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UNIVERSIDAD DE SANTIAGO DE CHILE

FACULTAD DE HUMANIDADES
Departamento de Lingüística y Literatura

Caracteres “@” y “x” en reemplazo de morfema de género como recurso


inclusivo: Lectura, uso y adecuación a la oralidad en estudiantes de
enseñanza media de tres establecimientos de Santiago

Marco Andrés Gálvez Arriet, Camila Paz Romero Lagos

Profesor Guía: Manuel Rubio Manríquez

Tesis para optar al grado de Licenciado en


Educación en Castellano y al Título
Profesional de Profesor de Estado en
Castellano

Santiago – Chile

2018
© Marco Gálvez Arriet y Camila Romero Lagos, 2018

Esta obra está bajo una Licencia CreativeCommons Atribución-NoComercial-Compartir


IgualInternacional 4.0 (CC BY-NC-SA 4.0).
HOJA DE RESUMEN

Título de la tesis: Lectura y uso de “@” y “x” como morfema de género en estudiantes de
enseñanza media de tres establecimientos de Santiago

Autor(es): Marco Gálvez Arriet y Camila Romero Lagos

Carrera: Pedagogía en Castellano

Profesor Guía: Manuel Rubio Manríquez

Año: 2018

Resumen

En las últimas décadas, han surgido manuales y recomendaciones en torno a la utilización de


lenguaje inclusivo, principalmente en la escritura, recomendando de forma prescriptiva tanto la
conservación de la lengua como su transformación con el objetivo de visibilizar a mujeres y
minorías sexuales. Ante la falta de estudios que describan la utilización de lenguaje inclusivo en
hablantes, la presente investigación recoge y analiza datos de lectura de textos que incluyen
caracteres @ y x como morfema de género, y su adecuación a la escritura y oralidad en
estudiantes de enseñanza media de una muestra de 145 estudiantes de segundo y cuarto año
medio de tres establecimientos distintos: uno mixto, uno de mujeres y uno de varones. La
adecuación mayoritaria, tanto en la lectura de estos caracteres, como en la expresión oral y
escrita en el contexto de opinión frente a los mismos, apunta hacia el neutro masculino, que
coincide con la norma estándar de la lengua española. Se observan excepciones en
determinados grupos sociales, como tendencia del nivel socioeconómico medio a utilizar
recursos inclusivos en escritura, y del nivel socioeconómico alto a utilizarlos en la oralidad.
Además, se observa mayor uniformidad en la expresión escrita y oral en segundo medio, y en
los niveles socioeconómicos bajos; mientras que una diferencia marcada entre hablantes
hombres y mujeres en cuarto medio y en los niveles socioeconómicos más altos.El impacto de
esta investigación radica en evidenciar cómo afectan las variables sociales en la percepción y
uso del lenguaje inclusivo y sus manifestaciones.
Palabras claves: Lenguajeinclusivo, sociolingüística, morfema de género

1
AGRADECIMIENTOS

Por apoyar nuestro proyecto de investigación, confiar en nosotros, guiarnos en la recta final de nuestra
carrera, y por sus aportes en la conceptualización y metodología sociolingüística aplicada, queremos
agradecer a nuestro profesor guía Manuel Rubio Manríquez

Agradecemos los aportes de la profesora Andrea FranulicDepix, quien nos orientó en el área de las teorías
feministas y de crítica al lenguaje androcéntrico utilizadas como enfoque del análisis de la investigación y en
conceptos clave del marco teórico.

Agradecemos también la labor voluntaria de quienes nos ayudaron trabajando en equipo para lograr
concretar las 180 entrevistas iniciales del proceso de recogida de datos para la presente investigación:

Brenda Calderón, José Díaz, Belén Gálvez, Alonso Gálvez,Joana Garcés, Felipe Morales, Jaime Pacheco,
Miguel Lagos, Claudina López, Nicole Riquelme, Johana Romo.

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TABLA DE CONTENIDO

HOJA DE RESUMEN ................................................................................................................... I


AGRADECIMIENTOS ………………………………………………………………………………...…II
TABLA DE CONTENIDO ............................................................................................................III
INTRODUCCIÓN.......................................................................................................................... 4
1.MARCO TEÓRICO.................................................................................................................... 9
1.1.ELGÉNEROGRAMATICALDESDELASPERSPECTIVASFEMINISTAS...........................................................9
1.2.CONCEPTOSSOCIOLINGÜÍSTICOS.......................................................................................................11
2.METODOLOGÍA...................................................................................................................... 15
2.1.ENFOQUEDELESTUDIO.......................................................................................................................15
2.2.UNIVERSOYSELECCIÓNDELAMUESTRA...............................................................................................16
2.2.1. Universo y muestra: Características de los establecimientos....................................................17
2.3.INSTRUMENTO(APÉNDICE 1).................................................................................................................18
2.4.APLICACIÓNYESTUDIODECAMPO.......................................................................................................20
2.5.IDENTIFICACIÓNDEVARIABLES...........................................................................................................22
2.5.1. Variables extralingüísticas.........................................................................................................22
2.5.2. VARIABLES LINGÜÍSTICAS...........................................................................................................24
3. ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE RESULTADOS............................................................27
3.1ANÁLISISPORCASO...............................................................................................................................27
3.1.1. Lectura de caracteres @ y x.......................................................................................................27
3.1.2. Uso de morfemas de género en escritura..................................................................................28
3.1.3. Uso de morfemas de género en expresión oral..........................................................................29
3.2.ANÁLISISPORVARIABLES.....................................................................................................................32
3.2.1. Eje de lectura de caracteres @ y x.............................................................................................32
3.2.2. Eje de expresión escrita..............................................................................................................36
3.2.3. Eje de expresión oral..................................................................................................................39
3.3.INTERPRETACIÓNDEDATOS................................................................................................................45
CONCLUSIONES....................................................................................................................... 48
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS........................................................................................... 52
APÉNDICES............................................................................................................................... 55

3
INTRODUCCIÓN

En la lengua española, el morfema de género corresponde a una variante no flexiva


que, en enunciados que refieren a seres animados, se expresa en la mayoría de los casos con
“a” para sustantivos femeninos y con “o” para masculinos.

Sin embargo, esta relación no es estricta, y observamos su problematización tanto


desde la RAE como desde estudios lingüísticos recientes. En efecto, Marqueta (2016)
distingue entre I) la realidad extralingüística posiblemente sexuada; II) El reflejo semántico de
la lengua de dicha realidad externa; y III) La manifestación formal de la relación entre lenguaje
y distinción de sexo. A esta última categoría corresponden los morfemas “o” y “a”, que se
encuentran en un nivel opcional.

La Nueva Gramática de la Real Academia Española, respecto al uso del masculino


gramatical señala que “El GÉNERO NO MARCADO en español es el masculino, y el GÉNERO
MARCADO es el femenino”, y, por lo tanto, el uso del masculino en seres animados designa “a
todos los individuos de la especie, sin distinción de sexo”. No solo en lo referente a morfemas
de género, sino también a lexemas, como en el caso de “padres” para referir a “padre y
madre”. (RAE, 2009)

Esta predominancia del masculino como género no marcado, desde el enfoque


feminista, es considerada como un dispositivo que ha invisibilizado a las mujeres en el
discurso. Desde una perspectiva feminista, PatriziaVioli analiza el androcentrismo y la
invisibilización de las mujeres en la mayoría de las lenguas europeas (Violi, 1991). Mercedes
Bengoechea (1992; 2008; 2009; 2015), por su parte, ha trabajado en múltiples estudios
particularmente sobre el castellano, en torno al género gramatical y la representación de los
seres humanos, en formato de manuales de uso de lenguaje inclusivo, recomendaciones, y
estudios sobre el efecto de estas políticas con el pasar de los años.

Violi cuestiona la naturaleza puramente mecánica del género gramatical como un


elemento lingüístico sin una motivación semántica, como ha sido considerado históricamente
por la lingüística, y alude al problema hjelsmleviano de “la definición de la sustancia semántica
de los morfemas” (Violi, 1991, pág 41), desentrañando motivaciones de exclusión o de
posesión en el nombramiento de las mujeres (pág 73). Menciona, además, las investigaciones
e intentos de cambios en la lengua que surgieron desde la sociolingüística estadounidense,
principalmente desde grupos feministas (pág 79).

4
De estos primeros estudios con propuestas o análisis de propuestas de cambios en la
lengua, a fin de evitar prácticas sexistas, en el mundo anglosajón se estudió en la década de
los 70 el creciente uso del “they” singular, como pronombre de género sexual neutro, en
reemplazo de “he”/”she”. Estudios señeros en esta línea han sido los de Bodine (1975) y
Martyna (1978).

Bengoechea (2008) cuestiona la declaración de la Real Academia Española (RAE,


2006), en la que se justifica el uso del masculino gramatical genérico como una función que
tiene que ver “simplemente con el principio básico de economía lingüística”. Bengoechea
identifica cuatro funciones extralingüísticas en este rasgo de la lengua:

1. Invisibilización de las mujeres


2. Androcentrismo en el pensamiento formulado con el idioma
3. Reforzamiento de las relaciones de identidad y semejanza masculinas
4. Pertenencia primaria a colectividades étnicas, nacionales o religiosas, en oposición a la
pertenencia secundaria de las mujeres.

Dentro de los cambios intencionados al uso de la lengua que se han estudiado en las
últimas décadas, se observan: el uso de “a” como morfema de género universal (Bengoechea
2008, 2015 y Bengoechea&Simon 2014), y la utilización de “e” plural como morfema de género
neutro y universal (Bengoechea 2015). Otros usos han sido la inclusión de signos no
alfabéticos a modo de reemplazo o marca de anulación de morfemas de género, como “x”,
“@”, o “*”, entre otros (Nissen 2013, Bengoechea 2015). A todos estos usos morfológicos,
además de otros fenómenos morfológicos y sintácticos se les ha denominado “lenguaje
inclusivo”, debido a su efecto de visibilizar a las mujeres y otras identidades humanas no-
masculinas-. Cabe decir, que existen recursos de lenguaje inclusivo normados por la RAE,
mientras que estas innovaciones forman parte de un nuevo lenguaje inclusivo, ajeno a la
norma estándar.

Mientras que los primeros –“a” universal, “e” neutra- han recibido una crítica mediática
y también académica sobre su carácter artificioso, con argumentos morfosintácticos; los
segundos -”x” y “@”- han recibido críticas debido a la imposibilidad de su pronunciación. Estos
últimos usos, observados en múltiples manifestaciones de comunicación informal escrita,
serán parte de nuestro objeto de estudio.

Estos signos, si bien no tienen correspondencia fonológica, portan un valor semiótico.


Según Wiktionary, la “x” o X-Mark representa rechazo o no validación, así como se asocia a la
“x” del álgebra, que representa un valor incógnito. Por otra parte, María René Gil del

5
Observatorio de Neología reconoce en la “@” un “recurso gráfico para integrar en una sola
palabra las formas masculina y femenina, ya que su trazo sugiere a la vez las vocales “a” y “o”
(Gil, 2007).

Al respecto de estos usos, abundan los manuales o guías de lenguaje no sexista por
un lado, mientras que, por el otro, la RAE se opone a estos intentos de convenciones en torno
a los usos que transgreden la norma estándar. Bosque (2012), en representación de la RAE,
argumenta:

El propósito último de las guías de lenguaje no sexista no puede ser más loable:
contribuir a la emancipación de la mujer y a que alcance su igualdad con el hombre
en todos los ámbitos del mundo profesional y laboral. Intuyo que somos muchos —y
muchas— los que pensamos que la verdadera lucha por la igualdad consiste en
tratar de que esta se extienda por completo en las prácticas sociales y en la
mentalidad de los ciudadanos. No creemos que tenga sentido forzar las estructuras
lingüísticas para que constituyan un espejo de la realidad, impulsar políticas
normativas que separen el lenguaje oficial del real, ahondar en las etimologías para
descartar el uso actual de expresiones ya fosilizadas o pensar que las convenciones
gramaticales nos impiden expresar en libertad nuestros pensamientos o interpretar
los de los demás” (pág 16)

Desde esta perspectiva, el problema de la visibilidad de la mujer no debe


sobreponerse a la historia de la lengua española, y que podría producir enunciados ambiguos
o innecesariamente extensos. Bosque (2012) alude también a la diferenciación entre sexismo
lingüístico, en un plano semántico, y el neutro masculino propio de la lengua española, del cual
niega que se trate, en efecto, de un tipo de sexismo, basándose en la diferenciación realizada
por García Meseguer que distingue el sexismo lingüístico -sexismo léxico y sexismo sintáctico-
del sesgo sexista, que llevaría a interpretar de forma androcéntrica expresiones que no lo son
correspondientes al uso de neutro masculino para referirse a grupos humanos mixtos (García
Meseguer, 1994).

Las innovaciones con caracteres no alfabéticos, que escogemos como objeto de


estudio de esta investigación, se enfrentan a dos problemas pragmáticos:

El primero de ellos es la no correspondencia fonológica, al tratarse de caracteres no


alfabéticos; y la transgresión de la norma escrita, que deriva en dificultades también de sintaxis
y concordancia gramatical. De hecho, el grupo anarquista Pirexia, en su artículo sobre el uso
del lenguaje, realizan una fuerte crítica a la categorización gramatical humana en relación con

6
su sexo, a la vez que evidencian los problemas de pronunciación en los caracteres “x” y “@”
(Pirexia, 2011).

El segundo problema es el de la motivación ideológica. Desde una perspectiva


feminista, las consideraciones gramaticales surgen como una respuesta a una ideología
imperante en la que el hombre, así como el género gramatical masculino, responden a una
lógica cultural de dominación e invisibilización. Esta consideración gramatical responde a la
consciencia masculina con la que la realidad ha sido interpretada y conceptualizada, es decir,
responde a un patrón ideológico. Las tendencias machistas de asignación de roles por género,
e invisibilización, uniformación o esencialización de las mujeres en el español estándar han
sido observadas y analizadas en la lengua española (García, 1994; Bengoechea, 2009;
Márquez, 2013; Bejarano, 2013). En respuesta a estas relaciones entre sociedad y lenguaje,
han aparecido las múltiples innovaciones observadas, motivadas por una intención ideológica
contrapuesta a la que ha predominado de forma histórica. Esta motivación puede producirse,
por tanto, por medio de transgresiones a la norma, con la intención expresa de hacerlo. Dicho
de otro modo, podríamos estar frente a un posible cambio, cuya concreción no encuentra,
todavía, un consenso en el uso general que se hace de la lengua escrita.

