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SALUD E INTERVENCIÓN

EN LO SOCIAL
COLECCIÓN
CUADERNOS DE MARGEN

1. Salud e Intervención en lo social

2. Drogadicción y sociedad

3. Trabajo Social y Padecimiento Subjetivo

4. La Intervención en Lo Social narrada desde los ateneos

5. Política Social como Intervención en Lo Social

6. Violencia Doméstica. Conocimiento y Posibles Abordajes

7. El Contexto de la Intervención

8. Metodología y Trabajo Social


SALUD E INTERVENCIÓN
EN LO SOCIAL

Coordinador:
JUAN MANUEL CARBALLEDA
Salud i intervención en lo social / coordinado por Alfredo Juan
Carballeda. - a ed. - Buenos
Aires : Espacio Editorial, 2008.
192 p. ; 20x14 cm. (Cuadernos de margen)

ISBN 978-950-802-283-7

1. Trabajo Social. I. Carballeda, Alfredo Juan, coord.


CDD 361.3

ESPACIO EDITORIAL
Simón Bolívar 547, 3º p. Of. 1
(C 1066 AAK) Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Tel.: (011) 4331-1945
E-mail: espacioedit@ciudad.com.ar
www.espacioeditorial.com.ar

Corrección: Carina Zanelli


Diseño de Tapa: DONAGH | MATULICH
Diseño Interior: DONAGH | MATULICH
Coordinación y Producción Editorial: Osvaldo Dubini

La reproducción total o parcial de este libro, en cualquier forma que sea,


idéntica o modificada, escrita a máquina, por el sistema “multigraph”, mimeógrafo,
impreso por fotocopia, fotoduplicación, etc., no autorizada por los editores, viola
derechos reservados. Cualquier utilización debe ser previamente solicitada.

1a edición, 2008.
Impreso en la Argentina - Printed in Argentina.
LA FOTOCOPIA
Queda hecho el depósito que previene la ley 11.723 MATA AL LIBRO
Y ES UN DELITO
© 2008 Espacio Editorial

ISBN: 978-950-802-283-7
PRESENTACIÓN
CUADERNOS DE MARGEN

En 1992 un grupo de Trabajadores Sociales vimos la


necesidad de recuperar la tradición de la escritura dentro de
la profesión. Se habían perdido las publicaciones
especializadas en el país y sabíamos que había una
importante cantidad de Trabajadores Sociales que estaban
produciendo diferentes materiales relacionados con la
práctica y estudios de postgrado.
En aquellos años ya se vislumbraba con claridad la
hecatombe neoliberal y la entrega del país. Pero también se
estaba perdiendo la memoria. Se decía: “en Trabajo Social
no se escribe”, o “por las características de la profesión no
hay tiempo para la escritura”.
En un tropiezo fortuito con una librería de saldos ubicada
cerca de Plaza Once en Buenos Aires, pude encontrarme con
números de la revista Hoy en Trabajo Social publicadas
durante los años sesenta y setenta. Compré todos los
números que pude, y hasta ubiqué la redacción de la vieja
revista en una galería comercial del mismo barrio. El local
estaba vacío y la zona se había especializado en artículos
importados. La escritura en Trabajo Social había existido, y
6 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

de hecho seguía oculta, ahora por la falta de un medio de


comunicación que la difundiese por fuera de los libros.
La mayoría de los que simpatizamos con la idea de hacer
una revista de Trabajo Social lo hacíamos por necesidad,
queríamos un medio donde expresarnos, difundir producciones
de compañeros que nunca habían publicado, además de
necesitar material actualizado y ligado a la intervención para
nutrirnos y aplicarlo en nuestra práctica docente.
Margen constituyó —en ese momento— la posibilidad de
reconstruir un espacio de producción y libertad, en la
incertidumbre de escenarios cada vez más competitivos y
mezquinos.
Con esfuerzo, logramos juntar los fondos para comenzar a
trabajar en el proyecto. Así llegamos al N° 1 de la revista.
Luego, desde un sistema de distribución precario e inexperto,
Margen comenzó a circular dentro del país. Cada vez que viajaba
algún compañero, amigo, colega o conocido, se llevaba
ejemplares de Margen para obsequiar en diferentes lugares. Así,
la revista llegó por primera vez a muchos países de América Latina
y Europa. No faltaban los trabajos para publicar y pudimos
mantener la impresión en papel durante 10 números. Los hicimos
todos como cuadernillo en forma de libro.
A partir de 1998 pasamos a editar la revista en formato digital,
con todo lo que eso significaba en los inicios de Internet. Desde
Margen creamos uno de los primeros portales de Trabajo Social en
el mundo: www.margen.org que hoy ya es casi una referencia en
diferentes campos del conocimiento, discusión e intervención.
En esa época se incorporaron al equipo otros amigos,
que colaboraron en el diseño del formato digital, además de
integrarse al equipo editorial y orientarnos en la búsqueda
de perfiles más amplios.
Por otra parte, comenzamos a recibir colaboraciones de
diferentes lugares de América Latina y Europa.
En 2001 —durante la crisis que sacudió a Argentina—
PRESENTACIÓN CUADERNOS DE MARGEN • 7

desarrollamos desde Margen una plataforma dedicada a realizar


cursos de capacitación a distancia. Creo que la situación del
país, la sensación de disgregación que vivimos en aquellos años
nos impulsó, nos dio más fuerza para continuar.
La publicación multiplicó los lectores y la difusión de lo que
escribíamos. En el transcurso de los años fuimos creciendo y
pudimos “subir” otras formas de expresión: Desde el Margen
que intenta ser un homenaje a la revista Crisis que formó y
despertó el interés en lo social a muchos de nosotros en los
años setenta, y los Cuadernos Metodológicos como
herramienta ligada a la gestión y diseño de políticas sociales; el
Blog de Margen, “Historias y relatos de la Cuestión Social”;
“Artículos de Interés”; “Estadísticas” y “Otros Enlaces”, además
de alojar al “Sitio de los Derechos de los Chicos”.
En definitiva, pudimos sostener la revista que ya está
llegando al número 50, y el Portal que tiene una frecuencia de
visitas de 40.000 entradas por mes. No podemos calcular
exactamente el número de lectores pero sí el de alumnos. Por
los cursos implementados en nuestras aulas virtuales ya
pasaron más de 2.500 estudiantes (especialmente de
postgrado) de todo el país, América Latina y Europa.
En la actualidad, Margen es una Cooperativa de Trabajo y
estamos desarrollando nuevas ideas, sin dejar nunca de lado
nuestros aspectos fundacionales.
Así llegamos a esta nueva etapa, donde gracias al apoyo
y la generosidad de Espacio Editorial a través de Osvaldo
Dubini, podemos volver a estar en formato de papel a través
de los Cuadernos de Margen.
En ellos hemos llevado adelante una selección temática
de artículos producidos en nuestro país y en México,
Venezuela, Inglaterra, entre otros, que publicamos durante
la historia de la revista.
El criterio de selección que utilizamos es casi el mismo que
nos orientó al inicio; la inserción en la práctica desde una
8 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

mirada al Trabajo Social, desde su hacer cotidiano, lo que


implica también una exaltación de la intervención como lugar
de generación de preguntas.
Los cuadernos recopilan trabajos publicados que fueron
seleccionados con el objeto de articular —desde la lectura—
un cuerpo coherente que sirva para promover la escritura
desde la narración reflexiva.
Pero también, esa revisión de lo que se hace abarca otras
disciplinas que produjeron trabajos que dialogan en los
espacios que se van generando a través de Margen como Portal
de Trabajo Social y Ciencias Sociales.
Los Cuadernos de Margen son una serie de 8 publicaciones que
abarcan diferentes aspectos ligados con la intervención, la
complejidad de los escenarios actuales y un diálogo intenso con la
teoría.
Decidimos hacerlos temáticos, en función de las
necesidades que se generan desde el hacer cotidiano y
pretendemos que sean útiles como herramientas de trabajo,
generando seguramente más instancias de reflexión.
Los títulos de la serie son: Salud e Intervención en lo
social; Drogadicción y sociedad; Trabajo Social y Padecimiento
Subjetivo; La Intervención en Lo Social narrada desde los
ateneos; Política Social como Intervención en Lo Social;
Violencia Doméstica. Conocimiento y Posibles Abordajes; El
Contexto de la Intervención y Metodología y Trabajo Social.
Esperamos que esta serie de publicaciones seleccionadas
de Margen sirva para mejorar y multiplicar la producción
escrita dentro de nuestro campo, ratificando una historia que
debe seguir siendo recuperada.

Alfredo Juan Manuel Carballeda


Agosto de 2007
ABORDAJE SOCIAL
DE LA MALNUTRICIÓN

VÍA PARA LA CONSTRUCCIÓN


DE CAPITAL HUMANO Y SOCIAL

GONZÁLEZ, WILIAM / MUÑOZ, NORIS /


NARANJO, CARMEN / NAHR, EDIHOVERT

La existencia de graves problemas y desajustes sociales en


los países, muestran que no sólo el crecimiento económico es
la respuesta para alcanzar un desarrollo sustentable. La clave
se encuentra en realizar acciones tendientes a crear y fortalecer
el capital humano y social, lo cual conlleva a una redefinición
de lo social como un ámbito de responsabilidad y
coparticipación del Estado-sector privado y sociedad civil.
El propósito de este trabajo es presentar cómo el abordaje
social de la malnutrición contribuye a la construcción y
fortalecimiento del capital humano y social en una comunidad
de alto riesgo. El abordaje social de esta problemática es
realizado en comunidad y en la institución, como un proceso
global que abarca tres fases interrelacionadas: evaluación,
intervención y seguimiento de las familias atendidas.
10 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Los resultados de la atención preventiva y curativa se


basan en la labor educativa, concluyendo que no es posible
aumentar el capital humano si no se cuenta con un nivel
educativo y de capacitación laboral aceptable. En esta tarea
surge la necesidad de realizar acciones conjuntas para crear
una red de apoyo interinstitucional que permita una atención
más eficiente e integral donde cada uno asuma su cuota de
responsabilidad y participación.

INTRODUCCIÓN
Por mucho tiempo se pensó que la consolidación económica
era la forma de alcanzar el desarrollo de los pueblos, se
consideraba que los beneficios se revertirían sobre los sectores
menos favorecidos y en situación de pobreza; hoy día no es un
secreto que países con buen índice de crecimiento económico y
tecnológico presentan en su interior grandes desajustes sociales
que hacen dudar del alcance de las metas del desarrollo.
La realidad ha demostrado que la perspectiva económica
sola no da respuesta a los problemas globales del desarrollo,
el crecimiento no es suficiente para mejorar las condiciones
de pobreza y bienestar de los pueblos. Para que el
crecimiento se revierta en bienestar colectivo, es necesario
integrar la dimensión de desarrollo social, vista desde la
temática central del “capital humano y social”. Se considera
que mejorando el perfil de la población se fortalece el tejido
social básico que impulsa de manera intangible el
crecimiento y desarrollo de los países.
El Banco Mundial (1995), define la existencia de cuatro
tipos de capital: el natural (recursos naturales), el construido
(infraestructura, bienes de capital financiero, etc.), el capital
humano determinado por los niveles de educación, nutrición
ABORDAJE SOCIAL DE LA MALNUTRICIÓN • 11

y salud de su población, y el capital social que algunos


autores como Coleman (1990), Putnam (1994) y Baas
(1997), entre otros, consideran que lo constituye la cultura,
valores compartidos, confianza y cohesión social, su
participación en organizaciones, redes de solidaridad e
integración entre los distintos actores de la sociedad.
En la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Social realizada
en Copenhague (1995), el primer compromiso que asume
Venezuela es “Crear un entorno económico, político y social
que propicie, a todos los niveles, el desarrollo sostenible
centrado en el ser humano”.
Este compromiso implica que toda la sociedad tiene que
ser objeto y sujeto de este desarrollo, sugiere la creación de
mecanismos de integración y coparticipación a todos los
niveles, Estado-sector privado-sociedad civil, focalizados en el
desarrollo del capital humano y social del país.
Desde este enfoque cabe mencionar la necesidad de
desarrollar programas de acción dirigidos a promover la
integración social, la responsabilidad de la familia en su
función socializadora fundamental, considerando entre otros
aspectos:

• La elaboración de políticas sociales y económicas


destinadas a satisfacer las necesidades de la familia,
especialmente de los grupos más vulnerables.
• El apoyo a las organizaciones y redes de familias y la
participación en actividades comunitarias.
• El apoyo a jóvenes en condiciones de pobreza, a fin de
mejorar sus oportunidades económicas, educacionales,
sociales y culturales.
• La promoción de la estabilidad de la familia y ayudas
para apoyarse mutuamente, particularmente en la
crianza y la educación de los niños.
• La reducción de la mortalidad y la malnutrición infantil.
12 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Puede afirmarse que la situación social de Venezuela y


Latinoamérica no puede seguir siendo una responsabilidad
absoluta del Estado, sino que su magnitud e implicaciones
conllevan a todos los sectores a asumir compromisos reales,
conjugando esfuerzos y recursos para la resolución de la
problemática que frena el desarrollo social del país. Esto
supone fomentar las capacidades de la población y un salto
cualitativo en la eficiencia de nuestras instituciones.
Dentro de esta perspectiva, el Centro de Atención
Nutricional Infantil Antímano (CANIA), organización sin fines
de lucro que surge de la iniciativa del sector privado, concibe
dentro de su misión el compromiso con el desarrollo social, a
través de “la atención integral de la problemática nutricional
y la identificación de los factores de riesgo, en la población
pediátrica y mujeres embarazadas de la parroquia Antímano,
así como en la producción de conocimientos en el área que
permita una solución efectiva del problema y la formación de
recursos humanos”.
El objetivo de este trabajo es presentar una experiencia
donde el abordaje social de la malnutrición contribuya a la
construcción y fortalecimiento del capital humano y social
en una población de alto riesgo social, ubicada en la
parroquia Antímano, comunidad urbano marginal de la
ciudad de Caracas-Venezuela.

EL ABORDAJE SOCIAL
DE LA MALNUTRICIÓN EN CANIA

El CANIA, en sus seis años de funcionamiento, ha


acumulado una experiencia basada en criterios de eficacia,
eficiencia y efectividad, generando aprendizaje sobre la
ABORDAJE SOCIAL DE LA MALNUTRICIÓN • 13

problemática nutricional y su solución, manteniendo la


posición técnica de sistematizar acciones, resultados,
evaluar la calidad de procesos y sus impactos.
Todo ello ha sido producto del esfuerzo conjunto de la
gerencia, los diferentes profesionales y del personal de apoyo,
cuya visión integral ha permitido el trabajo en equipos
interdisciplinarios en la intervención comunitaria e institucional
del niño y la familia con problemas de malnutrición.
La conjugación de los saberes obtenidos en el
cumplimiento de los objetivos operativos de asistencia,
docencia e investigación, ha dado como resultado la creación
de nuevos escenarios de intervención, cambios en la estrategia
de atención, diseño y producción de nuevas herramientas de
trabajo, acordes a las exigencias de la realidad social existente,
que se revierten en la población con el claro propósito de
generar capital humano y social en la comunidad y dentro de
la institución, en aras de construir una nueva sociedad.
El conocimiento del ámbito local y familiar no solamente
ofrece una visión general de la situación, sino que posibilita
identificar la causalidad social relacionada con la
problemática nutricional, determinar el nivel de riesgo, el
compromiso del grupo familiar en el tratamiento y en el
mejoramiento de sus condiciones de vida.
Todo ello producto del abordaje social en dos ámbitos de
acción: comunidad e institución. La primera se realiza a través
de la sectorización, el diagnóstico comunitario, despistaje
nutricional y seguimiento de la población infantil de Antímano
egresada del centro, mientras que en la institución el abordaje
del niño y la familia es un proceso integral que abarca tres
fases estrechamente relacionadas: la evaluación social, la
intervención y el seguimiento de la atención familiar a través
de los controles sucesivos dentro de la institución y las visitas
domiciliarias en la comunidad.
En el abordaje comunitario la sectorización constituyó la
14 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

estrategia fundamental de trabajo que permitió hacer un


reconocimiento de los espacios o sectores que conforman la
comunidad, identificando los recursos comunitarios e
institucionales, estableciendo la delimitación geográfica y
descripción física de cada uno de los sectores que quedaron
plasmados en croquis o mapas.
Las técnicas de recolección de información utilizadas en
este proceso, fueron: la observación participativa, entrevistas
con los habitantes de la comunidad, destacándose los líderes y
representantes de organizaciones vecinales, así como las
consultas de fuentes primarias (planos y documentos)
proporcionadas por diferentes organismos públicos y privados.
Para los fines operativos del CANIA, la parroquia Antímano
quedó conformada por 23 zonas, divididas a su vez en
sectores.
Para el abordaje comunitario se contó con un grupo de
personas con experiencia en el área comunitaria,
residenciadas en la parroquia Antímano, quienes fueron
formadas como Animadoras Comunitarias de Salud (A.C.S.)
adscritas a la Coordinación Social del CANIA, capacitadas
para identificar a niños y adolescentes en riesgo de
malnutrición, promover los servicios ofrecidos por el Centro
y apoyar en las actividades educativas.
La estrategia de sectorización da paso a la identificación
de los usuarios potenciales del centro, a la que se ha
denominado Tamizaje nutricional en comunidad, proceso
mediante el cual las A.C.S. aplican medidas antropométricas
elementales (circunferencia del brazo izquierdo) para
identificar a los niños y adolescentes en situación de
malnutrición. Esta acción se extiende hasta las instituciones
educativas y de cuidado de niños, a organizaciones
comunitarias y centros de salud, que solicitan jornadas de
tamizaje o coordinan con el CANIA operativos de salud.
La información recogida en ambos procesos facilitó la
ABORDAJE SOCIAL DE LA MALNUTRICIÓN • 15

elaboración del Diagnóstico comunitario para obtener la


caracterización de la parroquia, a través de un conjunto de
variables e indicadores sociales que abarcan desde la ubicación
geográfica e histórica, la estructura social, las características de
la población y sus respectivas condiciones de vida, hasta su
estructura institucional-comercial y organizativa.
El abordaje social en la institución comprende la evaluación
social, la intervención y el seguimiento. La evaluación social del
grupo familiar del niño con malnutrición, es la fase que permite
recoger la información de la familia e identificar la problemática
relevante. Abarca la entrevista inicial, el diagnóstico y la
determinación del riesgo social.
La intervención es la fase de acción propiamente dicha
que responde a la problemática detectada y reconocida por
la familia y el Trabajador Social, busca producir cambios en
la situación, especialmente de aquellas relacionadas con la
malnutrición. Esta intervención se desarrolla en dos formas:
individual-familiar y grupal.
La intervención social individual está dirigida a atender la
situación coyuntural o problemática de la familia, para
fortalecer y reparar en corto plazo su capacidad auto-
organizativa, apoyando e integrando a otros miembros al
tratamiento nutricional integral. La intervención grupal se basa
en el programa educativo desarrollado en el ámbito comunitario
e institucional, a través de talleres, charlas, carteleras,
microfilms, entre otros.
El seguimiento se realiza tanto en la comunidad como en la
institución, llevando registro de las metas alcanzadas a través de
las visitas domiciliarias e institucionales y las consultas de control.
La cuantificación de los alcances en la atención familiar y
comunitaria ha sido producto de la elaboración y revisión
constante de los instrumentos de recolección de datos (evitando
su rigidez y permanencia estática en el tiempo), ajustándolos a
la realidad encontrada, diseñando estrategias para medición de
16 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

factores de riesgo social asociados a la malnutrición, realizando


la cuantificación y definición de diagnósticos sociales,
flexibilizando la metodología de intervención cuya base
fundamental ha sido la investigación-acción, transformando
información cualitativa en indicadores medibles en términos de
logros, cuya sistematización estimula y facilita la investigación
en el área.
Desde este enfoque, la información registrada y
sistematizada tanto de la comunidad como de las familias
intervenidas en el área social desde 1995 hasta el año 2000,
representa un insumo fundamental para la planificación de
acciones, el establecimiento de objetivos y la definición de
metas a lograr, facilitando a su vez la medición de los alcances
de la institución y su impacto en la población usuaria,
especialmente en las familias de la parroquia Antímano, que
representan el 6% de la población de la capital del país según
las proyecciones del Instituto Nacional de Estadísticas de
Venezuela.
Antímano es una parroquia ubicada al centro-oeste de
Caracas que comprende una superficie de 2095 hectáreas,
habitada por 134.550 personas aproximadamente, según la
última proyección del censo, y el 50% de sus pobladores tienen
más de 10 años de residencia en la zona.
Es una comunidad que se identifica como industrial,
comercial y residencial consolidada y heterogénea, con
infraestructura física y dotación de servicios comerciales.
Existen 40 industrias, 175 bodegas, 103 comercios, 51
talleres mecánicos, 38 estacionamientos, 24 ferreterías, 23
ventas de comidas, 19 carnicerías, 19 panaderías, entre otros.
Cuenta con dos avenidas principales como vías de
comunicación ubicadas en la parte alta y baja de la parroquia
respectivamente, además de otras formas de penetración
internas como calles, callejones y escaleras, existiendo algunos
sectores que no se comunican entre sí debido a la
ABORDAJE SOCIAL DE LA MALNUTRICIÓN • 17

autoconstrucción de muros de protección y/o delimitación entre


un sector y otro. Igualmente, los medios de transporte son
diversos y modernos: metro, carro por puesto, autobuses, jeep,
etc.
Suele considerarse que en la parroquia Antímano existen
zonas homogéneas y heterogéneas, donde la comunicación
física es el elemento diferenciador de la calidad de vida de las
zonas bajas, intermedias y las “de arriba”. Las zonas
intermedias son las más deprimidas al presentar problemas de
transportes, carencias y deficiencias de servicios públicos
(agua, aseo, teléfono), problemas de infraestructura, etc.
El tejido social de la parroquia Antímano está constituido por
35 iglesias, 27 asociaciones de vecinos, 20 organizaciones
comunitarias y 57 organizaciones privadas prestadoras de
servicios a la infancia, pero concentradas en las zonas de mayor
accesibilidad vial o sectores más favorecidos de la parroquia, sin
mecanismos de articulación o coordinación entre ellas; de 27
asociaciones vecinales, sólo funcionan 3 y con objetivos
partidistas. En cuanto a las instituciones de educación y salud, si
bien están presentes en un número aceptable, no cubren las
necesidades de sus pobladores, ni en cantidad ni en calidad.
En lo referente a las características de las familias de esta
parroquia que asisten a la institución (6.127), la mayoría son
de tipo nuclear (61%), con predominio de la presencia de
ambas figuras parentelas, en tanto que el porcentaje de madres
y padres solos fue bajo (20% y 12%, respectivamente),
situación que podría constituir un elemento a trabajar en
términos de capital social, tomando en cuenta la tendencia
actual de pérdida de los valores y desmembramiento de la
organización familiar. Sin embargo, la experiencia lleva a
pensar que la conformación de las familias de Antímano, no
explica en la mayoría de los casos su problemática
sociofamiliar y que la clave está en el deterioro de su función
socializadora.
18 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

En estos grupos familiares constituidos por un promedio de


6 miembros (3 adultos y 3 niños), el rol de jefe de hogar es
ejercido por el padre en un 60%, quien funciona como
proveedor y figura de autoridad, seguido de la madre en un
20% y por la abuela en un 20% en los casos de familia
extendida.
En lo educativo-laboral, encontramos que en el 83% de los
casos ambos padres tienen aprobado como máximo la segunda
etapa de educación básica (6 años de escolaridad), situación que
se relaciona con la calidad de los empleos a los que tienen
acceso, ya que aun cuando se ubican en el sector formal de la
economía (62%) son obreros de baja calificación y remuneración,
destinando el 80% de los ingresos obtenidos a gastos de
alimentación; la figura masculina tiende a ejercer la
responsabilidad económica, mientras que la madre
esencialmente se dedica a las labores domésticas (53%), con
poca participación en la distribución del presupuesto familiar
(45% de los casos).
El total de ingresos percibidos en la familia es insuficiente,
generalmente alcanzan a cubrir sólo el costo de una canasta
normativa de alimentos, motivo por el cual, según el método
Líneas de Pobreza, se clasifican en “pobreza no extrema” el
41%, y las familias que no llegan a cubrir el costo de una
canasta en 26%. Al comparar con el método Graffar
Modificado, que incluye indicadores de educación, calidad de
ocupación, ingresos y vivienda, las familias se encuentran
distribuidas entre los estratos IV (55%) y V (40%).
En el aspecto físico ambiental, el 61% de las familias
reside en viviendas propias, tipo casa, de autoconstrucción,
90% posee servicios de eliminación de excretas, 60% agua por
tubería y aseo urbano, pero con funcionamiento irregular o en
la mayoría de los casos, en situación de deterioro.
Este escenario evidencia la calidad del capital humano y
social existente en esta comunidad urbana, cuyas
ABORDAJE SOCIAL DE LA MALNUTRICIÓN • 19

características generales tienden a ser similares a otras


parroquias del área metropolitana de Caracas.
No es posible aumentar el capital humano si no se cuenta
con un nivel educativo y de capacitación laboral aceptables, ni
condiciones de salud y nutrición mínimas para potenciarlo. Por
otra parte, el deterioro familiar, la falta de bases reales de
organización y participación ciudadana, la poca articulación
entre las organizaciones e instituciones locales para unificar
objetivos, establecer prioridades y diseñar proyectos conjuntos
de mayor alcance, tampoco permiten que el capital social
desarrolle el capital humano de sus pobladores.

LOGROS QUE POTENCIAN


EL CAPITAL HUMANO Y SOCIAL
La intervención social comunitaria e intra-institucional ha
potenciado el desarrollo del capital humano y social de la
parroquia, evidenciando a la vez que en una comunidad con
carencias económicas, el conocimiento de las causas de la
problemática nutricional contribuye a su resolución. El factor
educativo en la atención preventiva y curativa ha sido la base
para los cambios propuestos.
Los objetivos alcanzados en la comunidad y con las
familias han sido producto de una intervención técnica,
motivacional y orientadora que muestran logros sociales
vinculados y mantenidos en el tiempo. Estos alcances
obtenidos con y para la comunidad y la familia, contribuyen
al fortalecimiento del capital humano y social de la
parroquia, entre los que podemos destacar:

Con la comunidad
20 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

• Conocimiento de la realidad a abordar, lo que ha permitido


realizar programas más acordes con las necesidades de la
población, logrando mayor participación de los mismos.
• Determinación de la prevalencia de riesgo de
malnutrición en la comunidad (34%).
• Identificación de la población objetivo, 60.000 niños
y adolescentes, de los cuales un 28% presenta
problemas de malnutrición.
• Realización de 158 jornadas de tamizaje en
instituciones de la comunidad.
• Establecimiento de alianzas estratégicas con las
instituciones locales, condición indispensable para
brindar una atención más eficaz, eficiente e integral a
la familia y a la comunidad.
• Elaboración de material bibliográfico denominado
“Sectorización Como Estrategia de Trabajo en CANIA”,
el cual ha resultado de gran utilidad como instrumento
de consulta institucional para otros organismos e
instituciones, y de transferencia de información a las
familias y la comunidad.
• Apoyo a las investigaciones de campo en el área
comunitaria, entre ellas se destaca “La Estimación del
costo de la Canasta Básica de Alimentos de la familia
de la parroquia Antímano”.
• Realización de actividades educativas en las
instituciones de la comunidad a través de charlas o
talleres de sensibilización en la problemática nutricional.
• Creación de espacios de información y orientación a la
comunidad a través del periódico vecinal (CANIA en
Comunidad) y carteleras informativas colocadas en
lugares estratégicos donde se difunden mensajes para
mejorar la situación alimentaria y nutricional de la
ABORDAJE SOCIAL DE LA MALNUTRICIÓN • 21

población.
• Apoyo para la conformación y/o fortalecimiento de la
organización y participación comunitaria, como
estrategia para impulsar la solidaridad y asociatividad
con el fin de promover su rol protagónico en la
comunidad.

Con la familia

• Implementación de nuevas estrategias para incrementar


el presupuesto familiar en el 52% de los casos.
• Incorporación de miembros del grupo familiar al
mercado laboral en un 45%.
• Organización del presupuesto familiar destinado a la
compra de alimentos en un 95%.
• Participación de la madre en el presupuesto familiar
en un 80%.
• Incorporación de adultos a cursos de capacitación
laboral o su continuidad en la educación formal en un
50%.
• Inserción de niños al sistema educativo formal en un 37%.
• Incorporación de los niños a programas de cuidado
diario y guarderías en un 29%.
• Incorporación de otros miembros al tratamiento
nutricional en un 91%, potenciando entre ellos lazos
de cooperación y solidaridad.
• Incorporación de algún tipo de mejoras en las
condiciones higiénicas y físicas de la vivienda en un
100%.

La familia es el recurso más importante dentro del proceso


de recuperación nutricional de un niño, siendo el sujeto y objeto
de la intervención social para la construcción del capital
humano y social. En este marco, el elemento educativo es
22 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

fundamental en el proceso de obtención de logros, tanto a nivel


individual-familiar como grupal y comunal, es la herramienta
vital para la prevención y tratamiento de la malnutrición y el
crecimiento del capital humano.
Existe la convicción de que, a pesar de las carencias
económicas de una comunidad, un programa de
recuperación nutricional basado en el conocimiento del
árbol causal de la malnutrición y en el fortalecimiento de
alianzas productivas, resuelve en gran proporción esta
problemática; por ello, en esta labor participa todo el equipo
interdisciplinario y de apoyo del CANIA, desde el personal
de cocina hasta los coordinadores y la gerencia,
trasmitiendo información y conocimiento a otros equipos y
organizaciones de salud, a instituciones de educación y
protección de niños, a la población usuaria del Centro y a
otros residentes de las diferentes zonas de la comunidad de
Antímano.
El abordaje integral de la malnutrición en el CANIA,
constituye uno de los elementos clave para alcanzar el
desarrollo del capital humano, en lo que respecta a la nutrición
y salud de la población pediátrica de Antímano. Sin embargo,
esta tarea resulta difícil de lograr sin la participación de otros
entes que contribuyan a la función educadora y de bienestar
colectivo en la parroquia, en tanto que la malnutrición está
vinculada a hábitos alimentarios culturalmente aprendidos,
aceptados y repetidos, al nivel educativo de los padres o
figuras sustitutas en la crianza del niño, al nivel de calificación
laboral, a la disposición de ingresos económicos suficientes y
a las condiciones de habitabilidad y de acceso a servicios
públicos adecuados y eficientes, entre otros.

Debilidades del abordaje


comunitario y familiar
ABORDAJE SOCIAL DE LA MALNUTRICIÓN • 23

• Poca articulación entre las organizaciones e instituciones


locales para unificar objetivos, establecer prioridades y
diseñar proyectos conjuntos.
• La multiplicidad de los problemas vividos por las
familias, limita la comprensión y aceptación de la
malnutrición y la obtención de logros de mayor alcance.

Conclusiones

• La problemática social latinoamericana no puede ser


delegada exclusivamente al Estado. En las metas del
desarrollo social todos los actores tienen una cuota de
responsabilidad y participación.
• El fortalecimiento del capital humano y social de un
país son clave para lograr un desarrollo sustentable a
largo plazo.
• La visión global de la malnutrición en el CANIA ha
favorecido su abordaje integral en el ámbito comunitario e
institucional, focalizando su atención en la población más
vulnerable, mediante la detección e intervención de los
factores de riesgo influyentes en la problemática,
promoviendo la búsqueda de mecanismos de articulación
y coordinación local interinstitucional y comunal, donde
según la problemática familiar detectada, cada uno asuma
la cuota de participación que le compete y de esta manera
obtener mejores niveles de bienestar e impacto.
• La confiabilidad que la institución ofrece y los logros
obtenidos hasta el momento con la comunidad y las
familias usuarias, demuestran el aporte al desarrollo y
fortalecimiento del capital humano y social de la
comunidad.
• La metodología de investigación-acción y la
sistematización de los procesos, han facilitado el
24 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

conocimiento del capital humano y social de la parroquia


Antímano y la focalización de estrategias de abordaje
para la obtención de metas que en muchas
oportunidades, han trascendido los objetivos de la
institución.

