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Entrenando Fútbol:
Dinámicas de Optimización Técnica
y Mental
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E
Introducción
l propósito principal de este libro es dar a conocer la importancia del aspecto mental al
momento de jugar, y buscar la excelencia en el fútbol. Se han publicado muchos libros
sobre como mejorar el aspecto físico de los jugadores (fuerza y acondicionamiento), del
mismo modo se han contemplado aspectos técnicos y estratégicos, sin embargo, y pese
a que los anteriores son las bases mínimas que cada jugador debe tener al momento de
jugar, el aspecto mental es también primordial, aunque muchas veces ignorado. Muy pocos
recursos se enfocan al aspecto mental en el entrenamiento. A continuación se presentan algunos
ejemplos que muestran claramente el aspecto mental del fútbol.
Este libro pretende ir más allá de las estrategias básicas, revelando una parte importante
del fútbol, el aspecto mental. Se presentan numerosos conceptos, incluyendo dinámicas de
desarrollo mental, barreras del desempeño, expansión de capacidades, automatización del
desempeño y habilidades mentales y de estrategia. La información se deriva de la experiencia
del autor, quien ha sido consejero de grandes personalidades del deporte, así como de las
investigaciones más actuales sobre la ciencia en el campo de juego, incluyendo psicología del
deporte, desarrollo motriz, pedagogía, fisiología de la fuerza, del acondicionamiento, y del
ejercicio.
Este libro está dividido en tres secciones generales. La sección I describe los principales
elementos para la excelencia en el desempeño, básicamente talento, habilidades, dinámicas y
automatización de la ejecución. El talento es algo con el que se nace, mientras que las
habilidades, involucran patrones como el movimiento, elementos físicos y la habilidad de ser
mental y emocionalmente asertivo. Las dinámicas técnicas engloban los detalles de cada tarea
principalmente la automatización de las habilidades de ejecución. El último capítulo de esta
sección detalla la importancia de la conexión cuerpo-mente en el desempeño deportivo.
Específicamente se contemplan habilidades mentales ofensivas y defensivas, además de
cuestionarios para los atletas que determinan sus fortalezas y debilidades en el aspecto de las
habilidades mentales.
La sección II está dirigida hacia las tan numerosas barreras que pueden intervenir en el
intento del jugador por alcanzar el máximo nivel de talento y habilidad. Estas barreras van
desde las del tipo físico, técnico y estratégico hasta las numerosas barreras mentales y de
motivación de un equipo. Esta sección concluye con una explicación de cómo esas barreras
interfieren tanto en el aspecto técnico y mental de un jugador.
La sección III enseña a los jugadores y entrenadores cómo superar esas barreras de
modo que dominen el talento natural, las habilidades y las dinámicas. Ayudar a los jugadores a
romper con las difíciles barreras de desempeño permite “despejar su mente” de cualquier
interferencia, lo que les permite enfocarse en mejorar su desempeño. Las habilidades mentales
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suelen pensarse meramente psicológicas, y por ende fuera del alcance de lo que los
entrenadores saben. Esta sección detalla las distintas formas en las que los entrenadores utilizan
estrategias para la preparación mental en el entrenamiento diario. Además de estos métodos
de entrenamiento mental, también se contemplan métodos para mejorar el rendimiento de los
jugadores y de todo el equipo. También se incluyen numerosos diagramas, cuestionarios y
formatos de retroalimentación para equipar mejor a los entrenadores con las herramientas
necesarias para combatir las barreras de desempeño.
Así como existen distintas maneras enseñar la técnica a un jugador, también hay
muchas formas de mejorar la fortaleza mental. El entrenamiento de la mente va más allá de
sólo “pensar positivo”, jugar “relajado”, o “mentalizarse” antes de un juego. Dominar las
habilidades técnicas necesarias para alcanzar altos niveles de desempeño requiere
entrenamiento de calidad, un gran compromiso, y un deseo por ser mejor. Esto es esencial
cuando se busca ser un jugador más completo y mentalmente más fuerte. Los jugadores deben
comprometerse no solamente a mejorar sus habilidades adquiridas, sino también a ser más
consciente de las muchas barreras que se presentan en el desempeño y que pueden interferir
con el juego (la razón de que las cosas no vayan bien). El último paso es ser capaz de reaccionar
rápidamente para vencer una barrera en particular mediante el uso de una técnica específica
para fortalecer la mente.
Espero que este libro ayude a los jugadores, entrenadores, y equipos a maximizar su
potencial de desempeño mediante la valoración de los aspectos emocionales, mentales y de
motivación.
Eliminar el mito existe alrededor de la psicología del deporte es otro objetivo de este
libro, ya que muchos entrenadores todavía sienten que el aspecto mental a la hora del juego no
es importante, y que los principios de la psicología del deporte no aplican para el fútbol. El libro
ofrece muchos ejemplos de cómo el entrenador puede utilizar la psicología del deporte en su
práctica diaria. Es muy importante para los entrenadores darse cuenta que la psicología del
deporte puede usarse para mejorar sus propias prácticas de entrenamiento así como mejorar el
desempeño de los jugadores y el equipo en general.
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Más allá de las X’s y las O’s: Talento, habilidad, fortaleza y mecánicas.
E l talento, las habilidades, la fortaleza, y las mecánicas-son palabras que se usan todos
los días para evaluar los componentes más importantes del desempeño de un jugador y
del equipo.¿Pero qué significan realmente estos conceptos? Estas palabras representan
en realidad, factores determinantes del desempeño tanto el atleta como el equipo
(figura 1.1). Aunque talento es algo con lo que se nace, las habilidades, la fortaleza mental y las
mecánicas son elementos que pueden mejorarse a través de un buen entrenamiento y prácticas
dirigidas.
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En primer componente del potencial atlético es el talento, básicamente lo que sus
padres generosamente le heredaron al atleta. Sean o no bienvenidos estos dones, son
relativamente estables y están más allá del control consciente del jugador. El talento incluye
patrones genéticos como la altura, el peso, capacidad de atletismo, velocidad, coordinación,
rapidez, flexibilidad, y tipo de cuerpo. Aunque un jugador en particular probablemente no
tenga todos los dones de un gran atleta, no significa que esté limitado de alguna manera. Sino
más bien significa que no será tan fácil alcanzar grandes retos como lo es para aquellos que
tienen más cualidades. Sin embargo, otras cualidades como la dedicación, el compromiso y la
fortaleza son más importantes dentro del aspecto integral.
El siguiente componente son las habilidades, aquellas en las que los jugadores tienen
dominio total y consciente, a diferencia del talento. Las habilidades aprenden y pueden ser
constantemente mejoradas y desarrolladas. Los patrones básicos de movimiento como saltar,
correr, trotar, dedicarse, bucear, y cargar son todas habilidades. También lo son habilidades
físicas y visuales como lanzar, atrapar, patear, bloquearon, tacklear, y reaccionar a las
situaciones de cambio.
Mientras que las habilidades de movimiento, físicas y visuales son importantes, otras dos
habilidades adicionales se necesitan para una jugada óptima, la fortaleza mental y emocional.
Estas habilidades son ampliamente reconocidas por su importancia cuando se habla de alto
desempeño, sin embargo muchas veces son ignorada al momento de las sesiones de práctica. Se
dice con frecuencia que en los altos niveles del fútbol, el talento y las habilidades siempre están
presentes entre los jugadores, sin embargo, lo que hace la diferencia es el nivel de fortaleza
mental. El jugador oficial de la NFL Ron Jenkins recientemente escribió que "la diferencia entre
ser un jugador profesional y alguien que no puede hacer un roster es principalmente lo que hay
en la mente de cada uno" (2003, p. 2). También afirmó que los jugadores con más talento no
siempre juegan en base a lo que piensan ni al control de sus emociones, al momento de intentar
vencer ciertas situaciones.
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El último componente del potencial atlético son las mecánicas mentales. Cada jugador
en el campo desempeñar sus diferentes habilidades dependiendo de suposición y de su tarea
específica en cada juego. Los programas de entrenamiento específico se deben desarrollar a
través del tiempo con calidad, a través de un entrenamiento repetitivo. Para que los jugadores
puedan llevar al campo de juego lo que repetidamente aprenden en las prácticas, cada
mecánica debe enseñarse, practicarse, evaluarse y así practicarse una y otra vez. Una vez que el
atleta comienza a perfeccionar cada habilidad técnica, deben implementar a las sesiones de
práctica simulacros de juegos. Incorporar técnicas mecánicas en el entrenamiento diario prepara
mejor a los jugadores, a fin de que su ejecución sea de calidad tanto en la práctica como a la
hora del juego. El siguiente paso será buscar que los jugadores ejecuten estas mecánicas
automáticamente, sin pensar sobre lo que tienen que hacer y cómo lo tienen que hacer. Este
proceso de automatización, o de mecánicas mentales, es uno de los temas principales en este
libro.
C
uando los jugadores comienzan aprender a lanzar, a patear, o a atrapar el balón,
deben concentrarse en los pequeños detalles, empezando por aplicar
correctamente las habilidades necesarias, escuchar críticamente las instrucciones
del entrenador, y practicar en repetidas ocasiones (figura 2-1). Después de cada corrección, el
proceso debe repetirse una y otra vez. Al principio, pueden practicar una sola habilidad a la
vez. Conforme vayan avanzando, los errores seguirán eliminando. Una vez que los jugadores
comienzan a perfeccionar sus técnicas particulares, empezarán a desempeñar sus habilidades y
necesidad de pensar cada detalle. En vez de eso, se desarrolla en los jugadores del programa de
automatización así como una memoria muscular que les dirige el camino para ejecutar la
tarea. Esta habilidad de automatizar y no pensar demasiado en el juego durante la ejecución es
un aspecto valioso para optimizar el juego.
Una analogía que se usa con frecuencia para describir este proceso en la del adolescente
que aprende a manejar. La primera vez encuentra asustado, está enfocado en el proceso,
siempre vino al frente, porque está tratando de recordar cada paso del proceso, desde que
supone el cinturón de seguridad, enciende el carro, lo pone en reversa, y observa en todas
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direcciones antes de comenzar. Una vez que entraba carretera, la verdadera aventura
empieza. Los factores externos como otros carros, transeúntes, cruceros, luces, y señales,
requieren de inmediata y constante atención, así como verificar constantemente la velocidad
del auto y mirar por los retrovisores. Las distracciones internas del conductor también están
presentes, como lo son los miedos y la ansiedad de manejar por primera vez. Pero después de
numerosos intentos, los interminables pasos y las distracciones potenciales parecen desaparecer,
de modo que el nuevo conductor de repente escapar de mantener el carro del camino mientras
cambia de canción del reproductor de CD o mantiene una conversación con sus pasajeros, sin
realmente pensar en el proceso que está llevando a cabo. Este ejemplo ilustra cómo la
automatización de un proceso se da gracias a la práctica continua y de calidad que involucre
procesos físicos, técnicos y mentales.
En los ejemplos anteriores, el sujeto, sea un atleta o un conductor, tiene que pensar sobre
cada acción específica para llevar a cabo la tarea. Sin embargo, cuando se empiezan
acostumbrar a la actividad, el cuerpo de manera automática ejecuta el proceso, lo que significa
una eficiente mecánica técnica, que no requiere de concentración.
Hay que tomar en cuenta que incluso los atletas de más alto nivel pasan por este
proceso de aprendizaje cada vez que se cambian sus técnicas mecánicas. En algunas situaciones,
especialmente cuando un jugador está luchando por vencer una barrera de desempeño, los
cambios se hacen en un programa ya establecido de entrenamiento.
Como una nota adicional, es importante decir que el método no es recomendado para
reparar los efectos que ya ha tenido el mal desempeño. En la mayoría de los casos, hacer
cambios solamente nos llevará a más problemas mecánicos, ya que éstos cambios usualmente
no se practican de manera tan extensa como se necesita. La sección dos detalla numerosas
barreras de desempeño que podrían inicialmente causar, o asistir en la mejora continua de los
problemas de desempeño.
Para integrar completamente incluso el más pequeño cambió, el atleta debe enfocarse
en cada detalle del proceso, tal y como lo haría si estuviera empezando. Una vez que éstos
cambios se han hecho, los errores se convierten en una parte importante del proceso.
Asimismo, los cambios deben hacerse solamente cuando existe el tiempo suficiente de
práctica para incorporar estos cambios. Con práctica continua y de calidad, los cambios se
integran y el desempeño deseado comienza a darse. Tiger Woods, el mejor futbolista en el
mundo, ha introducido cambios significantes en su manera de juego a través de los años, incluso
después de haber ganado muchos torneos. Detrás de cada cambio hay horas y horas de
práctica, intentando revisar cada detalle de un programa motor previamente establecido y
exitoso. No existe otro ejemplo mejor en el mundo de los deportes de alguien que siempre está
buscando alcanzar un mayor nivel de grandeza que él. Hacer este tipo de cambios es riesgoso
para muchos, por el tiempo que requieren para incrementarse. Incluso los más grandes, como
Tiger, deben dedicar mucho tiempo de práctica a fin de integrar éstos nuevos elementos antes
de que se pueda asegurar una automatización del proceso.
"Llega el momento en que uno se transforma en un piloto automático, jugando por instinto y
sentimiento. Significa encontrar tu propia forma de juego por ti mismo. Algunas veces pensamos
mucho en debe confiar en nuestra voz interna que nos dice que podemos hacerlo."
-Tiger Woods (2001, p.259)
¿De qué manera puede un jugador mejorar sus técnicas mecánicas y mentales de modo
que elementos externos no interfieran con su desempeño? La respuesta se encuentra en saber
cómo maximizar la interconexión entre cuerpo y mente, lo cual es el principio de la psicología
del deporte. Maximizar la conexión entre la mente - lo que incluye pensamientos, voz interna,
actitudes, sentimientos, motivación, y percepción - y el cuerpo - englobando sensaciones físicas,
reacciones emocionales, eficiencia técnica, y desempeño físico - confiar a una conciencia de
cómo trabaja esta colección. El capítulo 3 provee la información necesaria para mejorar ésa
conciencia de cómo la mente puede ayudarnos, o incluso atacar el desempeño atlético.
También se presenta un modelo aplicado que describe como los atletas pueden usar esa
conexión entre mente y cuerpo para maximizar su desempeño.
La relación cuerpo-mente:
Maximizando la capacidad de excelencia
“Hablando del aspecto mental del juego...Pienso que éste es parte de nuestro juego hoy
en día”
-Tom Coughlin, Head Coach de los Gigantes de New York (Stellino, 2002, p. D10)
“”Básicamente se trata de reflexionar antes del juego: qué tan bien has jugado y te has
desempeñado, un análisis positivo de lo que se ha hecho”
- Danny Clark, Linebacker, Jaguares de Jacksonville (Stellino, 2002, p. D10)
“Cosechas lo que siembras, no se pueden hacer las cosas a medias. Los entrenadores no dicen
que el juego es 90% mental nada más porque sí”
-Mike Stoops, Head Coach, Universidad de Arizona (Dufresne, 2004, p. D12)
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La siguiente pregunta nos arroja situaciones específicas que proveen más evidencia de
cómo la relación entre el cuerpo y la mente afecta el desempeño dentro del fútbol. Cada
pregunta se refiere a una de las diez conexiones cuerpo-mente. ¿Cuántas de estas situaciones
encuentra usted comunes a las vividas por su equipo y jugadores a lo largo de la temporada?
1. ¿Algunas veces parece que los jugadores hundirán con ejecutar una jugada aunque
ya la tenían bien aprendida? El exceso de ansiedad puede afectar la concentración, la memoria,
y la ejecución de ciertas habilidades pese a que éstas hayan sido bien aprendidas. La ansiedad
también que de atención física o incrementa la interferencia mental, lo que nos lleva a afectar
niveles de confianza en las habilidades propias y de desempeño.
3. ¿Qué tan seguido los jugadores hablan negativamente de ellos mismos antes, durante,
o después de un juego? Las autocríticas negativas afectan la confianza, motivación, ansiedad y
desempeño del jugador.
4. ¿Los jugadores del equipo se consideran ellos mismos como lentos al momento de
jugar? El uso de generalizaciones, puede etiquetar la fortaleza por la debilidad de un equipo en
base a los resultados de un solo juego es una actitud que genera más problemas. Por ejemplo, si
un equipo comienza un juego perdiendo, pero al final gana, podrían considerarse como "lentos".
Éste tipo de etiquetas pueden convertirse en en un hábito donde este equipo siempre comience
lento, sin dar un buen juego, dejando al aire la oportunidad de ganar en vez de basar el triunfo
en una base consistente.
5. ¿Los jugadores juegan bien después de cometer errores? La mayoría de los jugadores
que no son capaces de superar sus errores continuarán cometiendo las mismas fallas. Si los
jugadores no se han preparado para vencer los contratiempos vividos en su desempeño,
mediante reenfocar su ejecución, continuarán cometiendo errores o faltas que los sacaran
simplemente del juego.
7. ¿Los jugadores se desempeñan bien aún bajo presión? Ayudar a los jugadores a
entender lo que tienen que hacer y a mantener control sobre sus emociones, permite que ellos
enfoquen en la necesidades del juego independientemente de la situación y la ansiedad.
8. ¿Cuántos jugadores son buenos en las prácticas, pero tienen un desempeño menor al
momento de los partidos? Los jugadores que mejor se desempeñan en las prácticas pierden algo
al momento de estar en un partido. Los miedos y la ansiedad son los principales culpables de
esta situación, aunado a la escasa habilidad para combatir estas barreras de desempeño. El
talento y las habilidades se verán siempre limitadas si estas barreras no se superan.
9. ¿Algunas veces parece como que los jugadores se rinden después de una experiencia
amarga? La adversidad debe superarse a toda costa. Un método es tener planes organizados
para combatir las adversidades que se presentan en el desempeño de los jugadores, otro
método consiste en mejorar el control de las reacciones emocionales ante la adversidad.
