la misma
está regida por el ciclo lunar (Galinier;
ceremonia y se le llama wi:gita. 1991, p. 514). La sangre menstrual se

PáPagos
3
Caserío. Quitovac, Sonora.


40
Altar familiar. Quitovac, Sonora.


PáPagos
asocia con la sal, pues las mismas pres- llera conservaban por tener fuertes po-
cripciones de la joven que menstrúa deres en la iniciación chamánica. Sólo
se las daban a los recolectores de sal, tenemos una descripción de Lumholtz
quienes eran recluidos a su regreso del (1990, p. 34), en la que afirma que la
Golfo de California. Durante el periodo punta de la flecha del cazador está fa-
menstrual, las mujeres tenían prohibido bricada con uña de gato, que se ata con
tocar las flechas de caza de sus esposos tendón de venado. Parece que el nervio
(Underhill; 1975, p. 63). La prohibición de venado tenía un papel primordial en
del consumo de sal en actividades ritua- el uso de estas flechas. Underhill (1975,
les señala la necesidad de alejar la con- p. 73) menciona que el guerrero recibía
taminación de su sangre. Aquí, mar y la cabellera del cautivo, al tiempo que
sangre son regidos por la Luna (Galinier; le decía “mi hijo”, y los hijos del gue-
1991, p. 515). La asociación Luna-mar y rrero lo llamaban “Hermano Menor”.
sangre-sal señalan características feme-
ninas, las cuales también posee Ho’ok, Los santos
la ogresa pápago. Para los pápagos, las imágenes santas
de la religión católica se asociaron a los 41
eL cautivo De guerra vs. venaDo ancestros. El santo más importante es
Los pápagos, en tanto sociedad gue- San Francisco, a cuyos santuarios (Mag-
rrera, apresaban a cautivos cuya cabe- dalena de Kino, San Francisco y Sono-
yta) la población de ambos lados de la
frontera y otros grupos indígenas, como
los yaquis y seris, acuden en peregrina-
Para los pápagos,
ción. Es el patrono de las lluvias de oc-
las imágenes santas tubre que ha sido nativizado y con el
de la religión católica cual el mundo quiere regresar al caos
se asociaron a los ancestros. original (Galinier; 1991, pp. 534-535).
El santo más importante Los pápagos (tohono o’odham) hacen
es san Francisco, a quien una peregrinación anual a Magdalena
de Kino, Sonora, para visitar a San Fran-
acuden en peregrinaciones
cisco Xavier. Esta imagen es herencia de
a visitarlo.
la presencia jesuita en la Papaguería: el
jesuita que la llevó, murió y fue sepul-

España argumentaban que de estos sitios

había salido la peregrinación de la anti-
Hay menciones de gua nación mexicana para fundar Méxi-
peregrinaciones pápago co, y que estas casas, cuyas ruinas aún
al Golfo de California, se reconocen, fueron sus moradas. Los
en donde recolectaban primeros españoles (Bahr et al.; 1994,
sal, ya fuera p. 6) nombraron a estos asentamientos
para intercambiarla “Casas Grandes”, término retenido por
los arqueólogos. Los pimas, durante el
o para la iniciación
siglo xix y quizá durante la Conquista,
chamánica. llamaron a uno de los edificios encon-
trados por los españoles wa:paki, “Casa
Grande”, y es el actual sitio arqueoló-
tado allí en 1711. Aunque se trate de la gico cercano al río Santa Cruz, al norte
imagen jesuita, se festeja en la fecha del de la Papaguería. Se observa, pues, que
franciscano, como parte también de la pre- este asentamiento fue identificado como
42 sencia de esta orden en la Papaguería. uno de los lugares míticos de salida de
los antiguos mexicanos en su peregrina-
Peregrinaciones ción hacia el sur.
Los pápagos efectuaban algunas pere- También hay menciones de las pere-
grinaciones. En los libros que redactó grinaciones pápago al Golfo de Califor-
el jesuita Juan Antonio Baltasar (Calvo nia, en donde recolectaban sal, ya fuera
y Jáuregui; 1996, p. 253), por ejemplo, para intercambiarla o para la iniciación
señala que desde la entrada de Kino a chamánica. Lumholtz (1990, p. 270) se-
la Papaguería, éste reconoció vestigios ñala que la salina del Golfo de Califor-
y ruinas8 cercanos a un paraje del río nia era visitada por pápagos del río Gila
Gila, así como en el territorio existen- y si ellos no se desplazaban a este sitio,
te entre el presidio de Janos y el Real de lo hacían a la salina del Pinacate, a fin
Chihuahua. Los historiadores de Nueva de obtener sal. Otra información indi-
ca que los que hacían el viaje sagrado
para el mismo fin eran los del interior,
8
En otra fuente se indica que fue Manje el primero
los tohono o’odham (Rodríguez-Loubet
en ver la ruina de Casa Grande y el primero en
escribir pima (Bahr et al.; 1994, pp. 32-33). et al.; 1993, p. 139).

PáPagos
43
Figura tallada en madera. Quitovac, Sonora.