Propuestas

• Todos los sectores de la sociedad deben asumir la


responsabilidad que les corresponde según el ámbito de
acción en el enfrentamiento de la problemática social.
Estado y Organizaciones No Gubernamentales deben
aliarse aprovechando los puntos fuertes de cada uno y
minimizando sus limitaciones para alcanzar las metas del
desarrollo social.
• Es necesario desarrollar en la parroquia mayor capital
social o potenciar el existente, generar confianza en
las instituciones, crear o estimular mecanismos de
cooperación y participación en las organizaciones
locales colectivas, fortalecer la cultura y el
conocimiento cotidiano acumulado.
• Se requiere crear redes de solidaridad entre las
instituciones, la comunidad y el Estado, como forma de
obtener mayor información e impacto en la intervención,
servicios eficientes, protección e influencia en las
decisiones locales. En las metas del desarrollo social
todos los actores tienen una cuota de responsabilidad y
participación.
• Surge la necesidad de crear espacios de encuentros y de
reflexión entre los profesionales del área social, que
permitan el intercambio de experiencias y aprendizaje
hacia la búsqueda de mayor integralidad en el abordaje
social que estimule el desarrollo del capital humano y
ABORDAJE SOCIAL DE LA MALNUTRICIÓN • 25

social, en aras de la construcción de una nueva


sociedad.
26 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

BIBLIOGRAFÍA
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SIC Revista. 1999. Debates y propuestas para el consenso.
Caracas: Centro Gumilla, 609. pp. 386-432.
DE LA MEDICINA
AL TRABAJO SOCIAL

INTRODUCCIÓN A LA PRÁCTICA
BASADA EN LA EVIDENCIA

PEDRO MORAGO

I. INTRODUCCIÓN
El impacto de la Práctica Basada en la Evidencia (PBE)1
es uno de los acontecimientos más destacados de la última
década en el campo de la Medicina. Una búsqueda en la
base de datos Pubmed utilizando las palabras clave
“evidence-based medicine” produce 17 referencias antes de

1. En este tema, la literatura en lengua española utiliza indistintamente los


términos prueba y evidencia. Por cercanía al original inglés, en el presente
artículo emplearé el término evidencia.
28 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

1994, 2.097 referencias desde el 1 de enero de 1994 hasta


el 31 diciembre de 1998, y 11.657 referencias desde esta
fecha hasta el final de 2003. Inicialmente desarrollada en el
ámbito de la Medicina y disciplinas asociadas, la nueva
corriente se está rápidamente extendiendo a otros campos
como Salud Pública, Educación y Trabajo Social.
Este artículo presenta, en primer lugar, una breve
aproximación al concepto y principios de la PBE, así como a
su emergencia y desarrollo en el área de Medicina. A
continuación, el artículo examina la expansión de la PBE al
Trabajo Social y los debates originados acerca de (i) la
transferibilidad de los principios de la PBE desde la Medicina
al campo del Trabajo Social, y (ii) el concepto de evidencia
sobre el cual ha de basarse la práctica profesional del Trabajo
Social. Finalmente, el artículo realiza algunas breves
consideraciones acerca del papel que los trabajadores sociales
podrían desempeñar dentro del proceso de implementación de
la PBE.

II. CONCEPTO
Y PRINCIPIOS
DE LA PRÁCTICA BASADA EN LA EVIDENCIA

La primera definición de PBE en llegar a ser


comúnmente aceptada en Medicina y el resto de las
profesiones sanitarias fue originariamente suministrada por
Sackett y colaboradores2, y se puede traducir al español

2. “Evidence-based practice is the conscientious, explicit and judicious use


of current evidence in making decisions about the care of individuals”
(Sackett et al., 1996:71) .
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 29

como el “uso concienzudo, explícito y juicioso de la mejor


evidencia científica en el proceso de toma de decisiones
acerca del cuidado de la salud de la persona” (Sackett et al.,
1996). Posteriormente, tal definición ha sido adaptada a fin
de conciliar el uso de la evidencia científica con la pericia y
la experiencia del profesional y con las características
específicas de cada usuario. En consecuencia, la PBE es
ahora definida como: “la integración de la mejor evidencia
extraída de los estudios de investigación científica con la
pericia profesional y los valores del usuario”3 (Sackett et al.,
2000:1).
La noción de PBE se apoya sobre varios principios o
elementos esenciales, que pueden ser formulados del modo
siguiente (Greenhalgh et al., 2003; Sackett et al., 2000):

1.Formulación de una cuestión clínica precisa, basada en


los problemas o necesidades del usuario.
2. Búsqueda, en la literatura científica, de la mejor evidencia
derivada de los estudios de investigación relacionados con
la cuestión clínica que ha sido previamente formulada.
3. Valoración crítica de la evidencia científica hallada y de su
relevancia para responder a la cuestión clínica formulada.
4. Aplicación de la evidencia considerada relevante y
metodológicamente sólida a la resolución de la cuestión
clínica formulada, integrando tal evidencia con la pericia y
experiencia profesionales y los valores y preferencias del
usuario.
5.Evaluación periódica, de acuerdo a criterios objetivos, de
la efectividad de la intervención adoptada.
6.Revisión y perfeccionamiento de la intervención para

3. “The integration of best research evidence with clinical expertise and patient
values” (Sackett et al., 2000:1).
30 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

posteriores aplicaciones de la misma.

III. DESARROLLO Y EXPANSIÓN


DE LA PRÁCTICA BASADA EN LA EVIDENCIA

El epidemiólogo británico Archibald Cochrane es


considerado la figura clave en el desarrollo y expansión de la
PBE en Medicina. Uno de los planteamientos iniciales de
Cochrane fue que, siendo los recursos disponibles para la
atención sanitaria limitados, tales recursos deben ser
empleados sólo en adoptar programas e intervenciones cuya
eficacia ha sido previamente demostrada (Cochrane, 1972).
Desde su experiencia profesional, Cochrane observó que, si
bien la Medicina, genéricamente considerada, se ha
desarrollado sobre la base del permanente avance científico,
la aplicación de los más recientes hallazgos y conclusiones
derivados de los estudios de investigación está en gran
medida ausente de la práctica clínica cotidiana. Por el
contrario, Cochrane halló que la práctica médica tendía a
basarse fundamentalmente en la intuición personal (el
llamado “ojo clínico”), opiniones de colegas y expertos,
prácticas tradicionales e información anecdótica.
Los esfuerzos de Cochrane y un grupo de colaboradores
cristalizó en 1993 con la creación en Oxford de la Cochrane
Collaboration, una organización internacional, sin fines de
lucro, dedicada a la diseminación de información actualizada,
precisa y sistematizada de resultados de estudios de
investigación científica en el campo de la Medicina y disciplinas
asociadas. La Cochrane Library, base de datos electrónica
publicada trimestralmente, es el servicio más difundido de la
Cochrane Collaboration, y ofrece colecciones sistemáticas y
revisadas de estudios de investigación clasificados por tópicos.
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 31

La Universidad McMaster en Hamilton, Ontario, Canadá,


constituye otro de los grandes centros de influencia en el
proceso de desarrollo de la PBE. Desde que la Medicina
como disciplina académica fue establecida en McMaster en
los años sesenta, los métodos de enseñanza han venido
combinando la práctica clínica con el uso de principios
derivados de la investigación científica. Esta nueva área
educativa, denominada Epidemiología Clínica (Sackett et al.,
1991) está orientada, no tanto a realizar estudios de
investigación científica como a aplicar los resultados y
conclusiones derivados de tales estudios a la toma de
decisiones profesionales. David Sackett, uno de los
principales impulsores de la Epidemiología Clínica en
McMaster, se trasladó posteriormente al Reino Unido, donde
ha sido uno de los co-fundadores del Oxford Centre for
Evidence-Based Medicine. Este Centro, que forma parte del
Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Oxford,
está jugando un papel fundamental en la promoción,
nacional e internacional, de la PBE en Medicina y en su
expansión a la gran mayoría de los campos relacionados con
la atención sanitaria.

IV. ¿POR QUÉ HA EMERGIDO


LA PRÁCTICA BASADA EN LA EVIDENCIA?

Trinder (2000) cita una serie de factores que han


contribuído decisivamente a la aparición y rápida expansión de
la PBE:

1. AVANCES EN LA TECNOLOGÍA DE LA INFORMACIÓN.


La existencia de un número creciente de bases de datos
32 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

con soporte electrónico, accesibles a través de Internet,


han permitido la difusión en los ultimos años de una
cantidad ingente de información médica. Además, la
existencia de organizaciones como la Cochrane
Collaboration permite que los profesionales de la salud
tengan acceso inmediato a la más reciente información
científica, críticamente seleccionada y sistematizada,
acerca de la cuestión clínica de su interés.
2. SOCIEDAD DEL RIESGO. Señala Giddens (1990, 1991,
1994) que una de las características de las sociedades
tradicionales o pre-modernas es un profundo sentido de
seguridad ontológica enraizado en la familia, la
comunidad, la religión y la tradición. En este tipo de
sociedades, accidentes y catástrofes son frecuentemente
atribuídos a causas naturales, intervenciones
providenciales, o a la mera casualidad. Por el contrario, en
las sociedades occidentales contemporáneas (o post-
tradicionales; Giddens, 1994) existe un elevado sentido del
riesgo, combinado con la creencia de que cualquier daño o
consecuencia adversa es, en casi la totalidad de los casos,
responsabilidad humana. La valoración y minimización del
riesgo por medio de la pericia profesional han alcanzado,
en consecuencia, cuotas de institucionalización tanto en el
sector público como en el privado. Y es en este contexto
donde la PBE se presenta como una herramienta con la
que el profesional, mediante el uso de la mejor y más
actualizada información científica, es capaz de adoptar una
decisión bien fundamentada y, en consecuencia, minimizar
el riesgo y optimizar los beneficios derivados de tal
decisión.
3. LA TRIPLE E: ECONOMÍA, EFICIENCIA Y EFECTIVIDAD.
En las últimas décadas se ha producido en el seno de las
organizaciones una reforma estructural conocida como
managerialismo, gerencialismo o profesionalismo
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 33

directivo, cuyos principios rectores son la economía en la


gestión de los recursos y la eficiencia y efectividad en la
prestación de servicios (Newman y Clarke, 1994; Clarke
y Newman, 1997). En este clima, el énfasis puesto por
la PBE en el empleo racional de los recursos en aquellas
intervenciones cuya eficacia haya sido consistentemente
acreditada es aducido como uno de los factores
determinantes de la popularidad del nuevo modelo.
4. PROTAGONISMO DEL CONSUMIDOR. La creciente
importancia del derecho del consumidor a recibir unos
servicios de alta calidad, transparentes y responsables
es otro de los fenómenos clave de las sociedades
contemporáneas. El protagonismo del consumidor o
usuario de los servicios es explícitamente reconocido en
dos de los principios informadores de la PBE: (i) el
derecho del usuario a recibir el servicio más eficaz
posible; y (ii) la incorporación de los valores y
preferencias del usuario al proceso de decisión basada
en la evidencia.
5. SEPARACIÓN ENTRE INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA Y
PRÁCTICA PROFESIONAL. Ramsey y colaboradores
hallaron una significativa correlación negativa entre el
conocimiento que los profesionales de la Medicina
tienen de los más recientes avances en la investigación
científica y el número de años transcurridos desde la
finalización de sus estudios universitarios (Ramsey et al.,
1991): los autores del estudio observaron que los
profesionales sanitarios, una vez obtenida su
cualificación académica, tienden progresivamente a
confiar más en información anecdótica, opiniones de
colegas y en su propia intuición y experiencia
profesional, que en los avances derivados de los estudios
de investigación y en la valoración crítica de nuevos
métodos de diagnóstico, tratamiento y prevención.

Argumenta Trinder que una gran parte del éxito inicial de la


34 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

PBE radica en su capacidad para integrar y redefinir los


anteriores factores y presentar el resultado como un sistema
metodológico coherente y con un mensaje indudablemente
atractivo: el de que la práctica profesional debe basarse en
intervenciones de eficacia contrastada (Trinder, 2000).

V. “MÁS BIEN QUE PERJUICIO”

Además de los factores sociales citados en la sección anterior,


razones de índole ética han ejercido una importante influencia en
la emergencia de la PBE. Los defensores de este método aducen
que, debido a que los profesionales pueden causar más daño que
bien (o ningún bien en absoluto) como consecuencia de sus
decisiones, tales decisiones deberían siempre estar fundadas en
evidencia empírica (Chalmers, 2003; Gambrill, 2003).
Ciertamente, la literatura médica ofrece numerosos
ejemplos de cómo intervenciones (algunas de ellas
extremadamente populares) cuya eficacia no ha sido
rigurosamente contrastada, pueden tener efectos
perjudiciales para la salud de las personas. Uno de ellos es
la práctica de acostumbrar a los recién nacidos a dormir
boca abajo, la cual podría haber causado decenas de miles
de muertes en las últimas décadas (Chalmers, 2001,

4. ECRs son estudios en los que los participantes son asignados, en un modo
aleatorio y utilizando técnicas matemáticas, bien a un grupo en el que recibirán la
intervención o bien a uno o más grupos de comparación o control, los cuales, a su
vez, pueden ser objeto de otra intervención o no recibir intervención alguna. Los
grupos son observados durante un período de tiempo y analizados en función de
una serie de variables establecidas al inicio de la intervención. Dado que los grupos
son equivalentes en relación con todos los factores, excepto la administración de
la intervención o tratamiento, cualquier diferencia en los resultados es, en
principio, atribuible a tal intervención o tratamiento (Greenhalgh, 1997).
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 35

2003). Otro ejemplo de intervención perjudicial es


suministrado por el campo de la Cirugía: durante los años
setenta y primeros ochenta fue práctica común la
anastomosis de la arteria superficial temporal con una rama
de la arteria cerebral media a fin de disminuir el riesgo de
embolia en pacientes que sufrían de una oclusión de la
arteria carótida interna. Para sorpresa general, un estudio
controlado randomizado (ECR)4 llevado a cabo en diversos
centros y con una alta participación demostró que el único
efecto de la intervención quirúrgica era el de hacer empeorar
a los pacientes en el período inmediatamente post-
operatorio, sin que existiera diferencia alguna entre grupos a
largo plazo (Haynes et al., 1987), por lo que el
procedimiento fue descartado por la gran mayoría de
cirujanos.
También en el terreno de las intervenciones sociales se
pueden encontrar ejemplos de cómo las buenas intenciones
no siempre van acompañadas de buenos resultados. Uno de
los más conocidos es el Cambridge-Somerville Youth Study.
Su creador, Richard Clark Cabot, diseñó a finales de los años
30, en los Estados Unidos, un proyecto que parecía idóneo
para prevenir la delincuencia juvenil entre jóvenes
procedentes de áreas desfavorecidas: una intervención
consistente, esencialmente, en actividades recreativas
después de clase, campamentos de verano, consejo asistido
(counselling) y asistencia médica cuando ésta era necesaria.
Clark Cabot seleccionó inicialmente a un número de jóvenes
y los distribuyó por parejas de acuerdo a similares edad,
temperamento, situación socio-económica y somatotipo
biológico. Después asignó a uno de los jóvenes de cada
pareja al grupo que recibiría la intervención y al otro joven a
un grupo de control, que recibiría sólo los servicios
asistenciales ordinarios. Cuando, años después, el programa
fue evaluado, los resultados fueron sorprendentes: los
36 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

jóvenes que habían participado en el programa de


intervención ofrecían tasas de criminalidad, alcoholismo y
enfermedades mentales más altas, y su esperanza de vida
era cinco años inferior, en comparación con los componentes
del grupo que no había recibido la intervención (McCord et
al., 1959; McCord, 1992). No se ha realizado aún
investigación acerca de qué elementos del programa
pudieron haber contribuido, y en qué medida, a las
consecuencias negativas del mismo. Sin embargo, una
hipótesis que se ha planteado es que aquellos jóvenes más
iniciados en conductas antisociales podrían haber
compartido sus conocimientos en técnicas delictivas (por
ejemplo, cómo robar un coche) con los jóvenes menos
experimentados, y que muchos de éstos, llevados del
instinto de camaradería o el deseo de ser aceptados por el
grupo, comenzaron a secundar prácticas tan poco
edificantes (McCord, 1992). En consecuencia, tal expansión
de prácticas delictivas en el grupo de intervención habría
operado como un importante factor de riesgo para la
aparición de los mencionados resultados negativos
posteriores.
Otro ejemplo en este área es el proyecto llamado Scared
Straight. El modelo consiste en que jóvenes en riesgo de
delincuencia habitual son invitados a visitar una prisión: allí
tienen la oportunidad de conocer in situ cómo es la vida
penitenciaria y de recabar el testimonio de reclusos adultos, lo
que se presume que disuadirá a los jóvenes de cometer hechos
delictivos. El programa alcanzó una gran popularidad en los
Estados Unidos, siendo adoptado como medida de política
social en un buen número de Estados. Sin embargo, cuando
nueve programas diferentes Scared Straight fueron evaluados,
los resultados mostraron que las tasas de criminalidad entre
los participantes en el programa eran significativamente
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 37

mayores que las de aquéllos con los que no se había llevado a


cabo intervención alguna (Petrosino et al., 2004).
Así, respaldado por su reivindicación de que el uso de la
mejor evidencia científica debe ser incorporado a la práctica
profesional con el fin de ofrecer intervenciones realmente
eficaces y evitar consecuencias perjudiciales, como las
mencionadas, el paradigma de la PBE ha conocido una notable
expansión. Sin embargo, este proceso no ha estado exento de
críticas, como se examinará en la sección siguiente.

VI. CRÍTICAS A LA PRÁCTICA


BASADA EN LA EVIDENCIA
La PBE ha recibido críticas en base a diversos
argumentos. En primer lugar, se aduce que la PBE
contempla la práctica de la Medicina a modo de “recetario
de cocina” e ignora la pericia profesional (Charlton, 1997;
Charlton y Miles, 1998; Ferlie et al., 1999; Horwitz,
1996). Además, la PBE es vista por algunos autores como
un instrumento utilizado por estructuras administrativas y
organizaciones para recortar la autonomía de los
profesionales (Armstrong, 2002; Hampton, 2002; Maynard,
1997; Tanenbaum, 1999), así como un modo encubierto de
racionar recursos (Grahame-Smith, 1995). La PBE ha sido
también criticada por presentar una visión parcial de lo que
constituye evidencia científica, otorgando excesivo
protagonismo a criterios cuantitativos de investigación e
ignorando otros diseños, como por ejemplo los métodos
cualitativos, que suministran una información más
específica sobre el usuario y sus necesidades asistenciales
(Cohen et al., 2004; Miles et al., 2001). Es precisamente
38 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

esta objeción la que nos lleva a considerar, a continuación,


una de las cuestiones esenciales en relación con la PBE:
¿qué clase de información ha de ser considerada como
evidencia?

VII. EL DEBATE ACERCA


DEL CONCEPTO DE EVIDENCIA

En el proceso de implementación de la PBE vivido


durante los últimos años, se ha dedicado una especial
atención a examinar la calidad de la evidencia científica que
ha de servir de base a la decisión profesional. Por ejemplo,
dos estudios realizados por Altman (1994, 2002) revelan
que una alta proporción de artículos de investigación
científica contienen graves errores metodológicos, facilitan
sus resultados en un modo selectivo y emiten sus
conclusiones sin una sólida base científica. Este énfasis en la
calidad metodológica de la investigación ha sido puesto de
manifiesto por los defensores de la PBE, quienes sostienen
que no toda la evidencia suministrada por los diferentes

5. Revisiones sistemáticas son colecciones de estudios primarios de


investigación que utilizan métodos sistemáticos y explícitos con el objeto de:
localizar, seleccionar y evaluar críticamente la investigación científica
relevante acerca de una cuestión clínica precisamente formulada; incluir en
la revisión los estudios considerados relevantes y metodológicamente
sólidos; recoger y analizar los datos de los estudios incluidos en la revisión
(Cochrane Collaboration, 2003).
6. Meta-análisis es el análisis estadístico llevado a cabo para expresar
numéricamente los resultados de una revisión sistemática (Cochrane
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 39

diseños de investigación es igual en cuanto al margen de


error y sesgo en los resultados (Evans, 2003). Como
instrumento para la valoración de los resultados de los
estudios de investigación se han desarrollado las llamadas
Jerarquías de Evidencia, que clasifican los distintos diseños
de estudios de investigación de acuerdo a su capacidad para
predecir el grado de eficacia de una intervención o
tratamiento. La clasificación formulada por el Oxford Centre
for Evidence-Based Medicine (2001) establece los siguientes
niveles de evidencia:

• Revisiones sistemáticas5 y meta-análisis6 de estudios


controlados randomizados.
• Estudios controlados randomizados (ECRs).
• Estudios de cohortes.7

7. Un estudio de cohorte es un estudio observacional que consiste en clasificar


grupos de personas de acuerdo a su exposición o no a un determinado factor
de interés (por ejemplo, fumadores y no fumadores) y observarlos durante un
tiempo, analizando si aquéllos expuestos al factor son más o menos
susceptibles de desarrollar una determinada condición que los no expuestos.
8. Un estudio de casos y controles es un diseño observacional que consiste en la
localización y selección de “casos”, es decir, personas que ya han sufrido la
condición a investigar (por ejemplo, enfermedad u hospitalización) y “controles”, o
personas que, con la excepción de dicha condición, son similares a las
consideradas como casos. Los investigadores, entonces, analizan
retrospectivamente la frecuencia de exposición de casos y controles al factor o
factores hipotéticamente contemplados como causantes de la condición (Levine et
al., 1994).
9. Un estudio de corte transversal mide la prevalencia de una particular
condición entre una población concreta en un momento determinado o
durante un breve período de tiempo.
10. Los estudios de series de casos son colecciones de información acerca de un
conjunto de casos clínicos que se han producido en un período determinado y en
los que el mismo tratamiento ha sido administrado a todos los pacientes. Los
investigadores analizan detalladamente la información socio-demográfica de los
pacientes, la diagnosis, el tratamiento y la evolución de cada paciente. Si este tipo
40 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

• Estudios de casos y controles.8


• Estudios de corte transversal.9
• Estudios de series de casos.10

El ECR (o, idealmente, una revisión sistemática o meta-


análisis de ECRs) está considerado como el gold standard o
patrón de oro, a los efectos de evaluar la eficacia de
intervenciones clínicas. De hecho, la ausencia de
randomización puede ser una fuente de sesgo en la obtención
de resultados: existe fundada evidencia de que los efectos de
la intervención administrada tienden a ser mayores en
estudios no randomizados o randomizados inadecuadamente
que aquéllos presentados por estudios que han observado un
proceso de randomización riguroso (Kunz et al., 2004).
Sin embargo, en la práctica existen numerosas
cuestiones para las que no se ha llevado a cabo ningún ECR.
Por ejemplo, no sería ético exponer a los participantes en un
experimento a una intervención o tratamiento
potencialmente perjudicial. En otros casos, llevar a cabo un
ECR “puede resultar antieconómico, desde que un mayor
rigor metodológico está frecuentemente asociado con
mayores costes económicos” (Mullen et al., 2004:75). En
tales casos, los profesionales, probablemente, no tendrán
otra opción que valorar críticamente si la evidencia derivada
de los estudios disponibles, considerados de un nivel inferior
en la jerarquía de evidencia, ofrece la suficiente solidez como
para fundar en ella una determinada decisión profesional.
Además, hay áreas en las cuales la supremacía de los
ECRs ha sido fuertemente contestada. Por ejemplo, Green y
Tones (1999) aducen que es muy difícil llevar a cabo un
genuino proceso de randomización para evaluar
intervenciones en materia de salud pública, generalmente
implantadas a nivel comunitario y en las que las múltiples y
diversas circunstancias de la población no pueden ser
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 41

controladas como en una intervención “de laboratorio”. Otro


factor que dificulta la realización de experimentos a nivel
comunitario es la llamada contaminación entre los diversos
grupos que están siendo comparados, debido a que resulta
tremendamente complicado asegurar que el contenido de la
intervención o programa puestos en práctica no se transmite
desde el grupo o comunidad experimental a aquéllos de
control.
Críticos de los ECRs también alegan que este tipo de diseño
de investigación adolece de grandes limitaciones a la hora de
determinar qué factor o factores, y a través de qué
mecanismos, hacen que una intervención o programa sean
efectivos. En otras palabras, los ECRs no “desagregan lo que
está agregado” (Trinder, 2000), lo que es conocido como el
black-box problem (Green y Tones, 1999; Pawson y Tilley,
1997). Este punto de vista es compartido por Victora y
colaboradores, quienes sostienen que las intervenciones en
materia de salud pública son generalmente complejas,
multifactoriales y cuyos efectos son fuertemente susceptibles
de modificación, por lo cual su evaluación podría requerir
diseños de estudio diferentes a los ECRs (Victora et al., 2004).
Un ejemplo de cómo el concepto de evidencia científica en el
área de la salud pública parece estar ampliándose más allá de
los resultados de ECRs es suministrado por un reciente estudio
que combina resultados procedentes de estudios controlados e
investigación cualitativa (Thomas et al., 2004)11.

VIII. LA PRÁCTICA BASADA

11. El estudio en cuestión es una revisión sistemática de programas para la


promoción de una dieta sana entre la población infantil.
42 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

EN LA EVIDENCIA EN EL CAMPO
DEL TRABAJO SOCIAL

Una de las consecuencias de la creciente popularidad de la


PBE en el ámbito de la Medicina y la atención sanitaria ha sido
su expansión a otras áreas de algún modo asociadas, entre las
que se incluye el Trabajo Social. Especialmente países como los
Estados Unidos, Australia, Canadá y el Reino Unido están
asistiendo a un rápido desarrollo de la PBE en el campo de la
asistencia social. El Centre for Evidence-based Social Services,
www.ex.ac.uk/cebss, creado en 1997 y basado en las
Universidades de Plymouth and Exeter, UK, es un buen ejemplo
de colaboración entre distintas instituciones a fin de acercar los
resultados de la investigación científica a la práctica de los
servicios sociales. Centros similares han sido establecidos en
Australia (el Australian Centre for Evidence-Based Clinical
Practice, http://www.acebcp.org.au/ y el Joanna Briggs Institute,
http://www.joannabriggs.edu.au/about/about.php), y numerosos
institutos en los Estados Unidos, generalmente asociados a
universidades, están actualmente llevando a cabo y evaluando
intervenciones de trabajo social. Un número creciente de
revisiones sistemáticas relevantes para la asistencia social están
siendo publicadas por la Cochrane Collaboration, la Campbell
Collaboration (http://www.campbellcollaboration.org/), y la
BandolierDatabase (http://www.jr2.ox.ac.uk/bandolier/index.html).
En 2003, la Universidad de Oxford, UK, creó el primer
Máster en Trabajo Social Basado en la Evidencia, y poco
después, en enero de 2004, se publicó el primer número de
la publicación The Journal of Evidence-based Social Work
(http://www.haworthpress.com/web/JEBSW/).
Aunque la PBE se ha desarrollado mayoritariamente en
los países anglo-sajones, su importancia está aumentando
también en otras regiones, como los países escandinavos y
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 43

Holanda. Por ejemplo, el Nordic Campbell Center


(http://www.sfi.dk/sw1270.asp), ubicado en Dinamarca,
viene publicando en los países nórdicos, desde 2002,
resultados de investigación (especialmente en forma de
revisiones sistemáticas) en el área de la asistencia social, y
su homólogo el Institute for Evidence-Based Social Work
Practice, (IMS, http://www.sos.se/socialtj/cus/
cuse/imse.htm) ha sido inaugurado oficialmente en Suecia
en Octubre de 2004. En Holanda (donde la efectividad de
los servicios sociales está siendo objeto de particular
atención por parte de administración y consumidores, Mullen
y Streiner, 2004) el Verwey-Jonker Institute
(http://www.verwey-jonker.nl/) promueve, desde hace más
de una década, la realización de estudios de investigación
con el fin de evaluar la efectividad de los distintos programas
de intervención social.
A pesar de su aparente novedad, el Trabajo Social Basado
en la Evidencia (TSBE) no ha surgido sobre un vacío
metodológico (Trinder, 2000). Citando a Richmond (1917),
McDonald utiliza el término “resurgimiento” para referirse al
renovado interés en un método, la PBE, cuyos principios
esenciales han sido “articulados y discutidos dentro de la
literatura del Trabajo Social prácticamente desde el nacimiento
de la profesión” (McDonald, 2003:125). En la misma
dirección, Sheldon y MacDonald (1999) consideran que,
efectivamente, desde los primeros tiempos de la profesión
social ha existido una especial atención hacia los conceptos de
investigación y evaluación, contexto en el cual es posible
identificar la idea de la PBE.
No obstante, esta tradición de investigación en el campo
del Trabajo Social ha estado caracterizada, en gran medida, por
la existencia de escuelas tan diversas como la empírica o
positivista, la pragmática (o pragmatista), y la crítica-radical.
En esta “guerra de paradigmas” (Lishman, 2000) cada escuela
44 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

ha adaptado la idea de PBE a su propio marco metodológico,


originando, de este modo, diferentes versiones de TSBE:

1. la versión empírica, centrada en la evidencia científica


derivada de estudios experimentales (principalmente
ECRs);
2. la versión pragmatista, que incorpora, como
evidencia, resultados de una amplia gama de estudios
de investigación cuantitativa complementados con
investigación qualitativa (Trinder, 2000);
3. la versión crítica, asociada con una mayor participación
de los usuarios (particularmente aquéllos socialmente
excluidos) en la generación de la evidencia que ha de
servir como conocimiento base del Trabajo Social.

Además de una relativamente fragmentada respuesta, el


nuevo paradigma también ha generado un debate, en ocasiones
bastante polarizado, sobre la transferibilidad de los principios
de la PBE desde la Medicina al Trabajo Social, cuestión ésta
que será tratada en la siguiente sección.