10. ¿Conocen realmente los jugadores sus fortalezas y debilidades? Los jugadores que no
están conscientes sobre lo que realmente saben hacer y lo que no, tienden a desempeñarse de
una manera pobre, ya que no tienen un enfoque adecuado sobre lo que pueden hacer para
alcanzar el desempeño óptimo.
Este tipo de preguntas acentúan la importancia que tiene la manera en que los
jugadores piensan y hablan de ellos mismos antes, durante y después de un juego, así como el
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impacto que estos pensamientos y autorreflexión tienen sobre las acciones, sensaciones,
comportamientos, y desempeño en general del jugador. Además, la manera en que los
jugadores reaccionan emocionalmente ante las situaciones de presión de adversidad pueden
tanto afectar cómo mejorar el nivel de desempeño.
"Algunas veces cuando no se ha tenido éxito, solo vemos lo negativo de las cosas... sin
embargo, se debe tener una actitud positiva ante todo."
-Fred Taylor, Running Back, Jaguares de Jacksonville (Stellino, p. D10)
Aunque las preguntas que hemos planteado con anterioridad sirven principalmente para
identificar las debilidades que algunos jugadores pueden tener en la interconexión cuerpo-
mente, estas mismas preguntas son útiles para mostrar las fortalezas que ya se tienen en ese
mismo aspecto. Los jugadores que se desempeñan con calidad en los entrenamientos y
mantienen ese alto nivel de desempeño en los juegos, son aquellos que no se dejan intimidar por
la presión o la adversidad y trabajan duro aunque el medio no les favorezca. Este éxito es el
resultado de una fortaleza mental y emocional que se puede desarrollar. Como se dijo en el
capítulo 1, algunos jugadores heredan el talento necesario para desempeñarse de manera
óptima en los juegos, incluyendo talentos en el aspecto físico, técnico y de habilidad mental,
mientras que otros jugadores tienen que trabajar más duro para desarrollar y maximizar sus
habilidades.
La figura 3-2 es un modelo aplicado que puede ser usado por los entrenadores, a
cualquier nivel de competencia, para ayudar a los jugadores a expandir todos los aspectos que
el fútbol involucra, incluyendo las capacidades de cada jugador. Como se indica, la pirámide
representa siete categorías de suma importancia para lograr un óptimo desempeño. La base de
la pirámide representa aquellas áreas que regularmente se cubren en un entrenamiento básico,
aspectos que son considerados como más importantes por algunos entrenadores, y que son
fáciles de alcanzar y mejorar. Las áreas que se encuentran hacia la punta de la pirámide,
representan aquellos aspectos que se entrena el con menor frecuencia y que son más difíciles de
desarrollar y perfeccionar, especialmente si no se cuenta con información y estrategias. Los
entrenadores han puesto gran énfasis en la ayuda hacia los atletas para maximizar sus
habilidades físicas, técnicas y estratégicas. Aunque algunos entrenadores enfatizan la
importancia de la unidad como equipo y la eficiencia del mismo, un reto importante para estos
entrenadores es ayudar a los jugadores expandir sus capacidades mentales, emocionales y de
motivación.
Maximizar las capacidades de desempeño permitirá a los jugadores acercarse cada vez
más a su potencial máximo mediante pulir sus habilidades y fortalezas mecánicas a la vez que
se mejora en las áreas de debilidad. Antes de que está mejora se pueda realizar, los jugadores
deben estar conscientes de sus fortalezas y debilidades.
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Figura 3-2 Expandiendo las capacidades del jugador para desarrollar un juego individual más completo.
Las capacidades de desempeño son definidas por una lista de cualidades que pueden ser
observadas tanto por los entrenadores como por los jugadores. Aquellos jugadores y equipos
que poseen y muestran estas particulares cualidades son aquellos que se acercan más hacia la
optimización de su capacidad en un área específica. Por ejemplo, un jugador que es tiene una
fortaleza condición física considerable, es posible que maximize su capacidad física, y así mejorar
su posibilidad de éxito. Los jugadores que pueden ser considerados como jugadores completos o
integrales, con toda honestidad pueden afirmar que alcanzan por completo un nivel óptimo en
las siete áreas que se muestran en la pirámide. Sin embargo, aquellos jugadores que no llevan a
cabo esta práctica no alcanzan a optimizar sus capacidades, y reducen su oportunidad de tener
éxito tanto en la práctica diaria y semanal como en el campo de juego.
Capacidad Física
Algunas de las características típicas de la optimización de la capacidad física son:
• Jugadores que preparan su cuerpo al máximo tanto para la práctica común para los
juegos mediante una alimentación balanceada y asegurándose de estar bien
hidratados.
• Jugadores que se preparan, aún cuando ya terminó la temporada, en todos los
aspectos del acondicionamiento: fuerza, resistencia, velocidad, flexibilidad, resistencia
aeróbica, potencia, agilidad, masa corporal y la altura de sus altos.
• Jugadores que descansan de manera adecuada a fin de recuperarse entre juegos y
prácticas.
Capacidad Técnica
Algunas de las características típicas de la optimización de la capacidad técnica son:
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• Jugadores que se enfocan en los aspectos mecánicos de sus habilidades cuando se trata
de aprender algo nuevo, o añadir algo nuevo a alguna habilidad previamente
aprendida.
En el capítulo 1 se enlistaron muchos técnicas mecánicas relacionadas con las habilidades del
jugador, incluyendo aspectos locomotores, así como elementos preceptúales y conceptuales que
deben ser incluidos en el entrenamiento diario. Los jugadores que son capaces de determinar
por ellos mismos las áreas mecánicas específicas en las que su desempeño no es el deseado,
también son capaces de hacer las correcciones necesarias en esta área durante la práctica y el
juego mismo. Motivar a los atletas a desarrollar este tipo de introspección y auto-análisis,
conocida como auto-regulación en el mundo de la psicología del deporte, puede ser invaluable
para el desarrollo de un jugador.
Capacidad Táctica
Algunas de las características típicas de la optimización de la capacidad táctica son:
• Jugadores que conocen las jugadas necesarias así como el rol que tienen en las mismas
(tareas defensivas y ofensivas)
• Jugadores que observan el vídeo del juego a fin de analizar su desempeño a nivel
táctico.
• Jugadores que también saben lo que sus compañeros de equipo están haciendo, o
deberían hacer en ciertos casos.
La mayoría de los entrenadores están conscientes de como una actitud egocéntrica por
parte de los jugadores puede arruinar el camino del equipo hacia el éxito. ¿Están los jugadores
realmente dispuestos a sacrificar el “yo” por el “nosotros”? ¿Existen en su equipo jugadores que
están más interesados y comprometidos con su crecimiento individual que con el crecimiento
colectivo del equipo? Sin un compromiso honesto con el equipo, éste fallará al intentar cubrir sus
expectativas y alcanzar su potencial máximo.
Capacidad Mental
Algunas de las características típicas de la optimización de la capacidad mental son:
• Jugadores en los que se puede confiar constantemente, sin importar la manera en que
ellos o el equipo se esté desempeñando.
• Jugadores que son capaces de prepararse constantemente para vencer a cualquier
oponente, y así no tener un desempeño ni nivel de competencia pobres.
• Jugadores que se mantienen enfocados en su rol específico en vez de distraerse
pensando en errores del pasado o preocupándose de si la jugada que están a punto de
hacer funcionará o no.
• Jugadores que superan sus errores con éxito, y del mismo modo aprenden de ellos a fin
de prepararse para lo que venga.
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• Jugadores que son capaces de motivarse ellos mismos a fin de jugar al máximo en
cualquier juego sin importar el oponente, así como dar lo mejor de ellos a lo largo de las
sesiones de práctica.
• Jugadores quienes constantemente se olvidan de la parte consciente y comienzan a
confiar en sus habilidades, se dejan llevar simplemente por ellas y por su conocimiento,
más que pensar de qué manera van ejecutar las acciones.
Capacidad Emocional
Algunas de las características típicas de la optimización de la capacidad emocional son:
• Jugadores que siempre son capaces de lidiar con los eventos inesperados, comentarios de
alineación debido a heridas sufridas por un jugador, jugadas interceptadas, un cambio
de jugador, o cambios en el itinerario como llegar tarde al juego debido a problemas de
transporte o a las inclemencias del clima.
• Jugadores que son capaces de que superar sus errores y no dejarse vencer por la
frustración. Aquellos que superan otro tipo de adversidades, como decisiones del
entrenador, acciones y actitudes de los compañeros del equipo o decisiones de los
árbitros.
• Jugadores que son capaces de mantenerse fuertes y resistentes aún frente a la fatiga, al
hambre y a pequeños dolores.
• Jugadores que son capaces de liberar su mente del miedo y la ansiedad, y controlar sus
emociones de modo que puedan jugar con su talento y habilidades al máximo.
Los jugadores que son emocionalmente asertivos juegan libremente sin preocuparse lo
que otros piensen o digan de ellos o de su juego. Estos jugadores no se limitan ellos mismos
inventando excusas antes del juego para justificar un mal desempeño que su falta de confianza
les hace prever, por ejemplo este tipo de jugadores suelen declarar cosas como: “simplemente
hoy no es mi mejor día”; “mi tobillo todavía está sensible", "apenas me estoy recuperando de
aquél resfriado”; "no juego bien bajo la lluvia, nieve, o calor". Si estos jugadores carentes de
fortaleza emocional fallan en algún momento del juego, y la crítica comienza a señalarlos
como malos jugadores, estas excusas son usadas por ellos para protegerse para proteger su
imagen de jugadores estrella.
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Capacidad de Motivación e Inspiración
Algunas de las características típicas de la optimización de la capacidad de motivación e
inspiración son:
• Jugadores que realmente aman jugar fútbol así como la posición en la que juegan.
• Jugadores están comprometidos y por ello hace lo necesario para mejorar su desempeño
individual.
• Jugadores que saben exactamente porque juegan fútbol y lo que esperan lograr en este
deporte.
• Jugadores que encuentran inspiración y motivación en muchas cosas, incluyendo en sus
esfuerzos, compañeros del equipo, entrenadores, y otras fuentes inspiración externa,
como lo son otros jugadores, entrenadores y compañeros anteriores, o incluso artículos
que hayan leído.
Las secciones de la pirámide de la figura 3-2 se amplía en la figura 3-4, la cual contiene
preguntas para los jugadores a fin de que las respondan y se use la información obtenida para
ayudarlos a concientizar sobre su nivel de desempeño actual. Antes de que cualquier jugador
pueda operar bajo el máximo de sus capacidades, debe estar consciente de su nivel actual de
desempeño y de que tan lejos está este nivel del actual. Si la mayoría de sus jugadores responde
que “no” a las preguntas, esto indica que no están trabajando para alcanzar una optimización
de su desempeño. Las respuesta marcadas con un “si” indican un progreso hacia la formación de
jugadores completos que se desempeñarán de manera más adecuada.
Otro ejercicio consiste en pedir a los jugadores que determinen el porcentaje de falla con
respecto a estos siete componentes. Por ejemplo, si un jugador comete la mayoría de sus errores
porque se atrasa o va muy despacio con respecto al modo de jugar de sus compañeros, quizá
necesite mejorar su velocidad y agilidad (capacidad física). Aquellos jugadores quienes cometen
muchas faltas debido a su frustración, necesitan trabajar más con el aspecto de sus emociones
(capacidad emocional).
Otra buena idea es hacer que los jugadores formen parte de una lluvia de ideas cuyo
tema principal serían aquellas cosas que no han sido capaces de lograr debido a las barreras
que involucran estos siete componentes. La retroalimentación que se obtenga a partir de esta
dinámica puede ser importante para sesiones posteriores donde se deberán establecer las metas
del equipo y las distintas soluciones a estas barreras de desempeño.
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Inspiración
Fortaleza
Emocional
Mecánicas / Fortaleza
Mental
Conocimiento Táctico
Eficiencia Técnica
Fortaleza Física
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Las numerosas habilidades mentales se dividen en dos categorías principales: las
habilidades mentales ofensivas y las defensivas. Ya que los jugadores aprecian importancia del
aspecto defensivo y ofensivo del juego, este modelo usa la misma terminología que los jugadores
usan en un juego. Así como los equipos de fútbol necesitan ser sólidos en ambas áreas para ser
exitosos, los atletas para tener éxito deben pulir sus habilidades mentales ofensivas y defensivas.
McCann (2002) ha definido las habilidades ofensivas como aquellas que permiten que los
jugadores se desempeñen al máximo y así dominar la forma en que se desenvuelven. Estas
habilidades incluyen confianza, enfoque competitivo, preparación, planeación, estar listos para
cualquier cosa, visión, y entrenamiento de calidad. Las habilidades defensivas permiten a los
jugadores mantenerse fuertes ante la adversidad. Habilidades como la capacidad de
reenfocarse y recuperarse de la adversidad, la habilidad de controlar las emociones y los niveles
de energía, así como la capacidad de estar listos para el siguiente juego, son las que forman las
habilidades mentales defensivas.
Hacer que cada jugador complete este cuestionario dará información importante tanto al
jugador como al entrenador. Por ejemplo, si un jugador obtiene un puntaje alto (lo que en esta
encuesta representa debilidad), esto indica deficiencias en el área específica lo que implica que
dicha área deberá convertirse en una prioridad. Si un jugador tiene un puntaje alto en todas las
habilidades mentales ofensivas, entonces éste está fallando en dominar su desempeño, debido a
la falta de confianza en sus propias habilidades y capacidades, mientras que un alto puntaje en
las habilidades mentales defensivas indica problemas en el aspecto emocional.
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Test de Habilidades Mentales Ofensivas y Defensivas
Encierre en un círculo la opción que mejor completa la oración respecto a su situación actual.
Clave
Nunca: 0 Muy rara vez: 1 Rara vez: 2
Algunas veces: 3 Con frecuencia: 4 Muy frecuentemente: 5 Siempre: 6
Nunca Siempre
1. _______ me preocupa cometer errores. 0 1 2 3 4 5 6
2. _______ me resulta difícil superar mis errores. 0 1 2 3 4 5 6
3. _______ me repongo rápidamente de los contratiempos. 0 1 2 3 4 5 6
4. _______ me invade la ansiedad y los nervios antes y durante el juego 0 1 2 3 4 5 6
5. _______ me aferro a mis errores y los cargo conmigo en los juegadas posteriores.
0 1 2 3 4 5 6
6. _______ hago mi mejor esfuerzo aún bajo presión.
0 1 2 3 4 5 6
7. _______ me resulta difícil motivarme cuando juego ante un equipo no tan bueno.
0 1 2 3 4 5 6
8. _______ sufro de ansiedad cuando el partido de torna complicado (clima, marcador, etc.)
0 1 2 3 4 5 6
9. _______ doy una caminata vigorizante en el medio tiempo (especialmente cuando estoy
cansado o frustrado por lo que ocurrió en la primer mitad) 0 1 2 3 4 5 6
10. Los espectadores _______ pueden deducir por mi actitud que cometí un error o que me estoy
0 1 2 3 4 5 6
desempeñando de manera deficiente.
11. Mis entrenadores y compañeros de equipo _______ pueden deducir por mi actitud y 0 1 2 3 4 5
comportamiento que estoy frustrado o molesto.
0 1 2 3 4 5 6
12. Si tengo dificultades en el juego, _______ no culpo a mis entrenadores ni compañeros.
13. _______ me considero un jugador seguro de sí mismo. 0 1 2 3 4 5 6
24. _______ creo imágenes mentales sobre mi plan de juego (visualizo mis jugadas) 0 1 2 3 4 5 6
25. _______ entreno con constancia con un alto nivel de intensidad. 0 1 2 3 4 5 6
26. _______ simplemente hago lo que tengo que hacer en los entrenamientos, me dejo llevar. 0 1 2 3 4 5 6
27. _______ me concentro en la práctica y en los juegos aunque tenga problemas personales. 0 1 2 3 4 5 6
28. Cuando entreno, _______ tengo un propósito o meta espécifica a lograr. 0 1 2 3 4 5 6
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Evaluación: Para determinar las fortalezas y debilidades de sus habilidades mentales, utilice el siguiente método de
calificación del test por sección. La evaluación para las preguntas 3,5,7,10,18,20,21,23,24,25 es opuesta: 0=6, 1=5, 2=4, 3=3, 4=2, 5=1,
6=0.
Sección 1: Las preguntas 1-4 están relacionadas con la habilidad de reenfocar la atención y recuperase ante la adversidad
(errores, contratiempos)
Sección 2: Las preguntas 5-8 están relacionadas con la habilidad de controlar el nivel de intensidad (nivel de ansiedad/
tensión muscular)
Sección 3: Las preguntas 9-12 tienen que ver con la presencia física cuando se tiene que enfrentar a la adversidad.
Sección 5: Las pregunta 17-20 están relacionadas a la capacidad de concentrarse aún frente a las múltiples distracciones.
Sección 6: Las preguntas 21-24 tienen que ver con la habilidad para prepararse física y mentalmente para los entrenamientos y
juegos.
18
Sección II:
Barreras que limitan la excelencia en el desempeño
5
Estas variables que interfieren, son conocidas también como barreras de desempeño, y
definitivamente tienen la capacidad de interferir con el esfuerzo en la ejecución (figura 5-1). Las
barreras de desempeño que se abarcan en este capítulo van desde las físicas (por ejemplo, no
tener la suficiente condición física), la técnicas (por ejemplo, debilidad al momento de realizar
un pase) hasta la tácticas (por ejemplo, no entender el juego).
La mayoría de la gente sabe lo que puede pasar si el tanque de un auto se llena con el
tipo equivocado de combustible, el carro comienza a tener un desempeño inadecuado, hasta
que se apaga. Esta analogía es usada con frecuencia para plasmar una imagen clara de lo que
ocurre en nuestro cuerpo cuando no se tiene una alimentación adecuada. Los jugadores de
fútbol, necesitan energía que solamente puede obtenerse a través de los alimentos líquidos.