Mientras que Bengoechea asocia los usos de caracteres no alfabéticos, como arrobas,
asteriscos y “x”, en reemplazo de morfemas de género a grupos cuya “solidaridad se extiende
a los grupos LGBTI” (Bengoechea, 2015, pág 7). Acosta, por su parte, desde una perspectiva
estética, asocia los usos de arroba y X a “Entidades con políticas radicales, feministas,
LGBTQI, y quienes se adhieren a ideologías libertarias y antiautoritarias, como colectivos e
individuos anarquistas y comunistas” (Acosta, 2016, pág 1).

Estudios de percepción o actitud sobre usos de lenguaje inclusivo o no sexista han


sido aplicados, de acuerdo con nuestra investigación bibliográfica, solo por Nissen (1997 y
2013) y Bengoechea&Simon (2014), ambos en poblaciones universitarias, y, por tanto,
pertenecientes a un limitado rango de nivel socioeconómico y capital cultural. Además, estos
estudios recogen datos de prestigio explícito, sin superar la paradoja del observador, por lo
que los resultados apuntan hacia una percepción ideal del uso del lenguaje, y no hacia una
relación entre uso y hablante. En nuestra investigación bibliográfica no encontramos estudios
aplicados a estudiantes de edad escolar.

En consecuencia, es necesario dilucidar cómo se enfrentan los hablantes jóvenes a la


ejecución gramatical de estos usos, la percepción que tienen de los mismos, su adherencia o
no a los usos a investigar, y su posible presencia, ausencia o reformulaciones en la lectura,
escritura y oralidad. Estos serán los aspectos para investigar en el presente estudio.

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En concreto, las preguntas que guían esta investigación son: ¿Cómo se enfrentan
dichos estudiantes a la lectura de signos no alfabéticos como reemplazos escritos de morfema
de género? ¿Hay diferencias en el uso y percepción entre los distintos géneros y grupos
socioeconómicos? ¿Qué relación establecen entre el uso de estos signos no alfabéticos y su
identidad social? ¿Cómo los adecuan a sus textos escritos y discursos orales?

La relevancia de estas cuestiones en torno al fenómeno radica en que hasta el


momento se le ha tratado de forma puramente prescriptiva, es decir, mediante Manuales de
uso (Bengoechea 1992; 2000; 2008; 2015), recomendaciones a favor y en contra, estudios de
efectos de políticas de recomendaciones de usos inclusivos, y artículos reflexivos, sin
centrarse en la comunidad hablante y su relación con estos usos. De este modo, las
discusiones en torno a la imposibilidad de la lectura, los contextos de uso, su aplicación
restringida a determinados espacios y las disputas normativas, no forman parte de estudios
lingüísticos en la comunidad hablante.

Las interrogantes sobre los grupos socioeconómicos, de sexo y su identidad social en


relación con las innovaciones de género en la lengua escrita nos permiten establecer
relaciones entre un uso lingüístico y las variables sociales de sus hablantes, así como también
las adherencias ideológicas que motivan los distintos usos, no de una forma preestablecida por
estereotipos de hablantes, sino en su proceso real de propagación.

Por otro lado, las interrogantes sobre las formas de leer, escribir y aplicar a la oralidad
estos usos, nos permiten establecer los contextos lingüísticos y diversas adecuaciones que se
realizan en este proceso de coexistencia de formas lingüísticas de referirse a los grupos
humanos, en el contexto de las disputas académicas sobre los usos sexistas y no sexistas de
la lengua española.

OBJETIVO GENERAL

Describir la percepción de estudiantes de enseñanza media sobre los signos no


alfabéticos @ y X como reemplazos del morfema de género, su uso y su adecuación a la
lectura y expresión oral, en relación con las variables sociales al interior de los
establecimientos.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

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1. Identificar variantes en el modo de lectura que tienen estudiantes de enseñanza media
de los caracteres “x” y “@” como morfema de género en textos escritos.

2. Determinar las preferencias de usos gramaticales de hablantes de enseñanza media al


referirse a grupos humanos mixtos en la escritura y oralidad.

3. Identificar las inclinaciones que tienen estudiantes de enseñanza media respecto a los
conflictos y movimientos sociales de su entorno.

4. Relacionar las variables lingüísticas de lectura, escritura y expresión oral con los
diversos grupos sociales de los hablantes de enseñanza media.

1. MARCO TEÓRICO

1.1. EL GÉNERO GRAMATICAL DESDE LAS PERSPECTIVAS FEMINISTAS

En la introducción de la presente tesis, los estudios particulares de los recursos


inclusivos se abordan desde perspectivas anarquistas, anarco-feministas, y de lingüistas
feministas como Mercedes Bengoechea y PatriziaVioli. Sin embargo, dentro de las distintas
corrientes feministas, el análisis de los distintos recursos inclusivos es abordado de diferente
manera. Mientras que Mercedes Bengoechea, en sus estudios del lenguaje no sexista reconoce
los recursos que trasgreden la norma, como el uso de @,x y e como reemplazo de morfema de
género (2008, 2009), en sus manuales de recomendación de lenguaje no sexista recomienda
para todos los casos la utilización de las formas femeninas, y, por tanto, de recurso inclusivo
dual para referirse a grupos humanos mixtos (2009, 2015). PatriziaVioli también reconoce en el
uso dual la visibilización de las mujeres, a diferencia de los recursos inclusivos neutros.

Esta postura se inscribe dentro del feminismo radical de la diferencia o, como se nombra
actualmente, el pensamiento de la diferencia sexual, el cual se posiciona desde la herencia de
la tradición de pensamiento de mujeres rebeldes contra el dominio patriarcal, y que también
busca y crea signos de libertad femenina en el presente. Por lo tanto, es contrario a equiparar el
cuerpo y la vida de una mujer al cuerpo y la vida de un hombre. En otras palabras, se trata de
mujeres que toman distancia de la neutralización de las experiencias femeninas y masculinas, y,
por tanto, no quieren ser como los hombres ni quieren vivir como los hombres viven.

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De acuerdo a Rivera Garretas, nadie nace en neutro, por lo cual, el mundo es uno y los
sexos son dos (Rivera Garretas, 2005). En este sentido, rechaza el ideario de la igualdad, pues
comprende el feminismo como una línea de pensamiento que proviene de mujeres a las que les
gusta ser mujeres y no quieren dejar de serlo ni definitiva ni esporádicamente (Rivera Garretas,
2019).
En consecuencia, esta perspectiva epistemológica propone otorgarle autoridad
femenina a la liberación de las mujeres, en torno al concepto de autoridad materna, en el
sentido etimológico de augere, como “hacer crecer”. Desde esta perspectiva, , la figura de la
madre tiene autoridad, porque es dadora de la vida y de la palabra (Muraro, 1994). Esto quiere
decir que es de la madre de quien aprendemos a hablar, o aprendemos la lengua completa,
durante la primerísima infancia, y ya antes desde la vida intrauterina. El término Lengua materna
acá recobra su sentido original, ligado al origen, al nacimiento, donde la recién nacida o recién
nacido respira tanto para vivir como para balbucear los primeros ruidos. Se desmiente, así, la
falsa dicotomía que en el régimen patriarcal relaciona, el cuerpo con la figura de la madre, y la
palabra, el logos, con la figura del padre (Muraro, 1994).

Se comprende así la lengua materna como usurpada por la lengua androcéntrica,


institucionalizada, que se enseña en los espacios del conocimiento con poder, es decir, en la
escuela y en la universidad (Rivera Garretas, 2005). Es en la lengua androcéntrica donde el
femenino es absorbido por el masculino, erigiéndose este en representación del género
humano. En esta lengua, lo femenino, en el paradigma de los géneros gramaticales, es definido
como un No masculino, como negación, vacío, condición de existencia de lo masculino (Violi,
1991). Si las mujeres no tienen más a la mano que el régimen de significado patriarcal y su
lengua, encontrarán en el pseudo sujeto universal un referente para ser personas y crear,
puesto que en el femenino descubrirán negación y carencia.

Desde esta perspectiva, la idea de un referente universal para hombres y mujeres, sea a
modo de neutro masculino como de un supuesto universal neutro, se encarga de sepultar la
lengua materna y, por tanto, de reproducir la invisibilización de la mujer como sujeta activa del
lenguaje (Rivera Garretas, 1994; Muraro, 1991).

El silencio femenino es resultado de lo mismo, porque muchas mujeres prefieren callar


como un acto de resistencia, consciente o inconsciente, frente a una lengua que es insuficiente,
una lengua patriarcal imposibilitada para interpretar la profunda y compleja experiencia femenina
(Bengoechea, 1993).

De todo lo anterior, se desprende que el lenguaje inclusivo que apunta a la neutralidad


no es una salida para esta propuesta feminista. Primero, porque el femenino debería inscribirse

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en la lengua de manera libre y autónoma, y no en una relación jerárquica con el masculino ni
tampoco en un uso pretendidamente neutro. Segundo, porque los cambios de la lengua deben
nacer de la experiencia y de la corporalidad, no por decreto de ley o por imposición ideológica. Y
tercero, porque la salida, entonces, para expresarse autónoma y libremente en la lengua, no
pasa solamente por el uso de un morfema u otro, sino, porque pasa por imprimir un sentido libre
de ser mujeres, tanto en la lengua como en la sociedad. Y esta salida es política, basada en la
política de las mujeres, que consiste, precisamente, en hablar en lengua materna, es decir, a
partir de la experiencia, a partir de sí, en primera persona, desde el sentir, en retornarle
autoridad a la madre concreta, en recuperar huellas de libertad y rebeldía femeninas en las
genealogías y en la historia, en dejar de medirse con el patriarcado (al cual declaran terminado),
entre otras varias prácticas (Colectivo de la Librería de Mujeres de Milán, 1991).

De este enfoque de la diferencia sexual es que se abordan dos aspectos sustanciales de la


tesis: los grupos sociales estudiados en los establecimientos mixtos y no mixtos, así como
también la división entre recursos inclusivos neutros y duales. Los primeros de los cuales
apuntarían hacia una trasgresión de la norma estándar de neutro masculino, pero manteniendo
la universalidad absorbente de su carga semántica. El uso dual, en cambio, representa una
inclusión en la que se visibiliza a la vez que se respeta la dualidad de lo femenino y masculino
en tanto experiencias diferentes de corporalidad y sociedad.

1.2. CONCEPTOS SOCIOLINGÜÍSTICOS

El enfoque sociolingüístico de la investigación fue escogido con el fin de levantar datos


acerca de la percepción de los caracteres no alfabéticos de género – x y @- en la comunicación
oral y escrita.

Como dimos cuenta en los antecedentes de la investigación, estudios como el de Nissen y


Bengoechea muestran la percepción expresa acerca de estos usos en documentos escritos,
pero no dan cuenta de la relación entre lectores y mensajes en los que se utilizan estos
caracteres. Por lo tanto, un enfoque sociolingüístico permite levantar y analizar datos sobre la
percepción y uso en el momento de la comunicación con textos escritos de esta naturaleza.

El concepto de sociolingüística responde a la identificación de relaciones entre pautas


lingüísticas y sociales. Labov señala que estudios precisos de los contextos sociales, identifican
variaciones sistemáticas en el lenguaje, que responden a procesos extralingüísticos en las
sociedades (1983, pág 155). Por su parte, Silva-Corvalán identifica la sociolingüística de forma

11
sintética como la disciplina que estudia los fenómenos lingüísticos que tienen relación con
factores sociales (Silva-Corvalán, 2001, pág 1).

La introducción de nuevos elementos en la lengua, dan como resultado una variabilidad, que
es la coexistencia de distintas formas o usos lingüísticos. Esta variabilidad puede, según Trugdill
y Hernández, derivar en un cambio lingüístico (Trugdill& Hernández, 2007, pág 337).

Según Labov, el proceso en que se produce la variabilidad lingüística es el proceso de


propagación, que corresponde a la segunda fase del cambio lingüístico, tras la innovación. En
este proceso de propagación, el uso en cuestión comienza a imitarse socialmente en
determinados grupos de hablantes y coexiste con un uso anterior. La fase de propagación
finalizaría al eliminarse las variables rivales y realizarse la compleción del uso. Todo estudio
sobre el cambio lingüístico propiamente tal se produce sobre la fase de propagación, es decir,
en el momento en que hay un contraste entre usos lingüísticos (Labov, 1983, pág. 168).

Un ejemplo aplicado de variabilidad se encuentra entre las formas coexistentes de referirse a


los grupos humanos mixtos, que es el centro de esta investigación. Al respecto, Nissen (2013)
identifica una variabilidad entre el uso masculino neutro, además de dos usos inclusivos: el uso
dual (alumnos y alumnas) y de género neutro (el alumnado).

Labov aborda dos tipos de presiones en la variabilidad estilística de acuerdo con su nivel de
intencionalidad. El primero de ellos es el cambio desde abajo, que se produce de forma no
intencionada por parte de la comunidad hablante. Por el contrario, el cambio desde arriba, se
produce de forma intencionada, debido al reconocimiento de un prestigio en determinados usos.
En muchos casos, la presión desde arriba deriva en una hipercorrección (1983, págs. 168-178).

Mientras que la presión desde abajo actúa en momentos de menor concentración en el


habla –usualmente por mayor concentración en el aspecto semántico del mensaje-, lo que es
identificado como discurso espontáneo. Por el contrario, la presión desde arriba actúa en
momentos de mayor concentración en el habla, lo que es identificado como discurso cuidado.
Los estudios de Labov diferenciaban el discurso espontáneo del discurso cuidado, propiciando
momentos distintos en la conversación. El discurso cuidado se obtendría, así, en situaciones
comunicativas con mayor concentración en el lenguaje utilizado, como la utilizada al pedir al
informante la repetición de un enunciado o palabra específica. El discurso espontáneo, en
cambio, se obtendría al orientar la conversación hacia un contenido altamente emotivo para el
informante, como experiencias personales infancia o momentos cercanos a la muerte (1983,
págs. 116-153).

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Para comprobar sí la utilización de las variantes de cambio lingüístico escogidas son
motivadas por presiones desde arriba o presiones desde abajo, basta con comparar su
utilización en contextos de mayor concentración en la forma, con momentos de mayor
concentración en el significado.

