Está en la página 1de 10

I.

A partir de la lectura del texto: “la magia del estilo”, responda las siguientes
preguntas:

1. ¿Consideras que la sociedad actual está marcada por la alineación y la hipocresía?


Justifica tu respuesta.
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________

2. Relaciona los conceptos con el modelo de vida dentro del cual están enmarcados.
Escribe RT si corresponden a la realidad del televidente o PM si son una propuesta
de la moda.
___ diseño ___ ansiedad ____ modelo
___ excentricidad ___ facturas ____ necesidades
___ caprichos ___ materialismo ____ cotidianidad
___ apariencia

3. Determina las diferencias entre el “mundo de la moda” y la “industria de la moda”.


Escriba 3 diferencias de cada una.

Mundo de la moda Industria de la moda

4. ¿Qué opinas de las franjas dedicadas a la moda y a la vida de los famosos que
aparecen diariamente en los noticieros?
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________
5. ¿Existe en la televisión colombiana programas similares a Estilo? ¿En qué se parecen
y en qué se diferencian de este? Llena el cuadro para responder la pregunta.

Estilo se parece a: _____________


Estilo Programa colombiano
Semejanza

Diferencia

6. Lee detenidamente las siguientes frases que se encuentran en el texto: “la magia del
estilo”, y escribe qué entiendes en cada una de ellas.

a. “El materialismo y su rechazo espiritual coexisten sin conflicto”.


________________________________________________________________
________________________________________________________________
________________________________________________________________

b. “El estilo constituye un modo utópico de vida marcado por la riqueza ilimitada”.
________________________________________________________________
________________________________________________________________
________________________________________________________________

7. Refiere algunas buenas acciones y sus recompensas. Ten en cuenta que, según la
visión de Estilo, pareciera que todo está relacionado con el dinero; sin embargo, un
adagio popular dice: “la recompensa de una buena acción es haberla hecho”.

Buena acción Recompensas…

8. Recuerda los significados de las siguientes palabras que aluden a la moda. Luego,
búscalas en el diccionario y, finalmente, concluye sobre su comparación.

Palabra Creo que significa El significado del diccionario


Farándula

Estilo
Moda

Explicación:
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________
___________________________________________________________________

II. Elabore un mapa conceptual (incluye conectores y enlaces) sobre la estructura de


un texto argumentativo. Recordemos que la estructura argumentativa está
compuesta por los siguientes elementos: introducción, tesis, argumentos,
contraargumentos y conclusión.

III. Elabore una cartilla donde muestre ¿por qué es importante la argumentación?, la
definición de los siguientes tipos de argumentos y dos ejemplos de cada uno,
tomados de un texto y donde se evidencie su uso.
• Argumento de autoridad
• Argumento de datos y hechos
• Argumentos de comparación o analogía
• Argumento de causa
• Argumento de ejemplo
Posteriormente, mostrar la definición de falacia con sus respectivos tipos:

• Ad hominen:
• Petición de principio:
• Ad ignorantiam (apelar a la ignorancia)
• De generalización precipitada
También debe incluir 2 ejemplos tomados de un contexto real sobre los tipos de falacias.
IMPORTANTE: La cartilla además de incluir las temáticas anteriormente mencionadas,
debe llevar algunos juegos y pasatiempos relacionados con los temas, para que se evidencie
su comprensión. También deben hacer uso de su creatividad, por eso es importante que la
cartilla sea elaborada a computador.
IV. Lee con atención los siguientes textos e identifica en cada uno de ellos la
estructura argumentativa (tesis, argumentos y conclusión), puede señalar con
colores cada uno de los elementos que constituyen a un texto argumentativo. En
el caso de los argumentos deben indicar de qué tipo se trata y si existen falacias
también clasificarlas.
TEXTO 1

Adopción y unión homosexual


La recta formación de un niño requiere la acción conjunta de elementos
referenciales femeninos y masculinos
Sábado 19 de junio de 2010

