Está en la página 1de 11

Hospital Nacional en Red Lic.

Laura Bonaparte

Residencia Interdisciplinaria en Salud Mental

RISAM

Proyecto de Jefatura Disciplinar


2020-2021

Stephanie Huge

Lic. en Psicología
INTRODUCCIÓN

En primer lugar, antes de volcar en este escrito las propuestas que considero
parte del proyecto de Jefatura para la disciplina psicología, me gustaría
contextualizar su proceso de producción y dar cuenta de los motivos que me
convocan a presentarme como candidata a ocupar el rol de Jefatura.

Estas propuestas se ubican a continuación y en la misma línea que el


proyecto general de jefatura, el cual decidimos escribir con mis compañerxs de
manera conjunta e interdisciplinar, tal como transitamos nuestra formación y como
apostamos al trabajo en salud mental. El proyecto general tiene como particularidad
que por primera vez en la historia se encuentra pensado y escrito por las cinco
disciplina que conforman nuestra Risam. Es en este contexto que me encuentro
muy entusiasmada y esperanzada en relaciona los posibles aportes que podamos
hacer tanto de manera grupal, como cada uno desde su disciplina y sus
particularidades personales. Es desde este último lugar, y desde la colaboración de
mis compañeras psicólogas, que surgen estas propuestas como el repliegue que
considero necesario hacia la propia disciplina, para poder pensar las bases y tomar
una postura desde donde partir y sostener el diálogo y la construcción
interdisciplinar en el trabajo con y para otros.

Durante mi recorrido por las diferentes instancias formativas y asistenciales


que hacen a la residencia y también durante mis rotaciones en otras instituciones es
que se fue gestando mi deseo y mi inquietud de postularme para conformar la
Jefatura de nuestra Risam. Esta decisión tiene que ver sobre todo con cómo transite
estos años, el significado que este espacio y este Hospital tienen para mi y mi
concepción del trabajo en salud mental, y sobre todo con la clínica particular con la
cual trabajamos día a día. En este sentido siento que esta residencia, además de
brindarme un sinnúmero de herramientas teóricas y clínicas , tanto en relación a mi
propia profesión como al resto de disciplinas con las que compartimos, me ha
posicionado en un lugar particular en cuanto a al trabajo con lxs demás y al
sufrimiento de otrxs. Hoy no puedo concebir la Salud Mental sin pensarla desde una
perspectiva de derechos, sin pensar en el trabajo y el abordaje interdisciplinario,

1
ideas que doy muchas veces por obvias, pero que el encuentro con otros servicios e
instituciones externos a nuestro Hospital me recuerdan que no resultan tan
evidentes para todxs y que no todxs concebimos igual la salud de nuestros
pacientes y la manera adecuada de contribuir con ella.

Y es en este punto que agradezco el tránsito por este espacio y la identidad


profesional que de a poco voy gestando y construyendo con el resto de compañerxs
y referentes, y es en este punto también que nace mi deseo de devolver algo de
todo lo aprendido, de lo transitado, de lo disfrutado y de lo amado en este espacio,
quizás desde el lugar de Jefatura.

¿Y qué es la Jefatura para mi? ¿Cómo concibo ese lugar y desde donde me
gustaría ocuparlo? Si tuviera que pensar una sola palabra para definir lo que pienso
que la jefatura de residentes debería ser, pienso en la palabra acompañamiento. La
pienso como un lugar desde donde alojar, facilitar, vehiculizar, motorizar, a lxs
compañerxs residentes, a sus inquietudes, a sus preocupaciones, a su miedos, a
sus ilusiones y desilusiones en el arduo camino de la formación en Salud Mental en
el contexto, no siempre favorable, de la Salud Pública. Siento al rol de jefatura como
una mano tendida para atravesar de la mejor manera posible la residencia, la
construcción de la identidad profesional de cada uno en su modo singular y su
autorización como profesionales de salud, así como también un colaborador en
poder pensar el después, el fin de la residencia y los posibles caminos a trazar a
partir de ahí.

Por otro lado pienso el rol como un desafío en cuanto a su construcción, si


bien se trata de un rol en el que se supone cierta asimetría en relación al resto de
lxs residentes, no puedo pensarlo lisa y llanamente de ese modo, ya que considero
que continúa siendo una instancia de formación y que de alguna manera lxs jefxs y
lxs residentes siguen siendo compañerxs y que con gran parte de ellos lxs jefxs ha
transitado su formación, ha compartido inquietudes, angustias y alegrías, lo cual
hace muy particular el vínculo. En este punto es que se me presenta con mayor
fuerza el rol de jefatura como un rol de acompañamiento y articulador entre la

2
residencia y el resto de espacios externos a ella, tanto del hospital como de otros
servicios.

