Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Como señalaba Castells: ?un nuevo espectro recorre el mundo: las nuevas tecnologías.? Según
este autor, las nuevas
tecnologías generan grandes esperanzas y temores. Estamos rodeados por ellas: ordenadores con
acceso a Internet,
teléfonos móviles y dispositivos digitales de todo tipo nos acompañan en casa, la calle y la escuela.
Nuestros hijos
aprenden, se comunican y se divierten con las nuevas tecnologías. Por eso, es fundamental una
educación que haga
hincapié en valores como el respeto y la intimidad, para minimizar los riesgos que
pueden correr nuestros hijos al verse más expuestos.
– Internet pone el conocimiento al alcance de todos. Puedes acceder a todo tipo de información.
Un ordenador conectado a Internet es una ventana abierta al mundo, una fuente inagotable de
información en todos los formatos: texto, imagen, vídeo, audio, opciones de interacción…
Podemos seguir misiones de la NASA en directo, buscar cráteres en Marte o visitar a distancia
cualquier ciudad (por lejos que esté).
– Se amplían los canales de comunicación, surgen nuevas formas de relacionarnos y facilitan la
comunicación desde cualquier lugar. Fomentan la creación de comunidades de opinión y debate.
– Acercan culturas y personas.
Pero el acceso a la tecnología también comporta una serie de desventajas o riesgos. Los padres
debemos ejercer un control sobre lo que nuestros hijos consumen a través de la Red, para que
hagan un uso responsable de ella. Estos son algunos inconvenientes de las nuevas tecnologías:
– Existe el riesgo de que los niños se aíslen y pierdan la noción del tiempo. Por este motivo, los
padres deben decidir cuánto tiempo permiten a sus hijos hacer uso de los dispositivos digitales
que tengan a su alcance: ordenadores, consolas, móviles…
– No siempre la información a la que tenemos acceso es veraz o completa. Requiere tiempo y
experiencia aprender a distinguir entre fuentes de información fiables y no fiables.
– Es fácil el acceso a material perjudicial o poco adecuado. Existen programas para filtrar los
contenidos a los que nuestros hijos pueden tener acceso.
– La tecnología también puede causar adicción, por lo que nos conviene observar si nuestros hijos
sienten ansiedad, si los apartamos de sus móviles o videojuegos.
No cabe duda de que se han generado nuevos entornos de comunicación y aprendizaje. Según
Julio Cabero Almenara, en este nuevo contexto, el alumno debe ser más consciente del proceso de
aprender y prepararse para mejorar su capacidad de autoaprendizaje. Los niños que han nacido en
este contexto de innovación tecnológica son nativos digitales y presentan aspectos diferenciales
en su forma de aprender. ¿Cuáles son las características del alumno 2.0?
– Son niños capaces de realizar múltiples tareas a la vez. Buscan información mientras escuchan
música y se comunican con sus compañeros por diferentes medios.
– Es habitual que los alumnos manejen las nuevas tecnologías mejor que muchos de sus padres y
profesores.
Los niños han desarrollado nuevas habilidades y competencias, pero debemos tener en cuenta
que eso no hace necesariamente que sean mejores alumnos o más capaces. Para ello, es
imprescindible la orientación de padres y maestros.
Según Fernando Savater, lo que hay que hacer en educación es aprender a aprender: menos
memorizar datos y más espíritu crítico. ¿Pueden ayudarnos las nuevas tecnologías? Sí, en el
sentido de que el mayor acceso a la información y la facilidad para comunicarnos con
otras comunidades y establecer debates nos ayudan a desarrollar el pensamiento crítico y
construir nuestro propio conocimiento.
¿Por qué la educación y la
tecnología son aliados inseparables
Hoy en día los más jóvenes se caracterizan por pertenecer a la generación de los
nativos digitales, esa parte de la población que nació después de la invención del
internet. Es por eso que incorporar la tecnología a la educación aporta una serie
de beneficios que ayudan a mejorar la eficiencia y la productividad en el aula, así
como aumentar el interés de los niños y adolescentes en las actividades
académicas.
Pero no hay que pensar que estos procesos son nuevos. De hecho, la tecnología
lleva varios años asistiendo a profesores y estudiantes en su trabajo diario. Los
procesadores de texto, las calculadoras, las impresoras y los computadores se
han utilizado desde hace décadas para las distintas actividades estudiantiles.
Sin embargo, ahora con internet y la tecnología móvil en auge se incorporan aún
más elementos tecnológicos al entorno educativo. Pizarras interactivas, aulas
virtuales y un sinfín de recursos electrónicos para llevar a cabo investigaciones o
realizar trabajos escolares son algunas de las formas en las que la tecnología
digital se ha integrado con las escuelas y universidades.
Además, la web 2.0 y las redes sociales animan a los estudiantes a expresarse y
relacionarse con otros compañeros, lo que permite aprender de forma
interactiva. “Las posibilidades de Internet son muy amplias. Gracias a la facilidad
para compartir contenidos es posible aprovechar la red para facilitar a los
estudiantes libros electrónicos e interactivos para que realicen sus actividades y
ejercicios sin necesidad de tener el libro en papel, lo que reduce los costos de
producción de los libros y además permite a los estudiantes acceder a libros que
no se pueden encontrar en su país sin necesidad de moverse de sus casas”,
añade Curtin.
Por otro lado, los profesores pueden beneficiarse mucho de los avances
tecnológicos para hacer su trabajo más atractivo y para ser más
eficientes. “Muchas actividades de las que forman parte de su rutina
diaria se pueden optimizar con la ayuda de aplicaciones y dispositivos
informáticos, permitiendo que puedan dedicar más tiempo a su propia
formación, lo que a largo plazo no solo les beneficiará a ellos sino a sus
estudiantes”, explica el experto.