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ÍNDICE

ÍNDICE……………………………………………………………………………………………………………………...……...….2

INTRODUCCIÓN………………………………………………………………………………………………………….……..…….3

PRÓLOGO ……………………………………………………………………………………………………………………………………….5

JUSTIFICACIÓN………………………………………………………………………………………………………………………….8

DEDICATORIA…………………………………………………………………………………………………………………….……….9

MIGUEL ALEMÁN VALDÉS (BIOGRAFÍA)………………………………………………………………….…10

CARRERA POLÍTICA…………………………………………………………………………………………………………….…11

ASPECTO EDUCATIVO-POLÍTICA EDUCATIVA DEL SEXENIO……………………..…16

LOGROS MÁS IMPORTANTES……………………………………………………………………………………………..17

LA CONSTRUCCIÓN DE ESCUELAS………………………………………………………………………………..20

LA ESCUELA DE L A UNIDAD NACIONAL………………………………………………………………….…21

EDUCACIÓN PREESCOLAR………………………………………………………………………………………………….…30

CREACIÓN DEL INSTITUTO INDIGENISTA………………………………………………………….….32

LEY QUE CREA EL INSTITUTO NACIONAL INDIGENISTA…………………………….…34

CREACIÓN DEL INSTITUTO NACIONAL DE BELLAS ARTES……………………….….39

LEY QUE CREA EL INSTITUTO NACIONAL DE BELLAS ARTES

Y LITERATURA……………………………………………………………………………………………………………………………40

LA CONSTRUCCIÓN DEL CAMPUS CENTRAL DE LA CIUDAD

UNIVERSITARIA, UNAM…………………………………………………………………………………………….…………49

CONCLUSIONES……………………………………………………………………………………………………………………………63

GLOSAR IO………………………………………………………………………………………………………………………………..…65

BIBLIOGR AFÍA…………………………………………………………………………………………………………………….…… 67
INTRODUCCIÓN:
El primer gobierno civil en el México pos revolucionario lo consolidó el presidente
Miguel Alemán Valdés, la transformación no solo era perceptible en la figura de El,
sino en el cambio de nombre del Partido Nacional Revolucionario por el de Partido
Revolucionario Institucional(PRI), implicando con ello que la Revolución Mexicana
era su herencia y que la vieja revolución debería dar su lugar a la actual, con una
visión hacia la modernidad que se caracterizaba por el desarrollo industrial, para
ello era necesario organizar y crear un sector industrial fuerte, pujante, que fuera
el instrumento de la nueva política de industrialización a gran escala. El estado se
dio entonces a la tarea de promover la creación de industrias e incluso
organizarlas en cámaras para fortalecerlas y que pudieran consolidarse, así el
gobierno utilizaría toda su fuerza e instrumentos a su alcance pues se consideraba
que ese debería ser el camino del país.
El gobierno de Miguel Alemán Valdés es reconocido por su lucha y sus
aportaciones a las leyes mexicanas, ya que con sus campañas logro grandes
acciones para la salud, a pesar de que fue un tiempo difícil para gobernar por los
rezagos de la posguerra y por la crisis económica que en ese momento había.
 A través de esta investigación conoceremos los grandes logros que Miguel
 Alemán Valdés tuvo en su gobierno para lograr una mejor educación y vida para
los mexicanos.
La metodología utilizada esta basada en la política educativa en el gobierno de
Miguel Alemán Valdés mediante la consulta y comprobación
comp robación de diferentes fuentes.
Esperemos que con lo aquí escrito las personas tengan la oportunidad de conocer
una parte de la historia política de nuestro país.
PRÓLOGO:
Durante el sexenio de Miguel Alemán Valdés, que va de 1946 a 1952 se creó, en
1947, la Dirección General de Enseñanza Normal, se reorganizó el Instituto
Nacional de Pedagogía, y la Escuela Normal Superior quedó instalada
definitivamente en su nuevo edificio. Fueron establecidas las Misiones Culturales,
de las cuales se hallan en servicio 67, operando más del 50 % de ellas en centros
rurales y se estableció el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura. En 1948,
fue creada la Dirección General de Alfabetización, así como el Consejo Técnico y
el Instituto Federal de Capacitación de Magisterio de Educación Física. También
fue creado el Consejo Técnico de Enseñanza Superior e Investigación Científica.
Durante la administración del presidente Miguel Alemán, continuó la política
educativa de unidad nacional. Los objetivos para el proyecto educativo propuesto
fueron, Promover la escuela rural por antonomasia, con los objetivos de instruir
eficazmente al campesino, mejorar sus condiciones económicas e higiénicas y
crear un espíritu cívico para que cada persona del campo se sintiera parte
integrante de la nación, continuar la campaña de alfabetización hasta que todos
los mexicanos supieran leer y escribir, construir más escuelas con el fin de lograr
la alfabetización, aumentar el número de profesores capacitados y fortalecer su
derecho a disponer de los medios idóneos para llevar una vida digna, editar libros,
complemento ideal de la escuela y ponerlos al alcance de todos, promover la
enseñanza técnica , para la industrialización de país con ayuda de la cooperación
privada y establecer escuelas agrícolas con ayuda de expertos agrícolas y
técnicos, estimular la alta cultura técnica o superior, y estimular ala creación
artística y ayudar a la difusión misma.
Su política, pues, trató de apoyarse en la industrialización y recuperación
económica del país. Tomo el modelo de la llamada escuela unificada que había
resultado de la Segunda Guerra Mundial en Europa. La escuela unificada
pretendía, en pocas palabras, facilitar el acceso a la enseñanza media y superior
sin distingos económicos o sociales. En el periodo conocido como de
consolidación, Miguel Alemán dio continuidad a la política educativa de Manuel
 Ávila Camacho y nuestro país participó activamente en diversos proyectos de la
recién creada Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia
y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés).
Es necesario mencionar que se crearon tres nuevas instituciones de suma
importancia: el Instituto Nacional Indigenista, donde el principal objetivo era
armonizar y conjuntar la acción de las diversas agencias gubernamentales para el
mejoramiento económico, social, educativo y cultural de los indígenas; el Instituto
Nacional de la Juventud; se creó con el propósito de estudiar los problemas
 juveniles, buscar medidas para resolverlos y dar orientación
or ientación en la vida social; y el
Instituto Nacional de Bellas Artes.
Miguel Alemán también se preocupó por el avance del preescolar. Fue entonces
cuando la Dirección General de Educación Preescolar se orientó a preparar
educadoras en todo el país.
Durante su gestión, en 1951, recibió el título de doctor honoris causa por la
Universidad Autónoma de Sinaloa[].
JUSTIFICACIÓN:

Este trabajo fue elaborado con el propósito de conocer sobre la política educativa

durante el sexenio de Miguel Alemán Valdés, así como la problemática que existía

en aquella época con referencia a la educación y cómo el gobierno trabajó para

mejorar la educación en nuestro país.


DEDICATORIA:
POLÍTICA EDUCATIVA EN EL GOBIERNO DE MIGUEL ALEMÁN VALDÉS.