El chamán encabeza la peregrinación, decide el espacio

para descansar, tomar los alimentos,
pernoctar y efectuar limpias. El chamán tiene colaboradores
que lo ayudan, sobre todo en la curación de enfermos.
Hoy en día, a finales de septiembre y niños, madres con bebés, jóvenes y per-
principios de octubre, vehículos pápago sonas de edad.
cruzan la frontera, ya sea por Sonoyta Los peregrinos provienen esencial-
o Nogales, para visitar a San Francisco. mente de Sells; algunos tienen parentesco
Algunos grupos caminan un tramo hacia con los pobladores de Quitovac, y se re-
el santuario, ya en territorio mexicano, únen en Pozo Verde con algunos pápa-
acompañados de pápagos que viven en gos de Caborca para organizarse, efec-
Sonora. tuar una ceremonia de limpia y rezar
44 Esta peregrinación cumplió ocho rosarios. Un chamán, junto con sus co-
años de llevarse a cabo; el primer año laboradores, encabeza la peregrinación.
participaron solamente dos personas: El chamán guía al frente a los peregrinos,
un chamán que prometió a San Francis- decide el espacio para descansar, tomar
co seguir visitándolo si le devolvía la sa- los alimentos y pernoctar; también efec-
lud, y un sobrino que lo acompañó. A túa limpias durante el trayecto. Los co-
partir del segundo año se unieron más laboradores se encargan de cuidar la fila
personas hasta conformar 129 en 2003. de peregrinos y de ayudar a algún enfer-
El primer año caminaron por el desier- mo comunicándose por radio con quie-
to y algunos tramos sobre la carretera, nes van en los vehículos. Hay cuatro jó-
pasando por los yacimientos de agua a venes cantadores que participan con sus
fin de rezar y consumir este líquido. Po- cantos durante las limpias que el chamán
co a poco se fueron organizando mejor, les hace a los peregrinos y a diversas per-
pues el aumento de los participantes lo sonas al llegar a la iglesia.
exigía; así pues, ahora llevan varios ve- Hoy, el departamento de cultura de
hículos para transportar agua, perte- la Nación Tohono O’odham, cuyo cen-
nencias y comida. Además, participan tro político se encuentra en Sells, parti-

PáPagos
cipa activamente en la organización. Al llegar al territorio del santuario, el

Sus miembros se coordinan con el muni- chamán limpia a las mujeres menstruan-
cipio de Magdalena para gestionar el es- tes y embarazadas, así como a todo el
pacio donde permanecerán los peregri- contingente, pues deben estar prepara-
nos durante su estancia en el santuario, dos para entrar a saludar a San Francis-
el cual utilizan como centro de visitan- co, solicitarle y agradecerle favores.
tes y uno más como centro de atención Los principales criterios de defini-
médica. Por su lado, tanto el municipio ción de esta sociedad trasnacional se
de Tubutama como el de Magdalena encuentran en el discurso religioso, que
envían patrullas para hacer recorridos y conlleva un uso del territorio, la organi-
poder asistir a los peregrinos, ya sea lle- zación social y la mitología, entre otros.
vando agua y suero oral o protegiendo La frontera y la inmersión de los pápa-
al contingente del tránsito; también los gos en políticas distintas ha generado,
auxilian con una ambulancia. en los tohono o’odham, la búsqueda de
La peregrinación la dirige un cha- una identidad en territorio mexicano
mán y su labor es proteger y ser responsa- (Galinier; 1991). La participación de la
ble del contingente peregrino. De mane- población de ambos lados de la fronte- 4
ra que durante todo el trayecto de cinco ra en el wi:gita señala la importancia de
días caminando por el desierto de Altar, un rito del desierto y es uno de los ar-
el chamán limpia, con sus flechas emplu- gumentos en la definición de la indiani-
madas, el camino por donde han dejado dad Tohono O’odham.
sus huellas las serpientes, las tarántulas La peregrinación que se lleva a ca-
y los alacranes, para que los peregrinos bo a Magdalena de Kino, y que se ini-
puedan transitar sin entrar en contacto ció apenas ocho años atrás, muestra
con esas huellas a causa de su estado de- un conocimiento antiguo en una prác-
licado; sin esas limpias, los peregrinos po- tica ritual reciente. Vemos que en tér-
drían enfermar. De igual forma, los limpia minos políticos hay diferencias sustan-
cada día con el único fin de protegerlos. ciales entre los pápagos (mexicanos) y
Todas las mañanas un grupo de jóvenes los tohono o’otham (Arizona), pero en
entonan cantos en su lengua para dar la términos culturales el conocimiento es
bienvenida al Sol y ellos mismos cantan compartido, sobre todo en prácticas
al llegar a las iglesias o las capillas que se que traen al escenario el conocimiento
encuentran por el camino. antiguo.

