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La violencia de Género: Una expresión de la

Violencia Cultural del Patriarcado

“La Violencia hacia la mujer no es natural”

Elaborado Por: Jessie Blanco1


INDICE

Introducción
Los Derechos de las Mujeres Venezolanas. Una Conquista.
¿Qué es la Violencia?
Definición de la Violencia de Género
La violencia de Género una expresión de la violencia social estructural
Patriarcado: Violencia Cultural:
Mecanismos de Naturalización de la Violencia :(legitimación, negación, minimización,
estigmatización)
Datos Estadísticos: ¿Sabías qué?

Causas de la VBG
Tipos de VBG
Consecuencias de la VBG
Mitos y prejuicios sobre la Violencia hacia las mujeres

Sobre el maltratador y la Víctima


Sobre lo privado y lo público
Ciclo de la Violencia hacia las mujeres
Ruta critica

¿A quién afecta?
¿Quiénes corren más riesgo?
¿Qué hacer?
Procedimientos legales y grupos de apoyo
Marco jurídico
Instrumentos Internacionales
Instrumentos Nacionales
Servicios de atención
Servicios de Salud
Líneas telefónicas
Albergues o casas de refugio
Grupos de autoayuda y servicios de asesoramiento
Servicios de asistencia jurídica

¿Cómo puede ayudar?


¿Dónde puede acudir?

Proceso de Denuncia
¿Quiénes pueden denunciar?
Órganos Receptores de denuncia
De las medidas de protección
Recomendaciones finales

1
Feminista. Psicóloga y socióloga. Docente de la Universidad Central de Venezuela Escuela de
sociología. Directora de la revista para el debate feminista Matea.
Referencias Bibliográfica

Introducción

Cuando hablamos de violencia en términos generales, nos imaginamos, hechos de


peleas, sangrientos, muertes o mujeres con un ojo morado, como muchas veces nos
lo muestra la televisión. Es decir, que solemos asociar la violencia a hechos físicos y
extremos, sin embargo existe un tipo de violencia que es la que permite que se de ésta
violencia física última, nos referimos a la violencia cultural de un sistema de
dominación patriarcal que unido a la violencia del sistema capitalista adopta formas
particulares de expresión, que hace que un tipo de violencia sea más valorizado y
reconocido que otros, que quedan generalmente negados e invisibilizados. Dentro de
esta violencia cultural y simbólica se encuentra la videncia basa en género (VBG).

La VBG es una manifestación de las relaciones de poder, por lo tanto no es solo


violencia física, sino que es un fenómeno complejo que tiene que ver con las
relaciones de poder desiguales históricas y culturalmente establecidas entre hombres
y mujeres. Esta violencia tiene su origen en pautas culturales, prácticas y
representaciones que construyen los cuerpos de una manera determinada inscribiendo
en ellos particulares significaciones sociales y culturales, es decir, la construcción
social de los cuerpos como realidades sexuadas.

En este sentido, entendemos el problema de la violencia como un problema no solo de


salud pública, y de derechos sino sobre todo un problema cultural. Por esta razón, la
búsqueda de salidas a esta problemática no se puede quedar solo en el terreno
asistencial sino que debe orientarse por un lado a la educación, formación,
prevención y por el otro, al acercamiento de las políticas sociales a los sectores más
desfavorecidos hacia aquéllos lugares donde les sea de más fácil acceso. Es
importante destacar que difícilmente las mujeres que se encuentran en situación de
violencia buscan ayuda, por la misma naturaleza del ciclo de la violencia (los temores,
la dificultad para denuncia y las continuas recaídas), por esta razón acercar el servicio
a través de la atención médica integral, así como de procesos de formación-
prevención sería de gran ayuda como una estrategia de atención y prevención de la
violencia de género.
El presente trabajo pretende dar cuenta de cómo la violencia simbólica y cultural
legítima los hechos de violencia física hacia las mujeres, ampliando el marco de su
definición y develando cómo las conquistas históricas de las mujeres en materia de
visibilizar la violencia de género como hechos punibles, obedece a luchas dentro de
contextos de gran injusticia y desigualdad social. Así como ilustrar las distintas formas
de manifestación de la VBG, ciclo, mitos, prejuicios y las formas de penalización de
cara a la última ley orgánica sobre el derecho de las mujeres a una vida libre de
violencia.

Los Derechos de las Mujeres Venezolanas. Una Conquista.

La situación de Venezuela en esta área, elevó el problema a un asunto de salud


pública y de derechos de las humanas. Como medida de acción en diciembre del año
2007 se promulgó la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre
de Violencia, considerada única en América Latina y reconocida por distintas
instituciones públicas y privadas como un importante avance en materia de Estado.
Esta Ley es producto del trabajo sistemático y perseverante de las mujeres
venezolanas y militante feministas que durante años venían trabajando con mujeres
víctimas y sobrevivientes de VBG. Esta nueva ley responde a la necesidad de crear
un marco jurídico mucho más amplio que el anterior: La ley sobre la violencia contra la
mujer y la familia de 1999 y que permitiera ampliar no solo los tipos de VBG, sino
también las condenas a los distintos tipos de delito.

La violencia hacia la mujer es un delito

La participación de las mujeres venezolanas en la lucha por sus derechos a nivel


histórico es lo que ha permitido que se visibilicen sus conquistas en los distintos
instrumentos jurídicos e instituciones del Estado destinadas a responder a sus
demandas, diferenciadas, en un marco de desigualdad social. Es por esto, que los
derechos de las humanas comprometen al Estado a desarrollar políticas públicas
especiales hacia las mujeres si pretende ser un Estado de Derecho y de Justicia, en
el cual para lograr su objetivo debe establecer políticas discriminatorias positivas hacia
las mujeres. Ya que ofertar las mimas políticas para hombres y mujeres en una
sociedad de desigualdad de género sería promover la injusticia social en nombre de la
igualdad formal. Es por esto que las feministas señalan que no existe Equidad de
género sin Justicia social.

Sin equidad de género no hay Justicia social

¿Qué es la Violencia?

Se define la violencia como el uso de la fuerza (verbal, física o psicológica) sobre el


cuerpo, la voluntad, el deseo y los afectos de otras personas. Se ejerce cuando una
persona más fuerte, o con mayor autoridad o poder, atenta contra los bienes, la
libertad, la salud y los derechos humanos de otras personas amenazándolas,
causándoles daño u obligándolas a realizar actividades en contra de su voluntad y sus
derechos. (Buvinic y cols. 1981 en Beltrán, 2006)

Según Baró (1999) existe una confusión sobre la definición de la violencia no solo en
el lenguaje cotidiano tan influenciado por los medios de comunicación sino inclusive en
los conceptos utilizados por los científicos sociales. Y esta se debe a la relación entre
los términos de violencia y agresión.

Según el DRAE (1970) la palabra violencia viene del latín “vis” que significa FUERZA.

Violento alude a “aquello que esta fuera de su natural estado, situación o modo. Que
obra con ímpetu y fuerza…lo que uno hace contra su gusto, por ciertos respetos y
consideraciones…que se ejecuta contra el modo regular o fuera de razón y justicia “
(p. 1345)
Agresión “acto de acometer a alguno para matarlo, herirlo o hacerle cualquier daño”
(p.37)

Mientras la agresividad incluye la intención de hacer daño, la violencia es solamente


un asunto de fuerza (Sau, 2001)

También conviene subrayar que en ambas definiciones se encuentra incorporado un


elemento valorativo. En ambos casos, la Real Academia pone de manifiesto el sentido
negativo de los actos y fenómenos expresados por los conceptos de violencia y
agresión (Baró, 1999).

Para Martín Baró (1999) desde su enfoque psicosocial de la violencia, todo acto de
violencia y de agresión va acompañado de su justificación, que expresa real o
distorsionadamente, su sentido social. Existen cuatro constitutivos de la violencia:

La estructura formal del acto


La ecuación personal, es decir aquellos elementos de la violencia que
dependen de quien la realice.
Un contexto posibilitador, tanto socio-cultural como material -inmediato y
Un fondo ideológico que los remite a ciertos intereses sociales.

La justificación social de la violencia depende de su agente, su victima, la situación


que se realice y el grado que se permite. Con todo, el elemento determinante de la
justificación reside en la relación del acto con los intereses sociales que propicia. Es
decir, que es una forma de instrumentalizar las relaciones de poder. El orden social
dominante define como violentos solo a aquellos actos que se le oponen, pero no los
actos de sus propias instituciones. En este contexto promueve y justifica mediante
modelos y refuerzos aquella violencia que redunda en beneficio de los intereses
dominantes. Sin embargo, la justificación clasista de la violencia genera su rechazo
por parte de quienes la padecen.

Definición de Violencia Basada en Género

Los estudios feministas pusieron en evidencia las diferentes formas de manifestación


de la violencia basada en él género al permitir identificarla y relacionarla con pautas
culturales y sociales diferenciadas para ambos sexos, en una sociedad dividida en
clases sociales, donde las diferencias se convierten en desigualdades. De este modo,
se evitó reducir la violencia a experiencias individuales y/o causales y se destacó su
carácter socio-cultural logrando facilitar la comprensión sobre cómo se articulan las
relaciones de poder, la violencia y los roles de género que conducen a la
discriminación y al abuso del poder.