IX. EL DEBATE ACERCA DEL TRABAJO


SOCIAL BASADO EN LA EVIDENCIA

La aparición de la PBE en el campo del Trabajo Social ha


suscitado respuestas diversas: junto a un considerable
entusiasmo en algunos sectores (Gambrill, 2003; Gibbs y
Gambrill, 2002; MacDonald, 1999; Sheldon, 2001; Sheldon y
MacDonald, 1999), la PBE también ha generado escepticismo
dentro de ambientes profesionales y académicos (Barratt,
2003; Goldstein, 1992; Webb, 2001). La primera objeción
que se opone a la PBE se refiere a la existencia de obstáculos
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 45

materiales y organizativos que dificultan la adecuada


implementación del modelo en el área del Trabajo Social.
Incluso dos de los pioneros del TSBE en el Reino Unido, Brian
Sheldon y Geraldine MacDonald, reconocen que la limitación
de recursos materiales, la presión bajo la cual, frecuentemente,
los trabajadores sociales desarrollan su labor, y la falta de
preparación técnica de un amplio número de profesionales a fin
de evaluar críticamente los resultados de los estudios de
investigación científica, son serias limitaciones a la posible
influencia de los principios de la PBE en la disciplina del
Trabajo Social (Sheldon y MacDonald, 1999). También se
afirma que la existencia de ciertos factores psico-sociales
podría actuar contra la expansión de la PBE entre la
profesión social, por ejemplo, el temor a cuestionar las
opiniones predominantes, en un clima en el que las
organizaciones están siendo crecientemente gestionadas de
acuerdo a criterios gerenciales no siempre comprensivos con
un juicio profesional que disienta de los procedimientos de
deliberación y decisión establecidos (Oxman y Flottorp,
2001).
Sin embargo, tales obstáculos no son exclusivos del campo
del Trabajo Social, sino que también han afectado al proceso
de implementación de la PBE en otras disciplinas, incluida la
Medicina (en la que la PBE ha alcanzado un notable éxito). Es,
en cambio, la existencia de factores de índole epistemológica
lo que, en opinión de algunos autores, hace difícil (incluso
imposible) la aplicación de la PBE al Trabajo Social. Por
ejemplo, Webb (2001) señala que la PBE presume la
existencia de métodos absolutamente objetivos de
determinación de la evidencia y que propone una versión
determinística de racionalidad. “En su más cruda expresión —
afirma Webb— el modelo basado en la evidencia es un
método mecanicista que considera al trabajador social como
un mero procesador de información al servicio de sistemas de
46 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

decisión cerrados” (Webb, 2001:67). El autor considera que


este modelo no es aplicable al área del Trabajo Social, pues
ignora los complejos procesos de deliberación y elección que
los trabajadores sociales tienen que llevar a cabo a la hora de
adoptar una decisión profesional. Gambrill (una de las más
activas promotoras del TSBE) responde que la propia
definición de la PBE (Sackett et al, 2000) muestra la
verdadera naturaleza del nuevo paradigma: “un proceso
diseñado para proveer un servicio profesional efectivo, que
integre las características específicas de cada usuario,
incluyendo sus preferencias y valores, y el conocimiento
derivado de los estudios de investigación científica“
(Gambrill, 2003:4). La PBE, continúa Gambrill, no se
presenta como un sustituto de la competencia profesional: la
autora defiende que, junto a la más actualizada información
científica y a los valores y preferencias del usuario,
cualidades como el talento profesional, la empatía, la
consideración positiva del usuario de los servicios sociales y
la habilidad para construir relaciones humanas, sólo por citar
algunas, han de permanecer como patrimonio inalterable del
trabajador social en su labor asistencial.
La complejidad inherente a la práctica del Trabajo Social es
citado como otro potencial obstáculo para la implementación y
expansión de la PBE. Lishman, por ejemplo, advierte que el
Trabajo Social no sólo opera dentro de complejos marcos
ideológicos, administrativos y de financiación, sino que
constituye una actividad profesional incierta en la que el
trabajador social tiene la responsabilidad de decidir acerca de
si intervenir (y en qué medida) o no en las vidas de personas o
familias que están en situación de grave conflicto o riesgo
(Lishman, 2000).
Ciertamente, los trabajadores sociales afrontan, con frecuencia,
complejas situaciones personales y sociales, en las que los
usuarios de los servicios se ven severamente afectados por una
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 47

combinación de factores adversos, como pobreza, exclusión


social, una especial vulnerabilidad (física y psíquica), tóxico-
dependencia y un entorno con altas tasas de criminalidad. Por
ello, Trinder expresa serias dudas acerca de la viabilidad de una
estricta trasposición de los principios inspiradores de la PBE
desde la Medicina a una disciplina, como el Trabajo Social, que
opera en un contexto de complejas —y, a veces, caóticas—
relaciones humanas. En este marco, señala Trinder, los efectos
de una intervención son mucho menos predecibles que, por
ejemplo, los efectos de un cierto fármaco o una intervención
quirúrgica (Trinder, 2000). Sheldon no se muestra conforme
con este argumento, aduciendo que el único modo
genuinamente adecuado de eliminar cualquier influencia de
sesgo de los mencionados factores sobre los efectos de una
intervención es el empleo de la asignación randomizada o
aleatoria y la estratificación, dos de las principales
caracteristícas de los ECRs (Sheldon, 2001). Sin embargo, este
método de evaluación de la efectividad de una intervención
social podría adolecer de limitaciones similares a las
anteriormente mencionadas en relación con intervenciones en
materia de salud pública (por ejemplo, la contaminación entre
participantes en distintos grupos y la inadecuación de los ECRs
para identificar los procesos y mecanismos a través de los
cuales una intervención ha generado unos resultados
determinados).
Más dudas acerca del fundamento epistemológico del TSBE
son expresadas por McDonald, quien observa que la PBE podría
ser insuficiente para responder a las diversas corrientes teóricas
empleadas por los trabajadores sociales en los múltiples
escenarios en los que se desarrolla su profesión (McDonald,
2003). Es más, McDonald considera que ciertas perspectivas
críticas (por ejemplo, una interpretación feminista, por oposición
a la interpretación psico-clínica, de desórdenes como la anorexia
y la bulimia, o la interpretación de las necesidades reales de las
48 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

personas con discapacidades desde el conocimiento profundo de


su particular experiencia de discriminación) podrían verse
relegadas por la aplicación de los principios informadores de la
PBE (McDonald, 2003). Los argumentos de McDonald enlazan
con el debate ideológico suscitado acerca del TSBE: Webb (2001)
sostiene que, además de una problemática base epistemológica,
bajo este modelo también subyace una clara motivación de tipo
político-ideológico: Webb asocia la popularidad de la PBE con lo
que Harris (1998) ha llamado el nuevo managerialismo (o
gerencialismo) en Trabajo Social, caracterizado por el desarrollo de
una cultura de objetivos, una creciente regulación de los
procedimientos y un mayor control sobre los profesionales. De
este modo, prosigue Webb, y como instrumento del sistema
gerencial en sus aspiraciones de economía y eficiencia, “la PBE
puede tener el efecto de neutralizar el protagonismo del Trabajo
Social en el debate ético y político y de socavar su autonomía
profesional” (Webb, 2001:76). En una línea similar, Trinder
(2000) considera que la PBE podría llegar a convertirse,
especialmente en aquellas disciplinas donde los profesionales
tienen menos poder, en un medio por el cual las estructuras
administrativas y gerenciales impusieran determinadas
concepciones de evidencia, en detrimento del conocimiento
científico de profesionales e investigadores. Curiosamente, la PBE
es también propugnada en sentido contrario: al desarrollar un
corpus propio de conocimiento genuinamente científico, la PBE
podría convertirse en la estrategia ideal para revigorizar el proyecto
del Trabajo Social como profesión frente a las restricciones
impuestas por las organizaciones y la consiguiente pérdida de
autonomía profesional (McDonald, 2003).
Otro desafío, ya mencionado, al que tiene que hacer
frente el TSBE es la existencia de polarizados debates
teóricos acerca de las diferentes metodologías de
investigación, especialmente el debate entre las escuelas
empírica y pragmatista. Algunos autores, aún reconociendo
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 49

la importancia de los ECRs a la hora de evaluar el grado de


eficacia de una intervención, postulan la necesidad de
establecer conceptos de evidencia que sean realistas con las
especiales características del Trabajo Social (Thyer, 2002;
Trinder, 2000). Estos autores sugieren que el establecimiento
de un concepto de evidencia lo suficientemente amplio como
para incluir también resultados procedentes de otros diseños de
estudios de investigación (tanto cuantitativos como
cualitativos), ayudaría a superar una de las objeciones más
comunes al TSBE: la virtual inviabilidad de los diseños de
investigación experimental para evaluar intervenciones
desarrolladas entre grupos humanos con complejas y
dispares circunstancias sociales, económicas y culturales.
Por ejemplo, Thyer sostiene que dificultades metodológicas y
éticas asociadas a la realización de ECRs con personas
particularmente vulnerables provocan que, con frecuencia,
solamente resultados derivados de estudios cuasi-
experimentales —e incluso de estudios de un caso individual—
se encuentren disponibles a fin de averiguar los efectos de una
determinada intervención social (Thyer, 2002). Es más, el
propio Sheldon admite que la consideración de los resultados
de ECRs como única evidencia admisible resultaría en la
eliminación de casi toda la investigación llevada a cabo hasta
la fecha en el área del Trabajo Social. En consecuencia, un
“sistema piramidal de certidumbre” basado en las jerarquías
de evidencia, con sucesivos niveles de fiabilidad atribuidos a
los diferentes diseños de investigación —ECRs en el nivel
más alto, y decrecientes niveles de fiabilidad para otros
diseños— podría ser una solución pragmática a fin de
resolver la presente cuestión (Sheldon, citado por Trinder,
2000). Lishman va más allá de los diseños de investigación
cuantitativa y aboga por un modelo pluralístico de evidencia
para la práctica del Trabajo Social, en el que converjan
diferentes metodologías de investigación (cuantitativa y
50 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

cualitativa) de acuerdo con la naturaleza de la cuestión a


investigar (Lishman, 2000). Sin duda, el debate acerca del
concepto de evidencia sobre el cual la práctica de la
profesión social debe apoyarse asemeja al que se está
produciendo en las áreas de salud pública e intervenciones a
nivel comunitario, con un inicial énfasis en los resultados
procedentes de ECRs desplazándose gradualmente hacia
conceptos de evidencia más amplios (Mullen y Streiner,
2004).

X. ¿PROFESIONALES DE LA EVIDENCIA
O CONSUMIDORES DE EVIDENCIA?

Inicialmente, los promotores de la PBE defendieron el


modelo del Profesional de la Evidencia, según el cual los
profesionales investigan y valoran críticamente la literatura
científica a fin de responder a una determinada cuestión
planteada en el ejercicio de su práctica profesional (Evidence-
based Medicine Working Group, 1992). Sin embargo, la alta
especialización y el tiempo requeridos para llevar a cabo tal
proceso han llevado a aquellos autores a admitir el modelo del
Consumidor de Evidencia, a tenor del cual los profesionales
utilizan colecciones de evidencia previamente seleccionadas y
valoradas por otros profesionales u organizaciones (Guyatt et
al., 2000). Entre este tipo de recursos, las revisiones
sistemáticas realizadas rigurosamente (como las presentadas
por la Cochrane Collaboration) están jugando un papel
destacado en la diseminación de la mejor y más actualizada
evidencia derivada de los estudios de investigación científica.
El anterior escenario, desarrollado fundamentalmente en
el campo de la Medicina, es, en gran medida, igualmente
observable dentro de la profesión social: aunque algunos
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 51

autores se muestran reacios a admitir la idea de que los


trabajadores sociales utilicen evidencia seleccionada y
distribuida por otros (Upshur y Tracy, 2004), las limitaciones
de tiempo y recursos materiales frecuentemente padecidas
por los trabajadores sociales hacen que sea éste,
probablemente, el modo más realista de facilitar la
implementación del TSBE. De hecho, institutos como el
Social Care Institute of Excellence, en el Reino Unido, y los
ya mencionados Institute for Evidence-Based Social Work
Practice, en Suecia, y el Nordic Campbell Center, en
Dinamarca, siguiendo el ejemplo de la Cochrane
Collaboration y la Campbell Collaboration están publicando y
diseminando un número creciente de revisiones sistemáticas
de estudios de investigación científica relevantes para la
práctica del Trabajo Social. Igualmente, algunos
departamentos de servicios sociales en el Reino Unido (por
ejemplo, Dorset y Gloucestershire) ya han creado el puesto
específico de Coordinador de PBE, entre cuyas funciones se
halla la de suministrar evidencia procedente de estudios de
investigación a los profesionales sociales que operan dentro
de los citados departamentos.
Aún reconociendo que tales iniciativas son positivas y
promueven la rápida implementación del TSBE, algunos
autores consideran que dicho proceso no debería sustituir
por completo al rol del Profesional de la Evidencia, y que los
profesionales sociales deberían, en cualquier caso, adquirir
el conocimiento y especialización necesarios para realizar
una valoración crítica e independiente de la literatura
científica disponible (Guyatt et al., 2000; Mullen et el.,
2004). Ciertamente, una formación de este género permitiría
a los profesionales sociales cuestionar sólida y
razonadamente el uso de intervenciones sociales inefectivas
(e incluso nocivas) y, de este modo, contribuir de modo
significativo a elevar la calidad de los servicios sociales.
52 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

XI. CONCLUSIONES
La PBE ha alcanzado una importancia considerable en
Medicina y otras áreas de la atención sanitaria. Este proceso
de expansión no parece accidental: la PBE, más bien, se
puede considerar el producto de un tiempo caracterizado por
la explosión de la tecnología de la información, un creciente
sentido del riesgo, y la consagración de los principios de
economía, efectividad, transparencia y atención al
consumidor. En este contexto social, se está produciendo la
expansión de la PBE desde el campo de la salud a otras
áreas, entre las que se incluye el Trabajo Social, que ha
adaptado el nuevo paradigma bajo la denominación de
Trabajo Social Basado en la Evidencia (TSBE). El TSBE ha
sido acogido con entusiasmo por algunos sectores de la
profesión social, como un modelo que sintoniza con la
aspiración profesional y ética de emplear los medios más
eficaces y actualizados en la asistencia del usuario. Sin
embargo, el nuevo modelo también ha generado un amplio
debate acerca de la transferibilidad de los principios de la
PBE desde la Medicina a una disciplina, Trabajo Social, que
opera entre factores personales y sociales particularmente
complejos.
Debido a que el TSBE se encuentra en sus inicios, quizás
es pronto para predecir hasta qué punto este método puede
ser implementado uniformemente a través de los diversos
escenarios en los que los trabajadores sociales desempeñan
su profesión. Sin embargo, no parece aventurado afirmar
que, junto a recursos materiales y humanos suficientes, la
viabilidad estratégica del TSBE requerirá muy especial
consideración de una serie de factores inherentes a la
práctica del Trabajo Social, como la diversidad cultural, las
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 53

experiencias individuales y colectivas de marginación y


discriminación, las diferencias en las relaciones de poder
tanto entre individuos como entre grupos humanos, y la
situación de pobreza y exclusión social que asola a una gran
parte de los usuarios de los servicios sociales. Ciertamente,
tales factores han de ser tenidos en cuenta a la hora de
definir el concepto de evidencia sobre la cual ha de basarse
la práctica profesional de los trabajadores sociales. Es por
ello que el inicial énfasis en los resultados derivados de
ECRs como fuente primaria de evidencia está gradualmente
desplazándose hacia un modelo más pluralístico de
evidencia, en el que la utilización de resultados procedentes
de una variedad de diseños de estudios de investigación
permite integrar datos cuantitativos con otros, de naturaleza
cualitativa, más adecuados a fin de explorar los valores y
experiencias de individuos y grupos humanos.
Por último, es también difícil saber si la implementación del
TSBE conllevará un control creciente de las estructuras
organizativas sobre la autonomía profesional del trabajador
social o si, por el contrario, el TSBE será un instrumento decisivo
en el proceso de afirmación del Trabajo Social como profesión
clave del Estado del Bienestar. La respuesta a esta cuestión
podría depender del grado hasta el cual los profesionales
sociales puedan convertirse en Profesionales de la Evidencia.
Limitaciones de tiempo, de recursos materiales y organizativos,
así como la alta especialización del conocimiento requerido para
valorar críticamente la literatura científica tienden, desde luego,
a favorecer el uso de evidencia previamente seleccionada, como
por ejemplo las revisiones sistemáticas presentadas por diversas
organizaciones. Sin embargo, los antedichos factores no
deberían eliminar la posibilidad de que los trabajadores sociales
adquieran tal conocimiento, el cual les permitirá cuestionar
razonadamente el uso de intervenciones sociales inefectivas o
54 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

perjudiciales, identificar aquellas intervenciones de probada


efectividad y, en consecuencia, realizar una significativa
contribución al mejoramiento de la calidad de la atención social.
DE LA MEDICINA AL TRABAJO SOCIAL • 55

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ENTRE SOLES
Y ESTRELLAS

SOLEDAD ESTEBANEZ (PSICÓLOGA)


MERCEDES CRISTÓFOL (TRABAJADORA SOCIAL)
CARLOS GRITTINI YI (TRABAJADOR SOCIAL)

“... Lo más sorprendente es que lo hacían de la


manera más humilde,como si no estuvieran haciendo
nada, como si no estuvieran transformando el mundo
a través del poder purificador del fuego, como si no
supieran que los alimentos que ellas preparaban y que
nosotros comíamos permanecían dentro de nuestros
cuerpos por muchas horas, alterando químicamente
nuestro organismo, nutriéndonos el alma, el espíritu,
dándonos identidad, lengua, patria.”
Laura Esquivel.
Íntimas suculencias

Este trabajo tiene como objetivo presentar una


experiencia de intervención interdisciplinaria llevada a cabo
por tres psicólogas, dos médicos y dos trabajadores sociales,
en atención primaria de la salud, basada en la prevención y
promoción de salud mental. Dicha experiencia se está
desarrollando actualmente a partir de un abordaje grupal
62 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

con las madres de los niños concurrentes a un “merendero”


que surge en el barrio de Boedo.
Este espacio se genera a partir de la percepción del C.G.P N°
6 de las nuevas demandas de la población que van surgiendo en
los últimos meses. Dicho merendero funciona en las instalaciones
del buffet del Club Social y Deportivo “Estrella de Boedo”.
Desde el equipo se fue pensando desde las primeras
reuniones acerca de la pertinencia de la demanda, por parte
del CGP, de nuestra intervención en este proyecto. Las
preguntas giraban en torno a: ¿Qué haríamos allí? ¿Cuál sería
nuestro lugar? ¿Cuál el trabajo a realizar? ¿Qué interés habría
en la población, más allá de la apreciación por parte del CGP
de lo beneficioso de nuestra participación?

MARCO CONTEXTUAL

La caída acelerada hacia situaciones de exclusión que está


ocurriendo actualmente, se relaciona con la falta de
pertenencia a una red relacional sólida (fragmentación de lazos
sociales, debilitamiento de las identidades colectivas), como
así también a la sub-desocupación crecientes. Estos factores
harían pensar en un virtual impacto en el padecimiento
subjetivo de la población y un posible deterioro de las redes
clásicas de contención social y reacomodación a las nuevas
condiciones.
Plantea E. Galende: “... los problemas de la integración
social, la participación de los individuos en la vida
comunitaria, y en los intercambios económicos y simbólicos,
fueron vislumbrados como los valores determinantes en la
producción de salud mental, tanto en las personas
singulares, como en los grupos comunitarios. Hoy estamos
suficientemente advertidos de que determinadas condiciones
de vida aumentan la vulnerabilidad de las personas, tanto
ENTRE SOLES Y ESTRELLAS • 63

físicas como mentales y sociales (...) y es sobre esas


condiciones que la participación comunitaria resulta
esencial, ya que se trata en definitiva de potenciar las
capacidades de las personas para enfrentar estas
condiciones y actuar sobre ellas.”1
La pregunta que guía el trabajo gira en torno a cómo se alteró
la vida cotidiana a partir del impacto de la crisis; qué está pasando
con los niños, con las familias en estas condiciones.

PRIMER MOMENTO GRUPAL

Luego de una serie de reuniones del equipo durante las


cuales fue posible pensar, hipotetizar acerca del contexto en
el cual tendríamos que intervenir, decidimos que era tiempo
de aproximarnos al lugar.
El grupo está conformado por aproximadamente catorce
mujeres, algunas de las cuales pertenecen al plan “Jefes y
jefas de hogar desocupados”, brindando como
contraprestación al mismo su colaboración en la preparación
de la merienda. El resto se encuentran formando parte de un
proyecto de microemprendimientos productivos (taller de
costura, confección de artículos de limpieza). Así mismo,
estas mujeres conjuntamente apuntan a una organización
grupal más sólida, bajo la forma de “Casa Social”. Para ello
cuentan con una coordinación externa, la psicológa del CGP,
quien nos convoca para trabajar en este proyecto.
En un principio, la demanda de este grupo en relación con la
salud estaba orientada hacia un equipo imaginarizado por ellas
como asistencial. Pudimos escuchar y orientar en los casos en

1. GALENDE, E. Citado por MOISE, C. Prevención y Psicoanálisis.


64 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

que considerábamos necesario, (iniciación de un tratamiento, por


ej.), corriéndonos del lugar en que éramos ubicados, aunque
resultaba algo incómodo por nuestra ignorancia respecto de
qué iríamos a hacer concretamente allí.
Un tema de gran interés para ellas y que se repetirá en
futuras reuniones de manera insistente, es la preocupación por
los hijos adolescentes, por la falta que perciben en ellos de
intereses vocacionales, entre otras cuestiones.
Luego, las inquietudes se fueron desplazando hacia la
realización de un grupo de autoayuda, pedido ambivalente, ya
que la mayoría prefirió reunirse para no hablar de los
problemas.
Comienzan a hablar sobre lo bien que les hace contar con
el grupo de madres del merendero y aparece como un tema que
luego será uno de los principales puntos a trabajar con ellas; el
de la falta de un espacio físico para hacer sus actividades.
En las reuniones semanales que se vienen llevando a
cabo con este grupo, van surgiendo algunas temáticas de
importancia en las cuales es posible detenerse a reflexionar,
aunque aún no haya finalizado la tarea.

LA MATERNIDAD
Y SUS SIGNIFICACIONES

Una cuestión que reviste particular significatividad es la


“problemática de la maternidad”. En ocasión de aplicar la técnica
lúdica llamada “presentación mentirosa” en la cual todos
debíamos presentarnos a partir de un personaje inventado,
muchas de ellas se presentaron como solteras, casadas sin hijos
o con uno o dos hijos. También se presentan como profesionales
y/o estudiantes de las carreras que les hubiese gustado seguir.
Pensamos en la importancia del haber instaurado este
ENTRE SOLES Y ESTRELLAS • 65

espacio de ficción en tanto les permitió conectarse con aspectos


de su personalidad distintos a los implicados en el ser madres, así
como a nosotros nos llevó a reflexionar acerca de las dificultades
que en su cotidianeidad les acarrea el hecho de tener muchos
hijos. Aún así, en otros momentos observamos que el grupo
reflexiona sobre la maternidad y sus significaciones, connotándola
positivamente; esto se traduce en frases como “madre no es la
que pare, sino la que cria”; “para mí lo principal de venir acá son
mis hijos”.
Encontramos como paradojal el hecho de que en este
espacio grupal constituído en torno a la preparación de la
merienda, rol definido como típicamente femenino, surjan
temáticas relacionadas con sus deseos y expectativas como
mujeres, que tuvieron que relegar por ser madres. Cabe señalar
que una de ellas se refiere al merendero como “espacio sin
hijos” y una de las primeras demandas que proponen para
debatir es “cómo éramos y qué deseábamos antes de ser
madres”.
Afirma una participante: “Extraño el merendero los fines de
semana, porque es un espacio que demuestra que podemos
hace algo más que lavar, planchar y cocinar”.

LA CUESTIÓN DE GÉNERO

A partir de las crónicas de las reuniones pueden


desprenderse otras cuestiones susceptibles de ser analizadas
teóricamente. En primer lugar, la participación en el
merendero surge como estrategia de supervivencia para la

2. AQUÍN, N. y S., GATTINO. Las familias de la nueva pobreza.Una lectura


posible desde el Trabajo Social. Buenos Aires: Espacio Editorial.
66 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

satisfacción de las necesidades básicas. Según Aquín y


Gattino, tales estrategias se enmarcan en el fenómeno de
“feminización de la pobreza”, el cual pone en evidencia “las
determinaciones sociales de la asimetría de género,
acarreando la percepción de que es la mujer la que más
trabaja”2.
Estas autoras sostienen que si bien sigue siendo la mujer el
blanco de las exigencias en la división sexual del trabajo en el
ámbito doméstico, la necesidad de “salir” al ámbito público ha
producido diversos cambios en la dinámica familiar,
devolviendo al interior del primero otra imagen de género. Estas
modificaciones van pautando nuevas maneras de vincularse.
En el transcurso de los encuentros se observan cuestiones
relativas a la estigmatización social que gira en torno a la
concurrencia al merendero. Podría pensarse: ¿qué implica para
una mamá asistir o llevar a los hijos a otro lugar, otro escenario
que no es el del propio hogar, para ir a merendar? Estas familias,
que en lineas generales viven en hoteles o en recintos pequeños,
¿qué vivencia de hogar están teniendo? ¿Sienten que lo tienen?
¿Cuál es la casa de estos niños y de estas mamás? ¿Qué
representa para ellas participar en una casa social? ¿Qué distancia
existe, qué apertura inaugura pasar de tener un lugar al cual ir a
merendar (con el marco horario que bordea a la merienda) a tener
un espacio al cual concurrir que se llame Casa Social? ¿Cómo es
visto este grupo de mujeres por los socios del club?
Las propias mujeres perciben este hecho como vergonzozo y
relacionado con la “culpa” personal. Esto puede verse en frases
como “los dejaba a los chicos y me iba rápido, porque me daba
vergüenza tener que venir acá por un vaso de leche que tendría
que dárselo yo y no lo puedo hacer”. En términos de Aguiar, la
“privatización de la culpa social es una de las inducciones

3. AGUIAR, E. La desocupación: algunas reflexiones sobres sus repercusiones


psicosociales.
ENTRE SOLES Y ESTRELLAS • 67

provenientes de los estamentos de poder para ejercer el control


social”3.
Desde el equipo de trabajo se busca generar reuniones
donde estas cuestiones puedan ser reflexionadas
grupalmente, desculpabilizando y atribuyendo a la
problemática un carácter macrosocial.

EL PROYECTO “CASA SOCIAL”


Durante esta primera etapa, el eje principal de nuestra tarea
se aboca a acompañar al grupo en el proceso de construcción
material y simbólica de la Casa Social. Proceso que las involucra
y las convoca para realizar actividades donde asumen un rol
diferente con mayor protagonismo social. Tuvo importancia en el
poder apropiarse de este espacio percibir que sus hijos
expresaban gran entusiasmo en concurrir al merendero, en
donde además de tomar la merienda pueden participar de
actividades deportivas y recreativas. Varias madres afirman que
sus hijos antes de asistir al merendero no tenían trato con otros
chicos por las características de sus viviendas y porque muchos
de ellos suelen quedarse al cuidado de hermanos mayores (que
también son niños) en horarios en que sus mamás salen a
trabajar4.
Por otro lado, al empezar a reunirse ellas mismas
observan significativas modificaciones. “Yo no tengo amigas
y me di cuenta que para mí también es una necesidad venir
y compartir; me doy cuenta que no es algo mío sino a todas
nosotras nos están ocurriendo cosas parecidas”. Así, el grupo

4. Esto permite inferir que el merendero estaría ofertando no sólo un lugar al


cual ir a alimentarse (de hecho un sujeto se constituye en un más allá de la
satisfacción de las necesidades biológicas), sino también un escenario de
infancia, espacio en el que se merienda, se juega con otros niños, actividades
éstas por sí mismas, potenciadoras de salud.
68 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

se va constituyendo en un espacio de socialización y


reflexión de las vivencias cotidianas.
Otro indicador de la pertenencia grupal es que comienzan a
participar en actividades de acción social en el barrio,
encargándose de organizar y distribuir alimentos, participando en
actividades en IMPA (fábrica cerrada convertida en Cooperativa)
como así también, la discusión de cuestiones estructurales hasta
el momento vividas como individuales, son claro indicador de este
proceso.
El constituirse bajo un proyecto de “Casa Social”
(autodenominándose “Sol de Boedo”) implica una diferencia
cualitativa con un posicionamiento como grupo de madres.
Supone ubicarse de manera diferente dentro de la red social en la
que se incluyen, ampliando su campo de acción (no limitado a la
maternidad).

METODOLOGÍA DE TRABAJO
UNA POSICIÓN DIFERENTE PARA ALGUNOS

Respecto de la metodología de trabajo puede enfatizarse la


intención en cada encuentro de generar un espacio horizontal
donde la comunicación fluya en forma circular y no se
centralice en uno de los miembros. Los coordinadores, si bien
planifican las actividades a partir de las demandas del grupo,
en las reuniones se ubican como un miembro más participando
en las dinámicas. De acuerdo con esto, una de las demandas
fue hablar acerca de “cómo manejar a los hijos adolescentes”
y se recurrió a un intercambio de experiencias a fin de que sean
ellas mismas quienes se escuchen sus opiniones y discutan
sobre el tema. El rol de la coordinación fue ordenar la
comunicación, sin realizar aseveraciones.
Los objetivos implícitos de las reuniones apuntan a que
ENTRE SOLES Y ESTRELLAS • 69

puedan, a partir de compartir problemáticas comunes, armar


sus propios códigos culturales, significar conjuntamente la
percepción de sus problemas y eventuales soluciones, sin
imponer nuestros juicios valorativos.

CONFLICTO Y TRANSFORMACIÓN

“Los grupos no son islas, esto es, tienen siempre una


inscripción institucional, sea dicha inscripción real o imaginaria
(...) El llamado contexto, sea institucional y/o social, es en rigor,
texto del grupo. No hay una realidad externa que produce
mayores o menores efectos de influencia sobre los
acontecimientos grupales, sino que son parte del propio texto
grupal. Son por ende fundante de cada grupo”.5
Consideramos que, si bien el bufette del club es el único
espacio al momento viable para la instalación del merendero,
esta inclusión de un grupo social determinado dentro del espacio
de otra agrupación, no se da sin consecuencias. Las inferencias
acerca de los conflictos que pudieran generarse entre los dos
sectores, finalmente fueron relatados por los integrantes:
malestar en la gente del bufette por la presencia de ellas allí,
espacio de apoyo escolar para los niños amenazado, dado que la
maestra es una mamá del club, que al enterarse de que se
conformarán como Casa Social comienza a retirar su
colaboración.
Pensamos que la inclusión del merendero (con todo lo que
abarca: madres, niños, adolescentes, equipo de profesionales
que trabaja con ellos) dentro de un club barrial, estaría

5. FERNÁNDEZ, A.M. y A, DEL CUETO. El Dispositivo grupal.


70 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

generando fenómenos de exclusión y rechazo por parte de la


comunidad del club, que reproduciría aunque de un modo
diferente, la ruptura de lazos sociales que se pretenden
r e c o m p o n e r .
Por lo tanto, pensamos que si bien esto último es uno de los
objetivos de nuestra intervención, no obstante se presenta
como un posible y futuro quehacer la inclusión del resto de la
población del club en nuestro trabajo. Se trataría de darles un
lugar, sondeando qué es lo que piensan ellos del merendero
(además de lo que representa para las mamás y los niños), en
qué cambia para ellos que se constituyan como Casa Social,
etc. Temas que de no tratarse hacen de este encuentro una
lucha por el territorio. Madres entrelazadas que vuelven a
soltarse del escenario social más amplio.
Tomando estas apreciaciones, cabe destacar algunas
cuestiones relativas a las disputas de poder en las que se lleva
a cabo la experiencia. Este grupo de mujeres funciona dentro
del Club Social y Deportivo (“Estrella de Boedo”), y en los
encuentros comienza a percibirse cierto malestar en relación
con su inclusión en este espacio, al aparecer el potencial
reivindicativo de esta organización grupal (el grupo de la Casa
Social se autodenomina, no ingenuamente, “Sol de Boedo”).
Este malestar se revive en cada reunión cuando se vuelve a
hacer necesario encontrar “el lugar” para reunirse.
Esto fue considerado desde este equipo como un indicador
de la necesidad de trabajar en la construcción colectiva de los
lazos sociales desde una perspectiva de poder, y no
simplemente de “inclusión” que resulta ficticia si no se trabaja
en la legitimación y búsqueda de un posicionamiento diferente.

1. BADIOU, Alain. “Reportaje”. En revista Ñ N° 56. Buenos Aires: Diario


Clarín.
ENTRE SOLES Y ESTRELLAS • 71

EN ESTOS TIEMPOS...
ALGUNA CONCLUSIÓN

¿Por qué incluir la experiencia de un grupo de mujeres que


trabaja en un merendero en el marco de prevención en salud
mental? Consideramos a la salud como un proceso histórico
social en donde juega un papel determinante la capacidad de
la comunidad de organizarse para obtener mejores niveles de
calidad de vida. También consideramos que esta organización
necesariamente implica conflicto y transformación. El grupo del
merendero implica un grupo de madres que se organizan en
torno a otras tareas y proyectos tendientes a fortalecer lazos
solidarios disminuyendo el padecimiento subjetivo que el
modelo acarrea y posiciona al grupo como actor social.
Para poder comprender este proceso requerimos incluir la
perspectiva de poder y atravesamiento institucional que
constituye toda experiencia de trabajo grupal.
O sea, pensamos que toda experiencia grupal de
prevención en salud mental implica realizar acciones grupales
que fomenten la solidaridad y establecimiento de vínculos
sociales considerando las relaciones de poder que atraviezan
a las instituciones y a la sociedad misma.
Analizamos esta experiencia considerándola en términos de
estrategias de construcción colectiva de nuevas formas de
horizontalidad, en un contexto de deliberado desmembramiento
social.
Por lo tanto, no se trataría de una experiencia que busque
limitarse a “incluir” a un grupo de “excluidos”. La estrategia de
trabajo tiene fundamentalmente una intencionalidad de
transformación, en estos tiempos en que lo instituyente
pareciera estar abriéndose un camino.
72 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Tiempos en los que proliferan las instituciones que agrupan


a las personas con diversos fines: brindarles alimentos, trocar
bienes y servicios, iniciar microemprendimientos, todas salidas
posibles y suplentes de otro derecho no garantizado, el derecho
al trabajo. Tiempos en que las fábricas se cierran pero también
se toman y se transforman: son cooperativas. Lugares a los
cuales la gente del barrio acude en busca de alimentos, ropa,
a participar de un trueque, actividades recreativas, etc.
Considerar tal inclusión institucional implica no perder
de vista la responsabilidad del Estado como garante
fundamental de los derechos humanos. En esta situación en
particular, es el CGP quien está promoviendo la incusión de
este grupo en dicha red. Surge entonces el interrogarnos
acerca de la legitimidad de tal inclusión. No desconocemos
que toda experiencia de trabajo grupal comunitario puede
tener un doble carácter, ya sea encarada desde una perspectiva
de promoción y de reconocimiento del derecho a la salud
(desde una concepción integral), o desde otra, de mero
asistencialismo.
Retomando la Estrategia de APS, con su promesa
incumplida de “Salud para todos en el año 2000”, se puede
inferir que dicha estrategia no logró sus objetivos porque no
consideró a la salud como un proceso social en el cual los
actores comunitarios son protagonistas.
Quizás de esto se trate: repensar la APS en relación con
las intervenciones comunitarias, implica estar en momentos
donde no todo es enfermedad todavía, estar en lugares en los
que uno no imaginaría.
ENTRE SOLES Y ESTRELLAS • 73

BIBLIOGRAFÍA

AGUIAR, E. La desocupación: algunas reflexiones sobres sus


repercusiones psicosociales.
AQUÍN, N. y S., GATTINO. Las familias de la nueva
pobreza.Una lectura posible desde el Trabajo Social.
Buenos Aires: Espacio Editorial.
CARBALLEDA, A. 2002. La Intervención en lo Social. Buenos
Aires: Paidós.
CASTEL, R. 1996. La Metamorfosis de la Cuestión Social.
Buenos Aires: Paidós.
FERNÁNDEZ, A.M. y A., DEL CUETO. El Dispositivo grupal.
MOISE, C. Prevención y Psicoanálisis.
LA BIOÉTICA
Y EL TRABAJO SOCIAL

UNA EXPERIENCIA
PROFESIONAL, REFLEXIONES

ANA MARÍA ANGUIANO MOLINA / YOLANDA HERNÁNDEZ LARA /


CONSUELO PLASCENCIA VÁZQUEZ / SALVADOR ENRIQUE JIMÉNEZ A.

La humanidad necesita, urgentemente de una


nueva sabiduría que, le proporcione el conocimiento
del… cómo… usar el conocimiento para la
supervivencia del hombre y la mejora de la calidad de
vida.