Es sabido que, tras la pretensión de desnaturalizar el matrimonio incorporando la


unión homosexual a él, vendrá el intento de legalizar la adopción de menores por
los "contrayentes", como los llama alguno de los proyectos de ley. Y este intento
de remedo de matrimonio y de supuesta vocación adoptiva vale tanto para la unión
homosexual, que algunos proponen como un nuevo instituto, como para la
pretendida y equivocada asimilación al matrimonio.
En cualquiera de los casos, los "contrayentes" aspiran a adoptar niños y criarlos.
El tema ha despertado fuertes polémicas.
No es para menos. Estudios norteamericanos a cargo de expertos en ciencias del
comportamiento de la Universidad de Carolina del Sur llegaron a la conclusión
de que los menores que viven y son criados por parejas homosexuales han
padecido fuertes emociones, como miedo, inseguridad, ansiedad, aprehensión,
vergüenza y enojo al tratar de esconder o negar la homosexualidad de los "padres,
molestarse por recibir sobrenombres dolorosos y alteración de sus amistades".
Afirman también que ya existen conclusiones científicas sobre la mayor
probabilidad de que los niños en cuestión desarrollen una tendencia a la
homosexualidad, teniendo en cuenta que los niños tienden a imitar y copiar los
roles de vida de sus padres. Testimonios recientes exponen la resistencia de padres
biológicos a que sus hijos sean formados en la idea de que el "matrimonio"
homosexual es igual al matrimonio heterosexual.
Siempre hemos pensado que la recta formación psicológica y afectivo-sexual de
un niño requiere la acción conjunta de elementos referenciales femeninos y
masculinos; que la influencia determinante de una pareja heterosexual produce un
impacto positivo en el imaginario infantil y adolescente y aporta un valioso
modelo de ejemplaridad sobre todos los miembros de la familia.
La idea de que los niños son "cobayos" con los cuales se puede justificar cualquier
experiencia es, sin duda, violatoria de nuestras leyes y de la Convención de los
Derechos del Niño. Lo que esta pretensión adoptiva olvida es que se está violando
el verdadero fin y objeto del instituto de la adopción, que es el interés del menor
por adoptar, y que además, como se ha dicho, se lo está privando de la riqueza de
la diversidad sexual en su crianza y educación. Este daño es imposible de medir,
pero de una evidencia incontrastable.
Los argumentos pseudoprogresistas, de que ello importa una discriminación o un
prejuicio ideológico o religioso, no resisten el análisis del sentido común. El niño
es el centro de la adopción, no los padres, y nadie discute que, con la posibilidad
de elegir, el niño o quien lo represente (el Estado, por caso) no debe elegir un
hogar homosexual, pudiendo elegir una pareja heterosexual.
El niño se merece una familia, y recientemente hemos señalado desde estas
columnas el escándalo de que hay 6000 familias heterosexuales, en espera para
adoptar, y no pueden hacerlo por trabas burocráticas e ideológicas.
Lo que aquí señalamos no va en desmedro, por supuesto, de la dignidad esencial
de todas las personas en relación con la libre elección de su orientación sexual y
del modo de canalizarla.
Pretendemos señalar que, simplemente, cuando se trata de convalidar una
adopción legal, nada puede importar más que el supremo interés de ese niño o
niña a ser adoptado. Y es sólo desde esa preocupación por el niño que la cuestión
debe ser analizada, ya que de ningún modo está demostrado que la vida con padres
homosexuales vaya a resultar inocua para su formación.
Los legisladores debieran centrar su atención en la niñez argentina, no en los
deseos de mayores de edad que han elegido libremente una unión homosexual ni
mucho menos atenerse a conveniencias políticas, desvaríos ideológicos o
pseudoargumentos de supuestas discriminaciones, a todas luces inexistentes.
De aprobarse por ley el casamiento homosexual, al no presentar problemas para
determinar la filiación por considerarse imposible la reproducción entre personas
del mismo sexo, podría habilitarse ese tipo de uniones para más de dos personas.
Por disparatada que parezca esta idea, sugerida en una carta de lectores publicada
en este diario, no es inválida. Aquellos que no pueden casarse, en ese caso,
podrían sentirse discriminados.
La única forma de que no haya discriminación sería que el casamiento
homosexual permita la unión de dos o más contrayentes. De ser así, por la teoría
del absurdo, el casamiento heterosexual debería seguir la misma senda, sin un
número limitado de contrayentes.

TEXTO 2

Las contradicciones en torno a la adopción gay

El diario La Nación apeló a un polémico estudio en un editorial.


