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Melanie Walsh

Historia Social y Política Contemporánea


Ana Ribeiro
Historia del Uruguay hasta 1836

En 1516, el primer colonizador Juan Díaz de Solís llega a la tierra que ahora es Uruguay,
y en 1526 Sebastián Cabot da el nombre la Banda Oriental del Uruguay. Debido a la falta de oro
y plata, y como casi toda la tierra era pradera, al inicio no se veía Uruguay como buen lugar para
establecerse. Entonces, los primeros colonizadores vinieron a Uruguay buscando un camino al
norte donde creían que había oro y su objetivo principal era el puerto para poder comercializar.
El primero en pensar diferentemente fue Hernando Arias, el gobernador de Asunción que tuvo
como propósito la ganadería y agricultura en la región. Esto empezó la transformación de
Uruguay en un país ganadero.
En contraste con los indígenas del Perú y el imperio Inca, los indígenas de Uruguay no
tenían ciudades, ni civilizaciones, ni organización social. Los grupos principales eran los
Charrúas, Chaná y guaraníes. Eran nómades y sus movimientos siguieron las estaciones, debido
a que vivían de la caza y de la pesca. También eran guerreros y lucharon contra los
colonizadores para defender su tierra y manera de vivir. Su agresividad desalentaba la
colonización durante el siglo XVI. Sin embargo, debido a su manera de vida nómade y la falta de
comunicación entre las tribus, no pudieron resistir la colonización de una manera organizada.
Los indígenas desaparecieron debido a las enfermedades que trajeron los colonizadores, otros
fueron muertos y otros se fueron al norte para Paraguay.
Durante el siglo XVII el Uruguay llegó a ser más importante como frontera entre los
españoles y los portugueses. En 1680, los portugueses fundaron Colonia del Sacramento al otro
lado del Rio de la Plata de Buenos Aires. Después, los españoles crearon un campamento militar
en San José, y en 1726 fundaron Montevideo bastante cerca. Antes del crecimiento de
Montevideo, la capital había sido Soriano. Montevideo fue poblado por gente de Buenos Aires,
España y las islas Canarias. El Virreinato del Rio de la Plata fue establecido en 1776 y Buenos
Aires fue la capital. En 1777, se firma el Tratado de San Ildefonso. Este tratado estableció las
fronteras: los portugueses cedieron Colonia del Sacramento a los españoles a cambio de la
retirada española de la isla de Santa Catalina. Luego, se conforman los Blandengues de
Montevideo, una milicia para proteger las fronteras. El comercio de Montevideo se llevaba a
cabo vía Buenos Aires, pero en 1778 el reglamento de libre comercio permitió que éste se
realizara directamente desde Montevideo a España y otros puertos. Se comenzó a preparar la
mercadería para su traslado, y con sal se preservaba la carne, podía transportarla más lejos y más
tiempo que la carne fresca. También se usaba cuero para construir casi todo, incluso las camas,
las puertas, los sombreros, los canastos, las botas e inclusive las viviendas. Como la vaca
formaba la base de la industria y del comercio durante esta etapa, se refiere al siglo XVIII como
la Edad de Cuero. Otro tipo de comercio emerge durante el siglo XVIII, que es el comercio de
esclavos. Aunque la mayoría de los esclavos que llegaron a Montevideo fueron comprados y
traídos al norte para otros países, la población de esclavos en Montevideo seguía aumentando, y
al comienzo del siglo XIX formaban la tercera parte de la población. La mayoría trabajaban en
tareas domésticas, no fueron traídos al campo para trabajar en las granjas.
Desde la fundación de Montevideo, el gobierno de Buenos Aires había prohibido el
comercio con los portugueses, y por eso surgió el contrabando principalmente en las zonas
rurales del Uruguay. Teniendo en cuenta la abundancia de vacas y caballos, se hacía fácil vivir
en el campo, libre y sin trabajo, y esta vida atraía a españoles, portugueses, y también algunos
indígenas. Después de la expulsión de los jesuitas, muchos guaraníes su trasladaron desde
