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Existen cuatro perspectivas principales sobre la identificación de género: 1) La teoría psicoanalítica de Freud explica que el género se basa en la identificación con ideales masculinos o femeninos; 2) La teoría del aprendizaje social de Kagan señala que la identificación de género resulta de observar y imitar modelos; 3) El enfoque del desarrollo cognitivo de Kohlberg sugiere que los niños se clasifican a sí mismos como niños o niñas hacia los 2-
Descripción original:
Título original
Cuáles son las cuatro perspectivas de identificación de género
Existen cuatro perspectivas principales sobre la identificación de género: 1) La teoría psicoanalítica de Freud explica que el género se basa en la identificación con ideales masculinos o femeninos; 2) La teoría del aprendizaje social de Kagan señala que la identificación de género resulta de observar y imitar modelos; 3) El enfoque del desarrollo cognitivo de Kohlberg sugiere que los niños se clasifican a sí mismos como niños o niñas hacia los 2-
Existen cuatro perspectivas principales sobre la identificación de género: 1) La teoría psicoanalítica de Freud explica que el género se basa en la identificación con ideales masculinos o femeninos; 2) La teoría del aprendizaje social de Kagan señala que la identificación de género resulta de observar y imitar modelos; 3) El enfoque del desarrollo cognitivo de Kohlberg sugiere que los niños se clasifican a sí mismos como niños o niñas hacia los 2-
Cuáles son las cuatro perspectivas de identificación de género:
Teoría Psicoanalítica de Sigmund Freud: esta teoría expone supuestos en donde se
atribuyen rasgos de masculinidad o carencia de feminidad en mujeres que tienen fijación por juegos sexuales en donde no se ven involucrados los genitales internos. Freud tuvo la necesidad de discriminar entre el sexo biológico, los caracteres masculinos/femeninos y la elección de un objeto hetero u homosexual, lo que a partir de la autonomía concluyo que el sexo se fundamenta en lo masculino y femenino, mas sin embargo los caracteres del sexo se deben comprender desde las particulares de la sexualidad del hombre y la mujer. Para Freud el genero corresponde a la identificación con ideales femeninos o masculinos, que predomina en el niño o niña, lo que corresponde a la identificación primaria, esta identificación corresponde al conjunto de características, símbolos, contenidos que se adjudican al hombre o la mujer. Finalmente, el autor propone que el sexo del individuo se limita más a una construcción social, dado a que en los niños solo se reconoce un solo sexo, el masculino. Sigmund Freud explica el desarrollo de la identidad de género y las diferencias entre hombres y mujeres declarando que niños y niñas atraviesan de forma semejante las dos primeras fases, la oral y la anal. Sin embargo, en el caso de la niña la sucesión de acontecimientos de la fase fálica es mucho más compleja y difícil, constituyéndose en un acontecimiento crítico. El convencimiento de su carencia de pene, que Freud interpreta como el reconocimiento por parte de ella, de la superioridad del pene frente a su propia anatomía, sintiéndose estafada envidia a los varones llegando así a la envidia del pene (Hyde, 1995, p 41), que no puede satisfacerse de forma directa, transformándose en el deseo de quedar embarazada de su padre, formado su propia versión de complejo de Edipo, denominado complejo de Electra, el cual afirma Janet Hyde (1995, p. 42), según la teoría nunca se resuelve de manera tan completa como el del varón.
Teoría de Aprendizaje Social de Jerome Kagan: Esta teoría explica la identificación en
general, y a la identificación de género en particular, como la consecuencia de observar e imitar modelos. Jerome Kagan (1958, 1971, en Papalia, 1997: 371) indica cuatro procesos interrelacionados que establecen y fortalecen la identificación: el niño quiere ser como el modelo, los niños creen que ellos son como el modelo, los niños experimentan emociones como las que siente el modelo, los niños actúan como el modelo. A través de la identificación los niños comienzan a creer que ellos tienen las mismas características de un modelo. Cuando se identifican con un modelo competente y apropiado, los niños se sienten agradecidos y orgullosos. Cuando el modelo es inadecuado, pueden sentirse infelices e inseguros.
Desarrollo Cognoscitivo de Lawrence Kohlberg: Para aprender su género, afirma Lawrence
Kohlberg (1966), los niños no dependen de los adultos como modelos o dispensadores de refuerzos y castigos; por el contrario, se clasifican activamente a sí mismos y a los demás como hombres o mujeres y luego organizan su comportamiento alrededor del género. Así la identidad de género, la conciencia de ser hombre o mujer, suele comenzar hacia los dos años de edad. A los tres, según Kohlberg, la mayoría de los niños tiene una idea firme de cuál es el que sexo al que pertenecen. La constancia del género o la conservación del género es la comprensión que alcanza un niño de que su sexo siempre será el mismo. Para Kohlberg, las diferencias de género en el comportamiento siguen el establecimiento de la constancia de género: si una niña prefiere jugar con muñecas y no con camiones, obedece no a la aprobación que ella recibe por esas preferencias sino su conciencia cognoscitiva de que esas cosas se ajustan con la idea que tiene de sí misma como una niña. Una vez que los niños comprenden que siempre serán hombres o mujeres, adoptan comportamiento ‘apropiados para su sexo’. (Papalia, 1997, p. 373).
Esquema de genero de Sandra Bem: El concepto de esquema proviene de la psicología
cognitiva y se define como “un marco general de conocimiento que tiene una persona con respecto a un tema determinado y que sirve para organizar y guiar la percepción. La psicóloga Sandra Bem en 1981, aplicó la teoría de los esquemas a la comprensión del proceso de tipificación del género en su teoría del esquema del género, cuya propuesta explica Hyde (1995, p. 73): “cada uno de nosotros tenemos integrado en nuestra estructura de conocimientos un esquema de género, un conjunto de asociaciones vinculadas al mismo. Más aún, el esquema de género representa una predisposición fundamental para procesar información sobre la base del género”. En otras palabras, precisa Hyde, (1995, p.73) “representa nuestra tendencia a considerar que muchas cosas están relacionadas con el género y a pretender dicotomizar las cosas sobre la base del género”. Entonces, cuando los niños ven el esquema del género de la cultura, explica Papalia (1997): “lo que se ‘supone que los niños y las niñas deben hacer, adaptan sus propias actitudes y comportamientos. Desde el rango completo de todos los atributos humanos, presentan aquéllos a los que se ajustan de acuerdo con el esquema del género en su sociedad” (p. 374).