Está en la página 1de 26

Violencia de género en mujeres que han sufrido ataques con agentes químicos

Presentado por

Diana Rocío Aguilar Camargo ID: 531007

Luisa Fernanda González Herrera ID:586870

Docente

Diana Marcela Cardenas

Corporación Universitaria Minuto de Dios

Psicología

Semillero de Investigación

Julio de 2020
Violencia de género en mujeres que han sufrido ataques con agentes químicos

Planteamiento del problema:

Las mujeres han sido víctimas de violencia desde hace mucho tiempo y una de las

manifestaciones más graves, por las consecuencias que esta situación acarrea, son los ataques

personales con ácido o diferentes agentes químicos. Las agresiones con agentes químicos han

permitido evidenciar uno de los actos más crueles en contra de una persona, y a su vez

permite volcar todas las miradas ante este acto de violencia, el cual en su mayoría es en

contra de las mujeres, es por ello que este tema busca identificar que estos actos tienen

consecuencias no solo a nivel físico, sino también a nivel psicológico, emocional e incluso

jurídico.

En muchos países del sur de Asia, los ataques personales donde se arroja ácido en los

rostros de las personas para desfigurarse o matarlos, va dirigido a mujeres jóvenes que han

rechazado propuestas de matrimonio o deseos sexuales de sus atacantes. Aunque también se

han presentado ataques a niños, hombres y mujeres mayores.

Colombia es uno de los países de Latinoamérica con el mayor número de ataques con

ácido (Gaviria, Blu Radio 2016), por eso se considera que es una problemática que no se

puede dejar de visibilizar, puesto que, aunque existen casos de hombres víctimas de este

ataque, la mayoría de estos van dirigidos hacia las mujeres y tienden a entrar en la categoría

de feminicidio.

El ácido pasó a ser un arma de agresión en conflictos personales y una amenaza

constante en manos de delincuentes comunes, que no dudan en usarlo contra cualquier


persona. En el año 2010 hubo 55 ataques de ácido contra mujeres, en el 2011 fueron

42, y de acuerdo a registros del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias

Forenses, el acumulado de 2004 a 2014 llega a 900 mujeres (Vieira, 2013, p. 10).

En el centro de quemados del hospital Simón Bolívar de Bogotá, uno de los hospitales

más grandes de Colombia, se atiende a las víctimas de los ataques por agentes químicos,

quienes no solo presentan trauma físico, sino también psicológico, de autoestima, miedo a ser

atacado de nuevo, depresión por su desfiguración facial, ira crónica, impotencia por lo

sucedido, entre otros que vulneran su deseo de vivir.

De acuerdo con la ley 1773 de 2016, evidenciamos cómo se endurecen las penas y eliminan

los beneficios para los agresores, dependiendo el grado de afectación que presente la víctima.

De acuerdo con esta ley, la pena para los responsables de ese delito sube de 150 a 240 meses

de prisión si la conducta es simple; de 251 a 360 meses de prisión si el ataque causa

deformidad o daño permanente en la víctima; y se aumenta la pena hasta en una tercera parte

si la conducta conlleva deformación del rostro. (Ley 1773 de 2016).

Como es de esperarse, al ser víctima de un ataque con agente químico las

consecuencias pueden variar según el grado de afectación, las quemaduras en la piel pueden

causar daños en la salud, temporales o permanentes, donde el más preocupante y grave en

este caso, son los efectos permanentes, ya que, este es capaz de causar daños irreversibles,

que son de vital importancia para la víctima, dependiendo el grado de afectación se alterará la

salud tanto física como emocional de la persona que sufrió el ataque.

Si bien, los atacantes no son 100% hombres, se evidencia que, aunque no existe un

perfil único de los agresores, todas las víctimas se ven afectadas gravemente.
De acuerdo con la lectura realizada a documentos de la ONU de Mujeres; la violencia

de género es una consecuencia de falta de control de la ira y maltratos, “”” los principales

modelos teóricos sobre violencia de género proponen teorías asentadas en problemas de tipo

individual investigan alteraciones de la personalidad, disposiciones biológicas o experiencias

violentas a temprana edad que puedan explicar tales reacciones “”” (Expósito, 2011, p.48).

Cabe mencionar, que, el objeto de este proyecto incluye analizar algunos términos

jurídicos, es importante destacar que en algunos aportes dentro de la investigación, como

“por ejemplo, el caso de Natalia Ponce de León (víctima de ataque con agentes ácidos en

Colombia), logró impulsar acciones legales y estatales”.

Con estas acciones Ponce abanderó la sanción de la ley que lleva su nombre, al dejar

de tipificar este tipo de violencia como lesión común para colocarla como intento de

homicidio, esta ley entró en vigencia en el año 2015. “Es la mujer líder, aquella que

está nuevamente en busca de su belleza. fuertes colombianos” (Soto,2015).