Los carbohidratos son la fuente primaria de energía para una actividad intensa, las
grasas son necesarias y proveen energía para actividades de larga duración (por ejemplo,
actividades cardiovasculares), y las proteínas son esenciales para el desarrollo muscular. ¿Están
realmente los jugadores ingiriendo la cantidad necesaria de estos nutrientes, así como de
vitaminas y minerales esenciales? Cada una de las vitaminas y minerales esenciales, son útiles
para ciertas funciones en el cuerpo. Referencias específicas sobre dichas funciones se presentan
en la sección 3, que ofrece con gran detalle la relación entre la nutrición y el óptimo desempeño
en el deporte.
20
sueño. Cualquier cosa que entra nuestro cuerpo puede tener tanto efectos positivos como
negativos no sólo en el sueño sino también en el desempeño en general.
21
6
Barreras de equipo
Las barreras de equipo incluyen aquellas variables que pueden interferir con los
jugadores al momento de buscar maximizar sus contribuciones hacia el equipo; esfuerzo
colectivo. El término "equipo" se usará aquí para representar a todos los miembros del equipo,
pero bien podría adaptarse a cada unidad que conforman las distintas posiciones, como la
alineación ofensiva/defensiva, receptores, ofensa, defensa secundaria, así como el personal de los
equipos especiales.
Hacerse las siguientes preguntas relacionadas con el equipo ayuda a identificar las
barreras de potencial del equipo que requieren mayor atención:
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Estas preguntas sacan a relucir las numerosas barreras que deben enfrentar la mayoría de
los equipos de fútbol. Como muestra la figura 6-1, estas barreras incluyen la falta de
compromiso hacia los objetivos del equipo, falta de sacrificio por el equipo, escasa comunicación,
falta de aceptación de los roles, entrenamiento de calidad dudosa, poca confianza en el equipo,
y la falta de responsabilidad. En el capítulo 9 se detallan estrategias para construir un
verdadero equipo una excelente comunicación, así como distintas maneras específicas para
poder implementar estas estrategias tanto en pequeñas unidades de posición como en otras
más grandes, como es el caso de la ofensiva y defensiva.
Barreras Mentales
Ir más allá de las “X’s & O’s” conlleva tomar conciencia de la existencia de barreras de
desempeño, así como de la existencia de estrategias para superarlas. Hacer que los jugadores
completen el formato del capítulo 4 sobre habilidades mentales ofensivas-defensivas ayudará a
los jugadores a tener una mejor conciencia de las barreras mentales y emocionales específicas
que actualmente interfieren con su ejecución. Las barreras mentales comunes, como lo indica la
figura 6-1, incluyen pensamientos negativos, concentración inadecuada, poca confianza en sí
mismos, preparación inadecuada, miedo a allá, escasa capacidad para lidiar con el estrés y la
adversidad, y expectativas poco realistas. Todas estas barreras tienen el potencial para
influenciar la ejecución y desempeño ya que interfieren en la cabeza de cada uno de los
jugadores. La actividad mental poco productiva cubre cuando un jugador no tiene confianza
en su propio talento, habilidades, fortaleza mental y entrenamiento.
Para hacer más específicos, la interferencia mental se refiere a cualquier actividad mental
que interviene con la ejecución automática de una habilidad bien aprendida y desarrollar,
también se refiere a las mecánicas mentales. Esta actividad mental poco productiva incorpora
los siguientes aspectos:
• Pensamientos negativos (“Espero no dejar ir este pase”) .
• Ser analítico incluso cuando la ejecución está a punto de realizarse (parálisis al
momento del análisis de la jugada)
• Vencerse/atacarse uno mismo (“No podré, es muy rápido para mí).
• Pensar en el pasado (“Solté este pase la última vez que lo intenté).
• Preocuparse por un evento que probablemente ocurra en el futuro. (“¿Qué tal si
vuelvo a fallar y suelto este pase de nuevo?”)
¿Qué tan seguido sus jugadores piensan como en el ejemplo anterior? ¿Cuándo han
tenido un mal desempeño, cuántas veces han pensado así? En la mayoría de los casos, cuando
los jugadores se desempeñan bien, su mente está libre de este tipo de pensamientos y piensan
de manera productiva en situaciones que les benefician para mejorar su desempeño.
Barreras Emocionales
Como lo indica la figura 6-1 las barreras emocionales incluyen: un control insuficiente de
la intensidad, falta de apoyo social, falta de capacidad para superar el estrés, y una falta de
confianza en las habilidades personales.
Las barreras emocionales afectan de maneras distintas a los atletas. Algunos atletas
responden mejor al momento del juego cuando se encuentran con una gran carga emocional,
incluso pueden llegar a mostrar enojo y frustración hacia su oponente, mientras que otros
juegan mejor cuando están más relajados. En general los atletas que juegan mejor cuando
tienen una carga emocional tienden a visualizar un objetivo personal, el juego se vuelve 1 a 1. La
clave está en darse cuenta qué funciona para cada atleta.
Una gran variedad de incidentes pueden suscitarse si los atletas no mantienen el control
sobre sus emociones. Un buen ejemplo de esto se dio en la Liga Mayor de Baseball en el tercer
juego de los Playoffs de la Liga Americana en 2003. El pitcher de los Boston Red Sox Pedro
Martínez quien golpeó en la cabeza con la pelota a un bateador de los Yankis de Nueva Cork,
lo que ocasionó una gran frustración entre los dos equipos.
Entonces Roger Clemens lanzó una bola rápida al bateador de los Red Sox, lo que llevó a
sustituir a varios jugadores, llevando incluso al entrenador Yankee de 72 años, Don Zunner, a
dar un puñetazo a Martínez. Después en el juego un pitcher Yankee supuestamente le di un
23
puñetazo al jardinero de los Red Sox. ¿Cómo es posible que ocurra esto sólo por no saber lidiar
con las emociones y la frustración? El comentarista Peter Gammons comentó que éste había
sido “un juego vergonzoso” para los dos equipos y para el béisbol en general.
Ejemplos como estos ilustran muy bien cómo la falta de control emocional puede afectar a
los jugadores y al juego mismo, y no permite que los jugadores se recuperen ante los
contratiempos durante un juego. Algunos jugadores tienen poca tolerancia hacia el estrés, así
que cuando la presión empieza parecer, y se mezcla con la adversidad, como los errores, estos
jugadores se frustran demasiado al tratar de mantenerse enfocados en el juego. Algunos
jugadores no tienen la capacidad de adaptarse a ciertas rutinas cuyo único objetivo es
ayudarles a manejar mejor el estrés y la adversidad, así que a medida que el estrés se
incrementa, la tensión muscular y/o los pensamientos negativos se incrementan, lo que ocasiona
más errores mecánicos y eventualmente, una deficiencia total en el desempeño. El capítulo 11
detalla estrategias que pueden usarse para superar éstas barreras.
Barreras de Inspiración
Una falta de inspiración tiene que ver con el por qué alguien práctica un deporte en
particular y con lo que lo hace más feliz mientras juega. Los atletas practican deporte por
cientos de razones ¿saben ser porque jugadores practican fútbol? ¿Qué han aprendido con esta
experiencia de practican fútbol? Con frecuencia los motivos de los jugadores para practicar el
deporte son incongruentes con los motivos de sus entrenadores. Los atletas que no tienen los
mismos motivos que los de sus entrenadores para practicar este deporte (jugar mejor, gran,
campeonatos), no se satisfacen con dicha experiencia, y no tratan de jugar con la misma
intensidad.
Preguntarle a los jugadores cuáles son sus motivos principales para jugar, así como sus
futuras aspiraciones (mental, sueños) en el fútbol, ayudará para interiorizar en lo que mueve y
motiva a cada jugador. Entonces, los entrenadores podrán ayudar a los jugadores a conocer
bien sus motivos principales, lo que posteriormente se convierte en una forma de motivar al
jugador para que comience a adoptar los motivos principales del entrenador. Los entrenadores
generalmente quieren que sus equipos mejoren, practiquen más duro, u obtengan resultados.
Los motivos principales de los jugadores pueden variar desde una búsqueda por mejorar su
juego hasta simplemente formar parte de un equipo. La mayoría de los entrenadores asumen
que comparten los mismos motivos que sus jugadores, lo cual en la mayoría de los casos es falso.
La figura 6-1 enlista otras barreras adicionales de inspiración que se deben considerar, como la
falta de un propósito, satisfacción, y el que no se disfrute el esfuerzo que se realiza en el deporte.
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7
25
Fallas en el procesamiento de la información
Interferencia
• Causa/consecuencia mecánica: cambios en las mecánicas técnicas (patrones de lanzamiento).
• Causa/consecuencia mental: actividad mental excesiva (estática); incapacidad de atención.
• Causa/consecuencia de desempeño: analizar demasiado las situaciones; no interceptar correctamente.
Fallas de secuencia
De objetivos
• Mecánicos: cambios en la mecánica.
• Mentales: miedo a fallar ante el objetivo principal, y miedo de los resultados de lanzar un pase.
• De desempeño: tensión excesiva innecesaria e indeseada; no interceptar correctamente.
De Premura
• Mecánica: cambios en la mecánica.
• Mental: estar muy enfocado a los resultados y no en el proceso; expectativas de éxito irreales
(posibilidad de 1 a 10 de que se logre)
• De desempeño: aumenta la tensión, lo que provoca una reducción del movimiento físico y efectividad
técnica; poca precisión; intercepciones incompletas.
De Control
• Mecánico: movimientos poco efectivos; cambios en la mecánica.
• Mental: temor al no cumplir con el objetivo, miedo a los resultados.
• De desempeño: poca precisión; intercepciones incompletas.
Los jugadores que están concentrados en lo que pasa a su alrededor tienden a analizar
demasiado el ambiente que les rodea, lo que a veces puede convertirse en un problema. De la
misma manera, estar concentrado demasiado en el medio exterior significa concentrarse
demasiado en el ambiente que rodea, y no pensar en lo que se necesita hacer para ejecutar con
éxito una jugada.
De Objetivos
Cuando los quarterbacks están muy concentrados en un pase, significa que están
demasiado preocupados tanto por dicho objetivo como por las manos del receptor. Una vez
que los quarterbacks intentan controlar excesivamente sus pases, suele ocurrir un ligero cambio
en la ejecución mecánica, así que los pases que suelen ser objetivo principal de estos
quarterbacks con frecuencia son muy largos o muy cortos. Los pateadores que hacen demasiado
énfasis en un objetivo específico también realizan este tipo de cambios en su mecánica a fin de
alterar el rumbo del balón. Algunos pateadores limitan tanto su atención que pierdan
información valiosa que está a su alrededor, por ejemplo la dirección del viento. Los pateadores
y los quarterbacks deben ser capaces de descifrar estos elementos que están a su alrededor e
integrar aquellos que sean necesarios para una buen ejecución, además de hacer a un lado
aquellos que no son útiles, aquellos de un programa motor previamente establecido en los
entrenamientos.
De Premura
La mecánica también puede verse alterada cuando los quarterbacks, por ejemplo, se
enfocan demasiado en un pase al punto de tratar de forzarlo, cubriéndolo de manera limitada,
lo que agrega tensión y cambios en la secuencia de movimientos en la jugada. Esto se relaciona
con el concepto de fallas por precipitarse, aspecto que también puede apreciarse cuando los
running backs o kick returners pasan por la línea aún cuando saben que no hay posibilidad de
pasar, no hay por donde pasar; lo que provoca que pierdan el balón debido al contacto con el
26
oponente. Hacer las cosas de manera acelerada, con premura, es muy común cuando un
jugador tiene el balón en sus manos, ya que intenta a cada momento huir del oponente,
especialmente cuando está muy cerca de anotar. Intentar pasar el balón por una fuerte línea
defensiva formada por cuatro, seis o más tackles, es una jugada muy arriesgada y que augura
poco éxito, que probablemente culmine con perder el balón o soltarlo ya que muchos de estos
tackles intentarán atacar al aventurado jugador. Por otro lado, los pateadores también son
culpables de hacer las cosas con premura al momento de intentar patear el balón muy fuerte y
lejos, ya que cambian su mecánica usual. El sentido común diría que si se pone más fuerza en
lanzar o patear, la jugada mejoraría, pero si esta fuerza no es la que usual usa el jugador, la
mecánica cambia, y se altera la trayectoria y la dirección del balón. Esto también aplica para
los jugadores que tratan de que el oponente retroceda 50 yardas, por ejemplo.
De control
Un escenario relacionado con este aspecto podría ser el de un quarterback que está
lleno de miedo de fallar en interceptar un pase y así intenta tener demasiado control sobre el
pase para no fallar. Este control sobre el pase es el resultado de preocuparse demasiado por los
resultados a obtener en el juego, en vez de ser el resultado de una buena ejecución automática,
en vez de ser el resultado de sólo lanzar el balón al receptor como lo dicta la jugada. De
manera similar, la ejecución mecánica de este pase (al estar demasiado controlado) también
cambia de alguna manera, provocando justo lo que el quarterback temía antes del
lanzamiento; que intercepten el pase. Los pateadores que se preocupan demasiado por los
resultados de su pateo, o quienes no pueden superar alguna falla que hayan tenido minutos
antes, probablemente repitan este error ya que tratan de tener demasiado control en sus
mecánicas de pateo, las fuerzan demasiado. Del mismo modo, los receptores y kick-returns que
temen a arruinar un pase también suelen intentar tener un control excesivo sobre los pases;
fuerzan demasiado la acción de atrapara el pase. También se pueden ver a los running backs
agarrando con demasiada fuerza al balón y muy concentrados en el aspecto individual por
miedo a soltar el balón, de modo que no se percatan de lo que le rodea, por ejemplo, de que un
tackle esta cerca de él dispuesto a quitarle el balón.
¿Qué porcentaje de los errores cometidos por los jugadores se deben a fallas específicas
en las mecánicas mentales? Ayudar a los jugadores a darse cuenta de las causas de sus errores
les proporciona información valiosa de cómo corregir esos errores mecánicos. Los capítulos que se
incluyen en la siguiente sección de este libro, Sección III, especifica estrategias de entrenamiento
que pueden practicar los jugadores para combatir de una manera eficaz los errores de
secuencia y procesamiento de la información, de modo que no sólo podrán pulir sus mecánicas
mentales, sino que también podrán ejecutar de manera automática sus distintas habilidades
necesarias para un buen juego.
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Sección III:
Estrategias de Entrenamiento para
Automatizar la Ejecución
8
28
Tip #5 Evaluaciones previas al entrenamiento
Es importante evaluar los niveles de condición y fuerza física antes de empezar un
programa de acondicionamiento específico. Debido a los principios de individualidad y
progresión, cada jugador debe ser evaluado de manera individual antes de comenzar cualquier
programa de acondicionamiento físico. Tener una noción de los niveles de cada jugador tanto
de fuerza, como de velocidad, potencia y resistencia es esencial cuando se trata de diseñar un
programa de acondicionamiento para áreas específicas. Características físicas, edad, experiencia
en acondicionamiento y en el juego, así como el estado actual de salud del jugador, son
características importantes que requieren ser sumamente consideradas.
Asegurarse de que los jugadores conozcan técnicas apropiadas para levantar peso,
consideraciones de seguridad, etc., es primordial a la hora de iniciar un programa. Antes del
entrenamiento físico en particular, se deben llevar a cabo numerosas evaluaciones. Para poder
realizar ejercicios para fortaleza física, los jugadores deben ser capaces de levantar 1.5 veces su
peso corporal una vez, hacer bench press con un peso de 1.5 su peso corporal una vez, o 5
lagartijas con palmada. También se deben hacer evaluaciones previas relacionadas con la
velocidad.
Tip #6 Excelente Alimentación
Información sobre este aspecto se trata en este capítulo, especialmente en las áreas de
información nutrimental, los efectos de la hidratación, contenido de la comida previa a los
partidos, y la alimentación como medio para una óptima recuperación.
Tip #7 Entrenamiento de recuperación
Atletas y entrenadores de los mas altos niveles, han considerado últimamente a la
“recuperación física” como parte esencial del entrenamiento. Cabe mencionar que la
recuperación es más que descansar fuera del entrenamiento. La recuperación puede ser pasiva-
detenerse a ver videos, usar imágenes mentales, o distraerse en un pasatiempo favorito - o
activa – croos training, flexibilidad extra, yoga, o sesiones de ejercicio de menor intensidad. El
entrenamiento de recuperación no sólo es importante por razones fisiológicas, sino también para
la recuperación mental y emocional.
Tip #8 Hidratación
Ya que los atletas sólo recuperan dos terceras partes del agua que pierden al sudar, ellos
mismos se ponen en riesgo de una deshidratación y por ende un decremento en su desempeño.
Más información sobre este asunto se trata en este capítulo.
Tip #9 Dinámicas de Flexibilidad
El estiramiento estático, a través del cual cada estiramiento toma 30 o 40 segundos, ha
sido la forma más recomendada de entrenamiento de flexibilidad por años, pero las dinámicas
de estiramiento están ganando popularidad. Con este tipo de estiramiento, se imitan en
cuestión de velocidad y forma los movimientos que el jugador realizará al momento de jugar.
Por ejemplo, los running backs y los receptoes usarían movimientos de piernas largos y
movimientos de rodillas para mejorar su elasticidad y preparar a sus músculos para desempeñar
acciones similares ya sea en el entrenamiento como en el juego. El estiramiento asistido (entre
compañeros) ha sido usado desde hace mucho tiempo para incorporar estiramiento pasivo y
activo. Éste tipo de estiramiento también llamado PNF (proprioceptive neuromuscular
faciliation), puede ser la mejor forma de entrenar las flexibilidad basados en las tres acciones
musculares fundamentales para la elasticidad; los ciclos de tensión - relajación – contracción.
Tip #10 Entrenamiento y Acondicionamiento de Calidad
El capítulo 12 describe en detalle un modelo para mejorar la calidad de la práctica, que
puede ser aplicado directamente al entrenamiento enfocado en el acondicionamiento y la
fuerza física. Este modelo está basado en la observación de sesiones de entrenamiento así como
en el análisis de los procesos dinámicos que requieren responsabilidad tanto del jugador como
del entrenador. Los cuatro aspectos más importantes del modelo incluyen mejorar la actitud
tanto del entrenador como del atleta hacía el entrenamiento, las prácticas de preparación,
estrategias de ejecución, y métodos de control de calidad posteriores a la práctica.