Pensar en bioética1 nos remite a una concepción de

1. Creador del término y argumentación inicial, el humanista estadounidense


Van Rensselaer Potter, profesor oncólogo, escribió en 1970-71, el primer
texto con el término: su argumento. Hay dos vertientes en la búsqueda del
conocimiento, a través de las ciencias y las humanidades, que parecen
incapaces de hablarse, siendo parte de la razón y del futuro de la humanidad.
Entonces posiblemente construyendo la disciplina de la Bioética como puente
entre ambas, se podrá contribuir a mejorar la calidad de vida de las
sociedades. www.momografias11/cinetif/concient/shtm
76 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

integración, solidaridad, evitando la parcialidad y contraria a la


consideración absolutista y tradicional, “biológica”. Hoy, el
sujeto es visualizado totalmente, con sentimientos, virtudes y
valores, en y para la sociedad, con historia presente y
construyendo el futuro de la humanidad. La bioética como
ciencia surge en la década de los setenta del siglo pasado,
precisamente cuando en mundo latinoamericano atravesaba por
una marcada depresión económica y ambiental, que se agudizó
en los ochenta (década perdida) al propagarse la globalización.2
Quizás el reencuentro con los valores profesionales sea el
ángulo de reflexión en la propuesta de vinculación entre dos
disciplinas, ambas desde nuestro punto de vista con enormes
cualidades, y una visión humanista e integral de los sujetos en
sociedad.
El artículo surge de la inquietud del equipo sobre el
ejercicio profesional (en México el 48.9 % de los Trabajadores
Sociales laboran o tienten relación con el sector salud), a
propuesta de un trabajo de un joven estudiante de medicina (J.
Carrera:2004) y de un proyecto de investigación cuyo objetivo
es el análisis del caso de los Trabajadores Sociales, en un
proyecto macro-universitario titulado “Bioética, tecnologías y
desempeño profesional de los egresados en ciencias sociales”.
El dilema ético existe desde que el hombre conoce y acepta
la elección de sus acciones. Este conocimiento le obliga a

2. El fenómeno de la globalización, surge en el siglo XX para mundializar la


riqueza, pero se ha convertido, evidentemente, en un sistema que ha generado
mayor pobreza e inequidad, en aras de la mercadotecnia para imponer el orden
neoliberal, con el mercado como supremo regulador de las relaciones sociales
dentro de cada país y a escala internacional. La globalización es un fenómeno
que se caracteriza por crecientes y muy intensas relaciones económicas de
todos los países, afecta negativamente al objetivo de promover un mundo
donde el conjunto de los habitantes del planeta se beneficia con las conquistas
que el hombre ha logrado a lo largo de su historia (ANGUIANO. 2005.
Reflexiones sobre Trabajo Social).
LA BIOÉTICA Y EL TRABAJO SOCIAL • 77

entrar en el análisis de aquello que es éticamente aceptable y


lo que debe omitir en sus acciones. Así, ha surgido en nuestros
tiempos la bioética como disciplina. Este término fue utilizado
por primera vez por el oncólogo estadounidense Potter en el año
1970-1971 ante la creciente separación entre conocimiento
científico y conocimiento humanístico. Estamos por tanto, ante
una disciplina muy joven que surge ante la necesidad de una
reflexión plural, como plurales son las moralidades actuales,
ante las nuevas posibilidades de actuar sobre la vida humana
y también sobre la biosfera. Los dilemas éticos surgen a diario
en la práctica profesional y en la investigación, y desde ambas
llegan al gran público, a través de los medios de comunicación,
pendientes, cada día más, del último logro técnico.
La bioética pretende hacer aportes y reflexiones al
complicado mundo de la ciencia y de la ética, por ello es de
manera interdisciplinar donde reúne conocimientos científicos,
antropológicos y éticos para elaborar sus decisiones. La ciencia
es la primera que debe responder a preguntas simples, ya que
esto permite clarificar la discusión ideológica actual. La filosofía,
específicamente la ética, debe orientar la responsabilidad que los
seres humanos deben retomar en sus acciones cotidianas y
científicas, que actualmente aparecen alteradas y confusas. La
ciencia no debe ser vista como absoluta, a la cual todos debemos
subordinarnos, y los científicos o dedicados a la ciencia no deben
dejar de lado los valores inherentes a la vida y conducta humana.
El avance tecnológico no sólo afecta al contexto, sino que
tiene un gran impacto en la sociedad, en la cultura, y a través
de los medios de comunicación social, en las actitudes de los
ciudadanos y en la propia intimidad personal. Hoy nuestra vida
también es tecnología, lo cual es positivo en algunos aspectos
pero que al mismo tiempo pone en encrucijada los elementos
éticos. El desconocimiento de la tecnología causa temor, por lo
que actúa como barrera ante el desarrollo tecnológico. Sería
más bien intentar ser prudentes ante las posibles efectos y el
78 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

respeto a los otros, como un primer punto de partida. El temor


no puede suplir la responsabilidad de las acciones propias,
tanto de los científicos, como de aquellos profesionales que
aplican día a día la biotecnología.
Uno de los grandes retos que afrontaremos en el siglo
XXI es el de crear una cultura sociopolítica basada en los
principios sancionados en la Declaración Universal de
Derechos Humanos (DDHH) como punto de encuentro
común y pluricultural, que se alza como una meta a nivel
mundial. Esta Declaración, con muy pocos años de
existencia, ha sido capaz de marcar a través de la
Organización de las Naciones Unidas (ONU) unas
directrices de actuación hacia la unidad y convergencia que
se muestran como esperanzadoras ante un mundo dividido
por religiones, culturas, sistemas políticos e ideologías. El
gran aporte de la DDHH es el reconocimiento de la dignidad
intrínseca que todo ser humano posee, reconoce una
naturaleza humana anterior a cualquier política basada en
el consenso, o fundamentada en las libertades personales
que se convierte en fuente de jurisprudencia.
La Declaración une a toda la familia humana bajo una
misma dirección y muchos elementos confluyen gracias a la
tecnología de la comunicación, hacia una globalización de un
mundo que puede mirar al futuro, por una parte con
inquietud, pero a la vez con esperanza. Este nuevo avance en
la globalización y en el acceso a las nuevas tecnologías,
puede verse detenido por una creciente separación entre los
hemisferios norte, que engloba a los países desarrollados y
con acceso a éstas, y hemisferio sur, que necesita de nuevas
iniciativas en las políticas de desarrollo, pues puede
aumentar en una distanciamiento cada vez mayor. La DDHH
contiene implícitamente el concepto de igualdad de todo ser
humano. Ahora bien, esta igualdad debe pasar por la
promoción personal a través de la cultura.
LA BIOÉTICA Y EL TRABAJO SOCIAL • 79

También se presenta como un elemento que aporta


disgregación en contra de la unificación, que vemos como
deseable y necesaria, para afrontar los grandes retos que nos
ofrecen las biotecnologías3. Este distanciamiento se materializa
en un enfoque diferente en cuanto al abordaje de los nuevos
dilemas éticos, como puede ser: la intervención o manipulación
embrionaria. Una ética universal se hace necesaria debido a
posturas distintas ante un mismo problema; de la misma forma
que tiende hacia la unidad y transparencia en los conocimientos
científicos. Los grandes países desarrollados con pleno acceso a
la biotecnología, representados por Estados Unidos y la
Comunidad Europea, presentan en sí mismos divergencias en
cuanto a la bioética. A un español, Diego Gracia, se debe la
introducción del término Bioética mediterránea, en la
Encyclopedia of Bioethics en contraposición a una Bioética
norteamericana. Diego Gracia (España) y Albert Jonsen (EEUU)
se han reunido para iniciar un diálogo que se podríamos llamar,
de acercamiento intercultural. Se ha puesto de manifiesto que la
tradición anglosajona ha desarrollado una ética basada más en
el deber-derecho, en contraposición a la ética mediterránea,
basada en una ética griega, que se fundamenta en el binomio
virtud-vicio. El origen de ambas posiciones es disipar, con lo cual
intervienen complejos factores culturales, que han inducido el
estado actual de los elementos, para analizar desde la bioética.
La bioética americana se basa y parte en su análisis ético
de los principios éticos básicos que sirven como base para
justificar muchos de los preceptos éticos y valores particulares

3. «bio», del griego βιος que significa vida, y que dará a comienzos del siglo
XIX, biología, estudio de la vida, y de tecnología, τεχμη, empleada ya en la
Antigüedad y que designa a partir del siglo XVIII el estudio de las técnicas, de
los instrumentos, de las máquinas y de los materiales.
http://www.fiuc.org/fiucga2003/GABiotechnoESP.doc
80 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

de las acciones humanas. Este acuerdo general alcanzado por


The National Commision for the Proteccion of Human Subjects
of Biomedical and Behavioral Research, en 1978, declara
como los principios más relevantes de la cultura americana
para la ética de la experimentación los siguientes: los principios
de respeto a las personas, que reconoce la autonomía, tanto de
las personas que la poseen como de aquellos en las que se ve
disminuida la beneficencia y justicia. Este modelo propuesto ha
tenido una gran difusión en la bioética para el análisis de casos
y su aplicación en la práctica clínica, especialmente por la
publicación del modelo propuesto por Beauchamp y Childress
para resolver los conflictos y los límites éticos. La propuesta de
estos autores omite una jerarquía objetiva de los principios y
refiere el deber prima facie que genera controversia según el
énfasis puesto en uno u otro principio y la teoría ética de la que
se parte para elaborar un análisis. El resultado se aleja por
tanto de una ética universal que pueda basarse en los citados
principios bioéticos propuestos para llegar a un acuerdo total de
la sociedad americana. Reflejo de esta situación de conflicto de
las partes implicadas ante el dilema ético es el aborto, que
como dice Ronald Dworkin, está lacerando a Estados Unidos.
Está también distorsionando su política y creando confusión en
su derecho constitucional. “El análisis ético a la luz de los
principios bioéticos genera problemas irresolubles en la
priorización de éstos. Debemos a la bioética norteamericana el
gran desarrollo del consentimiento informado, recogido en las
leyes sanitarias que nos acerca a la participación en la toma de
decisiones por parte del enfermo, al igual que la sensibilidad
ante el deber, que el latino no posee.
La bioética mediterránea lleva muchos siglos en busca de
soluciones en los dilemas. Es necesario recordar que la cuenca
del mediterráneo ha aportado al mundo las bases del
conocimiento y del método científico, incluso antes de la
aparición de la influencia de la cultura cristiana, de rápida
PRESENTACIÓN CUADERNOS DE MARGEN • 81

extensión por Europa. Nuestra bioética, influenciada por el


principismo americano y por los filósofos del derecho, ha
olvidado que se puede partir de la dignidad intrínseca de todo
ser humano proclamada por la DDHH y su proximidad a toda
nuestra tradición cultural, que erige al ser humano en corolario
y criterio último de actuación. Se encuentra en falta una
unificación de criterios bioéticos en cuanto a la definición de lo
que es el bien para el hombre: el bien que debería estar
comprometido en todos y cada uno. Estados Unidos descubre
en Europa valores como la solidaridad, por ejemplo, en nuestro
Programa Nacional de Transplantes, en el cuidado de los
enfermos terminales y en el sentido de ciertas virtudes como la
amistad y la confianza.
Las diferencias nos sitúan en una bioética americana con
unos rasgos basados en el derecho-deber, en contraposición a
una bioética europea muy influenciada por la filosofía griega que
parte del binomio vicio-virtud y que ha realizado un aporte
importante por la investigación filosófica en cuanto al término
persona. Se puede hablar de características diferentes, pero
requerirán estudios comparativos para delimitar estos aspectos
que nos alejan pero que con un diálogo de ambas partes pueden
y deben llegar a acuerdos y enriquecimientos mutuos en aquellos
elementos que reunifiquen los criterios de actuación ante los
dilemas éticos en que hoy adoptamos posturas dispares.
Los principios y valores contenidos en la DDHH (y la
identidad) aunque no se cite explícitamente, la referencia a la
investigación sobre el ser humano puede ser un lugar de
encuentro de las bioéticas: americana y europea. La
biotecnología no puede poner a su servicio al hombre, al
contrario, ella debe servir a todo ser humano, aceptando
aquello que la ciencia confirma en su existencia.
El Trabajo Social surge como profesión a fines del siglo
XIX, cuando se identificaron (complejidad, magnitud y
trascendencia) las necesidades, al no ser superadas (crisis,
82 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

vulnerabilidad, pobreza extrema etc.), se pensó en un actor


que pudiera contribuir, apoyar, orientar, y atender: el
Trabajador Social. Otro de los factores que afloró fue la urgente
necesidad de compartir, la responsabilidad, el Estado y la
sociedad, para prevenir y atender a los necesitados; por tal
motivo no nos queda duda de la vinculación entre la bioética y
la operatividad de los Trabajadores Sociales (Integralidad).
En México el Trabajo Social surge por las enormes
desigualdades, al igual que el incremento de la vulnerabilidad4
a principios de siglo, con las brigadas, de las escuelas rurales.
Un principio de la bioética se refiere a la urgente
necesidad de una nueva sabiduría que le proporcione
elementos para usar el conocimiento, para la supervivencia del
sujeto, en un marco de democracia, equidad y solidaridad.
El Trabajo Social que brinda apoyo socio-educativo y de
asistencia a la comunidad vulnerable con una idea central de
servicio (la atención social, constituye un derecho —
compromiso— de todos los seres y una obligación del Estado y
la comunidad. La integración de sujetos en sociedad, las
diferencias abismales entre los hombres y las mujeres, entre los
ricos y los pobres, los poderosos y los desposeídos, generan
pobreza, marginación, inequidad, etc., que ha producido al
mismo tiempo una necesidad imperiosa de atención social, que
debe ser idealmente holística, multi y transdisciplinaria e
intersectorial, lo que requiere instrumentación, reglamentación e
infraestructura). Inicialmente caridad, filantropía, beneficencia,

4. La vulnerabilidad está configurada por una serie de características,


elementos, circunstancias y categorías, cuyo común denominador es la
susceptibilidad de ser herido, atacado, abusado, perjudicado, dañado, etc., es
una condición en una dimensión determinada. Los indicadores en el ámbito
social más frecuentes son: pobreza, marginación, desintegración familiar,
capacidades diferentes, crisis, migración y otras situaciones similares
provocadas por ausencia de políticas protectoras y generadoras de bienestar.
LA BIOÉTICA Y EL TRABAJO SOCIAL • 83

asistencia social y hoy trabajo social. La disciplina que investiga,


planifica, gestiona, evalúa y propone, con una visión
democrática coparticipativa y responsable, para mejorar la
convivencia de los sujetos, a través del desarrollo de sus
potencialidades, en la búsqueda (ruptura, paradigmática, etc.)
de su evolución, mediante el uso (racional y justo) de los
recursos, quizás el punto inicial de la utopía y el fin, “la justicia
social, el desarrollo integral”, la felicidad; de ahí su vínculo con
la bioética.
Para dilucidar el qué y el cómo, habrá que diferenciar
ciencia,5 disciplina6 e identificar su vertientes, con la bioética;
íntimamente vincular las ciencias a la filosofía, la biología y a
las ciencias sociales que en general no son alternas o, una
compilación-resumen, están entre-ligadas

5 Ciencia: conjunto de conocimientos ordenados, racionales y sistemáticos,


que interpretan, predicen y explican la realidad. El conocimiento científico nos
lleva a ver en la realidad lo que otros no han visto, esto es, va más allá del
simple ver, para lo cual se apoya en el método y la investigación científica. El
hombre de ciencia busca que su conocimiento sea más que el simple ver; por
ello logra con su conocimiento diferentes interpretaciones de la realidad, y
puede lograr modificarla. Ciencia, conjunto de conocimientos sistemáticamente
adquiridos y verificables.
6 La disciplina es un conjunto de elementos de un campo determinado de la
ciencia, cuyo objeto de estudio es: analizar y operacionalizar en la realidad,
procesos, actividades, intervenciones, etc. con evidencia, método y
redescubrimiento de índoles relativo (dinámico, en formación, aporte, etc.). La
concepción del Trabajo Social como disciplina científica en relación con los
fundamentos reales, imaginarios y simbólicos de los condicionamientos y
sobredeterminaciones de las acciones y no-acciones de las clases subalterno-
populares (que no son tales si no es en relación con los grupos y clases no
populares), plantea ya la cuestión del encuadramiento de aquél dentro del
sistema mismo de las ciencia específicamente social; asimismo, de la
inscripción de ésta dentro de la especificidad de eso que se denomina Trabajo
Social.
7 Ciencia que se desprende de la filosofía. De este modo, la ética profesional
de los Trabajadores Sociales no puede desvincularse de la ética social, es decir,
84 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

(multidisciplinariedad- interdisciplinariedad-
transdiciplinariedad).
La ética7 es considerada la base y la línea visionaria de
la sociedad. Para los Trabajadores Sociales resulta un
elemento de solidificación, que en la actualidad debiere
florecer. Su formación está saturada de elementos éticos
(pública y social) y por tanto, su análisis debería ser una
prioridad de su práctica profesional que inevitablemente la
llevará a poder enfrentarse a problemas éticos, que en su
naturaleza última son teóricos e ideológicos (proceso de
retroalimentación, en base a valores universales y
específicos).
La esencia de la bioética está en el hombre (filosofía, ética,
historia, sociología, antropología etc., y su entorno8) (Ecología).
Se pretende relacionar la naturaleza y el conocimiento cuyo
objetivo, al igual que el de muchos otros haceres, es servicio
social. La sociedad contempla ideales, realidades, positivo y
negativo. La idea central de los profesionales del Trabajo Social
es sin lugar a dudas el desarrollo personal y social, en un
marco de derecho y legalidad, con equidad en sistemas
democráticos (participación) y con oportunidades, para
aprovechar potencialidades y minimizar debilidades.
La Bioética consiste, por tanto, en la comunicación
congruente de índole interdisciplinaria multidisciplinaria y
transdisciplinaria, con la vida (fisiología, anatomía,
histopatológica, etc.) y ética. En la propuesta de la bioética

8. Ecología y medio ambiente: es el estudio de la relación entre los organismos


y su medio ambiente físico y biológico. El medio ambiente físico incluye la luz
y el calor o radiación solar, la humedad, el viento, el oxígeno, el dióxido de
carbono y los nutrientes del suelo, el agua y la atmósfera. El medio ambiente
biológico está formado por los organismos vivos, principalmente plantas y
animales. http://ecositio.tripod.com/
LA BIOÉTICA Y EL TRABAJO SOCIAL • 85

como disciplina que combina lo referente con lo biológico y


el desarrollo humano que no puede estar subordinado, ni a
la filosofía (Filo, conocimiento; Sofía, sabiduría). El
reexaminar su visión del mundo es faena de la bioética.
Por su parte, Abel (2001) definía la Bioética como “el
estudio interdisciplinar (transdisciplinar) orientado a la toma de
decisiones éticas de los problemas planteados a los
diferentes sistemas éticos por los progresos médicos y
biológicos, en el ámbito microsocial y macrosocial, micro y
macroeconómico, y su repercusión en la sociedad y su
sistema de valores, tanto en el momento presente como en
el futuro.” Al igual que el Trabajo Social (arte, técnica,
ciencia o disciplina) trabaja, no sólo con el sujeto y su
entorno (físico estructural etc.), sino con el sujeto en
sociedad y el entorno. Además es fundamentada la historia y
su identidad.
Tomamos de Juan Luis Vives un código9, con algunos
aspectos, que hemos llamado “vitales”, en la relación existente
entre bioética y Trabajo Social, y que se denomina ejes del
quehacer profesional:

• Respeto del hombre en forma integral, en su contexto y


en su condición (confiabilidad, discreción y veracidad)
• Existe una urgente necesidad para ejecutar
organizadamente una(s) acción(s) inmediata(s)
mediante la participación comunitaria y compromiso
social, en aras de re-construir la armonía. Por lo que

9. Código es algo que consideramos imprescindible como una primera medida


para dotar al profesional de una capacidad de lucha contra el prejuicio y la
inercia de la rutina. Hay que evitar el fanatismo, el reduccionismo técnico y la
aceptación irreflexiva de pautas morales de la acción profesional.
86 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

cada uno debe trabajar “mediación” con “tolerancia”


para reformular la supervivencia (evolución con
libertad y orden “armonía-integral”).
• El desarrollo de la humanidad debería ser integral, no
sólo en el área biológica, sino considerando la historia, la
cultura y la realidad. Weber, 1999, señala “día a día
creamos, el sujeto es resultado de su vivencia y entorno”.
El fortalecimiento de la propuesta constructivista10 podría
ser la clave para el desarrollo. El sujeto y la sociedad
como corresponsales del bienestar social.
• Oír, la comunicación de las diferentes concepciones,
sean de mayorías o minorías son substantivos. Libertad
en la legalidad y con normas y consenso (la
comunicación mediante la identificación del código, el
medio y la retroalimentación).
• La salud es una necesidad, y ésta debería contemplar
aspectos, no sólo físicos, sino sociales y ambientales. La
sociedad es dinámica, el hombre es el constructor. Habrá
que redescubrir lo positivo/factible/integral (potencialidades
y limitaciones) y tener visión de comunidad.
• La dignidad y la voluntad son indispensables para
ayudar a los semejantes cuando se sientan afligidos y
trabajar, con el objetivo de evitar el sufrimiento inútil; de

10. Los constructivistas conciben a la ciencia de un modo dinámico,


humano, que se transforma periódicamente por reconceptualizaciones
radicales. Incluso, una vez aceptadas, esas visiones del mundo se
modifican, es decir, se reconstruyen. El constructivismo está basado en la
premisa de la formación de significado. Ser humano supone realizar esfuerzos
activos para interpretar la experiencia, buscando propósito y significado en los
acontecimientos que nos rodean.
ORTIZORTIZ, María Gloria. Revista Tarea [en línea]. Disponible en:
h t t p : / / w w w. l a t a r e a . c o m . m x / a r t i c u / a r t i c u 1 1 / m g o r t i 1 1 . h t m
LA BIOÉTICA Y EL TRABAJO SOCIAL • 87

igual forma, buscar el equilibrio y la mejora continua


(congruencia y compromiso).
• El trabajo en equipo es vital (acciones, actividades,
procesos de e inter-sujetos, con ideales o metas
comunes; donde existe sentido de partencia y mutua
ayuda).
• La vulnerabilidad es causa y efecto no necesariamente
del sujeto pero sí de la sociedad, su historia y contexto.
• El hombre es el eje; siempre está en evolución. Las
patología orgánicas sólo son elementos, pero su
grandeza es mayor histórica y social.

Habrá mucho más que significar pero trabajamos en la


atención social, no debemos olivar el compromiso,
contrariamente con el “utilitarismo/yoyología”11 que se va
imponiendo gradualmente en la ciencia. Sabiduría viene de
supere, gustar. La verdadera sabiduría es capaz de gustar y
sentir interiormente. Los profesionales del Trabajo Social son
todos aquellos que practican una actividad que los legitima
como miembros de una sociedad humana y que constituye su
realización y su fórmula o paradigma para sí. Lo sustantivo o
esencial se refiriere a los valores (la honestidad, el
compromiso, el respeto, la individualidad; etc.), en la
formación no puede ser ajena al mundo de las necedades de
los sujetos. La tecno-ciencia y la ética deben encontrarse por
dos razones complementarias o pluripotentes. Es en el terreno
humano donde debe plantearse el progreso.
¿Es lícito utilizar-vejar-humillar-desconocer-controlar-no
atender, etc. a un ser humano-sujeto-paciente-cliente, como
medio y no reconocerlo como un fin en sí mismo? ¿qué

11. Yo primero, Yo todo, Yo absoluto.


88 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

sucede con los sujetos vulnerables (sin oportunidades, sin


desarrollo, con riesgos etc.)? ¿cómo tratar a los seres con
capacidades diferentes, etc.?
Son muchos los ejemplos, pero en un hospital de pediatría
en el servicio de pre-escolares, en el área oncológica, el hacer
del Trabajador Social deberá considerar no sólo aspectos
anatomo-fisiológicos sino que deberá intervenir en la atención
integral de paciente/cliente o su familia, investigando
(características y categorías) sobre el menor, su núcleo social,
el contexto; la economía (vivienda-alimentación-trabajo,
seguridad social, etc.) sus relaciones y cómo éstas se
vinculan con la patología (biología). Los valores éticos
(Filosofía/Epistemología), costumbres, hábitos, idiosincrasia,
mitos, ¿de qué manera inciden en la atención del menor?
Para diseñar, ¿qué acciones/actividades, (estrategia y
tácticas) se instrumentarán (metodológicamente) previo
diagnóstico social (causas-efectos y realidad) para
estruccturar la planificación, de mejora-rehabilitación, en un
proceso evaluatorio: preventivo y remedial, con énfasis en los
socio-educativo, sin olvidar los recursos, las potencialidades
y los posibles alcances?
Para lo cual los registros, los procesos y la organización
resultan valiosos, de lo que surgirá la sistematización y la
construcción, que necesariamente modificará o re-
conceptualizará la disciplina (cambio de paradigma 12,
modelo o constructo, con aval del conocimiento, producto del
proceso metodológico y/o de la intervención racionalidad,
sistematicidad y objetividad/pensamiento empírico/dinámica
social y la sistematización de la práctica).
En el ámbito del desarrollo comunitario, el hecho de

12. KUNT Tomas. 1962. El paradigma se define como el modelo, prototipo


que comparte una comunidad científica.
LA BIOÉTICA Y EL TRABAJO SOCIAL • 89

diagnosticar necesidades detectadas por lo expertos y reales a


través de un diagnóstico comparado, es un ejemplo de la
vinculación entre bioética y Trabajo Social; de igual forma los
análisis, las reflexiones y pospuestas socio-políticas y
filosóficas, generadas de la realidad (descubierta,
conceptualizado, evidente, etc.) y de la integralidad de un
estudio, son elementos o vertientes de la vinculación
disciplinar.
Por lo tanto, reflexionar-romper paradigmas: sobre la realidad
científica-social-bioética, necesidad, sustituido por el finalismo
resulta innecesario, ya que la globalización y la mundialización,
el incremento de la pobreza y la crisis de valores son evidentes
y lacerantes; salvar lo humano (integral) resulta imprescindible
y visionario, además de sano13. Por otra parte, el finalismo
parece connatural a la ética y, en general, a la actividad
humana. La idea de un finalismo general del mundo se forma,
probablemente, por analogía con la propia experiencia
humana. Nuestros actos, desde los más triviales hasta los más
decisivos, están ordenados con diversos fines, sin los cuales
carecerían de sentido, se volverían absurdos y no nos
permitirían sobrevivir: de igual modo, el mundo, y dentro de él
el conjunto de nuestra vida, debe tener una finalidad, aunque
esa finalidad no pueda ser la nuestra, sino la de una voluntad
o designio que nos sobrepasaría de modo completo y
abrumador, y que por eso mismo es objeto de fe. Nadie hoy en
día hace ciencia pura, aquella ciencia o sabiduría. De ahí la
importancia del rescate de la experiencia, del trabajo cotidiano,
de las vivencias en relación, en procesos de sistematización,

13. La salud no sólo es la ausencia de enfermedad sino también el completo


bienestar físico, mental y social. Además de la capacidad del sujeto para
adaptase en su contexto. O.M.S 1994.
90 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

para la creación de conocimientos, en donde los trabajadores


sociales habremos de conocer la realidad, sustentante
teóricamente y proponer esquemas de intervención sólidos y
acordes al valor del sujeto como eje de la sociedad en un
contexto determinado y con fortaleza ética, en la creación de la
sociedad.
La operatividad del Trabajo Social y su evolución, como
quehacer profesional están íntimamente relacionadas con el
proceso y retroceso económico-político en las diversas
sociedades del mundo. Creemos que lo esencial en el ejercicio
está en la solidaridad y la responsabilidad común.
Aunque evidentemente, lo anterior no desconoce el espacio
que hoy tenemos, de continuidad con las tareas y acciones
benéficas de índole asistencial, operadas por las diversas
instituciones, propugnamos por un nuevo modelo, en donde la
búsqueda de justicia con sentido humano sea la prioridad.
Ahora bien, no podemos olvidar que en el último tercio del
siglo XX, y ante la creciente complejidad de las situaciones
sociales, surge la necesidad estatal de crear una novedosa
forma de acción social, que contará con una mayor
consistencia teórico-metodológica, una mayor cobertura de
intervención y una orientación crítica que permitiera penetrar
en las causas provocantes de los enormes problemas sociales.
Esta nueva concepción y forma de acción social toma impulso
a raíz del movimiento de reconceptualización, que aparece
primordialmente en los países de América del Sur a mediados de
la década de los sesenta, y que muestra como características
principales reconocer el origen de la desigualdad social a partir de
las relaciones de explotación del sistema capitalista, además de
cuestionar fuertemente las propuestas de integración de los
individuos “disfuncionales” al orden social imperante.
Al contar con aquellos elementos de análisis, se propone
reformular las orientaciones y los objetivos asistencialistas,
y así se configura la creación de la última y más
LA BIOÉTICA Y EL TRABAJO SOCIAL • 91

sistematizada forma de acción social.


Según Ezequiel Ander Egg, el Trabajo Social se define
como: “Un modo de acción social que supera los enfoques y la
concepción asistencialista, y pretende ser una respuesta
alternativa a la problemática social. De ahí que se atribuya una
función de concientización, organización y movilización de los
sectores populares o marginados. Función que es compartida
por otros ámbitos profesionales y otras esferas de actuación. Lo
específico de este quehacer, son los proyectos o intervenciones
propias, ya sea en la prestación de servicios o en la acción
social, que pretenden generar la autogestión de individuos”.
Grupos o comunidades, que insertos críticamente y, dentro
de lo posible, actuando o participando dentro de sus propias
organizaciones, contribuyan a la transformación social.
En el México actual, sobreviven y cohabitan diferentes
formas de ayuda y acción social, desde la óptica religiosa
hasta el Trabajo Social, cada una con sus características
específicas y sus espacios de intervención delimitados, pero
la práctica del Trabajo Social constituye una actividad que
rebasa en alcance, cobertura y trascendencia, aunque dentro
de la misma práctica profesional existan propósitos y
finalidades diversas y enfrentadas que le imprimen
orientaciones contradictorias en su quehacer.
Es importante mencionar que el término Trabajo Social
contiene múltiples y variadas connotaciones, empleadas de
acuerdo al contexto donde se desarrolla, incluso, en
diferentes ocasiones y realidades se utiliza como sinónimo de
Asistencia o Servicio Social, pero independientemente de la
denominación, la diferencia entre estas formas de acción
social está dada por sus objetivos, por el nivel de intervención
y por la solidez de su orientación teórico-práctica. Sin
embargo, dentro de la misma acción profesional del Trabajo
Social interactúan diferentes niveles, enfoques y orientaciones
que, incluso, son contradictorios y que en ocasiones
92 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

efectivamente son equiparables a las actividades y visiones


de anteriores formas de ayuda y acción social. Por ello, es
necesario ubicarlas, delimitarlas y contextualizarlas como
procesos incesantes y no como mecánicas evoluciones o
mágicas apariciones. Nuestra propuesta está encomiada a ser
críticos, humanistas y profesionales, a construir con los
sujetos, formas o consensos que mejoran la calidad de vida.
La definición que aporta la Escuela Nacional de Trabajo
Social de la UNAM sintetiza de manera clara y precisa la
labor de la profesión:

“Trabajo Social es la profesión que interviene


directamente con los grupos sociales que presentan
carencias, desorganización o problemas sociales”.

Para Anguiano (2005) El Trabajo Social es una disciplina


(tecnología-técnica-ciencia de lo social) de las Ciencias
Sociales, con visión de equidad y justicia, cuyo profesional
intervine en diferentes áreas (salud, justicia, educación,
servicios, etc.) con metodologías participativas, organizando y
facilitando procesos: socio-educativos y de desarrollo;
formando equipo (técnico) con el sujeto, grupo o comunidad:
en la mejora continua, en aras de su desarrollo. Sus
competencias son: investigación, planificación, evaluación,
gestión, educación social; prevención, atención y rehabilitación
de la vulnerabilidad, y esencialmente, proponer políticas
sociales y públicas que solidifiquen la solidaridad y dignifiquen
al sujeto (calidad-ética-posicionamiento-integralidad).