En este sentido, Soledad Weinstein (1991) señala que la discriminación origina


relaciones de subordinación y de dominio, en las que la violencia constituye una forma
de ejercer poder que se expresa en la estructura social y se reproduce en la familia y
en otros subsistemas sociales. Refiere además, que la violencia estructural o
institucionalizada que se manifiesta en los sistemas políticos, económicos y sociales
se materializan en situaciones francamente discriminatorias reforzando así, las
condiciones sociales que implican violencia directa en toda la sociedad. Estas
relaciones discriminatorias se concretan también, mediante variadas modalidades
simbólicas de violencia en todos los ámbitos y esto es así, porque el paradigma de la
violencia simbólica es, como bien lo señala, Velásquez (2001) es precisamente el
género. (En Gamba, Beatriz, 2007).

Cuando hablamos de Género estamos entendiéndolo como una categoría de análisis


que surge para explicar cómo las diferencias entre hombres y mujeres se convierten
en desigualdades sociales y para develar los argumentos biologicistas que han
legitimado el discurso de dominio de los hombres sobre las mujeres y que se traduce
en prácticas sociales discriminatorias Un ejemplo de esto, es la idea proveniente de
los grandes filósofos griegos, específicamente de Aristóteles, para quien las mujeres
eran consideradas como un un hombre incompleto, receptor pasivo de la
procreación, incapaz de libertad y de gobernar porque una vez al mes les viene la
menstruación y eso las hace lunáticas, irracionales e inestables.

La problematización de las relaciones de género logró romper con la idea de su


carácter natural y develar como estos argumentos tenían como función perpetuar un
sistema hegemónico de dominación patriarcal y sexista.

El Género es un concepto revelador o desmitificador, que remite a los rasgos y


funciones psicológicas y socioculturales que se atribuye a cada uno de los sexos en
cada momento histórico y en cada sociedad. Las elaboraciones históricas sobre la
concepción diferencial de los sexos obedecen a un sistema de poder, con un discurso
hegemónico y da cuenta de la existencia de los conflictos sociales. La
problematización de las relaciones de género logró romper con la idea de su carácter
natural. Lo masculino o lo femenino no se refiere al sexo de los individuos sino a las
conductas consideradas femeninas o masculinas.

Según Marta Lamas (1999), aun cuando ya en 1949 aparece como explicación en el
Segundo sexo de Simone de Beauvoir, el término género solo comienza a circular en
las ciencias sociales y en el discurso feminista con un significado propio y diferente al
del sentido común, que lo asocia a tipo o especie, a partir de los años 70. Sin
embargo, es solo a finales de los 80 y comienzos de los 90 a partir del cual el
concepto adquiere consistencia y comienza a tener impacto en América Latina,
cuando las intelectuales feministas logran instalar en la academia y en las políticas
públicas la denominada “perspectiva de género”. En 1955 John Money propuso la
expresión “roles de género” para describir las conductas atribuidas a los varones y a
las mujeres, pero ha sido Robert Stoller quien estableció claramente las diferencias
entre sexo y género. Los sistemas de género se entienden como los conjuntos de
prácticas, símbolos, representaciones, normas y valores sociales que las sociedades
elaboran a partir de la diferencia sexual anatómico-fisiológica y que dan sentido a las
relaciones entre personas sexuadas (De Baribieri, 1992).

La violencia contra las mujeres incluye “todo acto de violencia por razón de género
que produce, o que puede generar, daño físico, sexual o psicológico o sufrimiento
a las mujeres, incluidas las amenazas de tales actos, la coerción o las privaciones
arbitrarias de la libertad, independientemente de si ocurren en instancias de la vida
pública o privada).

Declaración sobre Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Naciones


Unidas, 1993

La violencia hacia las mujeres ha sido denominada violencia de género o violencia


basada en género VBG y se refiere a la que éstas sufren por el hecho de ser
mujeres, como una expresión de las relaciones de poder entre hombres y
mujeres. Este tipo de violencia puede darse en el ámbito de la familia, el laboral,
comunitario, la escuela, la calle y en las instituciones. Contrario a lo esperado, es en
el hogar donde las mujeres están más inseguras y corren más riesgos de ser
violentadas por sus propias parejas.

La violencia de Género una expresión de la violencia social estructural

El punto de partida para analizar el fenómeno social de la violencia debe partir del
reconocimiento de su complejidad y su naturaleza multicausal. No sólo existen formas
de violencia, sino que los mismos hechos tienen diversos niveles de significación y
diversos efectos históricos. Por otra parte, existen múltiples perspectivas y formas de
concebirla desde las más totalizadoras hasta las más parciales y focalizadas. Lo
importante es señalar que pretender absolutizar alguna de estas perspectivas
constituye una forma de reduccionismo que puede verse sospechosamente como una
forma de justificar y legitimar algunos tipos de violencia. En nuestro caso la
perspectiva de género permite establecer un puente entre los análisis psicológicos, los
psico-sociales y los socio-culturales, en cuanto es concebida como una forma de
violencia social, que tiene sus expresiones tanto en el mundo privado
(tradicionalmente asociado a la mujer), como en el público (tradicionalmente asociado
al hombre). . Es imposible analizar la violencia real, la fenomenológica, sin atender a la
estructura-patriarcal que le sirve de origen y modelo.

La Violencia basada en género revela las relaciones del poder, que legitiman la
desigualdad y la subordinación social de las mujeres que han favorecido que éstas
se conviertan en las destinatarias de diversas violencias estructurales y coyunturales.

A nuestro modo de ver, toda violencia de género es violencia simbólica en tanto


implica relaciones de poder desiguales históricas y culturalmente establecidas entre
hombres y mujeres. Tiene su origen en pautas culturales, prácticas, estereotipos y
representaciones que construyen los cuerpos de una manera determinada,
inscribiendo en ellos unas significaciones culturales y sociales. Esta construcción
social del cuerpo por la cual atraviesa todo ejercicio de dominación simbólica, se da en
una interrelación entre aspectos como la etnia, el sexo, el lenguaje, la clase social y la
religión.

No es lo mismo la discriminación hacia una mujer blanca, de clase social


alta, que hacia las mujeres negras, indígenas, sexo-diversas y de clases
social baja que son triplemente discriminadas

Patriarcado: Violencia Cultural

Los debates sobre el patriarcado han tenido lugar en diferentes épocas históricas y
han sido retomados desde el siglo XX por el movimiento feminista de los años 60, en
la búsqueda de una explicación que diera cuenta la situación de opresión y
dominación de las mujeres para posibilitar su liberación. El Estado es uno de los
principales aparatos ideológicos que garantiza principalmente a través de la ley y la
economía la sujeción de las mujeres al padre, al marido y los varones en general,
impidiendo su constitución como sujetas políticas, a menos que existan cambios
producto de la presión social de los mismos movimientos de mujeres .

Entre las principales fuentes de subordinación o base de la opresión de las mujeres se


encuentra su capacidad reproductiva y la sexualidad. En la cual entra la
heterosexualidad obligatoria y dominada por el hombre y las articulaciones de poder
sexista en la sociedad moderna en general.

En términos generales, el patriarcado puede definirse como un sistema de


relaciones sociales sexopolíticas basadas en diferentes instituciones
públicas y privadas y en la solidaridad interclases e intragénero instaurada
por los varones , quienes como grupo social y en forma individual y colectiva
oprimen a las mujeres también en forma individual y colectiva, y se apropian
de su fuerza productiva y reproductiva, de sus cuerpos y sus productos, sea
con medios pacíficos o mediante el uso de la violencia.

Susana Beatriz Gamba (2007) “Diccionario de Estudios de género y


feminismos”

Mecanismos de Naturalización de la Violencia de Género

Mecanismos Ejemplos
Legitimación: Hacer valer como justo y Ella:
legal relaciones desiguales de género. “si me cela es porque me quiere
mucho” “
“mi hombre es mío de la puerta
pádentro, p´fuera es de la calle”
Negación o minimización: consiste en Ella dice:
un mecanismo psicológico defensivo “me pega lo normal”,
mediante el cual se invalida una parte de “ Soportar es el deber de la mujer”,
información desagradable o amenazante
para el sujeto/a. Para ello se niega en su
totalidad, se evita o se minimiza la
apreciación sobre la realidad.
Naturalización: es un fenómeno que “Criar a los hijos es asunto de
lleva a las personas a considerar sus mujeres”
acciones y sus creencias como naturales. “la mujeres son irracionales y los
Convirtiendo en natural los hechos hombres racionales”
sociales y culturales.
Estigmatización: proceso mediante el “las mujeres infieles son unas
cual se asigna un atributo a una persona prostitutas”
o una clase social por el cual se convierte
en objeto de discriminación y exclusión.
Sexismo: discriminación por razones de Cuando los hijos/as se enferman
sexo. Mecanismo por el que se concede es a la mamá a quien llaman.
el privilegio a un sexo en detrimento de Cuando se considera que la
otro. discriminación hacia las mujeres
es un mal menor.
Androcentrismo: concesión del privilegio Cuando se habla del género
al punto de vista del hombre, Tomar al humano y se hace creer que este
varón como modelo de lo humano y término incluye a las mujeres.
expresión de lo universal.
Machismo: Aquellos actos físicos o “El hombre es más fuerte que la
verbales, por medio de los cuales se mujer”
manifiesta de forma vulgar y poco “La culpa de que los hombres
apropiada el sexismo subyacente en la sean machistas la tienen las
estructura social. mujeres”
“El hombre necesita más sexo”

Ginopia: Imposibilidad de ver lo femenino “te vas a quedar para vestir


o de aceptar la existencia autónoma de santos” (casos de mujeres que
personas del sexo femenino. deciden estar sin parejas y no
quieren tener hijos)
Misoginia: Odio o desprecio a lo “Las mujeres no deben gobernar
femenino. un país porque son irracionales e
inestables emocionales”
Homofobia: odio o desprecio a los “la homosexualidad es una
homosexuales desviación sexual”

Lesbofobia: Odio o desprecio a las “las lesbianas odian a los


lesbianas. hombres”
Transfobia: Odio o desprecio a los “Los travestis son una plaga
transgéneros. social”

Datos Estadísticos: ¿Sabías qué?