Por último, para ir terminando esta introducción, propongo como guia para
estas propuestas, lo mismo que ha guiado mi tránsito por la residencia, y es
sostener siempre la pregunta, hacia las propias prácticas y con otrxs, tanto en lo que
hace a nuestros saberes clínicos, como a nuestra posición ética y política. A
continuación expondré las propuestas surgidas del diálogo conmigo misma y con
mis compañeras disciplinares las cuales pienso como apuestas en pos del beneficio
de la residencia, que irán tomando una forma en cierto punto impredecible en el
grupo humano donde se encarnen.

INSTRUCTORIAS

Las instructorias de psicología cuentan con cierta ventaja sobre algunas de


las otras instructorias disciplinares al estar a cargo hace varios años de la Lic.
Mariana Camilo, quien pertenece al área de formación de nuestra institución, por lo
que su disponibilidad para el espacio no depende de acomodar sus tareas
asistenciales. Esto en la práctica resulta una fortaleza ya que es un espacio que
cuenta cierta estabilidad y continuidad a través del tiempo y las diferentes camadas
de residentes.

Actualmente el programa de instructoria es propuesto anualmente y su


confección se encuentra a cargo de nuestra instructora. En este sentido me parece
que uno de los posibles aportes por parte de quien ocupe el rol de jefatura puede
ser el servir como articulador entre los intereses de lxs residentes y el armado y
dinámica del programa por parte de nuestra instructora. De esta manera pienso al
rol de jefatura sirviendo como canal de comunicación, para transmitir posibles
inquietudes clínicas que vayan surgiendo a lo largo del atravesamiento de los
diferentes espacios formativos y asistenciales y trabajar en su eventual abordaje en
los espacios de instructoria. Así mismo pienso que sería interesante, en caso de
ingresar residentes con afinidad a otras corrientes teóricas, distintas al psicoanálisis,
dar lugar a que algo de otros discursos circule.

3
Por otro lado sería interesante contar con la presencia de invitadxs al finalizar
cada uno de los temas propuestos en el programa para aumentar la pluralidad de
voces en relación a cada temática. Como invitadxs posibles pienso por un lado en
poder convocar a diferentes psicólogxs que ejerzan su práctica dentro de nuestro
hospital, para poder articular los conceptos teóricos propios de la instructoria con
experiencias clínicas cercanas a nuestra formación en la residencia. Por otro lado
también pienso en invitadxs que fueron convocadxs durante mi primer año de
residencia y cuyo aporte me resultó muy enriquecedor como por ejemplo: Enrique
Millán, Elisa Ponieman, Beatriz Tarsia, Gabriela Schtivelband, Mirta Garibotti,
Patricia Factorovich, Miriam Bruk, Osvaldo Couso, Natalia Blanco y Beatriz
Matteangeli.

Por último, en consonancia con el proyecto general interdisciplinario se


plantea la suspensión de las instructorias de todas las profesiones durante el
periodo de verano comprendido entre el 15 de diciembre y el 15 de marzo.

ACOMPAÑAMIENTO

Dentro del recorrido previsto para lxs residentes durante su formación, se


realizan diferentes acompañamientos tanto desde lo teórico como desde otros
espacios para reflexionar sobre la práctica clínica, estos espacios están tratados en
el programa general y pensados para todas las disciplinas.

Por mi parte y pensando en el colectivo de psicólogxs y tomando sus aportes


y experiencias sobre su recorrido, propongo un acompañamiento disciplinar más
presente, sobre todo al inicio de cada rotación. Pienso este acompañamiento de
diferentes maneras:

- Acompañar a lxs residentes personalmente las primeras semanas en la


transmisión del funcionamiento de los servicio y las dinámicas institucionales.
En especial en las primeras rotaciones de cada residente ingresante realizar
un acompañamiento más intenso dentro del mismo servicio (Guardia, Aps y

4
Ade), para luego hacerlo de manera más espaciada a medida que lx
residente vaya ganando autonomía.

- Acompañar personalmente en la confección de las primeras evoluciones en


las historias clínicas. Pienso esto como algo necesario para favorecer la
inserción de lxs residentes en sus rotaciones y brindarles mayor seguridad,
ya que la mayoría de las veces no tienen conocimientos previos sobre cómo
confeccionar una historia clínica y no siempre hay profesionales dispuestxs
en el servicio para transmitir estos conocimientos.

- Promover las relaciones de referencia particulares y personales entre lxs


profesionales de cada servicio y cada residente y no designar de antemano
un referente específico. Esto puede facilitarse comenzando con presentar al
inicio de cada rotación a lxs residentes de psicología con los profesionales de
su disciplina del servicio en el que se insertaran. Considero que nuestro paso
por las rotaciones y el trabajo y conocimiento sobre lxs profesionales brindan
a quien ocupe el rol de jefx la posibilidad de favorecer las relaciones entre
ellos y los residentes.