Se puede decir que el enfoque de esta investigación va dirigido a mujeres que viven

en Bogotá y han sido víctimas de ataques personales con agentes químicos y su motivación

para seguir viviendo después de que estos ataques se perpetraron en su contra. Contando con

los aportes que podemos obtener del autor Viktor Frankl quien después de muchas vivencias

fuertes en su vida, decide publicar el libro “El hombre en busca de sentido”. podemos

obtener algunas fuentes de información con respecto al sentido de vida, Karl ve el sentido de

vida del hombre como una forma de amortiguar vivencias fuertes, como lo fue el vivir la

dureza de los campos de concentración Nazis y del holocausto entre otros hechos que

marcaron su vida, (Frankl, V. 2015).


Tratando de identificar algunas herramientas que dieron sentido a la vida de Gina

Potes primera mujer atacada con ácido y el caso de Natalia Ponce primera mujer empoderada

ante el Consejo para que las penas contra los victimarios se endurecieron, encontramos

Al ver el estado del arte en cuanto a planes que se han elaborado en Colombia para

tratar el fenómeno, está el que la Fundación Rostros sin Ácido considera más

completo, pero paradójicamente menos aplicado en la vida diaria: se trata del Pacto en

contra de las agresiones con agentes químicos del Concejo de Bogotá. (Nieto, 2015).

En las lecturas de los documentos de investigación encontramos que, (...) se propone

la creación de un Centro de Atención a Víctimas con Ácido (CAVA), cuyo objetivo

primordial es el de generar programas de prevención y atención integral a las víctimas por

parte del Estado (Welsh, J. 2009). Lo cual es importante de resaltar debido a que es una de las

formas de apoyar el sentido de vida de las víctimas y de esta manera demostrarles que no

están solas y que, aunque existen falencias al momento de protegerlas, también se piensa en

brindarles un apoyo para “superar”, por decirlo de alguna manera, las secuelas que dejan

estos atroces hechos.

Pregunta de investigación:

De acuerdo con las consecuencias que conlleva un ataque con ácido, ¿Cuáles son las

herramientas psico-jurídicas con que cuentan las víctimas de un ataque perpetrado con

agentes químicos?

Justificación y objetivos:
 La investigación sugiere dar una mirada a los ataques con agentes químicos hacia las

mujeres porque son uno de los flagelos más agresivos que ellas deben soportar desde hace

mucho tiempo, de acuerdo a un reportaje de 070 política y sociedad, “en la última década

Colombia obtuvo en 2012 el deshonroso primer puesto en número de víctimas per capita,

incluso por encima de países como India, Pakistán y Bangladesh, que es donde

tradicionalmente se han registrado mayores tasas de ataques” (Chaves, 2017, párr. 2). Es por

ello que esta investigación va enfocada en conocer acerca de las herramientas psico-jurídicas

con que cuentan las víctimas de ataques con agentes químicos después de padecer este atroz

crimen.

     Aunque no es un tema reciente, lo alarmante del crecimiento de las cifras conlleva a la

necesidad de explorar y recopilar las teorías e investigaciones anteriores y aportar a la

literatura académica sobre este tema.

     “Los ataques con ácido son una modalidad de agresión violenta, definida como el acto de

arrojar ácido en el cuerpo de una persona con la intención de desfigurarla, mutilarla,

torturarla o asesinarla” (Martínez y Rodríguez, 2015. p. 8). Teniendo en cuenta lo anterior, la

agresión violenta afecta la salud mental y física de la víctima, por ello pretendemos dar a

conocer cuáles han sido los avances jurídicos que ha tenido la ley para contrarrestar estos

hechos y las consecuencias legales contra los victimarios.

Realizamos esta investigación con el fin de reconocer los ataques con ácido como un

acto cruel e inhumano que tienen que soportar las víctimas, identificando algunos de los

casos más reconocidos efectuados en la ciudad de Bogotá, destacando la importancia de

entender cómo se sienten estas mujeres, que piensan de la vida después de lo que les sucedió,

conocer su historia y como esta las afecta a ellas y a quienes las rodean. Se busca entregar

información relevante acerca de este tema, donde se identifiquen las diferentes herramientas
que brinda el Estado con el fin de salvaguardar la integridad y la vida de las víctimas,

destacando que casos como el de Natalia ponce de León y el de Gina Potes marcaron una

huella en la historia legal con respecto a estos actos punibles.

El incentivo para realizar esta investigación, es impedir que estos hechos queden en

el olvido, realizar una recopilación de diferentes investigaciones teóricas para que tanto

víctimas como interesados encuentren información clara y concisa de las acciones a que

tienen derecho, de los procesos legales que se han actualizado a la fecha y de el protocolo que

se debe seguir en primera instanci, para atender a víctimas de ataques con ácido, de forma

que esta información sea replicada la mayor cantidad de veces posible, con el fin de que

todos tengan el conocimiento que se requiere para brindar ayuda en el instante que se cometa

un acto de esta índole.

