Está en la página 1de 18

LA FUNCION DE “GUARDIAN DE LA PUERTA” EN JEREMIAS 35:4:

IMPLICACIONES PARA EL DIACONADO CRISTIANO


Elden O. Alfaro

Planteamiento del problema

En la Iglesia Adventista, el manual de la iglesia establece respecto a la función

que cumple el diacono en la iglesia que debe cuidar y mantener la propiedad de la iglesia.

Según el Manual de la Iglesia adventista el diácono en la iglesia debe desempeñar tareas

que beneficien en el asunto de atender las necesidades de los necesitados, también cumple

con funciones prácticas que son amplias en el ámbito eclesiástico; ayudar en los servicios

y reuniones, visitar a los miembros, preparar los servicios bautismales, cuidar de los

enfermos y de los pobres.1 Cabe indicar que esa responsabilidad le concierne en especial

al diacono y/o diaconisa. En lo que respecta a la designación del diaconado, este es

elegido por la iglesia y es ordenado por los ministros con imposición de manos. Los

diáconos tienen dos categorías: (1) los que administran y gestionan la ayuda a los pobres,

(2) los que cuidan de los enfermos y menesterosos.2 Cabe recalcar que el Nuevo

Testamento menciona cómo debería ser el estilo de vida del diacono: se espera que tenga

“buen testimonio, que sea lleno del Espíritu Santo y de sabiduría, que sea marido de una

1
Manual de iglesia, 7ma ed. (Buenos aires: Asociación Casa Editora
Sudamericana, 2015), 77.
2
Esteban Díaz Apala, “El desarrollo del concepto de Ministerio en la teología
adventista en el contexto del segundo gran reavivamiento,” (Tesis de licenciatura,
Universidad Adventista de Chile: 2017), 49.
sola mujer, que tenga conciencia limpia, apto para el trabajo (en este caso predicar el

evangelio, entre otros), honestos, gobiernen bien sus hijos y sus casas y mucha confianza

en la fe que es en Cristo Jesús”. (Hch 6:3; 1 Ti 3:8-13 R60)

Además, los diáconos participan de una manera especial en la misión y la gracia

de Cristo,1 A la misma vez prestan importante ayuda a sus colegas para armonizar en

unidad de conjunto los diversos intereses de la iglesia,2 en relación con la función del

diaconado en los párrafos anteriores. No solo es el diacono el encargado de supervisar los

bienes y actividades dentro ella, sino que va más allá como un “guardián de la puerta” tal

como se menciona en Jer 35:4.

Eso sugiere que estudiar Jer 35:4 puede ser útil pues permitiría comprender mejor

el papel del diacono de manera más amplia a la luz de información del Antiguo

Testamento. Este texto nos muestra, que Jeremías llevó a los recabitas a la casa de

Jehová; al aposento de los hijos de Hanan hijo de Igdalías. Los recabitas fueron ubicados

a lado de la “habitación que se encontraba junto a la que usaban los funcionarios del

templo” (Jer 35:4, NTV), que estaba sobre el aposento de Maasias, quien a su vez era

guarda de la puerta o porteros de la puerta (1 Cr 9 :18, R60) e hijo de Salum. Por

consiguiente, esta investigación busca responder a la siguiente pregunta: ¿Qué

implicaciones para el diaconado cristiano conlleva la comprensión de la función del

guardián de la puerta que se menciona en Jer 35:4?

Objetivos

1
Deivi Armando Abahonza López, Marlon Andrés Almeida Esteban, Arney
Arenas Ruiz y Leonel Molina Pérez, “Que es la ordenación: Contraste inter-eclesial,”
(Tesis de Licenciatura, Corporación Universitaria Adventista de Colombia, 2016), 11.
2
Ellen G. White, Tomos Selectos, (Mountain View, CA: Pacific Press, 1927), 90.
El siguiente trabajo tiene la finalidad de clarificar las implicaciones para el

diaconado cristiano que conlleva la comprensión de la función del guardián de la puerta

que se menciona en Jer 35:4

Justificación

Esta investigación es importante pues permite comprender mejor las funciones y

características que tiene el diacono en la iglesia, a la luz de la información provista por

Jer 35:4 con respecto al “guardián de la puerta”.