- Transmitir de manera clara por escrito y personalmente a lxs profesionales de


cada servicio los alcances y objetivos de cada rotación. Esto me parece de
suma importancia ya que según mi experiencia rotando en otros hospitales,
considero que muchos de los problemas y faltas de predisposición para
recibir residentes tiene que ver con la falta de información y canales de
comunicación para poder tomar conocimiento de la rotación y sus rotantes. Si
bien psicología suele ser de las disciplinas ampliamente recibidas, hay algo
de el saber que se le supone al psicólogx o las tareas que habitualmente se
le asignan de manera automática, que obturan otras posibilidades y no
permiten muchas veces que se cumplan los objetivos de la rotación. Con la
transmisión formal y personal de los mismos creo que algo de eso podría
comenzar a revertirse.

- Relacionado con el punto anterior propongo, más allá de la comunicación


inicial con los equipos, la apertura de canales de comunicación permanente

5
para abordar las diferentes situaciones que vayan apareciendo a lo largo de
las rotaciones.

- Acompañar a lxs residentes en el proceso de derivación de los pacientes


cuando llega el momento de pasar de año y deben acomodar sus pacientes
entre profesionales del servicio y/o residentes del año que les sigue.

Por otro lado, más allá del acompañamiento en los servicios, me parece
importante fomentar y acompañar en la escritura y presentación de trabajos en
congresos y reuniones científicas a quien se sienta convocado por este tipo de
actividades académicas. Considero importante este punto tanto por la relevancia de
la escritura en el proceso formativo, como por el plus que otorga en términos de
puntaje y como antecedente para aquellos residentes que se encuentren
convocados por la Salud Pública e interesados en ingresar a la carrera hospitalaria
una vez terminada la residencia.

SUPERVISIONES

Teniendo en cuenta la importancia de supervisar como parte de los tres


pilares fundamentales de la práctica psicoanalítica (junto al propio análisis y el
estudio de la teoría), considero sumamente pertinente propiciar este tipo de
espacios, no solo para lxs psicólogxs, disciplina en donde surge esta práctica, sino
también hacerlo extensivo al resto de profesiones de la Risam.

Al tratarse la residencia de una formación en servicio y para muchxs


constituirse como el primer acercamiento a la clínica, considero que estos espacios
son necesarios para poder trabajar sobre la propia práctica ante el padecimiento
subjetivo y desarrollar la propia capacidad como analistas/terapeutas/efectores de
salud en general (si hablamos del resto de disciplinas), ampliar nuestra escucha y
crear nuestro propio estilo e identidad como psicólogxs.

Actualmente se cuenta con espacios de supervisión tanto obligatorios como a


demanda y una extensa lista de profesionales dispuestos a tal fin. Si bien considero

6
la importancia de realizar ciertas supervisiones mínimas y establecidas por los
objetivos formativos de la residencia, también considero importante que el deseo de
supervisar tenga que ver con la propia motivación de lxs residentes y su afinidad y
transferencia con aquellos que cumplan el rol de supervisorxs. En este sentido
entiendo y propongo al rol de jefatura tanto como fomentador de la práctica de
supervisión como nexo y enlace para la organización de las mismas, pudiendo
contactar ampliar la lista de supervisorxs según el interés de lxs residentes y sus
afinidades teóricas.

Por otro lado propongo que en las supervisiones participen otrxs residentes,
más allá de quien supervisa, ya que a mi entender dicha práctica además de
enriquecer teórica y clínicamente, favoreceria el conocimiento de casos trabajados
en otros servicios, ayudando a que lxs residentes vayan conociendo las lógicas de
los mismos antes de rotar por ellos.

A continuación nombraré de manera no extensiva lxs supervisorxs que


actualmente se encuentran disponibles para supervisar a lxs residentes:

- Supervisorxs pertenecientes a nuestro Hospital: Lic. Silvia Quevedo (con


frecuencia establecida), Lic. Carolina Alcuaz y Lic. Sebastián Gutiérrez
(ambos a demanda).

- Supervisorxs por fuera de la institución en CABA: Lic. Patricio Alvarez, Md.


.Julio Moscón, Lic. Marta Campos, Lic. Élida Fernández, Lic. Enrique Millán,
Md. Beatriz Mattiangeli, Dr. Luis Sanfellippo, Lic. Nieves Soria, Md. Beatriz
Tarsia, Lic. Osvaldo Couso.

- Supervisorxs por fuera de la institución en La Plata: Lic. Maren Balseiro, Lic.