La mitad de la población venezolana son mujeres.


Entre los mayores riesgos para la salud de las mujeres se encuentran las
asociadas a la salud sexual y reproductiva y al problema de la violencia
doméstica.
Las causas de la mortalidad femenina se encuentran asociadas a su condición
de madre, como los son las complicaciones del trabajo de parto,
complicaciones durante el embarazo, interrupciones del embarazo no deseado
y la dificultad para acceder a servicios públicos y apropiados.
Según cifras del Boletín 2005 elaborado por FUNDAMUJER, AVESA y el CEM-
UCV cada 10 días muere una mujer por violencia de género en Caracas.
Según cifras de la UNICEF, (1990) El 70% de las manifestaciones de violencia
ejercida contra la niña y adolescente tienen lugar en el interior de su hogar.
El servicio de Atención y Orientación Telefónica 0-800 mujeres atendió desde
enero hasta diciembre del 2005, 5.046 llamadas, de las cuales, el 70,95%
fueron por violencia familiar. Entre los principales estados que reportan mayor
cantidad de llamadas en el 2005 se encuentra Distrito Capital.
Las estadísticas de los servicios de atención de INAMUJER, CEM-UCV,
AVESA y PLAFAM coinciden en que el daño físico representa 60 a70% de los
casos, pero que lo acompaña un 100% de maltrato psicológico. Otro 30%
expresa violencia patrimonial o económica.
De aproximadamente 9 mil casos que reporta el CICPC sobre violencia
doméstica y sexual, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) solamente registra
alrededor de 1.500 procesos abiertos".
1 de cada 3 mujeres son maltratadas aunque sea una vez en su vida, según la
ONU a nivel mundial.
INAMUJER atendió en septiembre del 2007, 3.414 llamadas de denuncias de
víctimas de violencia psicológica, física y sexual primordialmente.
Según INAMUJER, el rango de edad en el que la mayoría de las mujeres son
maltratadas es de 20 a 44 años
El 71 % del maltrato proviene del esposo o concubino de la mujer agraviada,
según información del servicio de atención de INAMUJER, en lo que va de
2007.
Cifras del CEM e INAMUJER establecen una media de 5 años como promedio
de aguante para denunciar.
Según estudios de la ONU, un 80% de casos de maltrato y relaciones violentas
está desligado del consumo de alcohol o drogas.
En la violencia de género, la relación de víctimas es 95% mujeres y 5% de
hombres maltratados.
Según el servicio de atención de INAMUJER (0-800-mujeres), a un 68,8%
violencia física le acompaña un 100% de casos donde se evidencia violencia
psicológica.
Desde 1995 se han promulgado leyes “de primera generación” en la mayoría
de los países de América Latina para enfrentar la violencia contra las mujeres.
Según los últimos indicadores del informe del Estado de la Población Mundial
2008 las mujeres y las niñas constituyen las tres quintas partes de los mil
millones de personas más pobres del mundo, y las niñas son 70% de los 130
millones de infantes que no asisten a la escuela.
El 28 de octubre del presente año (2011), en el Marco del I taller sobre
“Evaluación del Sistema de Justicia de Género” promovido por El tribunal
Supremo de Justicia, la Fiscala General de la República Luida Ortega Díaz,
informó que de las 95.877 Denuncias recibidas en lo que va del año, el 60% ha
recibido respuesta. Estas cifras representan un incremento del 42%, lo que se
traduce en 39.989 casos más que el año pasado (2010), cuando el Ministerio
Público recibió 55.888 denuncias de violencia contra la mujer.

Según el Estudio a Fondo sobre todas la formas de violencia contra la mujer,


presentado por el Secretario General de Naciones Unidas ante la Asamblea
General en octubre de 2006, "en el ámbito mundial, las mujeres de entre
15 y 44 años tienen más probabilidades de sufrir mutilaciones o de
morir debido a la violencia masculina que por causas como el cáncer,
la malaria, los accidentes de tráfico o la guerra, combinadas". Afirma el
mismo estudio que "por lo menos una de cada tres mujeres ha sido
golpeada, obligada a tener relaciones sexuales o maltratadas de otro
modo a lo largo de su vida. Por lo general, el autor de la violencia es un
miembro de su propia familia o algún conocido.

Tipos de Violencia de Género

El primer instrumento jurídico de nuestro país que calificó la violencia hacia la mujer
como un delito fue la “ley sobre la violencia contra la mujer y la familia“,
promulgada en 1998, en la cual se incluía en la definición de violencia hacia la mujer,
la agresión hacia cualquier otro integrante de la familia, es decir, que se tenía una
visión familista2 sobre la mujer y por ello, se concebía la violencia hacia la mujer como
una violencia intrafamiliar. En dicha ley solo se tipificaban tres tipos de violencia (la
física, la psicológica y la sexual). Este instrumento jurídico de primera generación será
derogado en el año 2007 con la aparición de la “Ley Orgánica sobre el Derecho de
las Mujeres a una Vida Libre de Violencia”, producto (de una larga discusión y
debate entre las organizaciones de mujeres oficiales y privadas que luchan contra la

2
Por familista se alude al término familismo empleado por Alda Facio para referirse a una de las
manifestaciones del sexismos en la cual se identifica la mujer exclusivamente con la familia, excluyendo
e invisbilizando la identidad de la mujer como persona o sujeta plena de derechos
violencia de género) sobre su objeto, la tipificación de los delitos y sanciones, de cara
a la experiencia que se tuvo en la aplicación de la primera ley. Uno de los principales
cambios se relaciona al título de la ley, en esta última a diferencia de la primera, ya no
se va a tener una concepción familista y singular de la mujer asociada a su función
específicamente reproductora, sino que se va a concebir a la mujer en su carácter
identitario plural y diverso, así como desligada del ámbito exclusivamente
reproductivo. Esta ampliación de la noción de la violencia, primero intrafamiliar y
domestica y actualmente calificada de videncia contra las mujeres son expresiones,
en mayor o menos medida de la violencia basada en género (VBG).

En la última Ley aprobada se tipifican diecinueve (19) tipos de violencia a diferencia de


la ley anterior en la cual, solo se visibilizaban tres (3) tipos: la psicológica, la física y la
sexual. Si bien es cierto, que para efectos jurídicos y de penalización de la VBG es
importante esta clasificación, no debemos olvidar que la VBG obedece a raíces
culturales y por lo tanto no todas sus formas de expresión son jurídicamente
tipificadas. Como lo podemos notar en el caso de la violencia simbólica, que si bien
aparece como una forma de VBG, no aparece su correspondiente tipificación cono
delito, sencillamente porque alude a la forma de violencia estructural que sostiene el
sistema de violencia de género y cuyo gran enunciador es la cultura misma y no una
persona en especifico que pueda responder frente a la misma y la convierta en
sancionable.

Por otra parte, si nos quedamos en la reducción de la VBG a la violencia doméstica


estaríamos despolitizando su origen y simplificando el problema público de la violencia
a su espacio privado de reproducción.

En la tipología de la nueva Ley se consideran formas de violencia de género en


contra de las mujeres las siguientes:

“Si te quiere no te pega”

1. Violencia psicológica: Es toda conducta activa u omisiva ejercida en deshonra,


descrédito o menosprecio al valor o dignidad personal, tratos humillantes y vejatorios,
vigilancia constante, aislamiento, marginalización, negligencia, abandono, celotipia,
comparaciones destructivas, amenazas y actos que conllevan a las mujeres víctimas
de violencia a disminuir su autoestima, a perjudicar o perturbar su sano desarrollo, a la
depresión e incluso al suicidio.

Ejemplos:

Cuando el compañero, novio o esposo de la mujer le dice que para qué va a trabajar si
“ella no sabe hacer nada”.
Cuando en una relación de noviazgo el novio le pide a la novia que no se ponga
minifaldas.
Cuando el hombre le prohíbe a la mujer salir con amigas o amigos.

2. Acoso u hostigamiento: Es toda conducta abusiva y especialmente los


comportamientos, palabras, actos, gestos, escritos o mensajes electrónicos dirigidos a
perseguir, intimidar, chantajear, apremiar, importunar y vigilar a una mujer que pueda
atentar contra su estabilidad emocional, dignidad, prestigio, integridad física o
psíquica, o que puedan poner en peligro su empleo, promoción, reconocimiento en el
lugar de trabajo o fuera de él.

Ejemplos:

Cuando en una situación de noviazgo el hombre espera todos los días a la mujer a la
salida de su espacio laboral y la vigila permanentemente.

Cuando en una situación laboral el Jefe de la trabajadora le otorga más trabajo bajo el
chantaje de que si no lo hace la despediría.

3. Amenaza: Es el anuncio verbal o con actos de la ejecución de un daño físico,


psicológico, sexual, laboral o patrimonial con el fin de intimidar a la mujer, tanto en el
contexto doméstico como fuera de él.