Metodología

En primer lugar, se discute el significado del texto en su contexto histórico,

político, religioso y literario; en segundo lugar, se analiza la expresión “guardián de la

puerta” a la luz de los textos de 2 R 12:9; 1 Cr 9:18; en tercer lugar, se describen las

implicaciones de Jer 35:4 para el diaconado moderno. Para desarrollar la investigación se

utiliza bibliografía pertinente. Una vez recopilada la información de distintas fuentes

literarias se analizan los temas relacionados a la investigación. Las implicaciones para el

diaconado cristiano se enfocan en los siguientes aspectos la función del diacono, sus

características y los pasos que deben seguirse para elegirlo.

Contexto histórico

Los años más opacos de la existencia nacional de Judá se muestran en breve

resumidos en los capítulos (35, 36). Posterior en un poco más de un siglo a Isaías, y

contemporáneo de los profetas Sofonías, Nahúm y Habacuc, el profeta Jeremías vive los
últimos años dramáticos del reino de Judá.1 La destrucción de Jerusalén es el mayor de

todos los juicios en la historia de Israel y en el Antiguo Testamento. Los acontecimientos

registrados en los versículos 35 – 36, que vienen desde el reinado de Joacim, 2 sugieren

una razonable base para el juicio que se convierte en realidad en los días del rey

Sedequias.3 Cabe recordar que Judá, en ese tiempo. Se constituyó en promotor de una

conjetura antibabilónica;4 ya que eran esclavizados5 sin embargo, la voluntad divina era

que el pueblo de Dios, tenía que ser subyugado al dominio babilónico.

Como resultado de la opresión babilónica, el reino de Judá no podía hacer alianzas

o pactos que lo ayudaran a separarse del yugo opresor babilónico. Y cuando lograron

hacer un pacto humano, ajeno a la voluntad divina, obtenían fracaso. 6 En Este contexto se

1
Muñoz, ILAT,409; cf. Guy P. Courturier, “Jeremias” Raymond E. Brown, ed.
Comentario Bíblico San Jerónimo: Antiguo Testamento t1 (Madrid: Ediciones
Cristiandad. 1971), 793.
2
Joaquín, también conocido como Jeconias, fue el penúltimo rey de Judá,
gobernado en el periodo (598 a. C.-597 a. C.), aproximadamente. Era hijo y sucesor de
Joaquim. A los pocos meses de su reinado sufrió la invasión del rey babilonio
Nabucodonosor II, que saqueó Jerusalén y deportó a miles de notables a Babilonia,
incluyendo al propio rey y al profeta Jeremías. http://es.wikipedia.org/wiki/
Joaqu%C3%ADn_de_Jud%C3%A1 (Consultado: 10 de Junio de 2020)
3
Samuel J. Shultz, Habla en Antiguo Testamento, http://seminarioabierto.com/
historiaat19.htm (Consultado: 10 de Junio de 2020)
4
Teodorico Ballarini, ed. Introducción a la Biblia, vol. 2 (Bilbao: Ediciones
Mensajero, 1971), 323. En adelante, IAB.
5
Ibíd., 303.
6
Ibíd., 323,324.
hace mención a la fidelidad del pueblo de los recabitas 1 y la fidelidad de ellos hacia el

Dios de Israel.

Desde que el rey Josías murió, la vida religiosa de la nación volvió prácticamente

a la misma situación anterior a la reforma (cf. 7:17). Ello fue debido a la desilusión que

provocó la desaparición del rey, así como sus consecuencias políticas a lo que hay que

añadir la presencia, en el trono de David, de Joaquim 2 con la cual nuevamente se volvió a

la idolatría3

Estilo y género literario

El estilo que el libro presenta se basa en una distribución cronológica de los

oráculos de Jeremías que nos llevarían a dividir el libro en cuatro partes, según los

periodos que realizó su actividad de profeta: bajo el reinado de Josías, bajo el reinado de

Joaquim; bajo Sedequias; después del 586 a.C.4 A su vez el libro presenta un estilo

narrativo, y parte de poesía y prosa, lo que le da una peculiaridad al libro del profeta.5

