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Tomo 1 201
ECOFISIOLOGIA FORESTAL
"
S. Bará Temes
Resumen
P. C.: Ecofisiología
Abstract
Interactions soil-plant are considered for fast growing and deciduous. Soil and foliar
analysis are a good guide for fertilization. This task, not on1y increase production but helps
the trees to resist illness and pollution.
Fertilizers are not extraneous substances to soil, and produces foods of same qualify
than those obtained on1y with organic matter.
Soil resources exhaustion and eros ion are concepts misinterpreted by someone.
Cold resistance of sorne species limits altitude to be planted. Behaviour of fresh leaf
discs, to cold, allows select the best resistant variefies, that conduct to use marginal soils.
Diagnostic techniques to state physiological changes produced by several agents is a
problem not well resolved.
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Biophysical methods gives rapid non destructive solutions, amid them is electrical
resistance measurement and the use of square waves. Biochemistry is not out of this line, and
mothem instrumental analytical techniques allows parameters determinations that facilitate
to follow several kinds of damage.
K. W.: Ecophysiology
INTRODUCCION
NUTRlCION MINERAL
A pesar de los mecanismos de adaptación que poseen las especies forestales, cuando
el medio no les proporciona todos los elementos biogénicos que necesitan se produce un
estado carencial, que en una primera fase no se manifiesta externamente, pero que con
posterioridad presenta un cuadro definido.
Las técnicas del análisis foliar, desarrolladas en su inicio para mejorar la calidad del
vino, se fueron extendiendo a los demás cultivos y, al final, también se aplicaron a los
árb~les. La composic,ión foliar manifiesta, en condiciones definidas, el estado nutritivo de
las plantas, permitiendo conocer el grado de asimilación de cada nutriente. De modo previo
es necesario determinar, para cada especie, los niveles de deficiencia, suficiencia o exceso,
10 que requiere un trabajo considerable. No obstante, los límites dentro de los cuales se
mueven las concentraciones de nutrientes, en las diferentes especies, son bastante estrechos.
Los problemas que presentan, en la nutrición mineral, las especies forestales,
dependen de los factores ecológicos que vienen condicionados por el clima, material de
origen de los suelos etc. En las zonas de pluviosidad elevada son esperables deficiencias de
bases (pota~o, calcio, magnesio) y también de boro en suelos muy ácidos, Por el contrario,
cuando la lluvia es escasa, se acumulan en el suelo estas mismas bases, que en unión del
sodio pueden plantear serios problemas de,salinidad o alcalinidad.
Los análisis de suelo y los foliares proporcionan un excelente medio para el
diagnóstico de las deficiencias. Es bien sabido que un nutriente puede estar presente en el
suelo y la planta no asimilarlo por antagonismo iónico con otro. El análisis del suelo no
pondría de manifiesto con seguridad este hecho. No obstante, al establecer la existencia de
una deficiencia no se puede tener la certeza del diagnóstico. Existen una serie de causas que
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E. g/obu/us es una especie que está limitada a alturas por debajo de los 500 metros,
como consecuencia de las temperaturas mínimas que puede soportar. El disponer de plantas
de esta especie que puedan ser instaladas en altitudes superiores supondría el aprovechamien- e
METODOS DE DIAGNOSTICO
1965), de mucha utilidad para conocer la presión de savia; la medida de la resistencia, con
la que se pueden seguir variados tipos de daño y que Shigo ha desarrollado con su
Shigómetro (SHIGO y SHORTLE, 1985); la medida de la biocorriente que se establece entre
un electrodo de hierro clavado en el floema de un árbol y un electrodo de cobre enterrado
en el suelo, (LEVENGOOD, 1973).
Mención aparte merecen los métodos que se basan en el empleo de ondas. Esta
técnica de diagnóstico utiliza ondas cuadradas, que son ondas formadas por la suma de otras
muchas, y que tienen la peculiaridad de que sus lados son rectos y perpendiculares; cualquier
modificación que sufra esta onda, por atenuación selectiva de alguna de sus ondas
componentes, se traduce en una alteración de su forma y un cambio en el voltaje entre picos.
Estas mediciones son particularmente útiles en el diagnóstico de daños producidos por el
fuego, entre otros. Estos métodos están siendo de perfeccionados en el Centro de
Investigaciones Forestales de Lourizán (BARA et al., 1990), no insistiendo ya que se
presenta un poster sobre ese tema.
El actual desarrollo de la bioquímica, así como el de los métodos analíticos
correspondientes, han ampliado su ámbito de aplicación. La quimiosistemática vegetal, la
bioquímica de los procesos alelopáticos, la resistencia a las enfermedades y de la respuesta
a las condiciones de estrés ambiental son algunas de las posibilidades que se nos ofrecen.
La sistemática basada en la caracterización de compuestos orgánicos determinados,
(terpenos, alcaloides, isoenzimas etc.), viene prestando un importante servicio desde hace
años (ERDTMAN, 1963; GIBBS, 1963). El mejor conocimiento de los-procesos alelopáticos
y de las sustancias que en ellos intervienen, han desmitificado bastante este tema, al estar
estas sustancias extendidas en todo el reino vegetal, no siendo patrimonio exclusivo de las
especies de crecimiento rápido (ALONSO et al. 1989).
Se conocen desde hace tiempo las propiedades antisépticas de los taninos. Su papel
en la resistencia de los vegetales a las enfennedades fue puesto de manifiesto por Offord,
1940. La existencia de sustancias específicas, producidas por las plantas como reacción frente
a la enfermedad, las fitoalexinas, puestas de manifiesto por Muller y Borger, 1941, abrieron
un amplio camino en el estudio de los compuestos que controlan las enfermedades vegetales.
Cuando varían las condiciones ambientales, bajo las que se desarrollan las plantas,
también se producen cambios en los compuestos que intervienen en el metabolismo, que
tienden a anular o aminorar el estrés producido. Estos cambios pueden ser evaluados
analíticamente.
Se sabe, desde hace algún tiempo, que la concentración del aminoácido libre L-prolina
refleja las condiciones ambientales bajo las que se desarrolla una planta. El uso del fuego
prescrito, como método para reducir la cantidad de biomasa, y con ello el peligro de
incendio, puede producir en los árboles daños transitorios, difíciles de evaluar por su escasa
entidad.
La concentración de este aminoácido en acícuIas de P. pinaster detecta, no sólo los pequeños
cambios que se producen por la acción de un fuego prescrito sino también los que se derivan
de un incendio (ROZADOS et aL, 1992). En el primer caso se produce un descenso del
contenido, con respecto al testigo, y en el segundo un incremento.
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