Ejemplos:

Cuando en una situación de divorcio el hombre persigue a la mujer a su trabajo y le


envía sucesivos mensajes telefónicos amenazándola con quitarle a los hijos.

Cuando el hombre le daña los objetos personales a la mujer, destruye sus documentos
de identidad para prohibirle salir de su casa.

4. Violencia física: Es toda acción u omisión que directa o indirectamente está dirigida
a ocasionar un daño o sufrimiento físico a la mujer, tales como: Lesiones internas o
externas, heridas, hematomas, quemaduras, empujones o cualquier otro maltrato que
afecte su integridad física.
Ejemplos:

Cuando una mujer embarazada es empujada y golpeada por su pareja.


Cuando la mujer es víctima de tortura.
Cuando un hombre le pega a una mujer para que la complazca en sus apetitos
sexuales.

5. Violencia doméstica: Es toda conducta activa u omisiva, constante o no, de


empleo de fuerza física o violencia psicológica, intimidación, persecución o amenaza
contra la mujer por parte del cónyuge, el concubino, ex cónyuge, ex concubino,
persona con quien mantiene o mantuvo relación de afectividad, ascendientes,
descendientes, parientes colaterales, consanguíneos y afines.

Ejemplos:

Cuando una mujer es agredida en su propio hogar y por el marido.


Cuando una mujer es encerrada en su casa con sus hijos(as)
Cuando un hermano encierra a su hermana en su casa y no la deja salir.

6. Violencia sexual: Es toda conducta que amenace o vulnere el derecho de la mujer


a decidir voluntaria y libremente su sexualidad, comprendiendo ésta no sólo el acto
sexual, sino toda forma de contacto o acceso sexual, genital o no genital, tales como
actos lascivos, actos lascivos violentos, acceso carnal violento o la violación
propiamente dicha.

Ejemplos:

Cuando un hombre o varios hombres violan a una mujer.


Cuando el novio le pide a la novia una prueba de amor.
Cuando un hombre le roba un beso a una mujer sin su consentimiento.
Cuando se obliga a las mujeres a participar en videos pornográficos.
7. Acceso carnal violento: Es una forma de violencia sexual, en la cual el hombre
mediante violencias o amenazas, constriñe a la cónyuge, concubina, persona con
quien hace vida marital o mantenga unión estable de hecho o no, a un acto carnal por
vía vaginal, anal u oral, o introduzca objetos sea cual fuere su clase, por alguna de
estas vías.

Ejemplos:

Cuando el marido obliga a la mujer a tener relaciones sexuales con él bajo el


argumento del deber conyugal.
Cuando el hombre obliga a la mujer a incorporar prácticas sádico-masoquistas en las
relaciones sexuales.

8. Prostitución forzada: Se entiende por prostitución forzada la acción de obligar a


una mujer a realizar uno o más actos de naturaleza sexual por la fuerza o mediante la
amenaza de la fuerza, o mediante coacción como la causada por el temor a la
violencia, la intimidación, la opresión psicológica o el abuso del poder, esperando
obtener o haber obtenido ventajas o beneficios pecuniarios o de otro tipo, a cambio de
los actos de naturaleza sexual de la mujer.

Ejemplos:

Cuando un hombre dueño de prostíbulos obliga a las mujeres, en especial inmigrantes,


a prostituirse y saca beneficio económico de ellas, prohibiéndole el abandono de la
actividad bajo amenaza de deportación a su país o de incluso la muerte.

Cuando el hombre dueño del prostíbulos obliga a la mujer que ha prostituido a tener
relaciones sexuales con él bajo el argumento de “probar la mercancía”.

9. Esclavitud sexual: Se entiende por esclavitud sexual la privación ilegítima de


libertad de la mujer, para su venta, compra, préstamo o trueque con la obligación de
realizar uno o más actos de naturaleza sexual.

Ejemplos:

Cuando un hombre trafica con el cuerpo de la mujer convirtiéndola en mercancía y


objeto sexual y privándola de su libertad.
10. Acoso sexual: Es la solicitud de cualquier acto o comportamiento de contenido
sexual, para sí o para un tercero, o el procurar cualquier tipo de acercamiento sexual
no deseado que realice un hombre prevaliéndose de una situación de superioridad
laboral, docente o análoga, o con ocasión de relaciones derivadas del ejercicio
profesional, y con la amenaza expresa o tácita de causarle a la mujer un daño
relacionado con las legítimas expectativas que ésta pueda tener en el ámbito de dicha
relación.

Ejemplos:

Cuando un profesor aplica la llamada “operación colchón” con sus alumnas para
pasarles la materia cuando han aplazado.
Cuando un medico en su condición de poder tiene insinuaciones y prácticas sexuales
con las pacientes sin su consentimiento.

11. Violencia laboral: Es la discriminación hacia la mujer en los centros de trabajo:


públicos o privados que obstaculicen su acceso al empleo, ascenso o estabilidad en el
mismo, tales como exigir requisitos sobre el estado civil, la edad, la apariencia física o
buena presencia, o la solicitud de resultados de exámenes de laboratorios clínicos,
que supeditan la contratación, ascenso o la permanencia de la mujer en el empleo.
Constituye también discriminación de género en el ámbito laboral quebrantar el
derecho de igual salario por igual trabajo.

Ejemplos:

Cuando a una mujer en una entrevista para solicitar empleo le piden prueba de
embarazo como condicionante del contrato laboral o despidos por embarazo.
Cuando una empresa discrimina a las empleadas por razones de edad y apariencia
física dándoles prioridad a las jóvenes y atractivas para el mercado.
12. Violencia patrimonial y económica: Se considera violencia patrimonial y
económica toda conducta activa u omisiva que directa o indirectamente, en los
ámbitos público y privado, esté dirigida a ocasionar un daño a los bienes muebles o
inmuebles en menoscabo del patrimonio de las mujeres víctimas de violencia o a los
bienes comunes, así como la perturbación a la posesión o a la propiedad de sus
bienes, sustracción, destrucción, retención o distracción de objetos, documentos
personales, bienes y valores, derechos patrimoniales o recursos económicos
destinados a satisfacer sus necesidades; limitaciones económicas encaminadas a
controlar sus ingresos; o la privación de los medios económicos indispensables para
vivir.

Ejemplos:

Cuando a una mujer en situación de divorcio o separación el marido le confisca sus


pertenencias incluyendo papeles de identificación.
Cuando el hombre no le da la pensión dineraria correspondiente a los hijos(as) luego
de un proceso de divorcio.

13. Violencia obstétrica: Se entiende por violencia obstétrica la apropiación del


cuerpo y procesos reproductivos de las mujeres por personal de salud, que se expresa
en un trato deshumanizador, en un abuso de medicalización y patologización de los
procesos naturales, trayendo consigo pérdida de autonomía y capacidad de decidir
libremente sobre sus cuerpos y sexualidad, impactando negativamente en la calidad
de vida de las mujeres.
Ejemplos:

Cuando un médico o médica le da una nalgada a una parturienta y le dice ”que no grite
Que si acaso así gritaba cuando lo estaba haciendo”
Cuando se le niega a ala mujer que recién haya dado a luz tener acceso directo e
inmediato a su bebé.
Cuando se le impide el acceso a la habitación al padre del hijo(a) por nacer en los
centros hospitalarios.

14. Esterilización forzada: Se entiende por esterilización forzada, realizar o causar


intencionalmente a la mujer, sin brindarle la debida información, sin su consentimiento
voluntario e informado y sin que la misma haya tenido justificación, un tratamiento
médico o quirúrgico u otro acto que tenga como resultado su esterilización o la
privación de su capacidad biológica y reproductiva.

Ejemplos:

Cuando a una mujer es esterilizada sin su consentimiento o sin una debida información.
Procesos de esterilización masiva de mujeres sin previo consentimiento e información
de las mismas y en situación de condiciones de pobreza.

15. Violencia mediática: Se entiende por violencia mediática la exposición, a través


de cualquier medio de difusión, de la mujer, niña o adolescente, que de manera directa
o indirecta explote, discrimine, deshonre, humille o que atente contra su dignidad con
fines económicos, sociales o de dominación.

Ejemplos:

Cuando el cuerpo y la imagen de la mujer es explotado en la publicidad con fines


mercantiles.
Cuando se coloca a la mujer en lugares y roles discriminatorios con relación a los roles
en los que son ubicados los hombres.
Violencia en los medios de comunicación (lenguaje ofensivo, expresiones
estereotipadas, imágenes denigrantes en la publicidad o noticias, pornografía en
internet)

16. Violencia institucional: Son las acciones u omisiones que realizan las
autoridades, funcionarios y funcionarias, profesionales, personal y agentes
pertenecientes a cualquier órgano, ente o institución pública que tengan como fin
retardar, obstaculizar o impedir que las mujeres tengan acceso a las políticas públicas
y ejerzan los derechos previstos en esta Ley, para asegurarles una vida libre de
violencia.