Las variantes escogidas para esta investigación son innovaciones que corresponden a
presiones desde arriba, ya que se producen en situaciones específicas de enunciación,
mayormente a textos cortos. En las presiones desde arriba juega un papel importante el
prestigio social de la variable estilística escogida. Este concepto ha sido abordado inicialmente
por Sturtevant en 1947, citado por Labov (1983), quien explica el prestigio como la relación
afectiva y social de un uso lingüístico, dando como ejemplo que “antes que un fonema pueda
difundirse de palabra en palabra… es necesario que uno de los dos [fonemas] rivales adquiera
algún prestigio” (Labov, 1983, pág 329).

Labov presenta el prestigio como la motivación social a utilizar determinada variante


lingüística, como lo demuestran sus primeros estudios en Martha Vineyard, en las diferencias
lingüísticas entre quienes valoraban positivamente la vida en la isla investigada versus quienes
valoraban salir a vivir en una gran ciudad (1983, págs. 63-64).

Labov explica el prestigio lingüístico no solo desde la valoración positiva de los usos
lingüísticos, sino también desde su crítica. Se basa en Wyld para afirmar que “Desde el
momento en que un hábito de habla se asocia a algún grupo de prestigio elevado, está
condenado a hacerse notar”, aludiendo tanto a la valoración de ese hábito, como también a las
críticas conservadoras de la lengua.

El uso que es objeto de esta investigación cuenta con un prestigio y crítica a la vez, tal
como lo señalado por Labov, por lo que el prestigio no es unidireccional, sino dependiendo de la
valoración que cada grupo social le otorga. Silva Corvalánexplica esta relativización del prestigio
como “lo que un sexo considera prestigioso no es necesariamente igual para el sexo opuesto”
(Silva Corvalán, 2001, pág 99)

El habla de acuerdo con la variable de género responde en muchos casos a patrones


distintos. En la mayoría de ellos, el habla de los hablantes masculinos responde a la preferencia
de formas vernáculas (Coates, 2009; Silva-Corvalán 2001), en momentos de mayor
concentración en la forma del discurso. Esta preferencia por formas vernáculas, o formas que no
corresponden a las socialmente prestigiosas, se denomina en sociolingüística prestigio
encubierto (Trugdill 1972). Existen también casos, en menor medida, de grupos de hablantes

13
femeninas que utilizan con mayor frecuencia formas vernáculas, como el estudio de Eckert en
Detroit (Eckert&McConnell-Ginet, 1999).

En síntesis, los distintos estudios de prestigio manifiesto y encubierto, y sus diferencias


por género masculino y femenino en distintas partes del mundo, apuntan a diferencias en las
pautas sociales del género que inciden directamente en su comportamiento lingüístico,
generando notorias distinciones por género en diferentes comunidades (Coates, 2009, págs.
104119).

El prestigio encubierto y el prestigio manifiesto trabajan como fuerzas que incentivan a


las personas hablantes a escoger deliberadamente ciertas variantes lingüísticas. Por lo tanto, la
variabilidad al interior de una misma persona hablante puede alternar usos más concentrados
en ciertas formas prestigiosas, con usos más fluidos y, por tanto, más distantes de las formas
prestigiosas.

El prestigio, por tanto, no se asocia necesariamente a la estratificación socioeconómica,


sino que también responde a patrones más abstractos de relaciones sociales, como las
comunidades de habla.

Con respecto a las comunidades de habla y la innovación en ellas, Caravedo (2003), en


un estudio crítico sobre los conceptos sociolingüísticos, señala el valor de las personas que
propagan las innovaciones lingüísticas, como motivadas por pautas sociales que no son
necesariamente socioeconómicas o de género:

Los individuos se comportan como innovadores (leaders), no porque sean los


representantes de una clase social situada en el centro de la jerarquía, como la de los
obreros calificados, ni porque pertenezcan al género femenino. Son innovadores en la
medida en que exteriorizan un tipo definido de conducta social que reacciona ante los
valores vigentes de una comunidad. En la sociedad norteamericana, según Labov, no
son las polaridades de clase o de género las que actúan en la sociedad, sino
polaridades más abstractas que revelan comportamientos reactivos ante ciertos valores
dominantes, como las de «conformismo» frente a «no conformismo» (conformity / non
conformity). Y más todavía: esta oposición tiene mayores alcances que la estratificación
grupal (Caravedo, 2003, pág 49).

Estos “valores vigentes” de las comunidades estudiadas, y su relación con los


comportamientos reactivos de conformismo / no conformismo, fueron determinantes en los
resultados de la investigación de Martha’sVineyard, respecto a la valoración de la vida en la isla.
Mientras más se valoraba la vida local en la isla –conformismo- notoriamente amplio era el uso

14
de la centralización vocálica de /a/, rasgo fonético local. Por el contrario, mientras menos se
valoraba la vida en la isla, menor era el rasgo local de centralización.

2. METODOLOGÍA

2.1. ENFOQUE DEL ESTUDIO

Esta investigación se relaciona con el habla y el código de las personas presentes en


mensajes enmarcados en temáticas culturales y sociales vigentes.

En consecuencia, se concibe el lenguaje como un fenómeno social y cultural,


perspectiva trabajada desde la sociolingüística variacionista de William Labov (1983). En otras
palabras, se trata de establecer la relación entre variables sociales (sexo, edad, nivel
socioeconómico) con fenómenos lingüísticos (la realización de signos no alfabéticos como
reemplazo del morfema de género en la lectura, la oralidad y la escritura). Congruentemente con
lo anterior, el enfoque del estudio es cuali-cuantitativo con un alcance correlacional, es decir,
buscar las relaciones entre pautas lingüísticas y extralingüísticas, en lugar de enfocarse en la
frecuencia de ocurrencias de un uso.

Para el trabajo de campo, se toma en consideración la definición de informante de


Trudgill y Hernández (2007, pag. 177) como el “hablante utilizado por un lingüista como fuente
de datos lingüísticos sobre su lengua, dialecto o acento maternos”. Además, se intenciona que
dichos informantes desconozcan que su habla está siendo observada y que además utilicen un
registro casual y relajado del habla (Labov, 1983). En otras palabras, el lingüista se provee de
datos que el informante desconoce estar entregando. A esto, Labov (1983) lo llama superar la
paradoja del observador, cuya superación implica “observar al informante sin que éste
observe que está siendo observado” (Trudgill y Hernández, 2007, pág. 243).

Superar la paradoja del observador sugiere, por tanto, distraer la atención del discurso,
es decir, que el informante crea que estamos observando el contenido de su discurso y no el

15
habla que emplea en su discurso, esto con la finalidad de que el habla del informante se
presente de forma espontánea, ya que solo así es posible establecer relaciones entre el habla y
el carácter ideológico y psicológico del mensaje, considerando a su vez las variables sociales.

Para la realización del estudio, se siguieron los estadios propuestos por Hudson (1982),
a saber:

A. Selección de hablantes, circunstancias y variables lingüísticas


B. Recogida de textos
C. Identificación de las variables sociolingüísticas y sus variantes en los textos
D. Procesamiento de losdatos
E. Interpretación de losresultados

2.2. UNIVERSO Y SELECCIÓN DE LA MUESTRA

El universo estudiado corresponde a tres casos de establecimientos educacionales de


enseñanza media de la región metropolitana. La muestra tomada para la recogida de datos se
limita a 145 informantes seleccionados de 3 establecimientos. El criterio de selección de
establecimientos responde a una lógica de diferenciación por sexo: un establecimiento de
hombres, un establecimiento de mujeres y un establecimiento mixto, lo que serviría como marco
de referencia para las comunidades de habla de los hablantes.

Para efectos de este estudio la variable diatópica es transversal para todos los casos, ya
que se entrevista a estudiantes chilenos de la Región Metropolitana. En relación con la variable
diafásica los entrevistadores han procurado establecer algún grado de confianza con el
informante y utilizar un discurso estándar y relajado, esto para predisponer a que los
informantes utilicen un registro coloquial y conseguir que la entrevista se lleve a cabo en un
contexto, tanto lingüístico como extralingüístico, informal y/o semiformal.

La comunidad de habla que forma parte de la muestra se considerará de alta densidad


debido a la alta cantidad de horas en la que las personas que conforman el universo
seleccionado comparten entre sí. Así, la comunidad de habla de las hablantes del
establecimiento de mujeres será predominantemente de comunicación entre personas de
género femenino; la comunidad de hablade los hablantes del establecimiento de hombres será
predominantemente de comunicación entre personas de género masculino; mientras que la
comunidad de habla del establecimiento mixto será más variada.

16
Dentro de estos tres establecimientos seleccionados como universo, la muestra se
remite a cantidades equivalentes de estudiantes de segundo nivel y cuarto nivel de enseñanza
media. El criterio de selección de los niveles se estableció siguiendo dos razonamientos etarios.
El primero, establecer una diferencia mínima de dos años entre las dos generaciones que
servirán de informantes, para poder diferenciar más fácilmente los grupos de edad. El segundo,
aplicar el instrumento dentro de los cursos de mayor edad, a fin de asegurar un mínimo de
conocimiento general de la realidad social. De este modo, la generación que cursa segundo año
medio comprende las edades de 15 a 16 años; y la generación que cursa cuarto año medio
comprende las edades de 17 y 18 años. En el muestreo aleatorio por nivel no se produjo
desviación de los grupos etarios.

Las demás características, no relacionadas al género, en los establecimientos


seleccionados, responden a criterios de accesibilidad para la investigación y de diferencias
sustanciales, que serán detalladas en las características de cada establecimiento.

La cantidad de estudiantes por nivel busca conservar grupos equivalentes en número, tanto en
el eje etario como en el eje de género. No obstante, tras las múltiples aplicaciones de
instrumentos, la disponibilidad de establecimientos y docentes, y la mortandad estadística no
recuperada, se obtuvo la siguiente muestra total de los tres casos:

2° medio 4° medio

Liceo de mujeres 31 20

Liceo de hombres 23 22
Establecimientomixt 12 12 13 11
o M H M H
Total 144

Para la muestra anterior, se seleccionaron los cursos mediante criterios de


accesibilidad, como no interrumpir procesos evaluativos importantes o espacios destinados a la
práctica profesional. Entre los cursos disponibles para la aplicación del instrumento, se
seleccionó a los estudiantes utilizando el software Random.org, un programa computacional de
selección aleatoria a partir de un listado numérico, que correspondía a la lista de cada curso. La
utilización del software garantiza que los establecimientos no escojan estudiantes para la
muestra, para de esta manera no influir en la representatividad azarosa de la muestra.

El hecho de seleccionar estudiantes de establecimientos pertenecientes a la Región


Metropolitana de los cursos segundo y cuarto medio hace que la muestra posea cierta
homogeneidad en cuanto a las variables diatópica y las variables de sexo y edad, por lo tanto, el
factor azaroso para la selección de la muestra permite diversificar la muestra para conseguir la

17
heterogeneidad fundamental para el estudio. La importancia de la heterogeneidad en las
muestras de los estudios sociolingüísticos se fundamenta en que, solo a partir de la
heterogeneidad, es posible evaluar cómo influyen las distintas variables lingüísticas en el habla
(Labov, 1983; Silva-Corvalán, 2001; Trugdill& Hernández, 2007).

2.2.1. Universo y muestra: Características de los establecimientos

El establecimiento 1 –desde ahora en adelante el Establecimiento mixto- corresponde


a un colegio de administración particular subvencionada, de orientación católica y modalidad
polivalente, ubicado en la comuna de El Bosque, en la Región Metropolitana. La muestra de
este establecimiento, sin embargo, se remitió a cursos científico-humanistas debido a la
disponibilidad y flexibilidad horaria de los mismos, en contraste con los cursos técnicos, cuyos
procesos de prácticas laborales dificultaban la aplicación del instrumento.

El alumnado del establecimiento reside, en su mayor parte, en comunas del sector sur de
Santiago, como El Bosque, San Bernardo, La Cisterna, La Pintana, Puente Alto, Lo Espejo, La
Granja y San Ramón.

El PEI del establecimiento, del año 2006, describe a su alumnado como principalmente
de familias católicas de estrato social medio-bajo. Su índice de vulnerabilidad al año 2018 es de
75,4%.

El establecimiento 2 –desde ahora en adelante el Liceo de mujeres- corresponde a un


liceo de larga trayectoria, laico, de administración delegada, gratuito, dependiente de una
universidad estatal nacional. Su modalidad es técnica y se encuentra ubicado en la comuna de
Santiago, en la Región Metropolitana. El alumnado proviene de diversas comunas de la Región
Metropolitana. Su índice de vulnerabilidad al año 2018 es de 82,9%.

El establecimiento 3 –desde ahora en adelante el Liceo de hombres- corresponde a un


liceo de larga trayectoria, laico, de administración municipal, gratuito. Su modalidad es
científicohumanista y se encuentra ubicado en la comuna de Santiago, en la Región Metropolitana.

El alumnado proviene de diversas comunas de la Región Metropolitana y su índice de


vulnerabilidad al año 2018 es de 65,7%.

Al no existir mayores diferencias socioeconómicas entre establecimientos, la variable


socioeconómica para el análisis de datos será comparativa de acuerdo a grupos de similar

18
cantidad de informantes dentro de la muestra, a fin de establecer correlaciones entre diferencias
socioeconómicas y lingüísticas dentro de la muestra recogida, y no de forma cuantitativa
representativa.

2.3. INSTRUMENTO

Para realizar el estudio de campo, se crearon dos instrumentos: el Instrumento del


informante (Apéndice N°1) y el Guion del entrevistador (Apéndice N°3)y el a fin de lograr una
observación controlada para la recopilación de datos sociolingüísticos (Trugdill& Hernández,
2007, pág 237). El guion del entrevistador supone las siguientes etapas:

1. Establecimiento de confianza y presentación del entrevistador e informante


2. Explicación del instrumento
3. Entrega del instrumentoescrito
4. Instrucción de lectura y escritura
5. Escritura de informante
6. Conversaciónsociolingüísticagrabada
7. Agradecimientos.

