Está en la página 1de 1

Yoga abreviado del maestro indivisible con

Avalokiteshvara
Escrita por el gran XIV Dalái Lama

N
AMO ARYA LOKESHWARA YA. Las personas que deseen practicar este yoga abreviado del
maestro indivisible con Avalokiteshvara deben empezar tomando refugio y visualizar luego
en su coronilla, sobre un disco de loto y uno de luna, al noble supremo Señor del Mundo
indivisible con el amable maestro raíz, con una cara y cuatro brazos. Las dos primeras manos están
unidas en oración y las manos de los brazos bajos sostienen un rosario de cristal y el tallo de un
loto blanco abierto por completo. Sus piernas están cruzadas en la postura «indestructible». Tiene
un aspecto joven y posee las marcas mayores y menores de un Buda. Está vestido con sedas y
adornado con los adornos insignes. Sus tres lugares están marcados con las tres sílabas vashra. De
la HUM en su corazón irradian rayos de luz que invitan a las Tres Joyas sin excepción y estas se
disuelven en él causando que se vuelva de la esencia de todos los objeto de refugio.

Las siete ramas


Me postro ante el maestro, tesoro que completa de manera espontánea los siddhis y elimina las
faltas. Le ofrezco un océano de ofrendas de nubes de Samantabhadra. Confieso todas mis faltas
con propósito de enmienda. Me regocijo en las actividades de los tres secretos. Le suplico que
haga caer una lluvia de enseñanzas extensas y profundas. Permanezca, por favor, durante cien
eones de forma inalterable. Dedico todos los méritos a la gran iluminación.

De la ristra del mantra que rodea la sílaba HRIH en su corazón irradian rayos de luz que purifican
las impurezas del universo y de sus habitantes, todos los seres alcanzan el estado supremo de
Padmapani (el que sostiene el loto).

Mantenemos esta visualización mientras recitamos el mantra tantas veces como podamos:

OM MANI PADME HUM ཨ"་མ་ཎི་པdmེ་hauཾཿ

Súplica
Maestro, venerable Avalokiteshvara, usted es mi única esperanza y, por ello, desde ahora hasta que
alcance la iluminación, tómeme bajo su cuidado en virtud de su gran compasión.

Por haber suplicado de corazón de este modo, el maestro se disuelve en luz y la luz en mí. Mis tres
puertas quedan bendecidas por cien vashras emitidos desde los tres secretos.

Que por esta virtud pueda yo pronto lograr la práctica de Avalokiteshvara y colocar a todos los
seres sin excepción en su nivel espiritual.

Que la preciosa bodichita nazca donde no haya nacido y donde haya nacido que no decline si no
que aumente más y más.

© de la traducción al español: Tenzin Dolkar (Marta Saro), Dharamsala 2020

También podría gustarte