Ejemplos:

Cuando a un órgano receptor de denuncias no atiende la denuncia de una mujer


violentada por no tener pruebas físicas en su cuerpo.
Cuando una mujer va a solicitar ser esterilizada a una institución de salud pública y le
piden el consentimiento de su marido para esterilizarla.
Cuando las adolescentes embarazadas son discriminadas en el sistema escolar y
de salud.
Negativa o tardanza en proveer servicios de salud sexual y reproductiva
a adolescentes, a mujeres solteras, o a lesbianas
Violencia contra mujeres encarceladas
17. Violencia simbólica: Son mensajes, valores, íconos, signos que transmitan y
reproducen relaciones de dominación, desigualdad y discriminación en las relaciones
sociales que se establecen entre las personas y naturalizan la subordinación de la
mujer en la sociedad.
Ejemplos:

Los mensajes sexistas predominantes en las canciones:


” ¿Cómo te atreves a mirarme así, a ser tan bella y encima sonreír? Mía hoy serás mía
por fin…Entrégate. Mi prisionera.” Entrégate de Luis Miguel.

Los mensajes discriminatorios en la socialización de género:


A ellos: “Los niños no lloran”, “¿para quién es ese pipícito?”
A ellas: “Cierra las piernas”, “Debes cuidar tus buenos modales”

Prácticas culturales violentas tales como: mutilación genital femenina, dote,


matrimonios por honor y preferencia por los hijos varones.

Violencia simbólica, ejercida a través de leyes que humillan o degradan a las mujeres o
que las muestran en una posición subordinada (por ejemplo, cuando los violadores o
abusadores sexuales pueden quedar exentos de castigo casándose u ofreciendo
casarse con la mujer violada, abusada, estuprada o raptada).

18. Tráfico de Mujeres, niñas y adolescentes: Son todos los actos que implican su
reclutamiento o transporte dentro o entre fronteras, empleando engaños, coerción o
fuerza, con el propósito de obtener un beneficio de tipo financiero u otro de orden
material de carácter ilícito.
Ejemplos:

Cuando a una mujer generalmente jóvenes inmigrantes de clases sociales bajas son
llevadas a otras ciudades bajo la promesa de mejores condiciones de vida y luego
son prostituidas y esclavizadas sexualmente.
Cuando las mujeres son utilizadas como “mulas” para transportar drogas
Cuando se dan Matrimonios arreglados y precoces

19. Trata de mujeres, niñas y adolescentes: Es la captación, el transporte, el


traslado, la acogida o la recepción de mujeres, niñas y adolescentes, recurriendo a la
amenaza o al uso de la fuerza o de otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al
engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o la concesión o
recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que
tenga autoridad sobre mujeres, niñas o adolescentes con fines de explotación, tales
como prostitución, explotación sexual, trabajos o servicios forzados, la esclavitud o
prácticas análogas a la esclavitud, la servidumbre o la extracción de órganos.

Ejemplos:

Cuando las mujeres jóvenes son secuestradas para vender sus órganos.
Cuando las niñas son compradas y usadas como mercancía de venta de un país a otro.

Causas de la Violencia de Género

Las causas de la violencia contra la mujer han sido investigadas desde diversas
perspectivas, entre ellas, el feminismo, la criminología, el desarrollo, los derechos
humanos, la salud pública y la sociología. De esas investigaciones empíricas y
teóricas han surgido diversas explicaciones. Si bien difieren en la importancia que
asignan a los distintos factores individuales y sociales en la explicación de la violencia
contra la mujer, todas ellas han llegado a la conclusión de que no hay una causa única
que explique adecuadamente la violencia contra la mujer. Dicha violencia proviene de
la convergencia de factores específicos en el contexto general de las desigualdades
de poder en los niveles individual, grupal, nacional y mundial.

Sin embargo y desde nuestro punto de vista, consideramos necesario


reconocer que la violencia contra la mujer es una forma de discriminación y, por
consiguiente, una violación de los derechos humanos. Y este punto de vista sirve
de entrada para comprender el contexto general del que surge dicha violencia, así
como los principales factores de riesgo relacionados. Dicha violencia es una
manifestación e las relaciones de poder históricamente desiguales entre las mujeres y
los hombres que se refleja en la vida pública y privada.

La violencia contra la mujer no está limitada a una cultura, una región o un país
determinados, o a determinados grupos de mujeres dentro de una sociedad. Sin
embargo, las distintas manifestaciones de dicha violencia y la experiencia personal
de las mujeres que la sufren están moldeadas por numerosos factores, entre ellos, la
condición económica, la raza, el origen étnico, la clase, la edad, la orientación sexual,
la identidad de género, la discapacidad, la nacionalidad, la religión y la cultura.

Consecuencias de la violencia de género

La violencia que se ejerce contar las mujeres tiene graves consecuencias:

1. Impide que las mujeres participen plenamente en sus comunidades en los


planos sociales o económicos. Las mujeres que son tomadas como blanco de
la violencia tienen menos probabilidades de tener empleo, tienden a estar
subempleadas en empleos de baja condición y no es probable que sean
promovidas. La violencia sexual erosiona la seguridad física en las esferas
públicas y el riesgo de dicha violencia puede aumentar cuando las mujeres
ingresan en la vida pública, limitando su voz política.
2. La violencia en la familia afecta a los niños/as por lo menos de tres maneras
principales: en su salud, en su rendimiento escolar y en el uso de la violencia
en sus propias vidas. Los niños que presencian la violencia pueden
manifestar un comportamiento más temeroso y antisocial.
3. Las consecuencias psicológicas de la violencia contra la mujer pueden ser tan
graves como los efectos físicos. La depresión es una de las consecuencias
más comunes de la violencia sexual y física contra la mujer. Las mujeres que
sufren violencia también corren un mayor riesgo de estrés y trastornos de
ansiedad, en particular los trastornos resultantes del estrés postraumático.
4. .La violencia contra la mujer puede provocar tanto lesiones físicas como
daños a la salud reproductiva de la mujer. Para las mujeres objeto de la trata,
las consecuencias más comunes para la salud son los dolores crónicos, la
malnutrición y la pérdida de peso no saludable.
5. La violencia hace que las mujeres corran un mayor riesgo de tener una mala
salud física y reproductiva169. Las mujeres que sufren tratos abusivos
también tienen un peor funcionamiento social y en materia de salud
mental170. Las mujeres sometidas a la violencia tienen mayor probabilidad de
abusar del alcohol y las drogas y de presentar disfunciones sexuales, intentos
de suicidio, estrés postraumático y trastornos del sistema nervioso central.
6. .La violencia contra la mujer frecuentemente produce la muerte. El
feminicidio, el suicidio, las muertes relacionadas con el SIDA y la mortalidad
materna pueden ser consecuencias fatales de la violencia contra la mujer.3

Mitos y prejuicios sobre la Violencia hacia las mujeres

Sobre el maltrato el agresor y la víctima

Mito Realidad
Las mujeres Maltratadas disfrutan esa El miedo a las represalias, la dependencia
situación, de lo contrario se separaríaneconómica y el temor a no ser
del maltratador o lo denunciarían escuchadas y tomadas en serio, son sólo
algunas razones de las mujeres
maltratadas para seguir en esa situación
Algunas mujeres merecen ser maltratadas Nada justifica la violencia. El maltrato no
tiene relación con el comportamiento de la
mujer

La mujer debe aguantar por el bien de los Nada justifica la violencia. El maltrato no
hijos(as) tiene relación con el comportamiento de la
mujer
La mujer también maltrata al hombre En una proporción insignificante. Las
mujeres reciben maltrato severo y
continuo en la gran mayoría de los casos
de violencia en la pareja.

El maltratador es un enfermo mental El maltratador es una persona normal que


no quiere controlar su agresividad y que
cree que su rol en la pareja es dirigir,
disciplinar, ser obedecido.

una persona que no reacciona de manera


violenta ante los demás sino con su
pareja, incluso suele ser agradable y
amable entre sus conocidos
El hombre maltrata cuando se El maltratador también es violento cuando
emborracha y entonces no sabe lo que está sobrio y la mitad de los agresores no
hace bebe.
El 80% del maltrato no se relaciona con el
consumo de alcohol o drogas.

El maltratador es incapaz de mostrar Luego de la agresión, el maltratador se


amor arrepiente y promete que no volverá a
suceder, se comporta amoroso por un
buen tiempo dando nuevas esperanzas a
la mujer

3
Consecuencias extraídas del Estudio a fondo sobre todas las formas de violencia contra la mujer de las
Naciones Unidas de julio del 2006.
La violencia doméstica es una pérdida de Tanto no es así que los hombres
control momentánea maltratan a las mujeres en partes del
cuerpo donde se noten menos las huellas

La violencia doméstica solo se da en El maltrato se ubica en todos los estratos


clases sociales bajas socioeconómicos, se ve en altos niveles
de formación educativa, en familias de
profesionales que en apariencia son
felices y estables.

