Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Estudios Turísticos, n.o 174 (2007), pp. 33-48 Secretaría de Estado de Turismo
Resumen: Partiendo de la importancia que la actividad turística tiene en la economía mundial, analizamos la importancia que tiene
la gestión de la imagen del destino turístico, dentro de la planificación y desarrollo estratégico que realizan los responsables de la comer-
cialización de dichos destinos turísticos. Posteriormente identificamos y desarrollamos los principales problemas que genera la gestión
de la imagen de un destino turístico. Una vez que hemos planteado la importancia de la imagen y los problemas de gestión que conlle-
va, afrontamos el proceso de formación de la imagen, paso previo e imprescindible para establecer un modelo de construcción de la
imagen de un destino turístico. En este último paso analizamos diferentes propuestas metodológicas agrupándolas en dos grandes blo-
ques: métodos estructurados y métodos no estructurados. Posteriormente se hace una propuesta de modelo para gestionar la imagen de
un destino. Para finalizar entre alguna de las principales conclusiones podemos destacar que la imagen de un destino turístico es pro-
pia, singular y característica para cada individuo, que podrá verse transformada a través del tiempo como consecuencia de la alteración
en la valoración de los atributos significativos que la constituyen, o bien la aparición de atributos significativos nuevos.
Palabras clave: Imagen; destino turístico; modelo; modelo de gestión; gestión de la imagen.
Summary: Departing from the importance that the tourist activity has in the world economy, we analyze the importance that has
the management of the image of the tourist destiny, inside the planning and strategic development that there realize the persons in char-
ge of the marketing of the above mentioned tourist destinies. Later we identify and develop the principal problems that there generates
the management of the image of a tourist destiny. As soon as we have raised the importance of the image and the problems of mana-
gement that it bears, we confront the process of formation of the image, previous and indispensable step to establish a model of cons-
truction of the image of a tourist destiny. In the latter step we analyze different methodological offers grouping them in two big blocks:
constructed methods and not constructed methods. Later a model offer is done to manage the image of a destiny. To finish between
someone of the principal conclusions we can emphasize that the image of a tourist destiny is own, singular and typical for every indi-
vidual, who will be able turn transformed across the time as consequence of the alteration in the valuation of the significant attributes
that constitute it, or the appearance of significant new attributes.
Keywords: Image; tourist destiny; model; model of management; management of the image.
33
Joaquín Traverso Cortés
Entender las diferencias de imágenes que genes de percepciones que elabora un indi-
poseen los visitantes y los no visitantes tiene viduo. Cuando se traza un mapa de imáge-
una importancia inestimable, ya que permi- nes de percepciones turísticas, estamos
te determinar los atributos más destacados reconociendo que los diferentes destinos
de la imagen del destino turístico, anclados «evocan todo tipo de experiencias emocio-
en la mente de los consumidores y no con- nales». La selección de los aspectos de un
sumidores. Al mismo tiempo esta informa- destino específico para competir en el mer-
ción resulta esencial en el proceso de plani- cado y ser elegidos por los turistas como su
ficación estratégica del mercado de turismo. destino vacacional depende de dos cuestio-
Los vendedores también pueden usar imáge- nes:
nes para aumentar la satisfacción recordada
y animar las compras de repetición. • Identificación de las ventajas más sig-
nificativas del destino.
En esta misma línea actuación se inscri-
ben los trabajos de Chon (1992). La autora • Conocer y comprender como los visi-
centra sus investigaciones en el análisis de tantes potenciales pueden ser atraídos
los modelos de conducta del consumidor. hacia nuestro destino.
Estudia las reacciones y comportamientos
generados cuando los turistas acceden a un Este segundo punto es critico. La caren-
destino y tienen una experiencia real de cia de conocimientos sobre las perspectivas
dicho destino. Según fuera su imagen pre- de demanda de los visitantes potenciales es
via y la imagen generada después de la un impedimento al desarrollo y puesta en
experiencia las reacciones de los consumi- práctica de una visión estratégica de la ima-
dores serán diferentes. Los principales gen de un destino. El nivel de atracción esta
hallazgos fueron: 1º cuando se tiene imagen estrechamente vinculado a la imagen que
positiva y una experiencia de viaje positiva del destino posee el individuo (van Riel,
se produce un ligero incremento de la eva- 1997).
luación positiva del destino, 2º mientras que
una imagen previa negativa y una experien- Por todo lo expuesto podemos concluir
cia positiva producirían una muy positiva que resulta necesario conocer la imagen que
evaluación del destino. 3º La evaluación un destino turístico genera en la mente de
más negativa resultaría de una imagen posi- los visitantes, así como los mecanismos de
tiva y una experiencia negativa. Hay que actuación para poder trabajar sobre dicha
indicar que, aún siendo la situación 2º la imagen y adecuarla a nuestros intereses.