1
“Los recabitas formaban una pequeña comunidad, pero habían demostrado gran
consistencia, pureza y lealtad en relación a sus tradiciones y a su estilo de vida. Para el
profeta Jeremías, la presencia de los recabitas en Jerusalén era un incontestable
testimonio del derecho y la justicia de Dios y una irrefutable condena de los ciudadanos
de Judá, que no tenían disculpa por su desobediencia. Los habitantes de Judá sabían el
camino correcto, pero deliberadamente decidieron el camino equivocado a pesar de las
repetidas e insistentes orientaciones del profeta sobre su comportamiento.” Luis
Alexandre Solano, Como leer el libro de Jeremías, (Bogotá: Editorial San Pablo, 2011),
143.
2
Ballarini, IAB, 326.
3
Gerhard Von Read, Teología del Antiguo Testamento vol2, (Salamanca:
Ediciones Sígueme, 1980), 257.
4
Ballarini, IAB, 311.

“Pero el libro no se atiene, a no ser limitadamente y con frecuencia de manera


5

problemática, a la división cronológica; es más contiene, además de los oráculos de


Delimitación

La investigación a desarrollar se enfoca en el párrafo hallado en el libro de Jer

35:4. La delimitación del texto en estudio deriva del TM. El pasaje de Jer 35:4, relata el

acto de obediencia del profeta Jeremías en cuanto al mandato de Dios respecto a la

función que cumplía el sacerdote. En este versículo, presenta que los recabitas fueron

conducidos a la casa de Jehová y puestos en el aposento de Igdalías. El texto muestra la

ubicación especifica del lugar.

Crítica textual1

Puesto que el texto en estudio solo presenta algunas variaciones de preposición, y

tomando en cuenta que dicho cambio no origina un cambio en el significado del texto, se

decide tomar el TM como regla para la interpretación. A su vez se resaltan unos detalles

con respecto a la LXX.2

Texto en el idioma original3

‫וָאָ ִ֤בא אֹ תָ ם֙ בֵּ֣ית ְיה ָ֔ ָוה‬

‫ֱֹלהים‬
ִ֑ ‫אל־ל ְש ַַּּ֗כת בְ נֵ֛י חָ נָ ָ֥ן בֶּ ן־יגְ דַּ לְ יָ ָ֖הּו ֵּ֣איש הא‬

Jeremías –en poesía y en prosa, relatos notables que ocupan una notable parte del
mismo”. Ibíd., 311
1
K, Elliger y, W, Rudolph, eds. Biblia Hebraica Stuttgartensia (Stuttgart:
Deutsche Bibelgesellschaft, 1997), 1561. En adelante, BHS.
2
El libro en que se contiene los oráculos de Jeremías y que, en parte al menos, es
considerado obra suya (Jer 36), se presenta críticamente un problema serio. El texto de la
versión griega de los LXX es una octava parte más corto que el texto hebreo masorético y
es considerado comúnmente por los críticos más antiguos que éste. También el orden de
las partes es distinto. Los oráculos contra las naciones, que en el texto hebreo y en la
Vulgata ocupan los capítulos 46-51, son colocados por la versión de los LXX después de
25. Salvador Muñoz Iglesias, Introducción a la lectura del Antiguo Testamento (Madrid:
Taurus Ediciones, 1965),406.
3
Elliger y Rudolph, BHS, 1004,1005.
‫ר־אצֶּ ל֙ ל ְשכַּ ֵּ֣ת הַּ שָ ָ֔רים‬
֙ ֶּ‫אֲ ש‬