Por Bruno Bimbi (*) | 23.06.2010

Es difícil dar un debate sobre cualquier tema cuando, en vez de discutir


argumentos, uno se ve obligado a responder mentiras. Ya nos acostumbramos a
que quienes se oponen a la ley de matrimonio entre personas del mismo sexo
mientan todo el tiempo, pero el editorial publicado este sábado por La Nación,
titulado “Adopción y unión homosexual”, es el colmo.
Dice el diario de los Mitre que, a través de dicha ley, gays y lesbianas “aspiran a
adoptar niños y criarlos”. Mienten, porque saben que ya podemos hacerlo. La ley
de adopción actualmente vigente no discrimina a los candidatos a adoptar según
su orientación sexual. Muchos gays y muchas lesbianas ya tienen hijos adoptivos
y los crían junto a su pareja, formando una familia como cualquier otra. Esto es
una realidad actual, no una hipótesis futura. Además, muchas parejas de lesbianas
recurren a la fertilización asistida con donantes anónimos de esperma –como lo
hacen muchas mujeres heterosexuales solteras o cuyas parejas varones tienen
problemas de fertilidad– y tienen hijos biológicos que crían juntas. Las familias
homoparentales –es decir, aquellas formadas por parejas del mismo sexo, con
hijos– ya existen: hay cientos de niños y niñas con dos papás o dos mamás en la
Argentina y la ley de matrimonio entre personas del mismo sexo no cambiará eso.
Dice La Nación: “Pretendemos señalar que, simplemente, cuando se trata de
convalidar una adopción legal, nada puede importar más que el supremo interés
de ese niño o niña a ser adoptado. Y es sólo desde esa preocupación por el niño
que la cuestión debe ser analizada”. ¡Cuánto cinismo! Hablan de su preocupación
por los niños y se oponen a una ley que servirá para proteger los derechos de
cientos de niños.
La legislación actual, como decíamos, no nos impide adoptar ni tener hijos, pero
sí nos impide compartir la patria potestad de nuestros hijos con nuestras parejas,
porque sólo pueden hacerlo las parejas casadas. Eso significa que los chicos que
tienen dos papás o dos mamás son, para la ley, hijos de uno solo. Como los hijos
“extramatrimoniales” del pasado, viven en un limbo jurídico. Uno de sus papás o
mamás no puede darles la obra social, firmar el boletín de la escuela, autorizar
una operación, cobrar el salario familiar o tomarse el día para cuidarlos si están
enfermos. Si la mamá o el papá legalmente reconocido muere, pasan a ser
huérfanos; si muere el otro o la otra, no heredan nada; si se separan, no tienen
derecho a un régimen de visitas ni a reclamar asistencia alimentaria. Esos niños
están desprotegidos por un vacío legal. Si se aprueba la nueva ley, sus padres
podrán casarse y, por lo tanto, podrán compartir la patria potestad, y todos esos
problemas se solucionarán.
Si la ley no se aprueba, en cambio, seguiremos pudiendo adoptar, como hasta
ahora, pero nuestros hijos seguirán sin tener los mismos derechos que los demás
niños. Los editorialistas de La Nacióndicen que “el niño es el centro de la
adopción, no los padres” pero, para castigar –por puro prejuicio– a los padres gays
y las madres lesbianas, condenan a los chicos a la desigualdad. Pero como no
tienen coraje para decirlo y hacerse cargo de semejante acto de egoísmo y
discriminación, prefieren hacer de cuenta que esos chicos no existen.
También dicen que permitir que gays y lesbianas adopten conjuntamente es una
forma de tratar a los niños de “cobayos”, como si fuera un experimento o una
invención argentina. ¡Cuánta mala fe! La adopción conjunta por parte de parejas
del mismo sexo es legal en Andorra, Bélgica, Canadá, Dinamarca, España, Guam,
Holanda, Islandia, Israel, Noruega, el Reino Unido, Sudáfrica, Suecia, Uruguay,
la Ciudad de México y algunas regiones de Australia y Estados Unidos. En
Alemania, Finlandia y Francia es legal sólo la adopción del hijo del otro miembro
de una pareja de hecho, pero la Corte Europea de Derechos Humanos falló contra
este último país por no permitir directamente la adopción conjunta a las parejas
del mismo sexo, por lo que la justicia local ya comenzó a validar ese tipo de
adopciones. En Brasil,el Superior Tribunal de Justicia reconoció semanas atrás
que las parejas del mismo sexo tienen derecho a la adopción conjunta. Y en
muchos otros países se da la misma situación que en Argentina: las personas
homosexuales pueden adoptar pero no compartir la patria potestad con su pareja,
aunque críen juntos a sus hijos. De una forma o de otra, ya hay miles de niños