El punto 5, Escritura de informante,recoge datos lingüísticos de utilización de recursos


inclusivos en la expresión escrita (discurso cuidado) y datos no lingüísticos de conformismo / no
conformismo respecto a tres temas ideológicos, abordados a modo de grado de apoyo a los
mensajes escogidos para el instrumento, además del género con que se identifica cada
informante. El punto 6, Conversación sociolingüística grabada,recoge datos de lectura de
caracteres no alfabéticos, utilización de recursos inclusivos en la expresión oral (discurso
espontáneo) y confirmación de datos no lingüísticos de conformismo / no conformismo mediante
explicación de su grado de apoyo a los mensajes, además de datos no lingüísticos
socioeconómicos de jefe de hogar.

El instrumento, que se le entrega al informante, contiene tres fotografías de panfletos de


protestas, que utilizan morfemas de género no alfabéticos “@” o “x”, en enunciados enmarcados
dentro de los ejes temáticos de protestas estudiantiles, conflicto mapuche y movimiento
feminista. Las instrucciones son simples y acotadas para que las respuestas escritas sean más
espontáneas.

El primer texto es una imagen de un lienzo que tiene sobre la represión a estudiantes, y
fue escogido por contener tres veces el grafema “@” a modo de morfema de género neutro. El

19
mensaje se enmarca en el tema de las protestas estudiantiles tanto escolares como
universitarias, por lo que resulta un indicador más cercano y de fácil comprensión para
estudiantes de enseñanza media que preguntas ideológicas más abstractas, o que requieran
una reflexión más elaborada. Por lo tanto, sirve para recoger tantos datos ideológicos como
lingüísticos.

El segundo texto es una imagen de un lienzo que tiene sobre el conflicto mapuche y fue
escogido por repetir tres veces el grafema “x” como morfema de género neutro. El tema se aleja
del entorno escolar y refleja una postura más política con respecto a la sociedad. Al igual que el
primer texto, sirve para recoger tantos datos ideológicos como lingüísticos.

El tercer texto es una imagen de un lienzo sobre la socialización de género. El mensaje


fue escogido por diferenciar tres grupos humanos: masculino (“niños [varones]”), mixto
(“preocupadxs”) y femenino (“niñas”). Por lo tanto, funciona como confirmación de la utilización
de “x” como reemplazo de morfema de género y no como mero recurso estilístico en reemplazo
total de “o”, como podría interpretarse en los otros dos lienzos. Al igual que los textos anteriores,
sirve para recoger tanto datos lingüísticos como ideológicos.

2.4. APLICACIÓN Y ESTUDIO DE CAMPO

La técnica de recogida de datos empleada en el estudio de campo consiste en la realización de


entrevistas individuales programadas, en las que participan dos personas, una de ellas es quien
entrevista y la otra es entrevistada. Esto permite llevar a cabo la observación controlada, una
forma flexible de obtención de datos en las que el informante tiene el rol protagónico por sobre
el entrevistador. El informante se expresa con libertad discursiva en cuanto a forma, contenido y
extensión de su mensaje y el entrevistador, aparentemente, tiene un rol secundario, aunque en
realidad se preocupa de encauzar la entrevista a partir de un guion preestablecido.

Para este estudio se trabajó con un equipo de 12 entrevistadores, seis hombres y seis
mujeres, los cuales fueron previamente capacitados para ejecutar las entrevistas. Fue preciso
instruir al equipo de investigadores en cuanto a la coloquialidad del habla de ellos hacia el
informante; a no establecer juicios de valor hacia los informantes y/o las opiniones vertidas por
estos. Los miembros del equipo de entrevistadores tomaron conocimiento sobre las etapas de la
entrevista; el lenguaje corporal y el vestuario; y algunos alcances teóricos (morfema de género,
informante y paradoja del observador).

20
Para superar la paradoja del observador, el distractor ha sido una selección de
imágenes relacionadas con problemáticas nacionales contingentes, las cuales son: el problema
de la educación y las clases sociales; el conflicto mapuche y la ley antiterrorista; la visión
machista y la perspectiva del feminismo. Todas estas imágenes presentan un carácter no
alfabético en lugar del morfema de género, para saber de qué manera los informantes lo leen,
cómo lo verbalizan en la oralidad y establecer si es que lo utilizan en la escritura y cómo
interpretan su propia escritura en la oralidad.

Antes de que las entrevistas individuales programadas se realizaran, se llevó a cabo un


trabajo logístico por parte del equipo de investigadores. Fue preciso generar redes de acceso a
distintos establecimientos para poder conseguir entrevistas con los Directivos y así obtener el
permiso para realizar el estudio.

Una vez posibilitadas las condiciones para comenzar con el estudio de campo, como
mencionamos anteriormente, lo primero que deben realizar los entrevistadores es seleccionar
estudiantes al azar y, luego, llevar a cabo la entrevista.

Una vez presentados entrevistador e informante, el entrevistador establece un grado de


confianza con el informante, para ello el entrevistador se ciñe a las preguntas establecidas en su
guion, manteniendo un lenguaje coloquial. Dichas preguntas son manejadas de memoria por el
entrevistador, ya que si las leyera desde el guion el establecimiento de confianza se vería
entorpecido por la falta de espontaneidad.

Para lograr el nivel conversacional adecuado, que supere la paradoja del observador, se
realizaron múltiples entrevistas piloto tanto entre entrevistadores como también con un par de
estudiantes por entrevistador, hasta que se logre establecer la conversación sociolingüística que
diste de un interrogatorio o una prueba.Esta etapa dura en promedio 10 a 15 minutos.

Pasada la etapa del establecimiento de confianza, el entrevistador le explica al informante


que la entrevista consiste en escribir opiniones sobre tres fotografías y que, luego de la
redacción, se pasará a la etapa oral. En este punto, el entrevistador enfatiza que no se evaluará
redacción ni ortografía. La persona informante toma conocimiento de que todas las opiniones
son válidas y que el tiempo que demore en responder depende de él. En este sentido, no hay
presión para el entrevistado. El entrevistador aclara que en ningún lugar se hará mención del
nombre del informante ni del colegio del que este procede.

En cuanto el informante finaliza con la etapa escrita, el entrevistador da inicio a la etapa oral
grabada. Lo primero que hace el estudiante es leer el texto de la imagen número 1, luego la

21
opinión que él o ella ha redactado. El entrevistador procura que el informante lea textualmente la
opinión redactada, solicitándole y motivándole a la reiteración en caso de que no cumpla con
alguno de los pasos. Posterior a la lectura de la opinión relacionada con la imagen número 1, el
entrevistador solicita al informante que se explaye sobre su opinión y profundice lo dicho. Tras
esto, se le solicita una confirmación mediante la pregunta: “Entonces, ¿estás más bien en contra
del mensaje, medianamente a favor, o completamente a favor?”.

El procedimiento anterior se replica para las imágenes 2 y 3. Finalmente, se continúa con el


guion preestablecido para recopilar los datos sociales y económicos del informante (ver anexo).

Para concluir la entrevista, el entrevistador le pregunta al informante sus apreciaciones


sobre la entrevista realizada para poder evaluar el nivel de comodidad de este, lo cual se
relaciona directamente con la coloquialidad, espontaneidad del habla y así evidenciar que la
paradoja del observador ha sido superada. La entrevista se da por finalizada con los
agradecimientos del entrevistador y obsequiando un presente al informante, que en todos los
casos de este estudio fue un lápiz pasta azul o negro, el mismo con el que respondieron sus
entrevistas.

2.5. IDENTIFICACIÓN DE VARIABLES

2.5.1. Variables extralingüísticas

En el análisis de variables sociales, se trabaja con las siguientes categorías


extralingüísticas, que pueden subdividirse en variables sociales, relacionadas con condiciones
de desigualdad social, como género, edad e indicadores socioeconómicos; y variables
ideológicas, que corresponden a las denominadas anteriormente por Labov (1983) y Rocío
Caravedo (2003) como pautas de conformismo / no conformismo, que constituyen diferencias de
actitudes y percepciones entre individuos respecto a temas sociales.

2.5.1.1. Variables sociales

La variable edad, se trabajará en esta investigación por nivel escolar en curso: La


debilidad de esta clasificación es la poca precisión de los grupos etarios, pero a cambio tiene
como ventaja la inclusión de la comunidad de habla etaria, es decir, con qué generación etaria
se relaciona cotidianamente. Así, incluso en el caso de edades que por repitencia se salgan de
los rangos regulares por nivel (15-16 años para 2º medio y 17-18 años para 4º medio), sí
pertenecen a una comunidad de habla de la edad examinada. A favor de esta variable se tomó

22
la decisión de dejar fuera tercer nivel medio como parte de la muestra, para así permitir una
distancia mínima entre grupos etarios estudiados.

Si bien los dos establecimientos no mixtos seleccionados presentan un porcentaje de


población transgénero en su universo, en el muestreo aleatorio no se obtuvo muestras de estos
grupos sociales, por lo que la clasificación de diferencia sexual permitió abordar dos grupos
sexuales.

Para la clasificación socioeconómica, se utilizaron dos de tres indicadores, debido a


restricciones de acceso a información económica de la población escolar. Estos fueron a) Nivel
de estudios b) Ocupación de jefe de hogar. El factor que no fue considerado por limitantes
institucionales fue el de ingreso económico familiar. Dentro de esos tres indicadores sugeridos
por Labov la variable Ocupación de jefe de hogar correspondería al indicador de mayor
desigualdad (Labov, 1983)

En nuestra metodología de clasificación, las variables se ordenaron de la siguiente forma:


La variable nivel de estudios de jefe de hogar, que contempla los niveles:

1. Educaciónbásica
2. Educación media
3. Educación superior técnica
4. Educación superior universitaria

La variable ocupación de jefe de hogar, que contempla los niveles:

1. Personal no cualificado y trabajo doméstico


2. Personal técnico, especialista, y comerciantes
3. Personal de altos mandos, cargos directivos y profesionales

La variable socioeconómica, que suma los valores de las variables nivel de estudios
y ocupación de jefe de hogar. Los ocho valores obtenidos se reordenaron en cuatro grandes
grupos, siguiendo un método de “número equilibrado de individuos en cada categoría”
(SilvaCorvalán, 2001, pág 46), a fin de lograr resultados más proporcionales que con las dos
categorías socioeconómicas fijas –nivel de estudios y ocupación,-que muestran un mayor
desequilibrio en los números de informantes en cada nivel. Los gruposresultantes son:

8. Nivelbajo (valores 1-2)


9. Nivelmedio-bajo (valor 3)

23
10. Nivelmedio (valor 4)
11. Nivelmedio-alto (valor 5-7)

De este modo, el nivel bajo abarca jefes de hogar con educación básica o media sin
trabajo remunerado, y jefes de hogar con educación básica con ocupación de tipo no
cualificada. El nivel medio-bajo abarca jefes de hogar con educación media y ocupación no
cualificada, y jefes de hogar con educación básica y ocupación de tipo técnica, especialista o
comerciante. El nivel medio abarca jefes de hogar con educación media y ocupación de tipo
técnica, especialista o comerciante. Por último, el nivel medio-alto abarca desde jefes de
hogar con educación superior técnica o universitaria, que trabajan de forma profesional.

Para la identificación de jefe de hogar, se preguntó a cada persona entrevistada el nivel


de estudios y ocupación de las personas que trabajaban en su hogar y se seleccionaron los
valores más altos del grupo familiar obtenidos.
La variable de diferencia sexual se abordará tanto como variable independiente, así como
también como variable dinámica, que permite sondear las relaciones de las diferencias lingüísticas en
su distribución en otras variables sociales.

2.5.1.2. Variables de percepción de temas sociales

Los temas sociales escogidos para abordar tanto como instrumento, como también así la
distracción que nos permite superar la paradoja del observador, son:

I. Protestasestudiantiles
II. Causa mapuche
III. Movimientofeminista

Las variables ideológicas fueron seleccionadas por ser tres espacios recurrentes de los
movimientos sociales actuales en los que se utilizan los grafemas “x” y “@” para indicar grupos
humanos mixtos en textos escritos.

A partir de la opinión recogida de forma escrita, leída, expresada oralmente, y confirmada


mediante la pregunta “¿Entonces estás más bien en contra, parcialmente a favor, o totalmente a
favor del mensaje del lienzo?”, se obtiene el grado de apoyo a cada uno de los mensajes, que
forma parte de la dimensión de variables sociales ideológicas, o de conformismo / no
conformismo. De estos datos extralingüísticos, se obtuvo las variables:

1. Desconoce el tema, o asegura no saber lo suficiente como para tomar una postura.
2. Apoya completamente el mensaje del lienzo
24
3. Apoya parcialmente el mensaje del lienzo
4. Rechaza el mensaje del lienzo

2.5.2. VARIABLES LINGÜÍSTICAS

2.5.2.1. Variable de lectura

En la dimensión de lectura de los caracteres no alfabéticos, se obtuvieron las siguientes


variantes en cada uno de los textos por separado, como ocurrencias:

1. Pronunciación /o/
2. Adecuación a dual
3. Pronunciación /ks/
4. Pronunciación /a/
5. Pronunciación /e/
Al triangular la lectura de los tres textos de los lienzos presentes en el instrumento, se
obtuvieron las siguientes variables a modo general en la dimensión de lectura de caracteres no
alfabéticos:

1. Constante de pronunciación /o/ (pronuncia /o/ los tres textos)


2. Alternancia con recursos inclusivos
3. Recursos inclusivos constantes (utilizasólorecursosinclusivos)

2.5.2.2. Variable de escritura

Las variantes de escritura en cada uno de los textos fueron las siguientes:

1. (O) Uso de neutromasculino


2. (R) Uso de recursosduales
3. (C) Uso de recursos sustantivos neutros
4. (@) Uso de “@” comomorfema de género
5. (X) Uso de “x” comomorfema de género
6. (E) Uso de “e” como morfema de género

Para el análisis del predominio de recursos de escritura en las opiniones escritas ante
los tres textos, clasificamos las variables particulares en dos grandes grupos, debido al poco
porcentaje de ocurrencias de todos los recursos de inclusión: Neutro masculino y recursos de
inclusión. De esta clasificación, obtuvimos las variables generales de análisis:

1. Neutromasculinoconstante (solo utilizaneutromasculinoenlostrestextos)

25
2. Alternancia con recursosinclusivos
3. Recursos inclusivos constantes (solo utiliza recursos inclusivos en los tres textos)

2.5.2.3. Variable de oralidad

En el ámbito de la expresión oral de opinión, se utiliza un discurso espontáneo, o al


menos más espontáneo que en la escritura. Esto ocurre, como se mencionó anteriormente, de
forma guiada principalmente por la instrucción de que el estudio recoge datos sobre la opinión
de los temas, y no del lenguaje utilizado, sumado al registro informal y espontáneo por parte
de las personas entrevistadoras al momento de la conversación.