Que se reconozcan algunos de los casos de las mujeres que han tenido que pasar por

este tipo de agresión, en base en las investigaciones previas sobre los ataques con ácido a las

mujeres que permiten brindar una perspectiva de la definición de violencia de género y

reflexionar del por qué aun en pleno siglo XXI, se sigue presentado este fenómeno enfocado

en su mayor porcentaje en contra de la mujer, es por ello que nuestra investigación brinda una

herramienta a quienes la lean para no darse por vencidos, para buscar salir adelante al

conocer las vivencias de dos personas que han sido víctimas de estos atacantes y de alguna

manera revictimizadas públicamente ante nuestra sociedad y continúan en su lucha por tener

un sentido de vida que no solo les aporte a ellas sino a personas que también han sido

víctimas de estos flagelos. 


     Una de las intenciones de este trabajo es analizar la historia de las mujeres víctimas de

ataques con agentes químicos en Colombia y la evolución que se ha desarrollado a nivel legal

con respecto a este tipo de violencia.

     Se pretende resaltar la importancia que tiene en las víctimas los efectos que dejan estos

ataques, debido a que van más allá del daño físico, también afectan su desarrollo psicológico,

emocional, social, familiar entre otros ya que se desenvuelven en una sociedad con unos

estereotipos de belleza arraigados desde hace mucho tiempo y por los cuales se sienten, en

muchos casos, juzgadas y señaladas.

     Los pactos en contra de las agresiones con agentes químicos es una de las herramientas

que se han desarrollado a favor de las víctimas y que se desconocen.

Objetivo general:

Identificar los factores psico-jurídicos de las víctimas de agentes químicos y los

victimarios de este delito enmarcados en la violencia de género, antes y después de la

comisión de la conducta punible.

Objetivos específicos:

Identificar las circunstancias sociales, personales, familiares y legales en las que se

encuentran las víctimas y victimarios de este delito

Detectar el estado psicológico en el que se encuentran las víctimas y victimarios de este

delito
Abordar e identificar los factores que influyeron en la comisión de este delito por parte de los

victimarios.

Determinar el daño psicológico en las víctimas de este delito y plantear ruta de acción en

cada caso

Marco teórico

Esta investigación se enfoca en tres  categorías centrales como son la violencia,

violencia de género  y ataques con agentes químicos, como se observa en el título del

proyecto investigativo “violencia de género en mujeres que han sufrido ataques con agentes

químicos”, debido a que se destaca la importancia de abordar un tema que flagela a Colombia

desde hace mucho tiempo como es la violencia. 

Violencia 

     Para conocer más a acerca de las características de esta investigación, es necesario aclarar

el concepto de violencia, pero este es muy amplio debido a que abarca diferentes áreas y no

existe un concepto uniforme acerca del mismo,. sin embargo, se destaca en consultas de

investigaciones que “Después de cuatro décadas, Colombia aparece entre los primeros

lugares en las estadísticas generales sobre la violencia en el mundo” Pissoat y Gouëset(2002).

Sin embargo de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud OMS, la violencia se

define como: “El uso intencional de la fuerza o el poder físico, de hecho o como amenaza,

contra uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad, que cause o tenga muchas

probabilidades de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o

privaciones” OMS (2002). Que para la investigación que nos atañe es el concepto de

violencia que más se acerca a la definición de ataque con agente químico de las que son

víctimas las mujeres de Bogotá.


El concepto de violencia varía según la cultura y la época, un ejemplo de ello sería los

países occidentales donde es normal obligar a sus hijas a casarse con el hombre que las

escoge o peor aún el que las compra, lo anterior  constituye una forma de violencia contra el

género femenino. Esta es la que se produce sobre una persona en base a su sexo o a su

género, no obstante fundamentalmente se utiliza para referirse a la que los hombres ejercen

sobre sus mujeres

Violencia de género.

Dentro de la violencia interpersonal se encuentra la violencia de género, donde la OMS

“define la violencia de género como «todo acto de violencia, basado en la pertenencia al sexo

femenino que pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer,

inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si

se producen en la vida pública como en la privada>>” OMS (2002). 

Ataques con agentes químicos. 

Teniendo en cuenta lo anterior ,los actos de barbarie con agentes químicos son uno de

los tipos de violencia de género más agresivos de los que son víctimas las mujeres. Desde

hace algunos años en Colombia el ataque con ácido se ha vuelto un acto de barbarie

recurrente en la sociedad(...) es considerado un delito de género al ser mujeres el 80% de las

víctimas.(Posada, 2016,P.1).
“Los ataques con agentes químicos se definen como el acto de lanzar ácido o una

sustancia corrosiva similar en el cuerpo de otra persona, con la intención de desfigurarla,

mutilarla, torturarla o matarla” (Bhullar, 2013, P.14).

El primer caso registrado en el país es el de una mujer que en 1996 en la puerta de su

casa por el simple hecho de ser bonita, razón que esgrimió el agresor Mesa, A.( P. 13. Párr2). 

El 28 de octubre de 1996 se perpetró por primera vez un ataque con ácido a Gina Potes a

quien le arrojaron ácido en Bogotá cuando iba saliendo de su casa con su hijo y hermana,

quienes también alcanzaron a ser afectados por ese agente químico, según lo narrado por ella

misma en una entrevista a EL TIEMPO “Gina Potes cuenta su historia”. 