30
siempre con un nivel de desempeño bajo y sin entrenamiento, lo que no solamente les afecta de
manera individual sino a todo el equipo.
Implementación de un Entrenamiento Intenso (estrés)
Un último punto sobre la fortaleza física es que los entrenadores deben estar conscientes
de que la implementación de un entrenamiento más intenso debe ser con sumo cuidado.
¿Cuántos entrenadores realmente saben qué tanto entrenar y que tanto exigir a sus jugadores
física y técnicamente? Para optimizar el desempeño, los atletas, entrenadores, y entrenadores
auxiliares con frecuencia adoptan regímenes de entrenamiento acelerado. Esto con frecuencia
se convierte en un incremento de intensidad en el entrenamiento, con sesiones de entrenamiento
más largas, y periodos más cortos de recuperación, lo cual perjudica la posición física, psicológica
y emocional del individuo.
La película hecha para televisión de ESPN The Junction Boy muestra métodos de
entrenamiento de Paul “El Oso” Bryant durante su primera temporada en Texas A&M. Las
agotadoras prácticas, bajo el intenso sol y sin agua eran un estándar en el campo de
entrenamiento que se presenta en esta película. Posteriormente, se observa como ya a la
temporada los jugadores que quedaban estaban tan agotados que terminaron la temporada
sólo con dos victorias. El mensaje esta película es la importancia que tiene saber diferenciar
entre un entrenamiento fuerte, consistente integral de uno cuyo principal objetivo es acabar con
los jugadores. Con la ayuda de investigadores en la ciencia del deporte, se han documentado
distintos síndromes causados por un entrenamiento muy intenso, causados por entrenamientos
inadecuados cuyas características van desde entrenar demasiado, carecer de tiempo de
recuperación, dolor muscular, y agotamiento.
Para que los atletas mejoren su condición física, incrementen su fuerza, y sean más
fuertes mental y emocionalmente, que requiere de cierto nivel de estrés. De acuerdo a Loehr
(1994), para que los atletas se desempeñen al máximo de su potencial deben incrementar su
habilidad para manejar tres tipos de estrés - físico, emocional, y mental - hacerse más fuertes y
resistentes a estos niveles de estrés. La mayoría de los entrenadores a los más altos niveles saben
que un entrenamiento con cierto nivel de estrés necesita ser manipulado con mucho cuidado
para que realmente ayude a mejorar el desempeño del jugador. Ajustar cuidadosamente en el,
la intensidad, y la frecuencia del entrenamiento con cierto nivel de estrés se llama
entrenamiento sobrecargado. Después de implementar éste entrenamiento sobrecargado, y una
vez que el equipo se ha adaptado, y se ha recuperado parcialmente de esta sobrecarga de
trabajo, lo cual puede tomar días o semanas dependiendo de la actividad física, se debe
implementar un período de entrenamiento con sobrecarga de trabajo reducida, lo cual recibe el
nombre de entrenamiento reducido. El entrenamiento reducido normalmente ocurre días o
semanas antes de una competencia importante y permite que los cuerpos de los atletas se
recuperen, y adapten a periodos de entrenamiento intenso. Este tipo de programas preparan al
atleta de una manera adecuada para maximizar su desempeño de modo que éste sea máximo
el día del juego. Cuando los atletas no son capaces de adaptarse a los regímenes de un
entrenamiento sobrecargado, se tiene resultados de adaptación negativos.
31
Ejecución técnica Aspecto Mental
• Entrenamientos monótonos. • Fatiga mental.
• Falta de calidad en la ejecución. • Falta de concentración.
• Pérdida de coordinación. • Falta de motivación.
• Comunicación pobre con los entrenadores. • Confusión.
• Confusión de rol. • Capacidad para resolver problemas
pobre.
Intensidad de trabajo • Pensamiento negativo.
• Disminución en la intensidad de trabajo. • Depresión.
• Dejarse llevar por las emociones en
la práctica y en el juego. Aspecto emocional
• Verse afectado por el dolor y las heridas. • Irritabilidad.
• Disminución en la potencia. • Mal humor.
• Aburrimiento.
Fisiología • Tristeza.
• Pérdida de peso. • Ansiedad.
• Aumento del ritmo cardiaco. • Incapacidad para disfrutar la actividad.
• Dificultad para vecindad. • Pesimismo.
• Retraso para recuperar el ritmo • Pérdida de la autoestima.
cardiaco normal. • Actitud negativa.
• Aumento de la fatiga muscular
Figura 8-3 Consecuencias de la pérdida de efectividad debida a un entrenamiento excesivo y carencia de tiempo de
recuperación
Para vencer con éxito los efectos de la tensión y la pérdida de agilidad en los atletas se
puede usar un proceso multi-etapas. Este proceso inicia con conocer mejor la causa que
originaron el síndrome por entrenamiento excesivo, analizando los aspectos emocionales, físicos,
y fisiológicos. Numerosos factores que también contribuyen a desarrollar tensión y pérdida de
agilidad fueron encontrados por Henschen (1986), los cuales incluyen la duración de una
temporada de juego, la monotonía del entrenamiento, la falta de motivación positiva,
32
actitudes violentas por parte de los entrenadores, reglas muy estrictas, altos niveles de estrés por
competencias, logros escasos, y aburrimiento.
Para alcanzar un desempeño óptimo, las dos principales metas alimenticias para la
mayoría de los atletas de alto nivel son comer para incrementar su desempeño y comer para
tener una buena constitución corporal, de acuerdo con Reimers y Rud (2000). De acuerdo a la
Asociación Nacional de Acondicionamiento Físico (NSCA), las mejores dietas para mejorar el
desempeño son aquellas que se asignan de manera individual y personalizada. Lo que funciona
para un atleta, no necesariamente funciona para otro. Las dietas personalizadas para
jugadores de fútbol deben seguir ciertos lineamientos. Todos los atletas deben:
33
• Monitorear de manera adecuada la ingesta de calorías. Por ejemplo, los lineamientos
generales de ingesta de calorías para los atletas entre 17 y 23 años: 5’7’’ y 5’8’’ = 2900 calorías
por día; 5’9’’ = 3100; 5’10’’ = 3200; 6’ = 3400; 6'1 = 3500, y así sucesivamente (USC, 2003)
• Consumir la cantidad apropiada de nutrientes para prevenir deficiencias.
• Seguir dietas que contengan las porciones recomendadas por grupo alimenticio.
• Evitar omitir alimentos de algún grupo, ya que esto puede provocar deficiencias en
nutrientes específicos.
• Consumir cantidades significativas de macronutrientes, es decir proteínas (20% de calorías),
carbohidratos (60% de calorías), líquidos (menos del 30% de calorías).
• Evitar dietas libres de grasa o bajas en grasa porque pueden provocar deficiencias en
nutrientes claves.
• Consumir la cantidad adecuada de vitaminas y minerales.
• Subió de peso de manera segura (de una a dos libras por semana) ingiriendo de 350 a 750
calorías adicionales a los requerimientos diarios, además de comer cinco veces al día (cinco
comidas con alto nivel calórico).
• Perder peso de manera segura (de una a dos libras por semana), comiendo en una de 2000
calorías por día (podrían ser más), y comiendo de manera balanceada, mediante comidas
variadas cinco veces al día.
• Tener comidas previas al juego que hidraten y den energía de manera adecuada para
obtener un mejor desempeño.
La sección de referencias al final de este libro incluye sitios en Internet para mayor
información sobre nutrición.
La comida previa al juego debe ingerirse de 3.5 a cuatro horas antes de la competencia.
Esto debe ser tiempo suficiente para permitir que el estómago esté relativamente vacío.
Además, la comida debe consistir principalmente en carbohidratos complejos, como pastas,
granos, vegetales, arroz, y frijoles. La deficiencia de glicógeno afecta el desempeño. Los
alimentos ricos en carbohidratos proporcionan este tan necesario carbohidrato. Los
carbohidratos se convierten en azúcar (glucosa), misma que los músculos queman para energía;
la glucosa que no se utiliza se almacena en los músculos y el hígado en forma de glicógeno para
su uso posterior. El glicógeno es el combustible preferido porque es más fácil de quemar que la
grasa, y están más disponible para los músculos. Cuando existe una deficiencia del glicógeno de
los músculos, se usa en su lugar la glucosa, pero es muy difícil mantener niveles de energía
durante un juego largo usando glucosa como la fuente de energía (Roberts, 2001).
34
estomacal en algunos jugadores. Los alimentos grasos por también se deben evitar por el exceso
de grasa y el lento proceso para digerirlos.
No se debe confiar en la sed como un preciso indicador de que el cuerpo necesita agua.
Aquellos que esperan hasta este punto de tener sed, solamente pueden recuperar entre el 50 y
el 75% de los líquidos que necesita el cuerpo. Además, conocer el peso de cada jugador previo y
posterior a las sesiones de trabajo puede ser un método útil para monitorear la pérdida de peso.
Por cada libra perdida de peso, el jugador ha perdido 473 mL. de fluidos. En el transcurso de la
semana, quien jugador pierde de cinco a diez libra, esto indica una pérdida de fluidos
sustanciosa, ya que la pérdida de grasa no ocurre tan rápido (Reimers & Ruud, 2002).
Cada jugador debe tomar por lo menos dos vasos llenos de agua dos horas antes del
entrenamiento/juego – esto permite a los riñones procesar el exceso de fluidos en 60 a 90
minutos – y tomar uno o dos vasos adicionales 15 minutos antes, lo que disminuye el aumento
de la temperatura corporal y reemplaza las pérdidas por sudor. Además, tomar más agua cada
15 o 20 minutos durante un juego o entrenamiento mantendrá a los jugadores bien hidratados.
Entre más agotador sea el entrenamiento, más alta la temperatura, y más grande sea el atleta,
mayor debe ser la ingesta de líquidos antes, durante, y después del entrenamiento/juego. La
pérdida de fluidos también indica una pérdida de electrolitos y sodio, elementos esenciales para
regular la distribución del agua en el cuerpo. Las bebidas rehidratantes son muy útiles para
recorrer el sodio perdido, así como otros electrolitos importantes como el potasio, cloro, y
magnesio.
Aunque algunas investigaciones han indicado que el uso del color de la orina para
regular los niveles de hidratación es un método poco preciso, no todos los investigadores están
de acuerdo. La regla clásica sería buscar un color pálido de la orina después del entrenamiento.
Los jugadores deben acostumbrarse a tomar varios vasos de agua y de bebidas rehidratantes
después del juego.
El agua es un fluido ideal para reemplazar los perdidos por el ejercicio, aunque las
bebidas deportivas o rehidratantes pueden ser más efectivas que el agua para rehidratar, ya
que contienen electrolitos, azúcar, y carbohidratos. Esto es especialmente cierto después de una
pérdida de peso significativa debido al sudor (Reimers & Ruud, 2002).
35
Eficiencia Técnico/Táctica
Mejorar las mecánicas técnicas de los jugadores, así como mejorar la manera en que los
jugadores llevan al campo de juego lo aprendido en los entrenamientos, requiere de esfuerzo
por parte de los atletas y entrenadores. Debido a la importancia para el óptimo desempeño, el
tema de cómo mejorar los entrenamientos se trata en el capítulo 12, donde se presenta un
modelo para mejorar la calidad del entrenamiento mediante pulir la actitud del entrenador del
jugador, su preparación, ejecución, y monitoreo de procesos. La componente del modelo incluye
numerosas estrategias que los jugadores y entrenadores pueden incorporar para mejorar su
ejecución técnica y táctica.
Algunos atletas sabotean su ejecución técnica y táctica antes de jugar mediante fallos
mentales. Los fallos mentales pueden ocurrirle a cualquier jugador, pero especialmente a los
quarterbacks, pateadores, receptores, corners, linebackers, safeties, running backs y long
snappers.
Los jugadores que son constantes con frecuencia tienen altos niveles de confianza y creen
fuertemente que algo bueno pasará en cada juego. Los jugadores constantes con frecuencia son
más eficientes para bloquear distracciones y concentrarse en cada juego, mientras también
practican las jugadas. Por otro lado, aquellos jugadores que no son constantes, pueden no estar
comprometidos física y mentalmente con mejorar su juego. Esta falta de compromiso puede
tomar distintas formas, incluyendo la creencia de que las técnicas fundamentales de
entrenamiento son una pérdida de tiempo, que las jugadas podrán ejecutar en situaciones
críticas sin entrenar, y que no es necesario desempeñarte con calidad de los entrenamientos.
Esencialmente, estos jugadores no se dan cuenta de la importancia del aspecto mental de
patear, lanzar, correr, bloquear, o atrapar.
Los jugadores que no son constantes podrían estar perdiendo jugadas clave debido a
grandes errores mentales previos a la ejecución. Los errores mentales principalmente se
presentan dentro de las cinco habilidades mentales:
• Confianza.
• Confiar en la preparación y habilidades.
• Concentrarse en componentes importantes de las habilidades.
• Compromiso para mejorar la ejecución en el entrenamiento.
• Ejecutar una jugada a la vez.
Los jugadores que son afortunados de tener bien desarrollados estos cinco aspectos, ejecutar
sus habilidades sin necesidad de esfuerzo y de manera automática. Los jugadores que
“pierden mentalmente” oportunidades normalmente carecen de uno o más de estos
aspectos mentales. Los siete errores mentales típicos se describen en la siguiente sección, así
como distintas maneras para corregir estos errores. La mayoría de los ejemplos que se
enlistan son principalmente de quarterbacks y pateadores, pero estos fallos mentales
pueden aplicar fácilmente para la mayoría de las posiciones.
Un trabajo de equipo efectivo con frecuencia puede ser la diferencia entre tener
éxito o fallar. Esta situación se puede ejemplificar mediante la paradoja de equipos
llenos de jugadores talentoso que fallan al momento de usar sus recursos y se quedan
cortos en sus expectativas, mientras que equipo con gente no tan talentosa y con menos
recursos prevalecen (Hardy & Crace, 1997). Un trabajo de equipo efectivo ha sido
definido como (1) tomar ventaja de las múltiples habilidades y conocimientos previos de
cada miembro del equipo; (2) interactuar y trabajar hacia metas comunes; (3)
encontraron balance entre las necesidades del equipo y las necesidades individuales de
38
cada jugador; (4) 4 estructurar métodos de comunicación (Carron, Spink & Prapavessis,
1997; Yukelson, 1997).
“Cuando las metas del equipo coinciden con las metas profesionales de un jugador, éste tiende a
jugar mejor verdaderamente en equipo ".
− Pat Williams, Senior Executive VP, Orlando Magic,
La magia del trabajo en equipo ( p. 129)
La dinámica del equipo puede ser como la anteriormente mencionada, aunque los
jugadores hablen de tener grandes juegos y de mejorar lo suficiente para tener éxito en los
campeonatos, los motivos principales podrían estar más relacionados con el aspecto social, por
ejemplo. Los jugadores podrían disfrutar más bien de ser miembros de un equipo de élite, y de
estar rodeados de sus compañeros. Sin embargo, hasta que estos motivos y preferencias
concuerdan con los del entrenador, como por ejemplo desear ganar la temporada, las metas no
sé perseguirán de manera adecuada y por ende será más difícil alcanzarlas. Conocer y entender
mejor los motivos y preferencias del equipo y los jugadores puede ayudar no solamente
maximizar la motivación sino a poner a todo el equipo en la misma frecuencia en términos de
metas y objetivos.
Obtener esta información es fácil si se pregunta a cada jugador cuáles son sus motivos
principales para jugar, y qué comportamiento prefiere tanto del equipo como del entrenador.
Para tener una mejor idea de las preferencias específicas de los jugadores en términos de la
39
retroalimentación que reciben por parte de los entrenadores y compañeros del equipo,
pregúnteles lo siguiente:
• Haz una lista de cosas que te gustaría que tus compañeros de equipo hicieran y dijeran
esta pretemporada/temporada que ayudaría a:
Esta información dará a los entrenadores una mejor idea de qué hacer con cada jugador.
Desde luego que esto no significa que se tendrá que tenía siempre a estas preferencias, pero es
muy útil como guía. Por ejemplo, si a un jugador le gustaría ver a su entrenador “siendo
amable” aún cuando éste pierda su concentración, esto dará al entrenador información valiosa
en términos de cuál es el mejor método para hacer que este jugador se vuelva a concentrar en
su juego.
Identidad el equipo
Tener una idea de cómo le gustaría al equipo ser percibido por otros equipos, ya sea por
oponentes, admiradores, o familia, es otra forma de acercarse más a los jugadores. Pedir al
equipo que defina bien su identidad puede arrojar retroalimentación valiosa relacionada con
metas, motivos, y de cómo les gustaría ser vistos por otros equipos. Armados con esta
información, los entrenadores pueden hacer que el equipo se comprometa con este ideal de la
imagen del equipo.
Use esta información para ayudar a desarrollar la identidad del equipo. Una vez
establecida, cada vez que perciba que el equipo no está reflejando esa identidad que juntos
definieron, recuérdeselas. También haga énfasis en ella cuando vea que sí están reflejando
el ideal que ellos mismos crearon.
satisfacción y no se logran los resultados esperados. Lo mismo sucede con las preferencias y
motivos del equipo en general.
“Este juego … puede darle muchas cosas, pero no le dará el campeonato usted debe ganar
una. Llamemos que esté dispuesto pagar el precio colectivo - de jugar como un equipo – no
lo conseguirá".
− Bill Parcells, Entrenador de los Vaqueros de Dallas, (Williams, 1997, p. 115)
Hacer que los jugadores respondan estas preguntas, especialmente durante el periodo
de entrenamientos de pretemporada, los hará pensar sobre su manera de juego así como en la
del equipo en general, y en lo que se necesita mejorar. Las respuestas de los jugadores y
entrenadores a estas preguntas pueden compartirse y usarse para definir metas a corto y largo
plazo. Las metas individuales y de equipo pueden incrementar en gran medida el potencial si se
usan correctamente, a través de compartir resultados y evaluar continuamente el seguimiento
de esta metas.