Las variantes identificadas, por lo tanto, resultaron distintas a las de escritura. En el


análisis particular, por ocurrencias:

1. (O) Uso de neutromasculino


2. (R) Uso de recursosduales
3. (C) Uso de sustantivosneutros

Ante la inexistencia de informantes que en el eje de expresión oral tuviesen ausencia


total de neutro masculino, las variables de uso de recursos inclusivos para el eje son:

1. Neutro masculino constante (sólo utiliza neutro masculino en la conversación) 2.


Alternancia con recursosinclusivos

26
3. ANÁLISIS E INTERPRETACIÓN DE RESULTADOS
3.1.ANÁLISIS POR CASO

3.1.1. Lectura de caracteres@ y x

Los resultados obtenidos por establecimiento en torno al eje de lectura son los siguientes:
Gráfico 1
Comparación tres casos: Lectura de caracteres @ y x en los tres textos leídos

Liceo de hombres 68% 27% 5%

Liceo de mujeres 65% 35 %

Establecimientomixto 65% 35%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos Recursosinclusivosconstantes

Los tres casos escogidos presentan uniformidad de resultados en la lectura de los


caracteres no alfabéticos como /o/ de forma constante: aproximadamente dos tercios de la
muestra de cada establecimiento utilizó la adaptación a pronunciación /o/ sin excepciones en la
lectura de los tres lienzos del instrumento. En el extremo contrario, se observan pocas
excepciones en las que se utilizaron recursos distintos de forma constante -es decir, adaptando
la lectura de los tres lienzos completamente a recursos inclusivos, todas pertenecientes al Liceo
de hombres.

Respecto a los modos de lectura específica de los caracteres, la tabla 1 muestra el


porcentaje de estudiantes que presentó cada uno de los modos de lectura recogidos, al menos una
vez.
Tabla 1
Comparación entre tres establecimientos:
27
Porcentaje de hablantes que utilizó al menos una vez cada modo de lectura de caracteres x y @ en las tres
imágenes
Adapta a
Pronuncia Pronuncia recurso Pronuncia Pronuncia
/o/ /a/ dual /ks/ /e/
Establecimientomixto 100% 23% 13% 2% 0%
Liceo de mujeres 100% 12% 25% 0% 0%
Liceo de hombres 93% 16% 16% 0% 7%

En las muestras de los casos 1 y 2, Establecimiento mixto y Liceo de mujeres, los


caracteres no pronunciables “@“ y “x“ fueron leídos como /o/ al menos una vez por la totalidad
de sus informantes. El caso 3, Liceo de hombres, en cambio, sí presenta un porcentaje que no
utilizó la lectura como /o/.
Con respecto a las ocurrencias por tipo de adaptación en la lectura, el Liceo de
hombres es el único caso en el que se registraron informantes que leyeron los caracteres no
pronunciables como /e/. Respecto de esta adecuación a recurso oral inclusivo, que trasgrede la
norma estándar, es muy posible que responda a un criterio de contexto, al estar ante un texto de
similares características. Sin embargo, cabe destacar que esta respuesta de utilización con
trasgresión a la norma, de acuerdo a la muestra recogida, corresponde más a una excepción
que a un patrón de comportamiento lingüístico. Del mismo modo, la aparición de
pronunciación /ks/, como el grafema alfabético “x“, tuvo solo una ocurrencia, de forma dudosa,
ante la complicación que produjo la lectura en voz alta, en el Establecimiento mixto. Llama la
atención también la pronunciación /a/, la cual alcanzó el 10% de las lecturas de la imagen 3 del
instrumento, con una distribución concentrada en el Liceo de mujeres, muy probablemente
influida por la imagen del instrumento, que aparece en la fotografía sostenida por un grupo de
mujeres.

Muchas formas de lectura con pronunciación /a/ fueron acompañadas por correcciones
o lecturas con entonaciones interrogativas:

"Las empresas y su policía. Las… ¿empresarias?"


"Nos tiene preocupados... o preocupadas por nuestras niñas"

3.1.2. Uso de morfemas de géneroenescritura

En el eje de escritura, la comparación de usos neutro masculino e inclusivos por


establecimiento arrojó los siguientes resultados:

Gráfico 2
Comparación tres casos:
Utilización de recursos inclusivos en escritura de opinión, ante los tres textos leídos

28
Liceo de hombres 25% 68 % 7%

Liceo de mujeres 35 % 56 % 8%

Establecimientomixto 53% 45 % 2%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos Recursosinclusivosconstantes

A diferencia del eje de lectura, la escritura evidencia diferencias entre los


establecimientos, posicionando al Establecimiento mixto como el caso con mayor índice de
uso de neutro masculino constante. El Liceo de hombres, por el contrario, muestra el menor
índice de uso de neutro masculino constante.
Sobre los modos de referirse a los grupos humanos mixtos en la expresión escrita, se puede
observar en la tabla 2 los porcentajes de estudiantes que utilizaron al menos una vez cada forma.

Tabla 2
Comparación entre tres establecimientos:
Porcentaje de hablantes que utilizó al menos una vez cada modo de escritura referente a grupos humanos
mixtos
"a"
como
"e" morfem
como a
"@" "x" morfem de
Neutromasculin Sustantivoneutr Recurs comomorfem comomorfem a de género
o o o dual a de género a de género género neutro
Establecimientomixt 98% 32% 23% 0% 0% 0% 2%
o
Liceo de mujeres 92% 54% 21% 0% 4% 0% 2%
Liceo de hombres 93% 64% 20% 5% 0% 2% 2%

La utilización de @ y x como morfema de género en escritura solo se produjo en un


porcentaje mínimo: dos casos de uso de @ de forma inconstante ante la imagen 1,
pertenecientes al Liceo de hombres: “los empresari@s“; y dos casos de uso de x, también de
forma inconstante, ante las imágenes 2 y 3, pertenecientes al Liceo de mujeres: “presxs
políticos“.

En los casos 2 y 3, Liceo de mujeres y Liceo de hombres, más de la mitad de la


muestra utilizó sustantivos neutros en al menos una de sus opiniones escritas. Además de un
caso de utilización de “e“ y una caso de utilización de “a“ como morfemas de género neutro,
también en el Liceo de hombres.
En síntesis, todos los casos de uso de caracteres no alfabéticos como morfema de
género, se dieron de forma parcial. No se registraron casos de utilización de este recurso de

29
forma constante en las tres opiniones escritas, sin la presencia de neutro masculino de forma
alternada.

3.1.3. Uso de morfemas de género en expresión oral

En el eje de expresión oral, se obtuvieron los siguientes resultados:

Gráfico 3
Comparación entre tres casos:
Porcentaje de utilización de recursos inclusivos en expresión oral de opiniones

Liceo de hombres 30 % 70%

Liceo de mujeres 66% 34 %

Establecimientomixto 46% 54 %

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos

El eje de expresión oral no presenta casos de ausencia de neutro masculino, a


diferencia de los otros dos ejes estudiados. Y se observa, en este eje, un uso más amplio de
neutro masculino constante, es decir, referencia a grupos humanos mixtos usando solo
masculino neutro, sin recursos de inclusión.

A diferencia, también, del eje de escritura, el Liceo de mujeres, que presentaba el


menor porcentaje de hablantes que utilizasen neutro masculino constante, en el eje de
oralidad se presenta como el establecimiento con más alto uso, duplicando al Liceo de
hombres.

Esta diferencia entre uso de neutro masculino en la escritura y la oralidad, puede


responder a la diferencia entre discurso cuidado y discurso espontáneo: mientras que en la
expresión escrita se permite planificar y corregir el lenguaje utilizado, en la oralidad este queda
registrado en su utilización inmediata. El Liceo de mujeres, por tanto, pareciera presentar
mayor uso de recursos inclusivos en su discurso cuidado, pero evidencia un predominante uso
mayoritario de neutro masculino en su discurso espontáneo, en comparación a los demás
establecimientos estudiados.

No se observaron usos ajenos a sustantivos neutros y recursos duales para eludir el


neutro masculino. Y en ninguno de los tres casos hubo hablantes que utilizasen estos recursos

30
de forma constante, sin alternar con neutro masculino en sus opiniones. Los porcentajes de
ocurrencias se pueden observar en la tabla 3.

Tabla 3
Comparación entre tres casos:
Porcentaje de hablantes que utilizan al menos una vez cada modo de referencia a grupos humanos mixtos

Neutromasculi Sustantivoneut Recurs


no ro o dual
Establecimientomi 100% 50% 20%
xto
Liceo de mujeres 100% 34% 6%
Liceo de hombres 100% 65% 12%

Los recursos inclusivos son notoriamente menores en el uso oral de la lengua, lo que
resulta particularmente evidente en el caso de los recursos duales –“los y las“. Además, resulta
interesante destacar que la forma inclusiva dual es menos preferida para referirse a grupos
humanos mixtos que los sustantivos colectivos, tanto en oralidad como en escritura,
probablemente debido a principio de economía lingüística.

En síntesis, a partir de las comparaciones de casos en los tres ejes estudiados,


podemos establecer que:

I. La utilización escrita de caracteres no alfabéticos “@“ y “x“ no se produce de forma


espontánea en hablantes, tras leer textos que los contienen, y redactar una opinión
sobre ellos.

II. La mayoría de la población escolar estudiada adecua los caracteres no alfabéticos


como morfema de género neutro masculino de forma constante, tanto en su lectura
como en su escritura, en un contexto de diálogo con textos

III. En Liceo de mujeres contiene un menor porcentaje que los otros dos casos
estudiados respecto al porcentaje de hablantes que utiliza neutro masculino
constante en expresión escrita, en contextos de escritura de opinión ante textos
que utilizan “@“ y “x“ como morfema de género, sin embargo, presenta el mayor
uso de neutro masculino constante en expresión oral, lo que podría deberse a
una mayor inseguridad lingüística, que suele reflejarse en usos más prestigiosos en
contextos cuidados, a la vez que la ausencia de estos usos en contextos
espontáneos.

31
IV. En el Liceo de hombres se observa un mayor porcentaje de uso de recurso
inclusivo de sustantivos neutros –“profesorado“, “estudiantado“, tanto en escritura
como en oralidad, y registra también el menor porcentaje de neutro masculino
constante en expresión oral.

V. En los tres casos el eje con menor ocurrencia de neutro masculino constante es
el de escritura, que corresponde al que se realiza con un registro cuidado, en
relación a la lectura y a la expresión oral.

VI. En los tres casos, el eje con mayor ocurrencia de neutro masculino constante es
el de lectura de los caracteres “@” y “x”.

3.2. ANÁLISIS POR VARIABLES

3.2.1. Eje de lectura de caracteres @ y x

El análisis del eje de lectura evidenció correlación entre comportamiento lingüístico y


los grupos sociales solo en las variables de percepciones sociales

 Nivelsocioeconómico

 Percepción de temassociales

 Diferencia sexual

La variable etaria no presenta diferencias de lectura de caracteres @ y x entre los


grupos de segundo y cuarto medio.

En la variable de nivel socioeconómico, se percibe correlación leve, observable en el


gráfico 4, entre la presencia de recursos inclusivos y el NSE.

Gráfico 4
Correlación entre uso de recursos inclusivos en lectura de caracteres @ y x y nivel socioeconómico

32
NSE medio-alto 61% 39 %

NSE medio 55 % 38 % 7%

NSE medio-bajo 68 % 32%

NSE bajo 83 % 17 %

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos Recursosinclusivosconstantes

El NSE bajo corresponde a hablantes que provienen de familia con trabajo de tipo no
cualificado, y nivel de estudios de enseñanza básica o media incompleta. Este nivel presenta un
índice de lectura con mayor porcentaje de uso de neutro masculino constante. Por otro lado,
los casos de lectura con recursos inclusivos constantes se concentran solo en el NSE medio.

El eje de lectura presenta también correlación con la variable de percepción de temas


sociales, correspondientes a los ejes temáticos de los textos leídos en el instrumento.

Respecto al uso de recursos inclusivos en la lectura de caracteres, se observa


correlación entre el grupo más conformista-conservador -que se opone a los tres movimientos
sociales expuestos en el instrumento, y el uso de neutro masculino constante. En la misma
línea, el grupo totalmente inconformista concentra los casos de uso de recursos inclusivos
constantes.

Gráfico 5
Correlación entre uso de recursos inclusivos en lectura de caracteres @ y x y nivel de
conformismo/inconformismo

Conformista 88 % 12 %

Predominantementeconformista 64 % 36 %

Predominantementeinconformista 63 % 37%

Totalmenteinconformista 62 % 35 % 3%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos Recursosinclusivosconstantes

La variable de conocimiento / desconocimiento en el eje de percepciones de temas


sociales también brinda datos sobre los modos de lectura de los caracteres @ y x en los lienzos
de las tres imágenes. En la tabla 4 se puede observar la correlación entre el nivel de

33
conocimiento de los temas abordados y de las pronunciaciones /o/ y /a/, que se distribuyen de
forma inversa:

Tabla 4
Correlación entre modo de lectura de caracteres @ y x y nivel de conocimiento de los tres temas
abordados
Adapta a
/o/ /ks/ /e/ /a/
dual
Conocelostrestemas 99% 20% 1% 2% 13%
Desconoce un tema 96% 14% 0% 4% 29%
Desconoce dos temas 100% 13% 0% 0% 25%

El porcentaje de ocurrencias de adaptación a dual –“empresarios y empresarias”-


aumenta junto con el nivel de conocimiento de los tres temas. Sin embargo, el porcentaje de
pronunciación /a/ desciende a menos de la mitad. Esto puede deberse a que el desconocimiento
de los temas abordados podría involucrar un desconocimiento del fenómeno de los caracteres
no pronunciables, y derivar en una pronunciación /a/ orientada por la forma de los grafemas.

La variable de diferencia sexual también presenta correlaciones de comportamiento


lingüístico que sugiere una mayor diferenciación por sexo en cuarto nivel medio, así como
también una mayor diferenciación por sexo en los grupos socioeconómicos más altos de la
muestra recogida. En ambos casos la diferencia de lectura tiende hacia un mayor uso de
recursos inclusivos en el grupo de mujeres.