BIOGRAFÍA:
Nació en Sayula en el estado de Veracruz, en 1905; murió en la ciudad de México
el 14 de Mayo de 1983.
Estudió leyes y fue magistrado del Tribunal Superior de Justicia y del Distrito y
Territorios Federales, senador de la República, gobernador constitucional de
Veracruz, en el periodo comprendido entre 1936 y 1940, y presidente del grupo de
gobernadores que se constituyó para apoyar al Ejecutivo Federal en la
expropiación petrolera (1938); dirigió la campaña para la Presidencia del general
Manuel Ávila Camacho, fue posteriormente, de 1940 a 1945, secretario de
Gobernación y, en 1946, asumió la Presidencia de la República, ostentándola
hasta 1952.
Las consecuencias de la posguerra, ya muy evidenciada en 1946, se agudizaron a
continuación y afectaron considerablemente el período presidencial de Alemán,
con una disminución de las exportaciones y un aumento del déficit en la balanza
de los pagos. Las reservas del Banco de México disminuyeron, pero, durante su
presidencia, también creció la industria siderúrgica y las campañas sanitarias
lograron que bajara de modo considerable la tasa de mortalidad.
Fue miembro de las academias Mexicana, Española, Colombiana y Nicaragüense
de la Lengua y doctor honoris causa por varias universidades nacionales y
extranjeras.
CARRERA POLÍTICA.
Desde los primeros años de su vida profesional litigó siempre en defensa de los
derechos de los trabajadores; se dedicó de lleno a defender a los mineros de
Pachuca, a donde iba todos los días por seis años con sus amigos Fernando
Casas Alemán y Gabriel Ramos Millán. Como su tesis profesional la hizo sobre los
problemas laborales y sus compensaciones, logró en sus luchas contra las
compañías mineras que se reconociera a la silicosis como una enfermedad
profesional, para hacer valer los derechos de estos trabajadores. Su tesis como
abogado, sobre riesgos y enfermedades profesionales, fue tomada como base
para la legislación obrera vigente. Alemán ejerció su profesión por un corto tiempo
en Tamaulipas, y después en Las Choapas, Veracruz, litigando a favor del
sindicato petrolero. Tras la muerte de su padre en 1929, regresó a la ciudad de
México y consiguió trabajo en el despacho de su tío paterno, el político Eugenio
Méndez. A principios de 1931 contrajo matrimonio con la guanajuatense Beatriz
Velasco, tuvieron tres hijos; Miguel, Beatriz y Jorge Francisco. Ese mismo año, la
sobresaliente labor de Alemán fue reconocida y fue nombrado abogado auxiliar de
la Secretaría de Agricultura y Fomento, donde más tarde ocupó la dirección del
Departamento Forestal. A la creación de las Juntas Federales de Conciliación y
 Arbitraje, renuncia a la burocracia y se pone a litigar. Asociado con sus amigos y
ex condiscípulos Gabriel Ramos Millán, Manuel Ramírez Vázquez, Rogerio de la
Selva, Fernando Casas Alemán y Raúl López; abrió una pequeña firma de
abogados en la calle Humboldt. Su especialidad era el derecho laboral; defendió a
trabajadores y representaba sindicatos: los mineros de Real del Monte y los
petroleros de El Águila. También empleaba sus buenos contactos con políticos
veracruzanos para acercarse a sindicatos transportistas.
En 1929 ingresa al Partido Nacional Revolucionario y en 1932 lanza su
candidatura a la diputación por Coatzacoalcos. Había hipotecado su casa, vendido
algunos de sus muebles, y un fino reloj para solventar la campaña; sin embargo, el
PNR se decidió por un pariente de la familia Franyuti.En 1932 es Candidato a
Diputado Federal Suplente (14º Distrito Acayucan-Puerto México)[1] por el Partido
Nacional Revolucionario, Eugenio Méndez Aguirre allegado al Coronel Adalberto
Tejeda Olivares es el Candidato Propietario. Cuenta Alemán que incluso fue
amenazado de muerte por un asesino a sueldo. Ramos Millán convenció a todos
los socios del bufete que "no le tuvieran miedo a los seis ceros" e incursionaron en
el mundo de los negocios, para los cuáles Alemán mostró grandes aptitudes
desde pequeño. Ramos Millán compró, a crédito y a dos pesos el metro cuadrado,
los terrenos del rancho Polanco, que fraccionó con utilidades astronómicas para
formar las colonias capitalinas de Polanco y Rincón del Bosque. A cambio de que
realizara trabajos de litigante, entregaba a Alemán un porcentaje de las acciones.
 Además, el licenciado Alemán adquirió a un precio muy bajo, los terrenos del
rancho los Pirules, que años después albergarían a Ciudad Satélite y otras
colonias anexas. Los jóvenes abogados urbanizaron, con apoyo del general
Manuel Ávila Camacho, terrenos en Cuernavaca. En un extremo del bosque de
Chapultepec, Alemán y sus amigos construyeron hermosas residencias de tipo
californiano. Los negocios de bienes raíces le proporcionaron, en sus propias
palabras, la seguridad necesaria para proseguir libre de presiones su carrera
política. En 1933, Alemán dirigió la campaña presidencial de Lázaro Cárdenas en
Veracruz, quien en reciprocidad, un año más tarde lo acomoda en la magistratura
del Tribunal Superior de Justicia del Distrito y Territorios Federales. Con el apoyo
del antiguo amigo de su familia, el general Cándido Aguilar, y del secretario del
presidente Luis I. Rodríguez; en 1935 Alemán se postuló para senador por su
estado.
El 7 de julio de 1946 se efectuaron las elecciones. Los resultados no fueron
sorpresivos, con 1 786 901 votos, el licenciado Alemán Valdés se convierte en el
nuevo presidente de México. Don Miguel asumió la presidencia el 1 de diciembre
de 1946 en el Palacio de Bellas Artes, declarado recinto oficial.
Durante su gestión, en 1951, recibió el título de doctor honoris causa por la
Universidad Autónoma de Sinaloa[]
.Alemán Valdés otorgó el voto de la mujer en las elecciones municipales.
Miguel Alemán Valdés en el Congreso de la Unión.
El régimen alemanista concilió los intereses entre los trabajadores y empresarios,
con el propósito de que olvidaran la lucha de clases y se propiciara el desarrollo
del capitalismo, con la promesa de que ambos sectores saldrían beneficiados
económicamente. El partido oficial (PRI) organizó la CNOP (Confederación
Nacional de Organizaciones Populares) cuyo fin era el coordinar al sector popular.
También la clase gobernante se repartía sus cuotas de poder, diputaciones,
gubernaturas y otras para cuidar sus intereses. La deuda externa se incrementó a
346 millones de dólares, porque el gasto público aumentó, faltaron inversiones en
áreas productivas y el gobierno recurrió al crédito externo. Como resultado, el
peso fue devaluado un 90% y se cotizó a 8.65 pesos por dólar.
Durante su periodo presidencial, el país aumentó considerablemente su red de
carreteras, vías férreas y obras públicas; se mejoraron los sistemas de riego y
creció el reparto agrario. También se favoreció la inversión privada, con lo que
incrementó el ritmo de industrialización del país. En la ciudad de México el
crecimiento de ciudades se aceleró, destacándose la construcción de unidades
multifamiliares para los empleados de gobierno. Se diversificaron las industrias
automotrices, de motores y electrodomésticos y cadenas hoteleras. Impulsó el
turismo y sobre todo el puerto de Acapulco.
LA POLITICA EDUCATIVA DEL SEXENIO
El presidente alemán da continuidad a la campaña de alfabetización iniciada en la
gestión de Ávila Camacho, continua con la cuarta, quinta y sexta etapas, y en
1948 crea la dirección general de alfabetización, cuyo objetivo era dar preferencia
a los iletrados en edad escolar.
En 1949 se anuncia la alfabetización de 363 mil personas y al finalizar el sexenio,
se alfabetiza a dos millones de personas.
En este sexenio la escuela rural es vista como la imagen de la escuela mexicana
que instruye y mejora las condiciones del campesino. La realización más
importante fue el ensayo piloto conocido como Santiago Ixcuintla; para muchos
estudiosos este fue el último gran proyecto de la escuela rural mexicana.
Este proyecto nació en la segunda asamblea general de la UNESCO, y estuvo a
cargo de Mario aguilera Dorantes e Isidro castillo. Este propuso proporcionar los
rudimentos de la cultura; elevar las condiciones económicas e higiénicas; preparar
a los alumnos en los ideales de convivencia pacífica de la UNESCO; aplicar los
métodos de enseñanza activa y de diferenciación e individualización docente;
fomentar las artes y las técnicas, y formar maestros. Una consecuencia importante
del proyecto Santiago Ixcuintla fue el establecimiento en Pátzcuaro del centro
regional de educación fundamental para América latina (CREFAL), inaugurado por
el presidente alemán en 1951, por acuerdo de la UNESCO (cuyo director general
era Jaime Torres Bodet) y el gobierno de México.
 Aunque las autoridades bien, no escucharon las recomendaciones del proyecto,
también lo es que este proyecto demostró que la escuela rural no podía funcionar
en el contexto de la organización administrativa de la época.
En 1948 se realiza el primer congreso nacional de educación rural, convocado por
la secretaria de educación pública y el sindicato de maestros, y patrocinado por la
presidencia de la república.
LOGROS MÁS IMPORTANTES:
Durante el sexenio de Miguel Alemán Valdés, que va de 1946 a 1952 se creó, en
1947, la Dirección General de Enseñanza Normal, se reorganizó el Instituto
Nacional de Pedagogía, y la Escuela Normal Superior quedó instalada
definitivamente en su nuevo edificio. Fueron establecidas las Misiones Culturales,
de las cuales se hallan en servicio 67, operando más del 50 % de ellas en centros
rurales y se estableció el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura.
La educación rural recibió atención y se integró a la secretaria de educación
pública el departamento de asuntos indígenas, transformándolo en dirección
general.
Se formó el consejo de educación y se creó el CREFAL.
Las misiones culturales se aumentaron al aumentar de 42 a 75, lo que represento
un aumento del 78% .
Se constituyeron cuatro escuelas prácticas de agricultura.
El departamento de enseñanza agrícola se transformó en dirección general y se
celebró el congreso de educación rural en 1948 Se constituyó y apoyó la campaña
contra el analfabetismo
Se continuó el ritmo de construcción de escuelas y se logro la colaboración del
sector privado.
La educación preescolar amplio sus servicios al pasar de 714 a 1007 jardines de
niños, y la atención se incrementó a 86 700 a 90 175 niños.
La primaria se expandió de 21, 637 a 25331 escuelas
Se estableció la dirección general de enseñanza normal.
Se fundaron normales de especialización para preparar maestros en la educación
de niños atípicos
Se creó la escuela normal de educadoras
Se impulsó la educación técnica industrial
Se promovió la edición de libros de texto que la secretaria vendía a menor costo,
para apoyar a la población de menores ingresos.
Se promovió la segunda asamblea mundial de la UNESCO celebrada en México
Se construyó la ciudad universitaria
Se aumentó el subsidio a las universidades estatales
Se fundó el instituto nacional de bellas artes (INBA)
Se creó el instituto nacional de la juventud mexicana (INJUVE)
Sin embargo a pesar de estos logros los resultados en alfabetización no fueron
relevantes y la escuela rural no tuvo un gran impulso. Sin embargo, el haberle
dado prioridad a la alfabetización de los más jóvenes, a los que aún estaban en
edad escolar, fue una medida que cerró un poco la llave de incorporación de
analfabetos.
Se reformó el artículo 3° de la Constitución, se emprendieron campañas para
contrarrestar el analfabetismo, se crearon la Dirección General de Enseñanza
Normal, el Instituto Nacional de Pedagogía, el Instituto Nacional de Bellas Artes y
Literatura y el Colegio Técnico de Educación Superior e Investigación Científica.
También se inauguraron las primeras instalaciones de la Ciudad Universitaria,
sede principal de la Máxima Casa de los Estudios del país. Fue un gran impulsor
de la cultura en México y apoyó y auspició a grandes artistas en su momento
como fueron María Teresa Montoya, David Alfaro Siqueiros, Octavio Paz, entre
otros muchos notables artistas mexicanos.
En 1948, fue creada la Dirección General de Alfabetización, así como el Consejo
Técnico y el Instituto Federal de Capacitación de Magisterio de Educación Física.
También fue creado el Consejo Técnico de Enseñanza Superior e Investigación
Científica. Se instaló el Museo Nacional de Artes Plásticas y se logró la
terminación de la Escuela Nacional de Maestros.
Su política, pues, trató de apoyarse en la industrialización y recuperación
económica del país. Tomo el modelo de la llamada escuela unificada que había
resultado de la Segunda Guerra Mundial en Europa. La escuela unificada
pretendía, en pocas palabras, facilitar el acceso a la enseñanza media y superior
sin distingos económicos o sociales.
Pero entre los logros más sobresalientes del gobierno de Miguel Alemán en
materia educativa, destaca la creación del Instituto Indigenista, la construcción de
la Ciudad Politécnica, de la Ciudad Universitaria, de la Escuela Nacional de
Maestros, de la Escuela Naval de Veracruz y de la Escuela de Aviación Militar de
Zapopan, Jalisco.
LA CONSTRUCCIÓN DE ESCUELAS.
Miguel Alemán Valdés, presidente en el periodo 1946-1952, asumiría una posición
en su plan de gobierno en torno a la Educación Tecnológica de la siguiente
manera: “...la industrialización del país, la rehabilitación de nuestros f errocarriles,
el desarrollo de la aviación y de la marina mercante, la mecanización del campo, la
electrificación rural y el anhelo de que México no sólo aproveche los adelantos de
la ciencia universal, sino que pueda aportar a su desarrollo el genio de nuestro
pueblo, requiere que las escuelas técnicas se multipliquen en el país”.