‫אֲ ֶּ ֵּ֣שר מ ַּ֗ ַּמ ַּעל לְ ל ְשכַּ ֵ֛ת מַּ עֲשיָ הּו בֶּ ן־‬

‫בֶּ ן־שַּ ּל שֹ מר הַּ ַּ ַּֽסף׃‬

Traducción

Hebreo Español Observaciones

‫וָאָ ִ֤בא אֹ תָ ם֙ בֵּ֣ית ְיה ָ֔ ָוה‬ Y los llevé a la casa de Casa de YHWH, da a
YHWH conocer al lugar establecido
donde se dan los hechos.
‫ אל־ל ְש ַַּּ֗כת ְבנֵ֛י חָ נָ ָ֥ן ֶּבן־יגְ דַּ לְ יָ ָ֖הּו‬A la cámara de los hijos de Muestra el lugar específico
‫ֱֹלהים‬
ִ֑ ‫ ֵּ֣איש הא‬Hanan, hijo de Igdalías, donde se realiza la acción.
hombre de Dios Hombre de Dios, presenta
detalladamente como era
considerado esta persona.
‫ר־אצֶּ ֙ל ל ְשכַּ ֵּ֣ת ַּהשָ ָ֔רים‬ ֙ ֶּ‫ ֲאש‬La cual estaba cerca de la
cámara de los oficiales
‫ ֲא ֶּ ֵּ֣שר מ ַּ֗ ַּמ ַּעל לְ ל ְשכַּ ֵ֛ת מַּ עֲשיָ הּו בֶּ ן־‬Que estaba sobre la cámara Guarda del umbral, el vigía
‫ בֶּ ן־שַּ ּל שֹ מר הַּ ַּ ַּֽסף׃‬de Maasias, hijo de Salum, de un lugar sagrado, coloca a
guarda de la puerta. manifiesto la confianza
Divina puesta en él.

Análisis de la expresión guardián de la puerta

La frase ‫שֹ מר הַּ ַּ ַּֽסף׃‬de Jer 35:4 suele traducirse como “guardián de la puerta”. Se

considera que el guardián de la puerta, también se le conoce como el “guarda de los

vasos”,1 debido a que su función también incluía el entregar las ofrendas en los utensilios

del arca (2 Cr 24:10-11 R60); esta función era realizada solo por sacerdotes como se

mencionó anteriormente. Eduardo A. Hernández, declara que “los porteros levitas servían

1
Roberto Jamieson, A. R. Fausset, y David Brown. Comentario exegético y
explicativo de la Biblia - tomo 1: El Antiguo Testamento (El Paso, TX: Casa Bautista de
Publicaciones, 2003). 817.
de guardias para controlar el acceso al área del templo”.1 Enfatiza que estas personas

custodiaban un lugar sumamente especial, como lo era el arca que estaba dentro del

templo. “Al cual el Rey Joás mandó que se colocaran cerca de la puerta de la casa del

Señor” 2 (Cr 24:8 R60). Así lo menciona Roberto Jamieson, A. R. Fausset, y David

Brown:

El objeto de esta arca era hacer una separación del dinero levantado para el
edificio, y de otros dineros destinados para el uso general de los sacerdotes, con la
esperanza de que el pueblo sería más liberal en sus contribuciones3

A todo ello, el Sumo sacerdote era quien colocaba el arca a la entrada del templo, la cual

debía ser custodiada “por los levitas que guardaban la puerta”.4 También se asume que

“Joyada preparó un cofre especial para que los mismos sacerdotes colocaran el dinero en

forma de metales preciosos (plata) y joyas preciosas que se recogían”.5 Todo indica se

tenía un resguardo total en la casa del Señor de los utensilios en ella contenidos, incluido

el arca. Esto era así debido a la importancia y el valor asignado de todos los sacerdotes

que asumían dicha función.

Al notar las diferentes traducciones, se puede observar variantes en la última

frase: “guarda de la puerta” (R60), “guardián del umbral” (NVI), “guarda del umbral”

1
Eduardo A. Hernández, Biblia de estudio: LBLA (La Habra, CA: Lockman,
2003).
2
Ibíd.
3
Jamieson, Fausset, Brown, Comentario exegético y explicativo de la Biblia -
tomo 1: El Antiguo Testamento, 300.
4
Ibíd.
5
Carro, Daniel, José Tomás Poe, Rubén O. Zorzoli, Comentario bíblico mundo
hispano 1 Reyes, 2 Reyes, y 2 Crónicas. 1. ed. (El Paso, TX: Editorial Mundo Hispano,
1993).
(LBA) o como “que era el que vigilaba la entrada del templo” (TLA), todo ello nos lleva

a asumir que estas palabras son sinónimos.

Al mismo tiempo es bueno indicar que en las traducciones siguientes, presenta

una breve traducción con respecto a la última expresión u oración “guardián de la puerta”.

Estas versiones muestran de la siguiente manera: La Biblia Dios habla hoy traduce “que

era el guardián del umbral del templo”, la versión Palabra de Dios para todos lo traduce

“guardia del tesoro”. La Biblia de Joao Ferreira en portugués lo traduce como “guarda del

vestíbulo”. La LXX traducida al español lo traduce “el que custodiaba el atrio”. Cabe

indicar que a una ciencia incierta parece contradictorio, solo que, si se analiza, el mensaje

no cambia; sigue siendo el mismo. En ese contexto las traducciones elegidas no causan

conflicto, más bien aclaran.