Tabla 5
Correlación entre uso de recursos inclusivos en lectura de @ y x como morfema de género y diferencia
sexual por NSE
Neutromasculinoc Alterna con Recursosinclusivosc
onstante recursosincl onstantes
usivos
M 82% 18% 0%
uje 86% 14% 0%
res
NS
E
Baj
o
Ho
mb
res
NS
E
Baj
o
Mujeres 62% 38% 0%

34
NSE 80% 20% 0%
Medio-
bajo
Hombres
NSE
Medio-
bajo
Muj 69% 31% 0%
eres 47% 47% 7%
NSE
Medi
o
Hom
bres
NSE
Medi
o
Mujeres 36% 64% 0%
NSE 72% 28% 0%
Medio-alto
Hombres
NSE
Medio-alto

En los grupos socioeconómicos más bajos, la diferencia sexual en la lectura de los


caracteres es mínima. Sin embargo, en el NSE medio-alto, correspondiente a hablantes de
familias de profesionales, la diferencia sexual es notoriamente mayor.
La diferencia sexual según grupo etario también muestra una mayor notoriedad en el
grupo correspondiente a cuarto nivel medio.

Tabla 6
Correlación entre modo de lectura de caracteres @ y x y diferencia sexual por grupo etario
Adapta a
/o/ /ks/ /e/ /a/
dual
Mujeres 2° medio 100% 14% 0% 0% 14%
Hombres 2° medio 100% 18% 0% 3% 27%
Mujeres 4° medio 100% 38% 3% 0% 16%
Hombres 4° medio 97% 6% 0% 3% 12%

En la dimensión de percepción de temáticas sociales, si bien la variable


conformismo/inconformismo de forma independiente no presenta correlación, sí lo hace en el
grupo de mujeres. Por lo que constituye una diferencia sexual en las pautas de relación entre
variables sociales y lingüísticas.
Tabla 7
Correlación entre modos de lectura de caracteres @ y x como morfema de género en los tres textos y nivel
de conformismo social en mujeres
Adapta a
/o/ /ks/ /a/
dual
Totalmenteinconformista 100% 29% 2% 14%
Predominantementeinconformista 100% 27% 0% 20%

35
Predominantementeconformista 100% 17% 0% 17%
Conformista 100% 0% 0% 0%

Mientras que en el grupo de varones, la distribución de modos de expresión escrita en


cuanto a género gramatical no presenta correlación con su nivel de conformismo social en los
temas abordados, el grupo de mujeres sí evidencia una correlación clara. De esto puede
desprenderse que en mujeres hay mayor relación entre inclinación ideológica y uso de recursos
inclusivos en escritura, principalmente de forma dual.

No obstante, este resultado puede estar influido por las diferencias lingüísticas entre
establecimientos. Esta diferencia radica principalmente en que el Liceo de hombres presenta
una menor influencia de variables sociales en la distribución de recursos inclusivos. Por lo tanto,
resulta más apropiado afirmar que el Liceo de mujeres evidencia una mayor correlación entre
inconformismo social y uso de recursos inclusivos duales, sea esta debida a diferencia sexual o
a características particulares de los establecimientos.
Con los datos recogidos, es posible proponer que las diferencias en la lectura de los
caracteres @ y x como morfema de género, y la elección de adaptarlo a neutro masculino o a
recursos inclusivos, responde a las siguientes pautas sociales:
I. Nivel socioeconómico: A menor nivel socioeconómico, y menor nivel de escolaridad en
el hogar de cada hablante, se observan mayores posibilidades de adaptar los
caracteres @ y x a neutro masculino.

II. Percepción de temas sociales: A mayor nivel de conformismo-conservadurismo, se


observan mayores posibilidades de adaptar los caracteres @ y x a neutro masculino.
En la misma línea, los casos de adaptaciones totales a recursos inclusivos se
observaron solo en el grupo que adhería a los tres movimientos sociales tratados.

III. Conocimiento de temas sociales: A menor nivel de conocimiento de las temáticas


sociales tratadas, se observan menores posibilidades de adaptar a recurso dual, y
mayores posibilidades de pronunciar la @ y x como /a/, probablemente debido a su
semejanza gráfica con los caracteres Aa. Esto podría relacionarse con un
desconocimiento del valor semántico de los caracteres @ y x como morfema de
género.

IV. Diferencia sexual: En los grupos de nivel socioeconómico medio-alto -hablantes de


familias de al menos una persona profesional-, se observa un mayor contraste de
diferencia sexual. Los hombres utilizan de forma minoritaria recursos inclusivos,
mientras que la mayoría absoluta del grupo de mujeres lo utiliza en al menos una de las
lecturas. Además, el contraste por sexo en la utilización de recursos inclusivos se
incrementa en cuarto año medio, en relación a la mayor uniformidad de

36
comportamiento lingüístico de segundo año medio. Por último, la relación entre
inclinación ideológica evidenciada en la variable de conformismo/inconformismo guarda
relación con la lectura de los caracteres x y @ de forma dual se puede observar solo en
el Liceo de mujeres como comunidad de habla femenina. Potenciales estudios en más
de un tipo de establecimiento de mujeres podrían arrojar luces sobre la variable
independiente que incide en la distribución lingüística observada.

3.2.2. Eje de expresiónescrita

El eje de expresión escrita corresponde al discurso más cuidado de los tres ejes
abordados, y, a la vez, el que presenta mayor variedad de modos de escritura en lo referente a
grupos humanos no mixtos.
Las variables sociales que evidenciaron correlación con su distribución en el análisis de
datos fueron:

 Grupoetario
 Nivelsocioeconómico
 Percepción de temassociales
 Diferencia sexual
La variable de grupo etario evidencia un cambio orientado hacia un mayor uso de
recursos inclusivos en la escritura en cuarto nivel medio, particularmente en recursos duales y
sustantivos neutros:

Gráfico 6
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión escrita y grupo etario

Segundo nivel 45% 50% 5%

Cuarto nivel 31 % 63 % 6%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos Recursosinclusivosconstantes

La variable de nivel socioeconómico reveló que, a diferencia de los otros ejes, son los
sectores socioeconómicos medios los que presentan mayor utilización de recursos inclusivos,
tanto de forma constante como inconstante.

Gráfico 7
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión escrita y nivel socioeconómico

37
NSE Medio-alto 35% 62 % 3%

NSE Medio 17 % 69% 14%

NSE Medio-bajo 46 % 51% 3%

NSE Bajo 53 % 41 % 6%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos Recursosinclusivosconstantes

Al analizar las modalidades de expresión escrita al referirse a grupos humanos


mixtos, también podemos observar una concentración de todos los usos inclusivos en los
sectores socioeconómicos medios, tanto en los recursos pertenecientes a la norma, como en
las innovaciones ajenas a la norma estándar. Así mismo, el NSE medio presenta el menor
porcentaje de ocurrencias de neutro masculino.

Tabla 8
Correlación entre modos de expresión escrita sobre grupos humanos mixtos y nivel socioeconómico
Neutromasculin Sustantivosneutro Recurso Uso Uso Uso Neutrofemenino
o s dual de @ de X de E
NSE bajo 94% 35% 18% 0% 0% 0% 0%
NSE 97% 46% 22% 2% 2% 0% 3%
medio-
bajo
NSE 86% 59% 28% 0% 3% 3% 3%
medio
NSE 97% 56% 18% 3% 0% 0% 0%
medio-
alto

En la dimensión de percepción de temas sociales, la variable de conformismo / no


conformismo respecto a los temas sociales abordados no evidencia correlación con el
comportamiento lingüístico en la escritura, ni en el índice de conformista/inconformista, ni con
el nivel de apoyo a cada movimiento social de forma independiente. No obstante, sí se observa
correlación con la variable de conocimiento / desconocimiento de temas abordados:

Gráfico 8
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión escrita y nivel de conocimiento de los temas
sociales abordados

38
Desconoce dos temas 71% 29 %

Desconoce un tema 60 % 28% 12%

Conocelostrestemas 31% 64% 5%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos Recursosinclusivosconstantes

Al igual que en la variable de lectura de los caracteres @ y x, el desconocimiento de


uno o dos de los temas abordados influye considerablemente en el uso predominante de
neutro masculino para referirse a grupos humanos mixtos, en condiciones de estar opinando
frente a textos que incluyen @ y x como morfema de género.

Respecto del eje de diferencia sexual, si bien no se observan diferencias en la variable


de sexo de forma independiente, sí se observa, al igual que en el eje de lectura, un incremento
de la diferencia sexual de comportamiento lingüístico en cuarto nivel medio.

Gráfico 9
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión escrita y diferencia sexual por grupo etario

Hombres 2° medio 39 % 55 % 6%

Hombres 4° medio 35 % 62% 3%

Mujeres 2° medio 49 % 46% 5%

Mujeres 4° medio 26 % 65 % 10%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos Recursosinclusivosconstantes

Mientras que el comportamiento lingüístico en el eje de escritura en hombres no varía


significativamente en los dos grupos etarios, sí se observa una notoria diferencia entre mujeres
de segundo y cuarto nivel medio, en la que el grupo de cuarto medio presenta una mayor uso
de recursos inclusivos.

A partir del análisis de los resultados obtenidos del eje de expresión escrita, es posible
plantear que:

39
I. Los niveles socioeconómicos más altos dentro de la muestra no son quienes utilizan
mayor cantidad de recursos inclusivos en su escritura, sino el grupo
inmediatamente inferior. Este comportamiento de las clases medias de utilizar
mayormente formas prestigiosas en contextos de registro cuidado es explicado por
Labov como parte de la inseguridad lingüística de las clases medias, pero solo
puede ser confirmado si se produce un contraste con el registro espontáneo, que se
analiza en el apartado correspondiente al eje de expresión oral. La cantidad de
ocurrencias de recursos duales y sustantivos neutros en escritura, también presenta
un mayor porcentaje en el grupo socioeconómico medio.

II. El desconocimiento de los temas abordados en el instrumento se relaciona


directamente con un mayor uso de neutro masculino como forma de referirse a
grupos humanos mixtos. Esta información podría confirmar la tendencia de los
grupos con mayor grado de desconocimiento de los temas sociales, podría ignorar
el valor semántico de los caracteres @ y x.

III. Al igual que en el eje de lectura de los caracteres @ y x, en segundo nivel medio las
diferencias sexuales de comportamiento lingüístico no son estadísticamente
considerables. En el cuarto nivel medio, en cambio, las mujeres muestran una
notoria inclinación hacia los recursos inclusivos, en comparación con el grupo de
varones. Esto apunta a una acentuación de distinción por sexo en el
comportamiento lingüístico con el acercamiento a la mayoría de edad. Estudios
comparativos con grupos etarios más diversos, o bien estudios comparativos entre
dos momentos de una misma generación podrían arrojar luces sobre la distribución
diacrónica del uso de recursos inclusivos

3.2.3. Eje de expresión oral

El eje de expresión oral es el que revela un registro más espontáneo, debido a que se
registran distintos momentos de enunciación, con énfasis en el contenido de su discurso,
motivado por la expresión de opinión de forma dialogada, que permite obtener registros de uso
menos consciente y menos corregido que en la lectura y la escritura.

Las variables sociales que evidencian correlación con el comportamiento lingüístico en


torno a los recursos inclusivos son:

 Grupoetario
 Nivelsocioeconómico
 Percepción de temassociales
40
 Diferencia sexual
La variable de grupo etario evidencia un notorio aumento de uso de recursos inclusivos
en cuarto nivel medio.

Gráfico 10
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión oral y grupo etario

Segundo nivel 60% 40%

Cuarto nivel 35% 65%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos

Respecto a los modos de recursos inclusivos, el cambio más notorio se produce en el uso de
sustantivos neutros, ampliamente más utilizados en el grupo etario de cuarto nivel medio, como
se puede observar en la tabla 9. Los recursos duales, en cambio, evidencian un uso mucho
menor en ambos grupos etarios.

Tabla 9
Correlación entre modos de expresión oral sobre grupos humanos mixtos y grupo etario
Neutromasculin Sustantivoneutr Recurs
o o o dual
2° 100% 38% 11%
medi
o
4° 100% 61% 14%
medi
o

La distribución apreciable entre grupos etarios es notoria. No obstante, ya que los datos
fueron recogidos en un solo momento de ambos grupos etarios, no es posible discernir si esta
distribución lingüística se debe a características sincrónicas de los dos grupos estudiados en
tanto grupos generacionales específicos, o a una relación entre el acercamiento a la mayoría de
edad y el uso de sustantivos colectivos en la expresión oral. Estudios comparativos a largo plazo
podrían dar luces de la naturaleza de la variación lingüística en cuestión.

En la dimensión socioeconómica, se observa correlación entre el NSE y el uso de recursos


inclusivos en la expresión oral en la opinión de los tres temas abordados:

Gráfico 11
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión oral y nivel socioeconómico

41
NSE Medio-alto 38% 62%

NSE Medio 45% 55%

NSE Medio-bajo 51% 49%

NSE Bajo 65% 35%

Neutro masculino constante Alternancia con recursos inclusivos

A diferencia de los ejes de lectura y escritura, en el eje de expresión oral el menor índice
de neutro masculino se presenta en el nivel socioeconómico más alto de la muestra. Es decir,
mientras que los contextos de registro cuidado promueven un mayor uso de recursos inclusivos
por parte de los sectores socioeconómicos medios; los contextos de registro espontáneo
evidencian un mayor uso de recursos inclusivos por parte de los sectores socioeconómicos más
altos de la muestra.

En el detalle de los modos de expresión oral sobre grupos humanos mixtos, se observa
que el uso que aumenta con el nivel socioeconómico es el de sustantivos neutros. No ocurre
esta correlación en el uso de formas duales:

Tabla 10
Correlación entre modos de referencia a grupos humanos mixtos en expresión oral y NSE
Neutromasculin Sustantivoneutr Recurs
o o o dual
NSE 100% 24% 18%
bajo
NSE 100% 46% 14%
medio-
bajo
NSE 100% 55% 3%
medio
NSE 100% 62% 15%
medio
-alto

En la dimensión de percepción de temas sociales, la variable de conformismo / no


conformismo presenta una correlación entre el grado de conformidad con los dos primeros
temas abordados -protestas estudiantiles y conflicto mapuche-, de forma inversa a lo esperado:
el uso de neutro masculino constante es mayor en grupos que muestran una postura
inconformista, y es menor en los grupos más conformistas-conservadores. Se puede observar
esta relación en la tabla 11.