En general, podemos afirmar que durante éste sexenio se vuelve a dar una
expansión de la educación Tecnológica; en 1947 Miguel Alemán firma el acuerdo
para crear la ESIQIE; en 1951 se crea la Escuela Técnica Industrial Wilfrido
Massieu, hoy CECyT 11; en 1952 se inaugura la Escuela Superior de Economía;
debido a la demanda se construye un nuevo edificio para la ESIA. Un aspecto
importante a destacar, es el hecho de que, durante este periodo, entra en vigor la
primer Ley Orgánica en el IPN. Con un programa ambicioso de obras públicas,
Miguel Alemán ordena la construcción de escuelas tecnológicas de nivel superior,
similares al IPN en los Estados. Crea la escuela Naval de Veracruz, la escuela de
 Aviación Militar en Zapopan y se crea también, como consecuencia de ésta
expansión, la Escuela Nacional de Maestros. Además, en agosto de 1952 dirige
un discurso en donde inauguraría las instalaciones de Ciudad Universitaria. Bajo
este contexto, un par de años antes, se crea el TEC de Monterrey y el ITAM,
universidades privadas con un carácter Tecnológico también.
Está claro que Ávila Camacho y Miguel Alemán representaron un giro en la política
nacionalista de Cárdenas. Impulsaron la industrialización bajo la lógica de
favorecer abiertamente los intereses privados. Sin embargo los avances en
términos de la infraestructura para la educación no significaron, durante éstos
gobiernos, la desaparición de los problemas. A final de cuentas serían los que
generarían nuevos y agudizarían los ya existentes: falta de maestros, laboratorios
arcaicos, becas insuficientes, rezago en los planes y programas de estudio, etc.
LA ESCUELA DE LA UNIDAD NACIONAL.
Miguel Alemán inicia su periodo presidencial el 1o. de diciembre de 1946,
correspondiéndole el estreno del recién reformado Artículo Tercero, que hasta la
fecha sigue vigente. La idea democrática que preside los conceptos del Artículo
Tercero constitucional corresponde a los principios modernos de una democracia
social, que actúa en forma activa para el mejoramiento económico, social y cultural
del pueblo, al mismo tiempo que conserva su sentido anticlerical.
 Alemán afirmó su confianza en la esencia democrática de las instituciones
públicas; hizo énfasis en la igualdad, entendida no sólo como el goce efectivo de
los derechos y garantías individuales, sino como la consecución de una “igualdad
ciudadana”, que consistía en que todos los habitantes de la República pudieran
participar de los beneficios que se podían obtener en la ciudad.
Para ello, su programa sexenal hizo hincapié en dos puntos: la modernización del
campo y la industrialización del país. Según Alemán, la gran masa campesina de
México debería recibir ayuda directa por medio de un vasto programa de obras de
riego, que elevaría la producción agrícola, así como a través de un sistema de
crédito bien organizado, apoyado en los bancos de Crédito Agrícola y Crédito
Ejidal. Pero en sí, el énfasis mayor fue puesto en la industrialización del país, meta
que requería una amplia enseñanza tecnológica, una prudente protección
arancelaria, un sistema de crédito de mayor volumen y la creación de una
infraestructura que sería la base del desarrollo de la nación.
En el campo de la educación, la política se guió por el mismo objetivo que en
periodo avila-camachista: la creación de una escuela que legitimara el régimen, al
mismo tiempo que procurara al país la mano de obra necesaria para la
industrialización. En el periodo alemanista Manuel Gual se hizo cargo de la
Secretaría de Educación Pública, y junto con Francisco Larroyo, dotó a la
institución de una fuerte carga filosófica.
El ideario educativo de Miguel Alemán se apoyó en ocho puntos, según un libro
editado por la SEP en 1947:
1. La escuela rural tendría tres objetivos: una instrucción eficaz para el campesino,
el mejoramiento en las condiciones económicas e higiénicas del campesino y la
creación de un espíritu cívico que hiciera sentir a cada niño campesino que es
parte integrante de la Nación.
2. La continuación de la campaña de alfabetización.
3. Construcción de escuelas.
4. Capacitación del magisterio
5. Los libros.
6. La enseñanza técnica, ya que formaba parte del programa de industrialización
del país. Dentro de este proyecto, se pretendía recurrir a la cooperación privada,
gracias a la cual se logró la obra de construcción de las escuelas.
7. Escuelas de agricultura, ya que las preparaciones de expertos agrícolas era
igual de necesario que los obreros calificados.
8. La Alta Cultura, dentro de lo cual entra la construcción de la Ciudad
Universitaria y la creación del Instituto Nacional de Bellas Artes.
Tuvo como uno de sus colaboradores inmediatos al distinguido filósofo y
pedagogo mexicano Francisco Larroyo, quien fue el primer titular de la Dirección
General de Enseñanza Normal, creada en 1947.
Francisco Larroyo fue profesor normalista y doctor en filosofía. En un viaje de
estudios a Alemania, conoció la filosofía neokantiana de Marburgo, entonces
representada por Paul Natorp, creador de la corriente de la pedagogía social. De
regreso a México, Larroyo difundió ampliamente la filosofía crítica de Marburgo, y
escribió varios libros orientados por dicha escuela.
Haciendo uso de las ideas filosóficas de Larroyo, Gual Vidal manifestó mucha
insistencia en orientar la educación hacia la actividad productiva del país. Indica,
en diversas ocasiones, la necesidad de vincular el sistema educativo con las
tareas nacionales de producción económica. Por ello, hace énfasis en la llamada
ESCUELA PRODUCTIVA y el APRENDER HACIENDO.
 A este respecto, agrega como principios regulativos de la Escuela Rural, la tesis
central de la pedagogía social, el vínculo de la escuela con la comunidad de
cultura a que pertenece, la personalidad libre del alumno y el principio de la
escuela activa y del trabajo, y tiene como objetivos inmediatos convertir a los
alumnos en factores activos de la producción económica, impartir una cultura
general, además de tender a las actividades prácticas en adiestramientos
manuales, actividad deportiva y artística con fines de diversión y entretenimiento.
En base a lo anterior, y para realizar una mejor cobertura educativa, propone el
sistema de escuelas paralelas: clases normales, clases de aceleración, clases
auxiliares y clases para los niños bien dotados, que tenía como objetivo principal
el proporcionar mejor atención a los educandos según sus habilidades y
capacidades de aprendizaje.
En lo tocante a la educación normal, la responsabilidad en la formación de los
profesores estuvo en manos de Francisco Larroyo, quien fue nombrado Director
General de Enseñanza Normal en marzo de 1947. Una vez ocupando su cargo,
independizó el Departamento de Educadoras de Párvulos y lo convirtió en la
actual Escuela Nacional de Educadoras. Es importante hacer notar que su labor
como académico y responsable de la educación normal, estuvo sellada por las
ideas filosóficas que importó de Alemania.
Como ya se dijo anteriormente, la industrialización de México marcó el ritmo y el
tono de la educación en México, destacando la enseñanza técnica como meta
principal del régimen. Ésta debería desarrollarse ampliamente, por estar en el
centro de las preocupaciones. Por ello, se impulsó el Departamento de
Capacitación del Instituto Politécnico, para formar obreros calificados, además de
inaugurarse varios institutos tecnológicos regionales. Asimismo, se dieron los
pasos necesarios para constituir el Patronato encargado de la Ciudad Politécnica.
Y ya hablando del tema de las construcciones, debo mencionar que fue la
construcción de escuelas lo que caracterizó el periodo alemanista. El trabajo
realizado por Jaime Torres Bodet en este campo, tuvo seguimiento durante la
gestión de Manuel Gual Vida. En marzo de 1948, el Presidente puso en marcha la
Campaña Nacional de Construcción de Escuelas (1948-52). Mediante ésta, al final
del sexenio se habían construido 4 159 escuelas nuevas y se habían reparado 2
383, obras que requirieron 272 millones de pesos. La creación máxima de esta
campaña fue la erección de la Ciudad Universitaria. Con un costo aproximado de
200 millones de pesos, en un espléndido escenario en el Pedregal de San Ángel,
se construyó la Ciudad Universitaria, la cual fue entregada a la comunidad
universitaria en el mes de noviembre de 1952.
Y para finalizar con la exposición de los logros del sector educativo durante la
presidencia de Miguel Alemán, es necesario mencionar que se crearon tres
nuevas instituciones de suma importancia: el Instituto Nacional Indigenista (4 de
diciembre de 1948), tenía como principal objetivo armonizar y conjuntar la acción
de las diversas agencias gubernamentales para le mejoramiento económico,
social, educativo y cultura de los indígenas; el Instituto Nacional de la Juventud (15
de mayo de 1950), se creó con el propósito de estudiar los problemas juveniles,
buscar medidas para resolverlos y dar orientación en la vida social; y el Instituto
Nacional de Bellas Artes (1o. de enero de 1947).
 A pesar de los logras antes mencionados, en el sexenio alemanista la
alfabetización decayó lamentablemente, no se dio la debida atención a la cuestión
indigenista, y la enseñanza agrícola y la escuela rural tampoco recibieron la ayuda
necesaria. Y a pesar de las cuantiosas construcciones, el presupuesto destinado
al sector educativo disminuyó en relación con el de Ávila Camacho. En 1947, el
presupuesto educativo representaba el 14.21% del presupuesto federal, en tanto
que el último año del régimen de Ávila Camacho representaba el 17.48%. En el
último año del gobierno de Alemán, el presupuesto educativo bajó al 10.96%.
Es importante hacer notar que el inicio y el fin de la Segunda Guerra Mundial, al
mismo tiempo que el inicio de la Guerra Fría  –datos recurrentes en todo el trabajo-
, produjeron un nuevo sentido de la vida en el planeta. Políticamente, la tensión
provocada por el conflicto Este-Oeste, trajo como consecuencia la alineación de
todos los países del mundo hacia alguno de los dos bandos: o con los comunistas
o con los “países libres”… con melón o con sandía. Dependiendo de la decisión,
hubo modelos económicos listos para implantarse: el capitalismo y el socialismo. Y
dependiendo del modelo económico, había otras tantas opciones de ideas y
pensamientos filosófico-culturales en espera de nuevas conquistas.
Por lo anterior, a México le correspondió por “libre albedrío” alinearse al
capitalismo dependiente, aunque oficialmente no se identificó con ninguno de los
dos bandos políticos existentes. Para que dicho capitalismo funcionara
“óptimamente”, se tuvo que reestructurar la sociedad entera, y por ende las bases
institucionales de la nación. Obviamente la educación sufrió este proceso.
Lo interesante en este aspecto, es que la educación empezó a ser vista como un
aparato de control por parte del Estado, ya que la escuela sería la base sobre la
cual se construiría el sistema político y económico.
Si tomamos en cuenta las políticas de gobierno de los presidentes Ávila Camacho
y Miguel Alemán, se puede notar que fue la atención giró en torno a un binomio:
unidad nacional y crecimiento económico. El segundo elemento depende en
mucho del primero, al menos así lo creyeron nuestros ex-presidentes. ¿Por qué?
Porque si México quería crecer económicamente, si el país quería progresar,
necesitaba estabilidad y paz en todos los aspectos. Cualidades que el movimiento
revolucionario de 1910 perturbó y que las diferencias políticas de los años
posteriores no permitieron lograr. La Unidad Nacional estaba destinada a
homogeneizar al mexicano, a sumirlo en un mundo de valores nuevos y “propios”,
a llevarlo hacia el encuentro de él como mexicano, a amar a su país y todo lo que
en el había. Solamente la unidad nacional daría la estabilidad necesaria para
iniciar un programa económico que hiciera crecerá a la nación. Ese programa
económico fue la industrialización.
De esta forma, la fórmula quedó así:
Educación nacionalista = Unidad Nacional
Unidad Nacional = Crecimiento económico
Es decir, la escuela se encargaría de educar en el civismo a los niños y a
