UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA EXPERIMENTAL LIBERTADOR

INSTITUTO PEDAGÓGICO DE BARQUISIMETO

“LUIS BELTRÁN PRIETO FIGUEROA”
SUBDIRECCIÓN DE DOCENCIA
PROGRAMA DE PROFESIONALIZACIÓN

Integrante: Ana María Cordero

C.I. 13.268.460
Sección: 1402

Barquisimeto, Noviembre 2011

 EL MAESTRO DE HOY

Cualquier Maestro o Docente tiene que ser y estar en un constante

proceso de investigación. Un buen Docente tiene que estar en constante
preparación e información de los nuevos avances y tecnologias que invaden
al mundo. De esta manera un Docente debe tomar como herramienta
principal y básica la Investigación, así podra interactuar y relacionarse más
fácilmente al contexto donde se encuentre. Por eso es que en nuestros días
se puede decir que el Maestro o Docente es un Investigador, ya que está en
constante actualización de todos los aspectos que van surgiendo del día a
día y que de una u otra manera refleja una nueva forma de educar y reforzar
la didáctica del proceso enseñanza aprendizaje. Surge el binomio docente-
estudiante, en donde la actuación del primero es de índole tutorial,
investigador, facilitador y de constante supervisión.
El maestro de hoy debe cumplir el rol de: Enseñar a aprender, esto
quiere decir que su tarea como docente debe centrarse en acompañar al
estudiante para que entienda que es lo que hace cuando aprende, facilitarle
el aprendizaje; hacerle entender al alumno que el aprendizaje debe
convertirse en vida, así el estudiante está en camino de convertirse en
alguien que aprende, en alguien que cambia.
Sintetizando lo expresado anteriormente se puede decir que el docente
investigador cumple como principal rol, no solo reforzar su conocimiento sino
también indagar sobre nuevos temas, teorías y aspectos que le ayudarán a
mantenerse al día, para poder aplicar nuevas estrategias en sus clases.
Es indiscutible que un gran numero de docentes no han entendido que
los nuevos paradigmas educativos supone una constante actualización, en el
entusiasmo del docente, su motivación hacia la innovación, en fin una
actitud favorable asumir estos cambios pedagógicos.
Es por esto que el docente debe estar dispuesto a aprender
constantemente, en esto se quiere resaltar que sería un docente

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investigador, que ya no es el maestro que se para frente a sus alumnos en el
aula de clase con la suficiencia de creer que lo sabe todo. Es estar
consciente de que tendrá que aprender durante toda la vida.
Anteriormente en el sistema escolar tradicional se le ordenaba al maestro
que tenía que acatar todo lo que había que hacer en la escuela de manera
que el maestro no decidiera. Ahora no es así, ya el docente al ganar
autonomía y al construir cada plantel su proyecto educativo institucional, los
maestros o profesores tienen su cuota de responsabilidad en, si el alumno
aprende o no.
Cabe destacar que la verdadera función que debe cumplir el docente no
es solamente en su rol como investigador, también debe cumplir su rol de
asesor y facilitador, lo cual es un valioso aporte para el proceso de
enseñanza-aprendizaje; por cuanto sus beneficios van dirigidos no sólo a los
alumnos sino también a los agentes involucrados en el proceso educativo.
Así mismo, el docente en su nuevo rol de investigador brinda asesoramiento
y herramientas a todos los alumnos significativamente, a fin de que
contribuya a la formación integral de ellos mismos, en consecuencia, lograr
mayores niveles de calidad de la educación.
La formación del Personal Docente en su rol de investigador constituye
uno de los factores esenciales del desarrollo de la Educación y una condición
importante para cualquier renovación pedagógico-científico-metodológica.
Por otra parte, el docente investigador es aquel que percibe de alguna
manera las fallas que puedan presentar sus alumnos desde el punto de vista
social, intelectual, familiar. La parte investigativa debe ser un componente
primordial y básico de una manera tal que por medio del proceso científico y
una pedagogía modernizada y bien concebida, el conocimiento puede ser un
instrumento valioso para el proceso de transformación de las sociedades.
El maestro debe dejar de ser un docente trasmisor para pasar a ser un
docente orientador, facilitador de la investigación, de conocimiento, de

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búsqueda de soluciones a problemas que surgen de la realidad. Además
debe promover en los niños interés, la autonomía y la cooperación.
Es por esto que el rol del maestro es muy importante, ya que deberá
presentar a sus alumnos situaciones que les posibiliten avanzar en su
desarrollo y conocimiento, que los problematicen, que les permitan investigar
experimentar. Él es el encargado de guiarlo en todos esos procesos.
Todo docente es un investigador por excelencia, por ello siempre es
parte de una acción, es parte de una realidad, es parte de una vivencia, en
sintesis se puede decir que marca los pasos del desarrollo social de
todos los seres humanos que acuden a las aulas, para que les impartan
aprendizaje y con los cuales vive nuevas experiencias y trasmite las propias.
Los docentes investigadores son formadores que se diferencian de otros
docentes por el conjunto de habilidades que desarrollan y hacen más
eficiente su labor profesional. La necesidad de investigar, propicia el
desarrollo de habilidades para el trabajo científico dentro del marco de la
actividad profesional, vinculándose a los problemas reales existentes en las
respectivas escuelas, la familia de los estudiantes y la comunidad.
A todas estas se puede acotar que un docente investigador es aquel que:
Sistematiza la teoría científica precedente; realiza crítica científica; usa
métodos científicos con un enfoque dialéctico; aplica resultados de
investigaciones realizadas; realiza estudios evaluativos, descriptivos o
proyectivos vinculados a situaciones de la práctica pedagógica en el ámbito
de escuela. Desde esta perspectiva. La investigación perfecciona la
enseñanza y el docente se convierte en un intelectual que trabaja con el
pensamiento y la reflexión, al tiempo que transforma su realidad.
Además de esto, en la actualidad se habla mucho del nuevo perfil del
docente como consecuencia de la integración de las Nuevas Tecnologías en
el ámbito educativo. Se pretende dar una visión del papel que ha de
desempeñar el docente ante la nueva sociedad de las Tecnologías de la

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Información y la Comunicación, así como un análisis de la necesidad de un
cambio en su formación como profesional de la docencia.
El docente hoy en día, por las exigencias de su práctica, el escenario en
el que actúa y las demandas del mismo, es un profesional que toma
decisiones, flexible-libre de prejuicios (actitud de anteponerse y rectificar a
tiempo), comprometido con su práctica (reflexiona sobre la misma y aporta
elementos de mejora), que se convierte en un recurso más para el grupo. Por
tal motivo el profesor debe buscar la forma de aprovechar la integración de
las nuevas tecnologías en el currículo.
El docente debe de ser un promotor, asesor, facilitador e investigador que
junto al educando y a la comunidad en general propicie cambios en las
estructuras educativas planteadas por la educación, basada
fundamentalmente en la concepción de un educando con un desarrollo
integral. La educación impartida por el docente debe dar conciencia al
alumno del papel y del rol que esta desempeñando y debe jugar dentro de su
grupo social permitiéndole la autoformación de sus valores individuales
colectivos sociales y culturales.
Ya para finalizar se puede decir que el perfil de un nuevo docente puede
definirse hoy en día como: de tener un espíritu innovador, poseer mayor
flexibilidad, de trabajar en equipo, adquirir conocimientos tecnológicos, creer
en su profesión, tener un sentido de la responsabilidad y del compromiso.