Paraguay al campo de Uruguay. De todos estos grupos emerge la figura del gaucho. El gaucho
era un tipo social, que evoca una imagen de libertad absoluta en el campo. El gaucho odiaba a la
autoridad, y las autoridades españolas también menospreciaron a los gauchos.
Mientras las otras provincias del Virreinato del Rio de la Plata dependían de Buenos
Aires como el único puerto, la independencia del puerto de Montevideo después del reglamento
de libre comercio en 1778 creó un contexto de rivalidad económica entre Montevideo y Buenos
Aires. Cuando los ingleses intentaron reconquistar Buenos Aires y ocuparon Montevideo en
1806 y 1807, fueron vencidos. La falta de respeto para las contribuciones de los Montevideanos
aumentó la rivalidad, y también había una rivalidad personal entre el Virrey y el gobernador de
Montevideo, Francisco Javier de Elio. En 1808, fue declarado un Cabildo abierto, que instituyó
una junta de gobierno. En parte debido a la invasión de España por Napoleón, Elio tuvo éxito en
declarar Montevideo autónomo del Virrey de Buenos Aires y ponerlo en relación directa con
España. Pero la Junta de Sevilla rechaza la legitimidad y pone a Montevideo bajo el poder del
Virrey del Rio de la Plata otra vez. Después, surge un partido criollo que, aliado con frailes
franciscanos, empieza a conspirar en la independencia de España. En 1810, Buenos Aires tuvo
un cabildo abierto e instituyó una Junta de gobierno, pero el gobernador de Montevideo
desconoció a la Junta y quedó leal a España. Empieza un movimiento más fuerte para la
independencia del Uruguay, compuesto de gauchos, criollos, mestizos, indios, todos que
rechazaban a la autoridad española.
José Artigas, nacido en Montevideo y capitán de los Blandengues, ofrece su experiencia
militar a la Junta Revolucionaria de Buenos Aires, y pronto es el líder da la revolución después
del éxito en la batalla de las Piedras. En 1811 empieza el asedio de Montevideo, y Elio invita a
los portugueses, que vienen y dominan Montevideo. Siguiendo un tratado entre Elio y Buenos
Aires, Artigas evacua y con él va el ejército, la gente del campo, todos van en masa para el norte.
En 1813, cuando Artigas había regresado a Buenos Aires, hubo una Asamblea Constituyente,
que en sus “Instrucciones” declaró la independencia de las colonias. Cuando el gobierno de
Buenos Aires rechazó a los diputados de Artigas, los artiguistas se declararon contra Buenos
Aires. Después de muchas batallas, eventualmente Artigas estableció un gobierno federal basado
en Montevideo. Pero en 1816, los portugueses invadieron y tomaron Montevideo. Después de
luchar cuatro años contra los portugueses, Artigas huyo el exilio en Paraguay.
Brasil ganó su independencia de Portugal en 1822, y había algunas negociaciones en
progreso para crear un Uruguay independiente, pero Brasil no permitió. En 1824 Brasil declaró
que la Banda Oriental seria la provincia cisplatina. En 1825, un grupo “los treinta y tres
orientales, liderados por Juan Antonio Lavalleja” cruzaron el rio de la Plata desde Buenos Aires
y empezaron una insurrección contra Brasil. Con la ayuda de la gente uruguaya y del gobierno
argentino, ganaron en octubre. Luego, Brasil declaró guerra contra Argentina por romper la
neutralidad y había más guerra hasta 1828. En 1828, con la mediación de Inglaterra, Brasil y
Argentina firmaron el tratado de Montevideo e hicieron un estado independiente, la República
Oriental del Uruguay. La constitución de Uruguay fue aprobada por Argentina y Brasil en 1930 y
el primer presidente fue Fructuoso Rivera. En 1935 Manual Oribe sucedió como presidente, y
fue un rival de Rivera. En la Batalla de Carpintería, las fuerzas de Rivera lucharon contra el
ejército de Oribe, “defensores de las leyes”. Las tropas de Oribe llevaron vincha de blanco y las
de Rivera, rojo, y por eso nacieron los partidos tradicionales- el partido nacional/ partido blanco,
y el partido colorado.

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