enseñarles lo necesario para su incorporación a la vida productiva. El resultado
final fue la preeminencia de la escuela técnica en la educación pública de México.
Pero este tipo de escuela, “la escuela del trabajo”, esta fundamentada en una
“pedagogía de la producción” que desde el siglo XIX se venía desarrollando en
todo el mundo.
 A través del apartado referente a las corrientes pedagógicas, se puede notar que
la “escuela activa” fue la cara cterística fundamental de los diferentes pensadores
dedicados al área de la educación. Con o sin fundamentos sociológicos o
antropológicos, las escuelas pedagógicas de posguerra se centraron en la
vinculación entre la escuela y el entorno cotidiano del educando.
Estas ideas influyeron el pensamiento de muchos pedagogos mexicanos, que
coincidentemente realizaron una intensa labor en la SEP. El caso de Francisco
Larroyo.
Por todo lo anterior, fue que resultó tan importante para mí el desarrollo de un
trabajo que tratara esta etapa específica de la historia de la educación pública en
México. Aunque me enfrenté a un mundo entero de problemas en este rubro.
Cada una de las aristas de la educación en México, tiene material para estudios
completos. La educación indígena, la escuela rural, la educación superior, la
enseñanza técnica, los conflictos magisteriales, los sindicatos, la vinculación entre
la educación y la sociedad, la educación primaria, las normales, etc. Cada uno de
estos aspectos encierra una problemática sumamente compleja de abarcar
ligeramente. Pero descubrí que hay algo que las identifica a todas: la política
educativa del régimen. Será el Estado quien le de metas y objetivos, según sus
intereses. Sea cual sea la diferencia entre cada uno de estos aspectos, lo que los
une es que todos son un aparato de control del Estado.
Bien dicen que la educación es un negocio, y no únicamente un negocio
cuantitativo sino también cualitativo. Qué mejor que una escuela en donde mis
programas de estudio estén destinados a crear egresados que me adoren y
piensen que soy una Diosa. Esto fue lo que hizo el Estado mexicano.
La Escuela de la Unidad Nacional fue una máquina destinada a producir obreros
calificados con un sentimiento nacionalista sumamente arraigado (entiéndase al
nacionalismo como todo producto del partido oficial).
EDUCACIÓN PREESCOLAR:
En 1940 las educadoras normalistas elaboraron un documento dirigido hacia al
presidente Ávila Camacho donde se argumentaba que la Educación Preescolar va
dirigido a niños sostenidos por la tutela familiar, y que aquellos que requieren la
del Estado deberían seguir atendidos por la Secretaría de Asistencia Pública
(SAP).
El jardín de niños se definió, como una Institución "eminentemente educativa"
creada para atender a niños cuyas necesidades básicas están satisfechas.
Por su parte el presidente Ávila Camacho traslado en 1941, dicho nivel escolar a
la Secretaría de Educación Pública creándose el Departamento de Educación
Preescolar. En ese mismo año se formó una comisión que reorganizaría los
programas relacionados con salud, educación y recreación.
El Secretario de Educación Pública Torres Bodet, consideraba que a pesar de que
la educación de los niños era tarea primordial de la madre, en muchas ocasiones
no tenían ni el tiempo ni la preparación para atender correctamente a sus hijos. De
aquí la necesidad de que el Estado las auxiliara por medio de la Educación
Preescolar.
Fue por ello que la Secretaría de Educación Pública hizo grandes esfuerzos para
mejorar las instalaciones de estos planteles y equiparlos con el mobiliario y el
material didáctico que respondiera mejor a sus necesidades.
En 1946 había un total de 620 jardines de niños en toda la República.
Miguel Alemán también se preocupó por el avance del preescolar. Fue entonces
cuando la Dirección General de Educación Preescolar se orientó a preparar
educadoras en todo el país. Para este fin se utilizó como medio la radio, a través
de programas diarios que deberían desarrollas las maestras con los niños. Al
finalizar el sexenio de alemán había en toda la República 898 jardines de niños:
Los objetivos principales de esta educación eran:
a)- La salud del niño
b)- El desarrollo de su personalidad
c)- El desarrollo de un ambiente sano de las relaciones con los padres de familia a
quienes se consideraba como los mejores educadores de l los pequeños.
CREACION DEL INSTITUTO INDIGENISTA.
La creación del Instituto Nacional Indigenista, en 1948.
En abril de 1940, durante el gobierno de Lázaro Cárdenas, se reunió en la ciudad
de Pátzcuaro, Michoacán el Primer Congreso Indigenista Interamericano. El
principal acuerdo de esta reunión consistió en crear el Instituto Indigenista
Interamericano (III), mediante la firma de una convención para el establecimiento
de un Instituto Nacional Indigenista en cada uno de los países participantes.
El instrumento fue firmado el 29 de noviembre de 1940 por los representantes de
ocho países americanos y fue ratificado por el presidente Manuel Ávila Camacho
el 29 de abril de 1941.
El acta final del Primer Congreso Indigenista Interamericano, celebrado en
Pátzcuaro, Michoacán, en abril de 1940, acordó la creación del Instituto
Indigenista Interamericano y autorizaba, "de acuerdo con los gobiernos
respectivos, el establecimiento de Institutos Nacionales, filiales del Instituto
Indigenista Interamericano" en los países miembros. (Instituto Indigenista
Interamericano, 1940:38). Ocho años más tarde, en diciembre de 1948 y siendo
Presidente de la República el Lic. Miguel Alemán, fue aprobada la ley de creación
del Instituto Nacional Indigenista (INI). Transcribimos a continuación los párrafos
más importantes de dicha ley, abrogada el 21 de mayo de 2003 al crearse la
Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas:
"Nueva Ley publicada en el Diario Oficial de la Federación el 4 de diciembre de
1948.(...)
MIGUEL ALEMAN, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, a
sus habitantes, sabed:
Que el H. Congreso de la Unión, se ha servido dirigirme el siguiente
DECRETO:
El Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, decreta:
LEY QUE CREA EL INSTITUTO NACIONAL INDIGENISTA.
 Artículo 1
Se crea el Instituto Nacional Indigenista, con personalidad jurídica propia, filial del
Instituto Indigenista Interamericano y con sede en la capital de la República.
 Artículo 2
El Instituto Nacional Indigenista desempeñará las siguientes funciones:
I.- Investigar los problemas relativos a los núcleos indígenas del país;
II.- Estudiar las medidas de mejoramiento que requieran esos núcleos indígenas;
III.- Promover ante el Ejecutivo Federal, la aprobación y aplicación de estas
medidas.
IV.- Intervendrá en la realización de las medidas aprobadas, coordinando y
dirigiendo, en su caso, la acción de los órganos gubernamentales competentes;
V.- Fungir como cuerpo consultivo de las instituciones oficiales y privadas, en las
materias que, conforme a la presente Ley, son de su competencia;
VI.- Difundir, cuando lo estime conveniente y por los medios adecuados, los
resultados de sus investigaciones, estudios y promociones, y
VII.- Emprender aquellas obras de mejoramiento de las comunidades indígenas,
que le encomiende el Ejecutivo, en coordinación con la Dirección General de
 Asuntos Indígenas.
 Artículo 3
El Instituto estará capacitado para adquirir y administrar bienes y formar su
patrimonio con los que en seguida se enumeran:
I.- La cantidad que anualmente le fije como subsidio el Gobierno Federal, a través
de su Presupuesto de Egresos;
II.- Con los productos que adquiera por las obras que realice y por la venta de sus
publicaciones, y
III.- Los que adquiera por herencia, legados, donaciones o por cualquier otro título
de personas o de instituciones públicas o privadas.
 Artículo 4
Los bienes que lleguen en esta forma a constituir el patrimonio del Instituto no
podrán ser gravados ni enajenados por el mismo, sin previa autorización del
Gobierno Federal, y sujetándose en todo caso para tales enajenaciones o
gravámenes, a las disposiciones que rijan a los bienes nacionales, calidad que en
todo tiempo conservarán esos bienes.
 Artículo 5
El Instituto quedará integrado por el Director y un Consejo, además del personal
técnico y administrativo que requieran sus actividades.
 Artículo 6
El Director del Instituto será designado por el C. Presidente de la República de
entre aquellas personas que se hayan distinguido en cualquiera de las actividades
técnicas que se relacionen con las funciones propias del Instituto; le
corresponderá la representación legal de éste y será el ejecutor de los acuerdos
del Consejo.
 Artículo 7
El Consejo será presidido por el Director y estará integrado por representantes de
las Secretarías de Educación Pública (Dirección de Asuntos Indígenas),
Salubridad, Gobernación, Agricultura, Recursos Hidráulicos, Comunicaciones y
Obras Públicas y Departamento Agrario y por representantes designados por el
Banco de Crédito Ejidal, Instituto Nacional de Antropología e Historia, la
Universidad Nacional Autónoma de México y el Instituto Politécnico Nacional, por
un representante designado por las sociedades científicas que se dediquen
preferentemente a estudios antropológicos y por representantes de los núcleos
indígenas más importantes que serán designados y participarán en la forma y
términos que señale el Reglamento de la presente Ley.
 Artículo 8
El Director del Instituto planteará cada año al Consejo, el plan de acción y las
investigaciones técnicas que le correspondan, conforme a los términos de la
presente Ley. El Consejo aprobará, a más tardar en el mes de septiembre, el plan
que desarrollarán en el siguiente año.
 Artículo 9
El Consejo se reunirá mensualmente en sesión ordinaria y en sesión
extraordinaria cada vez que para ello sea convocado por el Director, debiéndose
celebrar las sesiones ordinarias precisamente en las fechas que al efecto se fijen
en el calendario que oportunamente se forme.
 Artículo 10
En las sesiones del Consejo, las decisiones se adoptarán a mayoría de votos y en
caso de empate el Director tendrá voto de calidad.
 Artículo 11
Será facultad del Director del Instituto someter a la decisión del Consejo la
contratación del personal técnico necesario para el desarrollo de sus actividades.
Este personal técnico será contratado por tiempo limitado para la realización de
trabajos determinados. El Tesorero del Instituto será nombrado por el Presidente
del mismo, con aprobación del Consejo.
El Consejo tendrá derecho a mandar practicar, cuando lo juzgue conveniente, una
auditoría sobre el manejo de los fondos del Instituto. Cada año será obligatorio
nombrar un Auditor que compruebe la correcta aplicación de los fondos.
El personal administrativo quedará sujeto a contrato de trabajo por el tiempo que
sean necesarios sus servicios.
 Artículo 12
Las Secretarías y Departamentos de Estado prestarán al Instituto Nacional
Indigenista, la colaboración necesaria para la realización del plan de trabajo que
sea aprobado por el Consejo. Las Secretarías y Departamentos de Estado harán
figurar en sus respectivos presupuestos las cantidades necesarias para la
realización de dicho plan, y no podrán disponer de dichas partidas para otro
objeto.
 Artículo 13
El Instituto, como Dependencia del Gobierno Federal, gozará de franquicia postal
y telegráfica y del descuento que a aquéllas corresponde en las vías generales de
comunicación.
 Artículo 14
Las operaciones en virtud de las cuales el Instituto adquiera bienes de
instituciones públicas o privadas, nacionales o extranjeras o bien particulares,
estarán exentas de toda clase de contribuciones, impuestos o derechos."
 El 5 de julio de 2003 entró en vigor el Decreto por el cual se expide la Ley de la
Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas y se abroga la Ley
de Creación del Instituto Nacional Indigenista. La Comisión Nacional para el
Desarrollo de los Pueblos Indígenas, como organismo descentralizado con
personalidad jurídica y patrimonio propio, tiene la misión de coordinar, promover, y
fomentar los programas y estrategias públicas para alcanzar el desarrollo integral
de los pueblos indígenas.