que genera una reacción más favorable,
resulta complejo conseguir que se visite un
destino determinado del cual se tiene una III. PROBLEMAS EN LA GESTIÓN
imagen negativa previa. DE LA IMAGEN
Los distintos destinos turísticos pueden Tal y como hemos indicado resulta de
ser diferenciados a través del mapa de imá- vital importancia practicar una adecuada
política de gestión de la imagen, aunque cias, ideas e impresiones que una persona
debemos indicar la existencia de dos pro- tiene sobre ese destino turístico». En la for-
blemas principales en dicho proceso. El pri- mación de la imagen pues se entremezclan
mero hace referencia al propio concepto del estímulos externos e internos. Estos últimos
término imagen. El segundo gran problema son inherentes a cada individuo, como con-
hace referencia a la fragmentación del sec- secuencia de expectativas, motivos y apren-
tor turístico tanto en actores (intervinientes) dizajes basados en experiencias anteriores,
como en intereses y sus repercusiones a la además de las propias circunstancias psico-
hora de proyectar una imagen global. sociales de cada individuo concreto (Shiff-
man y Kanuk, 1983; pág. 142). Por esto se
Como hemos apuntado el primer gran puede afirmar que cada persona tiene una
problema en la gestión de la imagen turísti- imagen particular y única sobre un destino
ca de un destino hace referencia a la propia en cuestión, produciéndose la circunstancia
conceptualización del término imagen. Son de que un destino turístico podrá tener tan-
muchas las investigaciones realizadas en tas imágenes como visitantes reflexionen
torno al concepto imagen. Partiendo de la sobre ella. Circunstancias que generan difi-
idea base de que «la imagen es la represen- cultades a la hora de diseñar una estrategia
tación figurada de un modelo original, de global de comunicación.
algo preexistente» (Rodríguez del Bosque,
1995), debemos indicar que se han realiza- De otro lado, la imagen no es algo per-
do múltiples acercamiento al término. manente, sino que puede sufrir alteraciones
Adoptando esta multiplicidad de puntos de con el paso del tiempo. Estas alteraciones
vista podemos encontrar trabajos relaciona- son normalmente consecuencia de las
dos con la construcción de la imagen según: modificaciones que se producen en su
el proceso de percepción; la diversidad de entorno, en su estrategia, así como cambios
los públicos receptores; la estrategia de ges- en la evaluación que los distintos públicos
tión; la estructura mental cognitiva; el con- hacen de las características de la misma
trol de la información y su repercusión en la (Cohen y Geschwind, 1971, pág. 77).
imagen.
El segundo problema que señalábamos
Considerando todos estos trabajos, y por referente a la gestión de la imagen es la pro-
tanto su amplitud de enfoques, se puede pia fragmentación del sector turístico, pues-
indicar que la imagen será «el resultado to especialmente de manifiesto a la hora de
neto de la interacción de todas las experien- elaborar una política de comunicación. La
cias, creencias, sentimientos, conocimien- fragmentación del sector tiene una doble
tos e impresiones de cada persona mantiene visualización, de un lado la multiplicidad de
sobre una entidad» (Gioia, D.A., 2000). actores: sector público, mayoristas de via-
Asociando dicha reflexión al caso que nos jes, sector de la hostelería, restauradores,
ocupa podemos coincidir con Crompton etc. De otro el propio fraccionamiento de
(1979) afirmando que la imagen de un des- cada uno de los sectores anteriormente cita-
tino turístico sería «la suma de las creen- dos.
Las disfunciones están principalmente con los del destino. En este sentido pode-
asociadas a los valores que promueven y mos citar a modo de ejemplo las cadenas
comunican cada uno de los sectores im- hoteleras o las compañías de aviación
plicados. En determinadas ocasiones los (Ross, G.F., 1993).
valores seleccionados por cada sector son
diferentes, lo que genera políticas de comu-
nicación distintas, siendo esto a su vez res- IV. FORMACIÓN DE LA IMAGEN
ponsable de que los diversos públicos obje-
tivos reciban información dispar, diluyendo Además de considerar los problemas
de este modo la posibilidad de crear una anteriormente expuestos, otro factor a exa-
imagen homogénea. En situaciones extre- minar es el proceso de formación de la ima-
mas los valores promovidos no son sola- gen. Conocer el mecanismo de actuación de
mente distintos sino que pueden entrar en dicho proceso resulta necesario para poder
conflicto unos con otros (Laws et al., 2002). desarrollar una adecuada política de ges-
Podemos indicar que la elección de valores tión.
y aspectos distintos encuentra su justifica-
ción en el surgimiento de intereses propios Un primer modelo sobre la formación de
para cada colectivo, según su situación en el la imagen se encuentra en «la teoría de las
sector y su propio desarrollo estratégico. siete fases» (Gunn, 1972), ver figura nº 1.
