SEPTIMO DIA

Maljud de Jesed
Maljut ShebeJesed

Hemos hecho referencia de Maljut como la sefirat de la materialidad, claro está que no se reduce a
ello. Pero podemos denominar a este día como materialización del amor, o, materialidad del amor.
En cuanto materialización, la podemos definir a partir de la creación misma. Por un acto de Amor
(de Jesed) se ha dado la Creación. La abundancia de las riquezas de la naturaleza es muestra de ello.
La potencialidad de la vida se encuentra en cada partícula creada. La primera pregunta que podemos
hacernos consiste en observar cual ha sido mi papel en cuanto al amor que expreso hacia esa
Creación. ¿Mi existencia es creadora? ¿Desarrollo esa potencialidad de la creación en tanto mis
pensamientos, mis palabras, mis actos? ¿Son cada uno de éstos fuente de vida para los demás? O
llegan a ser, por otro lado, origen de muerte, daño o destrucción. Observamos que la Creación
tiende, de acuerdo con las leyes de Hateva, a estabilizarse ella misma acorde con su finalidad de
creación como vasija. Pero recordemos que Maljut no tiene Luz propia, sino que cada uno de
nosotros y como colectividad podemos reflejar en ella. Así, lo que vivimos actualmente no es sino
un reflejo de nuestra propia carencia de Luz. Y es así como podemos meditar en el otro aspecto de
este día: La materialidad del amor. Esta materialidad contiene solamente el deseo de recibir. Siendo
de esta forma que buscamos solamente el cómo obtener de los demás, so pretexto del amor. En al
acto de Amor y Misericordia de HaShem hacia nosotros Él es Otorgante pleno. Así, en el amor que
expresamos no hay porcentajes, yo 20 y tú 80; yo 50 y tú 50. El amor que debemos expresar
siempre tendrá que ser el 100%. Sin embargo, el amor nunca es sumisión, al contrario, quien nos
ama nos debe valorar plenamente. Pero, para rectificar debo meditar de qué manera estoy viviendo
mi Maljut de Jesed.