Desde el punto de vista epistemológico, es importante que


las Ciencias Sociales y el Trabajo Social coloquen su atención
en un nuevo paradigma, cuya característica sea la Integralidad,
la vinculación entre disciplinas y ciencias, que rescaten la
experiencia, la cultura y el contexto, como marco de desarrollo.
LA BIOÉTICA Y EL TRABAJO SOCIAL • 93

Las prácticas significantes; aquellas que: organizan y


construyen relaciones que los sujetos sociales, resignifican
como portadores, creadores o intérpretes de significado y en
cuyos procesos de configuración cumple un papel definitorio y
cotidiano.
“Uno de los cambios importantes que empieza a operarse
en el andamiaje teórico-explicativo del Trabajo Social es el
desplazamiento y abandono de categorías economicistas
(niveles de consumo, ingresos procesos de producción, valor de
cambio, valor de uso, entre otras) mediante las cuales y de
manera determinante se solían nombrar muchas de las
situaciones sociales. La satisfacción de las necesidades sociales,
está ligada hoy más que nunca a expectativas, deseos y
aspiraciones, no sólo materiales sino simbólicas y culturales, y
en los procesos de exclusión-integración cobran especial
significación perspectiva, de género, de grupo, de sexo,
ecológicas y culturales, entre otras que desbordan las visiones
economicistas. Desde el punto de vista cognitivo es necesario
cambiar la perspectiva de lo observable, lo medible y lo
verificable, y darle a la posibilidad de nombrar el mundo de lo
intangible y lo posible, el vincular lo biológico con lo social
resulta prioritario.
Las nuevas institucionalidades, originadas por el
desplazamiento del Estado en la regulación y control de la
sociedad, definen la aparición de modernos escenarios de
actuación profesional y la ampliación de horizontes, no
avizorados formal ni estructuralmente. La singularidad histórica
del momento actual plantea el Trabajo Social la necesidad de
compaginar, en el análisis de lo biológico-social, elementos
tanto de la coyuntura local como de la global, diferenciándo lo
propio de lo externo. Hoy más que nunca se torna imperiosa la
recuperación de la dimensión social del Estado, la
reconstitución del tejido social y la erradicación de la pobreza”.
Hoy los profesionales del Trabajo Social con grandes lagunas,
94 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

socio-teóricas, tenemos un compromiso de modificación


conceptual, de rescate de una visión holística, que genere en la
sociedad verdaderos escaños de mejora, que actuemos para
incorporar políticas públicas de protección y seguridad, sobre todo
potencializando las oportunidades y minimizando las limitaciones.
Por ello, promover el desarrollo integral, (holístico) mediante
la organización y formación de la población para satisfacer sus
necesidades, en un marco de justicia y de ética, en la búsqueda
de una nueva sociedad, en permanente cambio, buscando con
ello mejorar, podrían ser los argumentos con mayor congruencia
para justificar la vinculación entre la bioética y hacer social.
Por lo antes explicitado, habrá mucho más que describir
y argumentar ciertamente, la biótica y el trabajo social están
ligados; si los profesionales de la atención de lo social y la
disciplina—ciencia, de la bioética no se racionalizan, el
andamiaje de lo social no podrá intervenir con eficacia e
integralmente, en la atención de la vulnerabilidad, que no sólo es
un elemento fisiológico o económico, cultural, histórico, etc., sino
una problemática de un actor social, con presente y futuro. En un
contexto determinado, con una perspectiva del mundo, en un
sistema globalizado y con medios y recursos para potencializar su
desarrollo.
Finalmente, el Trabajador Social tiene una historia, un
presente y habrá que construir, con su experiencia,
investigación-sistematización: la ciencia social, en un ambiente
o entorno de cientificidad, sin perder el sentido: hombre-
sociedad, son el eje, lo fundamental, su razón profesional y su
desarrollo integral.
LA BIOÉTICA Y EL TRABAJO SOCIAL • 95

BIBLIOGRAFÍA

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Palabra. S.A.
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96 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

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http://www.fiuc.org/fiucga2003/GABiotechnoESP.doc
http://www.ujaen.es/dep/derpen/filmoral/asignaturas/eticaylgen.html
LA SALUD Y EL JUEGO

LIC. EDITH RAVICOVICH (PSICÓLOGA) / LIC. DÉBORA BOYADJIAN


(TRABAJADORA SOCIAL) / LIC. SILVIA MARCECCA (TRABAJADORA SOCIAL)

INTRODUCCIÓN
Este trabajo dará cuenta de un proyecto de juegoteca destinado
a los niños del barrio de Villa 15 y Núcleo Habitacional
Transitorio, sito en Av. Eva Perón 6600, Capital Federal. Dicho
proyecto se lleva a cabo por miembros del equipo profesional
del Centro de Salud y Acción Comunitaria Nº 5, perteneciente
al Área Programática del Hospital D. F. Santojanni, en
cogestión con otras dos instituciones, también dependientes del
Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
El trabajo consta de varias partes: el marco teórico
intenta dar cuenta de los conceptos utilizados que guiarán
nuestro posterior análisis, y de la interrelación entre la salud
y el juego. En el análisis se desarrollan las experiencias
anteriores que nos llevaron a pensar en la posibilidad de
generar una juegoteca en el Centro de Salud y Acción
Comunitaria Nº 5. Luego nos abocamos a describir y
analizar el proceso de formación de la juegoteca, llevado a
98 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

cabo, a partir de un trabajo en red, por profesionales de


distintas instituciones: Centro de Salud y Acción
Comunitaria N° 5, Servicio Social Zonal Nº 8 y Centro de
Acción familiar Nº 8.
Y por último, analizamos el espacio de juego en sí mismo,
el devenir del proceso grupal, y concluimos que el juego es
indispensable en la salud de los niños. Creemos que es
importante dar a conocer esta experiencia porque, entre otros
aspectos, resulta una forma de trabajo innovadora en el ámbito
de la salud. El juego deviene una estrategia que nos permite la
concreción de los objetivos profesionales de Prevención,
Promoción y Protección de la Salud, entendiendo a ésta desde
una perspectiva amplia, no como cono ausencia de
enfermedad, sino también como un proceso en el cual se
implican múltiples variables bio-psico-sociales.

OBJETIVOS

Objetivo general:

• Analizar la importancia del juego y su vinculación con la


salud de los niños.

Objetivos específicos:

• Dar a conocer la experiencia de creación y


funcionamiento de la juegoteca de “Villa 15”, llevada a
cabo en el Centro de Salud y Acción Comunitaria Nº 5.
• Socializar el proceso de trabajo en red que permitió la
creación y posterior funcionamiento de la juegoteca de
“Villa 15”.
LA SALUD Y EL JUEGO • 99

MARCO TEÓRICO CONCEPTUAL

“... Quede bien entendido que el hombre sólo


juega cuando es plenamente tal y sólo es hombre
completo cuando juega”
F. Shiller

Concebimos al niño como sujeto de derechos. Respecto de


estos últimos, la Convención Internacional de los Derechos del
Niño en su artículo 31 enuncia que: “Los Estados partes
reconocen el derecho del niño al descanso y el esparcimiento,
al juego y a las actividades recreativas propias de su edad y a
participar libremente en la actividad cultural y en las artes”.
Nos gustaría en principio arribar a una definición acerca del
concepto de juego, en relación con ello hacemos nuestra la
concepción de J. Huizinga, quien manifiesta que el mismo es
“una acción o una actividad voluntaria realizada en ciertos
límites fijos de tiempo y lugar, según una regla libremente
consentida pero absolutamente imperiosa, provista de un fin en
sí, acompañada de una sensación de tensión y júbilo y de la
conciencia de ser de otro modo que en la vida real”.
A nuestro entender el juego se constituye como una
actividad propia del ser humano independientemente de su
edad, sexo o condición económica. El mismo reúne una serie
de elementos que lo caracterizan:

• El juego es voluntario, es decir que no viene impuesto


desde fuera y se articula libremente.
• Es ficticio en el sentido de que se estructura mediante
una combinación de datos reales y datos fantaseados.
• Es incierto, pues no prevé pasos en su desarrollo y
posterior desenlace.
• Es reglamentado, por convenciones consentidas,
100 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

aceptadas, por quienes juegan.


• Produce placer, es divertido.
• Valora el proceso, también puede valorar sus resultados.
• Posee un espacio y un tiempo. El juego se desenvuelve
en una realidad aislada, separada cuidadosamente del
resto del mundo y a la vez protegida por límites muy
precisos en el espacio y en el tiempo.

Resulta necesario destacar la importancia que el juego tiene en


sí mismo, como expresión del niño y como actividad básica del
mundo infantil. Distintos autores significativos se han
manifestado respecto de él. Sigmund Freud manifiesta que
entre las peculiaridades psicodinámicas del juego se destacan:

a. que se basa en el principio de placer,


b. logra la transformación de lo pasivo en activo,
merced a lo cual el niño obtiene la vivencia de
dominio de sus experiencias traumáticas,
c. satisface el principio de compulsión a la repetición por
el aprendizaje que con él se logra y por el placer
derivado de la repetición misma.

“La teoría psicoanalítica establece la necesidad de


jugar como un elemento estructurante de la
personalidad del niño. Desde el momento más
temprano de la vida en el jugar se está
comprometiendo el ser, la constitución subjetiva del
individuo y la construcción simbólica del cuerpo (...)”

La teoría cognoscitiva (Jean Piaget) fundamenta la


necesidad de jugar en base a la función del juego en la
estructuración del pensamiento, en la forma como se construye
el conocimiento. La función del juego consiste para esta teoría
en satisfacer el yo merced a una transformación de lo real en
LA SALUD Y EL JUEGO • 101

función de los deseos, “el niño que juega con muñecas rehace
su propia vida pero corrigiéndola a su manera, revive todos sus
placeres o todos sus conflictos, pero resolviéndolos y sobre todo
compensa y completa la realidad, mediante la ficción”.
Para la medicina el juego entraña además la posibilidad
de estimulación temprana y desarrollo motriz y neurológico
del niño. Según Florencio Escardó, “el juego comienza por
ser en el bebé una actividad vital muy poderosa que encausa
el entrenamiento motor, postural, sensorial y la
comunicación con el mundo externo. Poco a poco va
adquiriendo poderosas cualidades psíquicas y centra la
época del pensamiento mágico y de la simbolización, para
llegar por fin a ser la escuela de la actividad organizada y la
aceptación de reglas, compromisos y sanciones”.
De todo lo expuesto se desprende que el juego es
esencial para el desarrollo físico y emocional del niño
indispensable para la conformación de su identidad.
Posibilita la comunicación y el aprendizaje, favoreciendo los
vínculos interpersonales y grupales y la exploración del
mundo que los rodea. El proyecto de juegoteca desarrollado
en el Centro de Salud y Acción Comunitaria Nº 5 se
encuentra enmarcado dentro de lo que se denomina
Atención Primaria de la Salud en tanto que se trata de un
servicio de promoción, protección y prevención de la salud
de la población que atiende. Por prevención se entiende a
“todas aquellas acciones que se llevan a cabo para evitar la
producción de un daño o vulneración de un derecho o bien,
que tiendan a limitar sus consecuencias, colocando al
sujeto o grupo afectado en una situación de mayor
seguridad física, psicológica o social y orientándose al
autovalimiento”.
Se distinguen cuatro niveles de prevención, inespecífica,
primaria, secundaria y terciaria. Nuestro trabajo se enmarca
dentro del primer nivel, llamado inespecífico, que consiste en
102 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

“una estrategia tendiente a fortalecer la capacidad de los


sujetos (personas, familias, grupos y organizaciones sociales)
para promover conductas y encarar iniciativas a partir del
ejercicio de su capacidad creativa, su libertad, su
participación y su solidaridad. Tiende a fortalecer el tejido
solidario de una comunidad o grupo organizado”.
La juegoteca deviene un espacio legítimo de prevención
inespecífica pues con su accionar tiende a evitar que se
produzca un daño o vulneración de un derecho y le devuelve el
protagonismo al niño, brindándole un lugar como tal.
Se constituye también en un espacio de promoción de la
salud en tanto que el juego permite el desarrollo integral de las
distintas capacidades del niño, podemos destacar entre ellas
las afectivas, creativas, intelectuales, motrices, solidarias etc. y
de protección de la salud, en tanto “jugar” resguarda a los
niños de situaciones consideradas de riesgo entendiéndose por
tal: “la probabilidad de que se produzca un daño” .
Consideramos que en este caso, el daño que se podría
producir en el niño sería la pérdida de su mundo infantil, un
mundo donde la fantasía y el juego tienen una importancia
fundamental ya que les permite crear un orden propio ante las
distintas dificultades que se pudieran presentar, un espacio en
el que deberían ser protegidos y guiados por los adultos.
La juegoteca configura un espacio grupal. La formación
de un grupo es algo más complejo que la sumatoria de los
individuos que lo componen, para que éste sea considerado
un grupo sus miembros deben hacer un proceso de
integración dinámico que supone una sucesión de etapas y
operaciones de resolución de problemas.
El proceso grupal es dinámico, manifiesta cambios, es
decir, va pasando por distintos momentos en los que se trata de
crear un espacio colectivo para la acción y la reflexión, que se
nutre de los aportes de cada integrante modificados por la
presencia del otro, trascendiendo los conflictos individuales e
LA SALUD Y EL JUEGO • 103

incluyéndolos a la vez. El grupo es el lugar de la humanización


del conflicto y del cambio posible.
Para lograr nuestros objetivos no concebimos otra forma
de trabajo que no sea en red, entendiendo a la misma como
un conjunto de grupos, organizaciones, instituciones e
individuos que establecen relaciones e intercambios de
manera continua con el fin de alcanzar metas comunes en
forma efectiva y eficiente. El propósito u objetivo específico
común a los miembros de una red es la razón de ser de la
misma, es lo que articula y convoca a los distintos actores
sociales. “Una red es un espacio de trabajo donde se
potencia el intercambio y se reciclan experiencias, se genera
un tejido humano que promueve la participación no
jerárquica, se establecen relaciones e intercambios en
múltiples direcciones” .
Permite pensar conjuntamente y desde distintos lugares
una misma problemática ampliando la mirada sobre ella, con
el único fin de satisfacer mejor la necesidad de la comunidad y
de brindar un mejor servicio.

ANÁLISIS DE LA EXPERIENCIA

Un poco de historia

A partir del año 1998 aproximadamente, como equipo


profesional comenzamos a interiorizarnos sobre la presencia de
juegotecas que funcionan en el ámbito de la salud, tanto en
hospitales especializados en niños, como en centros de salud y
acción comunitaria de la Capital Federal. Nuestro proyecto
nace en el año 1999 a través de lo que denominamos
“Juegoteca Ambulante” y consistía en la realización de talleres
de juego en distintas instituciones del barrio. La experiencia así
llamada fue llevada a cabo por tres profesionales del Centro de
104 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Salud en dos Jardines Maternales de Villa 15.


La juegoteca ambulante se nutrió de dos instancias
anteriores que sentaron precedente en cuanto al juego,
ambas desarrolladas en el centro de salud. Una de ellas fue
la creación de un espacio lúdico en la sala de espera de
pediatría y la segunda fue un espacio de juego que
funcionaba en el Servicio Social para todos aquellos niños,
cuyas mamás asistían a la consulta. La juegoteca ambulante
tuvo lugar entre los meses de abril a diciembre y tenía una
frecuencia semanal, realizándose talleres de juegos en
dichas instituciones. La población beneficiaria eran niños
que tenían entre dos y cinco años. La intención del proyecto
era brindar espacios de juego a los niños y trabajar con los
cuidadores sobre la importancia que tiene el juego en la vida
del niño. Ambos objetivos se cumplieron satisfactoriamente.
Paralelamente al desarrollo de esta experiencia, se fue
realizando en la comunidad un trabajo de investigación en
relación con los juegos de los niños y los espacios reales que
se disponen para él, que permitió profundizar el diagnóstico
inicial que poseíamos. Exponemos a continuación la
evaluación diagnóstica realizada:

• Escasa presencia de lugares públicos para el juego de


los niños.
• Espacios públicos inseguros para los niños, lo cual
provoca entre otras cosas el retraimiento de la familia al
ámbito de lo privado.
• Viviendas reducidas.
• Instituciones que carecen de material lúdico y
estimulador apropiados para el desarrollo de las distintas
capacidades del niño.
• Niños que por asumir roles de adultos, por ejemplo en el
cuidado de sus hermanitos o desempeñándose en tareas
LA SALUD Y EL JUEGO • 105

lucrativas ven reducida su posibilidad de jugar.


• Disociación entre la actividad curricular escolar y el juego.

Todas estas cuestiones se encuentran agravadas por la


situación socio-económica de extrema pobreza que atraviesa la
mayoría de las familias de estos niños, lo que redunda en que
vean acrecentadas las dificultades de contener a sus miembros.

Las condiciones de pobreza extrema llevan a que las personas


se concentren permanentemente en las tareas necesarias para la
supervivencia, no quedando margen para las necesidades
emocionales propias del ser humano y con una vivencia del tiempo
signada por la urgencia y un continuo presente, todo sucede aquí y
ahora, y debe solucionarse de la misma manera (...) Este estado de
situación deja a los adultos sometidos a repetir las propias
experiencias de desvalimiento padecidas en su propia niñez, y con
poca disponibilidad emocional para sostener a sus niños.

Fruto de este diagnóstico se decide avocarse fuertemente


a la creación de una juegoteca fija, sin dejar de lado la
modalidad de juegoteca ambulante. Tal decisión se basó en
que consideramos que la importancia del juego es tal que
merece un espacio físico propio y estable. Lograr crearla
requirió del esfuerzo de profesionales del centro de salud y de
profesionales de otras instituciones. Realizarlo en forma
cogestiva nos permitió enriquecer la mirada.

La cogestión, un desafío

Este proyecto es el producto de una cogestión realizada


entre tres instituciones estatales, a saber: el Servicio Social
Zonal N° 8, el Centro de Acción familiar N° 8, ambos
dependientes de la Secretaría de Promoción Social del
106 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires; y el Centro de Salud


y Acción Comunitaria N° 5 dependiente de la Secretaría de
Salud del mismo Gobierno.
Este trabajo se inscribe en el marco de un trabajo en red.
Esta red se encuentra conformada desde l997 por
profesionales de distintas instituciones de la zona de
Mataderos-Lugano. Se denomina “Red Lazos y Nudos” y
tiene expresiones de trabajo local, tal como el presente
proyecto. A partir de la unión de los recursos profesionales
(psicólogas, trabajadoras sociales y técnicos en recreación) y
materiales de las tres instituciones se concretó el proyecto.
Daremos cuenta del proceso de consolidación ya que tanto
la interdisciplina como la insterinsitucionalidad no son logros
simples ni azarosos sino que exigen esfuerzo y dedicación. Esta
modalidad de funcionamiento implicó un constante ejercicio a
fin de salvar las diferentes lógicas e intereses institucionales.
Comenzamos a reunirnos en el mes de octubre de l999, en
principio en forma quincenal, y luego semanalmente de
acuerdo a los avances del proyecto.

Podemos dar cuenta de las distintas etapas:

1. Planteo de la propuesta en términos generales a las


autoridades correspondientes a cada institución y al
interior de los equipos de pertenencia.
2. Consolidación grupal: Conocimiento mutuo, acuerdos
básicos, análisis de viabilidad.
3. Confección del proyecto preeliminar: lectura
bibliográfica, conocimiento de otras experiencias,
intercambio con otros profesionales, definición de
objetivos, de la población beneficiaria y modalidad
de funcionamiento.
4. Presentación del proyecto a las autoridades y aprobación
LA SALUD Y EL JUEGO • 107

del mismo.
5. Difusión del proyecto:

• Entrevistas con referentes comunitarios (Centros


Educativos, Comedores, Centros Comunitarios)
• Intercambio con profesionales del Centro de Salud y
Acción Comunitaria Nº 5 para interiorizarlos del
proyecto a fin de que deriven niños.
• Convocatoria.

6. Inscripción de los niños: se establecieron días concretos.


Este espacio se utilizó para aclarar dudas que pudiera
presentar la familia, en cuanto a la intencionalidad y
modalidad de la juegoteca.
7. Inicio de funcionamiento: comenzó a funcionar en el mes de
marzo, luego de que los niños se integraran al ciclo lectivo.
8. Inauguración formal: Iniciada la experiencia de trabajo
se realizó el acto inaugural.

El espacio de juego
El proyecto está destinado a niños entre 6 y l2 años de edad,
y funciona dos veces por semana, los días lunes para aquellos que
tienen entre 6 y 9 años y los días miércoles para niños de l0 a l2
años, ambos días en el horario de 9:30 a 11:30.
Cada encuentro de juegos tiene diferentes momentos:
el primero es de encuentro y de intercambio entre los niños sobre
temas diversos; el segundo es un espacio de juego propuesto por
la coordinación, por ejemplo tareas plásticas, musicales, de
expresión motriz; el tercer momento es propuesto por los niños y
es lo que llamamos juego libre, sujeto a mínimas pautas en
donde pueden elegir los juguetes y/o juegos reglados que deseen;
y por último, se realiza una actividad grupal para propiciar el
cierre como por ejemplo la lectura de un cuento.
108 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

El número de niños que concurre cada día es de


aproximadamente 15, estando anotados mayor cantidad que
no asisten sistemáticamente.
La inscripción actualmente se halla abierta y las tareas de
difusión continuan realizándose por parte del equipo profesional y
de los mismos niños. El equipo profesional divide su tarea entre
quienes coordinan el espacio de juego y quienes realizan las tareas
de difusión y contacto con las familias. Se mantiene una reunión
semanal en la cual se comparte el trabajo realizado por todos los
miembros y se diseñan las acciones de planificación y evaluación.
En relación con los niños se busca como objetivo la
consolidación grupal, motivo por el cual no se permite el
ingreso de niños que asistan por única vez. La mirada puesta
en el grupo no significa perder de vista las situaciones
individuales que se juegan en el mismo, trazando estrategias de
tratamiento individual y familiar cuando la situación lo exige.

Análisis del proceso grupal

Para dar cuenta del proceso grupal que vienen


desarrollando los niños en la juegoteca hemos establecido una
serie de variables, en las cuales nos basaremos para hablar de
él.

PERTENENCIA: se refiere al sentimiento de ser parte del


grupo. Existe una internalización mutua de todos los participantes.

Indicadores:

• El modo en que se expresan refiriéndose a un “nosotros”.


• El reconocimiento que hacen del lugar, como propio, por
ejemplo adornándolo.
• Cuando piden explicaciones ante la ausencia de los
LA SALUD Y EL JUEGO • 109

coordinadores y de sus compañeros.


• Cuando invitan a otros niños a jugar a su lugar. Ejemplo:
hicieron los carteles de difusión que están colocados en
los pasillos del Centro de Salud.
• Porque asistieron a la inauguración de la juegoteca y
fueron los protagonistas del evento.
• Traen cosas propias al espacio de juego para
compartirlas, por ejemplos cuentos.

De acuerdo a estos indicadores se infiere que los niños se


sienten miembros del grupo de la juegoteca, parte del grupo.

COOPERACIÓN: Consiste en la contribución, aún


silenciosa, a la actividad grupal.

Indicadores:

• Los niños se ayudan ante el conflicto trabajando de a


pares. Ejemplo: se “soplan” las respuestas.
• Se explican las consignas de los juegos cuando uno de
ellos no lo conoce.
• Organizan juegos conjuntos.
• Toleran las diferencias.

Por lo dicho podemos decir que prima en el grupo un espíritu


cooperativo.

PERTINENCIA: consiste en el centramiento en la


actividad. Hay pertinencia en cuanto hay creatividad y
apertura hacia un proyecto.

Indicadores:

• Los niños participan jugando.


• Se implican corporal y afectivamente.
110 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

• Crean, se expresan verbal, física, gestual y artísticamente.


• Cumplen e inventan normas. Ejemplo: crearon las
normas de convivencia.
• Llevan adelante las consignas.

De acuerdo a lo dicho se infiere que existe por parte de los


niños una apropiación de los objetivos grupales.

COMUNICACIÓN: Es el vehículo de la interacción,


entendida ésta como intercambio de mensajes, de significados.

Indicadores:

• Desde la coordinación se intenta que ésta sea clara,


unívoca, explícita, directa.
• Desde los niños hacia la coordinación se observa que
pueden entender las consignas, cuando resulta
necesario solicitan aclaraciones. Manifiestan
situaciones de agrado y desagrado.
• De los niños entre sí se observa que la comunicación es
fluida, organizan juegos, asignan roles, dramatizan
situaciones, etc.

De ello se infiere que la comunicación en el espacio lúdico se


da en forma fluida y multidireccional.

APRENDIZAJE: denominamos con este término a un


proceso de apropiación instrumental de la realidad para
modificarla.

Indicadores:

• Recrean juegos poniendo sus propias reglas.


• Exploran el entorno que los rodea.
• Recrean situaciones cotidianas.
LA SALUD Y EL JUEGO • 111

• Generalmente logran instalar entre ellos lazos solidarios


y otros valores.
• A veces tienen dificultades en demorar o posponer
deseos propios en función del compañero.
• Desarrollan la posibilidad de elección.

Se observa en este grupo un crecimiento sostenido de


esta variable.

INTERÉS: se refiere al grado de compromiso con la actividad.

Indicadores:

• Presencia: los niños asisten por propia voluntad.


Cumplen con el horario. Algunos concurren sin la
compañía de adultos.
• Entusiasmo frente a la actividad: los padres manifiestan
el deseo de los niños a asistir.
• Capacidad de proyectar actividades para futuros
encuentros.

Los niños se muestran muy involucrados en la actividad.

Estos indicadores dan cuenta que desde su inicio se


viene desarrollando un proceso grupal flexible, con objetivos
claros y reconocimiento mutuo de sus miembros. En el
transcurso de las distintas actividades que se desarrollan
dentro del espacio de la juegoteca, se produce un proceso
grupal totalmente dinámico donde las variables
mencionadas están presentes en mayor o menor medida en
los distintos momentos de la evolución grupal.
Observamos dentro del proceso grupal que algunos niños
no pueden conectarse plenamente con el juego debido a las
112 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

distintas problemáticas individuales y familiares que


atraviesan. En esos momentos se hace necesario un
protagonismo mayor de la coordinación para contener al niño
y al mismo tiempo preservar el espacio de juego para el resto
del grupo.
También adquiere la coordinación un rol protagónico cuando
se presentan conflictos en el interior del grupo, por ejemplo
desacuerdos en relación con las consignas dadas, o a la
tarea propuesta. El coordinador adquiere, entonces, un rol de
mediador entre las partes, siempre priorizando las
posibilidades de juego de los niños y aportando otras
alternativas.

CONCLUSIONES
Consideramos que el proyecto descripto es un aporte a la
concreción de los derechos del niño, pues el juego en sí mismo
repercute de manera directa en la salud de ellos, ya que crea
entre otras cosas un marco propicio para el desarrollo de sus
potencialidades y se constituye para los niños del Barrio de
Villa 15 y el Núcleo Habitacional Transitorio en una alternativa
superadora que les permite afrontar desde otro lugar las
dificultades y conflictos que viven a diario.
Si bien puede pensarse el jugar como lo cotidiano en la vida
del niño, puede parecer que un hecho tan simple carece de
relevancia, sin embargo, es el jugar lo que caracteriza al niño
como tal. Justamente jugar es algo serio, es una experiencia
creadora y universal que necesita de un espacio y un tiempo.
Consideramos fundamental que la actividad se desarrolle
en el marco de un proceso grupal, ya que el niño en el grupo
y a través del juego con sus pares, puede desarrollar sus
capacidades motrices, sensoriales, etc. y además lograr
LA SALUD Y EL JUEGO • 113

valores tales como la solidaridad, el respeto, el compartir, la


cooperación y el cuidado mutuo.
Por esto mismo es que consideramos el juego como una
manifestación de salud. En este sentido es que la juegoteca
con su accionar está evitando la posibilidad de concreción
de un daño: la pérdida del mundo infantil. De acuerdo al
diagnóstico descrito con anterioridad podemos decir que la
juegoteca se constituye en un recurso que intenta dar respuesta
a las necesidades barriales, pues brinda un espacio de juego
seguro, libre de peligros externos, que cuenta con el material
lúdico necesario y con profesionales preparados para facilitar el
juego y dedicados a llevar a cabo dicha actividad.

Por todo lo expuesto decimos que el espacio de juego


representa para nosotras una estrategia que nos permite
cumplir nuestros objetivos profesionales de Prevención,
Promoción y Protección de la Salud. Éstos se concretan con
la forma de trabajo elegida y las actividades hasta aquí
realizadas. Sostenemos que el espacio de juego en el Centro
de Salud y Acción Comunitaria Nº 5 es un fenómeno
instituyente, el cual, junto con otros proyectos, se inscribe
dentro de una concepción amplia de salud, donde ésta no es
concebida como contraria a la enfermedad sino como un
proceso producto de múltiples variables bio-psico-sociales y
por estar enmarcado dentro de un trabajo en red, realizado
en forma conjunta con otros profesionales de distintas
instituciones y sectores del Gobierno de la Ciudad de Buenos
Aires.
Consideramos que el trabajo en red funciona como un
facilitador, un motor que impulsa la creación y concreción de
los proyectos. En relación con nuestra juegoteca, la
interinstitucionalidad dada por la red funciona como un
espacio de reflexión, de búsqueda de recursos, de crecimiento
114 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

conjunto, que repercute directamente en la actividad


enriqueciéndola. Produce un efecto de apertura hacia la
comunidad y genera un ámbito de intercambio con ella,
donde se posibilita la satisfacción de necesidades concretas.

“La energía creadora se desarrolla haciendo y


haciendo juntos. Son cosas chiquititas, no acaban con
la pobreza, no expropian las cuevas de Alí Baba. Pero
quizás desencadenan la alegría de hacer y traduzcan
en actos. Al fin y al cabo actuar sobre la realidad y
transformarla es la única manera de probar que la
realidad es transformable.”
Eduardo Galeano.
LA SALUD Y EL JUEGO • 115

BIBLIOGRAFÍA
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grupos. Buenos Aires: Ediciones Nueva Visión.
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Aires: Ediciones del Seminario. Junio.
MY PORTORICAN STORY

ALEJANDRA GÓMEZ
(TRABAJADORA SOCIAL)

“Llega, loco de contento, con su cargamento


para la ciudad...”
Lamento Borincano-Rafael Hernández

Llegué a New York conociendo nada de Puerto Rico y el


Caribe, fascinada por las luces de Broadway, el Central Park y
el Empire State de King Kong. Por congraciarme con una amiga
puse una bandera cubana en lugar de la borinqueña, tienen el
mismo diseño, sólo se invierten los colores. Ella se emociónó
igual, pero lo mío estuvo más cerca de una declaración de
principios que de un homenaje a mi amiga. Mirando mapas me
di cuenta de que las islas son vecinas, el bloqueo impide ir de
Puerto Rico a Cuba y viceversa. Muchos tienen familia en
Cuba, Puerto Rico y República Dominicana, para nosotros sería
como movernos de una provincia a otra, en mi caso —
facilitando la comparación—, de Cordoba a Buenos Aires.
118 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

UNA ACLARACIÓN
SOBRE DEFINICIONES

Cuando hablo de “identidad” hago referencia a la identidad


etnocultural, entendida como sentimiento de pertenencia o
identificación con una colectividad más o menos imaginaria. Esta
definición incluye las representaciones que los individuos se hacen
de la realidad social y de sus divisiones. La identificación es el
proceso psicológico por el cual un sujeto asimila un aspecto, una
propiedad, un atributo de otro y se transforma, total o
parcialmente, sobre el modelo de éste. La personalidad se
constituye y se diferencia mediante una serie de identificaciones.

DOS, SOBRE PERSONAS


QUE NOMBRAN MI ROTACIÓN

Roberto Clemente era portorriqueño y jugador de baseball. Es


muy famoso en Estados Unidos, jugaba para un equipo de la
ciudad de Pistburgh, no hablaba inglés. En esa ciudad, hay una
calle que lleva su nombre. Murió en un accidente aéreo viajando
como voluntario a Centroamérica por las inundaciones ocurridas
en Nicaragua. Sylvia del Villard era portorriqueña y bailarina.
Inició la investigación y propuesta de danza experimental basada
en ritmos afrocaribeños propios de la isla. Comprometida con esta
forma de ver la danza, recorría y rescataba en sus recorridos por
los pueblitos caribeños leyendas y costumbres borinqueñas.

MY PORTORICAN STORY
Lugar de rotación: Sylvia del Villard Continuing Day
Treatment Program (Programa que depende del Roberto
MY PORTORICAN STORY • 119

Clemente Center, este último depende a su vez de


Gouverneur Hospital-New York).
Tiempo de rotación: septiembre 1999-enero 2000.
El Roberto Clemente Center está ubicado en el 540 E. de
la calle 13, en el Lower East Side de Manhattan. Gouverneur
Hospital es parte de la red de salud pública y servicios de salud
mental que operan a través de la corporación de hospitales y
red de salud de la ciudad de New York. El Lower Manhattan se
caracteriza por la diversidad de etnias, lenguas y grupos
inmigrantes. Históricamente se ha caracterizado por la
diversidad cultural, en esta área convivían por lo menos una
docena de “pequeñas ciudades”, non-English speaking,
inmigrantes latinos, chinos, italianos, judíos y de Europa del
este. Roberto Clemente Center fue fundado en 1984 con el
principio de que la cultura es un componente esencial para el
tratamiento en salud mental. Todo el personal del centro es
bilingüe y bicultural (esto implica inmigrantes), que conocen los
valores, costumbres y leyendas que circulan permanentemente
alrededor de los tratamientos.

FILOSOFÍA DE ROBERTO
CLEMENTE CENTER
1. Salud Mental es un fenómeno biopsicosocial, producto
de complejas interacciones entre cada individuo, las
dinámicas familiares, la situación de su entorno y los
sistemas que dan sentido y propósito a cada parte de la
vida de las personas.
2. Los individuos, las familias y las comunidades son mejor
comprendidos y asistidos en su propio contexto.
3. Los individuos, las familias y las comunidades están
siempre inmersos en contextos sociales, económicos,
120 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

políticos y culturales. La asistencia es mejor en tanto se


consideren esos múltiples contextos.
4. Género, raza, etnicidad, orientación sexual y edad son
factores importantes a considerar cuando se planifican e
implementan servicios de salud mental.
5. La salud mental es mejor entendida y promovida a través
de la aceptación y desarrollo de una perspectiva
biopsicosocial.
6. El individuo es más que su enfermedad o sus problemas.
7. La terapia está basada en el reconocimiento y la promoción
de recursos desde lo individual, familiar y comunitario.
8. Las múltiples formas familiares son evidencia de la
flexibilidad y adaptabilidad de las familias.
9. La terapia es más efectiva cuando se orienta y direcciona
hacia metas claras y definidas.
10. Desde los terapeutas: ayudar a entender, mantener, resolver
la propia identificación sociocultural de cada “cliente”;
entender la interacción de cultura, género y orientación
sexual en los comportamientos y necesidades.