La teoría propone que la imagen que un
Esta multiplicidad de comunicaciones y individuo elabora sobre un destino turístico
agentes genera también un problema de se encuentra en constante proceso de cons-
liderazgo, el cual se manifiesta de forma trucción y modificación. Este procedimien-
nítida en el momento de definir la estrategia to continuo se sustenta sobre la base de imá-
de gestión para un territorio, lo cual incluye genes generadas a través de información
la elaboración de la imagen característica no-turística sobre el destino (v.g. los docu-
que se quiere transmitir. mentales de televisión, libros, lecciones
escolares y historias de las experiencias de
Otra circunstancia añadida, que suele amigos), información inducida o promocio-
producirse, es que muchos de los negocios nal (v.g. viaje folletos, publicidad y anun-
ubicados en un determinado destino pueden cios) e imágenes inducidas modificadas
pertenecer a cadenas nacionales o interna- resultado de la experiencia personal sobre
cionales, las cuales tiene entregadas sus el destino, que continuamente va procesan-
campañas de comunicación a grupos «mass do un individuo.
media» de ámbito supranacional. Este
hecho provoca que se elabore una estrategia Igualmente indica esta teoría que las
genérica de comunicación basada en valo- imágenes mantenidas por los visitantes
res de la compañía no en los del destino. potenciales, los no-visitantes y los visitan-
También se puede dar la circunstancia que tes que ya regresaron de su estancia son
se haga hincapié en objetivos propios de la diferentes. En apoyo de esta última afirma-
compañía, pudiendo estos coincidir o no ción podemos indicar la existencia de
varios estudios que demuestran que las imá- ción es complementaria o diferente de la
genes sostenidas por los visitantes que ya existente).
accedieron al destino, vivieron su experien-
cia y regresaron tienden a ser más comple- En esta estructura de pensamiento pode-
jas y diferenciadas que la imagen generada mos encontrar elementos cognitivos, es
por los visitantes potenciales o los no-visi- decir, aspectos vinculados al conocimiento
tantes (Pearce, 1982, 1988; Chon, 1990, real o comprobado de las cosas y también
1992). También se demostró que la imagen elementos afectivos o de carácter emocional
de un destino que posee un visitante puede y que no responden a cuestiones analíticas.
cambiar con el paso del tiempo al desvane- Estas dos vertientes (cognitiva y afectiva) se
cerse ciertos recuerdos y potenciarse otros. encuentran íntimamente ligadas, e influyen
Igualmente la imagen puede verse alterada unas sobre otras. Así, es muy difícil deter-
cuando se conocen destinos similares minar hasta qué punto la imagen de un des-
pudiendo provocar confusión en los recuer- tino está conformada por aspectos cogniti-
dos que mantiene el individuo o simple- vos o emotivos. Es más, podríamos decir
mente por actos de comparación entre des- que cada uno de los atributos con los que un
tinos que realice el individuo (Phelps, 1986; destino es identificado o asociado pudiera
Narayama, 1976). tener una doble componente, cognitiva y
emocional. Esta circunstancia puede provo-
Paul Capriotti (1999) desarrolla de car que cambie la percepción sobre un atri-
forma más exhaustiva el proceso de forma- buto sin necesidad de que el atributo tuviera
ción de la imagen. Para el autor la imagen que cambiar realmente (ver figura 2).
queda configurada por una red de atributos
significativos para el individuo en relación Indicar también que la imagen del desti-
con el destino propuesto. Estos atributos no turístico (como estructura mental cogni-
están dispuestos en forma de red (ver figura tiva) no solo depende exclusivamente del
2), como nodos mutuamente interrelaciona- destino, sino que también estará en íntima
dos, formando una estructura con sentido vinculación con la imagen de los distintos
propio, por medio de la cual un sujeto expli- entes vinculados existentes, ya que, los
ca el destino en cuestión, lo identifica y lo individuos tomaran atributos característicos
distingue de los demás. Cada uno de estos de un ente superior (provincia, región,
nodos es un concepto o atributo, las cone- comunidad, país) como atributos propios
xiones indican las relaciones o vinculacio- del destino. De esta manera, un destino con-
nes entre cada concepto, y las flechas mar- creto será identificado por un individuo
can la dirección o flujo de la relación. La como perteneciente o vinculado a ese ente
información que la persona recibe puede superior asociándole una forma característi-
reforzar un nodo determinado (si la infor- ca de manifestarse. Dicha circunstancia
mación es similar a la existente), generar provoca que existan atributos que se aso-
nuevas relaciones entre los nodos existentes cien indistintamente tanto al destino con-
(si la información modifica la vinculación), creto como al ente con el cual se le vincule.