Estos ataques violentos son premeditados y su objetivo principal es el de producir un

gran daño irremediable no solamente en cuanto a lo físico, ya que la víctima experimenta

desde sentimiento de temor, angustia, dolor, resentimiento e injusticia en muchos casos, hasta

la mutilación e incluso en el peor de los estos puede llegar a la muerte de la víctima. Las

consecuencias a largo plazo de estos ataques incluyen ceguera, cicatrices permanentes en cara

y cuerpo, así como dificultades sociales, psicológicas y económicas (Bhullar, 2013). Las

dimensiones que tienen los ataques con ácido son aterradoras por las consecuencias que estos

hechos conllevan tanto para las víctimas como para las personas que las rodean.   

Natalia Ponce de León Gutiérrez  fue otra de las víctimas del ataque con ácido

sulfúrico en Bogotá, quien tenía 33 años cuando todo ocurrió. El día 27 de marzo del año

2014, Jonathan Vega es un hombre joven con quien Natalia se había visto solo dos veces,

pero él se obsesionó con ella”(Pissoat y Gouëset, (2002)...

 Le lanzó ácido sobre su rostro y por este hecho ella sufrió quemaduras de II y III

grado en una tercera parte de su cuerpo. Tiempo después se crea en el año 2016 una ley en su

nombre realizando un cambio normativo de la Ley 1773 de 2016; Una Garantía De

Protección Respecto a Las Víctimas.


Debido a las secuelas que dejan este tipos de ataques a las víctimas, la investigación

va dirigida brindar herramientas a las mujeres que afrontan no sólo las secuelas físicas que

estos dejan sino también las emocionales, psicológicas que están relacionadas con el

aislamiento familiar, social y la afectación al estatus económico por la condición de

discapacidad que deja el ataque incluyendo las pérdidas económicas derivadas de los largos

tratamientos quirúrgicos y procesos judiciales, no obstante esta investigación busca conocer

las motivaciones que encuentran las víctimas a partir de estos ataques para enfrentar su vida

con los cambios que estos atroces actos les dejan. 

Como se puede evidenciar a lo largo de la lectura este tema causa gran impacto por las

secuelas que dejan, por lo inhumano que son y por el rechazo que reciben de la sociedad, ya

que ningún motivo es suficiente para justificar un acto tan reprochable como lo son los

ataques con agentes químicos.

Marco Jurídico

EL delito (ataques con ácido) y su tratamiento como lesión personal en el Código Penal de

2000, y su nueva consagración como delito autónomo establecido en la Ley 1773 de 2016;

asimismo, por el examen de la incidencia que tiene el modelo de relación social (dominación)

en las agresiones o ataques hacia la mujer en Colombia (Acevedo, L, F. 2016)

Parágrafo. En todo caso cuando proceda la medida de seguridad en contra del imputado, su

duración no podrá ser inferior a la duración de la pena contemplada en este artículo.


De acuerdo a lo establecido en esta nueva Ley (1773 de 2016), los ataques que se provoquen

a alguna persona con ácidos serán tratados como un delito autónomo y no sólo como una

lesión personal; además, las penas contra los atacantes que usen ácido para lastimar a otras

personas oscila desde 150 a 240 meses y multa de 120 a 250 salarios mínimos. Cuando la

conducta cause deformidad o daño permanente, parcial o total, funcional o anatómica la pena

será de 251 meses a 360 meses y multa de 1.000 a 3.000 SMLMV. Si la deformidad afectare

el rostro la pena de aumentará hasta en una tercera parte.

La evolución normativa que han provocado los ataques con ácido, y que conllevaron a que el

delito dejará de ser considerado sólo como una lesión personal, y se consagrará como delito

autónomo, y además se endurecieran sus penas, es lo que fundamenta la necesidad de analizar

los aspectos sociales y jurídicos que influyeron en el cambio dado a la consagración penal en

Colombia, de los ataques con ácido como lesión personal (Ley 599 de 2000) a delito

autónomo (Ley 1773 de 2016).

2. RUTA DE ATENCIÓN INTEGRAL

2.1 Componentes de la Ruta de Atención Integral

Debido a las graves afectaciones que producen los ataques con ácido, álcalis o sustancias

similares o corrosivas que generen daño o destrucción al entrar en contacto con el tejido

humano, se debe garantizar una atención integral para el restablecimiento efectivo de los

derechos, que incluye: (i) la atención integral en salud, (ii) la protección a la víctima y su

familia, (iii) el acceso a la justicia y la judicialización de los agresores, (iv) la ocupación

laboral o la continuidad laboral de las víctimas.

2.1.1 Componente de atención integral en salud


En todos los casos que se presente una víctima de crímenes con ácido, álcalis, sustancias

similares o corrosivas que generen daño o destrucción al entrar en contacto con el tejido

humano, se le brindarán los primeros auxilios; esta debe ser remitida de inmediato a las

instituciones prestadoras de servicios públicas o privadas del lugar donde ocurra el hecho,

donde se le brindará la atención inicial de urgencias, para que posteriormente sea remitida, si

la lesión lo amerita, a los centros especializados o, en su defecto, al centro hospitalario de

mayor nivel de complejidad.

