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Historia de Uruguay

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Antiguo mapa conocido como Islario General de todas las islas del mundo, creado por
el cosmógrafo Alonso de Santa Cruz en el siglo XVI. Se ve gran parte de la Cuenca del Plata que
incluye a todo el actual territorio uruguayo; que hoy corresponde al tercio sur de la Banda Oriental.

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Uruguay

La historia del Uruguay abarca la historia del actual territorio de Uruguay,


desde antes de que se constituyera como estado hasta la actualidad.

Índice

 1Época prehispánica
 2Colonización
 3Lucha por la independencia
 4La Cisplatina y la Guerra del Brasil
 5Independencia
 6Apogeo del caudillismo
 7Modernización y militarismo
 8La Suiza de América
o 8.1La era de la exportación
 9Primera dictadura del siglo XX
 10Deterioro económico
 11Los gobiernos blancos
o 11.1Las elecciones de 1958
o 11.2Primer gobierno blanco
o 11.3Segundo gobierno blanco
 12La reforma de 1966
 13Gobierno de Óscar Gestido
 14Gobierno de Jorge Pacheco Areco
 15Elecciones de 1971
 16Dictadura cívico-militar
 17Retorno a la democracia
 18Crisis económica, política y social del año 2002
 19Gobierno de Tabaré Vázquez
o 19.1Gobierno
o 19.2Derechos Humanos
o 19.3Política Internacional
 20Gobierno de José Mujica
 21Segundo gobierno de Tabaré Vázquez
 22Véase también
 23Notas
 24Referencias
 25Enlaces externos

Época prehispánica[editar]
Indígenas del Río de la Plata. Dibujo del diario de viaje de Hendrick Ottsen, 1603. Nótese que uno
de ellos tiene boleadoras.

Hay indicios de población en la Banda Oriental desde varios miles de años


atrás,1 como lo testimonian los hallazgos de la Cultura Catalanense en Artigas,
datados de aproximadamente 10.000 años a. C., lo que la convierte en en el
yacimiento arqueológico humano más antiguo del país. También destacan
los cerritos de indios al este del territorio, con una antigüedad de 5000 años; y
los recientes hallazgos en Mataojo (Salto).2 Otro hallazgo significativo son
los antropolitos, zoolitos y ornitolitos.3 También es revelador el yacimiento del
Vizcaíno, cerca de Sauce, rico en megafauna con marcas de herramientas
líticas, lo cual indica la presencia humana hace varios miles de años en el
lugar.4
Los habitantes conocidos del actual territorio de Uruguay antes de la llegada de
los españoles eran las etnias de indígenas mayoritariamente nómadas de los
conjuntos pámpido y amazónido: charrúas, chanaes, guaraníes, yaros, bohane
s, tapés, güenoas, chandules y arachanes. Contrariamente a lo que ha sido la
opinión dominante durante gran parte del siglo XIX y el XX, las investigaciones
arqueológicas y etnohistóricas recientes han revelado que el poblamiento del
territorio uruguayo por parte de los charrúas fue mayormente posterior a la
conquista europea. Más precisamente, ocurrió entre fines del siglo XVII y
principios del siglo XVIII, y se debió a su expulsión desde los territorios de las
actuales provincias argentinas de Santa Fe y Entre Ríos donde tenían su
principal morada, como parte de la gran ofensiva contra los indígenas
desencadenada por los colonizadores españoles luego de la Guerra
Guaranítica. Se acepta, sin embargo, que alguna porción del territorio
uruguayo, como por ejemplo, parte del actual departamento de Colonia, tenía
presencia charrúa antes de esa migración. La etnia de los minuanes, en
cambio, habría sido la más populosa y extendida en el territorio uruguayo, aun
después de ese desplazamiento de los charrúas.5

Colonización[editar]
Los españoles llegaron al actual territorio uruguayo en 1516.
En 1527 Sebastián Gaboto, a las órdenes de la monarquía española, construyó
un primer campamento fortificado en la costas oriental del Río de la Plata frente
a la confluencia con el río Paraná, esta población fue llamada San Lázaro y
estaba unos pocos kilómetros al noreste de la actual ciudad de Carmelo, días
después la misma expedición española al mando de Sebastián Gaboto edificó
un fuerte en la desembocadura del río que llamó San Salvador del mismo modo
que al fuerte. Luego, el 30 de mayo de 1574, Juan Ortiz de Zárate fundó en las
proximidades de las ruinas del mencionado fuerte la primera villa europea,
llamada también San Salvador (prácticamente la actual Dolores), mientras que
en 1624 los misioneros jesuitas fundaban una reducción a orillas del Río
Negro (o Hum), casi en la confluencia con el Río Uruguay. Tal reducción,
llamada Santo Domingo Soriano, es el antecedente de la actual Villa Soriano,
en el departamento de Soriano.
Pero la fuerte resistencia de los indígenas1 en contra de una posible conquista,
sumada a la ausencia de oro y plata en la zona, limitaron el asentamiento en la
región durante los siglos XVI y XVII, llamado en aquel entonces Banda Oriental.
Los españoles ingresaron el ganado por iniciativa del entonces gobernador
de Asunción Hernandarias, el cual se adaptó fácilmente al territorio
estableciéndose las Vaquerías del Mar. La ambición por colonizar se vio
aumentada al verse la expansión de Portugal hasta las fronteras del
actual Brasil.
En 1680 los portugueses comenzarían 100 años de dominio en la Banda
Oriental, violando el Tratado de Tordesillas, fundaron la Colonia del
Sacramento frente a la ciudad de Buenos Aires, El 22 de noviembre de 1723 el
Maestre de Campo don Manuel de Freytas Fonseca fundó un asentamiento en
el sitio donde hoy se levanta Montevideo. El 22 de enero de 1724 los españoles
desde Buenos Aires desplazaron a los portugueses. Los portugueses fundaron
en el norte de la Banda Oriental la ciudad de Río Grande en 1737, Porto
Alegre en 1742, y la Fortaleza de Santa Teresa en 1762 en Rocha.
Montevideo fue fundada oficialmente el 24 de diciembre de 1726 por el capitán
español Bruno Mauricio de Zabala, llamado «Brazo de Hierro», comisionado
por las autoridades establecidas en Buenos Aires, para servir como fortaleza
militar, pasando rápidamente a ser su puerto un centro comercial para poder
competir con Buenos Aires. La nueva fundación recibió inicialmente el nombre
de Fuerte San José, y luego de San Felipe y Santiago, aunque el lugar era
conocido de antiguo por los españoles como Montevideu, nombre tal vez
derivado del término «monte videm» usado por quien avizorara por primera vez
el cerro existente en sus costas, Miguel de Triana. España solo tiene
Montevideo y sus cercanías, los hoy Departamentos de San José, Flores,
Canelones y Maldonado. El 90 % de la Banda Oriental seguía siendo portugués
desde 1680 [cita  requerida]. La Banda Oriental fue portuguesa en los hechos por cien
años desde 1680 a 1777 [cita  requerida].
El 22 de noviembre de 1749, el rey de España nombró primer Gobernador de
Montevideo a José Joaquín de Viana. Este llegó al Río de la Plata en el
barco Nuestra Señora de la Concepción el 3 de febrero de 1751,
desembarcando en Buenos Aires, donde juró el cargo de primer Gobernador de
Montevideo ante el Capitán General José de Andonaegui y tomó posesión del
mismo en sesión solemne que el Cabildo montevideano celebrara el 14 de
marzo. La Gobernación de Montevideo comprendía los territorios desde la boca
del arroyo Cufré, en el oeste, hasta el cerro Pan de Azúcar, al este, llegando
por el norte desde las nacientes de los ríos San José y Santa Lucía siguiendo
la línea de la Cuchilla Grande hasta el cerro Ojosmín, que se encuentra en el
actual departamento de Flores. Corresponde a los actuales departamentos
de Montevideo, Canelones y parte de los de San José, Flores, Florida,
Lavalleja y Maldonado.
El primer virrey del Río de la Plata, Pedro de Cevallos (o Zevallos) reconquistó
Montevideo y la Fortaleza de Santa Teresa así como, la isla de Santa Catarina.
Finalmente, en 1777, el mismo Cevallos, nombrado virrey del recientemente
creado Virreinato del Río de la Plata, conquistó definitivamente la Colonia del
Sacramento, conquista que fue refrendada mediante el tratado de San
Ildefonso, firmado ese mismo año, por el que la frontera hispano-portuguesa se
fijaba en el río Negro, quedando España en poder de la mitad sur del actual
Uruguay.
Por el Tratado de San Ildefonso, España gobernaba entonces solamente el sur
de la Banda Oriental quedando el norte de la Banda Oriental, Río Grande del
Sur, Santa Catarina y Paraná (misiones de La Guayrá) en poder portugués en
el año 1777. La Banda Oriental desde 1680 seguía siendo portuguesa. Desde
el año 1763 hasta el año 1828 la fortaleza de Santa Teresa y luego el fuerte de
San Miguel, pasaron a manos portuguesas y españolas constantemente. El
hoy departamento de Rocha fue sucesivamente portugués y español.
España gobernó Montevideo solo 32 años [cita  requerida] y el sur del actual Uruguay
solo desde 1777 a 1807 [cita  requerida]. La primera parte del siglo XIX estuvo
marcada por una lucha entre España y Portugal para poder obtener el dominio
sobre la zona. Además, entre 1806 y 1807 el Reino Unido invadió Buenos Aires
y Montevideo, pero fue derrotado y se retiró. En 1810 en Buenos Aires estalla
la Revolución de Mayo a la cual se suma José Gervasio Artigas liderando a la
Banda Oriental. En 1815 Montevideo es territorio de la Provincia Oriental bajo
el mando de Artigas y Ortorgues, pero un año después desde 1816 a 1824 el
territorio fue invadido por el Reino Unido de Portugal, Brasil y Algarve pasando
inicialmente a ser parte del reino portugués con el nombre de «Provincia
Cisplatina». También con el nombre de «Cisplatina» entre 1824 y 1827 fue
brasileño.6
Las principales poblaciones permanentes fundadas por los españoles durante
la época colonial son:7
 Colonia del Sacramento (1680)  San Juan Bautista o Santa Lucía (1781)
 Real de San Carlos (1680)  Pando (1781)
 Santo Domingo Soriano (1708)  San José (1781)
 Montevideo (1726)  Minas (1783)
 Fuerte de San Miguel (1737)  Mercedes (o Capilla Nueva) (1788)
 Maldonado (1755)  Rocha (1793)
 Fortaleza de Santa Teresa (1762)  Melo (1795)
 San Carlos (1763)  Belén (1800)
 Paysandú (1772)  Dolores también llamada Espinillo o San Salvador (1800)
 Guadalupe o Canelones (1774)  Piedras (1800)
 Rosario o el Colla (1775)  Santísima Trinidad de Porongos (1803)
 Víboras (1780)  Florida (1809)

Lucha por la independencia[editar]


Artículo principal: Revolución oriental
Artigas en la Ciudadela, óleo de Juan Manuel Blanes.