o bien crear un nuevo nodo (si la informa- Por último indicar que cada uno de los atri-
Figura 1
Teoría de las siete fases en la formación de la imagen
Figura 2
La imagen como estructura de atributos
A
E
B
G
F
H
D
I
Atributos secundarios
Cuadro 1
Métodos usados en la investigación de la imagen de un destino turístico
ESTRUCTURADOS NO ESTRUCTURADOS
El modelo está estructurado en seis apar- recoger las distintas percepciones que
tados. Los cuatro primeros nos instruyen el grupo de interés elegido tiene sobre
sobre cómo determinar la imagen de un ente el destino. La investigación cualitati-
concreto, los pasos 5º y 6º nos adiestran en va puede realizarse utilizando entre-
cómo mejorar la imagen en función de vistas en grupo, o de tipo individual.
nuestros intereses y de los recursos disponi-
bles. Las fases del modelo son: 3. Recogida de datos cuantitativos. Se
determinará un tamaño muestral ade-
1. Determinar la muestra de interés. cuado en función de la población
En este sentido la entidad debe esta- objeto de estudio y el nivel de con-
blecer sobre que grupo de interés fianza exigido. Se plantearán cuestio-
tiene que actuar. Una vez determina- nes relativas a: valoración sobre los
do el grupo se accede a los elementos atributos seleccionados utilizando
representativos de dicho grupo. Debe- escalas tipo Likert; datos sociodemo-
mos indicar que se pueden establecer gráficos; pautas de actuación y cual-
más de un grupo de interés, según las quiera otra cuestión, según las carac-
expectativas que se deseen cubrir. En terísticas del grupo de interés elegido
el caso de que el grupo elegido sea el y las demandas a cubrir.
de clientes, podemos discriminar
entre los clientes de interés de los 4. Aplicación del análisis conjunto. No
ocasionales, al tiempo que se puede solamente es necesario conocer los
profundizar también sobre los poten- atributos que influyen en la composi-
ciales. ción de la imagen, ni el valor especí-
fico que se le otorgue a cada uno de
2. Seleccionar los atributos. Para ellos, sino que es necesario conocer el
determinar qué atributos son los más peso que las personas conceden a
significativos de cara a la investiga- cada atributo. Para este reto se plantea
ción, la organización debe realizar la utilización del análisis conjunto
una investigación sobre cada uno de como herramienta más adecuada a tal
los grupos de interés. Aunque existen propósito. Los investigadores descri-
atributos comunes a diferentes desti- birán destinos hipotéticos en función
nos se hace necesario determinar cuá- de cómo los distintos atributos se
les son los atributos que cada grupo desarrollan según diferentes niveles
de interés utiliza para configurar la de desempeño. Los entrevistados
imagen de un destino en particular. ordenaran o evaluarán los destinos
Este planteamiento deriva de la nece- hipotéticos sobre la base de su apre-
sidad de conocer exactamente cómo ciación global. Aunque también se
es percibido un destino turístico con- podría establecer el procedimiento de
creto, en un momento determinado y que el entrevistado fuera comparando
por un grupo de interés particular. En los atributos de dos en dos. Estos
esta fase de la investigación se deben autores creen que el primer sistema es
GIOIA, D.A.; SCHULTZ, M. y CORLEY, K.G. (2000). O’LEARY, S. y DEEGAN, J. (2003). «People, pace,
«Organizational identity, image and adaptive place: Qualitative and quantitative images of Ire-
instability». Academy of Management. The Aca- land as a tourism destination in France». Journal
demy of Management Review (25), n.º 1, pp. 63- of Vacation Marketing, n.º 9, pp. 213-222.
81.
ORTEGA, E. (1989). 13 Grandes temas de Marketing.
GUNN, C.A. (1972). Vacationscape–Designing Tou- Esic Editorial, Madrid.
rist Regions. Austin, Texas: University of Texas.