Las características de las metas inteligentes o también conocidas como SMART goals se
recomiendan para desarrollar un buen programa de establecimiento de metas para los
jugadores y el equipo.
S = (Specific) Especificas: no establecer las "mejores" metas, más bien establecer aspectos
específicos que necesita mejorar (también llamadas metas de acción)
A= (Achievable) Alcanzable: deben estar dentro de las capacidades del equipo o de los
jugadores.
R= (Realistic) Realistas: las metas no deben ser ni muy fáciles ni muy difíciles.
T= (Time based) Límite temporales: asignar una fecha cada objetivo en la que éste se debe
alcanzar
Cada uno de los distintos tipos de metas tiene un lugar específico en el proceso de
establecer metas. Tener como metas ciertos resultados (metas-resultado), aunque pueden ser
motivador para muchos jugadores, debe ser una actitud poco usada, ya que los resultados
pueden estar más allá del control inmediato de los jugadores. Ejemplos de este tipo de metas
(metas-resultado) incluyen ganar juegos, campeonatos, y premios.
Tener como metas ciertos procesos (metas-proceso) debe usarse para dirigir a los
jugadores hacia alcanzar metas de largo alcance. Estas metas y procesos a corto plazo, deben
especificar aspectos técnicos, tácticos, mentales, y/o físicos que jugador desea lograr. Cuando los
jugadores se ocupan de estas metas-proceso, los resultados tienden a aparecer solos. Las
estrategias para alcanzar metas incluyen la manera en que los jugadores planean cómo
alcanzar metas a corto plazo y mejorar sus áreas de debilidad tanto en el juego como en la
práctica (rutinas específicas, acciones, pensamientos).
41
• Esta semana en el entrenamiento mejoraré mis pases. Completaré el 80% de mis
lanzamientos cortos, mientras que lanzaré sólo una intercepción por cada 15 pases
completos.
• Voy a mejorar mi visión sobre la alineación viendo los videos del entrenamiento/práctica por
45 minutos después de cada entrenamiento.
• Esta semana en el entrenamiento mejoraré mi habilidad para realizar pases completos
practicando mi rutina previa de lanzamiento, antes de cada lanzamiento durante el
scrimmage.
• Para el siguiente viernes, me aprenderé todas las jugadas nuevas haciendo que el
entrenador me evalúe 20 minutos antes y durante cada entrenamiento esta semana.
Los jugadores pueden aprender de las metas que ya lograron ("mantenerse haciendo lo que
se ha estado haciendo) y también de aquellas que no se han logrado ("de modo que lo que
estoy haciendo lo funciona ¿qué cambios debo hacer?"). En este momento es cuando los
entrenadores pueden ofrecer asesoría sobre los cambios que se necesitan hacer. Hacer que los
jugadores y los entrenadores monitoreen el progreso de una meta predeterminada es una
habilidad valiosa que debe utilizarse. Entre más se haga referencia a estas metas y se reconozca
cualquier progreso hacia alcanzarlas, estas serán más motivadoras para los jugadores.
mismo sucede con las preferencias y motivos del equipo en general.
“La gente debe ser capaz de entender… que si se sienten identificados con las metas del
equipo, las metas individuales se podrán alcanzar".
- Mike Krzyzewski, Head Coach del Equipo Varonil de Basquetball, Universidad Duke (Williams, 1997,
p.183)
Una manera de presentar las metas del equipo o individuales es insertar estas metas en
un diagrama en forma de escalera. La idea es establecer que para pasar de un escalón a otro,
es decir de una meta a otra, la meta anterior necesita ser alcanzada. Las metas más cercanas a
la base de la escalera pueden ser las de la pretemporada, seguidas por las metas de la
temporada, y en la punta colocar algunas metas posteriores a la temporada. La figura 9-1 es un
ejemplo de un diagrama en forma de escalera que sigue la colocación progresiva antes descrita.
Estas metas incluyen tanto de largo, de corto plazo como metas-proceso y metas-resultado. Este
diagrama puede darse de manera individual a cada jugador o pegarse en un lugar al alcance
del equipo, ya sean los vestidores, o fuera de campo de entrenamiento. Incluso, este diagrama
de metas puede ser específico para cada posición, ya que cada posición de juego requiere
estándares y metas propias.
42
Ser campeones.
Obtener los mejores números.
Mejorar física,
Pruebas físicas mejoradas paratécnica,
todo. y mentalmente cada día.
Aprenderse los nombres de todos los jugadores y saber algo sobre ellos
Responsabilidad
Hacer que los jugadores se comprometan con las metas del equipo es más fácil porque los
jugadores ayudaron aFigura
establecerlas. Una
9-1 Diagrama buenaa corto
de Metas forma de hacer
y largo que ellosequipo
plazo para jugadores se
comprometan realmente con las metas es que ellos mismos evalúen su progreso y observen las
áreas que tienen que mejorar. A través de una continua evolución y motivación, así como
escuchar las opiniones de los jugadores sobre los asuntos importantes del equipo, puede
incrementar su sentido de responsabilidad, pertenencia, y compromiso con los esfuerzos del
equipo.
Reunirse con cierta frecuencia de manera individual o con todo el equipo, a fin de
establecer un vínculo de comunicación, lo que permite dar voz a las opiniones de los jugadores,
se crea un foro abierto que les da a cada miembro del equipo la oportunidad de participar en
la construcción del equipo. Tener en cuenta que los jugadores pueden retroalimentar sobre
asuntos del equipo es importante.
Cuando los equipos no son capaces de establecerse retos para mantener los estándares
establecidos por el mismo equipo, entonces los entrenadores necesitan establecer y aplicar
castigos predeterminados. Si el capitán no está dirigiendo al equipo como es debido, entonces se
requerirá de un nuevo capitán. La aplicación de castigos no debe ser apresurada; toma tiempo
encontrar qué tipo de castigos pueden obligar a que cambie el comportamiento de los
jugadores. Hacer que los jugadores tengan actividades extras de acondicionamiento físico,
podría hacer sentir mejor a los entrenadores ¿pero realmente es un castigo útil para hacer crecer
al equipo como un todo? Este tipo de castigo puede funcionar para algunos equipos, pero con
frecuencia quitar responsabilidades y tiempo de juego puede sonar más fuerte que el silbatazo
del entrenador. Tomar ventaja de esos momentos en los que se puede entrenar mejor al equipo
ayuda en gran medida a mejorar la disposición del equipo. Estos momentos incluyen todas esas
veces cuando los jugadores hacen verdaderos sacrificios por mejorar, como motivar a otro
compañero, no permitir que otros jugadores se quejen del entrenamiento, o retar a sus
compañeros a que tengan un mejor desempeño. Muchos entrenadores son muy rápidos para
señalar cuando las cosas no están funcionado bien, de modo que fallan en aprovechar estos
momentos donde es más fácil dirigir al equipo pues éste está jugando como un todo.
43
“Cuando un equipo crece en su desempeño individual y se desarrolla una confianza entre
los miembros del equipo, la excelencia se vuelve una realidad".
- Joe Paterno, Head Coach de Fútbol, Penn State (Williams, 1997, p. 8)
Una última nota sobre la responsabilidad es la importancia que tiene que el jugador se
comprometa con los estándares y metas del equipo. Los jugadores que tienen un alto nivel de
compromiso llevan al equipo al éxito. Jeff Janssen, en su libro Construyendo un Equipo de
Campeones, enlista seis diferentes niveles de compromiso (2002). Después de leer cada una de
las definiciones, es necesario preguntarse cuántos jugadores encajan en cada nivel de
compromiso. Estos niveles van desde los de menor compromiso hasta altos grados de
compromiso.
• Los jugadores que se resisten son aquellos que están en “otra frecuencia” muy diferente a la
del resto del equipo, y que están motivados por sus propios intereses.
• Los jugadores sin voluntad hacen lo suficiente para arreglárselas con el entrenamiento, pero su
compromiso no es el adecuado.
• Los jugadores independientes tienen motivos que no coinciden con los del equipo, así que el
nivel de compromiso hacia las metas del equipo no es el suficiente.
• Los jugadores obedientes son aquellos que hacen lo que se les pide y entienden la
importancia del trabajo colectivo.
• Los jugadores comprometidos son aquellos que no sólo son obedientes, sino que además
ponen empeño adicional para ayudar al equipo a tener éxito.
• Los jugadores con convicción son aquellos que se motivan por alcanzar los objetivos del
equipo y hacen todo lo que pueden para lograrlo.
De acuerdo con Janssen (2002), los equipos campeones tienen a la mayoría de sus jugadores
dentro de las categorías de “obedientes” y “con convicción”. ¿En donde entran la mayoría de sus
jugadores? Este capítulo provee estrategias para mejorar el compromiso de cada jugador con
las metas del equipo.
Las reuniones con el equipo deben enfocarse a aprender más sobre aspectos de la
comunicación, sobe las causas de la mala comunicación, y sobre formas de mejorarla. Los temas
principales a discutir incluyen la importancia de enviar mensajes de manera efectiva así como
de recibirlo de la misma manera (Figura 9-2).
44
Es importante que los atletas y entrenadores estén más conscientes de los “señales
externas” que emiten durante los juegos o entrenamientos. Estas señales externas consisten en
elementos no verbales, lenguaje corporal, postura, gestos, y expresión facial que no son
apropiados para una comunicación abierta.
Como la figura 9-2 muestra, las fallas en la comunicación pueden ocurrir debido a
mensajes defectuoso (ya sea enviados o recibidos) a través de métodos verbales o no verbales.
Los entrenadores que conocen bien los patrones de comunicación verbal y no verbal de su
equipo (jugador a jugador, jugador a entrenador, entrenador a jugador) encuentran más fácil
intervenir si se requiere. Las consecuencias más comunes de una comunicación inefectiva son la
frustración, enojo, insatisfacción, deserción, burlas entre compañeros, confrontaciones frecuentes,
y la formación de grupos (separación del equipo). Esto se puede evitar si el equipo discute la
importancia de la comunicación efectiva, y de cómo mejorar la del equipo.
Ser honestos y congruentes con frecuencia significa decir a los jugadores lo que se les
debe decir, más que decirles lo que desean oír. La lucha contra la mediocridad es una tarea que
exige demasiado, es una batalla constante que requiere entrenadores que deseen motivar,
confrontar y retar a los jugadores diariamente. Lo mismo aplica para los jugadores que
realmente desean fijarse retos los unos a los otros. Esta es una habilidad que necesita ser
enseñada a algunos jugadores o equipos.
Quizá esto pueda sonar un poco simple, pero ser un buen oyente significa mejorar la
habilidad de la escuchar activa. Permitir a alguien la oportunidad de expresar su opinión es
difícil para la mayoría, especialmente cuando se trata de escuchar sin juzgar y sin ponerse a la
defensiva. Está abierto a ideas nuevas y diferentes es determinante para desarrollar la escuchar
activa. Hacer esto significa romper con la comodidad. Cada jugador del equipo debe sentirse a
gusto al hablar con sus entrenadores y compañeros de equipo si tiene problemas o asuntos que
compartir con ellos. Los jugadores que son muy callados o tímidos no hacen escuchar su opinión,
por lo que terminan haciendo lo que todos los demás hacen. Estos jugadores pueden estar muy
insatisfechos con respecto a un asunto en particular, mismo que no será resuelto favorablemente
debido a que no desean hablar. Los entrenadores son los principales responsables de crear un
ambiente en el cual los jugadores tengan la habilidad de ofrecer sus puntos de vista sin dudar.
45
Una retroalimentación sarcástica hacia los jugadores y compañeros del equipo sirve a
un único propósito: desmotivar al jugador. La confianza en uno mismo se ve seriamente
afectada por el sarcasmo innecesario. Ser críticos es una cosa, ser sarcásticos es otra. El sarcasmo
no debe formar parte de los métodos de nadie para mejorar la motivación, ya que
normalmente se logra lo contrario.
Confiar en los entrenadores y compañeros del equipo significa no tener que cuestionar
sus creencias, motivación, compromiso, ética de trabajo, deseos, experiencia, y talento. La
mayor parte de la fricción que ocurre dentro de un equipo es provocada por la falta de
confianza. Los jugadores que ponen en duda las decisiones que toma el staff de entrenadores, y
los entrenadores que creen que los jugadores anteponen sus intereses a los del equipo son dos
situaciones comunes que muestra una falta de confianza dentro del equipo. Una vez que la
confianza se ha establecido, los jugadores pueden comenzar a fijarse retos productivos entre sus
compañeros. En la mayoría de los casos, esto significa decirle a un compañero que necesitara
dar más por el equipo; más esfuerzo o mayor compromiso por ejemplo. Una vez que los
entrenamientos o juegos ya terminaron, la amistad debe mantener intacta.
“Creo firmemente en cuando se trata de saber quienes son realmente sus jugadores,
probablemente el 20% sean ganadores, el 20% sean perdedores, y el 60% están esperando
indicaciones. Así que es usted quien pone la responsabilidad en ellos…Eso es confianza y
responsabilidad. Usted confía en que la persona que está a un lado de usted está haciendo
su trabajo, he está haciendo su tarea, que está haciendo lo suyo".
- George O’Leary, Coordinador Defensivo de los Vikingos de Minnesota (USA Today, 2003, p. 2C)
“Cuando equipo está unido, no importa lo que los demás piensen… su competitividad
tendrá menos debilidades. Pero un equipo dividido puede fallar en cualquier momento.
Incluso la precisión o adversidad más pequeña le hará fallar ".
− Bill Parcells, Entrenador de los Vaqueros de Dallas, (Williams, 1997, p. 147)
46
La situación ideal para un equipo es tener ambos niveles de unión bien fortalecidos.
Tener un equipo que le guste convivir incluso fuera del campo de juego así como trabajar duro
juntos en el campo, pone al equipo en una mejor posición de éxito, que cuando no existe dicha
unión . Los equipo que sufren de desunión, choque de personalidad, comunicación pobre, y
confrontaciones diarias son aquellos con debilidad en la unión social. La unión social pobre
obviamente puede tener un impacto negativo en cómo los jugadores desean dar su mejor
esfuerzo colectivo en el campo. Los programas para construcción de un verdadero equipo
pueden ayudar a los entrenadores y equipos a mejorar ambos componentes de unión.
Específicamente, establecer metas entre las distintas unidades de posición, establecer estándares
y otras sesiones de lluvia de ideas, puede ayudar a los jugadores a ponerse en la misma
frecuencia y mejorar la unión de tare, mientras que las actividades para unir al equipo son
efectivas para mejorar la unión social.
“ Las sesiones de verano para unir al equipo ayudan a fortalecer la relación entre los miembros
del equipo, misma que se verá reflejada durante la temporada ".
− Mike Belloti , Head Coach, Universidad de Oregon (McCallum, 2001, p. 76)
Un artículo de la revista Deporte Ilustrado (McCallum, 2001) detalla como los programas
escolares de fútbol pueden integrar a su programa actividades para construir un verdadero
equipo durante las sesiones de entrenamiento “voluntarias” en verano, algunos incluso
adoptando el credo “Un fuerte lazo de unión y jamás seremos vencidos” por ejemplo, la los
jugadores de la Universidad de Oregón fueron a practicar rafting al Río Willamette, mientras
que los Bulldogs de Mississippi resistían entrenamientos básicos tipo militar. Existen muchas otras
anécdotas, incluyendo a los jugadores de la Universidad Estatal de Lousiana siendo parte de un
entrenamiento de karate, los Fighting Illini jugando en una liga de softball sólo para jugadores
de fútbol los miércoles por la noche. Los Hokies de Virginia Tech asistiendo al circuito NASCAR,
mientras que los jugadores del Texas Tech organizaban peleas entre boxeadores locales. Aunque
variadas, estás actividades para constituir un verdadero equipo fueron organizadas para crear
un laso más cercano entre el equipo, lo que (ojalá) lleve al equipo a ganar los juegos en
septiembre.
“La confianza que tendremos el uno con el otro dentro del equipo durante la temporada,
habrá sido construida durante el verano, y no hay modo de subestimar la importancia de la
confianza dentro de un equipo de fútbol ".
− Ryan Schmid, Centro, Universidad de Oregon (McCallum, 2001, p. 76)
Etapa 1
Una asesoría formal sobre las necesidades del equipo debe ser realizada por los
entradores a fin de responder las siguientes preguntas: ¿Qué necesita hacer este equipo para
tener éxito? Los entrenadores deben pensar en términos de capacidades físicas, técnicas,
estratégicas, de equipo, mentales, emocionales, y de inspiración discutidas en el capítulo 3.
Etapa 2
Usando esta información, los entrenadores deben desarrollar un plan específico,
estableciendo como pueden hacer que el equipo mejore estas necesidades. Para entonces deben
tomarse decisiones sobre las actividades para unir al equipo y las estrategias para constituirlo.
Etapa 3
Una junta inicial con el equipo debe realizarse, ya sea con todo el equipo o solamente
con pequeñas unidades de posición y entrenadores. Esta reunión consiste en orientar al equipo
sobre su constitución, el nivel de comunicación que existe, y así el entrenador podrá facilitar una
sesión de lluvia de ideas sobre lo que el equipo necesita para tener éxito. Los entrenadores
pueden hacer una lista de sus comentarios y de los de los jugadores en el pizarrón. Este será el
momento ideal para hacer que los jugadores piensen y registren sus principales razones para
jugar además de sus preferencias específicas sobre los comportamientos y la retroalimentación
tanto de los entrenadores como de los compañeros del equipo.
47
Etapa 4
El equipo da prioridad a las necesidades más importantes, y después se realiza una
sesión de lluvia de ideas adicional para definir cada punto relacionado con las acciones a
ejecutar para mejorar el equipo. También se puede establecer en esta misma etapa un
identidad como equipo.
Etapa 5
El dar seguimiento a las juntas permite desarrollar metas a corto y largo plazo, planes
de acción que detallen como se piensan lograr dichas metas, reglas del equipo, y estándares de
ejecución.