Iniciado el proceso revolucionario en Buenos Aires, en la llamada Revolución


de mayo de 1810, la Banda Oriental tardó en sumarse. El denominado Grito de
Asencio protagonizado por Pedro José Viera y Venancio Benavides el 28 de
febrero de 1811, se considera tradicionalmente el punto de partida de la
revolución en el país. Rápidamente al día siguiente se ocuparon las villas
de Mercedes y de Santo Domingo Soriano, solicitando auxilios a la Junta de
Buenos Aires. José Gervasio Artigas, hoy considerado máximo héroe nacional,
se sumó a la revolución y lanzó una exitosa revuelta en contra de España. Tras
ocupar Soriano, Benavides tomó El Colla el 20 de abril. Manuel Francisco
Artigas avanzó sobre las poblaciones del este, el 24 de abril de 1811 tomó la
villa de Minas de Santa Lucía, el día 28 entró en San Carlos y el día 29
rindió Maldonado, luego un destacamento avanzó hacia el fuerte de Santa
Teresa . Fuerzas unidas de Manuel Francisco Artigas y de Benavides
liberaron San José el 25 de abril tras tomar a Porongos.
José Gervasio Artigas dirigió sus tropas hacia Montevideo y venció a
los realistas en la batalla de las Piedras, el 18 de mayo del mismo año, sitiando
pocos días después la ciudad amurallada de Montevideo, último reducto de la
colonia española en la Banda Oriental, puesto que Colonia del Sacramento
había sido ocupada el 26 de mayo por Benavides. 8
Estatua de José Gervasio Artigas.

El envío de un contingente portugués en auxilio de los españoles llevó al


Gobierno de Buenos Aires a pactar con los españoles y también con los
lusobrasileños (Tratado Herrera-Rademaker) , ordenando la retirada de las
tropas revolucionarias de la Banda Oriental que incluía la Provincia
Oriental, Misiones Orientales, Río Grande del Sur, Santa Catarina, por este
tratado los lusobrasileños ocupaban también un territorio que llamaban "Entre
Ríos", es decir la región delimitada por el Cuareim al sur, el Ibicuy al norte y el
río Uruguay al oeste; aunque muy probablemente tal denominación
lusobrasileña apuntaba a sentar precedentes sobre una posible anexión de
la Provincia de Entre Ríos (ya fuera de la Banda Oriental) debe evitarse la
confusión entre ambos territorios homónimos.
Artigas acató el pacto, retirando el sitio de Montevideo. Casi toda la población
del sur de la Banda Oriental excepto Montevideo, lo acompañó en la retirada
hasta el arroyo Ayuí Grande en la actual ciudad entrerriana de Concordia,
dejando el territorio virtualmente vacío. A este acontecimiento se le denomina
el Éxodo oriental o también La Redota y demostró el liderazgo o rol
de caudillo de José Gervasio Artigas sobre el pueblo de la Banda Oriental.
La posición de Buenos Aires, aunque acatada, provocó fuerte malestar entre
los orientales. A partir del 26 de febrero de 1813 se reanuda el sitio de
Montevideo, que tras la victoria de la escuadra de las Provincias Unidas en
la Campaña Naval de 1814 cae finalmente el 23 de junio de 1814. Durante ese
período se incrementan los enfrentamientos entre Artigas, partidario
del federalismo y principal cuadillo de la Liga Federal, y el gobierno de Buenos
Aires. Entre las instrucciones que Artigas dio a los diputados orientales a
la Asamblea del año XIII, figuran los límites de la Provincia Oriental que él
pretendía:
Artículo 8º: El territorio que ocupan estos Pueblos desde la costa oriental del Uruguay hasta
la fortaleza de Santa Teresa forman una sola Provincia, denominante la Provincia Oriental.
Pues el resto de la Banda Oriental esto es el Norte de Río Negro más todo Río
Grande del Sur y Santa Catarina eran parte de la Banda Oriental que estaba
bajo ocupación lusobrasileña.
Artículo 9º: Que los siete Pueblos de Misiones, los de Batoví, Santa Tecla, San Rafael y
Tacuarembó que hoy ocupan injustamente los Portugueses y a su tiempo deben reclamarse serán
en todo tiempo territorio de esta Provincia. 9

En 1815, Artigas logró reunir en la entonces capital entrerriana de Concepción


del Uruguay el protocongreso de la independencia argentina, conocido
como Congreso de Oriente, con representantes de la Provincia
Oriental, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, las Misiones -mucho más extensas
que la actual provincia argentina de ese nombre, aunque sus representantes no
llegaron a tiempo- y Santa Fe, aunadas en la Liga Federal a la cual fueron
invitadas todas las otras provincias de los territorios del antiguo Virreinato del
Río de la Plata.
La Banda Oriental se divide en repúblicas: República de Río Grande del
Sur y República Juliana (Santa Catarina); las que desde 1825 intentan ser
independientes y confederadas.

 1820: Ramírez creó entonces la República de


Entre Ríos 1820-1821.
 1825: Declaración de independencia, respecto a
Brasil y a Portugal, de la Banda Oriental y reunión
de la misma a las Provincias Unidas del Río de la
Plata (tal cual expresamente lo dice el acta
del Congreso de Florida en ese mismo año 1825).
 1828: a partir de la liberada, (durante la Guerra
contra Brasil), Provincia Oriental es creado por
intervención inglesa el Estado Oriental del
Uruguay independiente del Brasil (sólo el sur de la
Banda Oriental, el norte sigue siendo brasileño).
 1836: Se proclama la República
Riograndense (norte de la Banda oriental).
 1839: La República Riograndense formó
una confederación conjunta con la República
Juliana, la cual fuera proclamada ese mismo año,
en Santa Catarina, y cuya capital era la ciudad
de Laguna.

La Cisplatina y la Guerra del Brasil[editar]


Artículos principales: Provincia Cisplatina  y  Guerra del Brasil.

El Juramento de los Treinta y Tres Orientales, óleo de Juan Manuel Blanes.


Bandera de la Provincia Cisplatina.

En agosto de 1816 tropas luso-brasileñas al mando de Carlos Federico


Lecor invadieron la Provincia Oriental del Río de la Plata en el curso de
la invasión luso-brasileña, aunque Artigas continuó la lucha en el medio rural
hasta caer derrotado en la batalla de Tacuarembó, en enero de 1820, la cual
significó la derrota definitiva del caudillo oriental, el que debió abandonar su
tierra, a la cual ya no volvería.
De este modo, en 1821 el actual territorio uruguayo fue anexado al Reino Unido
de Portugal, Brasil y Algarve como una provincia más,
rebautizándosela Provincia Cisplatina. Portugal entendía que las tierras al
occidente del Río Uruguay -actualmente las provincias argentinas de Entre
Ríos y Corrientes- deberían también formar parte de su órbita, llamando a toda
esa región la Provincia Transplatina.
Cuatro años después, en abril de 1825, y con el apoyo de Buenos Aires, un
grupo de rioplatenses, la mayoría originarios de la Provincia Oriental,
llamados los Treinta y Tres Orientales y liderados por Juan Antonio Lavalleja,
regresó a su tierra para liberarla de la dominación imperial brasileña, siendo
dicha gesta conocida como "Cruzada Libertadora". La importancia histórica de
esta gesta es tal, que el día 19 de abril, fecha del desembarco de los Treinta y
Tres en la Agraciada, actualmente en el Departamento de Soriano, viniendo
desde Entre Ríos, constituye una de las fiestas nacionales laborables de la
República. Asimismo, la bandera tricolor que portaban los Treinta y Tres, con la
leyenda "Libertad o Muerte", constituye actualmente uno de los emblemas
oficiales de la República.
Posteriormente se sumaría a dicha gesta libertadora el general Fructuoso
Rivera quien ofreció a los portugueses una vasta región del norte y este de la
Provincia Oriental a cambio de lograr "la paz". El territorio cedido por Rivera a
los portugueses limitaba al norte con la actual ciudad de Porto Alegre.
El 25 de agosto de 1825, en el Congreso de Florida, se declara la
total independencia del territorio oriental con respecto al Reino de Portugal, y a
la vez, su voluntad de volver a formar parte, como una provincia más, de
las Provincias Argentinas.
La H. Sala de Representantes de la Provincia Oriental del Río de la Plata en virtud de la soberanía
ordinaria y extraordinaria que legalmente reviste para resolver y sancionar todo cuanto tienda a la
felicidad de ella, declara: que su voto general, constante, solemne y decidido es, y debe ser, por la
unidad con las demás Provincias Argentinas a que siempre perteneció por los vínculos mas
sagrados que el mundo conoce. Por tanto, ha sancionado y decreta por ley fundamental la
siguiente: Queda la Provincia Oriental del Río de la Plata unida a las demás de este nombre en el
territorio de Sud América, por ser la libre y espontánea voluntad de los Pueblos que la componen,
manifestada con testimonios irrefragables y esfuerzos heroicos desde el primer período de la
regeneración política de dichas Provincias. Dado en la Sala de Sesiones de la Representación
Provincial, en la villa de San Fernando de la Florida, a los veinticinco días del mes de agosto de mil
ochocientos veinticinco.
Las tropas orientales unidas a las demás Provincias Argentinas derrotaron
finalmente al Brasil, luego de una lucha de tres años, en el combate decisivo
de Ituzaingó. Sin embargo, los problemas económicos obligaron a aceptar
reclamos brasileños y británicos, por lo que el 28 de agosto de 1828 se firma
la Convención Preliminar de Paz, por la cual tanto Argentina como el Brasil,
bajo la vigilancia del Reino Unido, establecían la creación de un estado
independiente en el territorio de la Banda Oriental, tal estado recibió
inicialmente el nombre de Estado Oriental del Uruguay.

Juan Antonio Lavalleja.

Independencia[editar]
La primera constitución nacional fue adoptada el 18 de julio de 1830, dándosele
el nombre de Estado Oriental del Uruguay al novel país. Pese a obtener que
Brasil abandonara las pretensiones sobre la actual República Oriental del
Uruguay, el estado brasilero mantuvo ocupada una gran parte de la Banda
Oriental: las nacientes del Río Negro en el nudo de Santa Tecla, y todo el
extenso territorio entre el Río Cuareim y el río Ibicuy (en grafía
portuguesa: Ibicuí) y su curso alto llamado río Santa María. También por el
noroeste, los brasileños lograron correr a su favor las fronteras, pese a su
derrota militar: la frontera del noroeste pasó de ser el Piratiny o Piratiní a ser
el Río Yaguarón.
El primer presidente, electo bajo la Constitución de Uruguay de 1830,
fue Fructuoso Rivera, desplazando a Lavalleja, que no era de ningún modo del
agrado de los brasileños. Fue sucedido por Manuel Oribe, asumido en 1834.
No obstante, gran parte del poder seguía en manos de Rivera, gracias al cargo
de Comandante General de la Campaña que se había creado para él mismo
durante su mandato.

Primer escudo del Estado Oriental del Uruguay


Diversos incidentes llevaron a la revolución de Rivera y sus partidarios en
contra del gobierno en 1836. Oribe decretó que sus seguidores usaran una
divisa blanca, mientras Rivera adoptó una cinta colorada (primero había elegido
una celeste, pero debido a que se confundía con el blanco decidió cambiarla).
Es de esta forma que nacieron los «blancos» y «colorados», quienes se
enfrentaron por primera vez en la batalla de Carpintería, el 19 de septiembre de
ese año.
Según Edmundo Narancio,10 entre las consecuencias positivas de la
independencia uruguaya podemos destacar el establecimiento de leyes básicas
y la creación del pabellón a raíz de la jura de la Constitución, los nuevos
derechos y libertades, el principio de autodeterminación, prohibición del tráfico
de esclavos con países extranjeros, la supresión de un sistema fiscal complejo
con numerosos impuestos y la apertura comercial. Por el contrario, entre los
costes de la independencia podemos destacar las influencias extranjeras y
rivalidades internas de Uruguay, que provocan la Guerra Grande entre 1839 y
1851, la inestabilidad social y la fuga de capitales.

