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El Nuevo Testamento
El Nuevo Testamento
Contenido
1. DIOS MANDA A SU HIJO COMO SALVADOR
5. LA IGLESIA EN MARCHA
¿POR QUÉ ?
Porque los judíos esperaban a un hombre fuerte que liberara al Pueblo de Israel de los
romanos y restableciera otra vez el Reino de David.
San Juan dice: "VINO A SU PROPIA CASA, Y LOS SUYOS NO LO RECIBIERON" Jn.
1; 11.
Escuchan su palabra.
Porque Jesús es el Hijo de Dios. Los que aceptan a Jesús, reciben su misma vida y por eso
se transforman en Hijos de Dios.
Porque existió desde el principio con Dios Padre. Y cuando llegó la hora Dios Padre lo
envió a éste mundo para salvarnos. Jn. 1, 1-3; Jn. 3, 16.
MARIA SANTISIMA.
Ella fue la mas humilde pobre de Yahvé, dispuesta a hacer siempre la voluntad de Dios. Lc.
1, 38.
Por obra del Espíritu Santo. San José fue solo encargado de cuidar a Jesús. No era su
verdadero padre. Mt. 1, 18-25.
Los que siguen a Cristo tratan de ser como la sal del mundo, preservándolo del pecado que
lleva a la muerte.
Son luz porque con su ejemplo, enseñan a los demás la manera de como vivir amando a
Dios y al prójimo, y así ser felices.
Amar a todos los hombres, hasta a los enemigos, y pedir a Dios por ellos.
Pero no tenemos que hacerlas delante de la gente para que nos vean. Cuando oremos no
tratemos de ser vistos por los demás.
Jn. 3, 4-6.
Hech.2, 41.
Cuando un bautizado no cumple la Palabra de Dios, está en la Iglesia de Cristo solo con el
cuerpo.
Para salvarse, es necesario estar en la Iglesia también con el corazón, es decir cumpliendo la
Palabra de Dios.
3.- EL SEMBRADOR.-
No debemos desanimarnos si vemos que los que de veras siguen a Cristo son pocos.
Así tiene que ser el Reino de Dios, como una planta que al principio es muy chiquita y
después crece siempre mas. Lo que importa es aceptar de veras el mensaje de Cristo y
vivirlo.
Cristo escogió a doce hombres y los envió a predicar el Reino. Mc. 3, 13-19. Mt. 10, 1-42.
transmitieron el don del Espíritu Santo a sus colaboradores obispos, sacerdotes y diáconos.
1 Tim. 4, 14.
2 Tim. 1, 6-7.
Hech. 6, 6.
La Santa Misa que celebramos nosotros, es la Cena del Señor y así recordamos a Jesús que
se hace presente entre nosotros con su Cuerpo y su Sangre y se presenta otra vez al Padre
intercediendo por nosotros como hizo en la Cruz.
3.- JESUS RESUCITA Y SE APARECE A SUS DISCIPULOS.- Mt. 28, 1-15. Jn. 20,
21.
Cuarenta días después de haber resucitado, Jesús se fue al cielo para entregar todo al Padre.
Su misión estaba cumplida, había cumplido la voluntad del Padre, los hombres habían sido
redimidos.
LA IGLESIA EN MARCHA
1.- JESUS MANDA SU ESPIRITU. Hech. 2
Cristo antes de subir al cielo, ordenó a los apóstoles predicar su mensaje a todos los pueblos
(Mt.28,19-20).
Sin embargo, les mandó también esperar en Jerusalén la llegada del Espíritu Santo para que
recibieran el PODER de predicar (Lc. 24, 45-49).
En el libro Hechos de los Apóstoles vemos cómo los primeros cristianos pusieron en
práctica las enseñanzas de Jesús.
2. Vivían unidos. Teniendo un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un
solo Dios y Padre (Ef. 4,4-6), es natural que lleguemos a ser "un solo corazón
y un alma sola" (Hech. 4, 32).
4. Perseveraban en la oración.
Los Apóstoles, siguiendo las instrucciones de Cristo, se repartieron por todo el mundo,
enseñando la palabra de Dios.
2.- CRISTO REUNIRA A LOS SALVADOS QUE ESTAN DISPERSOS. (Mc. 13,27)
La dispersión es consecuencia del pecado. Cristo reunirá a todos los salvados de cualquier
rincón del mundo.
En el día de la resurrección, Dios dará otra vez un cuerpo que se unirá al espíritu.
Será un cuerpo diferente del que tenemos ahora. Un cuerpo fuerte, que ya no podrá
enfermarse; 1 Cor.15, 42-44.
Nos juzgará especialmente sobre el mandamiento del amor. Quien haya hecho el bien al
prójimo será llevado a la gloria, el que haya hecho el mal, será condenado.
Ha habido siempre grupos de sectarios que para atemorizar al pueblo, ha dicho que ya
estaba por llegar el fin del mundo.
Cristo va a volver algún día: será el día de nuestra muerte y el día del Juicio Final para todo
el mundo.
Con el pecado de los hombres, todo el mundo recibió el castigo; con la liberación de Cristo,
todo el mundo espera la gloria.
Después del regreso de Cristo, va a empezar una nueva vida para todo el mundo.
Por eso los discípulos de Cristo esperan con confianza el regreso glorioso del Señor.
Si tratamos de seguir a Cristo, no tenemos que estar tristes pensando en el día de nuestra
muerte.
El amor de Dios hacia nosotros llega hasta el punto que quiere que seamos hijos suyos. Jn.
1,12.
El demonio no puede hacer nada en contra de nosotros si estamos llenos del Espíritu Santo
que es el Espíritu de Dios.
El demonio es más fuerte que nosotros, pero no es mas fuerte que el Espíritu Santo.
Nos puede engañar si estamos solos, pero si estamos con El Espíritu Santo no nos puede
hacer nada.
Así que lo primero que tenemos que hacer es estar llenos del Espíritu Santo, que nos dará la
fuerza para predicar con valor la Palabra de Dios.
4.-VENCER AL DEMONIO Y SEGUIR EL CAMINO DE CRISTO. 1 Jn. 4, 1-4.
Ser bautizado en el Espíritu Santo, quiere decir recibir el Espíritu Santo y quedar "lleno" del
Espíritu Santo.
Antiguamente el bautismo se hacía por inmersión, por lo cual toda persona se encontraba
envuelta por el agua.
Así pasa con el que recibe el bautismo en el Espíritu Santo. El que se consagra a Cristo y
recibe la Promesa queda completamente envuelto por la presencia del Espíritu Santo, y
empieza una nueva vida.
La venida del Espíritu Santo va acompañada de signos externos: viento impetuoso, fuego, y
don de lenguas.
2.- ACEPTAR A CRISTO.- Mc. 1,15; 16,16. Hech. 2,21; Rom. 10,9-13.
Se trata de una costumbre muy antigua, la de rezar imponiendo las manos, después de haber
orado un tiempo, los sacerdotes y los que han recibido el Espíritu Santo imponen las manos
haciendo una oración espontánea.