2.1.1.1 Primeros auxilios

Para la atención de la víctima en el lugar donde ocurrió la agresión, se deben tener en cuenta

los lineamientos que defina el Ministerio de Salud y Protección Social, sobre las medidas de

cuidados básicos que permiten disminuir los efectos negativos de estas sustancias en la salud

de la víctima

2.1.1.2 Prestación de servicios de salud

La prestación de servicios de salud comprende:

a) Traslado de la víctima. Llevar a la víctima al hospital más cercano de la zona para que

reciba la atención inicial de urgencias y, si la lesión lo amerita, de allí debe ser trasladada a

un Centro Hospitalario de mediana o alta complejidad que cuente con profesionales con

experiencia en la atención de quemaduras, para tratamiento especializado;

b) Atención Inicial de Urgencias. Las víctimas que ingresan a las IPS que cuenten con el

servicio habilitado de urgencias, deberán ser atendidas de forma prioritaria de acuerdo al

grado de compromiso de la vida o la salud, evitando demoras que puedan incrementar las

afectaciones en la salud física y mental de las víctimas. Las Instituciones Prestadoras de


Servicios de Salud, conforme al artículo 8o numeral 7 de la Resolución número 5521 de 2013

o la que la modifique, adicione o sustituya, deben realizar las acciones allí previstas:

-- La estabilización de sus signos vitales que implica realizar las acciones tendientes a

ubicarlos dentro de parámetros compatibles con el mínimo riesgo de muerte o complicación,

y que no conlleva necesariamente la recuperación a estándares normales, ni la resolución

definitiva del trastorno que generó el evento.

-- La realización de un diagnóstico de impresión.

-- La definición del destino inmediato de la persona con la patología de urgencia;

c) Recolección de elementos materiales probatorios y evidencia física: De conformidad con el

artículo 255 del Código de Procedimiento Penal (Ley 906 de 2004), el personal de los

servicios de salud es responsable de la recolección técnica (cadena de custodia), preservación

y entrega a las autoridades con funciones de policía judicial de los elementos materiales

probatorios (EIVIP) y evidencia física (EF) en el centro hospitalario donde se esté brindando

la atención a la víctima;

d) Notificación del evento al Sivigila y el respectivo reporte de información al RIPS, por

parte de la correspondiente Institución Prestadora de Servicios de Salud;

e) El personal de salud deberá dar aviso de manera inmediata, simultánea y coordinada, a las

autoridades competentes de justicia y protección. Para activar los mecanismos de protección,

se debe dar aviso a las autoridades de protección, de conformidad a lo establecido en el

numeral 2.1.2 Componente de Protección del presente anexo técnico. Para el caso de hombres

y mujeres mayores de 18 años, víctimas de ataques con ácido en el contexto de violencia

intrafamiliar, la IPS deberá solicitar, cuando la víctima lo requiera, en su nombre, la medida

de protección ante la autoridad competente. Para activar el acceso a la justicia, las IPS
deberán dar aviso a las autoridades con funciones de Policía Judicial para que inicien las

acciones que correspondan en el marco de sus competencias, de conformidad con los

términos establecidos en el artículo 218 del Código de Procedimiento Penal, so pena de

incurrir en las sanciones a que haya lugar;

f) Para la adecuada articulación intersectorial, las IPS deberán tener definidos procesos y

procedimientos que permitan contar con un directorio institucional que incluya los datos de

contacto de las personas con las que se deberá comunicar para la activación de los sectores de

protección y justicia. También se deben tener establecidos los medios por los cuales se deberá

dar aviso de este hecho violento;

g) Atención en Centro Especializado: Una vez se realice la atención inicial de urgencias, se

deben activar los procesos de referencia y contrarreferencia para que las víctimas de

agresiones con agentes químicos, si la lesión lo amerita, sean remitidas a la unidad de

quemados o a centros especializados o, en su defecto, al centro hospitalario de mayor nivel de

complejidad;

h) Atención ambulatoria: Las EAPB deberán garantizar a las víctimas, la atención

ambulatoria de forma continua e ininterrumpida del tratamiento establecido, hasta la

recuperación de la víctima. No se podrá imponer cargas administrativas a las víctimas para la

obtención de citas médicas, aprobación de intervenciones y entrega de medicamentos, so

pena a las sanciones a que haya lugar;

i) Afiliación al Sistema General de Seguridad Social en Salud de las víctimas. Las

instituciones prestadoras de servicios de salud informarán a las alcaldías distritales o

municipales las víctimas no afiliadas al Sistema de Seguridad Social en Salud para que se

ordene su afiliación inmediata. La víctima que no esté afiliada al Sistema General de


Seguridad Social en Salud deberá ser afiliada al Régimen Subsidiado en los términos que

establece la Ley 1438 de 2011;

j) Las instituciones prestadoras de servicios de salud deberán informar a las Secretarías de la

Mujer u Oficinas de Género de las entidades territoriales, sobre la existencia de víctimas de

ataques con sustancias, para que dichas dependencias inicien el acompañamiento y

seguimiento en la ruta integral de atención;

k) En caso de mujeres víctimas, cuando egresa del hospital, tiene derecho a solicitar la

medida de atención del artículo 19 de la Ley 1257 de 2008, que incluye los servicios de

habitación, alimentación y transporte, siempre y cuando cumpla con los requisitos

establecidos para tal fin en los decretos reglamentarios de la citada ley.