Apogeo del caudillismo[editar]


Artículo principal: Guerra Grande
Las vinculaciones de los colorados con los unitarios argentinos y de los blancos
con los federales dieron lugar a una constante intervención de la Argentina en
los asuntos internos uruguayos, a lo que se sumaba Brasil. También se debe
destacar la intención de Francia y Gran Bretaña de extender su predominio
económico al Río de la Plata.
Todas estas influencias extranjeras, sumadas a las rivalidades internas en
Uruguay, desencadenarían la llamada Guerra Grande (1839-1851). Luego de
que las tropas riverenses vencieran a las de Oribe, este renunció a la
presidencia y en su lugar fue elegido Rivera, el 1º de marzo de 1839. Ya en
febrero de ese año le había declarado la guerra a Rosas, aliado de Oribe,
dando comienzo a la contienda.
Entre 1839 y 1843, la guerra fue favorable a Rosas y Oribe. Este último impuso
el sitio de Montevideo entre 1843 y 1851. Así, el país quedó dividido en dos
partes: Montevideo bajo el poder del Partido Colorado, apoyado por los
ingleses y franceses, que forman el Gobierno de la Defensa; el resto del país,
dominado por Oribe y los blancos, que formaron el Gobierno del Cerrito, con su
capital en la ciudad de Villa Restauración, actualmente el barrio de la Unión.
Oribe fue el primer presidente oriental que homenajeó oficialmente a Artigas,
bautizando con el nombre del prócer a la principal calle de Villa Restauración.
Durante este período, varias legiones extranjeras —franceses, italianos, etc.—
apoyaron la defensa de Montevideo, siendo especialmente notable la
participación de Giuseppe Garibaldi, quien comandara las fuerzas navales de
Montevideo.
Desde 1849, tras aplastar el imperio del Brasil a la República Riograndense, al
concluir la Guerra de los Farrapos —del portugués «Guerra de los
Harapientos»— arreciaron las incursiones y ataques brasileños sobre el
territorio uruguayo.
En 1851, el gobernador de la provincia de Entre Ríos, Argentina, Justo José de
Urquiza, forma una coalición con Brasil y el Gobierno de la Defensa e invadió el
territorio uruguayo. Simultáneamente se produjo una nueva invasión brasileña.
El cansancio generado por la larga guerra provocó la rápida rendición del
gobierno del Cerrito y la firma de la paz, el 8 de octubre de 1851. Como
resultado del tratado de paz firmado en 1852, Uruguay reconocía la soberanía
brasileña sobre las Misiones Orientales —ya ocupada en los hechos por el
Imperio de Brasil— más una franja adicional, entre los ríos Cuareim e Ibicuy.
Asesinato del General Venancio Flores, en las calles de Montevideo a cabo el día 19 de
febrero de 1868 (Angelo Agostini, publicado en A Vida Fluminense, n.º 10, 07/03/1868).

Al finalizar la Guerra Grande el país queda en un complicado escenario:


totalmente endeudado con decrecimiento de población, destrucción de la
mayoría del ganado (principal fuente de ingresos del país).
Muchos responsabilizaron a los bandos políticos por la debilidad interna y
propusieron una política de fusión para eliminar las divisas, llegando en 1857 el
presidente Gabriel Pereira a prohibir la reorganización de los partidos políticos.
Al llegar en 1860 a la presidencia Bernardo Berro, a pesar de ser blanco, se
inclinó hacia la política de fusión. Intentó implantar una política de neutralidad
con Argentina, puesto que opinaba que Uruguay no se debía entrometer en
asuntos externos.
Venancio Flores, el principal caudillo uruguayo en ese momento, se alió con los
gobiernos de Brasil y Argentina e invadió el territorio uruguayo. Tras una breve,
pero violenta guerra, accedió al poder en 1865. Flores pagó el apoyo brasilero
y argentino uniéndose con ellos contra el Paraguay, en la Guerra de la triple
alianza.
Flores fue asesinado en 1868, siendo sucedido por Lorenzo Batlle. En su
período de gobierno, lo más destacado fueron las crisis económicas y políticas.
Entre estas últimas se destacó la «Revolución de las Lanzas», comandada
por Timoteo Aparicio. Este período (1868) se caracterizó por gobiernos débiles,
siendo presidentes: Lorenzo Batlle (1868-1872), José Ellauri (1872-1875)
y Pedro Varela (1875).

Modernización y militarismo[editar]
Artículos principales: Reforma Vareliana y  Militarismo (Uruguay).
La Modernización es un concepto que engloba el período de militarismo que
comienza en 1876, acontece en el marco internacional de la Segunda
Revolución Industrial y Primera globalización y en el marco local tras un caos
político presidido por la Revolución de las Lanzas de Timoteo Aparicio, y
finaliza en el siglo XX con las reformas impulsadas por José Batlle y Ordóñez.
Lorenzo Latorre hacia 1875.

El 10 de marzo de 1876 se efectuó una amplia reunión de comerciantes,


hacendados y extranjeros residentes que ante la acefalia en el poder y las
graves crisis que enfrentaba el país, debido en gran parte a la inoperancia de
los gobiernos democráticos decidieron ofrecerle el poder al Ministro de
Guerra Coronel Lorenzo Latorre. Este aceptó y tomó el poder como
"gobernador provisorio".
Los objetivos principales del régimen latorrista fueron el logro de la paz interna,
el orden (en la campaña, sobre todo) y la afirmación del derecho a la propiedad
privada.
El militarismo significó desde el ángulo político, la sustitución de las banderías
tradicionales (blancos y colorados), por el gobierno de los grupos de
presión más fuertes en lo económico, aliados al grupo de presión más fuerte en
el poder real y coactivo: el ejército. La inoperancia, la debilidad y el tono
artificial que había asumido paulatinamente la superestructura política de la
República, se tradujo pues en una asunción del poder casi directa por parte del
alto comercio, la clase alta rural y los inversionistas extranjeros. Latorre se
basó en los progresos técnicos de la época, para consolidar la estabilidad
política del país.
Los fusiles Mauser y Remington le dieron al ejército un poder incontrastable e
inalcanzable para los revolucionarios por su costo. La importancia
del telégrafo radica en la velocidad para transmitir información hasta los lugares
más alejados de la capital. El ferrocarril permitió el rápido traslado de tropas,
para sofocar las revoluciones.
También produjo una modernización del aparato jurídico sustituyendo a los
alcaldes por jueces letrados departamentales. Simultáneamente se aprobaron
los Códigos de Procedimiento Civil e Instrucción Criminal en 1878, así como el
Código Rural y la creación del Registro de Embargos e Interdicciones.
En 1879 se aprobó la Ley de Registro de Estado Civil, con la cual pasó a
manos del Estado una función realizada hasta el momento por la Iglesia.
Los juzgados de Paz, comenzaron a llevar cuatro registros: de nacimientos, de
defunciones, de matrimonios y de reconocimientos y legitimaciones.
En materia económica y para mejorar las condiciones del campo, Latorre se
cercioró de la consolidación del derecho de propiedad privada (Latifundios)
mediante el Código Rural de 1879, que establecía la medianería obligatoria, lo
que le dio un enorme impulso al cercamiento de los campos. Estableció la
Oficina General de Marcas y Señales en la que debía solicitarse las marcas de
ganado para evitar repeticiones y fraudes y asegurar la propiedad del ganado.
Otra medida que se implantó como ayuda para consolidar el orden interno en la
campaña, fue la autorización dada a los grandes propietarios para establecer
policía particular a cargo del comisario.
El alambre consolidó el régimen vigente de la propiedad de la tierra. En
segundo término, eliminó al minifundista ganadero y provocó la
primera desocupación en el país al eliminar el trabajo de muchos peones,
agregados y puesteros. Esto provocó su concentración en los suburbios de los
poblados, de ciudades del interior y en Montevideo, dando origen a lo que se
empezó a conocer como «rancheríos».

José Pedro Varela.

Una de las reformas más importantes durante el gobierno del Coronel Latorre
fue la educativa, impulsada por José Pedro Varela quien se encontraba a la
vanguardia en materia de las nuevas corrientes pedagógicas.
Latorre abrió cauce a la efectivización de los proyectos varelianos, una
situación que señala el historiador Enrique Méndez Vives en «El Uruguay de la
Modernización» como paradojal, habida cuenta de las características del
régimen. Varela entendió que lo importante era llevar a cabo la reforma
educativa, que contribuiría a la eliminación de gobiernos semejantes en el
futuro. La escuela es la base de la República; la educación, la condición
indispensable de la ciudadanía. Todas las grandes necesidades de la
democracia, todas las exigencias de la República, sólo tienen un medio posible
de realización: educar; educar; siempre educar....
El decreto ley de la Enseñanza Común fue aprobado el 24 de agosto de 1877.
Estableció tres principios básicos, que hasta hoy siguen presentes. La
educación ha de ser: gratuita, obligatoria y laica. Los dos primeros principios
pudieron ser llevados a cabo sin grandes dificultades. El freno estuvo en el
aspecto de la laicidad. Entonces Varela propuso, como transición, que
el catolicismo fuera enseñado a los alumnos cuyos padres así lo solicitaran.
Más que reformar, Varela creó un sistema educativo. Dio contenidos científicos
a los programas de estudio; seleccionó personal docente dando amplia
participación a la mujer; implantó la descentralización administrativa,
procurando la participación popular en el mejoramiento de la escuela pública.
Latorre no desarrolló un gobierno a favor de la clase militar, pero tuvo
importantes cantidades de autoritarismo lo que ayudó para forjar un Poder
Central capaz de encarrilar al país en las normas necesarias para el desarrollo
de una economía moderna. Defensa de la propiedad privada de la tierra y del
ganado, establecimiento del patrón oro, reanudación del pago de la deuda
pública; pero también, modernización técnica y administrativa del Estado.

La Suiza de América[editar]
Artículo principal: Batllismo

José Batlle y Ordóñez hacia 1900.

