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UNIVERSIDAD CRISTIANA EVANGÉLICA NUEVO MILENIO

Licenciatura en Administración de Empresas

Evaluación de proyecto de inversión

Máster. Walter Noé Aguilera Montoya

Presenta: Edwin Gutiérrez

Febrero 2020
Villanueva Cortés,
Investigación

Historia

Los primeros esfuerzos realizados en Honduras para el desarrollo del Mercado de


Valores se remontan al año 1976, liderados por la ya desaparecida Corporación
Nacional de Inversiones – CONADI – con la cooperación de la Organización de las
Naciones Unidas – ONU.

Como resultado, en el mes de agosto de 1980 se presentó a la Presidencia Ejecutiva


de CONADI el Proyecto: Bolsa de Valores en Honduras, que incluía como anexos, un
Anteproyecto del reglamento de la Bolsa de Valores, para la etapa inicial y un
Anteproyecto de la Ley del Mercado de Valores para la etapa final. Lamentablemente,
este esfuerzo no llegó a concretarse.

En 1987 se retoma la iniciativa de la creación de una Bolsa de Valores, ahora


encabezada por el sector privado nacional, a través de la Cámara de Comercio e
Industrias de Cortés – CCIC, la que rinde sus primeros frutos, al lograr que el 1 de junio
de 1988 se publique en el diario Oficial La Gaceta el Acuerdo Número 115, que emite el
Reglamento de Bolsa de Valores.

Bajo el marco de dicho reglamento, se inicia la actividad bursátil en Honduras en el año


1990 con la creación de la Bolsa Hondureña de Valores con sede en la ciudad de San
Pedro Sula, y la Bolsa Centroamericana de Valores con sede en Tegucigalpa en 1993.
Paralelamente a la operación de estas bolsas se estableció un número importante de
casas de bolsa, autorizadas para ejercer la intermediación bursátil como elementos
complementarios para llevar a la práctica las actividades del mercado, en una sociedad
con limitada experiencia en el funcionamiento, operación y supervisión de un mercado
de valores.

En los primeros cinco años de operación de la Bolsa Centroamericana de Valores se


logró impulsar un crecimiento importante en el volumen transado. Sin embargo, la
mayoría de esta actividad consistió en transacciones de corto plazo con instrumentos
de renta fija emitidos principalmente por el Sector Privado.

Honduras fue azotada por el huracán Mitch en octubre de 1998, con efectos
devastadores sobre la infraestructura y la economía en general del país. La recesión
económica provocada por el huracán afectó tanto al Sistema Financiero Nacional como
al incipiente Sistema Bursátil.

A raíz de esta crisis, la Bolsa Hondureña de Valores dejó de operar en el año 2004,
quedando, por lo tanto, únicamente la Bolsa Centroamericana de Valores como
institución autorizada para operar como Bolsa de Valores. Igual situación se presentó a
nivel de las casas de bolsa, cuyo número se fue reduciendo en forma sostenida en el
tiempo, existiendo en la actualidad ocho Casas de Bolsa en el país.

Las experiencias registradas producto de la crisis pusieron en evidencia la urgencia de


un marco legal más sólido, lo que se materializa con la Ley de Mercado de Valores
aprobada mediante el Decreto No 8-2001, publicada en el Diario Oficial La Gaceta el 9
de junio del 2001, la que es complementada con la reglamentación y normativa
correspondiente.
Los primeros años de la década 2000 – 2010 fueron años difíciles tanto para la Bolsa
como para las Casas de Bolsa, pero a partir de 2010 se comenzó a observar una
mejoría en el nivel de operaciones, alcanzándose en 2011 el mayor volumen de
operaciones registradas en la Bolsa desde su fundación, con una cifra de L 125.2 Mil
Millones de Lempiras, equivalente a US$ 6.6 Mil Millones de Dólares de los Estados
Unidos de Norte América.