Etapa 6
El seguimiento que se le de a las juntas también puede incluir evaluaciones del progreso
del equipo en términos de estándares y metas (mediante formatos de evaluación y foros de
discusión), y en términos del progreso en la unión y comunicación del equipo.
Etapa 7
También pueden establecerse reuniones con el equipo para hablar sobre los conflictos
que pudieran ocurrir durante la temporada, así como para incorporar actividades que
permitan unir más al equipo durante la mitad de la temporada, como comidas con el equipo o
salidas.
Sumario de capítulo
• Un trabajo de equipo efectivo con frecuencia puede ser la diferencia entre tener éxito o
fallar.
• Un programa diseñado cuidadosamente de construcción de un verdadero equipo es
una forma efectiva de combatir las barreras de potencial del equipo antes de que se
éstas se presenten.
• Pedir al equipo que defina bien su identidad puede arrojar retroalimentación valiosa
relacionada con metas, motivos, y de cómo les gustaría ser vistos por otros equipos.
• Es recomendable establecer metas inteligentes (SMART goals)
• Los jugadores pueden aprender de las metas que ya lograron y también de aquellas
que no se han logrado.
• Las fallas en la comunicación con frecuencia son causa de conflicto, ya sea del
entrenador hacia el jugador, entre jugadores, o del jugador hacia el entrenador.
• La lucha contra la mediocridad es una tarea que exige demasiado, es una batalla
constante que requiere entrenadores que deseen motivar, confrontar y retar a los
jugadores diariamente.
Sin
10
48
Imágenes mentales
El uso de imágenes mentales incluye lo siguiente:
• Uso de videos.
• Uso de reportes de scouts.
• Caminatas por el lugar donde se llevará a cabo la competencia previas al juego
• Uso del lenguaje creativo para enseñar habilidades deportivas complejas (dar una imagen
más clara a los jugadores).
• Analizar las jugadas y estrategias durante la práctica.
• Mentalmente practicar jugadas, rutinas, antes de hacerlas físicamente.
• Crear una imagen mental del campo de juego, del público, y el lugar de juego la noche
previa a la competencia.
• Modelar la ejecución técnica visualizándola, incluyéndola, repitiéndola.
Establecimiento de metas
Ayudar a los atletas y a los equipos a establecerse metas es un ejercicio efectivo para
mejorar la constitución del equipo, la motivación del equipo y el comportamiento orientado al
proceso de optimización. (El capítulo 9 detalla el proceso de establecimiento de metas) El
establecimiento de metas incluye lo siguiente:
• Dar a los jugadores un plan de práctica oral o escrito.
• Dar a los jugadores un plan de juego oral o escrito
• Describir objetivos específicos para la semana de práctica, o al principio de cada práctica
individual.
• Poner como objetivo áreas de desempeño específicas que el equipo necesite mejorar.
• Organizar juntas con el equipo para discutir lo que éste necesita para lograr una
temporada exitosa.
• Definir roles y responsabilidades para cada miembro del equipo.
• Recordar continuamente a los jugadores las áreas que necesitan mejorar.
Rutinas previas
En los más altos niveles deportivos, donde los atletas poseen habilidades deportivas y
físicas similares, la manera en que los atletas unen sus pensamientos y emociones antes de una
competencia puede hacer la diferencia entre ganar o perder. Cuando la mayoría de los atletas
piensan de manera negativa y se desaniman ellos mismos, con frecuencia se desempeñan mal,
mientras que aquellos que se mantienen positivos encuentran formas de sentirse bien y acaban
desempeñándose de manera excelente. Uno de los factores más importantes que contribuye a
desarrollar un óptimo desempeño es la habilidad de generar y mantener una excelente
capacidad de reacción antes de la competencia. Un método para mejorar la capacidad de
reacción física, mental, y emocional, es a través del uso de rutinas previas las siguiente lista
detalla las muchas manera en las que se pueden utilizar rutinas preparatorias en el
entrenamiento.
Entrenamiento de la concentración
El enfoque de atención es la habilidad de concentrarse en la información más relevante
durante el juego. El cambio de atención o switcheo de atención es la habilidad de ajustar
nuestro enfoque de atención dependiendo de una situación en particular. El entrenamiento de
la concentración incluye lo siguiente:
• Instruir a los jugadores en aspectos específicos del desempeño.
• Ofrecer consejos por parte del entrenador a los atletas durante los juegos que dirijan su
enfoque hacia elementos técnicos y estratégicos específicos de las jugadas.
• Ofrecer consejos por parte del entrenador a los atletas durante los entrenamientos que
dirijan su enfoque hacia elementos técnicos y estratégicos específicos de las jugadas.
• Pedir tiempo fuera para ayudar a los jugadores a enfocarse en elementos importantes de la
jugada a ejecutar
• usar entrenamiento simulado, por ejemplo incluye ruido del público por infracciones visuales
para preparar a los jugadores durante los entrenamientos para condiciones reales del juego.
• Pedir tiempo fuera para intentar “congelar” el gol de campo del oponente.
Regulación de la intensidad
Tener el control sobre el nivel de intensidad es una de las cosas más importantes que los
atletas pueden hacer para mejorar su fortaleza mental tanto en la práctica como en el juego.
Los niveles de intensidad son específicos para cada atleta. Algunos atletas se desempeñan mejor
cuando han sido sometidos a niveles de intensidad bajos (muy relajados), mientras que otros
necesitan un nivel más moderado (intensidad media), incluso otros necesitan un alto nivel de
intensidad (ser empujados). La regulación de la intensidad incluye lo siguiente:
• Dar a palabras de aliento para motivar al equipo antes del juego.
• Instruir a los jugadores para que permanezcan tranquilos en que dejarse llevar por sus
emociones; por ejemplo, decirle a los jugadores que no pierdan el control cuando el árbitro
les llame la atención o cuando se enfrenten a otras adversidades.
• Intentar predecir qué jugadores están nerviosos y cuáles están muy relajados basándose en
su lenguaje corporal. Algunos entrenadores creen que cada jugador necesita ser motivado
para estar listo para jugar, así que observan estos comportamientos y acciones visibles.
• Entrenadores que dicen a sus jugadores que se relajen cuando los perciben alterados y
nerviosos.
Ser capaces de relajarse es una habilidad mental importante que algunos entrenadores
simplemente asumen que sus jugadores tienen. Es importante darse cuenta de que cada
jugador difiere en términos de la preferencia que tiene por el nivel de intensidad, los
50
entrenadores deben trabajar con cada jugador para darse cuenta que nivel de intensidad es el
que funciona mejor para cada uno. Esto se cubrirá con más detalle después en este capítulo.
11
Este capítulo especifica estrategias de entrenamiento que los jugadores pueden utilizar
para vencer de manera efectiva los errores de información y secuencia de modo que puedan
ejecutar de manera automática sus habilidades en la medida que éstas se necesiten en el juego.
Estas estrategias también se pueden utilizar para vencer otras barreras de desempeño mental,
emocional, y de motivación.
51
Los pensamientos sirven a numerosos propósitos. Por un lado, ayudan a dirigir la
atención en términos de en qué elementos específicos se deben concentrar los jugadores y si éstos
son útiles para sus desempeño. Por otro lado, un jugador puede usar una especie de diálogo
interno para etiquetarse a sí mismo, a sus compañeros, cuarto oponente, por ejemplo, “Aquel
oponente es mucho más fuerte que yo”, “soy tan sólo un novato”. Finalmente, los pensamientos
también son usados para juzgar el desempeño, por ejemplo "¡qué buena jugada!”. Como ya se
dijo con anterioridad, los pensamientos pueden ayudar en gran medida o por el contrario
destruir la fortaleza mental y por ende la automatización de la ejecución.
¿Saben los atletas qué funciona para ello en contraste con lo que no? Para evaluarlos,
pídales que llenen el formato de la figura 11-1. Aquellos jugadores que tienen éxito en la prueba
poseen una mayor conciencia de sus habilidades de fortaleza mental que aquellos que no. Los
jugadores que no están conscientes de lo que funciona para ellos tienen una desventaja porque
primero necesitan mejorar ese nivel de conciencia antes de pulir sus habilidades mentales.
Cuando la mayoría de los atletas piensan de manera negativa y se derrotan ellos mismos,
normalmente juegan de manera deficiente. Por el contrario, aquellos que mantienen un
pensamiento productivo encuentran formas de sentirse bien y acaban teniendo un excelente
desempeño.
Identifica los pensamientos negativos más Identifica lo negativo que con frecuencia dices a ti
comunes que invaden tu mente antes/durante los mismo antes/durante los partidos.
partidos.
(1)
(1)
(2)
(2)
(3)
(3)
(4)
(4)
Haz una lista de pensamientos Haz una lista de ideas productivas/positivas para
productivos/positivos para reemplazar los de la reemplazar las de la lista de arriba.
lista de arriba.
(1)
(1)
(2)
(2) Una vez que los jugadores han identificado los pensamientos negativos más comunes que
suelen tener antes y durante los juegos, deben remplazarlos con pensamientos productivos. El
siguiente paso requiere que los jugadores crean en estos
(3) pensamientos productivos y no en los
negativos,
(3) mediante formular una situación de ejemplo que ilustre por qué estos pensamientos
productivos son ciertos y útiles, como se muestra en los siguientes ejemplos:
(4)
(4)• "Realmente soy un buen jugador porque hice crecer al equipo y juego mucho”.
• “Quiero ser el jugador que tenga el balón en sus manos en los últimos minutos porque lo
he hecho en juegos anteriores
Figura 11-1.yIdentificando
hemos ganado el partido con
el pensamiento una gran jugada”.
sólido
• “Mi entrenador y compañeros me seguirán respetando aún si cometo errores”.
• “No tengo por qué preocuparme por cometer errores porque todos cometemos errores
los cuales son necesarios para convertirse en el mejor jugador que puedo ser.”
53
Aún cuando algunos atletas pueden ser hábiles para mantenerse positivos y productivos,
todavía requieren trabajar en su fortaleza mental. En momentos donde la presión es máxima
(un partido de campeonato, un examen importante, un 3-10) los atletas que no han practicado
estas habilidades se quiebran porque empiezan a escuchar y a tener pensamientos negativos..
La seguridad en sí mismo es similar a la confianza. Los atletas que confían (en sus
habilidades) no dudan de sus habilidades físicas, técnicas, y tácticas, o de sus mecánicas
mentales, porque saben que en el momento en que se necesite (un gran juego), se
desempeñarán de manera óptima y estas habilidades harán el trabajo por ellos. Cuando los
atletas comienzan a perder confianza en sus habilidades, debido a pensamientos negativos, sus
niveles de ansiedad y tensión muscular aumentan, causando una pérdida de concentración que
provoca que ignoren ciertos elementos importantes de su desempeño. Algunos jugadores incluso
cambian su mecánica al intentar recuperar esa confianza, ya sea forzando una jugada,
pretendiendo o controlando pases. Más adelante en ésta sección el concepto de confianza y su
impacto en los cambios en la mecánica, además de estrategias para combatir este
acontecimiento, se tratan más a fondo.
54
High _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _
Desempeño
Poor _ _ _
Confianza
Para ayudar aquellos jugadores que necesitan mejorar su nivel de confianza, pídales
que llenen el formato de la figura 11-4. Después, pídales que piensen en frases o ideas que
reflejen esas mismas actitudes y pensamientos positivos sobre ellos y sus habilidades. Estas frases
o ideas positivas se llaman ideas de auto-entrenamiento y deben expresar mensajes personales,
algunas veces motivadores. La figura 11-5 ofrece un cuadro para escribir estas frases o ideas.
Algunos ejemplos pueden incluir lo siguiente:
• “Realmente sobrevivo bajo situaciones de presión – soy el jugador que siempre dice
¡vamos equipo”.
• “Soy quien realmente quiere tener el balón cuando el final del juego está próximo y es
crítico”.
• “Me encanta participar en grandes juegos importantes”.
• “Siento que puedo ejecutar una gran jugada en cualquier situación”
(1) (1)
(2) (2)
(3) (3)
(4) (4)
(5) (5)
55
Frases/ Ideas de auto-entrenamiento
*
*
*
*
*
*
*
• Escojan una o dos ideas cada día para repetirla una y otra vez.
• Escribir esta idea en un papel muchas veces a lo largo del día, con actitud de que entre más
se repitan esta idea, más creerán en ella.
• Pegar estas ideas en un fólder para leerlas cada vez que se pueda.
• Escribirlas y colocarlas en las maletas de modo que cuando metan su equipo y uniformes
puedan revisarlas antes y después del entrenamiento.
• Grabar estas ideas en un cassette o CD, con su música favorita y escucharla cuando se
pueda, especialmente antes de la práctica y los juegos.
56
• Intentar alcanzarla perfección – apreciar los esfuerzos por mejorar el juego en general y
lograr éxito en éstas áreas; intentar mejorar el desempeño anterior.
• Entrenamiento de calidad – conocer bien la diferencia entre presiones de entrenamiento de
calidad y simplemente acudir a los entrenamientos, de este modo asegurar que estas
sesiones de candidatos prevalezcan.
La manera en que los jugadores de alto nivel manejan la adversidad y la presión puede
hacer la diferencia entre el tipo de carrera de un “Ryan Leaf” o un “Peyton Manning”. Se ha
usado este ejemplo porque el primero entró a la liga con una riqueza de potencial pero se
quedó corto debido a su falta de información para lidiar con la presión y la adversidad. Esta
habilidad de manejar la presión, y la reacción emocional ante la presión, se llama control de la
intensidad. Ganar control y dominio de la intensidad es una de las cosas más importantes que
los jugadores y entrenadores pueden hacer para mejorar su capacidad de reacción en la
práctica y el juego. Los niveles de intensidad son muy específicos para cada atleta. Algunos
atletas se desempeñan mejor bajo niveles de intensidad menores (muy relajados), mientras que
otros necesitan un nivel moderado, o un alto nivel de intensidad.
Una vez que se ha establecido el nivel óptimo de intensidad, los atletas se tornan más
motivados, con más confianza en sí mismos, concentrados y listos. Para determinar cuál es el
nivel óptimo de intensidad, cada atleta debe determinar que le funcionan mejor. Haga que los
jugadores piensen en términos de estos tres distintos aspectos:
Los jugadores que están conscientes de lo que funciona bien para ellos tendrán un mejor
control de sus niveles de intensidad, especialmente en situaciones donde la presión predomina,
que aquellos que no tienen idea de su estado mental y emocional.
Intensidad excesiva
Síntomas:
• Físicos – tensión muscular, dificultad para respirar, sudor excesivo, náusea, frío en las
extremidades, incremento en la presión sanguínea y el ritmo cardiaco.
• De comportamiento – pasearse de un lado a otro durante la competencia, aumento de
la superstición, agitación rápida, pérdida de coordinación, disminución en el desempeño
o en situaciones en de evaluación.
57
• Mentales – pensamientos negativos, irritabilidad, carencia de concentración,
incapacidad para superar errores, sentirse fuera de control.
• Emocionales – sentir miedo de cometer errores, o de decepcionar a los demás.
Causas
• Falta de confianza en sí mismo (pensamiento chatarra).
• Concentración en los resultados, como en ganar, o en ser el mejor jugador más que en
disfrutar el juego.
• Fallar ante las expectativas de peso de otros, ya sean padres, compañeros de equipo,
entrenadores, o tener metas irreales.
• Poca familiaridad con ciertas situaciones y lugares, como llegar tarde al sitio de juego, o
jugar bajo las inclemencias del clima.
• Eventos inesperados, como tener que jugar con frío, con una herida, o sin el líder del
equipo.
• Preocuparse continuamente acerca de los aspectos incontrolables, elementos en que la
mayoría de la gente cree tener control pero de hecho, no lo tienen;por ejemplo, algunos
atletas se preocupan mucho sobre lo que los entrenadores piensen de ellos, lo que los
distrae y afecta al juego.
Un ejercicio útil para ayudar a los jugadores a mejorar su conciencia sobre lo que tienen y lo
que no tienen control se describe en la figura 11-6. Es importante que los atletas no pierdan
energía mental valiosa y limiten su capacidad de atención al preocuparse sobre cosas que están
más allá de su control inmediato. Los atletas que son propensos a ésta preocupación excesiva
sobre los elementos incontrolables tendrán una disminución de su sentido de control, disminución
de confianza, y aspectos relacionados con un nivel de intensidad excesivo
Falta de intensidad
Cuando los jugadores luchan con la carencia de intensidad en sus juegos, su desempeño
se ve afectado. La falta de intensidad se caracteriza por niveles bajos de energía, poca
motivación, y una concentración que es tan amplia muchos elementos del desempeño
importantes pasan desapercibidos. Los síntomas de la falta de intensidad son:
• Físicos – apatía, disminución del ritmo cardiaco (ritmo cardiaco de reposo), baja
energía.
• De comportamiento – disminución de la “limpieza” en la ejecución, lucir lento, un
desempeño pobre.
• Mentales – reaccionar más hacia las distracciones, pérdida de motivación para dar el
máximo esfuerzo, dificultad para enfocar la concentración hacia detalles importantes
del desempeño y de los oponentes.
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Causas de la falta de intensidad
• Fatiga provocada por la falta del descanso y recuperación adecuada entre juegos,
prácticas, escuela, y actividades sociales.
• Problemas con el sueño.
• Malos hábitos alimenticios.
• Falta de una hidratación adecuada.
• Heridas no tratadas.
• Falta de motivación (por ejemplo, el que el equipo haya vencido fácilmente al mismo
oponente con anterioridad)
• Un exceso de confianza, por ejemplo “podríamos vencer a este equipo aún en nuestro
peor día”
El exceso de confianza es una de las razones por las que se suele fallar todo el tiempo en el
deporte, ya que los jugadores sienten que aunque pongan la mitad de esfuerzo seguirán
logrando los resultados esperados (ganar). El tesoro de los grandes problemas de tener un
equipo muy orientado hacia los resultados. Un equipo orientado más bien al proceso de juego
intentará mejorar su último desempeño sin importar el oponente. Se dice que los grandes
jugadores, como Jordan, Tiger, Gretzy, Montana, Clemens, Rice y Elways, tenían como
motivación principal un gran deseo por superar el desempeño en juegos previos. ¡Qué gran reto
para estos competidores verdaderamente excepcionales!