A finales del siglo XIX el país había completado su organización y durante la


etapa batllista consolidó su democracia y alcanzó altos niveles de bienestar,
equiparables a los europeos. Debido a esto, Uruguay comenzó a ser conocido
como «la Suiza de América».
La mayor parte del esfuerzo del primer mandato de José Batlle y Ordóñez se
destinó en asuntos políticos que incluyeron los levantamientos de 1903 y 1904,
protagonizados por Aparicio Saravia y el Partido Nacional. De esta manera se
pudo consolidar definitivamente la autoridad del poder central en toda la
República. Poco, fue el tiempo que quedó para la realización de la obra
económica y social.
En el plano económico se destaca: la erogación de 3 millones de pesos, con
destino a la construcción y mejora de caminos de la campaña. Se intentó
favorecer el surgimiento de la industria nacional y disminuir la dependencia del
exterior por la importación de azúcares a través de una ley en la que se
otorgaban varias primas anuales y semillas seleccionadas. Se ampliaron
también, las obras de la usina de Luz Eléctrica. En el plano financiero, existió el
deseo por parte del Ejecutivo de lograr una paulatina independencia del
financiamiento inglés. En el plano educativo, en 1903 se creó la Facultad de
Comercio (futura de Ciencias Económicas) y en marzo de 1907 la Facultad de
Veterinaria y Agronomía. Se trataba de tecnificar el comercio y el agro
desviando a los hijos de estancieros de las tradicionales carreras de abogado y
médico. Se proyectó la instalación de diez liceos departamentales, procurando
otorgar en el interior de la República elementos de cultura superior a la de la
enseñanza primaria.
En el plano político, la tarea fue absorbida por los levantamientos armados
producidos por la política exclusivista de partido desarrollada por Batlle y la
negativa del Partido Nacional a seguir aceptando su continua marginación del
gobierno. Firmada en 1904 la Paz de Aceguá, las consecuencias de la revuelta
fueron: A) La consolidación de la unidad del Estado. El triunfo colorado implicó
la finalización de la política de coparticipación en los gobiernos
departamentales. B) Gobierno excluyente de partido y C) La Reforma Electoral.
Con la asunción de Claudio Williman se continuó con un gobierno batllista.
El 25 de agosto de 1909 se produjo la inauguración del puerto de
Montevideo que estaría al servicio público y el Estado se reservaba la
administración portuaria. El país contaba desde este momento con un medio
que le permitiría competir con Buenos Aires en relación con el tráfico de
ultramar.
Durante la segunda presidencia de Batlle y Ordóñez hubo importantes aportes
a los derechos laborales de los trabajadores. Se prohibía el trabajo de menores
de 13 años, se restringía la jornada a los menores de 19; la mujer dispondría
de 40 días de descanso en el período de embarazo, el descanso obligatorio era
de un día cada siete y un máximo de 48 horas semanales de trabajo. Se
estableció la jornada de trabajo en 8 horas. También se creó una ley de pago
de indemnizaciones por accidentes de trabajo. Se aprobó una pensión a la
vejez que podían utilizar todas las personas mayores de 65 años y de cualquier
edad en caso de invalidez absoluta, que se encontrara en la indigencia. Se
estableció la indemnización por despido que dependía de la cantidad de años
trabajados.
En lo que se refiere a la actividad económica del Estado (estatización y
nacionalización). El principio ideológico era que los servicios públicos
esenciales debían estar en manos del Estado, puesto que éste era el
organismo representativo de la sociedad, es decir, de todas las clases sociales,
y estaba por encima de sus disputas; el Estado debía intervenir allí, donde el
capital privado fuera indeciso o temiera perder dinero, porque no estaba guiado
por el afán de lucro sino de servicio público; el Estado debía sustituir a las
empresas extranjeras que se llevaban la ganancia fuera de fronteras
debilitando así el país.
Fue así que se produjo la estatización del Banco de la República Oriental del
Uruguay, 1911 y 1913, la del Banco Hipotecario del Uruguay, en 1912, y la de
los seguros, que pasaron de manos privadas a manos estatales con la creación
en 1911 del Banco de Seguros del Estado. Se creó a su vez,
en 1915 la Administración de Ferrocarriles del Estado y se produjo la
secularización de actos públicos.
Como jefe del ejecutivo aseguró la unidad nacional acabando con diversas
rebeliones departamentales, estableció la jornada laboral de ocho horas, la
indemnización laboral y promulgó la primera ley del divorcio en Latinoamérica,
que reconocía los derechos de las mujeres; también creó institutos de
enseñanza media en todas las ciudades departamentales. Durante su
presidencia, se crearon empresas públicas que competían con las privadas,
proporcionando servicios más baratos.
Durante su segundo mandato, sentó las bases para la futura reforma
constitucional. Es decir, que produjo en todos los ámbitos la modernización del
Estado. Su filosofía, aún sigue presente en la mentalidad de los uruguayos,
independientemente de partidos políticos.
La era de la exportación[editar]

Brasi
AÑOS Alemania Bélgica Francia Argentina Otros países
l

1900 10 % 18 % 16 % 26 % 10 % 21 %

1901 12 % 15 % 18 % 16 % 16 % 24 %

1902 11 % 14 % 14 % 14 % 19 % 28 %

1903 13 % 17 % 16 % 14 % 17 % 23 %

1904 13 % 18 % 17 % 13 % 17 % 22 %

1905 11 % 20 % 18 % 10 % 19 % 22 %

1906 13 % 14 % 22 % 10 % 18 % 23 %

1907 13 % 16 % 18 % 8 % 21 % 24 %

1908 14 % 15 % 19 % 9 % 20 % 23 %

1909 15 % 14 % 20 % 9 % 18 % 24 %

1910 10 % 19 % 22 % 10 % 14 % 25 %

1911 16 % 17 % 23 % 8 % 11 % 25 %

1912 16 % 16 % 17 % 7 % 14 % 30 %

1913 19 % 12 % 17 % 7 % 15 % 29 %

1914 10 % 10 % 15 % 3 % 14 % 48 %


1915 0 % 0 % 24 % 1 % 12 % 62 %

1916 0 % 0 % 17 % 2 % 16 % 66 %

1917 0 % 0 % 15 % 1 % 13 % 72 %

1918 0 % 0 % 17 % 4 % 8 % 71 %

Datos extraídos de Reino Unido, Statistical Abstract of Principal and other Foreign countries
(1900-1918).11
A finales del siglo XIX, el motor del crecimiento de Uruguay, como de muchos
otros países de América Latina, fueron las exportaciones. La diferencia
fundamental de Uruguay con los demás, es que no depende excesivamente de
un único país comprador.
Entorno al cambio de siglo (1900) los principales bienes que exportaba
Uruguay fueron la lana con un 42% del porcentaje total y en segundo lugar
la carne congelada con un 24 %. Sólo con estos dos bienes Uruguay alcanzaba
el 66 % de las exportaciones, dándole especial importancia al sector agrícola.
Estos productos se dirigieron especialmente a tres mercados que
fueron Bélgica, Francia y Argentina. Al concentrar en ellos el 70 % de la
exportación total. Con la Primera Guerra Mundial las exportaciones a estos tres
países bajaron y cogieron más peso los denominados otros países. Cabe
destacar que en el año 1912 las exportaciones respecto a otros países eran de
30 % y al cabo de 5 años pasan a ser de 70 %.12
El hecho que su mercado de exportaciones fuese más amplio, fue una ventaja
para la economía uruguaya puesto que no dependía estrictamente de pocos
países, que importaban sus productos, y no era vulnerable a los cambios de
demanda de estos mercados. Esto significa, que la economía uruguaya
concentraba todos sus esfuerzos e inversiones en la producción de estos dos
productos primarios, que se exportaban con cierto éxito puesto que
escaseaban en países, sobre todo europeos, que se dedicaban a la producción
de productos manufacturados. La ganadería uruguaya adquirió un mayor peso
en la economía del país, debido a los adelantos tecnológicos de la época. Se
introdujeron nuevos métodos que aumentaron la productividad de los ganados,
como el método de la cría, puesto que, en términos de extensión de tierra, esta
era menor respecto a la vecina Argentina, que era uno de los mayores países
exportadores de carne también. Aunque el producto estrella de la economía
uruguaya fuera la lana (46 %), la exportación de carne aumentó gracias a la
utilización de frigoríficos, que permitían conservar mejor la carne, y a las
mejoras en las técnicas de navegación y transporte que ayudaron los
desplazamientos a larga distancia.
Las nuevas características de producción conllevaron un cambio radical en las
estructuras agrícolas, dejando paso a explotaciones capitalistas orientadas
al mercado, y no al simple consumo interno, pero la organización de la tierra no
produjo un desarrollo económico duradero en el país. Los grandes ganaderos
estaban sometidos a los intereses de capitalistas extranjeros, ingleses entre
muchos, que tuvieron un fuerte control sobre la producción. En el caso
particular de Uruguay se habla de un crecimiento extensivo, en el que se
aumentó la utilización de tierra y se incorporó más mano de obra sin ocuparse
de buscar alternativas a la falta de recursos naturales, como consecuencia de
la explotación de la tierra.

Primera dictadura del siglo XX[editar]


Artículo principal: Dictadura de Gabriel Terra

Gabriel Terra.