CREACIÓN DEL INSTITUTO NACIONAL DE BELLAS ARTES.


El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura o INBAL, a veces referido como
INBA, es una institución de México dedicada a la difusión de actividades artísticas
y culturales que se realizan a nivel nacional, incluyendo el ámbito educativo.
Fue proyecto y creación del licenciado Miguel Alemán Valdés siendo candidato a
la presidencia de la República.
En sus inicios fue una dependencia de la Secretaría de Educación Pública que
tuvo diversos nombres (hasta fines de 1946, Dirección General de Educación
Extraescolar y Estética y, anteriormente Departamento de Bellas Artes).
 A principios de 1946 la Comisión Cultural del Comité Nacional Alemanista formuló
el plan de Bellas Artes, la cual había sido instruida por el candidato a la
Presidencia de la República. De esta manera se fundieron varios artículos: "Bellas
 Artes", "El Instituto Nacional de Bellas Artes", "La Ley de Bellas Artes y Creación
Nacional".
El Instituto Nacional de Bellas Artes inició sus actividades en 1950. El candidato a
la presidencia Miguel Alemán consideró el asunto de Bellas Artes primordial para
la cultura nacional en su campaña presidencial. Se elaboró un plan de Bellas
 Artes, fechado el 1ro de julio de 1946, que constaba de las siguientes partes:
a) Consideraciones Generales
b) Proyecto de Ley Orgánica del Instituto Nacional de Bellas Artes
c) Esquema de organización funcional del Instituto
d) Proyecto de construcción de edificios de Bellas Artes
e) Proyecto general de presupuesto, que fue aprobado por el candidato siendo ya
presidente electo.