Dominan los niveles de intensidad involucra ser capaz de reducir los niveles de
intensidad cuando los jugadores perciben que están muy acelerados, así como incrementar el
nivel de intensidad cuando se sienten aburridos o desmotivados. Cuando los jugadores luchan
con exceso de intensidad, ayúdelos con las siguientes estrategias.
Estrategias físicas
Liberarse de la tensión mediante una rutina de calentamiento físico seguida por una de
estiramiento puede ser muy benéfico. Practicar ciclos de tensión-relajación también es
aconsejable para enseñar a los jugadores a distinguir entre cómo se siente la relajación y la
tensión. En tiempos de descanso, por ejemplo antes de ir a la cama o antes de la práctica, se
pueden abrir (tensar) y cerrar los puños a fin de sentir la tensión en los dedos, lo que ayudará a
entender la sensación de relajación. Haga que los jugadores practiquen este ciclo
continuamente hasta que las manos se relajen totalmente después del ciclo de tensión. Este ciclo
de tensión-relajación puede aplicarse con cualquier grupo muscular que sufra de tensión
muscular.
Se requiere de práctica para aprender a relajar los músculos durante los juegos, así que
se recomienda que los jugadores ocupen una pequeña parte del día para practicar la técnica.
Algunos atletas de alto nivel prefieren realizar un ciclo de tensión-relajación de pies a cabeza,
moviendo de un grupo muscular a otro, lo que se conoce como relajación progresiva. Entre más
conscientes de que los jugadores de cómo se siente la atención la relajación, más rápido podrán
responder a liberar la tensión en aras de la competencia. La siguiente habilidad o estrategia
59
usada para regular el nivel de intensidad es la respiración. Cuando los jugadores están
extremadamente ansiosos y/o tensos, algunos reaccionan ante esta intensidad con patrones
irregulares de respiración. Sin la adecuada oxigenación, los jugadores se fatigan porque el
sistema muscular y cardiovascular no funciona tan eficientemente como se necesita por lo que el
desempeño se ve afectado.
Estrategias mentales
Antes del juego, y los jugadores se sienten ansiosos, es importante que dejen de
concentrarse en pensamientos negativos. En vez de ello, motive a los jugadores a entablar
conversaciones con sus compañeros, o a escuchar música, lo que representa una tan necesitada
distracción una vez que se han superado estos sentimientos, los jugadores pueden empezar a
prepararse para el juego. Los entrenadores deben dar tiempo a los jugadores para su
preparación individual porque cada jugador difiere en términos del tiempo que requiere para
estar listo. Si no se les da su propio tiempo a cada jugador, esto provoca mayor ansiedad, misma
que va en contra del método del entrenador para motivar al equipo y alistarlos.
Otra estrategia para los entrenadores es tratar de evitar decir a los jugadores durante el
juego que “se relajen”. Si los jugadores no saben como relajarse, esta frase sólo hace más daño
en vez de ayudar. Lo que ocurre en algunos casos es que cuando los atletas escuchan esa frase,
se ponen aún más ansiosos porque consideran que deben estar tan nerviosos que el entrenador
pudo percibirlo. Una de las primeras cosas que los jugadores pueden hacer para vencer estas
ansiedades es tratar de percibir la situación o competencia como libre de amenazas y peligro.
La habilidad se llama redefinición de la situación. En vez de pensar en el juego con una
situación extrema merecedora de nerviosismo, se puede ver con un reto. Lo que normalmente
acompaña una percepción negativa son pensamientos negativos, sentimientos negativos y
tensión muscular.
Ser un competidor significa abrazar situaciones en las cuales los jugadores requieren dar
su mejor esfuerzo para tener éxito. Enseñar a los jugadores a buscar retos más que a huir de las
situaciones llenas de estrés, es muy valioso. Hacer que los jugadores sean capaces de mantenerse
productivos y positivasen vez de tornarse negativos (“No puedo jugar bien contra este equipo),
es de suma importancia. Sin embargo no es algo fácil de lograr . La clave es que los jugadores
estén conscientes de en qué momentos se están tornando negativos y detenerse. Reemplazar
esos pensamientos negativos por comentarios productivos (“jugué bien la última vez, así que no
hay razón para no hacerlo de nuevo”) puede ayudar a los atletas en su forma actual de pensar
y a ser consistentes, pensadores productivos. Es aconsejable que los jugadores escriban los
pensamientos negativos más comunes que suelen tener, y después los reemplacen con frases
positivas. Después de repetir este proceso por varias semanas, los jugadores comenzarán a
utilizar frases más productivas. Si los pensamientos negativos aparecen, serán reemplazados con
útiles y constructivos comentarios.
Estrategias de desempeño
Los entrenadores deben promover la familiaridad con las situaciones de juego
intentando simular condiciones de juego en el entrenamiento. Preparar a los jugadores para
todo tipo de situaciones inesperadas que pudieran surgir antes y durante los juegos es un
ejercicio de gran valor para los entrenadores y jugadores
60
Los entrenadores y jugadores también deben mantener sus errores en perspectiva. Una
vez que los jugadores comienzan a preocuparse por las consecuencias negativas de sus errores, lo
que puede incluir comentarios del entrenador, aficionados, o padres, comenzarán a presionar,
dirigir y controlar sus movimientos. Todo esto, como se mencionó con anterioridad, perjudica el
desempeño óptimo.
Los entrenadores que evitan hacer demasiado énfasis en los resultados (ganar, récords,
“tener que ganar”) con sus jugadores les ayudan a mantenerse más enfocados en el proceso
(por ejemplo, trabajar hacia mejorar su juego más que sólo obtener un resultado). Como ya se
había mencionado antes, los jugadores sólo pueden controlar sus propios esfuerzos y juego, no el
juego de otros, así que la victoria es una variable que no se puede controlar. Un equipo puede
haberse desempeñado de manera óptima toda la temporada, y haber dado los mejores
resultados, sin embargo puede perder debido a una amonestación, un gol de campo fallido en
el último minuto, o a cualquiera de los cientos de incidentes que podrían ocurrir en el difícil
camino hacia la victoria. Lo que es más productivo para los jugadores es hacer énfasis en el
proceso, hacer lo que necesitan hacer antes, durante, y después de las jugadas para ayudar al
equipo a alcanzar el triunfo.
Adoptar este proceso ayuda a los jugadores ejecutar una jugada a la vez. Algunas veces
los jugadores necesitan adoptar una actitud de “simularlo antes de hacerlo” para ser capaces de
superar una mal jugada. En situaciones de presión, donde los jugadores se tornan nerviosos,
actuar y lucir tranquilos, calmados y serenos puede ayudar a crear una sensación de bienestar,
de que todo está bien. Esto se llama entrenamiento de afuera hacia adentro (Loher, 1994). El
método consiste en hacer algo con su “exterior”, como tener una buena presencia física, actuar
normal, y tener un comportamiento relajado, a fin de que dichas actitudes se traduzcan en una
sensación de bienestar mediante pensamientos y emociones. Una de las estrategias más simples
que los jugadores y entrenadores pueden hacer con su “exterior” que tienen este increíble en su
“interior”, es sonreír. Al sonreír se liberan químicos en nuestro sistema que están ligados con los
sentimientos de felicidad y relajación.
Estrategias físicas
La actividad intensa, como un calentamiento previo juego, es una de las estrategias
físicas más efectivas que se pueden utilizar cuando el equipo está apático. La actividad física
deportiva es deseable, pero fuera de la temporada, puede ser muy benéfico incluir actividades
de acondicionamiento físico como practicar otros deportes o tener actividades de
acondicionamiento diferentes. Como se mencionó con anterioridad, el “simular antes de
realizar” puede ayudar también este caso. Actuar como si estuvieran entrenando realmente
para un juego no sólo puede ayudar a los compañeros del equipo a involucrarse más, sino
también tendrá el mismo efecto en cada jugador como individuo.
Estrategias mentales
Permitir que los jugadores escuchen sus canciones favoritas puede ayudarles a
involucrarse más en el entrenamiento, acondicionamiento, o juego como tal. Otra estrategia
que es usada ampliamente por atletas de alto nivel en la mayoría de los deportes es el uso de
imágenes mentales. El uso de imágenes mentales puede ser muy efectivo para mejorar la
energía y la motivación, especialmente cuando uno visualiza imágenes vigorizantes y logros
previos. En la figura 11-7 se presenta un tutorial sobre imágenes mentales, que ayudará a los
jugadores a iniciarse en esta estrategia. Los jugadores pueden visualizarse desempeñando una
61
habilidad o repasar algún evento en particular desde dos perspectivas distintas. Desde una
perspectiva interna, la habilidad se ve desde dentro de uno mismo, con los ojos de la mente. De
hecho los jugadores pueden sentir y ver el fútbol en sus manos, por ejemplo. Durante este tipo
de imágenes mentales, el cerebro envía mensajes a los músculos como si el jugador estuviera
atrapando, lanzando, o pateando el balón. También se puede hacer desde una perspectiva
externa, donde los jugadores se ven a sí mismos como los vería un espectador, o como si se
estuvieran viendo ellos mismos jugar en la televisión o en video. Las imágenes mentales desde la
perspectiva interna se consideran más efectivas de acuerdo a las investigaciones, aunque las de
perspectiva externa se acercan en efectividad al ayudar a mejorar la confianza, motivación, y
la regulación de la ansiedad e intensidad.
Paso 2: Elija una variedad de escenas y desarróllelas con lujo de detalle, incluyendo
colores, sonidos, olores, y sentimientos si es posible (su recámara, clase favorita, escenas
de su perro jugando…)
62
Nivel de intensidad previo al juego Evaluación del desempeño
Juego 1 =
Juego 1 =
Juego 2 =
Juego 2 =
Juego 3 =
Juego 3 =
Juego 4 =
Juego 4 =
Juego 5 =
Juego 5 =
63
Dirección
Externa
Ej: Un QB observando cómo debe cubrirse Ej: Conectar un ase con un receptor cancha
para la próxima jugada. abajo.
Amplia Limitada
Amplitud
Ensaya en la mente la ejecución de la
próxima jugada:
Demandas de Atención
Amplitud Limitación
Situación deportiva Interna Externa Interna Externa
Tiro interrumpido
No lograrlo
64
Figura 11-11 Demandas de atención para las distintas posiciones.
Analice los problemas de concentración más comunes en el fútbol (figura 11-12) (Nideffer,
1976; Ziegler, 2002). Para que los jugadores puedan tener control de sus pensamientos y
emociones antes de lanzar el balón, es importante que estén conscientes de lo que sienten y
piensan, así como de los elementos específicos de los que se deben ocupar y de aquellos que
deben eliminar. Tener un enfoque de atención demasiado limitado-interno, por ejemplo, en
tiempos malos el jugador puede confundirse debido a las distracciones internas, más que a las
externas (por ejemplo, ubicación de los linebackers contrarios, el número de jugadores
bloqueando).
Se debe estar consciente de la existencia de otras variables que pueden impactar las
habilidades de los jugadores para controlar sus capacidades de atención. Es importante
entender la relación entre la intensidad y la atención. Los jugadores que sufren de ansiedad y
tensión excesivas tendrán tiempos difíciles al tratar de mantener la concentración en aspectos
principales del juego. Algunos otros se confundirán por cambiar entre los estímulos externos e
internos que se perciben. El atleta podría entonces perder la confianza de cinismo, lo que
posteriormente aumentará la ansiedad y la tensión, además de empeorar el desempeño.
Algunos jugadores, cuando se enfrentan a la adversidad y aumentan su nivel de ansiedad,
retroceden en el proceso de aplicar el mejor estilo de atención que se adecua a sus necesidades.
La ansiedad y la tensión también pueden causar problemas al momento de intentar cambiar
de un estilo de atención a otro (dirección y amplitud).
Las distracciones internas y externas también son de preocuparse. La figura 11-13 enlista
distintas fuentes de distracción, tanto internas como externas (Voight, 2000b). Una de las
principales formas en las que las distracciones afectan el desempeño es mediante consumir
capacidades de atención limitadas. En vez de usar esos recursos de atención para concentrarse
en los elementos de desempeño necesarios - físicos, técnicos, estratégicos, o mentales - los
jugadores desperdician su atención en distracciones, que no hacen nada bueno por el
desempeño pero tampoco causan daños al mismo. Prestar atención a las distracciones también
evoca reacciones psicológicas como la negatividad, pensamientos despreciativos, preocupación,
incertidumbre; reacciones fisiológicas como tensión muscular, respiración poco profunda, o
movimientos rígidos; por reacciones emocionales como el enojo, frustración, o pérdida de control.
En conjunto, estas acciones pueden llevar a muchos atletas a un mal desempeño. Estas
reacciones no sólo representan una pérdida de tiempo y esfuerzo, sino que definitivamente
pueden tener efectos nocivos en la preparación y el desempeño.
Una rutina de previa al lanzamiento como ésta no se limita sólo a ayudar a los
jugadores a prepararse para la siguiente jugada, mental y emocionalmente, sino que además
puede ser muy benéfico para ayudar a superar en errores, como un mal pase, errores mentales
o una mala lectura de la alineación del oponente. Esto permite que los jugadores se
desempeñen en la jugada actual. En vez de concentrarse en errores del pasado los jugadores
están instruidos para concentrarse en los pasos de la rutina actual. Rutinas de reconcentración
también pueden usarse para lidiar con la frustración, preocupaciones, y pensamientos negativos
durante la jugada. Si los jugadores se concentran en esta rutina, serán capaces de bloquear
distracciones potenciales.
Emocionalmente me siento…
Figura 11-16 Dando prioridad a los componentes de una rutina previa al juego
Posteriormente los jugadores deben usar la información registrada en las tablas
anteriores para proponer una rutina ideal previa al juego, que debe incluir: ¿Qué sentimientos
físicos se requieren? ¿Que necesidades emocionales deben cubrirse? ¿Qué tipo de pensamiento se
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requiere? Y finalmente ¿Cuál es la mejor forma para mantenerse concentrados? De este modo
se puede crear una rutina previa al juego que conlleve dar cierta prioridad a elementos
específicos basándose en el tiempo que falte para el gran evento, de la siguiente manera:
• 48 horas antes del juego.
• 24 horas antes del juego.
• La mañana del juego.
• 2 horas antes del juego.
• 1 hora antes del juego.
• Justo antes del silbatazo.
Durante el curso del juego, cuando los jugadores se encuentran luchando por ejecutar
bien las jugadas, deben ser capaces de confiar en todas las rutinas previas de desarrollo de
capacidad de reacción a fin de volverse a concentrar en el juego. Estas rutinas previas de
capacidad de reacción pueden ejecutarse justo antes de las rutinas previas al lanzamiento,
especialmente si un jugador está en la necesidad de superar un error. Algunos ejemplos de
elementos específicos que se pueden incluir en una rutina de capacidad de reacción incluyen lo
siguiente:
• Una forma sutil de superar la frustración que provoca un error del pasado, como
apretar el puño, y después liberar la tensión; aplaudir; golpear la palma de la mano
con el puño, o soltarlo verbalmente.
• La rutinas pueden incluir frases preseleccionadas como "estoy listo", "olvida el error",
o "concéntrate en tu tarea", para ayudar a la concentración de las jugadas
posteriores mientras se deja el pasado en el pasado.
• Motivadores o acciones que simbólicamente borren un error del pasado o
distracción, por ejemplo, limpiar las manos simbólicamente significa que nos estamos
deshaciendo del error.
• Usar elementos del desempeño como recordatorios de lo que se necesita hacer bien
para tener éxito. Por ejemplo, uno o dos puntos tácticos como "Está bien, cuidemos
mejor el balón”,”escaneemos rápidamente la alineación del oponente".
• Respira profundo y darse palabras de motivación; concentrarse en la fortaleza del
juego, así como intentar concentrarse en lo que se necesita hacer para la siguiente
jugada a fin de bloquear distracciones.
Fortaleza Motivacional
La última barrera a tratar es la falta de fortaleza motivacional. Este componente tiene
que ver con él motivo principal por el cual el atleta juega cierto deporte, y con lo que le hace
feliz mientras juega. Los atletas practican deporte por cientos de razones - ¿realmente sabe
porque sus jugadores juegan fútbol? ¿Qué es lo que cada uno está adquiriendo de experiencia?
Como se mencionó con anterioridad, con frecuencia los motivos de los jugadores para jugar son
incongruentes con los motivos del entrenador.
“Los deportes requieren compromiso… trata de jugar fútbol sin poner tu corazón en ello, y
acabarás siendo pateado en el trasero".
-Boby Borden, Head Coach, Estado de Florida (Janssen, 2002, p.173)
Preguntarle los jugadores cuáles son sus motivos principales para jugar, así como sus
aspiraciones a futuro en el fútbol, verdaderamente ayudará a los entrenadores a tener acceso a
la motivación de los jugadores. Los valores que no están conscientes de estos objetivos
68
principales no son capaces de maximizar sus capacidades de juego porque la inspiración es lo
que mueve a los jugadores a ser mejores en todos los aspectos del juego.
“Todavía hay dos o tres jóvenes que no están dispuestos a pagar el precio del éxito. Esto no es
Wal-Mart. No hay descuentos en la liga ".
-Ron Wilson, Head Coach, Tiburones de San José
(Times de Los Ángeles, Octubre 31, 2003)
12
Calidad de Práctica: Responsabilidades
De los Jugadores y del Entrenador
La calidad de las prácticas individuales de los atletas ha sido considerada como uno de los
factores críticos más importantes, que resulta determinante para un desempeño óptimo.
Desafortunadamente para los entrenadores y los atletas, no hay demasiado material disponible
que analice a fondo cómo maximizar la calidad de los entrenamientos. Por ello, el propósito de
ésta sección es analizar este tema desde un punto de vista integral que liga las
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responsabilidades tanto de los jugadores como de los entrenadores para mejorar la calidad del
entrenamiento individual y en equipo.