Gabriel Terra, presidente el 1 de marzo de 1931, se opuso desde un principio a


la constitución de 1917. El 31 de marzo de 1933, con apoyo de la Policía,
dirigida por su cuñado, Alfredo Baldomir y el sector mayoritario del Partido
Nacional, dirigido por Luis Alberto de Herrera, dio un golpe de estado, conocido
como Dictadura de Terra, por el que se disolvió el Parlamento y se censuró la
prensa. El Ejército, por su parte, no intervino en la ejecución del golpe,
manteniendo su neutralidad, a pesar de que acató el ordenamiento del
presidente Terra.
Instauró un gobierno de carácter conservador, autoritario y antiliberal al que se
opusieron el batllismo, nacionalistas independientes (sector del Partido
Nacional), socialistas y comunistas. En 1934 hizo promulgar una nueva
constitución de carácter presidencialista que tuvo vigencia plena hasta 1942.
Fue elegido presidente nuevamente en aquel año, y desempeñó el mando
hasta el 19 de junio de 1938.
Durante su mandato se desarrolló una política industrializadora de sustitución
de importaciones y se realizaron obras públicas de importancia como la represa
de Rincón del Bonete, inaugurada en 1937. Rompió relaciones diplomáticas
con la Unión Soviética en 1935 y reconoció al gobierno de Francisco Franco en
1936.
Salió airoso de un atentado contra su vida en junio de 1935 y pudo igualmente
sofocar un levantamiento armado contra su gobierno, ocurrido en el mismo
año.
Deterioro económico[editar]
El proceso de sustitución de importaciones desarrollado desde mediados de la
década del treinta mantuvo ciertas garantías de crecimiento en virtud de la
mejora del consumo interno y el alza de las exportaciones hacia Europa y
Estados Unidos, a causa de la Segunda Guerra Mundial, manteniéndose esta
bonanza económica hasta entrada la década del cincuenta a consecuencia de
la guerra de Corea (1950-1953).
Fruto de la dependencia del capital extranjero, este proceso industrializador
encontró un escollo esencial en su desarrollo. En este sentido, uno de los
problemas de Uruguay fue que dependía en un 100% de la energía que
provenía del exterior y por ello la mayor parte de los beneficios que se obtenían
volvían a salir sin dar rentabilidad a la industria nacional. Por ello, el
crecimiento y la evolución de Uruguay se vieron muy mermados, puesto que la
salida del capital no ayudaba a la inversión nacional.
Hacia 1955, producto de un desarrollo económico inarmónico y altamente
dependiente, basado en el beneficio de un reducido grupo social que detentaba
los resortes de la producción (básicamente ganadería extensiva y latifundista),
la distribución (el complejo frigorífico) y una escasa y poco especializada
industria que se basaba en la explotación de amplios sectores de obreros y
asalariados, se inició una crisis económica que afectó también a las
instituciones públicas. La depreciación de la moneda nacional, la dependencia
de los precios internacionales, el pobre desarrollo del mercado interno, el
clientelismo político y el peso de una burocracia político-estatal entremezclada
y comprometida con los grupos dominantes, terminó con la "Suiza de América"
que fue producto de una situación circunstancial en la que el país sobrevivió
sobre el ingreso de divisas provenientes de la exportación de comestibles
durante el período de la segunda guerra y los años sub-siguientes. Ya
establecida esa crisis del modelo dependiente y débilmente desarrollado,
durante la década de 1960 hubo un proceso de gran deterioro económico y por
lo tanto social con un notable aumento de la conflictividad y de la búsqueda de
alternativas por parte del movimiento social, que también incluyó la lucha
armada, propuesta determinada por uno de los movimientos generados durante
el período. Esta estuvo protagonizada por la guerrilla urbana que llevaron
adelante grupos de extrema izquierda, entre los cuales destacan
los Tupamaros, y fuerzas de extrema derecha, como el Escuadrón de la
muerte[cita  requerida] y la Juventud Uruguaya de Pie (JUP).
Las Fuerzas Armadas, alentadas por el discurso y la acción propagandística y
aún legislativa de algunos sectores de los partidos tradicionales, que
profundizaron el enfrentamiento del modelo conservador contra las propuestas
populares y ya desarrollada la primera unidad del movimiento popular (CNT -
Convención Nacional del Trabajadores) y de la izquierda política (Frente
Amplio) promovidas por la propuesta de los más tradicionales partidos de la
izquierda y algunos sectores progresistas de los partidos tradicionales fueron
asumiendo gradualmente un nuevo protagonismo. Como respuesta ante la
crisis social, económica y política que vivía el país, y el vaciamiento
autopromovido de la institucionalidad, se dio un Golpe de Estado cívico-militar,
encabezado por el Presidente de la República, Juan María Bordaberry y
apoyados por los Estados Unidos.
Los gobiernos blancos[editar]
Las elecciones de 1958[editar]
En 1958, el Partido Nacional ganó las elecciones, despojando del poder
al Partido Colorado, que gobernaba desde hacía 93 años.
Así llegaba a su fin el denominado neobatllismo, o sea, un segundo batllismo,
cuya principal figura era Luis Batlle Berres, líder colorado sobrino de José
Batlle y Ordóñez, y que había intentado impulsar la industria nacional.
En esta primera victoria del Partido Nacional el sector más votado dentro de
este partido fue el herrero-ruralismo, cuyos dirigentes eran Luis Alberto de
Herrera (caudillo blanco y una de las principales figuras políticas del S. XX)
y Benito Nardone, dirigente ruralista que, apodado como Chico-Tazo, se había
hecho muy popular en el Interior del país con sus alocuciones radiales de corte
populista, y que decidido a entrar en la política, se había aliado con los blancos.
El otro sector (que triunfaría cuatro años después) era la UBD (Unión Blanca
Democrática), que representaba lo urbano. De esta forma el Consejo Nacional
de Gobierno (recordar que desde 1952 el Uruguay adoptó un Poder
Ejecutivo colegiado, donde el poder era ejercido por un consejo de nueve
personas, seis del lema más votado, tres del que lo seguía) quedó integrado
por Martín R. Echegoyen, Eduardo Víctor Haedo, Justo Alonso
(herreristas), Benito Nardone, Faustino Harrison, Pedro Zabalza
Arrospide (ruralistas), y los colorados César Batlle Pacheco, Ledo Arroyo
Torres y Manuel Rodríguez Correa.
En estas elecciones, los blancos triunfaron con el 49,7 por ciento de los votos,
lo que representa 499 425 ciudadanos, y los colorados obtuvieron un 37,7 por
ciento, lo que equivale a 379 062 sufragios.
Sin embargo, el cambio de mando de un partido político a otro estuvo signado
por la intranquilidad. Como ejemplo se puede hablar del relato de Líber
Seregni, líder político que por ese entonces era coronel, al periodista Alfonso
Lessa, en el que cuenta que algún militar colorado le propuso a Luis Batlle
Berres no entregar el poder, y este respondió echándolo «a patadas en el culo»
(así se expresó el testigo).13
Primer gobierno blanco[editar]
Artículo principal: Primer colegiado blanco
El primer año de gobierno blanco fue bastante complicado.
En abril de 1959 se desataron graves inundaciones en los departamentos del
litoral y del centro del país. El gobierno aplicó Medidas Prontas de
Seguridad entre el 15 de abril y el 23 de junio. Tuvo que racionarse el consumo
de energía, se creó una Comisión Pro-Damnificados, para obtener recursos se
lanzó un Empréstito Patriótico y se modificaron los horarios laborales. Las
consecuencias fueron catastróficas: se calcularon 41.000 personas
desplazadas, además de pérdidas económcias y materiales millonarias.
Además, en poco tiempo la alianza entre el herrerismo y el ruralismo se
quebró, y comenzaron los ataques entre un sector y otro. El 8 de abril de 1959
falleció Luis Alberto de Herrera.
Los blancos habían llegado al poder con la promesa de desmantelar el modelo
neobatllista, caracterizado por la intervención del Estado y numerosos
subsidios, además del tipo de cambio múltiple (esto significaba que el dólar
tenía distinto valor dependiendo de la actividad de quien comprara o vendiera).
En este sentido, los blancos implementaron una política económica que
apuntaba a liberar la economía. El 17 de diciembre de 1959, fue aprobada la
reforma cambiaria del ministro de Hacienda Juan Eduardo Azzini, en la que,
entre otras cosas, se eliminaba el poder del Estado de fijar los tipos de cambio
(a partir de ese momento el valor de las monedas sería fijado por la oferta y
demanda), se sustituía el tipo de cambio múltiple por aranceles aduaneros y
nuevos subsidios, y se devaluó la moneda, que pasó de 4,11 pesos por dólar a
11 pesos. Como producto de esta reforma, que significaba un duro golpe al
Estado benefactor (o al menos esa era la percepción de la opinión pública de la
época), se disparó la conflictividad social y en 1961 apareció la CTU (Central
de Trabajadores del Uruguay). El resultado inmediato de la reforma fue una
inflación del 49 por ciento, producto de la devaluación, pero en los siguientes
dos años, fue moderada.
En materia de política internacional, Uruguay confirmó ser un país influenciado
por Estados Unidos. Por ejemplo, en Punta del Este se llevaron a cabo las
reuniones que crearon la Alianza para el Progreso, y en 1961 Uruguay declaró
personas no gratas al embajador cubano y al primer secretario de la embajada
de la URSS, y el año siguiente, nuevamente en Punta del Este, se realizó la
VIII Reunión de Consulta de Cancilleres, en la cual se decidió la expulsión
de Cuba de la OEA. De este primer gobierno blanco también datan las
primeras cartas de intención firmadas con el FMI. Aunque también se debe
destacar la visita de Fidel Castro en 1959 (antes de que se declarara marxista-
leninista) y del Che Guevara en 1961. Este último personaje dio un discurso en
el Paraninfo de la Universidad, en el que desconcertó a todos los uruguayos, al
afirmar que la fuerza era la última herramienta y que sólo debía ser usada
contra el que la ejerce indiscriminadamente, además de resaltar las
condiciones democráticas del Uruguay. Al salir del Paraninfo, Guevara ingresó
en un auto en medio de la muchedumbre, y en una esquina, desde el Gimnasio
Universitario, partieron varios disparos. Cuando se disipó la multitud, se pudo
constatar que el profesor de historia Arbelio Ramírez había sido muerto por las
balas destinadas a Guevara.14En su sepelio se distribuyeron volantes
amenazantes firmados por el MEDL (Movimiento Estudiantil por la Defensa de
la Libertad), grupo de ultraderecha, aunque hay versiones que dicen que
Ramírez fue ultimado por izquierdistas. Durante este primer gobierno blanco
también se acabó con el largo litigio mantenido con Argentina sobre los límites
fluviales. El 30 de enero de 1961 se firmó una declaración conjunta por la que
se estableció el límite exterior del Río de la Plata, en la que se consolidaba la
soberanía doble y compartida sobre las aguas, así como se afirmaba que el
Plata constituía en todo su curso un río hasta la desembocadura en el océano
Atlántico. Meses después, el Gobierno inglés presentó una protesta por esta
resolución, sosteniendo que las aguas eran un estuario, y que a partir de 6
millas de la costa, eran internacionales.
También en este primer colegiado blanco se llevaron a cabo importantes
realizaciones en obras públicas. A partir de 1959 se aprobaron sucesivos
planes anuales impulsados por el ministro de Obras Públicas, Luis
Giannattasio. En estos ocho años se construyeron las rutas 5 (Montevideo-
Rivera) y 26 (Paysandú-Melo), con financiación del BID. Además se expandió
la Interbalnearia y se comenzaron a construir los puentes sobre el Solís Grande
y el Solís Chico, y se iniciaron conversaciones con Argentina para explotar el
potencial hidroeléctrico de los ríos.
Segundo gobierno blanco[editar]
Artículo principal: Segundo colegiado blanco
El 25 de noviembre de 1962 se llevaron a cabo elecciones, con un paisaje
político distinto al de cuatro años antes. El Partido Socialista (dirigido por Vivian
Trías, que había desplazado al líder histórico Emilio Frugoni) se alió con
escindidos nacionalistas para formar la Unión Popular. El Partido Comunista
del Uruguay se presentó como el FIDEL (Frente Izquierda de Liberación), en el
que se agrupaba también a sectores que abandonaban los partidos
tradicionales. La vieja Unión Cívica del Uruguay se reformuló formando
el Partido Demócrata Cristiano. En el Partido Nacional, la UBD se alió con
el Herrerismo ortodoxo para disminuir la influencia de Nardone. El resto
del Herrerismo continuó aliado al dirigente rural. Dentro del Partido
Colorado continuaron las fragmentaciones, destacando la creación de la Lista
99, integrada por elementos de la Lista 15 y de la Lista 14. La recientemente
creada lista presentaba un programa renovador que consideraban como una
actualización del batllismo. Por otra parte, también en la interna colorada,
la Lista 14 se convirtió en la Unión Colorada y Batllista.
Las elecciones fueron nuevamente ganadas por los blancos, aunque el margen
entre estos y los colorados se redujo: de 120.000 votos hacía cuatro años,
pasaron a 23.000 sufragios de diferencia.
El nuevo Consejo Nacional de Gobierno fue integrado por Daniel Fernández
Crespo, Washington Beltrán, Carlos María Penadés, Héctor Lorenzo y
Losada (UBD), Luis Giannattasio, Alberto Héber
Usher (Herrerismo ortodoxo), Alberto Abdala, Amílcar Vasconcellos y Óscar
Gestido (Partido Colorado).
Este segundo gobierno blanco fue pronto víctima de las enemistades internas.
La alianza entre la UBD y el Herrerismo ortodoxo pronto sucumbió, y los
ministros blancos comenzaron a ser interpelados por los senadores de su
propio partido.
La situación económica internacional fue adversa a Uruguay, puesto que
la Comunidad Europea comenzó a subsidiar a sus productores y aumentó los
aranceles, la URSS lanzó un programa para aumentar la producción de carne y
de leche, al tiempo que países como Australia y Nueva Zelanda aumentaron su
productividad. Los precios internacionales cayeron. En 1963 el Banco
República debió devaluar la moneda, y el dólar pasó a valer 16,50 pesos. La
conflictivdad aumentó, y las huelgas, paros u ocupaciones se hicieron comunes
(entre enero de 1964 hasta marzo de 1965 se contabilizaron 650
movilizaciones). En 1964 se formó la Convención Nacional de Trabajadores,
organismo de coordinación entre los sindicatos dentro de la Central de
Trabajadores del Uruguay (CTU) y los sindicatos no afiliados a ella (por
ejemplo, los bancarios o los trabajadores de la carne). El año 1965 fue
devastador. Se inició con una intensa sequía que afectó al país durante el
verano y perduró hasta otoño, con las consiguientes pérdidas económicas en la
actividad agropecuaria y la producción de energía. Además, ese mismo año
quebró el Banco Transatlántico, arrastrando tras sí al sistema bancario nacional
(Banco Atlántico, Banco Uruguayo de Administración y Crédito, Banco de
Producción y Consumo, etc.). Con la crisis salieron a luz varias prácticas
fraudulentas, como, por ejemplo, la textil CUOPAR, que tenía vinculaciones
dolosas con el Departamento de Negocios con el Exterior del Banco de la
República, o "las bolsas negras", que eran créditos especiales concedidos a
varias personalidades políticas. El Gobierno debió soportar un sismo político al
tiempo que la Asociación de Bancarios del Uruguay declaraba la huelga
general. El Gobierno continuó con su política liberal, pero la economía no logró
ser controlada, y en 1966 la deuda aumentó producto del año electoral (como
había sucedido en 1962), al igual que la inflación (entre diciembre de 1964 y
mismo mes de 1965 los precios aumentaron 88%).
También contribuyó a empeorar la situación la muerte, en 1964, de los
principales líderes políticos del país: Benito Nardone, Luis Batlle Berres, Javier
Barrios Amorín, Daniel Fernández Crespo (todas muertes acaecidas en un
período de tres meses) y el retiro de la política de César Batlle Pacheco, que
moriría en 1966.
Por otra parte, la movilización obrera provocó la implementación en varias
ocasiones de las Medidas Prontas de Seguridad por parte del Gobierno (por
ejemplo, en febrero de 1963, a raíz de la huelga de los trabajadores de UTE, o
en octubre de 1965, ante la presión ejercida por los gremios para aumentar los
salarios). Durante el segundo colegiado blanco fue tomando forma el
movimiento obrero, y a la creación en 1964 de la ya mencionada CNT le siguió
la realización del Congreso del Pueblo en 1965, donde se proponían las salidas
a la crisis, lo que desembocaría con el establecimiento, en 1966, de
la CNT como central única de trabajadores.
En este segundo gobierno blanco tomaron lugar robos que luego se sabría
eran obra de la guerrilla urbana tupamaros. Se puede señalar el robo de armas
del Club de Tiro Suizo de Nueva Helvecia (considerado el primer acto de
los tupamaros), el bombardeo de la embajada de Brasil después del golpe de
Estado en dicho país, atentados con bombas a domicilios de integrantes
del Consejo Nacional de Gobierno y a sucursales de bancos estadounidenses,
etc. Además, por estos años se llevaron a cabo las marchas cañeras,
manifestaciones de trabajadores de la caña de azúcar de Artigas, que
reclamaron en Montevideo por los despidos masivos. Estos trabajadores eran
dirigidos por Raúl Sendic Antonaccio, al punto de que la consigna de la
movilización era "por la tierra y con Sendic".

