Ética básica en la nutrición e hidratación

A lo largo del tiempo ha sido necesario recurrir a otros instrumentos debido a que la
aplicación de los principios que proponen Beauchamp y Childress (no maleficiencia,
justicia, autonomía y beneficencia) han resultado insuficientes y poco prácticos en la
resolución de los dilemas éticos.
A pesar de que sería ventajoso, la ética es un concepto diferente a la ley. Se le
conoce como ética a “Una rama de la filosofía que trata de la esencia, el origen y el
carácter obligatorio de lo moral y puede decirse que representa los principios básicos de
la conducta humana correcta”1, y ley a la “Una norma que seguir, la cual tiene poder
jurídico el cual es conferido por la autoridad gubernamental a cargo”2
Es necesario que la ética médica esté bien fundamentada y que no se base en
sentimientos ni en relativismos.
La ética es algo subjetivo puesto que depende de aspectos, intereses, o puntos de
vista que puedan existir. El hombre es único, por lo que no puede existir un completo
consentimiento acerca de la universalidad manejada por esta ciencia.
La conciencia es un instrumento el cual debe utilizarse para hacer el bien, aunque no
todo lo que se haga con ella es bueno. La buena intención (voluntad de practicar lo bueno
conocido), no cambia para nada la injusticia del acto realizado.3
La Asociación Médica Mundial (AMM) emite los deberes del médico en general,
los deberes del médico hacia los enfermos y los deberes del médico entre sí en el Código
Internacional de ética médica, lo cual sienta las bases para argumentar la creación de los
principios.4
Existen acciones que lesionan la dignidad humana porque afectan a su carácter de
fin y no pueden ser justificadas, el obrar sigue al ser y por eso los médicos hacen el
Juramento Hipocrático, el cual hace referencia a los principios de la ética médica, ya que en
el menciona que el medico actuará en beneficio de sus enfermos, con la aplicación de sus
conocimientos, manteniendo siempre buen juicio; que no hará daño, bajo ninguna
circunstancia y tratará a todos sus pacientes con justicia. Si no supiera hacer algún
tratamiento, incluido la cirugía, canalizará a sus pacientes, a otro colega que tenga los
conocimientos necesarios para curarlos; y por último guardar en secreto lo que las personas
refieran, dentro del consultorio o fuera de él, para no avergonzarlas.4
La nutrición e hidratación son requisitos básicos del ser humano para poder
mantenerse con vida, las cuales difícilmente pueden ser consideradas dentro de la
maleficencia, pero eso depende de los medios empleados.
Si la ausencia de la nutrición e hidratación constituyen una mal para el paciente no
es ético suprimirlas a no ser que fueran insignificantes.
 La nutrición parenteral constituye claramente un tratamiento y es de tipo artificial,
en los casos que sea posible utilizar la vía digestiva para la nutrición, aunque sea a través
de un tipo sonda, debe considerada esta como un cuidado básico. Si la nutrición consigue
mantener la vida orgánica pero no mejora la enfermedad crónica aun así deben aumentarse
más factores para que se descontinúe el aporte nutricional.
Para tomar la decisión de optar por una vía de alimentación no oral, deben basarse
en evaluaciones clínicas, instrumentales, radiografías, manométricas o endoscópicas, el
tiempo requerido para la deglución, el nivel de energía del paciente, la necesidad de vía
alternativa para medicamentos, episodios repetidos de deshidratación, pérdida de peso
inexplicable, signos de malnutrición y episodios de neumonía.3
Siempre habrá que respetar la decisión del paciente en caso de ser competente, en
caso contrario de deberá consultar a su familia.
“Para que una acción humana sea buena éticamente es necesario que se cumplan
tres condiciones simultáneamente: que el fin sea bueno, que los medios sean buenos y que
la intención de quien actúa sea buena., sin olvidar las consecuencias de la acción.”3
La nutrición es un derecho indispensable para los pacientes, al no ejercer ese
derecho, los médicos se ven obligados a mantener o mejorar la calidad de vida del
paciente.

Bibliografía
1. Dr. Jorge Gispert Cruells. Conceptos de bioética y responsabilidad médica,
3rd ed. México: Manual Moderno; 2005.
2. Definista. Definición de Ley. http://conceptodefinicion.de/ley/ (accessed 22
de mayo de 2017).
3. E. Collazo Chao y E. Girela. Problemas éticos en relación a la nutrición y a
la hidratación: aspectos básicos. Nutrición Hospitalaria 2011;
http://scielo.isciii.es/pdf/nh/v26n6/06_revision_03.pdf (accessed 22 de mayo de 2017).
4. José Antonio Morales González, Graciela Nava Chapa, Jaime Esquivel Soto,
Luis Enrique Díaz Pérez. Principios de ética, bioética y conocimiento del hombre, 1st ed.
México: Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo; 2011.