Este detalle que muestra el texto, resalta la importancia no solo del lugar sino

también del trabajo mismo. El hombre que ejercía la guardianía tenía que gozar de la

entera confianza del dueño; no obstante, la importancia también se nota a partir del lugar

que es vigilado, y más aún, el sitio donde se localizaba la habitación. Ya que, para poder

estar frente del pueblo, además en la seguridad de la casa de Dios, se tenía que estar bien

con uno mismo como también con Dios, para asumir las responsabilidades en el pórtico

del templo. También cumplía con el deber de no dejar a pasar al templo a las personas

que no eran puros,1 esto hace indicar que la sacridad o santidad era importante para

ingresar a los atrios donde velaba el guardián de la puerta, cuya responsabilidad era de

una total e intrínseca confianza.

1
F.B. Huey, Jr. Jeremiah, Lamentations, vol 18, The New American Comentary,
(Broadman Holman publishers; Nashville, Tennessee, 1993). 314.
Funciones del guardián de la puerta

En el ámbito hebreo, el templo tenía una importancia substancial. El acceso al

recinto estaba estrictamente reglamentado como señala Antonio Marcos:

El edificio propiamente dicho (nos referimos al Templo de Salomón y al Segundo


Templo) se estructuraba en tres partes: el Ulam (vestíbulo), el Hekal (santuario) y
el Debir (o Sancta sanctorum). Esta estructura se hallaba rodeada de un doble
patio, uno exterior y otro interior, protegidos a su vez por un solo muro. Al Ulam
y al Hekal solo entraban los sacerdotes; el Debir únicamente el Sumo sacerdote.
Los judíos en estado de pureza ritual solo podían acceder al segundo patio.1

Por ello velaban “los guardianes del umbral” mencionados en la Biblia. 2 En este

mismo sentido, en el mundo egipcio existía el cargo específico de “guardián de la puerta

del templo” estudiado por Z. Jelinkowa-Reymond.3 Estos argumentos clarifican la

responsabilidad del guardián de la puerta o portero, vigilante, vigía. Era más que un

trabajo; era un servicio para la contribución del bienestar del templo o casa de Dios. Este

oficio era el de un sacerdote que estaba a cargo del dinero de la capitación pagado por el

uso del templo y las ofrendas votivas, tales como vasos de sagrados.4 Se puede observar

que Maasias, cumplía un rol con una amplia responsabilidad, porque no solo era un

oficio, el Tárgum lo llama tesorero,5 a esto se añade que es una responsabilidad seria

porque un tesorero cumple con el bienestar de los que ingresan a la casa de Dios.

1
Manuel Antonio Marcos Casquero, “Ritos y creencias de la antigua Roma
relacionados con las puertas”, Revista de estudios latinos 5 (diciembre 2005): 165.
2
Ibíd., 165.
3
Ibíd.
4
Solo el sacerdote tenía esa función dentro del templo, quien cumplía con el rol
de “guardián de la puerta”, los cuales eran siete custodios. Jamieson, Fausset, Brown,
817.
5
, Jeremías capítulo 35 explicado, https://www.biblestudys.org/Bible%
20Books/ Jeremiah/Jeremiah%20Chapter%2035.html, (Citado 26 de mayo, 2020).
La función de ser un guardián del umbral o de la puerta, de la casa de Jehová no solo

recaía en Maasias. “Había tres sacerdotes más que acompañaban al Sumo sacerdote,”1

dentro de ellos estaba el sacerdote Sofonías hijo de Maasias (Jer 29:25; 37:3, R60);

quienes contaban con la cercanía de “tres guardias del atrio” (Jer 52:24, R60) o de la

vajilla (2 R 25:18, R60). Después del regreso del cautiverio, todavía se denota que “el

viejo ceremonial era continuado”, a pesar de que no había rey en Jerusalén. El templo

permanecía cerrado, “excepto cuando él [el sacerdote] entra o sale”. Mientras tanto, “esta

puerta debe haber estado siempre cerrada”,2 protegida por los “porteros de la puerta de

rey” tal como menciona (1 Cr 9:18, R60). Los levitas cumplían la labor de “abrir las

puertas en la mañana” y cerrarlas en la noche (1 Cr 9:27, R60) además de “mantener el

orden” (1 Cr 9:23, R60) como también administrar y proteger “los tesoros de la casa de

Dios” (1 Cr 9.26 R60). A la misma vez tenían a su cargo los utensilios para el ministerio

(1 Cr 9:28R60).