En la mayoría de los casos, la mujer La VBG es un problema arraigado en lo


puede sentir que es culpable de generar sociocultural. Se centra en las relaciones
la ira en un maltratador. de poder y los roles estereotipados que
nos inculcan desde temprana edad, como
por ejemplo que nos crían para ser
pasivas y pacientes, mientras que los
hombres deben ser fuertes

Sobre lo privado y lo público

Mito Realidad
La violencia hacia la mujer es un La violencia hacia la mujer es un
problema de pareja y uno no se debe problema público de salud y de derecho
meter de las humanas del cual somos
“Los trapos sucios se lavan en casa” corresponsables todos/as
Las mujeres están solas Existen redes e instituciones
gubernamentales y no gubernamentales
que brindan apoyo y asistencia a las
mujeres víctimas del maltrato
CICLO DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO

PRIMERA SEGUNDA
FASE FASE
SEGUNDA FASE
ACUM
PRIMERA FASE EPISODIOEPISODIO
AGUDO
PRIMERA
ACUMULACIÒN DE
TENSIÓN
EXPLOSIÒNAGUDO DE
VIOLENCIA
FASE EXPLOSIÒN
ACUMULACI DE
ÒN DE VIOLENCIA
TENSIÓN
PRIMERA
FASE
ACUMULACI TERCERA FASE
LUNA DE MIEL
ÒN DE TERCERA FASE
TENSIÓN LUNA DE MIEL
UL PRIMERA
FASE
ACUMULACI
La violencia hacia la mujer presenta tres características fundamentales:
ÒNcaracterísticos
Tiempos DE en períodos que se van repitiendo
TENSIÓN
Creciente intensidad en los episodios de violencia
PRIMERA
Las etapas del ciclo, son cada vez más cortas
. FASE
ACUMULACI
Los diferentes episodios de violencia se dan en forma cíclica y en diferentes etapas.
Mas allá de ÒNqueDE estos períodos no se den siempre con la misma frecuencia y

TENSIÓN
regularidad, en general, la distancia entre las diferentes etapas de este ciclo tiende a

ACIÒN DE
acortarse. Es decir, cada vez los períodos de equilibrio en la pareja, son más cortos y
la
TENSIÓNviolencia física más frecuente.
Este proceso es conocido como “ciclo de la violencia” y consta de las siguientes
etapas:

1. Acumulación de Tensión: En esta primera etapa la violencia es sutil y


mayormente es a través de agresión verbal y psicológica. Esta situación
produce en las mujeres graves efectos. Como respuesta, las mujeres tratan de
calmar a su compañero y encubrir la situación, justificando su conducta por
causas externas, como ser la falta de trabajo, el alcohol, etc. Consideran que
cuando estas situaciones sean superadas los episodios violentos cesarán.
La mujer que vive esta situación, espera inútilmente que su pareja cambie y
generalmente se culpabiliza por lo sucedido.
Estos episodios comienzan a ocurrir cada vez más frecuentemente. La
situación se va volviendo insostenible y la mujer vive en un clima de miedo
constante.
2. Etapa: “Episodio agudo de la violencia”: La tensión y agresión que
comenzó en la etapa anterior, llega a su punto máximo y varía en la gravedad
de los episodios, que pueden ir desde un empujón hasta golpes, amenazas y
situaciones realmente graves. Esta etapa no es predecible y tampoco
controlable. La mujer será agredida haga lo que haga. Esta situación produce
parálisis y miedo. Frente a esta situación las mujeres despliegan diferentes
estrategias para demorar el golpe, como por ejemplo obedecer en todo a su
marido. Muchas mujeres intentan encontrar un camino alternativo, contando los
episodios a familiares y amigos o hacer una denuncia.
3. Etapa: “Luna de Miel”: Esta etapa se caracteriza por un comportamiento
afectuoso por parte del hombre. Se muestra arrepentido y teme que la mujer lo
abandone o tome alguna otra decisión como contarlo o denunciarlo. A los fines
de que la mujer olvide y perdone lo sucedido utilizará diferentes estrategias
para gratificarla.
Frente a esta situación, la mujer cree que las etapas anteriores pueden ser
superadas y que no volverán a suceder, idealizando la relación. Durante esta
etapa es más difícil que la relación termine.
La violencia familiar no es un episodio casual que sucede una sola vez en el
hogar. Los episodios de violencia suceden con etapas determinadas que
provocan un gran deterioro mental, físico y sexual de los integrantes de la
familia.
Muchas de las mujeres que atraviesan por situaciones de violencia conyugal,
recuerdan que desde el noviazgo atravesaron episodios que los pasaban por
alto y no les permitieron darse cuenta de las situaciones que vivirían después.
Algunas situaciones que dejan ver una personalidad violenta:
Amenazas: “no puedo vivir sin ti, si no nos casamos me suicido o te mato”
Sentimientos de culpa o lástima, o de estar acorralada.
Amenaza con abandonarla si no cumple con sus deseos.
Es poco sociable, se aísla, se ofende.
Es seductor con todos pero a ella la trata con crueldad.
Decide por su cuenta, sin consultar o pedir opinión.
Piensa que las mujeres son inferiores, y deben obedecer a los hombres.
Se irrita y tiene estallidos.
Descalifica, desvaloriza la palabra, ideas y acciones de su pareja.
Obliga a la novia a realizar cosas que ella no desea hacer.
Acusa a su novia de vestirse o maquillarse provocativamente.
Acusa a su novia de estar, salir o coquetear con otros hombres. (Publicado
por Pan y Rosas La Pampa)
RUTA CRÍTICA

Son las secuencias de decisiones tomadas y acciones ejecutadas por las


mujeres afectadas por la violencia de género y las respuestas encontradas
en las búsquedas de soluciones.

El inicio de la ruta crítica es ROMPER EL SILENCIO

Organización Panamericana de la Salud; (2000) Washington,


D.C.,

. Factores
Impulsores

Factores de
Respuestas

Decisiones
ejecutadas y
acciones
emprendidas
FACTORES IMPULSORES

Son todos aquellos que motivan a las mujeres a buscar soluciones para su
problema de Violencia
INTERNOS EXTERNOS
Convencimiento de que el agresor La violencia misma ejercida
no va a cambiar contra ellas
Convencimiento de que los La violencia contra hijos e hijas
recursos personales se han Apoyo social
agotados Condiciones materiales y
Enojo y desamor económicas favorables
Saturación Información precisa y servicios
Ponerse metas y proyectos de calidad
propios

Los factores internos están asociados a procesos personales, sentimientos,


representaciones sociales y razonamientos de las mujeres. Y los externos se
relacionan con las influencias que reciben las mujeres de su medio exterior, tales
como apoyo, recursos materiales, información, existencia y calidad de los servicios,
aumento de la violencia o efectos de la violencia en otras personas de la familia.

FACTORES INHIBIDORES
Son todos aquellos elementos que actúan negativamente sobre la decisión de
iniciar o continuar una ruta critica para salir de la situación de Violencia

INTERNOS EXTERNOS
Miedo, culpa Presiones familiares y sociales
Vergüenza Inseguridad económica
Amor por el agresor Actitudes negativas de los
Idea de que lo familiar es privado prestatarios de servicios

Manipulación del agresor y Limitada cobertura de las OG y


dinámicas del ciclo de violencia ONG

Desconocimiento de sus derechos Contextos sociales con


y falta de información historias de violencia
Los factores que mantienen a una mujer, aparentemente inmovilizada, en situación de
violencia, son múltiples. Entre los internos se encuentra el miedo al agresor y a la
violencia ejercida por éste. Estos factores suelen ser los obstáculos más importantes
para impedir que la mujer inicie su ruta crítica. Y en cuanto a los externos, se
encuentran principalmente, la presión por parte de los hijos, hijas, madres y personas
cercanas en general.

Para ayudar a las mujeres a salir del ciclo de la violencia de género es importante
tomar en cuenta la ruta crítica por la cual deben pasar para salir de ella y entender
que las mujeres no salen del ciclo no porque no quieren sino porque no pueden,
para salir de este ciclo hace falta apoyo social, una escucha sin juicio y no
culpabilizarlas.

¿A quién afecta la Violencia de Género?

La violencia basada en género, específicamente contra las mujeres, afecta a todas las
mujeres en general. Sin embargo, no las afecta a todas por igual, su consecuencias y
la gravedad de las mismas va a depender de las variables de clase, etnia, identidad
de género, religión. No es lo mismo la discriminación que se ejerce contra una mujer
blanca de clase social alta, que la que se ejerce contra las mujeres de clases social
baja o las indígenas, las afrodesecendientes y las transgénero.

Nos afecta a todas. Pero no de igual manera


Ocurre en todas las clases sociales, en las que tienen dinero y las que
no lo tienen, en las profesionales y las que no lo son.
Las más afectadas son las indígenas, las negras y las pertenecientes a
clases sociales de escasos recursos.
No es un asunto privado entre marido y mujer, es un gran problema
social de violación de los derechos humanos
¿Quiénes corren más riesgo?

Según el estudio a fondo de todas las formas de violencia hacia las mujeres de la
Asamblea General de la ONU (2006) existen factores que pueden incrementar el
riesgo de violencia contra la mujer. Entre estos factores de riesgo, en términos
generales, se encuentran:
La condición social y económica,
Las historias individuales de exposición a la violencia y
Los tipos individuales de comportamiento.

a) A nivel del individuo: ser joven; tener una historia de abusos durante la infancia,
haber presenciado escenas de violencia conyugal en el hogar; usar frecuentemente
alcohol y drogas; ser de baja condición educacional o económica e integrar una
comunidad marginada o excluida. Estos factores están asociados tanto con los
culpables como con las víctimas/sobrevivientes de la violencia.

b) A nivel de la pareja y la familia: el control masculino de la riqueza y la autoridad


para adoptar decisiones dentro de la familia; una historia de conflictos conyugales, y la
existencia de importantes disparidades interpersonales en materia de condición
económica, educacional o de empleo.

c) A nivel de la comunidad: el aislamiento de las mujeres y la falta de apoyo social;


las actitudes comunitarias que toleren y legitimen la violencia masculina, y la
existencia de niveles elevados de carencia de empoderamiento social y económico, en
particular la pobreza.

d) A nivel de la sociedad: roles de género que legitiman la dominación masculina y la


subordinación femenina, y la tolerancia de la violencia como medio de resolución de
conflictos.

e) A nivel del Estado: la inadecuación de las leyes y políticas de prevención y castigo


de la violencia y el bajo nivel de conciencia y sensibilidad de los agentes de la ley, los
tribunales y los encargados de la prestación de los servicios sociales.