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PáPagos
características de la poblacióN eN hogares pápagos, méxico, 20001

total % Hombres mujeres
Población en hogares 363 198 165
Población de 0 a 4 años 2 . 12 1
Población de a 14 años 21.2 41 3
Población de 1 a 24 años 1 1. 30 31
Población de 2 a 44 años 23. 4 3
Población de 4 a 4 años 0 1.3 3 33
Población de y más años 41 11.3 2 12
Población de 5 años y más hablante de 135 99 36

lengua indígena2
Población de 15 años y más 258 145 113
Sin instrucción escolarizada 30 11. 20 10
Con algún grado de primaria 11 44. 4
Con posprimaria 113 43.
Población ocupada 139 101 38
Ocupados sector primario 31 22.3 2 3

31 22.3 22 4
Ocupados sector secundario
Ocupados sector terciario 4 3.2 4 2
Ocupados en sector no especificado 3 2.2 2 1
ocupados sin ingresos3 11 7.9 5 6
viviendas habitadas 87
Con agua entubada .2
Con drenaje 0 0.
Con electricidad .4
notas
1
Se refiere a la población en hogares en donde el jefe, el cónyuge o algún ascendiente declaró ser hablante de lengua
pápago.
2
Incluye hablantes de pápago y de otras lenguas indígenas de 5 años y más.
3
La diferencia entre la población ocupada y la población agropecuaria está distribuida en otras actividades económicas.
fuente: Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas / Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo,
“Sistema Nacional de Indicadores sobre la Población Indígena de México”, 2002, con base en XII Censo General de
Población y Vivienda, Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, México, 2000.

Pápagos, de Neyra Patricia Alvarado Solís, se
terminó de imprimir en diciembre de 2007 en
los talleres de Impresora y Encuadernadora
Progreso, S.A. de C.V., San Lorenzo 244,
Col. Paraje San Juan, Deleg. Iztapalapa, C.P.
09830, México, D.F. El tiraje fue de 6 000
ejemplares.
Las tareas de digitalización y retoque de
imágenes, composición tipográfica,
diagramación y cuidado de edición estuvieron
a cargo de la Coordinación Editorial de la cdi.

1Fpapagos.indd 2 7/26/07 5:56:33 PM

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Pápagos

Pueblos Indígenas del México Contemporáneo

Predominio de la naturaleza. Desierto de Altar, Sonora.

1Fpapagos.indd 1 7/26/07 5:56:25 PM

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Fotografía 1a. de forros y portadilla: Reunión informal. Sonora.

Fotografía página 5: Figura tallada en madera. Quitovac, Sonora.

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PápagosFINAL.indd 3 25/7/07 20:25:34

1. INDIOS DE SONORA – PÁPAGOS 2. PÁPAGOS – UBICACIÓN GEOGRÁFICA 3.

Catalogación en la fuente: GYVA

D.R. © 2007 Neyra Patricia Alvarado Solís

Primera edición, 2007

D.R. © 2007 Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas

ISBN 978-970-753-091-1 / Pápagos

ISBN 978-970-753-006-5 / Pueblos Indígenas del México Contemporáneo

Impreso y hecho en México

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Los PáPagos y La frontera internacionaL 

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Fibras vegetales y cesto. El Bajío, Sonora.

DeL nombre PáPago Kino identifica en los ríos Altar, Con-

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Jagüey. Quitovic, Sonora.

PápagosFINAL.indd 7 25/7/07 20:25:36

na continúa utilizándolo. Se usa en do-

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Verde (ejido), Pozo Prieto, Sonoyta, Ca-

PápagosFINAL.indd 10 25/7/07 20:25:36

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Vivienda. El Bajío, Sonora.

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Petrograbado. El Bajío, Sonora.

PápagosFINAL.indd 13 25/7/07 20:25:38

la vivienda tradicional; solamente al- peregrinaciones, atraídas por los yaci-

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Laguna sagrada. Quitovac, Sonora.

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Cruces de madera. Quitovac, Sonora.

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El líder ceremonial estaba a cargo de cuidar el humo,

gunos lugares el gobernador no siempre El moderno gobierno pápago ya no

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Capilla. Quitovac, Sonora.

PápagosFINAL.indd 20 25/7/07 20:25:40

Iglesia, Quitovac, Sonora.

de Estados Unidos lo aprueba. General- Este reglamento excluye a los pápa-

PápagosFINAL.indd 21 25/7/07 20:25:40

de más edad, al parecer, son quienes

PápagosFINAL.indd 22 25/7/07 20:25:40

Estudiantes de la comunidad pápago. Quitovac, Sonora.

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Escuela albergue de la tribu pápago. Quitovac, Sonora.

PápagosFINAL.indd 24 25/7/07 20:25:41

Adolescentes pápago. Quitovac, Sonora.

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que los pápagos no mantienen una re-

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Taller artesanal. El Bajío, Sonora.

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Los PáPagos y La frontera internacionaL

Población de 0 a 4 años 2 . 12 1

Población de a 14 años 21.2 41 3

Población de 1 a 24 años 1 1. 30 31

Población de 2 a 44 años 23. 4 3

Población de 4 a 4 años 0 1.3 3 33

Población de y más años 41 11.3 2 12

Sin instrucción escolarizada 30 11. 20 10

Con algún grado de primaria 11 44. 4

Con posprimaria 113 43.

Ocupados sector primario 31 22.3 2 3

Con agua entubada .2

Con drenaje 0 0.

Con electricidad .4