ORTIGUEIRA BOUZADA, M. (1996). «Imagen actual
ILLIEWICH, S. et al. (1997). «Deconstructing destina- del control del gasto público local: una investi-
tion image». Proceedings os the Tourism and gación empírica», IV Xornadas Galegas sobre
Travel Research Association Conference, Virgi- Economía das Corporacions Locais». Conselle-
nia Beach, pp. 396-400. ria de Economía e Facenda, Xunta de Galicia,
Santiago de Compostela, pp. 101-238.
JENKINS, O. (1999). «Understanding and measuring
tourist destination images». International Jour- ORTIGUEIRA SÁNCHEZ, M. (1998). «Marketing públi-
nal of Tourism Research, n.º 1, pp. 1-16. co: la imagen de Portugal en Argentina, Chile,
Colombia, México, Perú y Portugal». Revista do
JENKINS, O. (1999). «Undertanding and measuring Instituto Superior de Economia e Gestâo. Vol.
tourist destination images». International Jour- IV, (2), pp. 135-143.
nal of Tourism Research, n.º 1, pp. 1-15.
ORTIGUEIRA SÁNCHEZ, M. (1999a). «A imaxe de
KELLER, K. y AAKER, D. (1992). «The effects of Arxentina». Revista Galega de Economía, (8),
sequential introduction of brand extensions». n.º 1, pp. 141-163.
Journal of Marketing Research, February, (12),
pp. 35-49. ORTIGUEIRA SÁNCHEZ, M. (1999b). «La imagen de
Portugal en España». Revista de Economía, Con-
KOTLER, P.; HAIDER, D.H. y REIN, I. (1993). Marke- tabilidade e Finanças (JTCE), agosto-setembro,
ting Places. Free Press: New York. pp. 249 y ss.
LAWS, E. et al. (2002). «Synergies in Destination ORTIGUEIRA SÁNCHEZ, M. (1999c): «La imagen de
image management: A case Study and concep- un país y su gobierno: la imagen de Alemania».
tualisation». International Journal of Tourism Revista de Dirección, Organización y Adminis-
Research, n.º 4, pp. 39-55. tración de Empresas, Universidad Politécnica de
Madrid, CEPADE, (22), pp. 72-84.
MACINNIS, D.J. y PRICE, L.L. (1987): «The role of
imagery in information processing: review and ORTIGUEIRA SÁNCHEZ, M. (2000a). Marketing públi-
extension». Journal of Consumer Resarch, co: Imágenes de España y de otros países en un
n.º 13, pp. 473-491. marco internacional. Ed. Consellería de Econo-
mía e Facenda. Xunta de Galicia.
MAYO, E. (1973). «Regional images and regional
travel behavior». Proceedings of the Tourism ORTIGUEIRA SÁNCHEZ, M. (2000b): «La política
and Travel Research Association Conference, pública de Imagen: la imagen de Francia». Revis-
Sun Valley, Idaho, pp. 221-217. ta Europea de Dirección y Economía de la
Empresa, vol. 9, (2), pp. 167-192.
NARAYAMA, C.L. (1976): «The stability of percep-
tions». Journal of Advertising Research, n.º 16, ORTIGUEIRA SÁNCHEZ, M. y ORTIGUEIRA BOUZADA,
pp. 45-49. M. (2000): «Las políticas locales de imagen:
modelos y metodologías». Documento sin publi- RODRÍGUEZ DEL BOSQUE, I.A. (1995). «La comunica-
car. ción de la Imagen de la Empresa». Alta Direc-
ción, n.º 181, pp. 221-233.
ORTIGUEIRA BOUZADA, M. (1992). «Imaxe e prospe-
ridade urbana», Revista Galega de Economía (1), ROSS, G.F. (1993). «Ideal and actual images of back-
n.º 2, pp. 17-51. packer visitors to Northern Australia». Journal
of Travel Research, n.º 21 (3), pp. 69-76.
Pearce, P.L. (1988). The Ulysses Factor: Evaluating
Visitors in Tourist Settings. New York: Springer- SANZ DE LA TAJADA, L.A. (1994). Integración de la
Verlag. Identidad y la Imagen de la empresa. ESIC. Ed.
Madrid. España.
PERCE, P.L. (1982). «Perceived changes in holiday
destinations». Annals of Tourism Research, n.º 9, SHIFFMAN, L.G. y KANUK, L.L. (1983). Consumer
pp. 145-164. Behavior. Prentice-Hall, Englewood Cliffs, New
Jersey.
PHELPS, A. (1986). «Holiday destination image – the
problema of assessment». Tourism Management, VAN RIEL, C.B.M. (1997). Comunicación Corpora-
n.º 7, pp. 168-180. tiva. Prentice Hall International Ltd., Madrid.