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MI PERRO MI MEJOR AMIGO

Hace muchos años Vivian dos hermosas niñas junto con sus
papas en una lejana vereda llamada Cerinza del municipio de
Vergara Cundinamarca, un hermoso lugar lleno de paisaje y
animalitos, las dos niñas se llamaban una Julieth y la otra Natalia.

Las dos hermanitas eran muy unidas siempre estaban juntas, iban
a todo lado juntas y estudiaban en el mismo curso las dos estaban
en octavo, los papas siempre las consentían mucho, pero sin duda
alguna la más consentida siempre fue Julieth; ella era la más
pequeña, pero pequeña en estatura porque era la mayor de las dos,
siempre fue la niña más tímida, la más callada y vuelvo y repito la más consentida.

Julieth cumplía años el 13 de septiembre, ya se acercaba el día de sus cumpleaños y sus papas y
su hermana Natalia estaban ansiosos pensando en que le podían regalar. Natalia decía –
regalémosle un collar, la mama dijo –no como le vamos a regalar un collar a ella no le gusta esas
cosas, Natalia dijo entonces que le regalamos, el papa dijo lo mejor que le podríamos regalar
sería un perrito; a ella le encantan los perritos. Natalia entonces dijo – tenemos 15 días para
conseguirle un perrito.

Se llegó el esperado día y no tenían todavía el perrito, todos


estaban preocupados porque no sabían que hacer no habían
conseguido el perrito, entonces decidieron que Natalia ese
día no iba ir a estudiar para poder ir a buscar el perrito para
la hermana.

Se fue Natalia y el papa en búsqueda del perrito para el


regalo de cumpleaños de Julieth, tuvieron que desplazarse a
una vereda llamada el palmar porque era el único lugar
donde les dijeron que estaban vendiendo perrito, pasadas las
horas llagaron allá y vieron a los perritos que quedaban y
solo habían dos pero uno de ellos ya era muy grande entonces dijo Natalia – no papa ese no le va
a gustar a mi hermana yo quiero para ella un cachorro bebe, entonces vieron el otro perrito, pero
era flaquito y no era muy bonito además tenía muchas pulgas, pero no habiendo más les todo
elegir ese. Se fue Natalia y su papa con el perrito para Julieth emocionados de que reacción aria
Julieth cuando viera su regalo de cumpleaños.

Llegaron a la casa y esperaron que Julieth del colegio, cuando llegaron inmediatamente le dieron
su regalo de cumpleaños, Julieth se sorprendido muchísimo por su regalo, se sentía muy feliz y
dijo – por fin tengo lo que tanto quería un perrito para poder jugar con el e inmediatamente se fue
a bañarlo y a jugar con él; a ella no le importaba que fuera flaco ni que tuviera pulgas, poco a
poco lo fue engordando y le compro un jabón especial para bañarlo hasta le compro ropa y lo
llamo uripeles.

Uripeles no solo se convirtió en el amigo de Julieth sino también de toda la familia, la mama de
Julieth lo quería mucho y cuando Julieth estaba estudiando ella lo llevaba para todo lado, lo
cuidaba, lo consentía. Pasaron los días y Uriépeles cada día crecía más y más y se fue
convirtiendo en un perro grande fuerte y muy lindo y además tenía unos ojos verdes que lo hacían
ver hermoso y era blanco con manchas cafés, unas orejas grande y unas patas muy grandes; era
sencillamente hermoso, para esos días estaba de moda la cacería entonces las personas
compraban los perros para que pudieran seguir los animales del monte, Uripeles era un perro muy
fino que perfectamente sería el mejor perro de cacería, todos los vecinos le tenían muchas ganas
de que se lo vendieran pero el papa de Julieth siempre dijo no porque es la mascota de mi hija y
no solo la mascota es el amigo de ella y de todos nosotros, para mi familia es otro integrante de la
familia.
Un día
Julieth y
Natalia se
fueron a
estudiar,
el papa a
trabajar y
como de costumbre uripeles se quedó con la mama en la
casa, ella tenía que llevarle los nueves al papa y se lo
llevo a él porque no se quiso quedar en la casa, pero tampoco quería irse alzado él quería
caminar, pero caminaba muy despacio y la mama tenía mucha prisa; como no era la primer ves
que lo llevaba decidió irse adelante y esperar que el perro se fuera detrás de ella. Llego a la finca
donde tenía que llevar los desayunos y pasaron los minutos, paso una hora y nada no llego nunca
llego; ya estaba muy preocupada y se fue a buscarlo, pero no lo encontró. Se llegó la hora en que
Julieth y Natalia llegarían de estudiar ella no sabía que decirle a Julieth, como le iba a decir que
uripeles su mascota su amigo se había perdido y que no lo había podido encontrar; Julieth llego e
inmediatamente fue a buscar a su mascota y no lo vio por ningún lado, lo llamo, lo busco y no lo
encontró entonces muy preocupada fue a buscar a su mama a preguntarle por su perrito, la madre
no sabía que decirle se quedó sin palabras, hasta que por fin pudo contarle todo y le dijo que se
había perdido, Julieth lloraba y lloraba no lo podía creer y decidió decirle a su hermana se fueran
a buscarlo y así fue, se fueron las dos hermanas a buscar a uripeles; le preguntaron a todos los
vecinos lo buscaron por todo lado, estuvieron hasta la hora de la noche buscándolo pero no lo
pudieron encontrar toda la familia estaba muy triste porque se había perdido su mascota él era el
consentido de la casa. Meses después se enteraron que el perrito nunca se había perdido porque él
sabía muy bien el camino no se había podido perder, a Uripeles se lo habían robado para
dedicarlo a la casa, así que el padre de Julieth decidió ir por él y rescatarlo ya que veía a su hija
Julieth muy triste, de un omento a otro llego a su casa con uripeles de vuelta, Julieth estaba feliz
al igual que su mama y su hermana, uripeles nunca más se volvió a perder y vivieron felices por
siempre.
LA FELICIDAD NO MUCHAS VECES ESTA EN LAS COSAS MATERIALES, NI COSTOSAS SI
NO EN LAS COSAS QUE VERDADERAMENTE NOS HACEN FELIZ, COMO LA FELICIDAD
QUE NOS PUEDE BRINDAR UN ANIMAL

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