Bajo esta filosofía se han organizado y funcionan los


siguientes programas:

• Clínica Pediátrica
• Clínica Médica
• Clínica de HIV
• Family Guidance Program (Atención psicológica a
familias). La atención individual de pacientes funciona a
través de este programa
• Grupos psicoterapéuticos (de mujeres, hombres,
ancianos, madres de niños ADDH)
• Sylvia del Villard Continuing Day Treatment Program
MY PORTORICAN STORY • 121

LATINOS-NEW YORK-A.P.S.
La definición de Atención Primaria en Salud propone que la
misma debe estar dirigida hacia la resolución de las necesidades
y los problemas de salud concretos de cada comunidad, que
deben ser abordados a partir de actividades coordinadas de
promoción, prevención, tratamiento y rehabilitación,
potenciando la autorresponsabilidad y participación
c o m u n i t a r i a .
Esta definición incluye tres niveles de prevención: primaria, que
comprende las medidas para prevenir enfermedades, secundaria,
que trata las enfermedades con el objetivo de prevenir deficiencias
ulteriores, y terciaria, constituida por las medidas tendientes a
eliminar o reducir las deficiencias o discapacidades
(rehabilitación).
Desde lo que se entiende como prevención terciaria o
rehabilitación se plantea el objetivo del Sylvia del Villard
C . D . T . P . :
Proveer servicios psiquiátricos, psicoterapéuticos, de
contención, socialización y rehabilitación para clientes con
enfermedades mentales crónicas, a fin de evitar nuevas
hospitalizaciones y facilitar la integración en la comunidad.
El programa fue diseñado para incrementar la capacidad de
los clientes de contribuir en las actividades cotidianas a través
de su participación en espacios psicoterapéuticos, de
socialización y rehabilitación. Los servicios están comprendidos
y diseñados para prevenir, contener y proveer cuidado y
asistencia antes, durante y con posterioridad a las
hospitalizaciones.

SYLVIA DEL VILLARD DAYS

“El East Village ha cambiado su fisonomía en los últimos


122 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

años...”, esto dicen los que saben por habitar allí hace tiempo.
Los buildings quemados, abandonados y tomados o rentados a
precios ínfimos por los latinos inmigrantes, son reciclados,
renovados y alquilados a los precios de Manhattan. En las
calles lo que se ve es una mezcla de gente “cool” —con ese
toque snob que abunda en New York—, con latinos que no
salen de su zona —difícilmente llegan a Midtown—, e
inmigrantes de los lugares más remotos del mundo. A pesar
de esto sigue siendo una de las zonas de “latinos”, el spanglish
es habitual y aparecen los jardines entre medio de los edificios
para no perder el contacto con la naturaleza. Los vecinos los
cuidan, los decoran especialmente y realizan actividades en
ellos, ceremonias religiosas afrocaribeñas, fiestas, barbecues...
Muchos de los pacientes, que en total son 45, viven en esta
zona. Todos cuentan con seguro médico, Medicaid o Medicare,
(sólo son admitidos si ya lo tienen o han iniciado el trámite para
recibirlo); este sistema les asegura la transportación desde su
domicilio al programa para que cumplan con el tratamiento.
Diariamente reciben una Metrocard con crédito para dos viajes,
aquellos que no pueden viajar en transporte público llegan al
programa con la guagua del hospital. La oficial que abre la
clínica llega a las 8:30 hs., esa es la primera actividad de la
mañana, un grupo de pacientes se reúne allí previamente y
realiza el control horario informal (quién llega, a qué hora, etc.).
Al frente de la clínica hay una cafetería latina —Amor Bakery—
, y otra más en la esquina. Son parte del recorrido de todos
(mío inclusive, por supuesto) a la mañana antes de llegar, para
el desayuno o después del almuerzo. El espacio de desayuno es
libre, usan el comedor de la clínica para tomar café, comentar
sus cosas, plantear sus inquietudes al miembro del staff “on
call”. El staff de profesionales se reúne a las 9:15 para
desayunar, repasar, organizar y cambiar (en caso de ser
necesario) las actividades programadas para ese día.
MY PORTORICAN STORY • 123

El staff está conformado por: Terapista de Actividades


(Recreacionista), Psiquiatra, Enfermera, Psicóloga (de licencia
durante mi rotación), tres Trabajadores Sociales, Secretaria,
Administradora y Coordinador de Programa. Como parte de las
actividades especiales concurren una coreógrafa de danza —
rentada— y un profesor de música —voluntario—. Dos de los
trabajadores sociales son americanos, hablan un perfecto
español ya que el programa es monolingüe; el resto de los
miembros del staff son inmigrantes, en su mayoría de Puerto
Rico (la terapista de actividades es argentina y la psicóloga
colombiana). La enfermera es americana pero de familia
boricua, ella misma se define como “neworican”.
La primera actividad grupal da comienzo a las 9:30 hs.
continuando, con descansos de 10 minutos entre un grupo y otro,
durante la mañana. A las 12 hs. se hace un break para el
almuerzo, retomándose la actividad grupal a la 1 p.m. Dos
profesionales acompañan a los pacientes durante el almuerzo, el
que está “on call” y el que fue designado “on lunch”. Los
pacientes se ocupan de preparar las mesas, servir la comida que
envía el hospital, limpiar el salón, asumiendo distintas
responsabilidades rotativamente. El almuerzo es “criollo”, el
hospital prepara la comida respetando el menú que el staff
propone mensualmente, según el paladar y las comidas típicas del
caribe.

“Yo no loncheo aquí, tengo miedo de que la comida


tenga algo, además hay mucha gente”.

Las actividades son grupales, todos los pacientes


participan de ellas. Consisten en asamblea de apertura de la
semana, grupos de psicoterapia, de medicación, destrezas
sociales y de temáticas diversas (juegos, manualidades,
mujeres, diario personal, herencia cultural, danza, cocina,
124 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

espiritualidad entre otros). Cada paciente tiene asignado un


terapista con el que mantiene tratamiento individual; el
control de medicación lo realizan el psiquiatra y la enfermera
(esta última también tiene asignados pacientes para
seguimiento individual). La clasificación de los grupos de
pacientes se hace según grado de funcionalidad, esto implica
grado de deterioro psíquico, físico y social. Los high
functioning son grupo uno, los low functioning, grupo tres.
El dos es para aquellos que sin tener un gran deterioro tienen
dificultades para desenvolverse socialmente o para pacientes
que recién ingresan al programa y la evaluación de
funcionalidad no resultó clara.
Describo a continuación objetivos y funcionamiento de
los grupos del programa; yo participé en todos de una forma
u otra, en algunos sistemáticamente, en otros para cubrir la
ausencia de terapistas.

Yo estoy en ese grupo? Mi terapista me dijo que


podía elegir...

No entro al grupo porque tengo un appointment y no sé


a qué hora vuelvo. Tengo que esperar la guagua para ir a
Bellevue...

Estoy cansada porque ayer mopee la casa, hice laundry,


prepare un turkey en la estufa además, I hate estos grupos,
siempre hacemos lo mismo...

Fucking manualidades... me arruinan las uñas que me


arreglan las beautisheans.

Reunión de la comunidad: asamblea de apertura y cierre


de la semana (lunes y viernes). La coordinación está a cargo
MY PORTORICAN STORY • 125

del terapista “on call” (de guardia). En este espacio se


presenta al grupo a los pacientes que ingresan al programa,
se anuncian los cambios de cronograma, las actividades
especiales (viajes, fiestas, otros eventos), la presencia o
ausencia de terapistas. Participan los pacientes del programa
y el staff de profesionales.
Psicoterapia: son cuatro grupos en total, por la cantidad de
pacientes hay dos niveles entre los pacientes que forman el grupo
dos, A y B, según el criterio de funcionalidad que ya comenté. La
frecuencia es de dos veces por semana, lunes y jueves. No
reemplazan los espacios de psicoterapia individual, son un
complemento de ésta. Son coordinados por la enfermera y tres
trabajadores sociales. Participé como co-leader en el grupo dos A,
junto con un trabajador social. En esos grupos, me asustaban los
silencios. Chris los mantenía inmutable, yo, en cambio, los
“miraba a los ojos” buscando una pregunta, un comentario, algo.
En uno de esos grupos, después de un largo rato de silencio se
escuchó la voz de José que empezó a contar el fin de semana que
pasó en lo de su hermana, su relación de “hermanos” con Jesús
(otro paciente de la clínica) y la operación que le tenían que
realizar esa semana porque tenía un tumor, que no le daba miedo
porque a un hombre no le debe preocupar estar solo.

—La esposa mía no puede estar ese día.


(¿Querría que esté con Ud.?)
—No, yo me arreglo solo, lo que pasa es que ella siempre iba
conmigo al hospital y ahora no puede por el trabajo. Me preocupa
que una cuñada de la hermana mía que tiene esquizofrenia volvió
a ser internada.
(¿Qué le preocupa?)
—Que tiene una enfermedad mental como yo, no quiero estar
internado. Es que aquí la familia está lejos, mi hermana vive aquí pero
fuera de la ciudad, no puede venir a estar conmigo.
(¿Y sus otros hermanos, la familia de Puerto Rico?)
—Estoy enojado, tengo coraje, mi hermano no llamó para
126 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Acción de Gracias, tampoco para Christmas, no sé qué le pasará.


Yo no puedo ir a Puerto Rico porque allí toman mucho alcohol y a
mí me hace mal. Todo el día toman alcohol en Puerto Rico. El
hermano mío está todo el tiempo tomando, yo no puedo estar con
él, pero necesito que me llame.

MIEDO, ENFERMEDAD, FAMILIA,


MIGRACIÓN... “LA SOMBRA DEL PAÍS
DE UNO QUE NO LO ABANDONA...”

Destrezas Sociales: grupo psicoeducativo, es coordinado


por un trabajador social. Se define a las destrezas sociales
como aquellas conductas habituales en la interacción con otros
que están normatizadas o socialmente sancionadas, incluyen
códigos de conducta, reglas sobre lo que decir o no según el
contexto y situación, como expresar afecto, distancia, etc. Se
considera que hay distintos factores que afectan el
desenvolvimiento social de una persona, éstos son:

• Síntomas psicóticos
• Factores motivacionales (metas, tolerancia de éxitos o
fracasos)
• Estados afectivos (ansiedad o depresión)
• Factores ambientales (falta de reconocimiento de
esfuerzos, escasez de recursos sociales, aislamiento)
• Factores neurobiológicos (déficit para procesar
información, síntomas negativos, efectos secundarios de
la medicación)

Los tres grupos tienen esta actividad una vez por semana. Las
destrezas que practican varían según el grupo del que se trate,
MY PORTORICAN STORY • 127

dado que —por lo general— los más funcionales tienen menor


deterioro y mantienen sus lazos sociales. El grupo tres (el
menos funcional) se centra en el aprendizaje de las cuatro
destrezas básicas: Escuchar, Pedir, Expresión de sentimientos
agradables, y Expresión de sentimientos desagradables.

El ejemplar grupo tres

Destreza: PEDIR
Pasos

1.Mirar a los ojos a la otra persona.


2.Decirle exactamente qué es lo que uno quiere que haga.
3.Decirle cómo uno se sentiría después.
4.Dramatización

Terapista A. se sienta y enciende la television. Entra


terapista C. y le habla, pero sin mirarle a los ojos. Le pide que
lo acompañe a realizar unas compras. A. no presta atención,
cruzan unas palabras y finalmente C. se retira solo.
Terapista C. pregunta al grupo qué les pareció la escena. Al
grupo tres siempre le parece bien, es necesario reiterar las
preguntas sobre los pasos para que digan cuál se cumplió y
cuál no. ¿Estaba yo mirando a los ojos a A.? ¿Le dije yo a ella
cómo me sentiría si me acompañara?
—Tú no la estabas mirando a los ojos. Tú no le decías lo
que querías con claridad. Te tuviste que ir sólo porque ella
quería mirar la televisión.

Los terapistas vuelven a dramatizar la escena siguiendo los


pasos correctamente. Luego se propone que lo hagan dos
miembros del grupo (“por dos estrellas cada uno”) con algún
pedido que hayan hecho a alguien en la semana. “Yo le pedí a
la hermana mía que me acompañara a ver el Parade de
128 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Thanskgiving, pero no quiso, ¿cómo puedo pedirle para que


me acompañe?” Me resultó increible ver cómo cumplían la
tarea, recordaban los pasos, las destrezas, competían por quién
tenía más “estrellas”. La explicación apareció para mí como
“dependencia”, aunque lejos de la definición que yo conocía.
Bajo la aceptación de que la enfermedad arrasó con todo y
ahora es necesario aprender a comportarse, aprender estas
“destrezas básicas”, hay una relación histórico-cultural de
sumisión que no deja de sorprenderme.

Medicina: grupo de medicación. Es coordinado por el


psiquiatra del programa, no difiere en su funcionamiento de los
grupos de medicación conocidos.

Salud
Manejo de Síntomas
Estos grupos son coordinados por la enfermera del programa.
Asumen un carácter educativo-formativo, son de prevención de
enfermedades y charlas sobre temas que les interesa conocer
particularmente (hipertensión, diabetes, HIV, etc.). El de
manejo de síntomas es psicoeducativo, qué hacer cuando...

Herencia Cultural
Diario Personal
Nuestra Comunidad
Mujeres

El objetivo fundamental en estos grupos es la


socialización, que puedan compartir su cotidianeidad
partiendo de cada uno, de sus historias, sus países, sus
barrios, hablar de su identidad como latinos. Apuntan a
rescatar vivencias propias, lo que se acuerdan de sus países
de origen, lo que quieren guardar en un diario porque les
resulta especial, lo que conocen del lugar donde viven
actualmente, lo que recuerdan de sus familias, lo que
MY PORTORICAN STORY • 129

comparten con otras instituciones, lo que implica ser mujer y


latina en New York.
Participé en la planificación y ejecución de dos de estos
grupos, Nuestra Comunidad y Mujeres. Interesante experiencia
porque lo coordinaba con otra trabajadora social que se
incorporó al programa una semana después que yo, y porque
decidimos “olvidarnos” en la preparación del grupo de Mujeres
de que eran pacientes con diagnóstico psiquiátrico. Saldo
positivo, identidad rescatada en la posibilidad de manejar ellas
mismas sus diagnósticos de “locas”, y de que las terapistas,
mujeres también, las escuchen desde otro lugar.

“Yo soy una loca con clase, no me gusta que la gente


se dé cuenta que tomo medicación o vengo a este
programa. La gente nueva cree que yo soy terapista.”

Inglés/Literatura/Cocina/Ejercicios/Manualidades/Juegos/
Movimiento-Expresion/Danza/Música/Pintura. Estos grupos
funcionan prácticamente como en una escuelita, se trabaja
sobre la propuesta que trae el terapista. Casi todos estos grupos
son coordinados por la terapista de actividades, que despliega
una creatividad sorprendente, fueron mi primer contacto con los
pacientes y con lo que se denomina “Art Therapy”, aunque no
son exactamente eso. Los grupos de ejercicios y danza tienen
como objetivo reestablecer algunas nociones en cuanto al
manejo del cuerpo y la relación con el espacio. No es danza-
terapia, es un espacio para recordar la música, ritmos y bailes
tradicionales caribeños, una forma de mantener la identidad
caribeña. El grupo de pintura es coordinado por una paciente,
Luisa. La actividad consiste en colorear dibujos ilustrativos —
que ella se encarga de traer— según el calendario de festejos
americano. Se convierte en terapista por dos horas, ella y sus
compañeros lo entienden así, aunque le avergüenza que se lo
digan. “Yo cuando vine al programa no hablaba con nadie,
cuando me sentía mal me tiraba en el piso y no quería
130 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

levantarme. Aquí me siento distinta, pero me incomoda hablar


de estas cosas... prefiero que nadie me diga nada.”

Charla de Noticias: se comentan las noticias relevantes


del día (según el criterio de los pacientes), se lee un periódico
latino editado en español.

Ganaron los Yankees... cómo, te gusta el baseball?


Giuliani no quiere a los latinos, ese señor nos engañó... no va a volver
a ganar las elecciones.

Con el Y2K no pasó nada en New York gracias a Giuliani, él hizo


todo bien, todo se lo debemos a Giuliani, hubo agua, electricidad,
funcionaban las estufas. No pasó nada en la 42 porque él puso mucha
policía en la calle...

En la crítica o defensa de Giuliani encontré la


construcción de identidad como latinos inmigrantes, una
elaboración que se produce en el contacto y diferenciación
con lo americano-neoyorkino, que va a determinar la
posición de ellos como sujetos, sus representaciones y
elecciones. Para el coordinador del programa, toda historia de
migración es política. Por esto, uno de los ejes del trabajo
terapéutico es dilucidar y comprender cómo se articula y se
juega “la política” en la subjetividad de cada cliente y su
historia familiar.

Crecimiento Personal
Desarrollo Humano
Vida Independiente
Imagen
MY PORTORICAN STORY • 131

Son psicoeducativos, coordinados por una trabajadora


social. El objetivo es que puedan desenvolverse en actividades
diarias solos, se relacionan con la práctica de destrezas sociales
en situaciones específicas. Los temas que se trabajan en estos
grupos se relacionan con el manejo del dinero del seguro social,
el cuidado y la higiene personal, la sexualidad, la relación con
los demás y la búsqueda de empleo.

Espiritualidad
Autoayuda
Relajación

Como sus nombres los indican... Se leen textos de


reflexión, hablan de sus preocupaciones y se dan consejos al
estilo “tú puedes”.
El grupo de relajación es coordinado por una paciente (la
más antigua del programa), practican ejercicios de respiración
con algunas técnicas de yoga y meditación.

HOW ABOUT MY NEWORICAN STORY?

¿Por qué no se vuelven a sus países si están enfermos y no


hablan inglés? me preguntó una panameña que se dedicaba a
las finanzas y se molestaba porque lo latino es asociado a los
portorriqueños que escuchan la música fuerte, usan ropas de
colores llamativos y tienen poco amor por el trabajo (dicen que
la palabra más usada por los latinos es “mañana”). Un
comentario que me ayudó a entender que —además de que los
argentinos somos europeos y no latinoamericanos— tampoco el
caribe y centroamérica son una misma cosa.
¿Por qué los americanos cuidan la salud de los hispanos?
Porque son buenos, tanto, que Puerto Rico es colonia
132 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

americana desde que dejó de ser española. Los haitianos son


deportados si intentan ingresar a Estados Unidos, los
dominicanos pueden aplicar por la residencia pero son
investigados por largo tiempo, los cubanos son asilados
políticos, los portoriqueños residentes pero no ciudadanos. Para
el resto de latinoamérica el proceso es parecido a lo que resulta
para los dominicanos.
Pero, ¿por qué no se vuelven? Por el seguro social, la
vivienda, el trabajo que tuvieron alguna vez, porque perdieron
contacto con su lugar de origen, porque aunque no hablan
inglés tampoco hablan más la lengua materna...
¿complicado? Sí, porque este grupo de inmigrantes latinos
“clientes psiquiátricos” construye su identidad día a día en
este centro, y en el “afuera” (donde se habla inglés
americano) y cambian las formas del mundo por ellos
conocidas, los valores, las costumbres, las creencias. En ese
afuera se hace difícil la identificación con otros que no
entienden la lengua ni la cultura de origen. Esto puede
resultar enloquecedor, porque más allá de las patologías, es
difícil pensar un tratamiento hablando un lenguaje que no es
el propio.
El día de mi despedida cantaron un tango (“qué canciones
tan tristes tienen ustedes.!!!”), prepararon empanadas en mi
honor y me hicieron regalos, mientras en la calle no paraba de
nevar. Esto es sincretismo cultural, y es en ese contexto
sincrético, propio de New York, en el que se juega la identidad-
identificación de estos pacientes y los terapistas en el marco de
un tratamiento terapéutico.
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL
EN LA ATENCIÓN
DEL NIÑO DESNUTRIDO

NARANJO CARMEN (RESPONSABLE) / NAHR EDIHOVERT /


MUÑOZ NORIS / GONZÁLEZ WILLIAMS

INTRODUCCIÓN
El Trabajo Social surge como una profesión de ayuda,
dirigida a atender las carencias y necesidades de los grupos
sociales más desposeídos. Las primeras intervenciones se
basaban en acciones caritativas, filantrópicas y de beneficencia
con escasa estructuración. Con el tiempo y con la atención de
distintos ámbitos de usuarios (caso, grupo y comunidad), se
incorporan otras etapas: investigación, diagnóstico,
planificación, ejecución y evaluación.
En la actualidad, las funciones del trabajador social y su
objeto de estudio e intervención, se han diversificado y
ampliado, producto de los cambios en la dinámica social de
cada país; de los avances tecnológicos; del surgimiento de
nuevas teorías y enfoques en las ciencias sociales, que han
enriquecido la formación académica y el quehacer profesional,
así como del marco institucional donde dicho profesional se ha
134 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

desenvuelto.
En Venezuela, una de las áreas ocupacionales que más
contrata trabajadores sociales es el sector salud; la
experiencia en esta área es amplia y diversa según la
problemática atendida y la misión institucional que la
orienta. Se ha pasado de un quehacer empírico a un
abordaje científico basado en el uso de técnicas y estrategias
metodológicas propias de los distintos modelos teóricos que
guían su praxis; de un enfoque individual, parcelado o
multidisciplinario a un abordaje interdisciplinario, donde el
rol del trabajador social es tan importante y decisivo como el
de los profesionales de otras disciplinas del equipo de
trabajo.
Su ejercicio profesional no se ha limitado a cumplir con
el rol tradicional de resolver la problemática económica de
los usuarios; su compromiso ético y la multiplicidad de la
problemática de esta población, ha conllevado a una
intervención más amplia, en otros ámbitos de la vida
familiar, cuyos resultados, en algunos casos, han trascendido
satisfactoriamente las metas de la intervención (bienestar),
de la organización donde se desempeña (redefinición y
ampliación de los objetivos y funciones), así como la
formación académica de esta disciplina.
No obstante, una de las grandes debilidades de los
profesionales de Trabajo Social, en éste y todos los campos de
intervención, es la falta de sistematización de las experiencias
como camino para generar nuevos conocimientos a partir de la
acción. Son pocos los legados o escritos de carácter científico
producto de este proceso en Venezuela, situación que puede
fomentar, entre otras cosas, una práctica reiterativa, de poca
proyección y valoración profesional e institucional y
limitaciones en el proceso de enseñanza-aprendizaje, producto
de la escasa interacción praxis-teoría-praxis.
Dentro de esta óptica, surge el interés de sistematizar la
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL... • 135

experiencia del rol del Trabajador Social en la atención del niño


desnutrido, la cual, más allá de ofrecer una información acabada,
aspira a servir de guía para la intervención social dentro de un
equipo interdisciplinario, ya que la multiplicidad de factores
intervinientes en esta enfermedad ameritan su abordaje integral.

ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL


EN LA ATENCIÓN DEL NIÑO DESNUTRIDO

La desnutrición no sólo es vista como una enfermedad


carencial sino como un problema multifactorial que exige la
intervención de diferentes profesionales en el proceso de
prevención y tratamiento.
Su abordaje requiere de la conformación de un equipo
de trabajo que trascienda la concepción multidisciplinaria
(conjunto de disciplinas que cooperan pero sin
modificaciones en la dinámica ni compromiso entre ellas)
por la de equipo interdisciplinario, donde la estrecha
cooperación entre las disciplinas involucradas (pediatría,
nutrición, psicología, trabajo social, etc.) hacen frente a un
objetivo común en un contexto institucional, como lo es la
reducción o erradicación de la desnutrición.
Dentro de este equipo interdisciplinario, el objeto de
estudio del trabajador social son las situaciones problemáticas
de la familia (5,6), entendiendo ésta última como un sistema
social de relaciones recíprocas, donde el problema de alguno de
sus miembros afecta al conjunto.
El rol del Trabajador Social consiste en evaluar al grupo
familiar del niño en atención, a fin de determinar los factores
sociales que inciden en el estado nutricional del niño y
realizar su intervención de acuerdo a la problemática
136 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

evaluada, estimulando y fortaleciendo el potencial de la


familia hacia la recuperación integral.
La intervención de la familia del niño desnutrido por parte
del trabajador social se realiza en el marco de las tres funciones
básicas de la institución de salud: asistencia, educación e
investigación. Este abordaje se efectúa dentro de un proceso
global que abarca dos momentos intrínsecamente relacionados:
la evaluación social y la intervención.

1. Evaluación Social: es la fase del proceso que permite


recoger la información de la familia e identificar la
problemática relevante que conllevará al plan de
intervención. No existe un camino único para iniciarse
en este proceso, debido a la particularidad de cada
familia y a la orientación profesional, sin embargo se
pueden ofrecer algunas orientaciones desde la
perspectiva institucional de abordaje a la familia. Este
proceso abarca la entrevista inicial y el diagnóstico
social.
• Entrevista Inicial: es el primer contacto que se tiene
con el niño y su representante, pudiendo ser éste la
madre, ambos padres o cualquier otro familiar
sustitutivo de estos roles. La misma es guiada por un
instrumento estructurado que permite ubicar al niño
en su grupo familiar y a éste en la red multifamiliar o
social donde se desenvuelve, favoreciendo la
detección de la problemática social existente y de los
recursos potenciales con que cuenta la familia,
iniciándose en muchos casos la fase de intervención
directa desde este momento (investigación-acción).
Recoge también la percepción de la familia sobre la
desnutrición, ya que tiende a pasar desapercibida en
la medida que el niño continúa realizando sus
funciones vitales y sociales.
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL... • 137

Los ítems contenidos en el instrumento tienen un orden


lógico y sistemático, ajustado al modelo clínico y psicodinámico
cuyo objetivo principal es lograr la empatía y obtener la
información general para elaborar el diagnóstico estructural del
funcionamiento social de la familia, a partir del cual se hará la
intervención posterior. Excepto los datos de identificación del
niño y de sus progenitores, el resto de la información a recoger
se agrupa por áreas de abordaje: económica, educativa-laboral,
dinámica familiar y físicoambiental (Cuadro 1).
Debido al nivel de estructuración de la entrevista inicial
y al tipo de información confidencial-vivencial que se
recoge, la aplicación de este instrumento debe realizarse en
forma dinámica, jovial, pero respetuosa, sin excesivo apoyo
en el instrumento, buscando establecer desde el inicio el
rapport y la empatía suficiente para que el entrevistado
responda con franqueza.
La información recabada en la entrevista inicial debe ser
registrada en una base de datos que permita, en algún
momento, hacer caracterizaciones, comparaciones o detectar
elementos nuevos que induzcan a realizar investigaciones o
a alertar sobre la necesidad de implementar otras formas de
intervención. La información recopilada en este primer
momento se complementa o corrobora con otras actividades
posteriores (visitas domiciliarias, entrevistas con otros
miembros, etc.); de esta manera, el proceso no sigue un
curso lineal sino flexible, que se actualiza y retroalimenta
constantemente en la intervención. De la forma como se
establezca este primer contacto, dependerá el desarrollo de
las consultas sucesivas, el nivel de compromiso de la familia
en la fase diagnóstica y el plan de intervención a diseñar.
138 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

CUADRO 1
ASPECTOS A CONSIDERAR EN LA ENTREVISTA
INICIAL DE EVALUACIÓN SOCIAL
Interesa conocer la capacidad real de la familia para adquirir
ÁREAS regularmente los bienes y servicios básicos, especialmente
ELEMENTOS DE LA en el rubro alimentación y la forma en que sus miembros se
EVALUACIÓN SOCIAL INICIAL involucran en los asuntos económicos, debido a la estrecha
relación entre ingresos, poder adquisitivo y desnutrición

ECONÓMICA Interesa conocer tres aspectos: la inserción adecuada de


niños en edad escolar, repitencia o deserción ya que esta
red ha sido la más utilizada para la implementación de
programas sociales de corte nutricional dirigida a la
infancia: beca alimentaria, merienda y comedores
escolares, vaso de leche, etc.; el nivel educativo de los
EDUCACIÓN padres, haciendo énfasis en la madre por cuanto puede
Y CAPACITACIÓN incidir en la posibilidad de comprensión de las
LABORAL orientaciones, como en el potencial y requerimiento
exigidos para ingresar a un mercado laboral competitivo y
mejor remunerado, que fortalezca la seguridad económica,
habitacional y el crecimiento integral de la familia.

Conocer las características generales de la familia con la cual


se trabaja; tipo, tamaño, jefatura de hogar, calidad de las
relaciones y el nivel de apoyo familiar, cuidado del niño en
atención, probabilidad de crecimiento de la familia por
nuevos embarazos en la madre, ocupación de sus miembros,
etc. La experiencia ha demostrado que en las familias
DINÁMICA FAMILIAR numerosas existen limitaciones para llegar a acuerdos en
toma de decisiones, así como en el cuidado y alimentación de
los niños.
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL... • 139

Debe contemplar el tipo y tenencia de vivienda, el tipo de


comunidad donde reside la familia, la dotación,
accesibilidad y frecuencia de los servicios públicos
básicos (agua, aseo, excretas y electricidad), las
condiciones sanitarias, hacinamiento y promiscuidad, la
existencia de instituciones u organizaciones comunitarias
FÍSICO AMBIENTAL y la forma como la familia participa en ellas; todo ello es
importante para conocer la situación socioambiental y su
posible relación (por asociación o causalidad) con la
desnutrición.

• Determinación del diagnóstico social: Consiste en la


evaluación relacional de la información recopilada en la
entrevista inicial, a fin de determinar la problemática
social de la familia y su priorización en función del
diagnóstico clínico y/o a la gravedad de la situación
familiar.

La experiencia profesional indica que la familia del niño


desnutrido generalmente es de tipo multiproblemática, la
variedad de situaciones que confrontan sus miembros ameritan
intervenciones múltiples con una o varias redes de apoyo social
durante un tiempo prolongado.
Esta fase diagnóstica puede iniciarse parcialmente desde
la entrevista inicial, partiendo de un “diagnóstico preliminar”
(percepción del especialista) que luego será corroborado o no
140 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

en una o dos entrevistas posteriores, conjuntamente con el o


los miembros de la familia involucrados en el proceso; en
este sentido, se analiza la problemática familiar, sus
repercusiones en la enfermedad, se acuerdan conjuntamente
las áreas y situaciones a intervenir durante el lapso de
tratamiento, así como las responsabilidades y compromisos
de la familia y del Trabajador social en la problemática. Es la
fase donde se conjugan e interrelacionan los saberes y la
percepción tanto de la familia como del profesional, sobre la
problemática objeto de intervención; donde se potencian las
fortalezas de la familia, su rol en el proceso de recuperación
del niño y donde se logra el “enganche” o compromiso hacia
la búsqueda de soluciones.
Como resultado de la experiencia en la atención de familias
con niños desnutridos, realizada durante tres años en el Centro
de Atención Nutricional Infantil de Antímano (CANIA), el
equipo de trabajo social elaboró un listado de los diagnósticos
sociales más frecuentes (Cuadro 2) y aún cuando este listado
es susceptible a
DIAGNÓSTICO SOCIAL
cambios según la
dinámica social,
Adecuada
sirve de guía para el
a n á l i s i s ,
1. Desempleo
interrelación y
2. Ingreso global menor al costo de la Canasta de
síntesis de la
Alimentos
situación detectada
3. Presupuesto familiar ubicado al nivel de pobreza extrema
en las entrevistas
4. Ingreso económico inestable
iniciales.
5. Alta dependencia económica
6. Escasa participación de la madre en la distribución del
CUADRO 2
presupuesto familiar
DIAGNÓSTICOS
7. Ausencia de organización en la compra de alimentos
SOCIALES MÁS
8. Reducción del gasto de alimentación en relación con
FRECUENTES
otros rubros
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL... • 141

EN LA ATENCIÓN 9. Desconocimiento del total ingreso familiar


DE FAMILIAS CON 10. Ingresos provenientes de ayudas particulares o
N I Ñ O S institucionales
MALNUTRIDOS
Adecuada
ÁREAS
11. Madre o figura sustituta analfabeta
1. ÁREA ECONÓMICA 12. Madre o figura sustituta alfabeta
13. Niños en edad escolar no insertos en el sistema
educativo
14. Deserción escolar
15. Repitencia escolar
16. Adultos del grupo familiar sin oficio definido
17. Adultos del grupo familiar sin experiencia y/o
capacitación laboral
18. Nivel educativo del padre no acorde al exigido por el
mercado laboral
19. Nivel educativo de la madre no acorde al exigido por el
mercado laboral

Adecuada

20. Comunicación insatisfactoria


21. Inestabilidad de la pareja
2. ÁREA EDUCACIÓN 22. Madre o padre sola/o
Y CAPACITACIÓN LABORAL 23. Madre adolescente
24. Alcoholismo
25. Drogadicción
26. Violencia doméstica
27. Enfermedad Física o mental incapacitante
28. Pareja no incorporada a programa de planificación
familiar
29. Ausencia de documentación legal en miembros de la
familia nuclear
142 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

30. No reconocimiento de la problemática nutricional


31. Niño en atención al cuidado de menores de edad
32. Presencia de dos o más lactantes por familia
33. Familia extendida numerosa
34. Jefatura del hogar ejercida por miembros que conviven
fuera del hogar (control externo)
3. ÁREA DINÁMICA 35. Madre con jornada laboral prolongada
FAMILIAR 36. Escasa participación de la madre en la toma de
decisiones
37. Ausencia de ambos padres biológicos
38. Sedentarismo

Adecuada

39. Carencia de vivienda independiente


40. Vivienda de construcción inestable
41. Ambiente de uso multivalente usado como vivienda
42. Vivienda ubicada en terreno inestable
43. Vivienda ubicada en terreno de difícil acceso
44. Ausencia o deficiencia del sistema de eliminación de
excretas
45. Irregularidad en el servicio de aseo urbano
46. Irregularidad en el suministro de agua potable
47. Consumo de agua sin tratamiento
48. Ausencia de nevera
49. Presencia de más de tres animales domésticos dentro
de la vivienda
50. Hacinamiento
51. Promiscuidad
52. Vivienda cercana a aguas negras y servidas
53. Deficiencias de las condiciones de Higiene
de la vivienda
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL... • 143

4. ÁREA FÍSICO
AMBIENTAL

En cualquier institución de salud u otra índole, es


importante sistematizar los diagnósticos que se repiten,
porque su frecuencia puede sugerir características comunes
de un determinado diagnóstico clínico, formas de
intervención distintas o ser un posible factor de riesgo social
con prioridad de intervención, tal fue la experiencia en el
CANIA, donde esta sistematización permitió diseñar una
herramienta metodológica, para la detección y medición de
indicadores de riesgo socioeconómico de desnutrición,
presentes en las familias atendidas, que actualmente
constituye actividad de rutina en la fase diagnóstica.