42
Tabla 11
Correlación entre modos de referencia a grupos humanos mixtos en expresión oral y nivel de adherencia a
movimientos sociales abordados
Neutromasculinoconstant Alternancia con
e recursosinclusivos

Apoya protestas 49% 51%


estudiantiles 45% 55%
Apoya parcialmente 23% 77%
protestas estudiantiles
Rechaza protestas
estudiantiles
Apoya causa Mapuche 45% 55%
Apoya parcialmente 38% 63%
causa Mapuche Rechaza 31% 69%
causa Mapuche

A partir de estos resultados, es posible descartar una relación efectiva entre utilización
de recursos inclusivos y patrones ideológicos de no conformismo. Mientras que el eje de
expresión escrita presenta una distribución aleatoria, sin correlación de ningún tipo, el eje de
expresión oral presenta una correlación inversa en relación a lo esperado.

En la misma dimensión de percepción de los temas sociales, la variable de


conocimiento / desconocimiento arroja una notoria correlación que confirma lo evidenciado en
los ejes de lectura y expresión escrita respecto a conocimiento de temas sociales y
comportamiento lingüístico:

Gráfico 12
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión oral y conocimiento de temas abordados

Desconoce dos temas 100 %

Desconoce un tema 65% 35 %

Conocelostrestemas 41% 59%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos

43
A diferencia de las variables anteriores, la variable de conocimiento / desconocimiento
evidencia correlación con el uso de ambos recursos inclusivos registrados: sustantivos neutros
y recursos duales, como se puede observar en la tabla 12.

Tabla 12
Correlación entre conocimiento de temas sociales abordados y modo de expresión oral sobre grupos
humanos mixtos
Neutromasculin Sustantivoneutr Recurs
o o o dual
Conocelostrestema 100% 56% 14%
s
Desconoce un 100% 35% 8%
tema
Desconoce dos 100% 0% 0%
temas

Como se puede observar, la variable de conocimiento / desconocimiento presenta una


correlación directa entre los tres ejes estudiados, por lo que es posible establecer que, de forma
independiente de si el registro utilizado es cuidado o espontáneo, el conocimiento de los temas
sociales abordados -más que la postura ideológica en torno a los mismos- se relaciona
directamente con el conocimiento y utilización de recursos inclusivos de género.

En la dimensión de diferencia sexual, el eje de expresión oral es el único que evidencia


una notoria diferencia sexual como variable independiente.

Gráfico 13
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión oral y sexo

Mujeres 62% 38 %

Hombres 33% 67%

Neutromasculinoconstante Alternancia con recursosinclusivos

No obstante lo anterior, al comparar el comportamiento de la diferencia sexual


lingüística en los tres ejes, es posible establecer que el grupo de mujeres presenta, tanto en
contextos de registro cuidado como de registro espontáneo, un incremento en la utilización de
recursos inclusivos en el grupo etario de cuarto nivel medio. El grupo de varones, en cambio,
presenta valores más similares entre los grupos etarios. O, dicho en otras palabras, al igual
que en el eje de expresión escrita, las diferencias entre grupos etarios de varones no son
significativas, sí lo son entre los grupos etarios de mujeres, entre los cuales predomina el uso
de recursos inclusivos en cuarto nivel medio.

44
Gráfico 14
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión oral y diferencia sexual por grupo etario

Hombres Segundo nivel 37% 63%

Hombres Cuarto nivel 29% 71%

Mujeres Segundo nivel 78% 22%

Mujeres Cuarto nivel 41% 59%

Neutro masculino constante Alternancia con recursos inclusivos

Para poder comprobar si esta tendencia en el grupo de mujeres a utilizar más recursos
inclusivos en cuarto año medio se debe a factores generacionales o de contacto con diversas
comunidades de habla, sería necesario ampliar la investigación a un rango etario más amplio, o
a un seguimiento de al menos dos años para una posible comparación de cohortes.

En la misma dimensión de diferencia sexual, la relación entre sexo y NSE permite


observar la confirmación de otra tendencia:

Tabla 12
Correlación entre uso de recursos inclusivos en expresión oral y diferencia sexual por NSE
Neutromasculinoconstan Alternancia con
te recursosinclusiv
os
Mujeres 80% 20%
NSE 67% 33%
Bajo 54% 46%
Mujeres 36% 64%
NSE
Medio-
bajo
Mujeres
NSE
Medio
Mujeres
NSE
Medio-
alto
Hombre 43% 57%
s NSE 21% 79%
Bajo 33% 67%
Hombre 39% 61%
s NSE
Medio-
bajo
Hombre
s NSE
Medio
Hombr
45
es
NSE
Medio-
alto

El grupo de hombres presenta mayor uniformidad en sus grupos, mientras que el grupo
de mujeres presenta correlación entre NSE y uso de recursos inclusivos. El recurso inclusivo
que presenta la correlación directa con el NSE en mujeres es el uso de sustantivos neutros,
como se observa en la tabla 13

Tabla 13
Correlación entre modo de expresión sobre grupos humanos mixtos en expresión oral y NSE en mujeres
Neutromasculin Sustantivoneutr Recurso
o o dual
Mujeres NSE 100% 10% 10%
bajo
Mujeres NSE 100% 31% 10%
medio-bajo
Mujeres NSE 100% 46% 0%
medio
Mujeres NSE 100% 64% 9%
medio-alto

Del análisis del eje de expresión oral, podemos plantear que:

I. La variable etaria evidencia un uso mucho más alto de sustantivos colectivos para
referirse a grupos humanos mixtos en estudiantes de cuarto nivel medio. Esta diferencia
puede ser tanto generacional, como el indicio de un cambio en curso condicionado por el
acercamiento a la mayoría de edad, que podría implicar conexión con comunidades de
habla más diversas que las que se tienen en segundo nivel medio. Estudios a largo
plazo podrían dilucidar la distribución diacrónica del uso de recursos inclusivos neutros,
en rangos etarios más amplios, o bien comparando dos períodos de tiempo de una
misma generación.

II. La variable socioeconómica presenta correlación directa con el uso de recursos


inclusivos neutros -no así con los recursos inclusivos duales- en la expresión oral. Esta
correlación directa no se había presentado en los ejes anteriores, correspondientes a
registros más cuidados. Por lo tanto, es posible afirmar que en un contexto de registro
espontáneo, el nivel socioeconómico de los y las hablantes se relaciona directamente
con su utilización de recursos inclusivos neutros.

III. La variable de conocimiento/desconocimiento de temas sociales presenta también una


correlación directa con el uso de ambos recursos inclusivos registrados: sustantivos
neutros y recurso dual. Por lo tanto, es posible plantear que el desconocimiento de los

46
temas sociales se relaciona con el desconocimiento o ausencia de recursos inclusivos
neutros y duales.

IV. La dimensión de diferencia sexual, se observa una mayor uniformidad lingüística entre
varones, independientemente de las variables sociales. Por el contrario, entre mujeres
se observa una mayor incidencia de las variables sociales en su utilización de recursos
inclusivos. La variable que evidencia mayor relación es el nivel socioeconómico, que se
correlaciona directamente con el uso de sustantivos neutros como recurso inclusivo Esta
diferenciación puede deberse tanto a factores transversales a la sociedad como
particulares de los establecimientos estudiados. Estudios comparativos entre una mayor
diversidad de establecimientos permitiría comparar las comunidades de habla de
varones y de mujeres en relación a diversas características de los establecimientos.

3.3. INTERPRETACIÓN DE DATOS

A partir de los datos obtenidos en los tres ejes analizados por variables sociales, es
posible dividir los contextos de enunciación en dos: registro cuidado y registro espontáneo, a fin
de establecer conclusiones basadas en el nivel de conciencia de la utilización de los recursos
inclusivos pertenecientes y ajenos a la norma.

Dentro del registro cuidado, se identificaron las siguientes tendencias:

I. Los niveles socioeconómicos medios, dentro de la muestra, utilizanmayormente


recursos inclusivos, tanto pertenecientes a la norma -sustantivos colectivos y recurso
dual- como ajenos -escritura de @, X y E como morfema de género. Los usos ajenos
a la norma estándar solo presentaron niveles de ocurrencia excepcionales, de casos
aislados de informantes.En estudios anteriores, Labov concluía que las presiones
desde arriba ejercidas por el prestigio de un uso -en este caso, utilización de
recursos inclusivos- afectaba en la adquisición de estas formas por parte de los
grupos de la clase media baja, o, como Labov denomina “el segundo grupo en la
jerarquía de estatus” (1983, pág. 168). Este papel de reproducción de formas
prestigiosas, se observa de forma mucho más clara en los contextos de registro
cuidado, como hipercorrección. En los resultados de la presente investigación, se
observa como el NSE identificado como medio, manifiesta un predominante uso de
recursos inclusivos en su escritura, y no así en su expresión oral, momento en que
actúan las presiones desde abajo, al perder el control minucioso de las formas
utilizadas. Resulta necesario considerar que el contexto de registro cuidado en la
parte escrita del instrumento no solo se considera como tal por su carácter escrito,
sino también considerando que el contexto de habla en la recogida de datos fueron

47
conversaciones en torno a temas que se abordaron mediante la lectura y escritura de
opinión frente a tres textos escritos con caracteres “@” y “x” como morfemas de
género. Dicho en otras palabras, el grupo socioeconómico medio evidenció un mayor
cuidado en la forma de su escritura, debido tanto al contexto de enunciación como al
estímulo lingüístico de un recurso inclusivo en los textos leídos.

II. El amplio porcentaje de lectura de caracteres @ y x como /a/ no se aprecia en el


contexto de escritura sino como tres excepciones -una de cada establecimiento-, dos
de las cuales efectivamente leyeron como /a/ el carácter X como morfema de género
-un caso en “presxs” y un caso en “preocupadxs”-. El resto del porcentaje de
hablantes que leyeron como /a/ alguno de los caracteres de los tres textos, no se
encontrarían motivados por presiones desde arriba para esta adecuación, sino a una
respuesta instantánea a adaptar el carácter @ o x, sin relación de uso con la
escritura ni la expresión oral.

III. El único eje en el que los valores de conformidad / no conformidad, manifestados


como apoyo o rechazo a los mensajes de los movimientos o conflictos sociales
leídos, parecen incidir de forma notoria es en la lectura de los caracteres “@” y “x”.
Mientras que los grupos que rechazaron los mensajes, o afirmaron desconocer el
tema sobre cada uno de los conflictos sociales, leen de forma mayoritaria los
caracteres “@” y “x” instantáneamente como /o/, los grupos que apoyan los mensajes
leídos sobre los conflictos tratados, evidencia en mayor número intentos por leer
estos caracteres como morfemas inclusivos, y adaptarlos a una lectura dual. Esta
tendencia es mayormente notoria en el Establecimiento mixto y el Liceo de
mujeres, pero no parece seguir la misma distribución en el Liceo de hombres.

IV. Contrario a lo esperado, los grupos que rechazan los mensajes de los textos no
necesariamente mantienen un mayor uso de neutro masculino en su expresión oral y
escrita. De lo cual es posible desprender que los factores de edad y nivel
socioeconómico y nivel de conocimiento / desconocimiento de los temas sociales
abordados, influyen más directamente en los usos lingüísticos inclusivos que la
adherencia a ideas con las que se asocian estos usos.

Respecto del registro espontáneo, es posible concluir que:

I. En el registro espontáneo, el NSE sí presenta una correlación directa con el uso de


recursos inclusivos, especialmente respecto del uso de sustantivos neutros, que
aumentan junto con el NSE. Esta correlación es mucho más marcada en el grupo de

48
mujeres, que presenta una distribución notoria del uso en la jerarquización de grupos
socioeconómicos.

II. El establecimiento de hombres evidencia un dominio transversal de recursos


inclusivos en la oralidad, y, por tanto, en el registro espontáneo, en todos sus grupos
socioeconómicos, sin correlación entre el nivel socioeconómico individual de cada
hablante y su comportamiento lingüístico en la oralidad. Por lo tanto, el Liceo de
hombres como comunidad de habla tiene características ajenas al nivel
socioeconómico que influyen en la adquisición de este comportamiento lingüístico.
Esta característica del establecimiento puede influir en los resultados obtenidos en la
dimensión de diferencia sexual. Por lo que se reconoce esta limitación del estudio
respecto las diferencias sexuales en contexto de registro espontáneo. En los ejes de
lectura de caracteres @ y x, y de expresión escrita, las diferencias entre
establecimientos no son significativas, por lo que los resultados de diferencia sexual
pueden evaluarse como más concluyentes en esos dos ejes anteriores.

III. El nivel de conocimiento / desconocimiento de los temas sociales abordados


presenta una correlación con el uso de recursos inclusivos en oralidad mucho directa
y notoria que en los otros ejes. Por lo tanto, el desconocimiento de uno o más temas
sociales conflictivos del entorno, influye de forma más directa en el registro
espontáneo, y, por tanto, en las realizaciones lingüísticas que se realizan por debajo
del nivel de la conciencia.

49
CONCLUSIONES

La investigación realizada ha establecido pautas de relación entre variables sociales y


lingüísticas, así como también entre nivel de conocimiento de temáticas sociales y uso de
recursos inclusivos, de forma independiente a la postura personal en torno a los temas
abordados. Contra lo que podría hipotetizarse en torno a la relación entre grupos anarquistas,
marxistas y queer y la elusión del neutro masculino, no se observaron pautas ideológicas de
distribución de usos inclusivos neutros, duales ni de reemplazo de morfema de género.

