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Riesgos

Ergonómicos en el
trabajo

William Fernando Caballero Santamaría


TECNICO EN SISTEMAS 2024210
Riesgos ergonómicos

Los riesgos ergonómicos (riesgos disergonómicos o riesgos derivados de la ausencia de una


correcta ergonomía laboral), son la probabilidad de desarrollar un trastorno musculoesquelético
debido (o incrementada) por el tipo e intensidad de actividad física que se realiza en el trabajo.

Los trastornos musculoesqueléticos (TME) son afecciones y/o enfermedades que involucran a los
tendones, músculos, nervios y otras estructuras que dan soporte y estabilidad al cuerpo humano,
es decir…

… enfermedades inflamatorias y degenerativas del aparato musculoesquelético.

Cuando son generados o exacerbados por el trabajo, se producen principalmente en alguna parte
de las extremidades superiores o de la espalda.

Factores de riesgo ergonómico


El factor de riesgo ergonómico es una característica del trabajo que puede incrementar la
probabilidad de desarrollar un trastorno musculoesquelético, ya sea por estar presente de manera
desfavorable o debido a que haya presencia simultánea con otros factores de riesgo.

Carga postural
Los daños de salud más habituales relacionados con la carga postural tienen que ver
principalmente con: el espacio o entorno, el diseño de la silla y mesa del trabajo y la ubicación del
ordenador y otros elementos informáticos. Los problemas de salud más comunes son:

 Molestias y lesiones musculares.


 Trastornos circulatorios.

En los puestos de pantallas de visualización de datos (PVD) con frecuencia se producen daños
a la salud que normalmente se manifiestan transcurridos varios años de exposición al riesgo,
es decir, experimentamos las dolencias después de años de trabajo. Los síntomas para la
detección precoz tienen que ver con:
 dolores de espalda (lumbares o de la parte superior), tensión en los hombros, base del
cuello, dolores de cabeza;
 escozor de ojos, sequedad de ojos, necesidad de más tiempo para enfocar la vista a
distancias largas;
 calambres en las piernas, incomodidad en el asiento y cambios frecuentes de posturas
 Los daños, que como decimos se producen a largo plazo por acumulación de exposición
durante mucho tiempo al riesgo, pueden ser:
 hernias y pinzamientos cervicales (dolores, calambres, pérdida de funcionalidad de
brazos…) y lumbares (dolores de espalda, ciática…) con pérdida de flexibilidad,
funcionalidad y movilidad
 pérdida prematura de visión…

Para evitar estos daños las medidas que podemos tomar son:
1. En primer lugar la toma de consciencia de lo que está sucediendo (qué molestias tengo; a
qué distancia trabajo de la pantalla; cómo de pequeño es lo que veo en pantalla; cuántos
descansos hago a lo largo de la jornada, cuánto duran y qué hago en ellos); cómo ejercito
mis músculos; con qué frecuencia bebo agua durante la jornada….)
2. En segundo lugar adquirir hábitos posturales saludables y realizar descansos apropiados y
3. En tercer lugar tener una vida saludable que nos proporcione unos músculos tonificados
(en la espalda para evitar que sean los discos intervertebrales los que soportan el peso de
nuestro cuerpo y acaben dañándose) y en los ojos para lograr que sean capaces de
trabajar apropiadamente a distintas distancias focales) así como una alimentación
apropiada que nos proporciones los nutrientes e hidratación necesarios, evitando el
sobrepeso

Complementariamente a lo anterior (no remplazándolo sino sumándolo) equipos de trabajo


apropiados (sillas, reposapiés, reposamuñecas…)

Conviene también tener en cuenta lo siguiente:

 Mejor descansos cortos y frecuentes (10 min cada 1.5 h)


 La utilización de cascos para aislarnos de ruidos exteriores y ayudarnos a concentrarnos
puede producir pérdida de audición: ajustar al mínimo posible el volumen, usar cascos con
limitación de volumen a 80 dB, realizar reconocimientos médicos para diagnosticar
precozmente la pérdida de audición (el inicio del daño se detecta médicamente mucho
antes (años) de que se detecte funcionalmente de que notemos que oímos peor)
 Realizar ejercicios físicos que tonifiquen nuestro musculatura y además nos ayuden a
quemar las calorías que ingerimos al comer (pueden ser cosas sencillas, como caminar o
subir escaleras, hacer sentadillas,….) Para ejercitar los músculos oculares son buenos los
ejercicios del método Bates.
 Alimentarnos sanamente (reducir las cantidades, comer frutas y verduras y menos carnes
y grasas, desayunar, cenar poco y acabar 1-2 h antes de acostarnos…)
Por último recordaros que la empresa puede jugar un papel importante para promover estos
hábitos saludables que también redundan en bienestar y satisfacción de las personas, cuestiones
ligadas también al rendimiento.

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