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EMPAREJAMIENTO SOBRE EL PROCESO DE INFLAMACIÓN

Objetivo: Asociar la imagen con la descripción del proceso, demostrando el conocimiento argumentativo del proceso de inflamación.

Metodología: Los estudiantes tendrán la opción de estudiar previamente el documento que contiene la información sobre inflamación, en la
misma encontraran las imágenes y las definiciones de cada evento; Con el fin de generar conocimientos significativos, después de la lectura los
estudiantes desarrollaran la ficha de “EMPAREJAMIENTO SOBRE INFLAMACIÓN” sin el documento a la mano y luego tendrán la oportunidad de
revisar sus respuestas con ayuda del profesor o con el documentos, más que evaluar el tema, la actividad pretende proponer una lectura
interpretativa que genere conocimientos fijos.

Respuestas:

1.
Tejido sano: En el tejido de piel de un dedo hay macrófagos que custodian a las células que forman a dicho tejido de piel ante posibles
ataques de bacterias. Los macrófagos son monocitos (un tipo de glóbulo blanco) que al haber salido del torrente sanguíneo y haberse
instalado en algún tejido para protegerlo, se convirtieron en macrófagos. Los macrófagos son capaces de  fagocitar (ingerir y destruir)
alrededor de 100 bacterias invasoras durante toda su vida. También pueden destruir células viejas, células dañadas y células muertas del
cuerpo. Pueden vivir durante meses o incluso años.

2.
Tejido contaminado: Una pequeña astilla de madera contaminada con bacterias se clava en la piel del dedo. El proceso inflamatorio se
inicia cuando las bacterias patógenas ingresan al cuerpo y comienzan a reproducirse y a generar componentes que dañan a
las células que forman al tejido de piel invadido. El ingreso de las bacterias patógenas y su reproducción dentro del tejido invadido es lo
que conocemos como infección.

3.

Comienzan a reaccionar los macrófagos: Los macrófagos que residen en el tejido de la piel del dedo se dirigen hacia la zona infectada por
bacterias invasoras y empiezan a fagocitar a dichas bacterias patógenas. El proceso de fagocitosis funciona de la siguiente manera:
La membrana celular que recubre al macrófago empieza a extenderse alrededor de la bacteria objetivo, hasta terminar de introducirla
completamente dentro de su cuerpo celular. A continuación, el macrófago envuelve con una membrana a la bacteria, aislándola del resto de las
organelas que forman parte del macrófago (las organelas son las estructuras funcionales u órganos que contienen las células en su citoplasma).
Este envoltorio o vesícula que se forma dentro del macrófago, se llama fagosoma y contiene a la bacteria ingerida (fagocitada). Dentro
del fagosoma, la bacteria ingerida comienza a ser degradada y destruida con enzimas que libera el macrófago.
4.
Los macrófagos secretan moléculas de citocina que son proteínas estimulantes: Como los macrófagos no pueden hacer frente al problema solos, en
respuesta a la infección comienzan a liberar moléculas de una sustancia química llamada citocina. Las citocinas son proteínas que regulan algunas funciones del
proceso de inflamación de un tejido dañado, también sirven como sistema de comunicación entre células del sistema inmunitario que interactúan entre sí.

5- Las citocinas se dirigen a la pared del capilar sanguíneo: Las citocinas se dispersan por la pared del capilar sanguíneo. La pared del capilar sanguíneo es
muy fina y está compuesta por las llamadas células endoteliales que están unidas entre sí, una al lado de la otra, y dan forma a esta pared del capilar.
6- Las citocinas estimulan a las células endoteliales para que expongan a receptores llamados selectinas, en el capilar sanguíneo:  En la imagen se
muestra un acercamiento del capilar sanguíneo por donde circula la sangre y sus componentes, entre ellos los neutrófilos (un tipo de glóbulo blanco). Las
moléculas de citocina, al alcanzar a la pared del capilar sanguíneo, estimulan a las células endoteliales (que forman a la pared del capilar sanguíneo) a desplegar
unos receptores especiales denominados selectinas. Las selectinas son moléculas de adhesión que sirven para atrapar a neutrófilos que circulan por el torrente
sanguíneo. Las selectinas se amarran a moléculas de carbohidratos que poseen los neutrófilos en su superficie y provocan la disminución de velocidad de
circulación de estos neutrófilos.

7- Las selectinas atrapan al neutrófilo enganchando a carbohidratos de su superficie: De esta manera, el neutrófilo reduce su velocidad y empieza a rodar a
lo largo de la pared del capilar sanguíneo. Mientras rueda por la pared del capilar sanguíneo se va enganchando y soltando de las selectinas que exponen las
células endoteliales que componen a la pared del capilar sanguíneo. Las selectinas se amarran a carbohidratos que tienen los neutrófilos.
8- El neutrófilo comienza a rodar por la pared del capilar enganchándose a selectinas: Mientras el neutrófilo rueda lentamente por la pared del capilar
sanguíneo (gracias a que las selectinas de las células endoteliales enganchan a los carbohidratos del neutrófilo), señales inflamatorias además provocan que el
neutrófilo despliegue en su superficie unas moléculas llamadas integrinas. Las integrinas son moléculas de adhesión que tienen la capacidad de amarrarse a las
células endoteliales y detener el movimiento del neutrófilo por completo.