“Me esfuerzo al máximo tanto los entrenamientos, los juegos… es una actitud que simplemente
no puede desactivar y activar cual aparato eléctrico. No se puede tener un desempeño
deficiente en el entrenamiento, y después esperar tener un juego de calidad".
-Michael Jordan (Williams, 1997, p. 197)
Calidad de la Actitud
Pete Carol, Head Coach en la USC, dio una con donde remarcó que existe una distinción
importante entre los jugadores que tienen una actitud profesional y aquellos que tienen una
actitud mediocre. La mayor diferencia entre estas dos actitudes es la percepción que tienen los
jugadores sobre el entrenamiento. Algunos jugadores ven al entrenamiento como una
oportunidad para jugar y mejorar, lo que demuestra una motivación interna, propia del
jugador quien tiene control sobre la misma. Otros, sin embargo, consideran al entrenamiento
como algo sin importancia, que simplemente ya saben hacer, lo que denota una motivación
que viene del exterior del jugador y por lo tanto no está bajo control del mismo (Voight,2002).
Si un jugador tienen una actitud mediocre, el esfuerzo que pone en la práctica varía
dependiendo de su humor de si le gusta o no la actividad, o de una motivación externa. Los
jugadores que piensan de ese modo, simplemente hacen las cosas porque las tienen que hacer, y
sólo quieren terminar el entrenamiento e irse de la cancha. Los jugadores que tienen una
actitud profesional, por otro lado, ven la práctica como una oportunidad de mejorar y pulir su
ejecución, no como algo forzado. Este tipo de atletas se hacen preguntas como: ¿Cómo
puedo/podemos ser mejores hoy? ¿Que lograré/lograremos hoy? Además estos atletas se fijan
estándares de desempeño para cada práctica o semana de práctica, y evalúan el desempeño
que tuvieron durante los entrenamientos en términos de ejecución, esfuerzo, y sobre todo
calidad, además de buscar retroalimentación relacionada con el desempeño en el
entrenamiento.
Los atletas con una actitud profesional se responsabilizan más de su desempeño. Otro
aspecto importante de esta actitud es que los atletas así, son fáciles de entrenar, lo que es lógico
pues poseen una gran voluntad de dar su mejor esfuerzo en la práctica y en la competencia, de
escuchar los consejos del entrenador y ponerlos en práctica, así como aceptar la
retroalimentación de todo tipo (correctiva, positiva, motivadora o incluso llamadas de
atención). En la mayoría de los casos, la medida en que un jugador permita entrenarse puede
esperarse, especialmente en el caso de los atletas que no se dejan entrenar, aunque requiere
trabajo de ambas partes (entrenador, atletas, padres, amigos, compañeros de equipo) y un
entrenador especial para eliminar del atleta aquellas actitudes negativas que le llevaron a esa
condición de poca disponibilidad para dejarse entrenar.
Calidad de la Preparación
¿Cuántos jugadores en realidad se preparan para un entrenamiento? Quizá la mayoría
se come una hamburguesa, llega corriendo a los vestidores, se pongan rápidamente su equipo,
entren a la cancha, y simplemente esperan a que se les diga lo que tienen que hacer.
Definitivamente suena como una actitud mediocre. Los atletas con actitud profesional sin duda
buscarán una mejor manera de prepararse para los entrenamientos. De hecho este tipo de
atletas tienen una rutina que siguen al pie de la letra, que incluye programas de alimentación y
descanso, así como manera de concentrarse y hacer a un lado problemas no relacionados con el
fútbol (escuela, amigos, entre otros) lo que asegura que las dos o tres horas de entrenamiento se
dedicarán únicamente a perfeccionar su ejecución.
Los entrenadores pueden ser de gran ayuda para los atletas y su preparación para el
entrenamiento estableciendo rutinas previas a la práctica, cómo llegar a la cancha antes del
entrenamiento para realizar una serie de actividades de calentamiento. Los jugadores que
hacen esto, sin duda estarán preparados para el entrenamiento una vez que los entrenadores
lleguen. También, los atletas pueden prepararse mejor para los entrenamientos estableciéndose
estándares de desempeño (metas) para cada práctica semanal o sesión individual (por ejemplo,
¿qué quiero lograr para el primer scrimmage? ¿qué quiero lograr en esta rutina de bloqueo?)
Calidad de la Ejecución
Los atletas con actitud mediocre con frecuencia hacen las cosas simplemente porque las
tienen que hacer, a fin de no ser regañados. Los atletas con actitud profesional tienen bien
establecido sus objetivos y propósitos para cada sesión de práctica y ven a los entrenamientos
como una oportunidad valiosa. También utilizan técnicas para mejorar la calidad de su
ejecución, mientras que los mediocres básicamente se limitan a “sobrevivir” al entrenamiento.
Ejemplos de estas técnicas para mejorar la calidad de la ejecución que usan los atletas
con actitud profesional son:
• Tomar nota en las juntas con el equipo, o después de las sesiones de entrenamiento,
relacionadas con puntos específicos que encuentren importantes.
• Evaluar el desempeño que tuvieron durante el entrenamiento, para estar más conscientes
de lo que realmente está funcionando y lo que no. Los mediocres sólo esperan que termine
el entrenamiento y no reflexiona sobre lo que están haciendo.
• Establecerse retos con ellos mismos para incrementar la calidad de su ejecución por ejemplo,
sin atleta con actitud profesional está trabajando con su velocidad, puede intentar alcanzar
a un compañero y no solamente correr. Durante el trabajo técnico, un atleta con actitud
profesional cuenta el número de intentos que tuvieron éxito en vez de hacer las cosas de
una manera mecánica hasta que el entrenador detenga la práctica.
• Utilizar rutinas preestablecidas puede ayudar a que la concentración del jugador se desvíe
durante el entrenamiento. Los atletas con actitud profesional utilizan rutinas relacionadas
con la concentración para asegurar que ésta permanezca enfocada en lo que están
haciendo..
• Saber exactamente porque se está realizando cierta rutina, identificar el objetivo, y
establecer en lo que se deben concentrar durante la ejecución, puede tener un gran
impacto en la calidad del esfuerzo y la ejecución.
Calidad de la Evaluación
Una vez que la práctica termina ¿los jugadores evaluar su desempeño? Los atletas con
actitud profesional se hacen preguntas ellos mismos como: ¿Qué tal estuvo mi ejecución física,
técnica, y táctica?¿Qué también estuvo la cantidad de trabajo?¿Cuáles fueron mis fuerzas y
71
debilidades en las jugadas?¿Qué haré de diferente durante la siguiente práctica? ¿Cómo debo
prepararme para la siguiente práctica? ¿Qué me ayudó a motivarme para el entrenamiento de
hoy? ¿Cómo le mantuve concentrado hoy? ¿Qué me dijeron los entrenadores sobre mi
desempeño?
Calidad de la Actitud
Los entrenadores deben hacer lo posible por estar conscientes de la filosofía y
comportamiento que tienen como entrenadores, así como de los efectos que estas actitudes y
comportamientos tienen sobre sus atletas. Como lo dictan las teorías de liderazgo, los atletas
tienen numerosas preferencias por ciertos comportamientos del entrenador. Si los atletas sienten
que la actitud del entrenador no es la adecuada, su nivel de satisfacción y desempeño puede
verse obstaculizado. El efecto de esta discrepancia entre los comportamientos que el atleta
prefiere y los que recibe puede aumentar si el entrenador no se percata de ello. Los
entrenadores que están más conscientes de sus actitudes y comportamientos, y de cómo sus
jugadores los perciben, da como resultado jugadores más satisfechos y que se desempeñan
mejor. Ha sido demostrado que la calidad deportiva de un atleta refleja las creencias y
actitudes del entrenador.
Otro aspecto crítico del actitud del entrenador es que tan abierto esté a los aspectos
mentales del deporte. Aunque muchos entrenadores usan factores mentales para juzgar el éxito
y fallas del equipo ¿cuántos de los entrenadores realmente entrenan el aspecto mental en sus
jugadores? El capítulo 10 detalló las distintos situaciones en las que los entrenadores incorporan
el aspecto mental del deporte sin siquiera darse cuenta. Es importante que los entrenadores
sepan que incorporar el entrenamiento de habilidades mentales en la práctica diaria puede
mejorar la efectividad de las prácticas, del entrenamiento y así transferir esta efectividad al
campo de juego.
Muchos entrenadores, sin embargo, dan prioridad a mejorar todos los aspectos del desempeño
de sus jugadores, especialmente el aspecto mental. Por ejemplo, algunos entrenadores ayudan
a establecer rutinas que permiten a sus jugadores prepararse para la práctica antes de que ésta
comience. Bruce Snyder, head coach en la Universidad de Arizona, solía hacer esto creando una
serie de rutinas diseñadas para que los jugadores dejaran todas sus preocupaciones fuera de la
cancha así, una vez que entraban a los vestidores se convertía en el jugadores de fútbol, y su
concentración se limitaba a ello.
Calidad de la Preparación
La primera estrategia que se puede usar para mejorar la preparación es ayudar a los
jugadores a establecer estándares individuales y metas para las prácticas posteriores. Los
jugadores que están informados sobre los objetivos, los estándares a los cuales se deben someter,
y a la forma en la que alcanzarán esos estándares y metas, están más motivados, y tienen una
actitud más productiva. Así, estos atletas están mejor preparados para los entrenamientos que
aquellos que no cuentan con tal información. Los jugadores desinformados y que no reciben
instrucciones y estándares explícitos, tienden a desempeñar que de manera pobre en los
entrenamientos. Además, usar diferentes modalidades para comunicar éstos mensajes
importantes, como la comunicación verbal, gráfica, y la demostración física, se consideran
estrategias pedagógicas efectivas.
Un segundo método usado para mejorar la preparación es enseñar a los atletas como
mejorar su concentración, así como formas de restablecerla ante la adversidad. La Universidad
de Nebraska para entrenadores de fútbol, con ayuda de Ken Ravizza (Osbourne & Ravizza,
1988), formularon una rutina que ayuda a desarrollar un sentido que permite a los jugadores
volver a concentrarse una vez que empiezan a divagar, y así evitar una falla en la ejecución de
72
las jugadas. Esta rutina se fue llamada las tres R’s: Ready (estar listo) - Respond (responder) –
Refocus (reconcentrarse) y fue muy útil al grado de empezar a usarse durante los juegos cuando
el quarterback necesitará que sus compañeros escucharan instrucciones sobre la jugada. A
través del uso de estándares y rutinas de reconcentración, la preparación de los atletas para los
entrenamientos que mejor en gran medida, además de mejorar la calidad de la ejecución.
Los jugadores a los que les enseñan nuevas habilidades o los que reciben modificaciones
a habilidades ya desarrolladas, deben formar parte de un proceso progresivo en el desarrollo de
sus habilidades viendo desde el nivel más simple al más complejo. Lo que hace complejo este
proceso progresivo es la variabilidad de las prácticas, que incluye condiciones prediseñadas que
incrementa las distracciones visuales y auditivas, por lo que las habilidades se desempeñan bajo
condiciones cambiantes. Estas distracciones visuales y auditivas, también se refieren a elementos
del contexto que pueden causar interferencia, pudiendo variar desde cambios en la velocidad y
el tiempo que toma ejecutar cierta habilidad, hasta ejecutarla bajo niveles de presión diferentes
de los vividos en el espacio de entrenamiento. Es muy importante simular condiciones de juego
reales en las sesiones de práctica incrementando el uso de variables del ambiente (contexto) que
puedan causar interferencia al jugador.
Calidad de la Ejecución
Como ya la mayoría de los entrenadores saben, simular situaciones de juego real en los
entrenamientos es crítico para mejorar la ejecución durante el juego. Asegurarse de que los
jugadores estén inmersos en lo que ocurrirá durante un juego real, los prepara para lo que
experimentarán después, incluyendo la velocidad de la jugada, el contacto con los oponentes, y
la situaciones de presión. Anson Dorrance, head coach mujer de soccer al Norte de Carolina no
solamente lo hace, sino que tanto ella como su staff realizan competencias entre los mismos
jugadores. Por ejemplo, realizan pruebas físicas, juegos entre pequeños equipos, y revisiones de
habilidades técnicas para mejorar la competitividad mediante enfrentar a los mismos
compañeros de equipo. Sus jugadores en repetidas ocasiones han afirmado que se les facilita
más empezar un juego que una sesión de entrenamiento (Dorrance, 1996).
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merezca. Esta es una práctica muy valiosa para mejorar la motivación, esfuerzo, y calidad de la
ejecución.
Por otro lado, la retroalimentación con fines de motivación y de dar energía no sólo
provee información crítica sobre el desempeño, como corrección de errores, conocimiento sobre
resultados y desempeño, refuerzo necesario y castigo. Entre menos frecuentes sea la
retroalimentación, ésta se vuelve más importante. Mucha retroalimentación podría distraer a
los jugadores, así como hacerlos pensar demasiado su desempeño (recordemos la parálisis por
sobreanálisis). Finalmente, la retroalimentación debe darse durante la ejecución (coincidente) o
al finalizarla (terminal). Se recomienda una buena mezcla de ambas.
Calidad de la Evaluación
Una evaluación de calidad se refiere a los métodos que los entrenadores usan para
determinar la efectividad de su comportamiento como entrenador, de las sesiones de práctica, y
de la manera en la que ayudan a los atletas a prepararse y desempeñarse mejor en los
entrenamientos. Existen muchos métodos que los entrenadores pueden usar para evaluar la
efectividad de los jugadores en términos de su capacidad para alcanzar sus objetivos y metas en
las sesiones de entrenamiento. Realizar gráficas puede ayudar en la motivación y el compromiso
del jugador, así como aumentar la calidad de sesiones de entrenamiento posteriores. Realizar
pruebas de acondicionamiento físico antes y durante la temporada, formal informalmente
evaluar aspectos tácticos y estratégicos (jugadas, estrategia de juego, tareas), y evaluar por
posición en términos de ejecución y correcciones permitirá evaluar la calidad de las prácticas.
Mantener una buena comunicación entre los jugadores y los entrenadores es otro punto
clave para la efectividad del entrenador, jugador y del equipo. Los entrenadores que tienen
jugadores quienes se sienten en confianza para hablar con ellos sobre lo que sienten y sobre su
percepción entienden mejor no sólo a sus atletas del equipo, sino también sus propias actitudes y
comportamientos como entrenador y la manera en que le afectan a los jugadores. Los
entrenadores pueden organizar juntas formales o informales con cierta frecuencia para evaluar
no solamente el progreso de los jugadores sino también el del staff en términos de la calidad de
la práctica.
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mental. La implementación cuidadosa e inteligente de un nivel mayor de entrenamiento debe
ser evaluada por los entrenadores después de cada sesión entrenamiento. Además de evaluar el
nivel de intensidad del entrenamiento, Schmidt & Wrisber (2000) recomiendan usar una lista
para evaluar estrategias en términos de preparación para la práctica (por ejemplo,
establecimiento de metas e identificación de qué habilidad representa el objetivo), estructura,
presentación (por ejemplo, aclarar expectativas), y retroalimentación.
CONCLUSIÓN
Ir más allá de las X’s y de las O’s requiere algo de tiempo adicional así como de
conocimiento sobre ciertos métodos de aplicación. Incorporar la mayoría de los aspectos
tratados en este libro vale la pena a pesar del tiempo adicional necesario porque ayudar a los
jugadores con la automatización de su ejecución mejorará en gran medida su forma de juego,
tanto en el aspecto individual como de equipo. Los temas principales que se presentaron en este
libro incluyen los siguientes: ayudar a los jugadores a mejorar su conciencia sobre las mecánicas
técnicas y mentales; la importancia de automatizar su ejecución; las muchas barreras de
desempeño que obstruyen la automatización de la ejecución; la manera en que estas barreras
específicamente afectan el desempeño mecánico y mental debido a errores de procesamiento y
secuencia de la información; y finalmente, ejercicios de fortaleza que no sólo combaten las
barreras de desempeño, sino que ayudan a superar los efectos debilitantes ocasionados por
fallas mecánicas.
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investigación del autor sobre la efectividad en el entrenamiento, pero principalmente de
entrenadores y atletas que con quienes ha tenido el privilegio de trabajar a lo largo de los años.
Altas expectativas
• Para poder esperar grandes resultados de los jugadores, los entrenadores necesitan también
tener altos estándares para ellos mismos y su staff.
• La pelea en contra de la mediocridad es una tarea ardua algunos entrenadores no desean
comprometerse (física, mental, y emocionalmente) con la motivación de los jugadores
porque toma tiempo, energía, confrontación, y una evaluación continua.
• Premiar a los atletas por cosas que merecen un premio. Una autoestima negativa y bajos
estándares puede ser el resultado de premiarlos sin merecerlo.
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“Eso lo que Mike hace, logra que sus jugadores crean en él, en lo que está haciendo. Como
alguien que ha sido head coach por mucho tiempo, puedo decir que si eso es lo más importante
–y Mike lo ha logrado ".
-George O’Leary, Coordinador Defensivo de los Vikingos de Minnesota
Sobre el Head Coach Mike Tice: (Weisman, 2003)
“A todos nos gusta ganar. A nadie le gusta ganar más que mí. Pero cuando todos está dicho y
hecho ¿qué más se puede hacer? No nos queda más que esperar que les hayamos enseñado a
nuestros jugadores algo. Esperara que les hayamos ayudado un poco a crecer. No pretendo ser
el psicólogo de éstos chicos, pero se requiere más que fútbol.”
-(El Times de Los Ángeles, 2003, Agosto 30)
El propósito del autor de este libro es haberle ofrecido una lección o dos. El estar disponible
para responder cualquier pregunta que pudiera tener el lector relacionada con el ir más allá de
las X’s y las O’s, y mejorar la fortaleza mental así como las mecánicas técnicas y mental.
Subconsejo está disponible para jugadores individuales, entrenadores, y equipos vía sesiones de
trabajo y consultorías si deseara contactarlo directamente, puede utilizar los siguientes medios:
correo electrónico – voight@usc.edu; teléfono –(213) 740-6153; y en línea -
www.drmikeVoight.com.
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