La violencia es mayor en las relaciones y las comunidades en


las que el uso de la violencia en numerosas situaciones es normativa, en particular
cuando se ha presenciado en la infancia, es sustancialmente un producto de la
desigualdad de género y la condición inferior de las mujeres en comparación con
los hombres en la sociedad.
Las más afectadas…

Mujeres indígenas
Trabajadoras sexuales
Migrantes o refugiadas
Con discapacidad
Niñas o ancianas
En situación de conflicto armado

¿Qué hacer?

Procedimientos legales y grupos de apoyo

El afrontamiento del problema al igual que sus causas es multifactorial y multivariado.


Va desde la formulación de marcos normativos su aplicación y difusión, el diseño de
políticas y programas para la atención y prevención, así como las intervenciones
sistemáticas, coherentes y permanentes de educación y socialización; hasta, la
intervención psicológica, social y jurídica de las mujeres víctimas de violencia.

El feminismo contribuyó a visibilizar la VBG como un problema que trasciende la


esfera privada del hogar y que constituye un problema social, de orden publico de
competencia de los tribunales, que exige la formulación de políticas públicas y
programas para su atención y prevención.

En los últimos diez años ha habido importantes avances en la visibilización y


afrontamiento del problema. Desde el contexto de reuniones y acuerdos
internacionales se ha exhortado a los gobiernos a asumir la VBG como un problema
que les atañe, pues constituye una violación de los derechos humanos y un problema
social y de salud pública que tiene un impacto económico importante.

Según el estudio a fondo de todas las formas de violencia hacia las mujeres de la
Asamblea General de la ONU (2006) las medidas adoptadas para prevenir la violencia
contra la mujer, investigar y enjuiciar los actos de violencia y castigar a los infractores
y establecer recursos son puntos de referencia mediante los cuales los Estados, las
organizaciones de mujeres y los promotores de la causa de la mujer y los mecanismos
de derechos humanos pueden evaluar las leyes, programas y políticas nacionales y
determinar si cumplen con las obligaciones internacionales.

Los Estados tienen el deber general de promover la igualdad de hecho entre las
mujeres y los hombres y elaborar y aplicar efectivamente un marco de normas
jurídicas y de políticas para proteger y promover plenamente los derechos humanos de
las mujeres. Ello es particularmente importante en los lugares en que las mujeres
pueden correr un mayor riesgo de violencia debido a los obstáculos que les impiden
gozar de derechos tales como los derechos a la vivienda, la educación o el empleo. La
obligación de los Estados no se limita a reaccionar ante los actos de violencia contra la
mujer, sino que también comprende el descubrimiento de las pautas de desigualdad
que pueden desembocar en actos de violencia y la adopción de medidas para
corregirlas.

Esto se ha traducido en la elaboración y/o ajustes de marcos nacionales legales y en


el diseño de políticas y estrategias para abordar la situación.

En el ámbito educativo y cultural, la tarea apunta hacia la reconstrucción de las


asignaciones y roles de género tradicionales que legitiman la violencia hacia la mujer y
la promoción de una educación no sexista que permita promover relaciones para la
equidad.

En el área de atención resulta fundamental incluir a las dos personas involucradas: la


mujer y el hombre. Aunque ha prevalecido la atención exclusiva de la mujer como
víctima sin considerarse a los hombres agresores dentro de la política de intervención
psico-social.

En cuanto a los grupos de apoyo: La unidad de Genero y Salud de la OPS ha


desarrollado un modelo integral para abordar la violencia contra las mujeres, el cual ha
sido implementado en 10 países de las Américas y que incluye la construcción de
redes comunitarias para la provisión de atención y apoyo a las victimas de violencia y,
la promoción de relaciones no-violentas.

Los grupos de apoyo para sobrevivientes de violencia representan una técnica muy
utilizada por los movimientos de mujeres a nivel internacional. Una de las ventajas es
que permite atender mucho mas personas de las que se puede atender en la clínica
individual .Por otra parte, la facilitadora de los grupos de apoyo no tiene que ser
necesariamente profesional en el área de salud mental, pero si haber sido entrenada
para el manejo de grupos. Otra ventaja es que brindan a las mujeres la oportunidad de
ayudarse entre si, de darse cuenta que no son las únicas que sufren violencia y
desarrollar lazos de solidaridad y de acciones colectivas para la superación de la
situación de violencia así como para el apoyo a otras compañeras.

Marco Jurídico

La aceptación de la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de


Discriminación contra la Mujer, su Protocolo Facultativo y otros tratados
internacionales pertinentes sobre derechos humanos constituyen medidas
encaminadas a hacer frente a la violencia contra la mujer. Análogamente, la inclusión
del principio de la igualdad de los hombres y las mujeres en las constituciones
nacionales o normas análogas, en consonancia con los estándares internacionales,
perfecciona el conjunto de medidas encaminadas a hacer frente a la violencia contra la
mujer. Los planes de acción nacionales para proteger a las mujeres contra la violencia
y mejorar la promoción y protección de los derechos humanos de las mujeres forman
parte de las medidas de cumplimiento. Los Estados también están obligados a asignar
recursos presupuestarios suficientes para hacer frente a la violencia contra la mujer.

Instrumentos Internacionales

Convención sobre al eliminación de todas las formas de discriminación contar


la mujer (CEDAW, 1979)
Protocolo facultativo de la Convención para la eliminación de todas las formas
de discriminación contar la mujer
Convención interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia
contra la mujer: “Convención de Belem do Para “

Instrumentos Nacionales

Constitución de la republica Bolivariana de Venezuela (1999)


Ley de Igualdad de Oportunidades para la Mujer (1993)
Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una vida libre de
Violencia(2007)
Servicios de atención

En todo el mundo las mujeres sufren los efectos físicos, emocionales y psicológicos de
la violencia. También tienen que hacer frente a las consecuencias económicas y
sociales que afectan a sus vidas y sus relaciones, así como a su productividad y sus
logros en materia de educación y empleo. Las víctimas/sobrevivientes de la violencia
contra la mujer necesitan un acceso oportuno a los servicios de atención de la salud y
los servicios de apoyo que dan una respuesta en el corto plazo a las lesiones, las
protegen contra nuevas infracciones y atienden las necesidades de largo plazo. Sin
embargo, muchas de ellas no obtienen la ayuda que necesitan, porque los servicios de
apoyo son muy escasos, porque no tienen acceso a los servicios o no conocen su
existencia.

Los servicios de apoyo son prestados por diversos actores, por lo común por
organismos estatales y organizaciones no gubernamentales. También pueden prestar
apoyo las comunidades, los empleadores, los profesionales privados y los particulares.
El apoyo a las víctimas/sobrevivientes requiere que el Estado otorgue financiamiento y
se beneficia con la coordinación con las iniciativas de las organizaciones no
gubernamentales. Requiere actividades de formación y fortalecimiento de las
capacidades en los distintos organismos estatales, como los de salud, ejecución de la
ley, justicia, asistencia social y educación.

Servicios de salud

El sistema de atención de la salud es frecuentemente el primer servicio que tiene


contacto con las mujeres víctimas de la violencia. Es una buena práctica que el
sistema de salud ofrezca diversas intervenciones para apoyar a las víctimas y
garantizar que no sean sometidas a una violencia adicional en los hospitales y los
establecimientos de atención de la salud. Algunos ejemplos de prácticas promisorias
en esta esfera son los protocolos de capacitación para los profesionales de la salud; la
incorporación de los centros de servicios para las víctimas dentro del sistema de
atención de la salud, y el establecimiento de sistemas de remisión que interconecten a
los distintos sectores pertinentes, como los servicios de atención de la salud,
asesoramiento y vivienda, los organismos encargados de hacer cumplir la ley y los
programas para los infractores.
Líneas telefónicas directas y de ayuda

Las líneas telefónicas directas y de ayuda brindan un valioso acceso a los sistemas de
información y apoyo para las víctimas de la violencia contra la mujer y
constituyen una buena práctica. Actualmente se considera que esas líneas de
asesoramiento son un componente estándar de los servicios en numerosos países.
Como muchas mujeres vacilan en buscar ayuda, las líneas de asesoramiento tienen
que preservar la privacidad y la confidencialidad de sus clientes y brindar información
gratuitamente. Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación amplían el
potencial de dichas líneas de asesoramiento para prestar servicios en lugares
anteriormente desprovistos y en distintos idiomas.. El funcionamiento durante las 24
horas del día de por lo menos una línea telefónica nacional de emergencia que brinde
información, promoción, apoyo y asesoramiento para las crisis constituye una buena
práctica. Es vital que existan métodos adecuados a las condiciones locales para
difundir información acerca de la línea de asesoramiento y asegurar que se cuente con
recursos para que funcione.

En nuestro país existe la línea telefónica gratuita

0-800-6853737 o 0800-mujeres.