• Determinación de indicadores de riesgo


socioeconómico de desnutrición: este proceso forma
parte de la fase diagnóstica y aunque es un concepto
144 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

transpolado de las ciencias médicas, su utilidad sin


fines de estigmatización o cosificación de los hechos
sociales o de la familia, alertan sobre la probabilidad
de ocurrencia, mantenimiento o agravamiento de una
problemática o enfermedad, e inducen a la
intervención en el ámbito preventivo.

En el CANIA, la identificación de factores de riesgo en todas


las áreas profesionales INDICADORES
forma parte de la
misión institucional, • Desempleo
razón por la cual se • Presupuesto familiar ubicado a nivel de pobreza
hizo un estudio en el extrema
área social detectando • Alta dependencia económica
indicadores en • Inestabilidad del ingreso económico
desnutrición cuya
combinación permitió • Madres o figura sustituta analfabetas o alfabetas
desarrollar una • Padre, madre y/o responsable económico sin
e s t r a t e g i a oficio definido
metodológica para • Niños en edad escolar sin inserción en el sistema
medir riesgo social en educativo
esta modalidad
diagnostica; su • Comunicación insatisfactoria entre los miembros
determinación se basa de la familia
en la presencia o no de • Familia extendida numerosa
un determinado • Madre adolescente
número de indicadores • Madre sola
por área: económica,
educativa, familiar y • Calidad de la vivienda inadecuada
ambiental (cuadro 3), • Carencia de un sistema de eliminación de
permitiendo clasificar a excretas adecuado
las familias en 4 • Hacinamiento y promiscuidad
categorías: riesgo alto, • Agua para el consumo sin tratamiento
mediano, bajo y sin • Carencia de nevera
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL... • 145

riesgo.
El uso de esta estrategia metodológica contribuye a
establecer prioridades en el plan de intervención, destacando
esencialmente, el abordaje de la problemática socioeconómica
y fìsicoambiental, como áreas particularmente involucradas con
el diagnóstico clínico nutricional.

CUADRO 3
INDICADORES DE RIESGO SOCIOECONÓMICO
DE DESNUTRICIÓN

ÁREAS

ÁREA ECONÓMICA

ÁREA EDUCATIVA Y
CAPACITACIÓN LABORAL

ÁREA DINÁMICA FAMILIAR

ÁREA FÍSICO-AMBIENTAL
146 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Intervención social: es la etapa de acción propiamente


dicha cuyo objetivo general es producir cambios en la
problemática previamente determinada; el éxito o fracaso
dependerá de haber realizado adecuadamente la fase de
recolección y análisis de la información, del compromiso o
acuerdo hecho con la familia sobre los aspectos a intervenir y de
la fijación de objetivos con distintos niveles de alcance: mínimos
y amplios.
En un abordaje basado en el establecimiento de
objetivos mínimos, la intervención tiene carácter restaurador
a corto plazo, atiende sólo a la problemática coyuntural que
produce la crisis para fortalecer y reparar la capacidad auto-
organizativa de la familia y motivar hacia compromisos
mayores. Se centran en una necesidad explícita con el
acuerdo de finalizar la relación profesional cuando ésta sea
satisfecha. En esta opción se trabaja generalmente con un
solo miembro, generalmente la madre o figura sustituta
quien tiende a expresar (y justificar) dificultades de diversa
índole para que otros miembros asistan y se incorporen al
tratamiento en forma directa, siendo ella el vínculo de
enlace entre la familia y la institución, y quien recae la
responsabilidad del cumplimiento de las orientaciones dadas
por el equipo interdisciplinario.
La intervención de objetivos más amplios se orienta al
abordaje reorganizativo o terapéutico, debido a los múltiples
problemas o carencias existentes, que involucran a todo el
sistema familiar, comprometiendo a los miembros en la
resolución de las mismas e incluyendo entre las opciones la
intervención por otros profesionales y servicios ínter y extra
institucionales.
Otro aspecto importante en el abordaje, es la elección de
un modelo teórico que guíe la intervención (psicodinámico,
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL... • 147

funcionalista, existencialista, gestálico, etc.). En el área


salud es muy común el uso combinado del modelo psico-
social y funcional porque responde a los objetivos y misión
institucional; en la atención de familias con niños desnutridos,
la multiplicidad e interrelación de los problemas que
confrontan, puede sugerir el uso de varios modelos de
intervención, siempre y cuando sean compatibles entre sí.

• Plan de Intervención: depende de las características de


la familia, del diagnóstico social y de la institución de
trabajo. La organización del diagnóstico por área facilita
la comprensión y diferenciación de la problemática
social, encontrando áreas más susceptibles de
intervención que otras; no todos los problemas sociales
detectados son factibles de intervención, en tanto que
algunos de ellos escapan de los objetivos y misión
institucional donde se desempeña el Trabajador Social,
otros exceden la red de apoyo social que éste maneja
(local-regional) o son situaciones de carácter estructural
cuya intervención compete a otro nivel de decisión.

Basados en la experiencia obtenida en el CANIA, la


intervención social con las familias de niños desnutridos, se
plantea en dos niveles: individual y grupal.

Intervención individual: se realiza a través de la


orientación directa a la familia, la conexión con la red de apoyo
social e institucional y el seguimiento.

–Orientación directa a la familia: se realiza en función del


diagnóstico social, enfatizando:

• El reconocimiento y aceptación del diagnóstico


148 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

nutricional del niño y el compromiso de la familia para


incorporarse al plan de tratamiento integral, hecho
que se logra reforzando el significado e implicaciones
del diagnóstico, el rol de la familia en el tratamiento y
los beneficios de alcanzar logros en menor tiempo,
aclarando el tipo de apoyo a recibir por la institución.

• El manejo de problemas de interacción o comunicaciones,


no patológicos, tendientes a crear un clima de armonía,
respeto y confianza que estimule la integración y
responsabilidad de todos en la resolución de la
problemática que confrontan, especialmente de aquellas
que ofrecen más riesgo a padecer o acentuar la
desnutrición, como son: la seguridad económica para
satisfacer las necesidades de alimentación y las
condiciones sociosanitarias de la vivienda por la relación
del binomio salud-enfermedad.

• El fortalecimiento a la familia a través del apoyo a otros


miembros en aspectos económico-laborales, educativos,
de dinámica familiar y habitacional que contribuyen a la
estabilización y mantenimiento de logros.

• El refuerzo de los logros o alcances obtenidos debe


realizarse constantemente, por mínimos que sean.

Conexión con la red de apoyo institucional que


permite un contacto permanente (vía telefónica o visita
institucional) con otros profesionales e instituciones
relacionadas con la atención de la familia para garantizar la
asistencia o canalización de aquellas situaciones que exceden
la competencia del profesional y/o la misión de la institución,
pero que de alguna manera afectan el estado nutricional.
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL... • 149

• El seguimiento se realiza a través de las consultas de


control, las visitas domiciliarias y las visitas a
instituciones, posibilita llevar el registro de los logros
alcanzados, así como la reestructuración del plan de
intervención según los cambios en la familia; destaca
entre éstas la visita domiciliaria no sólo como técnica de
recolección y confirmación de datos socioambientales
sino como estrategia para contactar e involucrar a otros
familiares en el plan de intervención.

Intervención grupal: con ella se pretende agilizar el


reconocimiento de la problemática nutricional, búsqueda del
cambio y mantenimiento de la recuperación del niño, a través
del intercambio de experiencias en grupo.
Para la planificación de la intervención grupal se deben
considerar aspectos de vital importancia como son: objetivos,
contenidos básicos a trabajar, estrategia metodológica a utilizar
en función del nivel educativo de los participantes, los recursos
materiales disponibles y el equipo interdisciplinario a intervenir,
entre otros. Puede reforzarse el contenido impartido, con la
entrega de material de apoyo, ya sea creado por el equipo o
solicitado a otra institución que lo edite.
El feeb back que se suscita en el intercambio de
experiencia favorece: la ruptura de creencias y rituales en
aspectos relativos a nutrición y familia; el reconocimiento y
toma de conciencia de la enfermedad nutricional,
incrementándose el apoyo familiar; la incorporación de otros
miembros del grupo familiar, significativos en el tratamiento
integral; la creación de estrategias de incremento del ingreso
y distribución adecuada del presupuesto familiar; el
fortalecimiento del potencial de la familia y la reducción de
la probabilidad de reincidencia de la enfermedad.
150 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Una de las características frecuentes del trabajador


social, es querer intervenir todas las situaciones a la vez y
tratar de obtener cambios en corto tiempo; la dinamicidad de
los problemas sociales ameritan permanente evaluación,
jerarquización y planificación del tipo de intervención y de
sus alcances, según la intensidad, complejidad e incidencia
en la problemática tratada, para que los resultados en la
recuperación sean efectivos.
ROL DEL TRABAJADOR SOCIAL... • 151

BIBLIOGRAFÍA
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mito de la asistente social. Buenos Aires, Argentina:
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con familias. Caracas: Avepso, pp. 10:23-32.
TRABAJO SOCIAL
E INTERDISCIPLINA1
LA CUESTIÓN DE LOS EQUIPOS
DE SALUD

LIC. SUSANA CAZZANIGA

El título de este artículo da cuenta de un enunciado en el que


se expresan, por lo menos, tres aspectos centrales que manifiestan
tensiones internas y que al articularse expresan una problemática
considerable y compleja. Intentaré desarrollar el tema realizando
un recorrido por lo que considero configuran los grandes ejes: las
profesiones, profundizando en Trabajo Social, el equipo, abordando
la interdisciplina y el campo de intervención, en este caso, la salud.
Desde allí consideraré algunas conclusiones.

Las profesiones son producto del movimiento


modernizador de las sociedades. La complejización de la vida

1. El presente artículo ha sido elaborado sobre la base de la ponencia


desarrollada en las VI Jornadas de Medicina General y 1ª de Equipo de Salud
organizada por la Asociación de Medicina General de Santa Fe y llevada a cabo
en la ciudad de Reconquista, Santa Fe, en el mes de junio de 2001.
154 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

social, fundamentalmente en el marco de los sistemas


capitalistas trae aparejado, entre muchos nuevos fenómenos, la
necesidad de la racionalización del saber de las prácticas
sociales. Se está frente a un modo nuevo de dar respuesta a
diferentes problemas y esta búsqueda de los medios más
adecuados para el logro de fines (tal el concepto que Max Weber
otorga a la racionalización), supone una expansión paralela del
saber racional, un saber técnico acerca de los medios2. Este saber
moderno desplaza al conocimiento empírico, conocimiento
obtenido en forma práctica, que es el característico de las
comunidades tradicionales, desplazamiento que como bien
sabemos, no es eliminación.
Si bien las profesiones van surgiendo en distintos
momentos y son producto de complejos mecanismos, van
adquiriendo un rasgo común: responden a necesidades y
urgencias sociales que estructuran un objeto específico de
intervención. En torno a ellas se constituye además, un campo
disciplinar que como conjunto de saberes explica
científicamente un recorte de la realidad en el que cada objeto
particular se configura, y otorga las herramientas necesarias
en el plano metodológico para el conocimiento y acción.
El programa de la ciencia moderna, donde las ciencias
naturales durante mucho tiempo han ejercido su hegemonía (y
de hecho todavía dan pelea respecto de un estatus diferente y
superior en relación con las ciencias sociales), favorece el
parcelamiento de las profesiones, o dicho de otra manera,
marca los territorios de conocimiento y de ejercicios
profesionales.
Un análisis en particular merecen las profesiones que

2. GOMEZ OCAMPO; TENTI FANFANI. 1994. Universidad y profesiones.


Crisis y alternativas. 2ª edición. Buenos Aires: Miño y Dávila Editores.
TRABAJO SOCIAL E INTERDISCIPLINA • 155

intervienen en el campo de lo social por la problemática que


deriva de la inserción de las mismas en las ciencias sociales.
He mencionado la conflictiva relación que históricamente se
ha dado entre las ciencias naturales y las ciencias sociales y
humanísticas, cuestión que presentó resoluciones diferentes
y que desde mi punto de vista en algunos lugares, todavía
persiste como dificultad.
En efecto, si pensamos que las ciencias naturales,
también denominadas ciencias duras, le llevan a las ciencias
sociales casi doscientos años de diferencia en su aparición
en el escenario de la vida social, rápidamente podríamos
decir —quizás desde el sentido común— que se trata en
todo caso de procesos de consolidación diferenciales. Si
profundizamos el análisis desde el punto de vista
epistemológico, veremos que la cuestión es más profunda ya
que en realidad se trata de una acusación desde las ciencias
naturales hacia las sociales que niega el carácter científico
de las mismas, alegando para esto, entre otros tópicos:

• la imposibilidad de la objetividad, ya que el objeto de


estudio (el hombre en sentido genérico) es de la misma
naturaleza que aquel que intenta conocerlo (el
investigador).
• la multiplicidad de métodos que se utilizan en el proceso
de construcción del conocimiento.
• las dificultades internas para llegar a consensos respecto
de las teorías.

Desde las ciencias sociales se responde de diferentes


modos. En el siglo XIX y de la mano de Comte se encuentra la
primera salida a esta problemática. El positivismo que él
confiere a las ciencias sociales otorga a las mismas la
posibilidad de homologar su estatus al de las ciencias naturales
ya que según el autor es factible utilizar el mismo método (el
156 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

método experimental), e incorporando conceptos de la física y


de la biología, entrega a estas ciencias la posibilidad de
intervenir en pro del orden y el progreso. Una segunda vía de
solución viene de la mano de las corrientes antipositivistas que
separan a ambos campos científicos, reconociendo diferencias
epistemológicas entre ellos sin que esto anule el criterio de
cientificidad para las ciencias sociales: mientras éstas últimas
comprenden la realidad social, las ciencias naturales explican
en términos de leyes universales sus objetos que dada su
naturaleza permite este tipo de especulación. Los últimos
cuarenta años son testigos de constantes crisis en todo el
espectro científico, donde las diferencias en las perspectivas
epistemológicas paulatinamente van teniendo lugar. Lo
interesante de resaltar en este punto es que a las
circunscripciones de “objetos” según disciplinas, se le suma a
las profesiones inscriptas en las ciencias sociales la constante
lucha por su estatus.
Trabajo Social participa de estas determinaciones, que
por su propio proceso de constitución disciplinar adquieren
características particulares. Su aparición como una nueva
práctica de intervención en el espacio social asistencial, ese
campo híbrido entre lo público y lo privado, que la ubica en
la incomodidad —para darle un nombre— de trabajar con un
sector social, pero respondiendo en su calidad de profesional
asalariado a un tercero (Estado, instituciones privadas, ONG,
empresas, etc.), la mayoría de las veces con un mandato por
parte del empleador de control social, la enfrenta a nudos de
gran complejidad que tensionan su práctica cotidiana.
Intentaré expresar algunos de ellos, para luego retomarlos en
relación con la inserción de los trabajadores sociales en los
equipos interdisciplinarios.

Respecto de su objeto de intervención:


litros de tinta y kilos de papel se han usado desde Trabajo
TRABAJO SOCIAL E INTERDISCIPLINA • 157

Social para dar cuenta de este aspecto sin que podamos


todavía hoy hablar de ciertos consensos. Desde la intervención
en “el dolor humano” (tal la consideración que realiza el Dr.
Germinal Rodríguez en un artículo de 1927 en el diario La
Nación cuando fundamenta la necesidad de la creación de una
escuela de Servicio Social en la Argentina), pasando por las
necesidades sociales, los problemas sociales y hasta las clases
oprimidas, la discusión además de haber sido planteada con
insolvencias teóricas como manifiestan algunos de estos breves
ejemplos, ha quedado en enunciaciones generales.
Es muy probable, sin restarle importancia al tema, que este
verdadero desvelo (al igual que la cuestión del método) esté
más ligado a esa preocupación por la cientificidad heredada del
pensamiento de la ciencia hegemónica, como mencionaba
antes, que por identificar esa “mirada particular que me
permite decir y hacer con voz propia”, y desde allí dialogar con
otros saberes. De cualquier modo este “nudo” no es simple, ya
que su ambigüedad trae aparejada esa especie de condición de
“todólogos” que en la práctica cotidiana se transforma para los
trabajadores sociales en un hacerse cargo de todo aquello que
no es objeto de intervención de los demás profesionales, habida
cuenta de esa parcelación de la que hablaba antes, donde el
adjetivo de “social” que portamos en nuestro título habilitaría a
resolver todo aquello que entraña marginación, pobreza y
exclusión. El punto de debate radica, desde mi perspectiva, en
despejar teóricamente el concepto de “lo social”.

Respecto de la presentación
como técnica que nos legó el positivismo:
la naturaleza interventiva de Trabajo Social y la fuerte
influencia del positivismo en la configuración desde sus inicios del
campo disciplinar, instala a la profesión como técnica, esto es,
como mero hacer, provocando por una parte una división entre el
conocer y la acción, relegando a Trabajo Social a una destreza en
158 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

el manejo de técnicas e instrumentos, y colocándolo en un lugar


subsidiario respecto de lo teórico. Algunos insumos provenientes
de diferentes disciplinas bastan como repertorio conceptual que
luego operan en una suerte de categorizaciones cristalizadas
acerca de los sujetos que demandan la intervención, los
diagnósticos y los “tratamientos”. Por otra parte, ese lugar de
técnicos coloca a los trabajadores sociales como auxiliares
de otras profesiones, levantando las “evidencias” que surgen
de la vida cotidiana de los sujetos para poder diagnosticar el
“tipo de caso” en que se está trabajando y en los proyectos
de investigación terminamos siendo los mejores
encuestadores. En este aspecto el punto de debate se centra
en la resignificación de la naturaleza interventiva de Trabajo
Social, o en todo caso, qué entendemos por intervención.

Respecto de los desplazamientos


de los atributos benefactores y caritativos
de las prácticas asistenciales históricas,
hacia Trabajo Social:
la intervención social como mecanismo de reparación de
las fisuras que en términos de desigualdades sociales se dan en
la sociedad, fue configurada desde diversas lógicas siendo la
caridad y la filantropía las que han permanecido con más
fuerza en el tiempo. Trabajo Social como profesión no es una
variante mejorada de las mismas, es una nueva práctica que se
formaliza en un momento histórico particular (la consolidación
del sistema capitalista), y presenta diferencias sustantivas
respecto de aquellas, ya que el carácter racionalista y científico
aparece como significativo (cuando los médicos higienistas
proponen la creación de escuelas para formar estos
profesionales en muchos países de América Latina y en
particular en el nuestro, lo hacen con la convicción de la
necesidad de una intervención que pudiera estudiar las causas
PRESENTACIÓN CUADERNOS DE MARGEN • 159

de la pobreza y proponer con criterios racionales alternativas de


s u p e r a c i ó n ) .
No obstante esto, la fuerte presencia de las otras prácticas de
asistencia y el encomendar preponderantemente a las mujeres
esta misión por los atributos construidos respecto de las mismas
en la sociedad patriarcal (abnegación, sensibilidad, instinto
maternal, etc.) produce una operación de desplazamiento
hacia la profesión. De esta manera en el propio imaginario de
Trabajo Social, el necesario compromiso social se convierte
en la imposibilidad de poner los límites a las demandas y la
aceptación medianamente pasiva de bajos salarios o la
incorporación a una institución en carácter de ad honorem, se
re interpretan en una suerte de identificación con los que
menos tienen. Visto desde afuera estas identificaciones
suponen una homologación de prácticas y la posibilidad de
pensar que cualquier persona de buena voluntad puede ocupar
ese lugar. Aquí el punto de debate tiene que ver con una
diferenciación clara entre ética y voluntarismo o “moral
sacrificial”.
Estos aspectos apuntados que seguramente son algunos
entre muchos más, han influido notoriamente en las prácticas
profesionales y en particular cuando los trabajadores sociales
integramos equipos de trabajo en las instituciones. A manera
de una posición respecto de los puntos de debate señalados
me interesaría dejar brevemente algunas reflexiones para
luego incorporarlos en la problematización del lugar de
Trabajo Social en los equipos de salud.
El concepto de lo social: dos modos de conceptualizar lo
social darán significación en forma diferenciada aunque por
cierto articulada a la problemática apuntada. Por una parte si
entendemos lo social como toda actividad o relación
intersubjetiva que teje la vida colectiva no existiría división
tajante entre las prácticas profesionales, e incluso entre las
diferentes prácticas científicas ya que el trabajo y la producción
160 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

que las mismas realizan son actividades eminentemente


s o c i a l e s .
Están insertas en una red de relaciones sociales de donde
emergen los problemas que ellas tratan de resolver, sea vía
intervención o investigación y sus resultados vuelven a esa
misma red. Si consideramos lo social como ese conjunto de
prácticas que surge en relación con la existencia de ciertas
poblaciones con necesidades básicas insatisfechas, “pobres”, o
que presentan obstáculos para su reproducción social, y la
necesidad de hacerse cargo de ellas, ese espacio que se
articula expresándose como diferente de la esfera económica y
política, entre lo público y lo privado, entonces estaríamos
frente a un hecho que podríamos llamar “lo social asistencial”3.
En este plano los trabajadores sociales abrevamos, ya que se
trata de nuestro campo de intervención. Ahora bien, se trata de
un campo compartido por otras profesiones que trabajan en el
ámbito de lo público: médicos, psicólogos, psicopedagogos,
enfermeros, terapistas ocupacionales, agentes sanitarios, entre
otros. En todo caso se trata de recortar esa mirada particular, que
desde mi perspectiva se constituye en las condiciones de vida de
los sujetos involucrados en la intervención, tanto materiales
como simbólicas que permiten la construcción teórica del objeto
de intervención. El objeto de intervención no es algo dado de
antemano, sino una problematización teórica que se realiza en
relación con una referencia empírica, en este caso las
condiciones de vida de los sujetos que demandan la intervención.

El concepto de intervención profesional:


el modo en que podemos superar la división conocimiento y
acción, en otras palabras, dar un salto cualitativo del lugar de la

3. CASTEL, Robert. 1997. Las metamorfosis de la cuestión social. Crónica del


salariado. Buenos Aires: Paidós.
TRABAJO SOCIAL E INTERDISCIPLINA • 161

técnica, supone reconocer que en la intervención siempre está


presente, y más todavía antecediendo, una matriz teórica que
operando como régimen de la mirada estructura los
procedimientos (le dan contenido) en relación con la
intencionalidad que se pretende. El método en todo caso es una
mediación entre teoría y empiria, y presenta una coherencia
intrínseca. De esta manera, se requiere de un examen constante
de las categorías que usamos, reconocer la trama teórica que
le da contenido a fin de ponerla en tensión con la realidad
que abordamos, y buscar la pertinencia de los instrumentos
con que contamos para no caer en la racionalidad
instrumental, esa que pone énfasis en los medios sin tener
en cuenta los fines últimos. La realidad no habla por sí
misma, excepto que le preguntemos desde algún lugar
teórico, pero tampoco se trata de hacer contestar a la
realidad lo que queremos que ella diga. Es un ejercicio de
tensión, de retraducción permanente entre categorías
teóricas y empiria.
Diferenciación entre ética y voluntarismo: nuestra
profesión reconoce desde sus inicios el lugar de la dignidad
humana. Seguramente que este valor tan importante no
siempre ha tenido para los trabajadores sociales el mismo
contenido, es más, considero que ciertos valores que
estructuraron la práctica profesional desde siempre, en no
pocas oportunidades fueron tomados desde lo abstracto y de
este modo han impedido reconocer las causas últimas que
están a la base de los problemas sociales que manifiestan los
sujetos. Creo pertinente recuperar que una postura ética desde
la profesión significa otorgar contenido a estos valores
reconociendo las causas por las cuales cierto segmento de la
población se encuentra en condiciones de necesidad y de
asistencia instalando el tema de los derechos. Y es en este
plano que cobra importancia la actitud profesional
desplegando todos nuestros saberes y la dimensión política
162 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

para reconocer y dar lugar a los “otros”, el derecho a ejercer


derechos, así como defender nuestros propios derechos como
trabajadores.

II

El tema de lo interdisciplinario presenta larga data. Mucho


se ha escrito, mucho se ha dicho, y en la práctica concreta, no
siempre los intentos llegan a buen puerto. Algunas de las
características comentadas en el apartado anterior operan
como obstáculo para su concreción.

Según Follari, lo interdisciplinario es la conjunción de


lenguajes diferentes, que hablan de cosas distintas, en términos
diferentes y por lo tanto implica un arduo esfuerzo, mancomunar
puntos de vista, acercar diferencias de significado de las palabras
y construir un marco4. Nora Elichiry afirma que el vocablo “inter”
da cuenta de un nexo del que se espera cierta totalidad, partiendo
del objeto real y no de las disciplinas dadas. Desde estas
consideraciones respecto de lo interdisciplinar, podemos analizar
algunas de las dificultades que una empresa como esta presenta:

• La fuerte estructuración que presentan las disciplinas en


relación con el legado de la ciencia hegemónica, que se
traduce en las formaciones académicas de los
profesionales. La limitación de los objetos de conocimiento
e intervención dificulta el trabajo del “nexo” del que habla
Nora Elichiry. Es probable que en el ámbito de la

4. FOLLARI, Roberto. 1992. Apuntes Seminario Epistemología (mimeo).


Paraná: Facultad de Ciencias de la Educación. UNER.
TRABAJO SOCIAL E INTERDISCIPLINA • 163

investigación, este nexo tenga mayor experiencia de


trabajo, pero en la práctica profesional, el mismo se
expresa generalmente como “interconsulta”. Esta dificultad
es de orden epistemológico.
• La organización administrativa de las instituciones públicas
donde en los organigramas, que responden a las lógicas
tayloristas (separación y jerarquización) encontramos
generalmente la división en departamentos, direcciones o
secciones, que agrupan por profesiones (Departamento de
Servicio Social, de Psicología, Médico, etc), lo que estructura
una forma de trabajo que favorece la parcelación. El “nexo”
aparece entonces como derivaciones. Estamos frente a un
problema administrativo, que articula concepciones
epistemológicas y políticas.
• Las diferentes consolidaciones que las disciplinas, y por
ende las profesiones, presentan en los campos de
intervención. Estas diferencias se encuentran en relación
con los estatus adquiridos en el ámbito científico, los
prestigios, las “presentaciones” que se han hecho de ellas
en la sociedad y las representaciones sociales que circulan
acerca de las mismas. Al interior de los equipos estas
diferencias aparecen con verdaderas asimetrías en el
ejercicio del poder. Los que deciden y “los chicos de los
mandados”. El problema se convierte en lo cotidiano como
político.

Estos obstáculos, no siempre de fácil remoción,


ameritan una fuerte autocrítica entre todos los actores a fin
de llegar a diálogos profundos entre los diferentes saberes.
Desde todos los espacios debemos contribuir a esto, y
especialmente los ámbitos de formación deberán realizar
esfuerzos para transferir otros modos de pensar y hacer,
respetando las especificidades pero teniendo como objetivo
los trabajos en complementariedad.
164 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Por otra parte, es interesante repensar el campo de


intervención de los equipos interdisciplinarios en el ámbito
público. Los objetos complejos deben abordarse con herramientas
complejas. Los problemas sociales presentan de por sí una gran
complejidad, acentuada en la actualidad dadas las
transformaciones operadas en el contexto. Dice Tenti Fanfani al
respecto: “... la complejidad de los nuevos problemas sociales
hace que ninguna profesión en particular sea capaz de dar
respuesta global a los mismos”, y frente a ello el autor llama la
atención a la formación profesional diciendo “... es sintomático...
(que) la formación de los especialistas no haya tomado
suficientemente en cuenta la necesidad de desarrollar en sus
graduados las habilidades necesarias para el trabajo en equipos
inter-disciplinarios”.5
Aquí se hace necesario volver al concepto de lo social
asistencial que mencionara más arriba como ese conjunto de
prácticas que surgen en relación con la existencia de sectores
sociales que expresan necesidades insatisfechas y la voluntad
institucional de hacerse cargo de ellas. Este campo se manifiesta
en el espacio público estatal y/o público societal, y en él participan
todos los profesionales que trabajan en el mismo, por lo tanto
todos estos actores tienen como horizonte de intervención este
social asistencial, que se expresa en los llamados “problemas
sociales”. De este modo, si bien se puede reconocer desde las
diferentes disciplinas aspectos de incumbencia específica, la
comprensión de las situaciones que se abordan merecen un
análisis complejo que ponga en juego las especificidades de los
saberes profesionales en clave de integralidad, para luego
identificar las intervenciones particulares desde una perspectiva
de complementariedad. Desde esta perspectiva no hay una
disciplina particular que interviene en lo social, en todo caso

5. GOMES OCAMPO, TENTO FANFANI. Op. Cit.


TRABAJO SOCIAL E INTERDISCIPLINA • 165

habría una “mirada disciplinar” que se hace cargo de ciertos


aspectos de lo social.

III

Los equipos interdisciplinarios en el campo de la salud


pública reproducen las determinaciones que he apuntado en
los párrafos precedentes, y se encuentran atravesados a la vez,
por las transformaciones estructurales a las que nos hemos
visto sometidos desde hace más de dos décadas. En este
sentido, cabe apuntar algunas cuestiones:

• En primer lugar, vale decir que los cambios de enfoque


acerca de las políticas públicas que se han dado en los
últimos años (de políticas sociales universalistas a las
focalizadas), la retirada del Estado de los espacios de
protección social, los problemas de financiamiento, han
devaluado ciertos ámbitos, entre ellos el de la salud pública.
La institucionalidad social que en mayor o menor medida
contenía la cuestión social hasta hace tiempo atrás se va
desvaneciendo, sin que emerjan nuevas reglas de juego
pactadas por los diferentes actores sociales en un sentido de
integración. Cada día parece quedar más claro la existencia
de dos andariveles: un grupo reducido que concentra la
riqueza, producto del pacto entre los dominantes, y la
inmensa mayoría que queda como “excedente” sin
posibilidades de concertación. Esta situación expone
peligrosamente a la población argentina e interpela la
noción misma de sociedad.
• En segundo lugar y como consecuencia de lo anterior, las
instituciones en general y las de salud en particular viven
una especie de estallido: junto a las dificultades apuntadas
que se traducen en escasez de personal, partidas
insuficientes, problemas de infraestructura, se observan
166 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

cambios significativos en las demandas. No sólo se


incorpora el sector social que sufre la movilidad social
descendente (desocupados, trabajadores precarizados,
solicitud de prácticas de gran complejidad que no cubren
las obras sociales), sino que se diversifica el tipo de
demanda, apareciendo situaciones recalificadas en tanto
conflictividad y magnitud (malos tratos, violentaciones
diversas, requerimiento de alimentos, aumento de
padecimientos psíquicos, etc.).
• En tercer lugar, resulta conveniente decir que hoy en no
pocas oportunidades, ese “otro” con el que trabajamos,
(aquel que acude por asistencia), se convierte en un espejo
en el que nos vemos reflejados: precarizados, sufrientes,
angustiados, lo que incorpora un “plus” subjetivo a una
práctica de por sí dificultosa.