En 2S 18:26, también se nota que el portero o guardia de la puerta, se le atribuye a

los levitas, son quienes “tenían a su cargo las diferentes entradas al templo”, también “se

ubicaba en la puerta de la ciudad” 3. Implícitamente Elena G. de White declara: “Estos

oficiales cuidaban especialmente de las necesidades de los miembros así como de los

Kimchi observa que la palabra que le damos a la puerta comprende los vasos del
Santuario, los vasos de vino y otras cosas. A todo ello tenía que velar el portero, tesorero;
como se le asignaba al sacerdote en este caso.
1
C.F. Keil. y F. Delitzsch, Jeremiah, Lamentations, vol. 8 de Comentary on the
Old Testament. Peabody, MA: Hendrickson Publishers, 2006.
2
Jamieson, Fausset, Brown, 372.
3
James Dixon Douglas, Merril Chapin Tenney, Diccionario Bíblico Mundo
Hispano, ed. James Bartley, Rubén O. Zorzoli, (Editorial Mundo Hispano: EE UU, 1997),
539.
intereses económicos de la iglesia”,1 haciendo mención al rol que cumplía un diacono

dentro de la iglesia. También “sus funciones y deberes siguen vigentes en nuestros

tiempos donde nuestra obligación es mantener: el orden, atención a los ancianos,

ministrar asuntos materiales de la iglesia, asuntos espirituales y el servicio”,2 aquí se

observa que la función que emplea un guardián de la puerta o un diacono, es sumamente

amplia, no solo cumple con el cuidado sino también cumplir con la misión que nos

encargó Cristo.

Implicaciones para el diaconado cristiano

Implicancias encontradas en Jeremías 35:4

La función del diacono dio inicio después del derramamiento del Espíritu Santo,

cuando los apóstoles reunieron a todos los discípulos para elegir “a siete varones de buen

testimonio” (Hch 6:3 R60). La voluntad revelada por Dios, era que estos varones elegidos

desempeñen a cabalidad su función en torno al crecimiento del cristianismo, Alberto

Villegas declara: a los diáconos los apóstoles les delegaron funciones espirituales: “la

predicación, como lo demuestra el diacono Esteban ante el tribunal que lo juzga por

predicar la buena noticia”,3 como indiaca (Hch 7: 2-53). Por consiguiente, se puede

presentar cuales fueron las implicancias que se encontraron en Jer 35:4 para el diaconado

cristiano.

1
Ellen G. White, Los Hechos de los Apóstoles, 74.
2
Juan Duarte, “Monografias.com”, El diaconado. Estudio bíblico,
https://www.monografias.com/trabajos16/diaconado/diaconado.shtml#:~:text=Fondo%20
B%C3%ADblico%3A%201%20Timoteo%203,el%20diaconado%2C%20si%20son%20ir
reprensibles. (Consultado: 04 de agosto de 2020)
3
Alberto, Villegas Betancourt, El diacono permanente: Quien es y quien hace,
(Bogotá: Editorial San Pablo, 2009), 33.
El estudio analizó la frase que se asemeja a la función de un diacono: ‫שֹ מר הַּ ַּ ַּֽסף׃‬

Jeremias identifica la importancia que tiene la funcion de un guardián, guarda, vigía,

portero, el cual es atemporal ya que viene desarollandose hace ya mucho tiempo, y sigue

en vigencia en nuestros dias

No obstante, se puede señalar que la frase ‫שֹ מר הַּ ַּ ַּֽסף׃‬es una función que solo las

personas con una vida integra y pura asumían en el AT, ellos eran los sacerdotes (1Cr

9:19;27, R60). Los sacerdotes eran quienes cumplían un “acto” de “vocero, mensajero”

de Dios para su pueblo y mucho más de cuidar los tesoros de la casa de Dios. (1Cr 9:29-

34 R60).

Por otro lado, al hacer mención a ‫ הַּ ַּ ַּֽסף׃‬en 2 R 12:9; 1 Cr 9:18, está haciendo

mención al “templo”, “casa de Dios”, “entrada”; la cual expresa un concepto claro con

respecto a la “puerta, umbral,” que está siendo reguardada por el guarda o guardián como

menciona Jer 35:4.