LEY QUE CREA EL INSTITUTO NACIONAL DE BELLAS ARTES Y


LITERATURA
Nueva Ley publicada en el Diario Oficial de la Federación el 31 de diciembre de
1946
 Al margen un sello con el Escudo Nacional, que dice: Estados Unidos Mexicanos. -
Presidencia de la República.
MIGUEL ALEMAN VALDES, Presidente Constitucional de los Estados Unidos
Mexicanos, a sus habitantes, sabed:
Que el H. Congreso de la Unión, se ha servido dirigirme el siguiente
DECRETO:
"El Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, decreta:
 ARTICULO 1°.- Se crea por medio de la presente Ley el Instituto Nacional de
Bellas Artes y Literatura, con personalidad jurídica propia.
 ARTICULO 2°.- El Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura dependerá de la
Secretaría de Educación Pública y tendrá las finalidades siguientes:
I.- El cultivo, fomento, estímulo, creación e investigación de las bellas artes en las
ramas de la música, las artes plásticas, las artes dramáticas y la danza, las bellas
letras en todos sus géneros y la arquitectura.
II.- La organización y desarrollo de la educación profesional en todas las ramas de
las Bellas Artes; de la educación artística y literaria comprendida en la educación
general que se imparte en los establecimientos de enseñanza preescolar,
primaria, de segunda enseñanza y normal.
Para la coordinación, planeación, organización y funcionamiento de la finalidad a
que se contrae el presente inciso, se creará un Consejo Técnico Pedagógico como
órgano del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, que bajo la presidencia
de su director se integrará con representantes de las dependencias técnicas
correspondientes de la Secretaría de Educación Pública y con representantes de
las dependencias también técnicas del propio Instituto.
III.- El fomento, la organización y la difusión de las Bellas Artes, inclusive las bellas
letras, por todos los medios posibles y orientada esta última hacia el público en
general y en especial hacia las clases populares y la población escolar.
IV.- El estudio y fomento de la televisión aplicada a la realización, en lo
conducente, de las finalidades del Instituto.
V.- Las demás que en forma directa o derivada le correspondan en los términos de
esta Ley y de las que resultaren aplicables.
 ARTICULO 3°.- Las escuelas, instituciones y servicios, que en el futuro cree el
Gobierno Federal con finalidades semejantes a las comprendidas en el artículo
anterior, quedarán a cargo y bajo la dependencia del Instituto. Igualmente, las
subvenciones que otorgue el Gobierno Federal, así como los trabajos que
encargue o patrocine para el fomento de actividades de la misma naturaleza de
las que conforme a la presente Ley son propias del Instituto, deberán ser
otorgadas, encargados o patrocinados por éste.
 ARTICULO 4°.- El Instituto, capaz para adquirir y administrar bienes, formará su
patrimonio con los que a continuación se enumeran:
I.- Con el subsidio que anualmente le otorgue el Gobierno Federal, a través de su
Presupuesto de Egresos.
II.- Con las partidas presupuestales de cualquier género que la Secretaría de
Educación Pública destine a la fecha de entrar en vigor la presente Ley al
funcionamiento o sostenimiento de las instituciones, establecimientos o
dependencias, cuyo manejo la misma atribuye en lo futuro al Instituto, debiéndose
comprender expresamente las correspondientes al personal que actualmente
desempeña actividades relacionadas con las funciones previstas en el artículo 2°
en la misma Secretaría de Educación Pública, personal que quedará adscrito para
tales objetos al Instituto.
III.- Con el uso de los edificios y terrenos siguientes, ubicados todos ellos en el
Distrito Federal:
El nuevo edificio del Conservatorio Nacional; la totalidad de los terrenos que
constituían el "Club Hípico Alemán", en la Avenida del Castillo y calle de Mazarik,
con una extensión de cincuenta y tres mil metros cuadrados; el edificio situado en
los terrenos anteriormente citados y que a la fecha ocupa la Escuela de Danza; el
edificio que ocupa la Escuela Nacional de Artes Plásticas en la calle de la
Esmeralda número 14; el Palacio de Las Bellas Artes con todas sus dependencias
y anexos; el edificio del Teatro Hidalgo, igualmente con todas sus dependencias y
anexos; los terrenos que ocupa el ex templo de San Diego, con sus anexos en la
calle del Dr. Mora; y todos los demás edificios y terrenos que al Instituto destine el
Gobierno Federal.
Párrafo reformado DOF 11-12-1950
IV.- Las pinturas y esculturas que integran la colección de la antigua Academia de
San Carlos, que depende actualmente de la Secretaría de Educación Pública; y
las que forman la colección del Palacio de Bellas Artes, así como todas las
pinturas y objetos que constituyen el Museo de Arte Popular; todas las obras de
arte que el Estado destine para la exhibición pública y difusión estética.
V.- El mobiliario, biblioteca, instrumental, útiles, etc., que pertenecen a las
escuelas y dependencias que formarán parte del Instituto.
VI.- Los que adquiera el Instituto por herencia, legado, donación o por cualquier
otro título.
VII.- Todos los demás bienes que el Gobierno Federal dedique en el futuro al
Instituto para su servicio.
VIII.- El producto de las cuotas y precios de arrendamiento que previa aprobación
del Consejo fije el Director del Instituto por: entrada a los conciertos y demás
espectáculos musicales, teatrales, de danza, por exhibiciones de colecciones de
arte, por alquileres de teatros y sus anexos o de cualquiera otro local, así como
por entrada a los museos y a otras dependencias del Instituto; el que provenga de
la venta de publicaciones, reproducciones, tarjetas, etc., y las recaudaciones que
le correspondan por actividades de televisión.
IX.- El producto de los ingresos diversos que a cualquier otro título obtenga.
 ARTICULO 5°.- Ninguno de los bienes, muebles e inmuebles, que proporcione al
Instituto el Gobierno Federal y los que aquél adquiera por los medios previstos en
la presente Ley, podrán enajenarse, hipotecarse, canjearse, ni darse en prenda sin
sujetarse a las leyes de la materia y que rigen para los bienes nacionales.
 ARTICULO 6°.- Para su funcionamiento el Instituto se compondrá de las
direcciones, departamentos, establecimientos técnicos y dependencias
administrativas y docentes que su reglamento determine, y entre otros se
compondrá del Conservatorio Nacional de Música, de la Escuela de Danza, de la
Escuela de Pintura y Escultura, del Palacio de Bellas Artes, del Departamento de
Música, del Departamento de Artes Plásticas, del Departamento de Teatro Danza,
así como de las demás dependencias de estos géneros que sean creadas en lo
futuro.
 ARTICULO 7°.- El Instituto estará regido por un Director y un Subdirector
Generales nombrados por el C. Secretario de Educación Pública, sus funciones
serán las que señale el Reglamento correspondiente y serán designados
escogiéndose entre personas que hayan realizado en la rama artística de su
especialidad obra de notoria importancia y de mérito superior. Los directores, jefes
de departamento y en general los técnicos del Instituto deberán tener la misma
calidad y serán designados por el C. Secretario de Educación Pública, a propuesta
del Director General del Instituto, debiendo tener en todo caso el carácter de
empleados de confianza.
 ARTICULO 8°.- El personal que no esté considerado en el artículo anterior y que
no forme parte del que la Secretaría de Educación Pública con cargo a su propio
presupuesto destine al Instituto, será designado por el Director General del mismo,
quien tendrá facultad para delegar esta función y sólo para determinada clase de
empleados en los directores técnicos o administrativos competentes.
 ARTICULO 9°.- El Director y Subdirector Generales, los directores técnicos, los
 jefes de departamento y los técnicos que el efecto señale el reglamento
respectivo, constituirán el Consejo Técnico del Instituto, organismo que en todo
caso será presidido por el Director General.
 ARTICULO 10.- El Consejo del Instituto funcionará como Cuerpo Consultivo en
asuntos técnicos que no sean por su naturaleza de la exclusiva competencia del
Consejo Técnico Pedagógico y en materia administrativa tendrá, además de las
funciones que deriven de los términos de la presente Ley, específicamente la de
formular y proponer a la Secretaría de Educación Pública los presupuestos
anuales del propio Instituto.
 ARTICULO 11.- El Consejo del Instituto tendrá obligación de reunirse
mensualmente en las fechas fijadas por el calendario que al efecto se forme, en
sesión ordinaria y en sesión extraordinaria, cada vez que para ello sea convocado
por el Director General o por quien haga sus veces, de conformidad con lo que
determine su propio reglamento.
 ARTICULO 12.- La administración interna del Instituto, la vigilancia de su marcha y
el manejo de las erogaciones aprobadas por la Secretaría de Educación Pública
estarán a cargo de un Jefe de Departamento Administrativo, subordinado
 jerárquicamente al Director General y realizará sus labores en los términos que al
efecto prevenga el reglamento respectivo. El Jefe del Departamento Administrativo
será designado por el Secretario de Educación Pública a propuesta del Director
General y será en todo caso considerado como empleado de confianza que deba
rendir fianza.
 ARTICULO 13.- El Instituto, en su calidad de dependencia del Gobierno Federal,
gozará de franquicia postal y telegráfica, así como del descuento que a tales
dependencias corresponde en las vías generales de comunicación.
 ARTICULO 14.- Los bienes, aportaciones, o liberalidades que el Instituto adquiera
o reciba de instituciones y personas particulares o de gobiernos extranjeros, así
como en general las percepciones que a cualquier título obtenga el Instituto,
estarán exentos del pago de toda clase de contribuciones, impuestos o derechos.
 ARTICULO 15.- El Gobierno Federal, por conducto de su Secretaría de Educación
Pública, asignará anualmente al Instituto el subsidio y las partidas presupuestales
necesarias para su funcionamiento.
 ARTICULO 16.- Corresponderá al Instituto otorgar los premios nacionales de Arte
y de Literatura actualmente establecidos por la Ley y los que se establezcan de la
misma naturaleza, por su iniciativa propia o de cualquiera dependencia del Estado.

TRANSITORIOS:
PRIMERO.- La Secretaría de Educación Pública, de acuerdo con la de Hacienda y
Crédito Público, procederá desde luego al desglose que corresponda de las
partidas que se destinarán al Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, así
como a la creación del o los subsidios que con destino al funcionamiento del
mismo se prevén en la presente Ley.
SEGUNDO.- Oportunamente la Secretaría de Educación Pública procederá por los
conductos correspondientes y con la intervención de la o las Secretarías del Ramo
que igualmente conforme a la Ley corresponda, a hacer entrega y poner en
posesión material al Instituto de todos los bienes muebles e inmuebles,
colecciones de arte, etc., que constituirán sus pertenencias o patrimonio a través
del o los funcionarios que para estar al frente del Instituto oportunamente se
designen.
TERCERO.- Esta Ley entrará en vigor a partir del primero de enero de mil
novecientos cuarenta y siete y deroga todas las leyes y disposiciones que a la
misma se opongan. Gabriel Ramos Millán, S. P.- Rubén Vizcarra, S. S.- José
López Bermúdez, D. P.- César M. Cervantes, D. S.- Rúbricas".
En cumplimiento de lo dispuesto por la fracción I del artículo 89 de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, y para su debida publicación y
observancia, expido el presente Decreto en la residencia del Poder Ejecutivo
Federal, en la ciudad de México, D. F., a los treinta días del mes de diciembre de
mil novecientos cuarenta y seis.- Miguel Alemán Valdés.- Rúbrica.- El Secretario
de Estado y del Despacho de Educación Pública, Manuel Gual Vidal.- Rúbrica.- El
Secretario de Estado y del Despacho de Hacienda y Crédito Público, Ramón
Beteta.- Rúbrica.- El Secretario de Estado y del Despacho de Bienes Nacionales e
Inspección Administrativa, Alfonso Caso.- Rúbrica.- El Secretario de Estado y del
Despacho de Comunicaciones y Obras Públicas, Agustín García López.- Rúbrica.-
 Al C. Héctor Pérez Martínez, Secretario de Gobernación.- Presente.
LA CONSTRUCCIÓN DEL CAMPUS CENTRAL DE LA CIUDAD
UNIVERSITARIA, UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