Estos últimos aspectos señalados recolocan la cuestión de


la interdisciplinariedad como desafío a construir, pero también
como estrategia necesaria de intervención y de resistencia.
Dicho de otra manera, la interdisciplina en estos “nuevos
escenarios” no sólo da cuenta de una perspectiva
epistemológica que trasciende las “parcialidades” impuestas
por las improntas positivistas, sino que se convierte en
condición de posibilidad para abordar la complejidad de las
demandas, y a la vez permite la contención grupal de los
profesionales tanto como la elaboración de alternativas
políticas de conjunto.

IV

Para Trabajo Social el tránsito por estas experiencias


presenta diversas características, exitosas algunas,
frustrantes en muchos casos. Cuando se trabaja en los
espacios hospitalarios es frecuente que al trabajador social
TRABAJO SOCIAL E INTERDISCIPLINA • 167

se le asigne la misión de conectarse con los familiares del


paciente, provea de pasajes, resuelva la cuestión de los
medicamentos, reinserte en “algún lugar” al que fue dado
de alta, realice diversos trámites frente a la justicia, entre
otras actividades. En el primer nivel de atención, lo que en
alguna oportunidad se pensó como Atención Primaria de la
Salud, pareciera que existe un espacio de mayor libertad,
aunque el desborde de las problemáticas que hoy llegan al
mismo y el reducido número de profesionales (tanto de
nuestra especificidad, como de otros) dificultan la
posibilidad de estructurar intervenciones comunitarias.
Desde mi punto de vista y sin desconocer las limitaciones a
las que nos vemos sometidos, es imperioso reconsiderar
nuestras estrategias de intervención en clave
interdisciplinaria, independientemente de los espacios en
los que trabajamos y de la presencia de otros profesionales.

Por una parte, en los lugares donde las “misiones” están


establecidas, al trabajador social le cabe desplegar sus
conocimientos teóricos a fin de expresar con claridad esa “mirada
particular que permite decir y hacer con voz propia, y desde allí
dialogar con otros saberes”. La capacidad de argumentar, la
rigurosidad teórica, la intervención responsable, posiciona de otra
manera y otorga condiciones para el ejercicio de poder, en este
caso poder decir, poder hacer, poder construir. Son las prácticas
sociales diferentes las que logran remover las representaciones
sociales, por lo que las prácticas profesionales fundadas y
coherentes permitirán recuperar desde otro lugar a Trabajo Social
en un equipo de salud.

6. RICHMOND, Mary E. 1993. Caso Social Individual. 3ª Ed. Buenos Aires:


Ed. Humanitas.
168 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

Por otra parte, en los espacios institucionales donde no se


cuenta con otros profesionales, el desafío radica en construir
el equipo, trabajando interinstitucionalmente. En la práctica
del día a día, es muy común que realicemos articulaciones con
profesionales de diferentes instituciones u organizaciones, el
punto sería trascender la “articulación” (interconsulta o
derivación) hacia una construcción interdisciplinaria. Nuestra
tradición en la elaboración de diagnósticos, los saberes acerca
de la vida cotidiana, la relación directa con la población nos
colocan en un lugar casi privilegiado como para proponer y
defender proyectos que trasciendan el asistencialismo, aún en
épocas de retracción y fragmentación. La cuestión pasa, en
todo caso por ser propositivos, recuperando la voluntad
política que subyace en la profesión. No nos olvidemos que
más allá del encuadre reformista que dominó la aparición de
Trabajo Social en el escenario mundial, las primeras
trabajadoras sociales participaron activamente de la
formulación de leyes de protección social, tanto en Estados
Unidos como en Inglaterra6.
En síntesis, la interdisciplina constituye una herramienta
necesaria para intervenir en lo social hoy. No es desde la
soledad profesional que se pueda dar respuestas a la
multiplicidad de demandas que se presentan a las
instituciones, como tampoco es posible mantener una
posición subalterna dentro de los equipos. Tanto la
impotencia como la omnipotencia se constituyen en actitudes
duales que niegan el carácter complejo de la vida social y en
consecuencia obstruyen la posibilidad de intervenciones
coherentes, creativas y contenedoras de la utopía. Esa, que
según el poeta, se manifiesta como horizonte, “cuanto más se
camina, más se desplaza”, pero que contiene siempre la
esperanza de estar transitando por la vida, en este caso, por
la vida profesional.
UNA EXPERIENCIA
DE TRABAJO EN SALUD SEXUAL
Y REPRODUCTIVA
EN EL BAJO FLORES

PROCESOS COMUNITARIOS
QUE REPRODUCEN SALUD

E. ALICIO / M. A. DELGADO / M. L. GARGIULO /


M. E. MENDES / A. PAGLIARI / M. RUBINSTEIN

INTRODUCCIÓN
El presente trabajo se propone transmitir un proyecto de
salud reproductiva con abordaje comunitario en la villa del
Bajo Flores desde los centros de salud N° 19 y N° 20
(CeSAC). El mismo se viene llevando a cabo desde agosto de
2000. Su fundamento se basa en razones de índole
epidemiológicas, sanitarias y sociocultural. La metodología
diseñada e implementada tiene un doble valor estratégico, ya
que por un lado se propone facilitar el acceso de la población
a los efectores de salud en pro de disminuir la
170 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

morbimortalidad de las mujeres en edad fértil del área


programática de los CeSAC, y por otro, fortalecer y potenciar
prácticas enriquecedoras para la vida comunitaria.
Se exponen algunos de los resultados obtenidos hasta el
momento, obstáculos visualizados y conclusiones.

FUNDAMENTACIÓN
El presente proyecto surge como consecuencia de las
necesidades planteadas por un grupo de mujeres de un
comedor comunitario y vecinos que concurren al mismo.
La división social y cultural de roles en base a los
géneros deja a la mujer a cargo de todo lo que se refiera al
hogar y a los hijos (en el mundo privado), mientras que los
hombres asumen el rol de productores que se desenvuelven
en el ámbito laboral y el mundo público. La unidad
doméstica, en tanto está a cargo de las tareas cotidianas de
mantenimiento y reproducción, se integra a redes más
amplias de ayuda mutua (de parentesco o vecindad).
Especialmente en los sectores populares esta inserción
cobra importancia en la resolución de necesidades
cotidianas. Son redes activadas y mantenidas por mujeres,
aún cuando sirven a las necesidades de todos los miembros
de la familia o la comunidad. Se trata de un fenómeno
estable en la estructuración de las relaciones sociales
urbanas cotidianas, cuya importancia crece en la medida
que escasean los recursos institucionales estatales, tales
como guarderías, jardines maternales, comedores
comunitarios, etc. La crisis de los servicios públicos y del
Estado “recae fundamentalmente sobre las mujeres a cargo
de las tareas reproductivas. Las esperas en hospitales para
la atención médica o aun la inaccesibilidad de estos
servicios, el deterioro o ausencia de servicios habitacionales
UNA EXPERIENCIA DE TRABAJO EN SALUD SEXUAL... • 171

y barriales, deben ser suplidos por un incremento de la


actividad doméstica y una intensificación de las ayudas
informales a cargo de las mujeres.”1
En abril de 2000 se realizó en el Comedor Niños Felices
una reunión a la que asistieron más de 50 personas en las que
se pusieron de manifiesto las necesidades que sirvieron como
disparador para la planificación y ejecución de este proyecto.
En aquella oportunidad surgieron las siguientes demandas:

• Necesidad de contar con mayor información:

“Es bueno que explique todo esto porque por


ejemplo el preservativo hay gente que lo usa medio
mal, lo usan después de penetrar, lo sacan y ahí se lo
ponen y eso esta mal, no?”
Taller en comedor Los Payasitos; (21/02/00)

• Necesidad de contar con servicios más accesibles en


cuanto a turnos y a distancia, puesto que aun contando
con efectores de salud cercanos es una realidad que los
episodios de violencia urbana (robos mayormente)
obstaculizan la concurrencia a los Centros de Salud:

“No seguí yendo porque me dan miedo los


chorros. Esta zona es muy peligrosa.”
(Participante de la reunión mencionada)

Asimismo, la sobrevivencia cotidiana hace que el ir a


buscar un anticonceptivo se vea postergado o bien que en
algunos casos el varón no permita ir a la mujer en busca del

1. JELIN, E. y G., PAZ. 1991. Familia/ Género en América Latina: Cuestiones


históricas y contemporáneas. Buenos Aires: CEDES, p. 21.
172 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

mismo:

“Vino y nos dijo: ¿Ustedes son un Comedor o un


hospital?, yo no le di permiso a mi esposa para ver a un
médico (en relación con la participación de su esposa en
los talleres de salud reproductiva en ese comedor).
Después la encerró y no la dejó ir a la consulta médica.”
Taller en comedor La chispa; 28/02/01

A esta situación se suma la escasez de recursos humanos


y de insumos necesarios para la atención de la mujer en edad
fértil. Como también el hecho de que, en numerosas ocasiones,
los discursos y prácticas del equipo de salud no contemplan las
creencias y prácticas de las mujeres y varones en relación con
los procesos de salud reproductiva y sexualidad.
De más está aclarar las razones de índole sanitarias, de
prevenir la morbimortalidad materno-infantil a través de un
adecuado control de salud reproductiva.
En este sentido, Argentina presenta todavía una
relativamente alta tasa de mortalidad materna en relación con
la disponibilidad de servicios de atención de la salud y a nivel
promedio de desarrollo alcanzado.
En el año 1998 morían 38 mamás cada 100 mil nacidos
vivos; en 1999, 41 mamás. Asimismo, según cifras del Ministerio
de Salud, se practican alrededor de 500 mil abortos por año, y
sólo un 29 por ciento de las argentinas en edad fértil —entre los
14 y 45 años aproximadamente— usan métodos anticonceptivos
seguros (Datos extraidos de Publimetro, del 9 de mayo de 2001,
Ministerio de Salud. Centro Latinoamericano de Salud y Mujer).
En lo que refiere a la legislación existente en relación con esta
problemática cabe mencionar que en el año 2000 en el ámbito de
la Ciudad de Buenos Aires, se sancionó la Ley nº 418, cuyo objeto
es garantizar las políticas orientadas a la promoción y desarrollo de
la Salud Reproductiva y la Procreación Responsable.
UNA EXPERIENCIA DE TRABAJO EN SALUD SEXUAL... • 173

En el marco de este objetivo y teniendo en cuenta las


necesidades planteadas por los vecinos, es que surge como
primordial elaborar estrategias que posibiliten el acceso a la
información, a los servicios y a la distribución de
anticonceptivos de manera más cómoda y eficaz respetando las
creencias, percepciones y temores como también el contexto
socio-económico de los mismos. Estrategias estas, que
acompañen y fortalezcan modalidades propias de
organización–participación y los lazos solidarios y de confianza
existentes entre los vecinos.
Se coincide con Eduardo Menéndez cuando plantea que es
casi un lugar común reconocer que el proceso salud-
enfermedad-atención constituye parte de la vida práctica e
imaginaria de los conjuntos sociales, que éstos crean
representaciones y prácticas para convivir, modificar y de ser
posible erradicar algunos de sus padecimientos. Además, se ha
reconocido que es a nivel del grupo doméstico y de otros
microgrupos, que se realiza el mayor número de actividades —
incluidas las participativas— referidas al proceso de s/e/a, y
que dichas actividades están centradas en la mujer en su rol de
esposa/madre.
Es la familia quien se moviliza en la búsqueda y
satisfacción de la atención de la salud familiar; y las
organizaciones comunitarias, que además de cubrir
necesidades básicas como la alimentación, realizan tareas
promocionales y se preocupan por la prevención de temas
como la salud reproductiva. Tareas que responden también, a
instancias en las que se interpela y se exige a los servicios de
salud pública que hagan efectivo el derecho a la salud.
Se coincide nuevamente con Menéndez cuando plantea el
tipo de participación social que se expresa en distintas
unidades y actores sociales. Los autores del presente trabajo
toman dos de los tres actores sociales que él distingue, a saber:
174 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

a. Personas y microgrupos espontáneos (especialmente en el


grupo doméstico, la P.S. opera en términos de curación,
prevención, ayuda mutua, etc.). A partir de actividades
producidas espontáneamente, que suponen la construcción
y desempeño de roles específicos. Forman parte del
proceso de autoatención, al que se considera como una
estructura básica para el proceso de reproducción biosocial.
b. Microgrupos y mesogrupos construidos: incluye grupos
organizados intencionalmente para la realización de
acciones inmediatas o a mediano plazo que suponen
una organización formal momentánea o permanente. En
éste se ubicarían las mencionadas organizaciones
comunitarias (Menéndez: 1998).

CARACTERIZACIÓN DE LA POBLACIÓN

En este contexto, el área del CESAC Nº19 comprende los


barrios Rivadavia I y II, los cuales cuentan aproximadamente
con 5000 y 2000 familias respectivamente2, y parte de la
Villa 1-11-14, cuya población está estimada en 5000
familias3. Esta última es también el área de cobertura del
CESAC Nº20; los mismos tienen bajo su área de cobertura
poblaciones cuyos derechos a la salud, la vivienda y la
educación entre otros, son seriamente vulnerados.
Cabe aclarar que, en lo que refiere al CESAC Nº19, si

2. Estos datos surgen de un relevamiento del CESAC Nº 19 que data del año
1998, los datos son sólo aproximados, puesto que el subalquiler de piezas es
un fenómeno muy extendido en estos barrios.
3. Los datos en este casos fueron aportados por la Comisión Municipal de la
Vivienda, quien realizó un censo en el año 99. Cabe señalar que tampoco son
muy precisos. Por el mismo fenómeno que en los barrios anteriores como así
también por el constante flujo inmigratorio que se asienta en la villa.
UNA EXPERIENCIA DE TRABAJO EN SALUD SEXUAL... • 175

bien su área de cobertura es la mencionada, su área de


influencia se reduce a la Villa 1-11-14 ya que de ese barrio
proviene el 85% de las personas que utilizan las
prestaciones del Centro de Salud.
Se trata de una población de alrededor de 20.000
habitantes, de los cuales, según datos de la Comisión
Municipal de la Vivienda, un 56,10% de la población es
nacida en otro país (73 % Bolivia; 17 % Paraguay; 9% Perú;
0,76 % Chile), y el 40,2 % es argentina. Son familias con
un alto índice de desocupación y trabajo informal. El índice
de analfabetismo y escolaridad incompleta es alto; las
instituciones educativas de la zona tanto en inicial como en
primaria y media no alcanzan a dar una mínima respuesta a
las necesidades y demandas de la población. En lo que
refiere al aspecto habitacional, éste se caracteriza por
viviendas sumamente precarias y por la carencia o
insuficiencia de los servicios básicos (cloacas, recolección de
basura, luz, agua). Los servicios sanitarios también
atraviesan la misma situación.
En cuanto a la cantidad de mujeres en edad fértil (14 a 49
años) encontramos 5.136.4
Los cambios producidos en el mercado de trabajo
(desempleo, subocupación, precarización, etc.) provocaron
un aumento en la inserción de las mujeres de los sectores
populares al ámbito laboral, por lo que algunas pasaron a ser
el soporte económico del hogar. Esto se debe a que en las
actuales condiciones del mercado de trabajo la alternativa
más factible sea conseguir un empleo doméstico. Pero la

4. Estos datos excluyen ausentes (800) y 217 menores de 18 años (Fuente:


Censo de 1999 de la C.M.V.).
176 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

transformación va mucho más allá del mercado de trabajo,


ya que implica un cambio en la organización de la vida
cotidiana. Aunque en la división intradoméstica del trabajo
siguen siendo las mujeres las responsables de las tareas
domésticas, más allá de su condición laboral.
La población está inserta en la compleja trama de
relaciones urbanas en la que se incluyen la explotación del
trabajo y las relaciones de poder. Las mismas restringen las
posibilidades de acceso a los bienes y servicios producidos
socialmente. Este acceso diferencial produce una condición de
desigualdad y subordinación de este sector en el marco de la
compleja trama de relaciones sociales.5

METODOLOGÍA DE TRABAJO

La metodología de trabajo tendrá como eje la participación


de organizaciones y vecinos en el diagnóstico, la planificación,
ejecución y evaluación del proyecto, el cual —como ha sido
mencionado en la fundamentación— surge de una demanda de
la gente del barrio. El equipo de profesionales intervinientes se
propone un acompañamiento interdisciplinario del proyecto.
La estrategia de trabajo diseñada estuvo orientada a
facilitar el acceso tanto a la información sobre métodos

5. Podemos hacer referencia en este momento al fenómeno de “expoliación


urbana” desarrollado por Lucio Kowarick (1984), que alude a la “sumatoria de
extorsiones que se produce a través de la inexistencia o precariedad de los
servicios de consumo colectivo, que conjuntamente con el acceso a la tierra y
la vivienda se presentan como socialmente necesarios para la reproducción de
los trabajadores y agudiza aún más la dilapidación que caracteriza la
explotación del trabajo o lo que es peor la falta de éste.” (Citado por Grassi, E.
en Las cosas del Poder. Acerca del Estado, la política y la vida cotidiana. p.
UNA EXPERIENCIA DE TRABAJO EN SALUD SEXUAL... • 177

anticonceptivos (MAC) como a las prestaciones del CESAC.


La intervención profesional, en este contexto, se desarrolló
en torno a tres ejes que se apoyaron en la participación
comunitaria, entendida como el proceso social a través del cual
los distintos actores de la comunidad, en función de sus
problemas y necesidades, asumen un rol protagónico en torno
a la reivindicación y resolución de los mismos.

Dichos ejes fueron:

• Sensibilización y discusión en relación con los procesos de


salud reproductiva y sexualidad con las mujeres del barrio.

Este eje trabajó a través de la pedagogía de taller la


temática con los vecinos, lo cual supone partir de los
conocimientos y saberes que cada persona porta,
“produciendo así un proceso de enseñanza-aprendizaje que
surge como producto social de un grupo.”6
La realización de los talleres se efectuó en organizaciones
barriales que tienen arraigo y convocatoria en el barrio; de esta
forma, teniendo en cuenta la situación de crisis actual, las
organizaciones por excelencia fueron los comedores
comunitarios, quienes a su vez, propiciaron que algunos de los
talleres se efectuaran en casas de vecinas del barrio.

• Conformación de una red comunitaria que posibilite


un mejor acceso a los métodos anticonceptivos y a
los controles de salud.

Entendiendo que la comunidad debe ser sujeto de sus

6. BLACH, Adriana. “El taller como pedagogía de conocimiento”. Ficha del curso
permanente de educación para la salud. Municipalidad de Lomas de Zamora.
178 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

procesos de salud-enfermedad-atención, esta estrategia se


orientó a la conformación de una red integrada por las
organizaciones barriales y aquellas vecinas sensibilizados por la
temática.
La finalidad que se perseguía con la misma, era que
luego de efectuado los talleres, cada uno de esos lugares se
constituyera en un centro de referencia al cual los vecinos
pudieran acudir en busca de algunos métodos anticonceptivos
(anovulatorios orales y preservativos), y turnos programados
para el control de salud de la mujer.
Para ello paralelamente, junto con los demás integrantes
del equipo de salud (médicos generalistas y psicólogo), se
realizaba la capacitación de referentes barriales en relación con
el uso de los diferentes MAC, como así también con las
principales dudas que podían surgir en torno a la utilización de
los mismos y que eran susceptibles de ser abordadas por ellos.

• Coordinación y articulación de las prestaciones de


los efectores de salud de la zona a través de los
referentes barriales.

En lo que refiere a las prestaciones del CESAC Nº 19 y Nº


20, se planteó la implementación de turnos programados e
insumos a través de los referentes de manera de facilitar el
acceso (administrativo, geográfico, etc.).
Asimismo, se acordó con los demás efectores de salud de
la zona (Unidad de Servicios del Barrio Illia, Centro de salud del
Barrio Charrúa), criterios de derivación que posibilitaran un
mejor acceso a estos servicios.
Dichas acciones comenzaron a implementarse a mediados del
año 2000. Hasta el momento, se implementaron 10 talleres, con
una asistencia de más de 140 mujeres, y unos pocos hombres.
Además, se realizaron tres reuniones con referentes
UNA EXPERIENCIA DE TRABAJO EN SALUD SEXUAL... • 179

barriales, para acordar criterios, evaluar la marcha de los


talleres y el acceso de las mujeres a los efectores de salud.
En 8 oportunidades los talleres se efectuaron en comedores
comunitarios mientras que en dos casos se realizaron en casas
de vecinas del barrio, constituyéndose dos centros de referencia.

ALGUNOS RESULTADOS

1. Cuantitativos:

• Cantidad de talleres realizados: 10


• Número de participantes en los talleres: 172
• Turnos efectivizados en relación con turnos solicitados:
En el CeSAC 19 de 30 turnos solicitados se efectivizaron
9 (30%).
En el CeSAC 20 de 39 turnos solicitados se efectivizaron 15
(38%).
Lo que da un total de 35% de turnos efectivizados.

2. Cualitativos:

1. Extraídos de lo verbalizado por 10 mujeres que


solicitaron un turno pero no lo concretaron

• Motivaciones para solicitar un turno:


– Sobre un total de 10 mujeres encuestadas 8 expresaron
su intención de cuidarse para no quedar embarazada, de
las cuales tres manifestaron querer adoptar un método
definido, y por último, otras dos plantearon haber
solicitado el turno para poder controlarse.

• Razones por las que no se concretó el turno solicitado:


– De las diez mujeres encuestadas 5 refirieron motivos
180 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

que tienen que ver con problemas de comunicación


(falta de aviso por parte de su referente o persona que
le tomó el turno) o por dificultades administrativas en
el CeSAC. Se detectaron malos entendidos en la
recepción de algunas mujeres en los efectores de salud
que ocasionaron la pérdida de algunas consultas
(información confusa respecto de cambio de turnos, días
de atención, y servicios encargados de la atención).
– 4 personas expresaron razones relacionadas con la
organización familiar (enfermedad y cuidado de los niños
básicamente). 1 no concurrió por un problema de salud.
– Las mujeres priorizan las obligaciones de la
organización familiar por encima de su salud y el
cuidado de sí mismas. Desde las percepciones
femeninas de salud los hijos son los únicos que
pueden enfermarse. La enfermedad en las mujeres es
vivida como la causa que rompe el ritmo de lo
cotidiano. La mujer, responsable de la reproducción
doméstica, no solamente siente que su cuerpo debe
soportar el peso de la cotidianeidad sino que además
debe ser olvidado, negado en función de todas las
tareas diarias.

• Opinión de la pareja sobre la utilización de métodos


anticonceptivos:
– 5 de las mujeres comentaron que sus parejas están de
acuerdo con que ellas utilicen MAC. 1 de ellos usa
preservativo, los demás dejarían esa responsabilidad en
manos de la mujer. Otras 2 expresaron que para sus
parejas el empleo de MAC es peligroso para la salud. 2
no tenían compañero y una no fue interrogada al
respecto.
UNA EXPERIENCIA DE TRABAJO EN SALUD SEXUAL... • 181

• Cantidad de hijos que tuvieron sus madres:


– Dos de ellas tuvieron 6 hijos, dos 7 hijos, dos 8, dos
9, una 11.

2. Extraídos de los talleres


• Obstáculos detectados y valorados por el equipo
profesional:
Se visualizó cómo una experiencia de maltrato
institucional de una mujer influyó negativamente en
el acceso al servicio, de las vecinas cercanas a ella,
perdiéndose una oportunidad, a veces única, de
acercamiento a los efectores de salud.

“Los talleres están muy bien pero no sirven si


después vas a la salita y el médico que te va a
atender, no es el que te dio la charla y además te
trata mal y aunque tengas turno no quiere atenderte
porque se quiere ir antes…”
Referente comunitaria Mz13, 20/03/01

En cuanto discursos y prácticas médicas instituidas respecto de


algunos métodos anticonceptivos, en particular se pudo observar
que en el caso del DIU una vez que las mujeres han sorteado el
escollo de los mitos y temores en relación con el mismo y deciden
su colocación, se encuentran con el obstáculo en el que se
convierten las prácticas diagnósticas previas (cultivo de flujo, PAP y
ecografía). Ya que existen muy pocas probabilidades de que las
mismas, que son sumamente necesarias, se efectúen con
celeridad.

“Tengo entendido que el DIU se suele expulsar,


además me dijeron que es doloroso”
Taller en comedor Niños Felices, 03/01/01
182 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

“Tengo miedo que te pueda traer cáncer de matriz.”


Taller en comedor Menari, 24/01/01

“Se hace difícil porque cuando conseguís el turno


para hacerte un estudio se te vence el otro que te
hiciste y tenés que esperar treinta días o a veces más”
Taller en casa de una vecina Mz 13, 17/01/01

De esta forma, desde el momento en que las mujeres toman


la decisión hasta que logran su colocación pasan meses y muchas
refieren haber desistido de la idea de utilizar este método.
Sobre los anovulatorios especiales par el período de
lactancia se vio que existen discursos médicos
contradictorios: mientras unos plantean que son efectivas
sólo hasta los seis meses de vida del bebé, otros plantean
que si bien su efectividad disminuye (de un 99% a un
88%)a medida que el bebé va creciendo siguen siendo
efectivas mientras dure el período de lactancia.

“Me quede embarazada mientras amamantaba a


mi primer hijo, no sabía que había que cambiar de
pastillas después de un tiempo...”
Taller en comedor La chispa, 14/03/01

CONCLUSIONES
De los datos aportados por algunas mujeres y de lo surgido
en los talleres, podría inferirse que la apropiación de métodos
anticonceptivos por parte de las mujeres populares se ve
inhibida por una diversidad de creencias y prácticas.
Por otra parte, si se parte de considerar que las decisiones
en torno a la sexualidad y la reproducción son parte del
ejercicio de los derechos humanos básicos, lo expuesto con
UNA EXPERIENCIA DE TRABAJO EN SALUD SEXUAL... • 183

antelación permite vislumbrar que las desigualdades de género


existentes hacen que no todas las personas tengan la
posibilidad de decidir de igual modo sobre esta cuestión.
En un contexto en el cual el Estado ha dejado de garantizar
servicios (que históricamente habían sido producidos por él), es
la mujer quien asume un papel protagónico, en tanto no sólo
debe afrontar las responsabilidades que provienen del ámbito
doméstico (en el cual se la ha ubicado históricamente); sino
que en la actualidad debe afrontar además las exigencias el
ámbito público (que históricamente estuvieron vinculadas al
hombre). Es decir, la mujer debe ocuparse de la crianza de los
hijos, de las tareas domésticas y en muchos casos ser el
sostén económico de la familia. De esta forma, en el caso de
las mujeres pobres urbanas el ingreso al ámbito de lo público
está lejos de suponer un reconocimiento de sus derechos y
una mayor igualdad; por el contrario, la sumerge en un estado
de mayor vulnerabilidad.
Esta construcción cultural sobre el rol preponderante de la
mujer en la regulación de la fecundidad y en aquellos aspectos
que atañen a la reproducción familiar, está tan internalizada por
ellas que orienta sus prácticas. Desde las instituciones y los
medios de comunicación se fortalece este mandato a través de
mensajes que dejan de lado al hombre en cuestiones que
tienen que ver con la maternidad y el cuidado de los hijos. Es
por eso que “el protagonismo femenino en las familias
populares es más que la reiteración de una pauta cultural. Es
también resultado práctico de mensajes contradictorios entre sí
que se originan en las instancias de saber poder legítimas.”7
En este marco entonces, es fundamental comenzar por

7. GRASSI, E. (Coord.). Las cosas del poder. Acerca del Estado, la política y
la vida cotidiana. Buenos Aires: Espacio Editorial, p. 91.
184 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

discutir y ampliar las concepciones que restringen la


reproducción a eventos biológicos y responsabilizan a las
mujeres como agentes exclusivos de decisiones y cuidados. Es
decir, es necesario hacer visible la presencia de los varones en
los procesos de salud reproductiva y sexualidad. Ya que,
tomando al género como construcción social, debemos
entender a los procesos de salud reproductiva y sexualidad
como el resultado de un construcción relacional de las
identidades de género.
En cuanto a la efectividad cuantitativa del proyecto,
hasta el momento podemos decir que 172 vecinos (mujeres
y varones) participantes en 10 talleres, es un nivel de
participación satisfactorio, ya que representa un promedio de
17 personas por taller teniendo en cuenta que la asistencia
es voluntaria y esto se atribuye entre otras cosas a que son
vecinas referentes las que realizan la convocatoria.
La cantidad de turnos solicitados también se considera
aceptable ya que representa un 40 % del total de los
participantes del taller (cabe tener en cuenta que algunos eran
varones y que algunas mujeres estaban utilizando ya algún
MAC).
Estos datos, sumados a la información brindada por
algunas vecinas, estarían indicando y verificando que un
proyecto de salud reproductiva responde a una necesidad
planteada por la población y que el acceso a un servicio de
salud se ve favorecido por ser los referentes barriales los que lo
vehiculizan.
En cuanto a los turnos efectivizados, un 35%, si bien
representa sólo algo más de la tercera parte de los turnos
solicitados, contamos ya con algunas hipótesis sobre las
razones que influyen en la concreción de los turnos y en
consecuencia, sobre cuáles de ellas podría incidirse
mediante la intervención profesional para lograr resultados
UNA EXPERIENCIA DE TRABAJO EN SALUD SEXUAL... • 185

más óptimos (como por ejemplo, trabajar el aspecto de la


comunicación en lo referido a los turnos entre las vecinas, los
referentes comunitarios y las instituciones de salud).
La organización familiar como obstáculo para el acceso
a los servicios de salud vendría a verificar una de las
hipótesis de la fundamentación del proyecto y reafirmar la
necesidad del mismo en cuanto a facilitar los mecanismos
de acceso a los efectores de salud.
Por eso es necesario revisar la propuesta institucional,
evaluando la oferta, su calidad y la forma de satisfacer las
necesidades, ya que como ha quedado de manifiesto, las
dificultades que se presentan para la realización de las
prácticas diagnósticas previas y en algunos casos el
maltrato institucional se convierten en un obstáculo para el
efectivo acceso a los métodos anticonceptivos.
186 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

BIBLIOGRAFÍA
BLACH, Adriana. “El taller como pedagogía de conocimiento”.
Ficha del curso permanente de Educación para la Salud.
Municipalidad de Lomas de Zamora.
GRASSI, E. (Coord.). Las cosas del poder. Acerca del Estado,
la política y la vida cotidiana. Buenos Aires: Espacio
Editorial, p. 91.
JELÍN, E. y G., Paz. 1991. Familia/Género en América Latina:
Cuestiones históricas y contemporáneas. Buenos Aires:
CEDES.
Informe de la Comisión Municipal de la Vivienda sobre la
Villa. 1-11-14, años 1999 y 2000.
Memoria Anual del CeSAC. Nº 19, Año 1998.
MENÉNDEZ, Eduardo. 1998. “Participación Social en salud
como Realidad Técnica y como Imaginario Social Privado”.
En: Cuadernos Médico Sociales N° 73, mayo.
Publímetro. Miércoles 9 de mayo de 2001, cifras extraídas
del Ministerio de Salud. Centro Latinoamericano de
Salud y Mujer.
ÍNDICE

Presentación Cuadernos de Margen . . . . . . . . . . . 5

1. Abordaje Social de la Malnutrición.


Vía para la Construcción
de Capital Humano y Social . . . . . . . . . . . . . . . . 9
González Wiliam, Muñoz, Noris,
Naranjo, Nahr, Edihovert
2. De la Medicina al Trabajo Social. Introducción
a la Práctica Basada en la Evidencia . . . . . . . . . . 27
Pedro Morago
3. Entre Soles y Estrellas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61
Soledad Estebanez (Psicóloga),
Mercedes Cristófol (Trabajadora Social),
Carlos Grittiniyi (Trabajaor Social)
4. La Bioética y el Trabajo Social.
Una experiencia profesional, reflexiones . . . . . . . . 75
Mtra. Ana María Anguiano Molina,
Mtra. Yolanda Hernández Lara,
Mtra. Consuelo Plascencia Vázquez,
Médico: Salvador Enrique Jiménez A.
188 • SALUD E INTERVENCIÓN EN LO SOCIAL

5. La Salud y el Juego . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 97
Lic. Edith Ravicovich (Psicóloga),
Lic. Débora Boyadjian (Trabajadora social),
Lic. Silvia Marcecca (Trabajadora social)
6. My Portorican Story . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 117
Alejandra Gómez (Trabajadora Social)
7. Rol del trabajador social
en la atención del niño desnutrido . . . . . . . . . . . 133
Naranjo Carmen (Responsable), Nahr Edihovert,
Muñoz Noris, González Williams.
8. Trabajo Social e interdisciplina:
la cuestión de los equipos de salud . . . . . . . . . . . 153
Lic. Susana Cazzaniga
9. Una experiencia de trabajo en salud sexual
y reproductiva en el Bajo Flores.
Procesos comunitarios que reproducen Salud . . . . 169
Esteban Alicio (Médico), María de los Angeles
Delgado (Trabajadora Social), María Lorena Gargiulo
(Trabajadora Social), María Eva Mendes (Trabajadora
Social), Aldo Pagliari (Psicólogo),
Mariano Rubinstein (Médico)

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