Otro aspecto a destacar es la acción del sustantivo ‫ שֹ מר‬donde encontramos una

persona capaz de sobrellevar las funciones, con respecto al bienestar, cuidado y

administrar los bienes de la “casa de Jehová”, (2R 12:9). Por otro lado, se observa, así

como Dios es santo, puro; y todo lo que se relaciona a sí mismo, también lo es.

Finalmente, Jeremías es enfático al mostrar al guarda de la puerta, como una

persona cabal en todos sus sentidos, no solo porque cumplen un rol o función de cuidar la

casa de Jehová, sino porque eran los mismos “sacerdotes,” (Jer 52:24, R60) que Dios

había designado para el tiempo oportuno. Al transcurrir el tiempo del pueblo de Israel,

siempre se ha notado un grupo de personas sumamente especial (levitas, sacerdotes), que

siempre están dispuestos para el servicio, dedicación; de cuidar la casa del Señor.
Implicancias para el diaconado cristiano

Cerca dos mil años han pasado, desde donde se eligieron por primera vez los

diáconos, a partir de allí siguen ejerciendo el servicio dentro de la iglesia, en las diversas

expresiones de la fraternidad cristiana, visitar a los menesterosos, encarcelados (Mt:25)

en la ayuda a la iglesia (Rom 15:25) y en las diferentes actividades y responsabilidades de

los apóstoles (Rom 19:3-5). La iglesia ha requerido de personas dispuestas para el

servicio cristiano, allí se involucran los diáconos, como guardianes de la casa del Señor,

quienes velan de que todo marche bien y estar presentes en las ceremonias que realiza la

iglesia.

Como resultado, el diacono cumple muchas funciones dentro de la casa de Jehová,

a diferencia de los dirigentes, el diacono se relaciona más con la estructura del templo;

respecto a su cuidado y arreglos para diferentes ceremonias que se realiza dentro de la

casa de Jehová, “los diáconos y diaconisas asumen dicha responsabilidad”, 1 esto ayuda

para que los feligreses gocen de una calidad humana dentro de los parámetros de la

estructura de esta; la función del diacono, por otro lado se ve al diacono como si fuera

solo que abre y cierra la puerta, pero no es así, Dios ha designado a estos hombres,

porque conoce su corazón de servicio para la iglesia.

Por consiguiente, la postura que el diacono cumple frente a las diversas funciones

asignadas dentro de la iglesia, ha ido siendo descuidada casi en su totalidad; sin embargo,

el diaconado desde sus inicios, siempre se vio que tienen la misión de llevar “un buen

testimonio”, (Hch 6:3 R60) el cual implica ser una persona con una integridad y de un

1
Manual de iglesia, 77
alto valor frente a la iglesia. Por eso cuando se desconoce la comisión de los diáconos se

pierde la visión, con respecto a la función del diacono, como un guarda la casa de Jehová.

A través de la historia, los líderes o diáconos que querían hacer conforme veían

conveniente asumir las responsabilidades de la iglesia, no les fue bien, más bien

terminaron en frustración, porque perdieron el foco principal, dejarse guiar por el santo de

Israel.

Sin embargo, todo lo que los diáconos hayan intentado descuidar o desconocer sus

funciones, les ha llevado a dar pasos de autosuficiencia, y no cumplir a cabalidad su

misión que se les encomendó. Así mediante la trayectoria del este estudio se puede

contemplar que nuestro Dios, sigue dando sabiduría e inteligencia a su iglesia, para que

asuman sus principales funciones dentro del rebaño de Dios. Y eso es lo quiere mostrar

Jeremías al mencionar al guardián de la puerta.