Los orígenes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se


remontan a septiembre de 1551 cuando se expidió la Cédula de creación de la
Real Universidad de México, su apertura tuvo lugar en 1553, organizada a imagen
y semejanza de las universidades europeas de tradición escolástica,
particularmente la de Salamanca. Contaba con establecimientos para el estudio de
medicina, ingeniería, teneduría de libros, arquitectura, jurisprudencia y agricultura.
La UNAM. de acuerdo con el desarrollo del país, ha transitado, tanto por etapas de
cambio como de consolidación, desplegando su actividad entre la tradición y la
modernidad.
 Así a finales del siglo XVIII, al mismo tiempo que se sentaron las bases para la
creación del Estado nacional moderno, se establecieron los principios del sistema
educativo mexicano. El primer cambio significativo en la estructura educativa se
presentó en 1833 cuando el presidente Gómez Farías, inspirado en el
pensamiento de José María Luis Mora lanzó la primera reforma educativa, que
pretendía desplazar la educación clerical e impulsar una nueva educación
científica y abierta al progreso. Así surgieron los establecimientos de estudios
superiores. Con el triunfo de la República, en 1867, se promulgó la Ley de
Orgánica de Instrucción Pública y con ella nació la Escuela Nacional Preparatoria.
En el marco de las celebraciones por el centenario de la independencia de México,
en las postrimerías de la dictadura de Porfirio Díaz, y gracias a la labor
principalmente de dos mexicanos de extraordinaria valía: Justo Sierra y Ezequiel
Chávez, en septiembre de 1910 se inauguró la Universidad Nacional de México.
Institución que reunió las actividades académicas, culturales y artísticas
desarrolladas en las diversas escuelas nacionales y con la intención de ser la
universidad de todo México Se conformó con la Escuela Nacional Preparatoria, las
escuelas nacionales de: Altos Estudios, Jurisprudencia; Medicina, Ingeniería, así
como Bellas Artes ( en lo que concierne al estudio de la arquitectura).
Estallado el conflicto revolucionario, la Universidad Nacional fue testigo y muchas
veces protagonista de la historia del país, del caudillaje, de las penurias
económicas, de la efervescencia juvenil que finalmente, en 1929, conquista la
autonomía; lo que implica entre otras cosas, la integración del patrimonio
inmobiliario universitario, sin embargo las diferentes escuelas continuaron
funcionando en los edificios históricos que databan de los siglos XVII, XVIII y XIX,
principalmente en el centro de la Ciudad de México hoy conocido como centro
histórico y que conformaban un auténtico barrio estudiantil, en edificios que habían
sido palacios, conventos y hospitales acondicionados para las actividades
docentes, pero cuyo mantenimiento era escaso y con condiciones poco
adecuadas. Se requerían espacios abiertos, iluminados, con la posibilidad de
incorporar de nuevas tecnologías a la educación y a la investigación.
En la primera mitad del siglo XX la docencia se desarrolló en las profesiones
tradicionales, la matrícula crecía lentamente, mientras que la creación artística de
la corriente plástica revolucionaria tenía su máxima expresión en sus alumnos y en
sus inmuebles. La sociedad mexicana no había entrado a su etapa industrial
plenamente. Llegó la segunda guerra mundial y las necesidades del mercado se
orientaron hacia otros países y es, justamente, en esta época en la que se planeó
construir una ciudad universitaria, con este fin se asignan terrenos en Lomas de
Sotelo cuya propiedad fue revertida posteriormente, cuando se da la expropiación
de los terrenos del Pedregal de San Ángel.
Ya circulaba entre los universitarios el deseo y la necesidad de agruparse en torno
a un campus universitario y contar con mejores condiciones de trabajo de aquellas
que proporcionaban los viejos edificios, así como atender la necesidad de
crecimiento. México despertaba a la modernidad, a la época del desarrollo
estabilizador, y de la industrialización en mayor escala para lo cual era prioritaria la
formación de los recursos requeridos.
La primera noticia registrada sobre un proyecto de construcción de una ciudad
universitaria para la Universidad Nacional Autónoma de México data de 1928,
cuando Mauricio de María y Campos y Marcial Gutiérrez Camarena, alumnos de la
entonces, Escuela Nacional de Arquitectura, presentaron su tesis de licenciatura.
Después de 15 años esta idea empezó a prosperar hasta que en 1943, durante el
rectorado de Rodulfo Brito Foucher, se eligió el sitio adecuado para construirla: el
Pedregal de San Ángel, zona de suelo de origen volcánico ubicada al sur del Valle
de México.
Durante la administración del presidente de la República Mexicana, Manuel Ávila
Camacho y del rector de la UNAM, Génaro Fernández McGregor, la Universidad
presentó al gobierno federal la Ley sobre Fundación y Construcción de la Ciudad
Universitaria (C U), misma que fue aprobada por el Congreso de la Unión el 31 de
diciembre de 1945. En 1946, el rector, Salvador Zubirán gestionó la adquisición de
los terrenos elegidos aproximadamente siete millones de metros cuadrados. El 11
de septiembre de ese año el presidente Ávila Camacho expidió el decreto de
expropiación de los terrenos destinados al establecimiento de C U.
De conformidad con lo establecido en la Ley, el rector constituyó la Comisión de la
Ciudad Universitaria, integrada por representantes de la propia Universidad, de las
secretarías de Educación, Hacienda y Crédito Público, y de Salubridad y
 Asistencia, así como del gobierno del Distrito Federal. Esta Comisión tenía como
fines formular los programas generales de los edificios de la Ciudad Universitaria,
convocar a concursos de planeación y proyectos, y proponer el plan financiero.
La Universidad no contaba con recursos financieros para continuar con el plan de
construcción y fue hasta finales de 1946, con el cambio de la administración
encabezada por el presidente Miguel Alemán, que dispuso de los recursos
necesarios para solventar el problema de los terrenos. Con ello se reactivaron los
trabajos que llevarían a la formulación de un programa básico para el anteproyecto
general de la obra.
La Comisión organizó un concurso de anteproyectos para la realización del plano
de conjunto de la Ciudad Universitaria, invitando a participar a la Escuela Nacional
de Arquitectura, a la Sociedad de Arquitectos Mexicanos y al Colegio Nacional de
 Arquitectos de México.
Por su directa relación con las tareas destinadas a la creación del nuevo campus,
la Escuela Nacional de Arquitectura decidió realizar un concurso de ideas entre los
profesores para desarrollar el plano de conjunto, basado en las ideas generales
del programa que había definido la Comisión y que fueron transmitidas por el Arq.
Enrique del Moral, director de la Escuela. En el concurso participaron destacados
arquitectos como: Augusto H. Álvarez, Mauricio M. Campos, Enrique del Moral,
Xavier García Lascuráin, Marcial Gutiérrez Camarena, Vladimir Kaspé, Alonso
Mariscal, Mario Pani y Augusto Pérez Palacios.
El jurado, integrado por los propios participantes, falló a favor de los trabajos
presentados por los arquitectos Mario Pani y Enrique del Moral, a quienes se les
encargó la dirección del proyecto final, tal y como había sido convenido en el
concurso. Cabe señalar que al grupo se sumó el arquitecto de Mauricio M.
Campos, quien fue invitado debido al interés que desde tiempo atrás había
demostrado en la construcción de este espacio universitario.
El entusiasmo generado en la Escuela Nacional de Arquitectura propició que no
sólo se desarrollara el anteproyecto de conjunto, sino que también se diseñaran
cada uno de los edificios que lo integrarían. De esta forma, para el anteproyecto
de cada edificio se designó un equipo dirigido por uno o dos profesores con la
intervención de los alumnos más aventajados. Fue de tal importancia la
participación de los entonces alumnos Enrique Molinar, Teodoro González de
León y Armando Franco, que los directores del proyecto decidieron que el croquis
de conjunto realizado y propuesto por ellos, sirviera de base para el desarrollo del
mismo.
Los trabajos universitarios y el proyecto elaborado por la Sociedad de Arquitectos
fueron presentados ante el jurado conformado por el representante del rector de la
UNAM, y los presidentes del Colegio Nacional de Arquitectos de México y de la
Sociedad de Arquitectos Mexicanos. El jurado dictaminó a favor del proyecto de la
Escuela de Arquitectura.
Unos meses más tarde, el rector Zubirán organizó y presidió la Comisión Técnica
Directora que sustituyó a la Comisión que había venido funcionado hasta finales
del régimen del presidente Ávila Camacho, y que quedó integrada por: el
arquitecto José Villagrán García, como su representante ejecutivo; el licenciado
Díaz Cánovas, como representante personal del presidente de la República; el
ingeniero Alberto J. Flores, director de la Escuela Nacional de Ingeniería, y el
arquitecto Enrique del Moral, director de la Escuela Nacional de Arquitectura.
Esta Comisión ratificó a los arquitectos del Moral, Pani y Campos como directores
y coordinadores del Proyecto de Conjunto, y les otorgó la facultad de designar a
todos los arquitectos que se harían cargo de los proyectos de las diversas
facultades, escuelas e institutos y de los otros edificios que requiriera la Ciudad
Universitaria. De igual forma, realizó las gestiones necesarias para que las
dependencias universitarias designaran a los asesores y consultores encargados
de determinar los programas de requerimientos para cada edificio.
En 1948 iniciaron las primeras obras de infraestructura, tales como drenajes,
túneles y puentes. Desafortunadamente los trabajos quedaron suspendidos
durante varios meses por la salida del rector Zubirán y hasta principios de 1949,
con el nombramiento del rector Luis Garrido, la Comisión reanudó sus trabajos.
El desarrollo de las obras dependía de los fondos que eran escasos por lo que su
desarrollo era lento; no obstante, las circunstancias favorecieron el avance del
proyecto. Debido al interés expresado por el presidente de la República la UNAM
decidió replantear la constitución del Patronato Universitario. Se nombró
presidente al licenciado Carlos Novoa, entonces director del Banco de México y
vocales al licenciado Eduardo Suárez y al contador David Thierry. La posición de
Novoa en el círculo financiero y su habilidad para conseguir recursos dieron como
resultado que el gobierno federal aportara los recursos necesarios para las obras.
En marzo de 1950, el Patronato creó el organismo denominado Ciudad
Universitaria de México, presidido también por Carlos Novoa y como gerente
general, Carlos Lazo, cuyas funciones eran la de recepción de los proyectos y
especificaciones, así como de llevarlos a cabo. Asimismo se contó con la
colaboración del ingeniero Luis Enrique Bracamontes como gerente de obras.
La labor de todo el equipo, encabezado por el arquitecto Lazo fue brillante, ya que
se trabajó con una mística de superación y eficiencia ejemplar. La excelente
coordinación entre todos los participantes: arquitectos, ingenieros y obreros dio
como resultado que las obras se realizaran con economía, orden y una rapidez
inusual, lo que permitió que se concluyeran en menos de tres años.
Los proyectos para los diferentes conjuntos y edificios se realizaban bajo la
Dirección General del Proyecto de Conjunto, misma que también coordinaba el
trabajo de los arquitectos encargados de su ejecución y de las compañías
constructoras; todo con la finalidad de lograr una correcta unidad y armonía del
conjunto. Para ello se organizaron múltiples seminarios entre los diferentes
equipos participantes.
En el Programa General se buscó la creación de una unidad física, moral y
pedagógica que permitiera una fácil comunicación de las escuelas entre sí y, por
lo tanto, la convivencia entre estudiantes, profesores e investigadores. Asimismo,
se introdujo la centralización de las enseñanzas básicas, comunes a diferentes
planteles para evitar la multiplicidad de cátedras y espacios, así como para
promover el intercambio cultural y social entre los alumnos.
El proyecto fue dividido en varias zonas fundamentales: escolar, habitaciones de
estudiantes, práctica de deportes, estadio de exhibición y servicios comunes.
 Asimismo tomó en cuenta la conveniencia de incluir un museo de arte con un
doble fin: didáctico, para el conocimiento del desarrollo de las artes
particularmente en México, y dinámico, para la exhibición de exposiciones
temporales. Se determinó que el conjunto se proyectara para alojar un máximo de
25 mil alumnos, ya que en esa fecha la UNAM contaba con menos de 15 mil.
El 5 de junio de 1950 se colocó formalmente la primera piedra del que sería el
primer edificio de la Ciudad Universitaria en una ceremonia presidida por el rector
Luis Garrido y el secretario de Gobernación, Adolfo Ruiz Cortines.
El 20 de noviembre de 1952 se efectuó la “Dedicación de la Ciudad Universitaria”,
en una ceremonia en la que el presidente Miguel Alemán vio finalizada la obra en
la que puso especial interés y empeño, aunque las actividades escolares iniciaron
hasta marzo de 1954. A más de cincuenta años de su creación, el Campus Central
de Ciudad Universitaria continúa siendo un ejemplo único de la arquitectura del
siglo XX.
Entre 1936 y 1940 se crearon internados, comedores y becas, se impulsó la
creación de escuelas vinculadas a centros de producción y se alentó la educación
técnica. En este último aspecto, la realización más importante del periodo fue la
fundación del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y de otros establecimientos
tecnológicos. Al mismo tiempo, se crearon escuelas regionales campesinas para
formar maestros rurales y cuadros para la agricultura, se establecieron escuelas
vocacionales de nivel medio superior y centros educativos indígenas.
Con Manuel Ávila Camacho (1940-1946), dio inicio una política de conciliación
nacional que tuvo consecuencias en el sistema educativo. Por ejemplo, en 1941
se promulgó la Ley Orgánica de la Educación Pública. En 1943 tuvo lugar la
unificación de los sindicatos magisteriales. El nuevo Sindicato Nacional de
Trabajadores de la Educación (SNTE) fue reconocido mediante decreto
presidencial como el único organismo representativo de todo el magisterio
nacional. Años más tarde, en 1946, se promulgó una reforma del artículo 3º
constitucional para reconvertir la educación socialista y en su lugar establecer una
educación integral, científica y democrática para combatir los altos índices de
analfabetismo que imperaban en la época.
 Asimismo, en el transcurso de la posguerra, en el periodo conocido como de
consolidación, Miguel Alemán (1946-1952) dio continuidad a la política educativa
de Manuel Ávila Camacho y nuestro país participó activamente en diversos
proyectos de la recién creada Organización de las Naciones Unidas para la
Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés). De esta
manera, en la década de 1940 a 1950 se fundaron diversas instituciones
educativas, entre ellas, el Comité Administrador del Programa Federal de
Construcción de Escuelas (CAPFCE), el Instituto Nacional de Bellas Artes, la
 Asociación Nacional de Universidades e Institutos de Enseñanza Superior
(ANUIES) y el Centro Regional de Educación de Adultos y Alfabetización
Funcional para América Latina (CREFAL). En 1950 inició otro periodo importante
en la historia del sistema educativo mexicano, el de la expansión, mismo que
culminó hasta la década de los noventa.
Jaime Torres Bodet (1946-1952), retomó la campaña de alfabetización, creó
comisiones de planes y programas de estudio, libros de texto y construcción de
escuelas, organizó el Instituto Federal de Capacitación del Magisterio, retomó la
obra de difusión editorial de Vasconcelos, con las publicaciones de la Biblioteca
Enciclopédica Popular, promovió la reforma de la segunda enseñanza, impulsó la
educación técnica y el mejoramiento de la educación normal. Además, reformó el
 Artículo 3º Constitucional en 1946, eliminando el principio de educación socialista
y lo sustituyó por los principios de educación humanista integral, laica, nacionalista
y democrática, orientada hacia el respeto a la dignidad de la persona humana, la
supresión de las distinciones y privilegios, la integración familiar, la independencia
política y la solidaridad internacional. Su proyecto fue, gradualmente, inclinándose
hacia nuevas prioridades de la educación urbana, para apoyar la educación del
país, relegando gradualmente a segundo término la educación rural.
Primer Plan Nacional en materia educativa: MANUEL GUAL VIDAL (1946-1952)
fue secretario de educación durante la administración del presidente Miguel
 Alemán, y continuó la política educativa de unidad nacional. Los objetivos para el
proyecto educativo propuesto fueron los siguientes:
Promover la escuela rural por antonomasia, con los objetivos de instruir
eficazmente al campesino, mejorar sus condiciones económicas e higiénicas y
crear un espíritu cívico para que cada persona del campo se sintiera parte
integrante de la nación.
Continuar la campaña de alfabetización hasta que todos los mexicanos supieran
leer y escribir.
Construir más escuelas con el fin de lograr la alfabetización.
 Aumentar el número de profesores capacitados y fortalecer su derecho a disponer
de los medios idóneos para llevar una vida digna.
Editar libros, complemento integral de la escuela y ponerlos al alcance de todos.
Promover la enseñanza técnica, para la industrialización del país, con auxilio de la
cooperación privada.
Establecer más escuelas de agricultura con el apoyo de expertos agrícolas y
técnicos.
Estimular la alta cultura técnica o superior.
Crear el Instituto Nacional de Bellas Artes, para estimular la creación artística y
ayudar a la difusión de la misma.
Gual Vidal orientó los criterios de su política educativa basándose en los principios
de la "pedagogía social" y "la escuela unificada" de Paul Natrop, así como la
"escuela activa" que vincula la educación con los procesos de producción de Jorge
Kerschensteiner. Para llevar a cabo su proyecto contó con el apoyo del filósofo y
pedagogo mexicano FRANCISCO LARROYO, quien fue autor de obras que
orientaron y formaron muchas generaciones de maestros y pedagogos. Larroyo
fue presidente de la Comisión de Libros de Texto, en 1948.

