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Formas de reprecentar automatismos

¿De qué hablamos cuando nos referimos a automatismos eléctricos?


Entendemos por automatización cualquier acción en la que no interviene el ser
humano (o lo hace de manera mínima) y el trabajo es realizado por mecanismos
externos movidos por distintos tipos de energía.
La técnica eléctrica se suele utilizar para el control del movimiento cuando se
precisan velocidades más o menos constantes y/o para desplazamientos precisos.

¿Ventaja? Que en cualquier lugar podemos encontrar una fuente de energía eléctrica.


Por tanto, por automatismo eléctrico entendemos un mecanismo eléctrico y los
elementos que son capaces de controlarlo.

Así, encontramos toda una serie de componentes, circuitos y dispositivos, que


facilitan tanto conexiones y desconexiones o aspectos como la regulación de la energía
eléctrica.

Elementos de los automatismos eléctricos


Existen dos tipos: sistemas cableados y sistemas programados.
Sistemas cableados
Los automatismos cableados se realizan por la unión física de los elementos que
constituyen la unidad de control. La forma de dichas uniones se diseña bien por la
experiencia o por un conjunto de ecuaciones lógicas.
Este tipo de automatismos los encontramos dentro del llamado “cuadro eléctrico”.

En el cuadro eléctrico los elementos más comunes son los siguientes:


 Pulsadores: elementos mecánicos de cierre y apertura. Se dividen en
“normalmente abiertos” (para la puesta en marcha o funcionamiento de las máquinas) o
“normalmente cerrados” (hacen el efecto contrario, parar la maquinaria o el equipo).
 Interruptores: conectan o desconectan la maquinaria o las instalaciones. Se
diferencian de los pulsadores en que se mantienen en la posición en la que han sido
accionados.
 Conmutadores: dispositivos que permiten cambiar la dirección o interrumpir el
paso de la corriente eléctrica en un circuito. Estos elementos, a diferencia de los
interruptores, una vez han desconectado un circuito, conectan otro inmediatamente.
 Finales de carrera: son sensores de contacto que se sitúan al final de un
recorrido o de un elemento móvil y que envían una señal cuando son activados, la cual
puede ser utilizada para modificar el estado de un circuito.
 Detectores: encontramos de diversos tipos:
 Termostatos: abren o cierran un contacto en función de la temperatura.
 Presostatos: abren o cierran su mecanismo dependiendo de la presión
programada.
 Detectores de nivel de líquido: para controlar el nivel de líquido.
 Sensores de presencia: para controlar la presencia de algún objeto o persona en
un radio de acción determinado.
 Relés: es el elemento básico del automatismo cableado. Se trata de un
dispositivo electromecánico accionado por interruptores y/o sensores de diversos tipos
(termostatos, detectores de movimiento, etc.). Está constituido por una bobina y un
grupo de contactos que pueden ser abiertos o cerrados, cuya función es la de
habilitar/desconectar circuitos cuando circula corriente por su bobina.

 Temporizadores: permiten automatizar en función del tiempo el encendido o


apagado de maquinaria, electricidad, etc.
 Contactores eléctricos: su funcionamiento es similar al de los relés aunque se
utilizan para habilitar circuitos con corrientes más elevadas. Otra diferencia es que
tienen dos grupos de contactos, los principales y los contactos auxiliares.
Sistemas programados
Como su propio nombre indica, son los automatismos que se realizan con elementos
programables.
Otros elementos
Existen más elementos que, aunque no pertenecen de lleno al apartado de los
automatismos eléctricos, también podemos tenerlos en cuenta para trabajar con ellos si
así lo requiere la ocasión.
A modo de ejemplo vamos a nombrar solo uno de ellos:

 Variador de velocidad: es un dispositivo o conjunto de dispositivos (mecánicos,


hidráulicos, eléctricos o electrónicos) empleados para controlar la velocidad giratoria de
maquinaria, especialmente de motores.
 

Evolución de los automatismos eléctricos


Vistos ya los principales elementos de los automatismos (contactores eléctricos,
temporizadores, etc.) y otros dispositivos como el variador de velocidad, queremos
remarcar la importancia de la evolución científica para la mejora de cualquier tipo de
maquinaria.
Gracias a la automatización de máquinas y de procesos se ha mejorado de manera
exponencial tanto la productividad como la calidad de los productos;  y algo que a
veces también se nos olvida nombrar: la mejora de los costes.
La incorporación de elementos con el fin de un mejor control de cualquier automatismo
eléctrico hace, sin lugar a dudas, que todo el proceso industrial se desarrolle con una
mejor calidad y mucha más seguridad.
Un automatismo eléctrico es una máquina secuencial con dos partes fundamentales.
La parte destinada al control y la parte destinada a la potencia.

Es importante destacar que cualquier automatismo eléctrico es una máquina


secuencial. Normalmente en la programación del automatismo eléctrico es necesario
conocer el estado de las entradas. Para conocer dicho estado se recurre a los
sensores, definiendo un sensor como un un dispositivo que detecta magnitudes físicas
o químicas y las transforma en variables eléctricas.

Las magnitudes físicas a detectar pueden ser  temperatura, intensidad luminosa,


distancia, aceleración, inclinación, desplazamiento, presión, fuerza, torsión,
humedad, movimiento, etc.

Estos datos se transforman en el sensor en magnitud eléctrica. La magnitud eléctrica


en la que se pueden transformar está en función del tipo de sensor. Por ejemplo en una
LDR la radiación se transforma en variación ohmica. En un micrófono, la variación de la
presión acústica se transforma en una variación de capacidad si el micrófono es por
condensador.
En un termopar, la variación de temperatura se transforma en variación de tensión y en
un fotodiodo polarizado inversamente, la variación de la radiación se transforma en
variación de corriente.