Antes del egreso hospitalario de la mujer víctima, y si ella lo requiere, la institución

prestadora de servicios de salud enviará a la autoridad competente, el resumen de la historia

clínica donde se especifiquen las implicaciones del ataque en su salud física y mental y el

tratamiento requerido.

Metodología

El proceso de investigación que guía el presente proyecto se enmarca dentro de la indagación

aplicada, por el interés que el tema propuesto representa en la sociedad colombiana y

específicamente dentro de la población de género femenino, por la identificación que se

presenta con las víctimas de ataque con ácido.


Se utilizó en esta investigación una metodología de tipo cualitativo, permitiendo comprender

el complejo mundo de las experiencias vividas desde el punto de vista de las víctimas de

ataques por agentes químicos que las viven, como es el caso de las mujeres que han pasado

por un proceso de revictimización por parte de la sociedad y el estado, específicamente el

caso de Gina Potes y Natalia Ponce de León, ambas víctimas en Bogotá. Dentro de este

análisis  se evidencia algunas leyes de la  aplicación jurídica de estos delitos, la ley 1639 de

2013 donde indica el fortalecimiento de las medidas de prevención, protección y atención

integral a las víctimas  de crímenes con ácido, álcalis, sustancias similares o corrosivas que

generen daño o destrucción al entrar en contacto con el tejido humano. La ley 1773 de 2016 o

Ley Natalia Ponce de León. La ley de víctimas de ataques con ácido, tipifica como delito

autónomo esta conducta endurece las sanciones a los agresores y elimina beneficios, como la

suspensión condicional de la ejecución de la pena. Sin embargo, se evidencia falencias y falta

de capacidad de organismos y leyes por parte del estado social de derecho. 

En el presente trabajo se aplicará el método biográfico, ya que, en los primeros

estudios desde el enfoque biográfico se puede identificar un modo de vincular el relato de

vida y su contexto social que podemos calificar como representacional. Este modo consistiría

en enmarcar el relato en las condiciones de vida y mostrar ese relato como representante del

mundo en que viven Capriati, Alejandro (2017). Este modo lo podemos ver, por ejemplo, con

el testimonio, autobiografía experiencias, opiniones, valoraciones, conceptualizaciones de su

propia existencia y de la historia de vida de algunas víctimas que han sufrido ataques con

agentes químicos, para esto inicialmente utilizamos la recolección de datos, realizamos un

análisis de toda la información que encontramos, observamos y escuchamos videos de

entrevistas sobre los testimonios de las víctimas, entre otros.


       La técnica de esta investigación se basará en la historia de vida de las mujeres víctimas

de violencia por agentes químicos, conociendo los acontecimientos vividos y lo que le

transmitió su experiencia vital. La víctima narrará situaciones pasadas, con su origen y su

desarrollo, lo que significó para ella y cuál es el sentido de vida que encontró después de este

hecho. 

ARTÍCULO 1o. OBJETO. <Artículo compilado en el artículo 2.9.2.4.1.1 del Decreto Único

Reglamentario 780 de 2016. Debe tenerse en cuenta lo dispuesto por el artículo 4.1.1 del

mismo Decreto 780 de 2016> ,

ARTÍCULO 12. GARANTÍA DE LA ATENCIÓN EN SALUD. <Artículo compilado en el

artículo 2.9.2.4.3.3 del Decreto Único Reglamentario 780 de 2016. Debe tenerse en cuenta lo

dispuesto por el artículo 4.1.1 del mismo Decreto 780 de 2016> .El Ministerio de Salud y

Protección Social expidió el Decreto 780 de 2016 o Decreto reglamentario único del sector

salud y protección social, que compila y simplifica todas las normas reglamentarias

preexistentes en el sector de la salud.

ARTÍCULO 13. TECNOLOGÍAS EN SALUD NO INCLUIDAS EN EL PLAN DE

BENEFICIOS. <Artículo compilado en el artículo 2.9.2.4.3.4 del Decreto Único

Reglamentario 780 de 2016. Debe tenerse en cuenta lo dispuesto por el artículo 4.1.1 del

mismo Decreto 780 de 2016> Para el recobro ante el Fosyga o la entidad territorial, según

corresponda, el Comité Técnico Científico de la EPS o de la EPS-S, deberá informar en el

acta del CTC el carácter de víctima de ataque con ácido, álcalis o sustancia similar o

corrosiva y la relación de la tecnología en salud a recobrar con la afectación física y mental

derivada del ataque, conforme a lo establecido en el artículo 10 de la Resolución número


5395 de 2013 y el artículo 3o de la Resolución número 5073 de 2013 respectivamente, o las

normas que las modifiquen o sustituyan, de acuerdo al régimen al que pertenezcan.