CONCLUSION

Durante el sexenio de Miguel Alemán Valdés, que va de 1946 a 1952 se creó, en


1947, vemos que hubo un gran avance en materia educativa ya que se creo la
Dirección General de Enseñanza Normal, se reorganizó el Instituto Nacional de
Pedagogía, y la Escuela Normal Superior quedó instalada definitivamente en su
nuevo edificio. Fueron establecidas las Misiones Culturales, de las cuales se
hallan en servicio 67, operando más del 50 % de ellas en centros rurales y se
estableció el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura.
En 1948, fue creada la Dirección General de Alfabetización, así como el Consejo
Técnico y el Instituto Federal de Capacitación de Magisterio de Educación Física.
También fue creado el Consejo Técnico de Enseñanza Superior e Investigación
Científica. Se instaló el Museo Nacional de Artes Plásticas y se logro la
terminación de la Escuela Nacional de Maestros
Su política, pues, trató de apoyarse en la industrialización y recuperación
económica del país. Tomo el modelo de la llamada escuela unificada que había
resultado de la Segunda Guerra Mundial en Europa. La escuela unificada
pretendía, en pocas palabras, facilitar el acceso a la enseñanza media y superior
sin distingos económicos o sociales.
Pero entre los logros más sobresalientes del gobierno de Miguel Alemán en
materia educativa, destaca la creación del Instituto Indigenista, la construcción de
la Ciudad Politécnica, de la Ciudad Universitaria, de la Escuela Nacional de
Maestros, de la Escuela Naval de Veracruz y de la Escuela de Aviación Militar de
Zapopan, Jalisco.
GLOSARIO:

 Academia.-Centro de enseñanza en el cual se imparte las normas que deben


seguir las diferentes manifestaciones.
 Alemanista.- Se le denominó así a la política implementada por Miguel Alemán
durante su sexenio, así como a las personas que eran sus seguidores.
 Alfabetización.-Es La habilidad de leer y escribir.
 Antropología.-es una ciencia social que estudia al ser humano de una forma
integral.
Civismo.-Se refiere a las pautas mínimas de comportamiento social que nos
permiten convivir en colectividad.
Constitución.-Es la norma fundamental, escrita o no, de un Estado soberano,
establecida o aceptada para regirlo.
Cultura.-Conjunto de costumbres de una comunidad.
Cuotas.-Parte en que se divide el patrimonio de un fondo de inversión.
Diversificación.-Proceso por el cual una empresa pasa a ofertar nuevos productos
y entra en nuevos mercados.
ESIQIE.-Escuela técnica industrial Wilfrido Massieu. Homogeneización.-Un
proceso por el que se hace que una mezcla presente las mismas propiedades.
Iletrados.- Analfabeto falta de cultura.
INBA.-Istituto nacional de bellas artes.
INJUVE.-istituto nacional de la juventud mexicana.
Instrucción.-Conjunto de datos insertados en una secuencia estructurada o
específica.
Legislación.-Conjunto de leyes sobre un tema determinado.
Magisterio.-Cargo o profesión de maestro.
Pedagogía.-Arte de la educación y ciencia que le sirve de base.
Postulación.-Acción y efecto de postular.
Régimen.- Conjunto de reglas que se imponen o se siguen.
Secretaria.-La profesión de auxiliar administrativo está orientada a realizar
actividades elementales en centros privados o públicos.
Sexenio.-Es un periodo seis años.
Silicosis.-Enfermedad pulmonar.
Sindicato.-Organización democrática.
Sociología.-Es la ciencia que estudia, describe y analiza los procesos de la vida en
sociedad.
Tesis.-Es una afirmación cuya veracidad ha sido argumentada, demostrada o
 justificada de alguna manera.
UNAM.- Universidad Nacional Autónoma de México
Unidad.-Elemento.
BIBLIOGRAFÍA

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