Albergues o Casas de refugio

Los primeros albergues fueron establecidos por organizaciones femeninas para


satisfacer la necesidad de las mujeres de obtener de inmediato protección y atención
al huir de situaciones de abuso. Con la evolución han llegado a ser mucho más que
“casas de seguridad” y actualmente suelen prestar diversos servicios. Es una buena
práctica garantizar que las mujeres tengan acceso a albergues que cumplan las
normas de seguridad necesarias para protegerlas junto a sus hijos e hijas de nuevas
situaciones de violencia pongan en riesgo sus vidas.
En nuestro país existen actualmente dos casas de refugio que atienden a
mujeres víctimas de violencia
y a sus hijos e hijas
Grupos de autoayuda y servicios de asesoramiento

Los grupos de autoayuda y servicios de asesoramiento son promisorios, pues


prestan apoyo a las mujeres respetando su autonomía y alentando su independencia
en la toma de decisión. El asesoramiento está a cargo de profesionales que trabajan
con las víctimas/ sobrevivientes, y también son grupos de víctimas/sobrevivientes que
se prestan apoyo mutuo.

Servicios de asistencia jurídica

Es frecuente que las mujeres víctimas/sobrevivientes de la violencia necesiten


servicios de asistencia jurídica para diversas cuestiones, tales como divorcio, guarda
de los hijos, pensiones alimenticias, acuerdos de separación de bienes, vivienda,
empleo y juicios civiles. Es una práctica promisoria que existan estos servicios, en
particular los de asesoramiento y asistencia letrada gratuitos para mujeres indigentes.
Los servicios de asistencia jurídica pueden ser prestados como parte de un modelo
integrado de apoyo o por centros de asistencia jurídica, y de servicios jurídicos
comunitarios. Por lo común los servicios de asistencia jurídica a las víctimas de la
violencia contra la mujer son prestados por organizaciones no gubernamentales
aunque debería ser promovido por el Estado y las organizaciones gubernamentales de
mujeres.

¿Cómo puedes ayudar?

• Creer lo que ella le dice.


• Animarla a hablar sobre el abuso, pero SIN PRESIONARLA
• Respetar la confidencialidad.
• Escucharla. Apoya sus sentimientos sin juzgarla.
• Hacerle saber que no está sola, y que muchas mujeres son víctimas del
abuso doméstico
• Acompañarla en el proceso de denuncia si así lo decide

Algunos consejos que pueden ser dañinos o peligrosos:

• No le digas que regrese para ponerle un poquito más de esfuerzo.


• No se ofrezcas para tratar de hablar con el esposo y arreglar las
cosas.
• No le digas lo que debe hacer, o cuándo debe salirse o no salirse de
su situación.
• No le digas que ella debe permanecer a causa de los niños.
¿Dónde puedes acudir?

.
• Llamar a la línea nacional telefónica gratuita
0-800-6853737 o 0800-mujeres.

• Cualquier jefatura civil

• INAMUJER esquina Jesuita, torre Bandagro piso 1.2 y 3.Parroquia


Altagracia. Caracas. Tlf. 8608210/82-11

• Fiscalía General de la República. Oficina de atención a los Derechos de la


mujer. Piso 5.La candelaria. Telf. 505-33-73

• Defensoría nacional de la mujer: Telf. 806-82-10 al 14.

• Defensoría del Pueblo con competencia nacional de los derechos de las


mujeres. Av. México, Pza. Morelos. Edif. Defensoría del pueblo, piso 8 al
lado de la escuela experimental. Telf. 0212-5053104.

• Defensoría especial con competencia nacional sobre derechos de la mujer/


defensoría del pueblo

• Unidad de atención a la víctima de la fiscalía:


• Telf. 0-800-fiscal-0 (0-800-3472200).

• PLAFAM: Sede las Acacias. Calle Minerva, 5 mts. De la UCV, paralelo a la


Av. Victoria, Qta .Plafam.
Telf.- 0212- 693-50-46

• CEM-UCV: Centro Comercial Los Chaguaramos piso 10 ofic.10-1


Telf., 0212-334-54-56 y 0212-6933286

• AVESA: Av. Anauco con calle Roraima .Qta. Avesa. San Bernardino.
Telf. 0212-551-02-12 /8081 y 0212-5516854

Proceso de Denuncia
Es el recorrido que hace la mujer sobreviviente de violencia desde que emite la
denuncia ante un órgano receptor de denuncia (ORD) hasta que se abre el proceso
de investigación para establecer el juicio respectivo que tuviere lugar para la
penalización del delito.
Cabe señalar que si bien es cierto que el proceso de denuncia ha sido muy
cuestionado producto de la impunidad y la praxis inadecuada en los procesos de
recepción de la denuncia y del trato o la reedición del maltrato por los organismos
competentes. Solo en la medida en que se generen precedentes en los logros del
combate de la impunidad y en el ejercicio de la contraloría jurídica y presión para
combatirla, no se podrá avanzar y afianzar los instrumentos jurídicos que protegen los
derechos de las mujeres y que han sido producto de la conquista de sus largas luchas

De la Denuncia
Legitimación para denunciar
Artículo 70.-
Los delitos a que se refiere esta Ley podrán ser denunciados por:
• La mujer agredida.
• Los parientes consanguíneos o afines.
• El personal de la salud de instituciones públicas y privadas que tuviere
conocimiento de los casos de violencia previstos en esta Ley.
• Las defensorías de los derechos de la mujer a nivel nacional,
metropolitano, estadal y municipal, adscritas a los institutos nacionales,
metropolitanos, regionales y municipales, respectivamente.
• Los Consejos Comunales y otras organizaciones sociales.
• Las organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres.
• Cualquier otra persona o institución que tuviere conocimiento de los hechos
punibles previstos en esta Ley.

Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una vida libre de


Violencia (2007)

Órganos receptores De Denuncia


Son todos aquellos entes encargados de recibir la denuncia y ordenar las diligencias
necesarias para su procesamiento ante el Ministerio público. Entres sus funciones se
encuentran: Recibir la denuncia, impartir orientación oportuna a las mujeres que
denuncian, ordenar la comparecencia obligatoria del presunto agresor a los fines de la
declaración correspondiente, imponer las medidas de protección necesarias y formar
el respectivo expediente y remitirlo al Ministerio publico.
Juzgados de Paz.
Prefecturas y jefaturas civiles.
División de Protección en materia de niño, niña, adolescente,
mujer y familia del cuerpo de investigación con competencia en la
materia.
Órganos de policía.
Unidades de comando fronterizas.
Tribunales de municipios en localidades donde no existan los
órganos anteriormente nombrados.
Cualquier otro que se le atribuya esta competencia
Ministerio Público.
Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una vida libre de
Violencia (2007)

De las medidas de protección y seguridad


Las medidas de protección y seguridad son aquellas ejecutadas, de manera
inmediata, por los ORD que tienen una función preventiva para proteger a la mujer
agredida en su integridad y evitar nuevos actos de violencia (Ver Art. 87, LODMVLV)

Entre ellas se encuentran:


1. Referir a las mujeres agredidas que así lo requieran, a los centros
especializados para que reciban la respectiva orientación y atención.
2. Tramitar el ingreso de las mujeres víctimas de violencia, así como de sus hijos
e hijas que requieran protección a las casas de abrigo.
3. Ordenar la salida del presunto agresor de la residencia común,
independientemente de su titularidad, si la convivencia implica un riesgo para la
seguridad integral.
4. Prohibir o restringir al presunto agresor el acercamiento a la mujer agredida.
5. Solicitar al órgano jurisdiccional competente la medida de arresto transitorio,
etc.

Recomendaciones finales

La VBG es producto de una cultura y una lógica de dominación cultural que se inscribe
en un marco de violencia social y estructural del sistema, por lo tanto su abordaje debe
ser multifactorial, implica desde la atención psicológica tanto de las
víctimas/sobrevivientes como de los hombres agresores, una intervención social y
jurídica. Así como estrategias que apuntalen hacia los cambios culturales que implican
un abordaje preventivo y transformador. Es por ello, que no se puede considerar un
problema del ámbito domestico o privado, sino social, y del derechos de las humanas
no solo a vivir una vida libre de violencia sino empoderadas, dueñas de sus propios
cuerpos y en relaciones de equidad de género.

Referencias Bibliográficas

Amorós, Celia (1986) “Hacia una crítica de la razón patriarcal”, Anthropos, Madrid.

Beltrán, L. (2006) Violencia contra la mujer por la pareja. Fundación Escuela de


Gerencia Social en: [http://www//fegs.msinfo/fegs/archivos/pdf/VCM_01.pdf ]

Baró, Ignacio Martín (1999) “Ación e ideología: Psicología social desde Centroamérica”
UCA editores. El salvador.

De Baribieri, Teresa (1992) “Sobre la categoría de género. Una introducción teórica


metodológica” En Isis Internacional Nro. 17. Santiago de Chile.

Facio, A. (1992) “Cuando el género suena cambios trae (una metodología para el
análisis de género del fenómeno legal )”. 1ra. Ed. San José C.R: ILANUD

Gamba Susana B. (Comp.).(2007) “Diccionario de Estudios de Género y feminismos”.


Editorial Biblos. Buenos Aires.

Lamas, Marta (1999) “Género, Diferencia de sexo y diferencia sexual”. En Debate


Feminista, 20, 10. México.

Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una vida libre de Violencia (2007)

Naciones Unidas (2006) Estudio a fondo sobre todas las formas de violencia contra la
mujer.
En : [http://www.nodo50.org/ala/slip/IMG/pdf/informe_ONU_sobre_violencia_mujer.pdf
]

OPS/OMS (2000) “LA ruta crítica de las mujeres afectadas por violencia intrafamiliar
en América Latina. Estudio de casos en diez países”. Washington, D.C.,

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