9- Las integrinas del neutrófilo se enganchan a moléculas ICAM de las células endoteliales: El neutrófilo detiene totalmente su marcha al engancharse sus
moléculas de integrina a unas moléculas de adhesión intercelular que poseen las células endoteliales (en inglés Intercellular Adhesion Molecules o por sus
siglas ICAM).
10- El neutrófilo enganchado a las células endoteliales se estira a lo largo de la superficie de éstas:  Una vez que el neutrófilo está totalmente amarrado a
las células endoteliales que componen a la pared del capilar sanguíneo, se estira a lo largo de dos células endoteliales. El neutrófilo está enganchado a las
células endoteliales a través de uniones entre las integrinas del neutrófilo y moléculas ICAM (moléculas de adhesión intercelular) de las células endoteliales.

  

11- Las células del tejido dañado en la zona infectada envían moléculas de bradiquinina: Paralelamente a todo lo descrito en los puntos anteriores,
las células del tejido dañado liberan una sustancia llamada bradiquinina. La bradiquinina provoca que las células endoteliales que forman a la pared del capilar
sanguíneo se contraigan y por consiguiente las uniones entre dichas células endoteliales se relajen. Esto da por resultado la apertura de espacios angostos entre
las células endoteliales, por donde ahora el neutrófilo puede pasar. Esto se entiende como aumento de la permeabilidad del capilar sanguíneo, ya que los
neutrófilos ahora pueden atravesar la pared de este capilar sanguíneo y dirigirse hasta la zona de la infección. Pero este aumento de la permeabilidad no es otra
cosa más que la apertura de estos espacios o ventanitas entre las células endoteliales.
12- El neutrófilo logra salir del capilar sanguíneo a través de las aberturas que se forman: El neutrófilo se estruja (ya que es una célula flexible que cuenta
con esa capacidad) y pasa a través del espacio que se formó entre las células endoteliales contraídas. Este proceso en el que el neutrófilo atraviesa la pared del
capilar sanguíneo se denomina diapédesis (un término que proviene del griego diapédesis que significa "salto a través de", aunque en griego antiguo también
significaba rezumar, exudar o gotear). 

13- El neutrófilo se dirige hacia la zona del tejido dañado: El neutrófilo se mueve entre las células del tejido de la piel como si fuese una ameba hasta llegar a
la zona de la infección, es decir, la zona de las células del tejido de piel dañadas por bacterias invasoras. Se dice que se mueve como ameba porque lo hace por
pasadizos que se forman entre las células que componen al tejido de piel. Estos pasadizos o espacios entre las células por donde se mueve el neutrófilo se
denomina intersticio celular. El intersticio celular o espacios entre las células de un tejido está lleno de un líquido llamado líquido intersticial. El líquido
intersticial que rodea a las células del cuerpo equivale a aproximadamente el 28% del agua corporal y su composición es similar a la del plasma sanguíneo, salvo
que el líquido intersticial tiene una menor concentración de proteínas que el plasma, debido a que por su elevado peso molecular no pueden atravesar las paredes
de los capilares sanguíneos con tanta facilidad.
14- Moléculas de bradiquinina también se unen a mastocitos: En diversos tejidos de todo el cuerpo pueden encontrarse unas células especializadas
pertenecientes al sistema inmunitario llamadas mastocitos. En condiciones normales, los mastocitos no circulan por la sangre sino que habitan en tejidos del
cuerpo. Algunas de las moléculas de bradiquinina  que son liberadas por células dañadas en la zona de la infección (esto se explicó arriba en el punto 11), se
unen a los mastocitos del área infectada. Cuando las moléculas de bradiquinina se unen a los mastocitos, estos últimos liberan una sustancia llamada histamina.
La histamina, a su vez se dirige hacia las células endoteliales que componen a la pared del capilar sanguíneo y provoca que se contraigan aún más, por lo que las
aberturas o espacios entre ellas se ensanchan todavía más.
  
De esta forma, la histamina induce a que más líquido salga del capilar sanguíneo hacia la zona infectada. Este líquido no es otra cosa más que plasma, pero con
menor concentración de proteínas, dado que dichas proteínas que contiene el plasma, por su elevado peso molecular no pueden atravesar con tanta facilidad a
estos espacios o aberturas que se forman entre las células endoteliales. Este fluido llena aún más al intersticio celular y provoca el aumento de volumen o
hinchazón de la zona infectada.
  

  
15- El fluido llena la zona del tejido infectado y causa hinchazón: Paralelamente al aumento del volumen de la zona infectada debido a que el intersticio
celular se llena con más fluido proveniente del capilar sanguíneo, la bradiquinina también induce a que las células endoteliales de la pared del capilar sanguíneo
liberen una sustancia llamada prostaglandina. La prostaglandina estimula a las terminaciones nerviosas de la zona a que causen dolor.
  

Todo este proceso de inflamación descrito en los quince puntos anteriores, genera atención en la persona a través de cuatro señales conocidas con el nombre de:
los cuatro signos cardinales de la inflamación. Estos son rubor, calor, hinchazón y dolor. Los dos primeros son a causa del aumento de cantidad de sangre en la
zona por vasodilatación (la vasodilatación ocurre cuando las células endoteliales del capilar sanguíneo se contraen). El hinchazón se debe al incremento de
líquido intersticial en el intersticio celular (zonas que rodean a las células), como se explicó en el punto 14. El dolor es debido a la estimulación de las
terminaciones nerviosas de la zona infectada y se explicó en el punto 15.

Hasta bien pasado el período medieval, la inflamación se consideró una enfermedad y recién en el siglo XVIII (años 1700s) se entendió que se trataba de una
reacción defensiva del organismo ante diversas causas.

Elaborado por: Sara Quiceno Zapata CC. 1152684788

Estudiante de Medicina Veterinaria U de A

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