adoptados por parejas del mismo sexo en todo el mundo.
Buscando asustar a los lectores, aseguran que los niños adoptados por gays o
lesbianas sufrirán “un daño imposible de medir, pero de una evidencia
incontrastable” y hacen una serie de afirmaciones vagas y contradictorias sobre
lo malo que es tener padres homosexuales. Se olvidan de mencionar, sin embargo,
que existen gran cantidad de investigaciones realizadas en distintos países y todas
ellas (sólo a modo de ejemplo: Universidad de Sevilla,Universidad de Valencia,
Asociación Americana de Pediatría, la Asociación Americana de Psicología, etc.)
han concluido que no existe ninguna diferencia relevante entre los niños criados
por parejas homosexuales o heterosexuales. En todos esos estudios se recomienda
que se permita laadopción conjunta a las parejas del mismo sexo, destacando que
lo que un niño necesita es amor, protección, cuidado, educación y otras cosas que
no dependen de la sexualidad de sus padres sino de su calidad humana. Basta con
comunicarse con cualquier colegio profesional de psicólogos o con las facultades
de Psicología de las universidades públicas para confirmar que eso es lo que opina
la comunidad científica. La decana de la Facultad de Psicología de la UBA, Sara
Slapak, lo dejó en claro esta semana cuando fue citada por el Senado para dar su
opinión y el Consejo Superior de dicha universidad aprobó una resolución
respaldando la ley de matrimonio entre personas del mismo sexo.
La Nación hace de cuenta que no se enteró de nada, pero cita a “expertos de la
Universidad de Carolina del Sur” que aseguran en un supuesto informe que los
niños adoptados por parejas del mismo sexo tienen toda serie de problemas. Entre
otras falsedades, dicen que “existen conclusiones científicas sobre la mayor
probabilidad de que los niños en cuestión desarrollen una tendencia a la
homosexualidad”. En realidad, si así fuera, no habría nada de malo en ello, ya que
la orientación homosexual no es ni mejor ni peor que la orientación heterosexual,
sino simplemente distinta. Pero las estadísticas, en todo el mundo, demuestran
que el porcentaje de niños adoptados por parejas gays cuya sexualidad resulta ser
heterosexual u homosexual es el mismo que se dan entre los niños criados por
parejas heterosexuales. De hecho, la inmensa mayoría de los gays y las lesbianas
tienen un papá y una mamá heterosexuales.
No dice La Nación quiénes son los “expertos” que elaboraron el informe del que
tanto hablan. ¿Por qué ocultan esa información? Tal vez sea porque el único
“experto” de la Universidad de Carolina del Sur que hizo un informe diciendo las
cosas que La Nación menciona es George Rekers, miembro del grupo anti-gay
Family Research Council (FRC). Como parte de sus acciones de promoción del
odio y la homofobia, el FRC ha contratado a lobistas que trabajan en el Congreso
norteamericano para frenar una declaración contra la ejecución de homosexuales
en Uganda y también organizó campañas de boicot contra las empresas que
reconocen beneficios sociales a las parejas de sus empleados gays o lesbianas.
Sin embargo, semanas atrás, el “experto” Rekers fue fotografiado en un hotel
donde estaba de vacaciones en Europa, acompañado por un taxiboyveinteañero
del sitio RentBoy.com. Cuando salieron las fotos, dijo que lo había contratado
para que le “levantara las maletas”. Desde entonces, la expresión “levantar las
maletas”, en Estados Unidos, se usa en broma para referirse a las relaciones
sexuales.

(*) Bruno Bimbi es periodista, activista de la Federación Argentina de Lesbianas,


Gays, Bisexuales y Trans y co-autor del texto de los recursos de amparo
presentados por varias parejas del mismo sexo para casarse, que dieron lugar a
varios fallos judiciales a favor de ese derecho. Actualmente cursa la maestría en
Letras en la Pontifícia Universidade Católica do Rio de Janeiro. Más información
en su blog.

V. Escriba un artículo de opinión de una página y media donde indique su posición


sobre la adopción gay (no olvide incluir distintos argumentos), que permitan
sustentar su opinión.

NOTA: Estos trabajos serán entregados tan pronto retomemos el calendario


académico. Recuerden que también incluye la entrega del mapa mental sobre
la serie troya.

Pueden aprovechar el tiempo de cuarentena para ver la película “la Odisea”


y entender un poco más sobre los poemas homéricos y la incidencia de los
dioses en la vida de los griegos.

Cordialmente,
Luz Francy Camacho
Docente de lengua castellana

También podría gustarte