Cristina Borda, Lic. Amalia Cazeaux, Dr. Roberto Consolo, Lic. Sergio
Demitroff, Lic. Rodrigo Echalecu, Lic. Beatriz Pagano.

En relación este listado de posibles supervisorxs propongo actualizarla


contactando a cada unx a fin de poder recordar la propuesta y corroborar o no el
interés en seguir disponible para supervisar a lxs residentes. Me parece también
importante esta comunicación para poder transmitir el tipo de clínica con la cual

7
trabajamos y adecuar la nómina de supervisores de manera tal que todos sean
adecuados para supervisar la particularidad de nuestros casos y de la clínica de los
consumos problemáticos.

OTROS ESPACIOS FORMATIVOS

Actualmente se cuenta, además de los espacios mencionados en el proyecto


general, con el curso centralizado para psicólogxs y el espacio sobre toxicomanías y
psicosis con la Lic. Silvia Quevedo, ambos destinados a lxs residentes de esta
disciplina. Considero importante sostener estos espacios, tanto por las herramientas
teóricas que brindan, como por el contacto enriquecedor que permite el curso
centralizado con residentes de otras instituciones CABA.

Por otro lado me parece de suma importancia fomentar y facilitar la


participación de lxs residentes en la oferta formativa del Hospital, ya que se abordan
temáticas muy útiles para la clínica y suelen estar a cargo de profesionales con un
largo recorrido en esta institución lo que favorece comprender las lógicas
institucionales y el funcionamiento de los diferentes servicios. Para lograr este
objetivo considero que es necesario por un lado dar a conocer de manera adecuada
las opciones formativas disponibles, por ejemplo mediante carteleras en la Risam, y
por otro acomodar las tareas asistenciales en la medida de lo posible para poder
asistir a las actividades formativas que se superpongan con las mismas.

Además me parecería interesante fomentar y acercar las propuestas de


formación brindadas por otros hospitales y por el Gobierno de la Ciudad con el
objetivo de ampliar conocimientos pero también con la finalidad de tejer redes y
relacionarnos con profesionales de otros efectores de salud.

Por último propongo dos espacios de frecuencia quincenal o mensual, cuyos


días y horarios tendrían que acomodarse de acuerdo a las rotaciones, en los cuales
puedan encontrarse todos lxs residentes de psicología. Debido a las
particularidades de la organización de cada nuevo año en la residencia considero
que la organización definitiva de estos espacios en cuanto a días y horarios deberá

8
establecerse una vez que se cuente con el resto de las rotaciones y espacios
establecidos. Los mismos serian:

- Espacio de experiencias compartidas​: para poder hacer circular la palabra en


relación a la experiencia de cada uno en los diferentes servicios. Pienso este
espacio como un lugar informal y distendido donde poder llevar tanto
inquietudes clínicas como atravesamientos subjetivos durante las rotaciones.
Lo considero necesario para poder trabajar situaciones, angustias,
inseguridades, etc., que muchos atravesamos durante nuestra residencia y
para poder crear herramientas comunes para afrontar dichas situaciones.
Además considero que este espacio puede servir para ir transmitiendo
paulatinamente algo de cada servicio así el pasaje de uno a otro no resulte
tan novedoso o desconocido para lxs residentes de los años iniciales.

- Espacio de lectura: Lo pienso como un espacio de gestión horizontal donde


poder abordar temas teóricos y clínicos que no tienen lugar en otros
espacios. Si bien considero que los temas tienen que surgir del interés
colectivo, propongo como puntapié inicial y primer tema, abordar cuestiones
relativas a la capacitación en género y violencia contra las mujeres, de
acuerdo al espíritu de la Ley 27449 (Ley Micaela).

CONCLUSIÓN

Para ir finalizando, pienso que estas propuestas constituyen sobre todo una
intención sobre un espacio a construir de manera conjunta y que en caso de
concretarse irá tomando forma y encarnandose en la nueva conformación que nos
depare la Risam, tanto en lo relacionado a la jefatura como a nuestros nuevxs
compañerxs que están por venir. R1 que como siempre vienen a renovar y a
recordarnos que la pregunta siempre tiene que estar presente y guiar nuestro hacer,
que no es un hacer cualquiera, sino que es para, por y con otrxs en este contexto
hermoso que es la Salud Pública.

9
Por último agradecer a mis 12 compañerxs de año, a les 13, sin quienes
hubiese sido imposible este recorrido y de quienes me siento sumamente orgullosa.
y muy especialmente a Emi, Fran e Isa, que fueron lxs que el destino me asignó
aleatoriamente como compañerxs en cada rotación y a quienes volvería a elegir
siempre. Gracias por tanto compromiso, tanto aguante y tanto amor.

10

También podría gustarte