La reforma de 1966[editar]
Al llegar las elecciones de 1966, nadie discutía que el Colegiado era un sistema
ineficaz, inoperante, o demasiado deliberativo. En efecto, la imagen que tenía
el pueblo uruguayo del Colegiado era una corporación deliberante incapaz de
tomar las medidas necesarias para lidiar con la crisis. Entonces, junto a las
elecciones para definir a los próximos titulares del Poder Ejecutivo, se
presentaron cuatro reformas constitucionales en las que se presentaban
nuevos sistemas de gobierno. Todas tenían como factor común la vuelta al
presidencialismo. Cada una fue apodada con el nombre del color de la papeleta
de votación. A continuación, una breve reseña de cada una:
La reforma «amarilla»: iniciada por un grupo de sindicatos y apoyada por el
FIDEL. Proponía un Poder Ejecutivo unipersonal aunque se le quitaban
facultades al presidente, como, por ejemplo, las Medidas Prontas de
Seguridad. Obtuvo el apoyo del 5,21 % del total de votantes habilitados.
La reforma «gris»: fue presentada por una parte del Partido Nacional. Proponía,
principalmente, un gran fortalecimiento del Poder Ejecutivo, dándole facilidades
para disolver las Cámaras, romper con la autonomía de la educación, etc.
Captó el voto del 10,57 %.
La reforma «rosada»: obra del Partido Colorado, coincidía con la «gris» en el
fortalecimiento del Ejecutivo, aunque con mayor respeto a las garantías
individuales, pero al iniciarse las alianzas con los blancos para presentar una
reforma conjunta, quedó en un segundo plano, siendo una porción minúscula
de las preferencias del electorado.
La reforma «naranja»: fue presentada por la mayoría del Partido Colorado y del
Nacional. Proponía la sustitución del Consejo Nacional de Gobierno por un
Presidente con mandato de cinco años (hasta entonces siempre habían sido
cuatro) sin posibilidad de reelección inmediata. Cambiaba fuertemente la
relación entre el P. Ejecutivo y el Legislativo, dándole más poderes al primero y
otorgándole total control en el orden económico-financiero. Fue la reforma que
triunfó, con el 75 % de los votos, superando el 35 % que era necesario para ser
aprobada.

Gobierno de Óscar Gestido[editar]


El plebiscito constitucional fue simultáneo con las elecciones presidenciales
que en 1966 marcaron el regreso al poder del Partido Colorado. Fueron
ganadas por el general retirado Oscar Diego Gestido, que había integrado el
último Consejo Nacional de Gobierno por la minoría colorada. El nuevo
Presidente generó grandes expectativas e instauró cambios generales en la
gestión de gobierno. Ya antes de asumir su cargo en marzo de 1967 dispuso
que cada uno de los futuros Ministros que había designado visitara la central
sindical Convención Nacional de Trabajadores para discutir los temas de su
cartera, lo que se vio como un cambio de actitud del gobierno respecto de las
organizaciones sindicales. Enfrentado su gobierno a condiciones de crisis
económica en permanente agudización, procuró enfrentarlas con medidas de
tipo original. Se creó en el Banco de la República una cuenta especial
(la Cuenta 19 de Junio) en la que se permitía efectuar depósitos en dólares,
con interés, con lo cual se buscó dar circulación y colocación útil a la moneda
extranjera en poder del público (al que estaba prohibido su depósito bancario).
Pero pocos meses después de instalado su gobierno, Gestido efectuó un
relevo de varios de sus Ministros que alteró profundamente su política social y
económica hacia la derecha.
Gestido falleció sin completar su primer año en el gobierno, el 6 de diciembre
de 1967.

Gobierno de Jorge Pacheco Areco[editar]


El fallecimiento del general Gestido llevó al poder al Vicepresidente Jorge
Pacheco Areco. Su gestión se caracterizó por una fuerte tendencia al
autoritarismo represivo. Recurrió en forma sistemática al mecanismo de
excepción de las medidas prontas de seguridad, tanto para enfrentar
actividades de grupos guerrilleros, que se iban acentuando durante su
mandato, como para reprimir protestas sociales. Se prohibieron partidos
políticos (como el Partido Socialista) y se censuraron medios de prensa (como
el semanario «Época»). A la vez el Presidente inició un sistemático
enaltecimiento de las Fuerzas Armadas y cortejo de sus jefes, públicamente
evidenciado en sus permanentes visitas personales a las unidades militares.
En junio de 1968, como remedio a una inflación descontrolada, decretó (sin ley
que lo habilitara) una congelación general de precios y salarios. Nota 1 Al aplicarse
a escasos días del 1º de julio, cuando por numerosos laudos de Consejos de
Salarios y convenios colectivos correspondía el reajuste de sueldos en casi
todas las actividades, la congelación significó de hecho una rebaja de las
retribuciones por su desvalorización causada por la inflación.
El gobierno de Pacheco Areco fue cuestionado como violatorio de la
Constitución por diversas medidas. En particular, el mantenimiento en
funciones de Ministros que el Parlamento había censurado (o su inmediato
nombramiento en una cartera diferente, como en el caso de Jorge Peirano
Facio), y el mantenimiento en vigor de las medidas prontas de
seguridad cuando el Poder Legislativo decidió levantarlas.

Elecciones de 1971[editar]
Las elecciones de noviembre de 1971 estuvieron marcadas por varias
particularidades.

 El presidente Pacheco promovió una campaña


para habilitar su reelección. La Constitución (desde
la primera de 1830) nunca permitió la reelección
del Presidente en períodos consecutivos, por lo
que hacía falta una reforma constitucional. Ésta se
organizó con un mecanismo por el que se
plebiscitaría junto con la elección misma, pudiendo
los ciudadanos votar por candidatos según ambos
regímenes, el vigente y el propuesto.

 El país vivía un clima de especial tensión. Por un


lado diversas organizaciones revolucionarias
armadas, la principal de las cuales era
el Movimiento de Liberación Nacional-
Tupamaros (MLN-T), desarrollaban una actividad
cada vez más intensa y espectacular, que incluyó
el prolongado secuestro de personalidades del
régimen y diplomáticos extranjeros y la muerte,
previamente anunciada, del estadounidense Dan
Mitrione, al que se acusaba de ser instructor de las
fuerzas de represión sobre métodos de tortura. Por
otro lado, los esfuerzos del gobierno en su lucha
contra esas organizaciones se utilizaban para
justificar restricciones cada vez más importantes
de las libertades públicas, el desconocimiento de
garantías constitucionales y una concentración
cada vez mayor de poderes represivos en el
gobierno.

 Por primera vez en la historia del país participó con


posibilidades serias una organización política
distinta de los partidos tradicionales (Colorado y
Nacional). Se habían hecho antes tentativas, ya
mencionadas, de unificación de fuerzas de
izquierda (la Unión Popular y el Frente Izquierda
de Liberación, ambas en 1962), pero nunca con las
expectativas con que se fundó, en febrero de 1971,
una coalición de fuerzas políticas de todos los
orígenes y personalidades independientes.
El Frente Amplio fue presidido por el general
retirado Líber Seregni, a quien proclamó su
candidato a la presidencia.
El MLN-T, que fue ajeno a la formación del Frente Amplio y veía con
escepticismo la pretensión de alcanzar el gobierno mediante elecciones,
mantuvo una breve tregua en sus actividades durante el período de la campaña
electoral.
En la elección del 28 de noviembre de 1971 la reforma constitucional
«reeleccionista» fue rechazada (no alcanzó al 30 % de los votos). La elección
fue ganada por el Partido Colorado, y obtuvo la Presidencia el candidato del
sector «reeleccionista» designado por Pacheco, Juan María Bordaberry, por
haber sido el más votado dentro del sector. En el Partido Nacional el candidato
más votado fue Wilson Ferreira Aldunate, firme opositor del gobierno de
Pacheco. Acumuló sus votos con los del general Mario Aguerrondo, de
orientación próxima a la del régimen.
El Frente Amplio obtuvo un 18 % de los votos.
Estos resultados, sin embargo, fueron fuertemente cuestionados y Ferreira
Aldunate, que quedaba como derrotado por muy pocos votos, realizó
insistentes denuncias de fraude. Ello condujo al hecho sin precedentes de que
la elección se definiera en el «escrutinio definitivo» (recuento de votos posterior
al efectuado tras la elección, que se desarrolla siempre durante largas
semanas). El resultado que se proclamó en definitiva adjudicó la victoria
al Partido Colorado con un 40,96 % de los votos contra un 40,19 % del Partido
Nacional. Muchos años después, en 2002, las denuncias de fraude adquirieron
nuevo crédito con el levantamiento del secreto de documentos reservados de
los Estados Unidos, según los cuales Richard Nixon, presidente de ese país en
1971, habría confirmado un fraude en esa elección uruguaya organizado con
ayuda del Brasil.15El saldo de la elección de 1971 fue la investidura de un
presidente (Juan María Bordaberry) en condiciones de legitimación política
excepcionalmente pobre por múltiples circunstancias:
 El margen ínfimo del triunfo adjudicado al Partido
Colorado;
 Las dudas sobre la limpieza del escrutinio;
 El porcentaje muy bajo de votos del ganador. Fue
el más votado de su partido, pero su candidatura
solo tuvo un 22,8 % del total de votos;
 El candidato rival y derrotado (Wilson Ferreira
Aldunate) tuvo una votación mayor, del 26,4 %.
 Los votos que obtuvo Bordaberry no fueron
realmente para él. Sus votantes eran los
partidarios de la reelección del presidente
Pacheco, cuyo objetivo manifiestamente era ese,
mucho más que ungir a Bordaberry.