Al identificar las variantes en el modo de lectura de los caracteres “x” y “@” como
morfema de género en textos escritos, de los datos concluyentes obtenidos, se observó que la
lectura predominante fue la lectura como /o/, es decir, masculinizar el carácter escrito,
adecuando la forma hacia la norma estándar. En muchos casos, los hablantes utilizaron el
recurso dual de reemplazar “@” y “x” por la repetición de las palabras que los contienen, en sus
dos morfemas de género estándar: “los y las”. Sin embargo, en un muy pequeño porcentaje de
estos casos, la adecuación a recurso dual se mantuvo a lo largo de los tres textos leídos. A
partir de esto, puede interpretarse que, al enfrentarse a textos que contienen “@” y “x”, la
mayoría de la población de enseñanza media de la región metropolitana opta por el reemplazo
automático de retorno al neutro masculino. Y, el porcentaje que intenta eludir esta adecuación a
neutro masculino, realiza una adaptación dual de forma no constante. Es decir, motivados por
presiones desde arriba, pero muy difíciles de sostener a lo largo de la lectura. También se
observaron hartos casos de lectura como /a/, en muchos casos relacionadas a patrones sociales
como desconocimiento de uno o más temas sociales, y NSE bajo. De lo que podría deducirse
un porcentaje de confusión de los caracteres no alfabéticos leídos con el grafema a. Pocos
casos también se registraron de complicaciones o reparos expresos en la lectura. De toda la
muestra de los tres casos estudiados, solo un estudiante tuvo reparos en la lectura de los tres
textos; dos estudiantes en la lectura de los dos primeros textos; y dos estudiantes en la lectura
del primer texto.

Determinar las preferencias de usos gramaticales al referirse a grupos humanos mixtos


en la escritura y oralidad, permitió establecer las diferencias entre la distribución social de los
recursos duales y neutros. Fueron estos últimos los que predominaron en ambos casos.

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Identificar las inclinaciones que tienen estudiantes de enseñanza media respecto a los
conflictos y movimientos sociales de su entorno reveló una tendencia mayoritaria hacia una
postura no conformista, es decir, a favor de causas sociales en contra del estado actual de la
sociedad, o bien contra el conservadurismo social. Además, la variable de conocimiento /
desconocimiento de los tres temas abordados resultó clave para establecer correlaciones no
previstas con el uso de recursos inclusivos, de forma mucho más directa que la tendencia
conformista / inconformista al opinar sobre estos temas.

Al relacionar las variables lingüísticas de lectura, escritura y expresión oral con los
diversos grupos sociales, se pudo diferenciar entre el comportamiento lingüístico de la lectura,
que corresponde a la más cercana al signo lingüístico de la @ y la X como morfema de género;
la escritura, que corresponde a la segunda en distancia, y la más cuidada; y, por último, de la
expresión oral

En el eje de lectura, la postura de inconformismo social, el nivel socioeconómico medio,


y el conocimiento de los tres temas abordados fueron tres variables independientes que inciden
en una mayor utilización de recursos duales en la lectura. Por el contrario, el alto
conformismoconservadurismo, el nivel socioeconómico bajo y el desconocimiento de uno omás
temas abordados incidieron directamente en la adecuación constante a neutro masculino en la
lectura. Respecto a la diferencia sexual en el eje de lectura se observa una mayor tendencia
hacia la adecuación dual de la lectura en el Liceo de mujeres, fundamentalmente en los grupos
socioeconómicos altos y en cuarto nivel medio. En los niveles socioeconómicos bajos, y en casi
la totalidad del grupo etario de segundo medio, se observa un mínimo uso de adecuaciones
duales en la lectura. Esta distribución social no se observó en los grupos masculinos, quienes
presentaron un uso similar entre sus grupos etarios y socioeconómicos. De esto es posible
desprender que a mayor nivel socioeconómico y mayor edad dentro de la etapa escolar, las
mujeres toman decisiones más conscientes en torno a la utilización del lenguaje, y se apropian
de él para visibilizarse en los grupos humanos mixtos de forma gramatical, ante la ausencia de
la presencia femenina explícita tanto en el neutro masculino como en el neutro universal del
reemplazo de morfema de género neutro de las imágenes del instrumento.

En el eje de escritura, son los grupos socioeconómicos medios de los tres casos, así
como también las mujeres de cuarto nivel medio quienes utilizan sustantivos neutros para
referirse a grupos humanos mixtos en su opinión. Los usos con transgresiones a la norma
aparecen también distribuidos en estos grupos sociales mencionados. A diferencia de la lectura,
en la expresión escrita el recurso dual es poco usado, y no se distribuye de acuerdo a las pautas
sociales identificadas con los sustantivos neutros y reemplazos de morfemas de género. La
utilización de un uso por parte de los sectores socioeconómicos medios, y no los más altos, es

51
interpretada por Labov como inseguridad lingüística, al intentar utilizar en mayor medida los
usos prestigiosos que el grupo socialmente dominante, principalmente en contextos de registro
cuidado. Esta interpretación pudo confirmarse al obtener los datos del eje de expresión oral, en
el que efectivamente son los grupos socioeconómicos más altos quienes lo utilizan en el registro
espontáneo.
Respecto a las diferencias sexuales en el eje de escritura, se confirmó la tendencia de
mujeres de cuarto nivel medio a utilizar en mucho mayor medida recursos inclusivos de
sustantivos neutros que las mujeres de segundo nivel medio. Es decir, existe una mayor
apropiación del lenguaje, aunque en este caso de forma neutra, es decir, apuntando en la
expresión escrita hacia la igualdad y la universalidad, y no de forma dual -explicitando la parte
femenina en lo gramatical-, como se propone desde las corrientes feministas de la diferencia.

En el eje de oralidad, la utilización de recursos inclusivos duales y sustantivos neutros al


hablar de grupos humanos mixtos se relaciona con el sexo, la edad y el nivel socioeconómico.
De forma general, los niveles medio-alto evidencian una mayor utilización de recursos
inclusivos en la oralidad, principalmente en hablantes mujeres. En muchos casos hablantes de
género masculino de nivel socioeconómico medio-alto utilizaron formas predominantemente
masculinas en sus referencias a grupos humanos mixtos. Esta diferenciación entre expresión
oral masculina y femenina se observa principalmente en el grupo etario de cuarto nivel medio, y
no así en el grupo etario de segundo nivel medio, en el cual hablantes masculinos y femeninas
parecen tener un comportamiento lingüístico mucho más similar entre sí, al igual que en los ejes
anteriores.

En este aspecto dentro de las limitaciones del estudio se encuentra la falta de diversidad
de establecimientos, por lo que los datos de diferencias sexuales podrían ser atribuibles a los
establecimientos estudiados como casos con características particulares adicionales a su
condición de mixto / no mixto. Estudios que contemplen una mayor diversidad de
establecimientos podrían solucionar el problema del Liceo de hombres, que presenta el mayor
porcentaje de ocurrencias de sustantivos neutros como recurso inclusivo. Con los datos
recabados, sí es posible afirmar que el Liceo de hombres como comunidad lingüística es el
que más utiliza sustantivos neutros en su expresión oral -y por tanto en su registro espontáneo,
lo que evidencia un uso más arraigado y menos inseguro de estos recursos-, y reemplazos de
morfemas de género con trasgresiones a la norma estándar en su escritura. Esta tendencia
puede deberse, como se afirmó anteriormente, tanto a características de su comunidad en
particular, como a características transversales a la sociedad en torno al comportamiento
lingüístico masculino, y una posible tendencia hacia recursos que tienen un prestigio manifiesto,
y que a la vez no exceden la universalidad del neutro gramatical como forma de referirse a
grupos humanos mixtos.

52
Otra de las limitaciones del estudio es la explicación de las abruptas diferencias entre
los grupos sociales socioeconómicos y etarios en la comunidad de habla del Liceo de mujeres,
que también podrían explicarse desde un panorama mayor, que observe otros establecimientos
de mujeres y sus diferencias internas. Una posible explicación de esta mayor heterogeneidad
podría radicar en la presión de la lengua institucional androcéntrica sobre las hablantes mujeres,
y cómo la posibilidad de rebelarse contra la invisibilización y negación de las mujeres en el
lenguaje se hace posible solo por ahora en mujeres con un alto nivel socioeconómico, y en
determinada edad en la que abruptamente toman una mayor conciencia lingüística y un rol
activo en la apropiación del discurso.

Respecto a las proyecciones que pueden desprenderse del presente estudio, además
de las mencionadas en lo referente a ampliación de establecimientos y niveles socioeconómicos
a la muestra, proponemos la posibilidad de estudios a largo plazo que podrían determinar si las
generaciones menores tendrán un aumento una disminución de recursos inclusivos con el pasar
de los años. Esta proyección nace de la pregunta ¿cómo la generación de segundo medio del
2018 evidenciaría una mantención, aumento o disminución de usos de recursos inclusivos en
dos años más, es decir cuando estos cursen cuarto medio? Esto para comparar la evolución de
los recursos inclusivos de género, considerando edad y generación como variables separadas, y
así establecer comparaciones diacrónicas entre las generaciones.

53
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Violi, P. (1991). El infinito singular. Madrid: Ediciones Cátedra.

56
APÉNDICES

N°1

Entrevista a estudiantes de enseñanza media

Completa los datos que se solicitan a continuación. Recuerda que tu participación es anónima y que ni tu nombre ni el del
colegio saldrán mencionados en ningún resultado ni informe de la investigación. Y su registro al momento de entrevistar
es sólo para organizar temporalmente la información recogida.
Establecimiento: ________________________________________________________________________
Encierra en un círculo según corresponda:
Curso: 2º medio 4º medio
Género tuyo: Femenino Masculino Otro ______________________________

Observa las siguientes imágenes y lee texto que aparece en ellas


Imagen 1

Escribe tu opinión sobre qué piensas del texto que aparece en la Imagen 1
____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________

57
Imagen 2

Escribe tu opinión sobre qué piensas del texto que aparece en la Imagen 2
____________________________________________________________________________
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____________________________________________________________________________
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Imagen 3

Escribe tu opinión sobre qué piensas del texto que aparece en la Imagen 3
____________________________________________________________________________
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____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________
____________________________________________________________________________

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N°2
Guion del entrevistador

El instrumento contempla las siguientes partes:

I. Curso, nombre y anonimato

Hola. ¿De qué curso de media eres? Ya, perfecto. ¿Tu nombre? El mío es XXX. Por si acaso
tu nombre no va a salir en ningún resultado de la investigación, ni tampoco el nombre del
colegio. Todo esto sólo va para estadísticas, y no vas a salir mencionado. Sólo yo me voy a
acordar de tu nombre. (llamar por el nombre desde ahí en adelante; intentar imitar el estilo de
habla de la persona entrevistada, para hacerle sentir en una conversación horizontal).

II. Establecimiento de confianza (10 minutos)

Conversar sobre su estadía en el liceo, dónde estudió antes, con quién vive, y contarle
también sobre nuestras vidas, de forma relajada y sin prisa. Se puede tirar la talla.

III. Entrega de la forma para persona entrevistada, y aclaración de las instrucciones de lectura y
escritura.

En esta hoja aparecen unas fotos con unos lienzos escritos. La idea es saber tu opinión personal
sobre los mensajes de los textos. Entonces, primero que nada, observa bien cada foto, lee el
mensaje, y escribe lo que piensas tú sobre lo que dice. No hay respuestas buenas ni malas. Sé
sincero, espontáneo, lo que piensas en realidad sobre lo que dice cada lienzo.”

IV. Observación de lectura silenciosa o en voz alta de los textos en cada fotografía y completar
la tabla de registro.

V. Redacción de respuestas por parte de la persona entrevistada VI. Entrevista oral grabada.

a. ¿Podrías leer el texto que aparece en la imagen 1?


b. ¿Podrías leer la opinión que escribiste de la imagen?
c. Ya. Explícame esa parte. ¿A qué te refieres? (De sernecesario, invitar a explayarse)
d. ¿Podrías leer el texto que aparece en la imagen 2?
e. ¿Podrías leer la opinión que escribiste de la imagen 2?
f. Ya. Explícame esa parte. ¿A qué te refieres? (De sernecesario, invitar a explayarse)
g. ¿Podrías leer el texto que aparece en la imagen 3?
h. ¿Podrías leer la opinión que escribiste de la imagen 3?
i. Ya. Explícame esa parte. ¿A qué te refieres? (De sernecesario, invitar a explayarse)

VII. Preguntas vinculadas al nivel socioeconómico

a. Perfecto. Unas últimas consultas:

i. ¿Quieres continuar estudios después del colegio?


ii. ¿Quétegustaríaestudiar?
iii. ¿En tu familia alguien estudió algo similar? iv. ¿Con quiénvives?

v. ¿Terminaron el colegio? ¿Estudiaron algo después?


vi. ¿A qué se dedican actualmente? (ahondar en esto hasta que se aclare el cargo
o actividad)

VIII. Agradecimientos

IX. Decir código de estudiante en voz alta y parar de grabar.


59
N°3

Matriz de Validación

Título del proyecto: Percepción y uso de caracteres no alfabéticos como reemplazo de morfema de género en
estudiantes de enseñanza media de la ciudad de Santiago.

Objetivo de investigación: Describir la valoración, lectura, incorporación en textos escritos y orales, y vinculación con
la identidad social que realizan estudiantes de enseñanza media de los signos no alfabéticos como reemplazo del
morfema de género.

INSTRUCCIONES: Revise instrumento, luego marque El ítem recoge El ítem La estructura El ítem La secuencia
con una X en la casilla que corresponda, anote sus información propuesto del ítem es la responde a la del ítem facilita
observaciones en el espacio asignado al final del que permite dar responde a los adecuada operacionaliza- el desarrollo
documento. respuestas al objetivos del ción de la del instrumento
problema de estudio variable
investigación

Dimensió
Variables Indicador ítem Sí No Sí No Sí No Sí No Sí No
n

Lectura Lectura
silenciosa o en de las
Lectura
voz alta de los tres
textos fotos
Percepción
Presencia o En
Yvaloración
ausencia de
cualquier
comentariosobr
Oralidad momento
e el uso de
de la
caracteres no
alfabéticos entrevista

60
Variables Dimensión Indicador ítem Sí No Sí No Sí No Sí No Sí No
Uso Manifestación
del fenómeno en Comentarioescritofoto
Escritura
la escritura del 1
hablante
Manifestación
del fenómeno en Comentarioescritofoto
Escritura
la escritura del 2
hablante

Manifestación
del fenómeno en
Escritura Comentarioescritofoto3
la escritura del
hablante

Manifestación
del fenómeno en
Oralidad Comentario oral foto 1
la oralidad del
hablante
Manifestación
del fenómeno en
Uso Oralidad Comentario oral foto 2
la oralidad del
hablante
Manifestación
del fenómeno en
Oralidad Comentario oral foto 3
la oralidad del
hablante

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