ARTÍCULO 15. VIGENCIA. El presente decreto rige a partir de su publicación en el

Diario Oficial.Publíquese y cúmplase.Dado en Bogotá, D. C., a 29 de mayo de 2014.

1.4.2 Enfoque de género

El enfoque de género se puede entender como una perspectiva que evidencia las

discriminaciones y desigualdades entre mujeres y hombres; establece que estas desigualdades

son injustas y, en consecuencia, se diseñan propuestas para construir relaciones de género

equitativas en búsqueda de la igualdad entre hombres y mujeres.

Es importante recalcar que el enfoque de género no es sinónimo de mujer, sino que hace

referencia a una construcción cultural de roles e identidades masculinas y femeninas, así

como al ejercicio del poder en diferentes ámbitos públicos y privados.

La incorporación del enfoque de género en la ruta de atención integral para las víctimas de

crímenes con ácido, álcalis o sustancias similares o corrosivas que generen daño o

destrucción al entrar en contacto con el tejido humano implica:

-- Tener en cuenta las necesidades e intereses particulares de las víctimas y su autonomía para

tomar decisiones en cualquier momento del desarrollo de la ruta de atención.

-- Evitar la revictimización, asegurando que en ningún procedimiento o requisito se justifique

la violencia contra las víctimas o se les culpabilice por los hechos violentos.

-- Promover el empoderamiento de las víctimas como parte integral de la restitución de sus

derechos.
Es una investigación jurídica, de tipo explicativo – propositivo. En ella se analizan la Ley 599

de 2000, la Ley 1639 de 2013, y la Ley 1773 de 2016), con apoyo del método hermenéutico,

que permite interpretar el tratamiento penal dado a los ataques con ácido en Colombia, desde

el Código Penal – Ley 599 de 2000, que lo consagró como una lesión personal, hasta la Ley

1773 de 2016, que lo catalogo como un delito autónomo.

1.5.5 A que se garantice la adopción de medidas para su recuperación, estabilización y

asistencia

1.5.5.1 Las víctimas tienen derecho a recibir de manera gratuita y a cargo del Estado los

servicios, tratamientos médicos y psicológicos, procedimientos e intervenciones necesarias

para restituir la fisionomía y la funcionalidad de las zonas afectadas. (Ley 1639 de 2013,

artículo 5o).

A nivel nacional se resaltan las siguientes leyes que abordan las diferentes formas de

violencias de género:

-- Ley 294 de 1996, “La presente Ley tiene por objeto desarrollar el artículo 42, inciso 5o., de

la Carta Política, mediante un tratamiento integral de las diferentes modalidades de violencia

en la familia, a efecto de asegurar a ésta su armonía y unidad. ”.

-- Ley 599 de 2000, “por la cual se expide el Código Penal”. por medio de la cual se expide el

Código Penal Colombiano, reglamenta las conductas punibles de celebración indebida de

contratos a través de los tipos penales de Violación del régimen legal o constitucional de

inhabilidades e incompatibilidades.

-- Ley 906 de 2004, “por la cual se expide el Nuevo Código de Procedimiento Penal”.hace

referencia a las garantías procesales en los artículos 1 a 27. Los tratados internacionales

relacionados con derechos humanos, cuando son ratificados, integran la Constitución


-- Ley 1098 de 2006, “por la cual se expide el Código de la Infancia y la Adolescencia”.por la

cual se expide el Código de la Infancia y la Adolescencia, el cual tiene por objeto establecer

normas sustantivas y procesales para la protección integral de los niños, las niñas y los

adolescentes, garantizar el ejercicio de sus derechos y libertades consagrados en los

instrumentos internacionales de Derechos Humanos, en la Constitución Política y en las

leyes, así como su restablecimiento. Dicha garantía y protección será obligación de la familia,

la sociedad y el Estado.

-- Ley 1257 de 2008, “Por la cual se dictan normas de sensibilización, prevención y sanción

de formas de violencia y discriminación contra las mujeres, se reforman los Códigos Penal,

de Procedimiento Penal, la Ley 294 de 1996 y se dictan otras disposiciones”

-- Ley 1438 de 2011, “por medio de la cual se reforma el Sistema General de Seguridad

Social en Salud y se dictan otras disposiciones”.tiene como objeto el fortalecimiento del

Sistema General de Seguridad Social en Salud a través de un modelo de prestación

del servicio público en salud que en el marco de la estrategia Atención Primaria en

Salud permita la acción coordinada del Estado, las instituciones y la sociedad para el

mejoramiento de la salud y la creación de un ambiente sano y saludable, que brinde

servidos de mayor calidad, incluyente y equitativo, donde el centro y objetivo de todos los

esfuerzos sean los residentes en el país.

-- Ley 1448 de 2011, “por la cual se dictan medidas de atención, asistencia y reparación

integral a víctimas del conflicto armado y se dictan otras disposiciones”.