Dictadura cívico-militar[editar]
Artículo principal: Dictadura cívico-militar en Uruguay (1973-1985)
El 27 de junio de 1973, argumentando «la acción delictiva de la conspiración
contra la Patria, coaligada con la complacencia de grupos políticos sin sentido
nacional, se halla inserta en las propias instituciones, para así presentarse
encubierta como una actividad formalmente legal», el Poder Ejecutivo disuelve
las Cámaras de Senadores y Representantes, crean un Consejo de Estado con
funciones legislativas, de contralor administrativo y con encargo de proyectar
una reforma constitucional que reafirme los principios republicanos-
democráticos, suspende los derechos civiles y faculta a las FF.AA. y Policiales
para asegurar la prestación interrumpida de los servicios públicos. También
dispone la instalación de un Consejo de Estado que pretendía sustituir al
parlamento. En realidad, ya en noviembre de 1972 el Parlamento, con la
excepción de los representantes del Frente Amplio pero con el voto a favor de
Blancos y Colorados, había autorizado la represión política y militar mediante el
Ejército. En dos meses los integrantes de la guerrilla urbana MLN fueron
encarcelados, muertos, o se debieron exilar. Es decir que la «existencia de una
guerrilla» no era causa de violentar las instituciones. El 9 de febrero de 1973 se
produce un alzamiento militar. La Marina bloquea el palacio de Gobierno en
defensa de la Presidencia y saca sus barcos de combate frente a Montevideo,
dispuesta a repeler el golpe organizado por el Ejército y la aquiescencia de la
Fuerza Aérea. El mismo Presidente Bordaberry no desea resistir el golpe y los
mandos de la Marina son cooptados de a uno por los golpistas. A las 48 horas
las fuerzas armadas tenían el poder efectivo. Esto generó protestas dentro de
las mismas, educadas en el respeto a la constitución: como consecuencia,
fueron separados de sus cargos o dados de baja los oficiales reacios al Golpe
de Estado, cientos de ellos. La situación tensa en lo económico y en lo político,
más la necesidad del régimen de acallar la protesta sindical por el deterioro
salarial, determinan un nuevo Golpe de Estado, ya liderado por las fuerzas más
antidemocráticas.
En respuesta al golpe de estado, en la misma madrugada en que se gesta el
golpe, el secretariado de la CNT (Convención Nacional de Trabajadores) lanza
un manifiesto en el que llama a la «ocupación de las fábricas, estado de alerta
y asamblea». El Partido Comunista del Uruguay toma resoluciones también en
la noche del 26 de junio respecto a la huelga general con ocupación de
fábricas, moviendo a miles de sus afiliados de agrupaciones de empresas que
en la misma madrugada se dirigen a sus lugares de trabajo y de las
agrupaciones barriales. Posteriormente se plegarían los gremios de estudiantes
universitarios. La huelga duraría 15 días, la más larga en la historia del país.
Durante este período de terrorismo de estado se practicó sistemáticamente
la tortura, desaparición forzada y prisión.16 En las cárceles uruguayas murieron
cerca de un centenar de prisioneros políticos y continúan desaparecidas otras
200 personas.
En 1976, al terminar Juan María Bordaberry su mandato constitucional, ante la
convicción de que el caos político que había vivido el país era responsabilidad
de su sistema político, propone a la Junta de Comandantes en Jefe de las
Fuerzas Armadas una reforma del sistema institucional del país, eliminando los
partidos políticos y sustituyéndolos por «corrientes de opinión» en un sistema
de corte corporativista.
Las Fuerzas Armadas, entendiendo que el problema no eran los partidos
políticos, sino sus integrantes, y que la solución al problema vendría por la vía
de una renovación de sus dirigentes, retiran su apoyo al presidente, que se
vería obligado a abandonar el cargo en junio.
Mientras continuaba la represión, Bordaberry es reemplazado por el entonces
presidente del Consejo de Estado, Alberto Demicheli, quien suspende las
elecciones previstas para noviembre y delega la presidencia en Aparicio
Méndez (exministro de Salud Pública), quien la asume por un período de cinco
años.
Los años de represión de la dictadura fueron coordinados con otras dictaduras
del Cono Sur (Plan Condor) y en particular en Uruguay se activó el Plan
Morgan, destinado a destruir al Partido Comunista PCU y a la Central de
Trabajadores CNT. Muertos, desaparecidos, torturados, con varias direcciones
caídas y miles de presos durante años, ambas organizaciones resurgieron con
más fuerza en 1985 junto con el resto del Frente Amplio.

Retorno a la democracia[editar]
Los militares convocan en 1980 un plebiscito para refrendar el proyecto de
reforma constitucional propuesto por ellos, sin permitir, a través de la censura,
la expresión pública de opiniones contrarias al mismo en los medios de
comunicación. A pesar de ello, el 30 de noviembre de 1980 la ciudadanía
mayoritariamente lo rechaza, obligando a la dictadura militar a comenzar un
lento proceso de apertura política. El 1 de septiembre de 1981 asume la
presidencia el general Gregorio Álvarez, quien en 1984 llama a elecciones.
Tras realizarse ese mismo año, sale triunfante el Partido Colorado. Durante los
primeros días de 1985 Gregorio Álvarez deja el mando en manos del
Presidente de la Suprema Corte de Justicia en ejercicio, Rafael Addiego
Bruno y finalmente el 1 de marzo de 1985 el gobierno retornó a los civiles con
la asunción de Julio María Sanguinetti (del Partido Colorado) como Presidente.
En los años siguientes se llevó a cabo una campaña de recolección de firmas
para revocar la ley 15.848 de la Caducidad de la Pretensión Punitiva del
Estado (popularmente conocida como "ley de impunidad" o "ley de caducidad"),
que consagró la impunidad de las violaciones de derechos humanos durante la
dictadura (1973-1985). El 16 de abril de 1989, luego de que más de un 25% de
la ciudadanía uruguaya habilitara con su firma la consulta popular (con un
proceso de control de las firmas por la Corte Electoral que suscitó graves
reparos y protestas), se llevó a cabo el referéndum, con un triunfo del llamado
"voto amarillo" (por el color de la papeleta) con un margen de 57% contra 43%
a favor del "voto verde". El resultado significó no revocar la ley de impunidad, e
indultar en la práctica los crímenes ocurridos durante el gobierno militar. En los
comicios de noviembre de 1989 resultó elegido Luis Alberto Lacalle (del Partido
Nacional). En 1994 Sanguinetti resultó elegido por segunda vez y
en 1999 triunfó Jorge Batlle (del Partido Colorado); durante su gobierno, por
primera vez desde el retorno a la democracia se llegó a una situación en la que
no había ningún general miembro de la logia de los Tenientes de Artigas.17

Crisis económica, política y social del año 2002[editar]


Artículo principal: Crisis bancaria de 2002 en Uruguay

Expresidentes Jorge Batlle y George H. W. Bush (Estados Unidos) en Uruguay.

En julio de 2002, en uno de los momentos más candentes de la crisis bancaria,


el senador del Frente Amplio, Alberto Couriel, se encargó de la interpelación
del entonces ministro Alberto Bensión, en la cual todos los miembros del Frente
Amplio y algunos pocos del Partido Nacional le pidieron formalmente la
renuncia al cargo. Esto no sucedió, pero se removió a Rodríguez Batlle.
A mediados de julio se hizo público el rechazo del Partido Nacional, hasta
entonces aliado del gobierno de Batlle, para con la política económica que se
estaba llevando. Fue entonces que junto con el Frente Amplio, volvieron a pedir
la renuncia de Bensión y esa vez tuvieron mayor suerte. Bensión dejó el cargo
el 20 de agosto y asumió Alejandro Atchugarry,18 quien entonces se
desempeñaba como senador por el Partido Colorado. Atchugarry, que acababa
de sufrir la pérdida de su esposa tras una larga enfermedad se mostraba reacio
a asumir en el cargo. Sin embargo Batlle encontró en él lo que buscaba, un
ministro más político que técnico. Batlle puso al senador en una situación
comprometida, y le planteó que si no asumía como ministro, él debería
renunciar a la presidencia y Luis Hierro López tendría que tomar las riendas del
país.19 Finalmente, acepta el cargo diciéndole «Yo a usted lo quiero y lo respeto
como a un padre... bueno, los hijos no le dicen que no a sus padres». 19 Al
momento de la asunción de Atchugarry, renunció Rosario Medero, la
representante blanca en el directorio del Banco Central, a pedido de su sector
político.
El 30 de julio, se decretó el feriado bancario. El gobierno de Batlle se excusó
diciendo que fue un pedido expreso del FMI para proceder a la liquidación de
los bancos del grupo Peirano. Dicha decisión tuvo como objetivo detener la
fuga de depósitos que la plaza financiera uruguaya venía sufriendo desde
el 2001, puesto que muchos ahorristas argentinos acudieron a sus ahorros en
Uruguay al verse imposibilitados de sacar dinero en su país. Los cajeros
automáticos se quedaron sin dinero, las casas cambiarias vendían el dólar a 38
pesos y lo compraban a 24. El feriado bancario finalizó el lunes 5 de agosto.
La noche del 31 de julio dejó como saldo el primer saqueo a un supermercado
en las proximidades del Palacio Legislativo. El 1 de agosto se produjo una ola
de estos fenómenos que sacudieron a la ciudad de Montevideo. Fueron más de
treinta, y esta vez sucedieron en zonas marginales. Muchos comerciantes
expresaron su voluntad de no reabrir sus comercios el día siguiente por temor a
ser saqueados. El ministro del Interior, Guillermo Stirling, intentó tranquilizar a
la población anunciando un refuerzo de la vigilancia policial para ocasiones
futuras. El 2 de agosto no hubo ningún saqueo, sin embargo, una ola de
rumores invadió la ciudad. Se rumoreó que una horda de personas se dirigía
hacia el centro de Montevideo saqueando todo lo que tenían a su paso. Los
comerciantes cerraron sus puertas al instante y el centro de la ciudad quedó
desolado. Se dispuso un fuerte operativo policial y la Fuerza Aérea sobrevoló la
capital mediante helicópteros en busca de la horda de saqueadores que nunca
llegó y quizás, nunca existió.20
Mientras en el país reinaba el caos en Estados Unidos, Isaac Alfie comandaba
la delegación que Batlle había mandado para formar un grupo de trabajo con
delegados del gobierno norteamericano, puesto que Horst Köhler, director
del FMI, había dado la orden de no prestarle un dólar más a Uruguay.
Finalmente Estados Unidos acordó con Uruguay un préstamo puente de 1500
millones de dólares destinados a capitalizar los bancos estatales. Ese fue el
comienzo del fin de la crisis económica del país. 21
En noviembre, el Partido Nacional decidió retirar a los ministros Antonio
Mercader, Álvaro Alonso, Carlos Cat, Sergio Abreu y Jaime Trobo de sus
cargos en el gobierno de Batlle puesto que querían desligarse de él.
La crisis del 2002 dejó cifras devastadoras para el país. Tal es el caso de la
tasa de suicidios que aumentó un 12,6 %, es decir que dos uruguayos se
suicidaban por día y se registraban muchos casos de intentos de
autoeliminación.22
Como consecuencia económica directa de esta crisis, el salario real tuvo una
fuerte caída, llegando a su piso entre los años 2003 y 2004 con una pérdida del
22 % respecto al año 2000.23 Por su parte, la tasa de desempleo, trepó a un
máximo en el año 2002 del 17 % subiendo 3 y medio puntos porcentuales
respecto al momento de asumir el mandato.24 Hacia el final de su gobierno, los
índices de desempleo revirtieron su tendencia ubicándose en cifras inferiores a
las del momento de su asunción. Por el contrario, la caída sufrida por el salario
real no pudo ser revertida, ubicándose en el año 2005, 18,6 puntos
porcentuales por debajo de las cifras del año 2000.
Gobierno de Tabaré Vázquez[editar]
Artículo principal: Tabaré Vázquez

Tabaré Vázquez, presidente del Uruguay entre 2005 y 2010.