Hoy al contemplar, los sucesos que hicieron los diáconos dentro de la iglesia

cristiana; debemos ser cuidadosos con respecto a las funciones que ministran los

diáconos, porque ellos gozan de una “buena confianza en la fe que es en Cristo Jesús”

(1Ti 3:13 R60). Tal como dijo el apóstol Pablo cuando expresó “a fin de perfeccionar a

los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo”, (Ef 4:12

R60)

Por otro lado, la función que cumplía el guardián de la puerta, es una

responsabilidad que el humano, ya sea diacono, o dirigente de iglesia debe realizarlo sin

presentar alguna objeción. Cuidar y ministrar la casa de Jehová es responsabilidad de una

persona que es llamado al diaconado.


Conclusión

Jeremías vivió un tiempo convulsionado, cuando el pueblo de Judá, estaba

pasando sus momentos más trágicos como nación, por desobedecer a la voz de Dios y

seguir sus propios caminos. El pueblo de Dios había caído en una realidad donde la crisis

y el peligro abarcaba todo su ser; estos comportamientos habían hecho que la

espiritualidad de los hijos de Israel esté en decadencia.

Jeremías hace mención sobre el guardián de la puerta, mostrando la

responsabilidad y servicio que tenían los sacerdotes levitas, eran los encargados de

ministrar todos los utensilios del atrio del Señor, solo ellos podían acceder, tanto porque

tenían una vida pura y gozaban de una entera comunión con Dios, eso daba un realce a la

función que cumplían, de no solo ser un simple guardián mas bien ser el mayordomo fiel,

diacono, que vela por los servicios y ceremonias dentro de la casa del Señor.

Habiendo analizado la teología respecto al guardián de la puerta, es posible

evidenciar que Jeremías da una prioridad al cuidado del templo por personas que temen a

Dios. Llevando a los tiempos actuales; se observa que esa función sigue vigente, la cual

es asumida por los diáconos; ellos continúan con el legado que hicieron los levitas en

tiempo de la nación de Judá e Israel, asimismo, cuando regresaron del cautiverio; ahora

son los diáconos quienes asumen esa valiosa e incomparable labor, estar pendiente de los

servicios que Dios les asignó a los primeros diáconos que se menciona en el Nuevo

Testamento.

En conclusión el diaconado en nuestros días, es el mismo espejismo del guardián

de la puerta de los días de Jeremías, muestra que Dios tiene personas con un corazón

dispuesto para velar por el bienestar de su casa.


REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

Abahonza López, Deivi Armando, Almeida Esteban, Marlon Andrés, Arenas Ruiz, Arney
Molina Pérez, Leonel, “Que es la ordenación: Contraste inter-eclesial,”
Corporación Universitaria Adventista de Colombia, (2016).

Ballarini, Teodorico ed. Introducción a la Biblia t2, Bilbao: Ediciones Mensajero, 1971.

Courturier, Guy P. “Jeremias” Brown, Raymond E. ed. Comentario Bíblico San


Jerónimo: Antiguo Testamento t1 (Madrid: Ediciones Cristiandad. 1971), 793.

Díaz Apala, Esteban. El desarrollo del concepto de Ministerio en la teología adventista


en el contexto del segundo gran reavivamiento. Universidad Adventista de Chile:
(2017).

G. White, Ellen. Tomos Selectos, Tomo 2. Mountain View, CA: Pacific Press, 1927.

Jamieson, Robert, Fausset, Andrew Robert, Brown, David, Comentario Exegético y


explicativo de la Biblia, t1 el Antiguo Testamento, El Paso, Texas: Casa Bautista
de publicaciones, 1871.
Keil, C.F, Delitzsch, F. Jeremiah, Lamentations, vol. 8 de Comentary on the Old
Testament, Peabody, MA: Hendrickson Publisher, 2006.

Manual de iglesia, 7ma ed. (Buenos aires: Asociación Casa Editora Sudamericana, 2015),
77.

Marcos Casquero, Manuel – Antonio. “Ritos y creencias de la antigua Roma relacionados


con las puertas,” Revista de estudios latinos 5, (2005), 147 – 174

Shultz, Samuel J. Habla en Antiguo Testamento, http://seminarioabierto.com/


historiaat19.htm Consultado: 10 de Junio de 2020.

Solano, Luis Alexandre Como leer el libro de Jeremías, Bogotá: Editorial San Pablo,
2011.
Von Read, Gerhard Teología del Antiguo Testamento vol2, Salamanca: Ediciones
Sígueme, 1980.

También podría gustarte