Es necesario hablar de los sensores en los automatismos eléctricos porque ellos nos
traducen las magnitudes físicas en magnitudes eléctricas. Los automatismos
eléctricos usan estos datos para procesar dicha información de forma secuencial
y accionar las salidas correspondientes.

Los sensores tienen aplicaciones en la industria, la automoción, la robótica, la aviación,


las naves espaciales, la medicina, etc.

Los sensores son fundamentales en la automatización, en la industria y en cualquier


ámbito automático. Son los instrumentos que nos permiten obtener muestras de los
sistemas a automatizar y por tanto a tratar.

Un sensor transforma cualquier magnitud física en una magnitud eléctrica. Como


las señales eléctricas obtenidas tendrán distintos valores, tendremos que
acondicionarla para poder llevar la información a los equipos de tratamiento de la
información.

Estos acondicionadores serán circuitos electrónicos, amplificadores, filtros y cualquier


otro circuito que adapte los niveles eléctricos proporcionados por el sensor a los niveles
requeridos para su utilización.

Nos permiten también hacer un sistema de regulación y control ya que podemos medir
y obtener una señal proporcional a la salida del sistema. De esta forma se puede
reaccionar para ajustar los parámetros de salida deseados.

¿Qué es un automatismo eléctrico? Es un circuito eléctrico que sigue una


secuencia previamente establecida. El automatismo puede ser cableado o
programado.

En ambos casos siempre vamos a distinguir dos partes. Una de control y otra de
potencia. En él se determina el funcionamiento de la secuencia de operaciones. Es un
sistema secuencial donde previamente se han almacenado las instrucciones a realizar.

Los mecanismos de actuación más sencillos son los relés y los contactores:               
El símbolo del contactor es:

Los automatismos eléctricos son los sistemas en los cuales las secuencias de las
operaciones se definen previamente realizando la programación de los mismos. La
programación puede ser sobre un autómata programable o PLC o también sobre
un microcontrolador. La programación más estándar es la realizada mediante
diagrama de contactos usando biestables programados para establecer las nuevas
etapas y borrar las anteriores. Es decir siguiendo una secuencia establecida
anteriormente en un Grafcet.

Como autómata programable podemos encontrar el S7-300, el 1200 o el 1500 de


Siemens. Por ejemplo el autómata S7300 de Siemens tiene la forma:
Si quisiéramos implementar el automatismo eléctrico con un microcontrolador,
podríamos utilizar un Arduino para implementarlo. La implementación sería en el
lenguaje de programación “C”:

La secuencia de operaciones se describe con Grafcet y a continuación se realiza la


programación correspondiente en función del tipo de autómata o microcontrolador.
El automatismo eléctrico es una máquina secuencial y como tal hay que programarla.

Si la automatización se realiza con un PLC, depende del fabricante. La programación


más extendida es la realizada por contactos, Ladder o en Siemens denominada KOP.

La programación del autómata necesita depurarse y verificarse. Las entradas en un


proceso industrial suelen ser digitales y las salidas también. Las entradas pueden ser
pulsadores, finales de carrera o sensores. Las salidas suelen ser contactores para
accionar mecanismos determinados. Los contactores pueden sustituirse por relés de
estado sólido accionados por transistores.

Las entradas y salidas también pueden ser analógicas. Una señal analógica es aquella
que para cada instante de tiempo tiene un valor determinado. Un conversor analógico /
digital transforma el dato analógico en digital para así realizar su procesamiento.

En la programación del automatismo eléctrico en primer lugar se escribe la


programación y a continuación se transfiere al autómata. En el proceso de la
programación siempre es necesario realizar una realimentación e ir comprobando las
distintas funcionalidades del sistema. Para ello viene muy bien disponer de una
herramienta de simulación que nos permita comprobar el resultado de dicha
programación. Siemens tiene el simulador S7-PLSIM, que nos permite realizar dicha
simulación y por lo tanto conseguir la depuración del programa.

Para desarrollar un automatismo eléctrico es conveniente recurrir a un sistema


gráfico que nos represente las distintas secuencias. Este sistema gráfico que nos
representa las distintas secuencias se denomina Grafcet.

El Grafcet es un método para representar los automatismos secuenciales. La


descripción es gráfica y permite visualizar la evolución del mismo. Es un lenguaje
funcional y gráfico. Describe las condiciones de funcionamiento de una máquina
secuencial mediante una sucesión de etapas las cuales tienen asociadas unas
acciones determinadas.

Entre dos etapas tenemos la transición. Nos indica la condición necesaria para pasar
de una a otra etapa. Si se cumple la condición pasaremos de la etapa anterior a la
posterior.

Una transición es válida cuando todas las etapas inmediatas anteriores están activas.

Al pasar una transición se desactivan las etapas anteriores y se activan las etapas
posteriores.

El Grafcet utiliza los siguientes símbolos:


Etapa
Las etapas establecen las secuencias de la automatización. Representan el control del
automatismo.

Transición

Representan la condición para pasar a la siguiente etapa:

Líneas

Representan la continuidad de la secuencia:

Acción

Las acciones se representan mediante un rectángulo a la derecha de la etapa. Si se


quiere que mientras se esté en la etapa se ejecute solamente si se cumple alguna
condición se le añade una condición encima de la acción:

Si tiene la acción una condición particular:


Con estos símbolos se desarrolla la secuencia de la automatización. Esta secuencia
pertenece al control. Las acciones vienen asociadas a las distintas etapas de la parte
del control.

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