Está en la página 1de 3

Capítulo 11 “Bienes públicos y recursos comunes”

Los diferentes ti pos de bienes

1. Bienes privados son tanto excluyentes como rivales en el consumo. Considere, por
ejemplo, un vaso de helado. El vaso de helado es excluyente, ya que se puede evitar
que alguien consuma un vaso de helado, simplemente no se le da uno a esa persona.
Un vaso de helado es rival en el consumo, ya que si una persona consume un vaso, no
es posible que otra consuma el mismo vaso. La mayoría de los bienes en la economía
es como estos vasos; es decir, bienes privados. Esto implica que usted no obtiene uno
a menos que haya pagado por él, y ya que lo obtiene, usted es el único que puede
beneficiarse de él. Cuando analizamos la oferta y la demanda en los capítulos 4, 5 y 6,
y la eficiencia de los mercados en los capítulos 7, 8 y 9, supusimos implícitamente que
los bienes eran tanto excluyentes como rivales en el consumo.

2. Bienes públicos no son ni excluyentes ni rivales en el consumo. Esto es, no se puede


evitar que las personas utilicen el bien público, y el uso de este bien por una persona
no reduce la capacidad de otra para usarlo. Por ejemplo, la alarma de tornados en un
pueblo pequeño es un bien público, ya que cuando suena la alarma, es imposible
impedir que alguien la oiga (es decir, no es excluyente). Más aun, cuando una persona
obtiene el beneficio de la advertencia, no reduce el beneficio de nadie más (es decir,
no es rival en el consumo).

3. Recursos comunes son rivales en el consumo, pero no son excluyentes. Por ejemplo,
los peces en el océano son rivales en el consumo: cuando una persona pesca uno,
existe una menor cantidad de peces que puede pescar la siguiente persona. Sin
embargo, estos peces no son excluyentes, ya que dada la vastedad del océano es difícil
que los pescadores ya no puedan extraer más peces.

4. Bienes reservados son bienes excluyentes, pero no rivales en el consumo. Por


ejemplo, considere la protección contra incendios en un pueblo pequeño. Es fácil
excluir a alguien de usar este bien: el departamento de bomberos puede simplemente
dejar que el fuego consuma la casa. Sin embargo, la protección contra incendios no es
rival en el consumo: cuando la ciudad ha pagado por el departamento de bomberos, el
costo adicional de proteger una casa es muy pequeño.

Bienes públicos

Existen muchos ejemplos de bienes públicos. Aquí consideramos tres de los más importantes.

1. Defensa nacional: La defensa de un país contra agresores extranjeros es un ejemplo


clásico de un bien público. Una vez que se defiende al país, es imposible evitar que
alguna persona goce del beneficio de esta defensa. Además, cuando una persona
disfruta del beneficio de la defensa nacional, no reduce el beneficio de nadie más.
Entonces, la defensa nacional no es ni excluyente ni rival en el consumo. La defensa
nacional es uno de los bienes públicos más caros. En 2009, el gobierno federal de
Estados Unidos gasto un total de 661 000 millones de dólares en la defensa nacional,
esto es más de $2150 por persona. No existe consenso respecto a si esta cantidades
muy grande o muy pequeña, pero casi nadie duda de la necesidad de este gasto
gubernamental. Aun los economistas que abogan por un gobierno pequeño, estan de
acuerdo en que la defensa nacional es un bien público que el gobierno debe
proporcionar.

2. Investigación básica: El conocimiento se genera por medio de la investigación. Al


evaluar la política pública apropiada sobre la generación de conocimiento, es
importante distinguir el conocimiento general del conocimiento tecnológico
específico. El conocimiento tecnológico especifico, como la invención de las baterías
larga duración, un microchip más pequeño o un mejor reproductor digital de música,
se puede patentar. La patente da al inventor el derecho de exclusividad durante cierto
periodo sobre el conocimiento que creo. Cualquier otra persona que quiera usar la
información patentada tendrá que pagar al inventor por el derecho deshacerlo. En
otras palabras, la patente hace excluyente el conocimiento creado por el inventor.

3. Combate a la pobreza: Muchos de los programas del gobierno tienen el objetivo de


ayudar a los pobres. Por ejemplo, en Estados Unidos el sistema de asistencia social
(que oficialmente es un programa llamado Temporary Assistance for Needy Families)
dota de un pequeño ingreso a algunas familias pobres. Del mismo modo, el programa
de vales de comida subsidia la compra de alimentos por personas de bajos ingresos y
existen varios programas gubernamentales que hacen más asequibles los precios de
las viviendas. Estos programas que combaten la pobreza se financian con los
impuestos que pagan las familias más exitosas en términos financieros.

Recursos comunes
Los recursos comunes, como los bienes públicos, son no excluyentes: están disponibles sin
ningún costo para cualquiera que desee hacer uso de ellos. Los recursos comunes son, sin
embargo, rivales en el consumo: si una persona usa estos recursos, reduce la capacidad de
otra persona para usarlos. Por consiguiente, los recursos comunes provocan un nuevo
problema. Una vez que el bien es proporcionado, los diseñadores de políticas deben estar al
tanto de la cantidad que se utiliza de dicho bien.

Existen muchos ejemplos de recursos comunes. En casi todos los casos surge el mismo
problema de la Tragedia de los comunes: los agentes privados usan demasiado los recursos
comunes. Los gobiernos frecuentemente regulan la conducta o imponen cuotas para mitigar el
problema de exceso de uso.

1. Aire y agua limpios: Como mencionamos en el capítulo 10, los mercados no protegen
adecuadamente el ambiente. La contaminación es una externalidad negativa que
puede corregirse con regulación o impuestos correctivos a las actividades
contaminantes. Esta falla del mercado es un ejemplo del problema de los recursos
comunes. El aire y el agua limpios son recursos comunes como la tierra de pastoreo
abierta, y la contaminación excesiva es igual al exceso de pastoreo. La degradación
ambiental es la moderna tragedia de los comunes.

2. Autopistas congestionadas: Las autopistas pueden ser tanto bienes públicos como
recursos comunes. Si una autopista no está congestionada, entonces el que alguien la
use no afecta a otra persona. En este caso, el uso no es rival en el consumo y la
autopista es un bien público. Sin embargo, si una autopista esta congestionada, el uso
de esta produce una externalidad negativa. Cuando una persona usa la autopista, el
tránsito vehicular aumenta, por lo que las otras personas deberán conducir más
despacio. En este caso la autopista se vuelve un recurso común.
3. Los peces, las ballenas y otra fauna silvestre: Muchas especies de animales son
recursos comunes. Los peces y las ballenas, por ejemplo, tienen valor comercial y
cualquiera puede ir al mar y pescar lo que esté disponible. Cada persona tiene poco
incentivo para conservar las especies para el año siguiente. Así como el exceso de
pastoreo destruyo Town Common, la pesca excesiva de peces y ballenas puede
destruir poblaciones marinas que tienen valor comercial.

También podría gustarte