-- Ley 1542 de 2012, “La presente ley tiene por objeto garantizar la protección y diligencia de

las autoridades en la investigación de los presuntos delitos de violencia contra la mujer y

eliminar el carácter de querellables y desistibles de los delitos de violencia intrafamiliar e

inasistencia alimentaria, tipificados en los artículos 229 y 233 del Código Penal.”.
-- Ley 1639 de 2013, “por medio de la cual se fortalecen las medidas de protección a la

integridad de las víctimas de crímenes con ácido y se adiciona el artículo 113 de la ley 599 de

2000”.

Ley 1761 2015: Objeto de la ley. La presente ley tiene por objeto tipificar el feminicidio

como un delito autónomo, para garantizar la investigación y sanción de las violencias contra

las mujeres por motivos de género y discriminación, así como prevenir y erradicar dichas

violencias y adoptar estrategias de sensibilización de la sociedad colombiana, en orden a

garantizar el acceso de las mujeres a una vida libre de violencias que favorezca su desarrollo

integral y su ~ bienestar, de acuerdo con los principios de igualdad y no discriminación.

Ley 1930 de 2013: Por el cual se adopta la Política Pública Nacional de Equidad de

Género y se crea una Comisión Intersectorial para su implementación”.


Referencias

Capriati, Alejandro (2017). Tensiones y desafíos en el uso del método biográfico. Cinta de

Moebio.

Chaves, J. C. (2017). El preocupante aumento de los ataques con agentes químicos.

Reportaje 070 política y sociedad, párr. 2. Recuperado de:

https://cerosetenta.uniandes.edu.co/el-preocupante-aumento-de-los-ataques-con-

agentes-quimicos/

EL TIEMPO, 23 de febrero de 2018 Gina Potes cuenta su historia. Gina Potes vuelve al sitio 

donde fue atacada con ácido. Hoy, esta sobreviviente es candidata a la Cámara de

Representantes y busca ser la voz de las víctimas en el Congreso.

Expósito, F., & Moya, M. (2011). Violencia de género. Mente y cerebro, 48(1), 20-25.
Frankl, V. (2015). El hombre en busca de sentido. Herder Editorial.

Gaviria, (). (01 de febrero 2016) blu radio. «tristemente Colombia es uno de los países con

mayor índice de los ataques con ácido en el mundo» [mañanas blu] Colombia

Gina Potes 'El silencio de las inocentes' | Valientes RCN 2016 - capítulo 16. Recuperado de:

https://www.youtube.com/watch?v=Di3uRY_7lnc

PLey 1773 De 2016; Una Garantía De Protección Respecto a Las Víctimas

Ley 1773 De 2016; Una Garantía De Protección Respecto a Las Víctimas

Martínez L y Rodríguez M. (2015) Mujeres quemadas con ácido en Colombia, víctimas de

una sociedad desfigurada Maestría Universidad Nueva Granada.

Mesa, A., (2017) Tematización periodística sobre los ataques con ácido a partir del 

cubrimiento mediático de la agresión a Natalia Ponce de León Estudio de caso. 

Universidad Santo Tomás. P. 1-26.

Nieto, A. (2016). Quemaduras con ácido: Estereotipos de lo Bello y su posible relación con

los ataques en Colombia.(Maestría en investigación social interdisciplinario).

Universidad Distrital Francisco José de caldas, Colombia.

OMS (2002). Informe mundial sobre la violencia y la salud. Washington, DC: OPS.

Patiño, D. P. (2016). Ley 1773 de 6 de enero de 2016 Por medio de la cual se crea el artículo 

116A, se modifican los artículos 68A, 104, 113, 359, y 374 de la Ley 599 de 2000 y

se modifica el artículo 351 de la Ley 906 de 2004. Nuevo Foro Penal, 12(86), 239-

242.

 Pissoat, O. y Gouëset, V.(2002). La representación cartográfica de la violencia en las

ciencias sociales colombianas.  revistas.unal.edu.co. Análisis Político. Disponible en:

https://revistas.unal.edu.co/index.php/anpol/article/view/80120/70914>. Fecha de

acceso: 20 abr. 2020.


Posada D. (2016). Ley 1773 de 6 de enero de 2016 Por medio de la cual se crea el 

artículo116A, se modifican los artículos 68A, 104, 113, 359, y 374 de la Ley 599 de 

2000 y se modifica el artículo 351 de la Ley 906 de 2004. Revista Nuevo Foro Penal 

Vol. 12, (86), enero-junio 2016, pp. 239-241. Universidad EAFIT, Medellín (ISSN 

0120-8179)

Soto, M. (2015) El renacimiento de Natalia Ponce de León. Bogotá: Intermedio editores.

Vecco, R. (2012, ). Biografía: VIKTOR FRANKL (1905-1997), OBRA E INFLUENCIAS

PRINCIPALES. Logoterapia Hoy-Revista Peruana de Logoterapia Clínica y

enfoques afines. Lima, 1(1).

Vieira, J. M. (2013). Quemando para matar en vida: las mujeres quemadas con ácido en

Colombia como problema público. Medellín: Universidad de Antioquia.

Welsh, J. (2009). Historia de las agresiones con ácido. Bogotá: Universitas.

También podría gustarte