En el 2011, y después de haber operado durante dieciocho años en el Edificio SONISA,


la Bolsa adquirió y se trasladó a sus propias oficinas en el Edificio Torre Alianza Anexo
en la misma ciudad de Tegucigalpa, en donde opera actualmente. Adicionalmente, en
el año 2012 se completó la instalación de un moderno sistema automatizado para el
manejo de las transacciones bursátiles, que posibilitará el desarrollo de nuevos
productos. El origen de la Bolsa como institución data de finales del siglo XV en las
ferias medievales de la Europa Occidental. En esas ferias se inició la práctica de las
transacciones de valores mobiliarios y títulos.

El término "bolsa" apareció en Brujas, Bélgica, concretamente en la familia de


banqueros Van der Bursen, en cuyo palacio se organizó un mercado de títulos valores.
En 1460 se creó la Bolsa de Amberes, Bélgica que fue la primera institución bursátil en
el sentido moderno. Posteriormente, se creó la Bolsa de Londres, Inglaterra en 1570,
en 1595 la de Lyon, Francia, y en 1792 la de Nueva York, Estados Unidos, siendo ésta
la primera en el continente americano. Las Bolsas se consolidaron tras el auge de las
sociedades anónimas.

Las Bolsas de Valores en Honduras

El mercado bursátil se inicia a partir del año 1990 con la creación de la Bolsa
Hondureña de Valores (BHV). Posteriormente en 1993, nace la Bolsa Centroamericana
de Valores (BCV). Sus accionistas son personas naturales y jurídicas, que en el caso
de la BCV son los mismos grupos económicos propietarios de las Casas de Bolsa. En
abril de 2004 la Bolsa Hondureña de Valores decide retirarse del mercado reformando
su objetivo societario.

La Bolsa de Valores Centroamericana (BVC) maneja en Honduras transacciones por el


orden de los L300,000 millones este año y van en crecimiento.

Así lo indicó su presidente Edgar Maradiaga, luego de manifestar que esos


instrumentos están distribuidos en el sector público y privado. Agregó que la mayor
parte de ese volumen corresponde al sector gobierno que es lo normal en los demás
mercados de la región, versus el sector privado que ha sido principalmente de institu-
ciones financieras nacionales.

“Sin duda, hay muchas oportunidades en este momento, gracias al esfuerzo que
estamos haciendo, tratando de atraer nuevos emisores del sector privado, no
financiero”, afirmó. Según Maradiaga, habrá una demanda muy importante de ins-
trumentos financieros por parte de los administradores de fondos de pensión, ya que
tendrán muchos recursos disponibles.

TRANSPARENTE

Obviamente, esos fondos tienen que invertirse de forma apropiada y con información
transparente que es lo que el mercado bursátil requiere, añadió. Según el especialista,
la idea es tener un poco de todo de los instrumentos, pues eso permite al inversionista
identificar el grado de riesgo que desea tener.
Lo anterior es en función del rendimiento de lo que le ofrecen esos instrumentos, ya
sea por plazo o tipo de sector de donde proceden, de acuerdo al experto. Los montos
mínimos son variables, en este caso, se podría mencionar que, en lempiras, en
transacciones bancarias pueden ser hasta L50,000

En el caso de los dólares u otra moneda extranjera montos pueden ser de hasta
$3,000, es decir, es bastante flexible, según Maradiaga. Las tasas de interés oscilan
por el plazo, pero se puede hablar también de rangos, comentó. En los plazos
menores, entre un rango de 6.60% en lempiras y en dólares entre un 4.75% hasta un
5% anualizado, expresó.
Ventajas de Financiarse en Bolsa

 Cotizar en La Bolsa Centroamericana de Valores es sinónimo de transparencia,


solvencia y prestigio.
 Permite canalizar recursos de ahorrantes hacia proyectos eficientes, capaces de
ofrecer buena rentabilidad.
 Flexibilidad en cuanto a las necesidades de financiamiento a corto como largo
plazo.
 Liquidez permanente y diversificación del riesgo mediante distintas alternativas
de inversión y financiamiento.
Definición

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