Gobierno[editar]
En las elecciones presidenciales realizadas el 31 de octubre de 2004 resultó
elegido Tabaré Vázquez, candidato por la coalición de Izquierda Encuentro
Progresista-Frente Amplio-Nueva Mayoría con el 50,45 % de los votos,
alcanzando la victoria en la primera vuelta y logrando un parlamento con
mayorías absolutas. Es la primera vez en 174 años que no accede al gobierno
ni el Partido Colorado ni el Partido Nacional.
En las elecciones municipales realizadas el 8 de mayo de 2005 hubo un
cambio significativo en los liderazgos departamentales, logrando el partido
nacional 10, el partido colorado 1 y EP-FA-NM 8 de las 19 intendencias en
disputa. Esto marcó un cambio histórico rompiendo la hegemonía de 174 años
de gobiernos departamentales blancos o colorados.
El 29 de noviembre del 2009, en segunda vuelta, fue elegido como segundo
presidente de izquierda del Uruguay, el senador José «Pepe» Mujica. Obtuvo el
52,60 % de los votos frente a Luis Alberto Lacalle, que obtuvo el 43,33 %.
Derechos Humanos[editar]

Tabaré Vázquez y su vicepresidente, Rodolfo Nin Novoa, en automóvil descubierto desde el Palacio


Legislativo (al fondo) hasta la Casa de Gobierno.

En los años 2006 y 2007 hubo cambios trascendentes en las políticas de


derechos humanos; en 2007 fueron procesados los expresidentes de facto
Bordaberry y Gregorio Álvarez junto con otros militares por violaciones a los
derechos humanos.
En el mismo año, un grupo de partidos políticos de izquierda integrantes de la
coalición de gobierno (Nuevo Espacio, Partido Comunista y Partido por la
Victoria del Pueblo), sumados a organizaciones de trabajadores PIT-CNT y
organizaciones de familiares de detenidos-desaparecidos en la dictadura cívico
militar, iniciaron una recolección de firmas para anular por enmienda
constitucional la ley de caducidad; esta enmienda no prosperó por segunda
vez, por soberana expresión popular en las últimas elecciones nacionales.
En 2006 y 2007 se discutió y aprobó con los votos del Frente Amplio y parte de
la oposición la ley de Unión Concubinaria, ley que reconoce a las parejas tanto
hetero como homosexuales no unidas en matrimonio y con 5 o más años de
convivencia la mayoría de los derechos de este último. En 2009 se autorizó por
decreto el ingreso de homosexuales al ejército y por ley la posibilidad de
adopción conjunta a concubinos tanto de distinto como de igual sexo, esto
último no exsento de gran polémica tanto a nivel parlamentario como social. En
2011 el parlamento discute un proyecto de ley para legalizar el matrimonio
entre personas del mismo sexo.
En 2007 el Senado, tras un fallido primer intento, votó la ley de Salud Sexual y
Reproductiva que incluía la despenalización del aborto; la misma fue aprobada
por 15 votos frentistas, 1 colorado y 1 blanco y rechazada por 10 blancos, 2
colorados y 1 frentista. Aunque también fue aprobada en la cámara baja, el
presidente Tabaré Vázquez, la vetó por principios humanitarios como médico
que es, en defender la vida del no-nacido ante todo. En 2011 el parlamento
discute un proyecto de ley para legalizar el aborto por sola voluntad de la
mujer.
Existe la posibilidad de que se apruebe la eutanasia, la despenalización de la
tenencia de marihuana, la ley de protección animal y el voto a uruguayos en el
exterior, que ha sido rechazado recientemente en plebiscito popular.
El pasado 29 de noviembre de 2009, el exguerrillero tupamaro y senador por el
Frente Amplio, José Mujica fue elegido Presidente, tras derrotar en la segunda
vuelta electoral al conservador Luis Alberto Lacalle. Tomó posesión del cargo
el 11 de marzo del 2010, sucediendo así a Tabaré Vázquez; Mujica dijo que, a
pesar del mal resultado del referendo del 25 de octubre, juzgaría a los
principales dirigentes de la dictadura militar.
Política Internacional[editar]
Dada la coyuntura en la que se encuentra Uruguay en el Mercosur, se ha
planteado, en el seno de la sociedad uruguaya la discusión sobre la posibilidad
de que el país firme un Tratado de libre comercio con Estados Unidos (principal
destino económico de las exportaciones uruguayas). El mismo diversificaría la
economía uruguaya y la haría menos dependiente de la inestable situación del
Mercosur. Se espera que las negociaciones con Estados Unidos comenzarían
en octubre.
Esta situación llevó a que el senador Jorge Larrañaga interpelara
conjuntamente a los Ministros de Economía, Danilo Astori y de Relaciones
Exteriores, Reinaldo Gargano, en virtud de las posiciones encontradas dentro
del gobierno del Frente Amplio.
El presidente Tabaré Vázquez junto con el Ministro de Economía y el de
Industria tienen una posición favorable, mientras que el canciller Gargano, junto
con el sector político del Ministro de Ganadería José Mujica están en contra del
TCL, en virtud de las posibles violaciones a la soberanía del país que podría
significar el Tratado. Por su parte, el propio José Mujica no se ha opuesto,
hasta no conocer el texto del tratado; misma postura seguida por la Ministra de
Desarrollo Social, Marina Arismendi, integrante del Partido Comunista.
A fines de 2006 Tabaré Vázquez anunció que el acuerdo con Estados Unidos
sería un "TIFA" por su sigla en inglés, de menor alcance que un TLC. Dicho
tratado fue firmado a principios de 2007.

Gobierno de José Mujica[editar]

José Mujica, expresidente del Uruguay.

En las elecciones legislativas de octubre de 2009 el Frente Amplio vuelve a


lograr la mayoría parlamentaria con el 48% del total de sufragios (contando
votos en blanco y anulados), en tanto que el Partido Nacional resultó segundo
con un 29,4 %, el Partido Colorado tercero obteniendo un 17,5 %. La votación
del Frente Amplio no logró la mayoría absoluta del total de votos emitidos,
incluidos los votos en blanco y anulados, entonces la elección presidencial se
definió el 29 de noviembre de 2009 mediante un balotaje entre el
izquierdista José Mujica del Frente Amplio y el derechista expresidente Luis
Alberto Lacalle Herrera del Partido Nacional.
José «Pepe» Mujica resultó elegido como presidente de Uruguay y sucesor
de Tabaré Vázquez. La fórmula del Frente Amplio obtuvo el 52,4 % de los
sufragios, mientras que el otro candidato, el expresidente blanco Luis Alberto
Lacalle (1990-1995), logró el 43,5 %, de acuerdo con los resultados de la Corte
Electoral.25 En torno al cuatro por ciento de los sufragios fueron en blanco o
anulados. En la primera vuelta del 25 de octubre pasado, Mujica, del
gobernante partido de izquierda Frente Amplio, y Lacalle, del Partido Nacional,
habían sido los más votados (48 % y 29,1 % respectivamente), pero ninguno
logró la mayoría.
En su discurso de toma de mando, realizado el 1 de marzo de 2010 Mujica
reafirmó la necesidad de que el país contara con políticas de estado. También
planteó como un objetivo primordial de su administración mejorar la educación,
la eliminación de la indigencia y la reducción de la pobreza en un 50 %.26
En las elecciones departamentales de 2010, el Partido Nacional obtuvo doce
intendencias (recupera tres, pierde una), el Frente Amplio obtuvo cinco (pierde
cuatro, conquista una) y el Partido Colorado obtuvo dos (gana una más).
En el período, se resolvió el conflicto con Argentina de la celulosa, se aprobó
el matrimonio igualitario, se despenalizó el aborto, se regularizó la venta de
marihuana y se aprobó la Universidad Tecnológica del Uruguay.

Segundo gobierno de Tabaré Vázquez[editar]

Presidente Tabaré Vázquez con su homólogo argentino, Mauricio Macri

Véase también[editar]
 Antecedentes de la independencia de la América
Hispana

Notas[editar]
1. ↑ Decreto 420/68, de 28 de junio de 1968. Se creó después
un organismo («Comisión de Productividad, Precios e
Ingresos», COPRIN), de composición tripartita, que
regularía los salarios. Pero como tenía mayoría de
delegados gubernamentales y las decisiones de hecho se
tomaron siempre en el Ministerio de Economía, en la
práctica el gobierno asumió el control exclusivo de la
política salarial, tradicionalmente regida por mecanismos
tripartitos (los Consejos de Salarios o paritarios (los
convenios colectivos). Así continuó ocurriendo hasta que
finalizó la dictadura militar, en 1985.

Referencias[editar]
1. ↑ Saltar a:a b «Nuestro pasado indígena». El País. 11 de
junio de 2012.
2. ↑ «Hallazgo prehistórico con repercusión internacional». El
País. 21 de febrero de 2011. Archivado desde el original el
24 de febrero de 2011. Consultado el 21 de febrero de
2011.
3. ↑ Uruguay prehistórico
4. ↑ «La hipótesis que podría cambiar la historia científica del
continente». El Observador. 3 de febrero de 2020.
5. ↑ «Voces indígenas incorporadas al habla de los
uruguayos». Consultado el 20 de febrero de 2014.
6. ↑ Díaz de Guerra, María A. (1998). «Historia de Maldonado.
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7. ↑ Bosquejo histórico de la República Oriental del Uruguay
Autor Francisco A. Berra
8. ↑ tyhturismo
9. ↑ 1813: Instrucciones a los Diputados Orientales
10. ↑ Narancio,Edmundo M. La independencia de Uruguay.
Mapfre.1992
11. ↑ Fuente: Reino Unido, Statistical Abstract of Principal and
other Foreign countries (1907-1918).
12. ↑ Fuente: Reino Unido, Statistical Abstract of Principal and
other Foreign countries.
13. ↑ Lessa, Alfonso (1996). Estado de guerra - de la gestación
del golpe del 73 a la caída de Bordaberry. Editorial Fin de
Siglo.
14. ↑ Estas afirmaciones son cuestionadas en la investigación
periodística reportada en el libro de Víctor L. Bacchetta, El
asesinato de Arbelio Ramírez - La república a la deriva.
Montevideo: Doble Clic, 2010. 247 páginas. ISBN 978-9974-
670-67-9
15. ↑ Carlos Osorio, ed. (20 de junio de 2002). «Nixon: “Brasil
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1971». nsarchive2.gwu.edu. Consultado el 20 de mayo de
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Consultado el 20 de mayo de 2020.
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18. ↑ «Alejandro Atchugarry es el nuevo ministro de
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original el 30 de noviembre de 2012. Consultado el 2008..
19. ↑ Saltar a:a b Paolillo, Claudio (2004). «La crucifixión de
Atchugarry». Con los días contados. Montevideo: Editorial
Búsqueda.
20. ↑ Bolón, Alma (2003). «La voz paralizante:anotaciones
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21. ↑ Paolillo, Claudio (2004). «Taylor es de Peñarol». Con los
días contados. Montevideo: Editorial Búsqueda.
22. ↑ Iglesia en Marcha (2003). «Aumentan suicidios».
Archivado desde el original el 21 de marzo de 2007.
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23. ↑ Instituto Nacional de Estadística (2008). «Índice de Salario
Real - Periodo 1996 - al último dato disponible». Archivado
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24. ↑ Instituto Nacional de Estadística (2007). «Tasa de
desempleo general (1999 - 2006)». Archivado desde el
original el 29 de octubre de 2012. Consultado el 2008.
25. ↑ Redacción 180 (30 de noviembre de 2009). «Final: Mujica
52,39%; Lacalle 43,51%». 180.com.uy. Consultado el 1 de
diciembre de 2009. (enlace roto disponible en Internet Archive;
véase el historial, la primera versión y la última).
26. ↑ Mujica pidió apoyo a los uruguayos para conformar un
país más igualitario.

Enlaces externos[editar]
 Historia de Uruguay en el portal del gobierno
 Portal del Estado Uruguayo
 Historia de Uruguay en la página de la Universidad
de la República
 Historia de Uruguay por Walter Rela

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