INFORME DE LECTURA

“Una Luz a las Naciones: La Iglesia Misional y el Relato Bíblico”

De:
Michael W. Goheen

Por:
J. Alonso Leonardo Rivera Rifo.

Informe de lectura presentado para cumplir los requisitos parciales de la asignatura de

Seminario en Misiología, enseñada por el profesor Pr. Carlos Muñoz.

Seminario Teológico Presbiteriano

Sede Concepción

Concepción-Chile
Septiembre del 2019
 BIBLIOGRAFÍA

GOHEEN, M., (2018) Una Luz a las Naciones: La Iglesia Misional y el Relato Bíblico. Trad.
Micaela Ozores, USA: Editorial Doulos.
Michael W. Goheen: Comenzó sus estudios de pregrado en Florida Atlantic University,
obteniendo su Bachiller en Historia. Luego, realizó estudios de Maestría en Teología
Sistemática en el Westminster Theological Seminary y finalmente su Ph.D en Utrecht
University, especializándose en Misiología. Comenzó su vida profesional como plantador de
iglesias PCA y pastor en Toronto, USA. Luego, durante más de dos décadas, enseñó estudios
de cosmovisión, teología bíblica y misionología en Dordt College, Redeemer University
College, Trinity Western University, Regent College y Calvin Theological Seminary. En la
actualidad, dirige el programa de educación teológica en el Missional Training Center (MTC)
en Phoenix, Arizona.
Michael ha sido coautor y editor de doce libros, donde destacan:
• The Church and Its Vocation: Lesslie Newbigin's Missional Ecclesiology (Baker,
2018).
• Introducing Christian Mission Today: Scripture, History and Issues (IVP, 2014).
• A Light a las Naciones: La Iglesia Misional.
• la Historia Bíblica (Baker, 2011).
SÍNTESIS
 RESEÑA
A grandes rasgos el autor delinea la misión del pueblo de Dios en el mundo partiendo
desde la Creación, Israel, Jesús y la Iglesia. Lo anterior, es resumido en que la misión del pueblo
escogido por Dios es ser Luz a las Naciones.
Dentro del sustento teológico del libro, el autor indica que la eclesiología define la
identidad de la iglesia. Es decir, primero define que es la iglesia, para proponer que es lo que
debe hacer. Con lo anterior, el autor estima que es importante realizar un estudio respecto de
la Iglesia. Por otro lado, define el concepto de misión, en donde destaca que la misión de la
iglesia tiene que ver principalmente con el concepto de comunidad, que es enviada a servir y a
vivir conforme a los parámetros bíblicos, es decir, contra la cultura del mundo. Con ambos
conceptos, se procede entonces a investigar en la Escritura, qué es la iglesia, cual es su misión
y cómo su organización y aparición en la historia tiene que ver con el propósito que Dios
determinó desde el principio.
En primer lugar, se menciona que desde el A.T. se nos presenta el relato de la creación
de Dios, con un énfasis en la creación del hombre, como corona de la creación. En este sentido,
las figuras de Adán como el primer hombre creado y luego de Noé, con quién Dios hace un
pacto para preservar del extermino a la raza humana, aseguran la extensión de la raza humana
por todo el mundo. Dentro de todo el mundo, Dios escoge un pueblo, el cual es iniciado en
Abraham. Cuando Dios se acerca a Abraham, le da una promesa de hacer de él una gran nación,
que sería conocida como Israel. Este pueblo, tendría esencialmente dos aspectos importantes:
por un lado llevaría el nombre de Dios a todas las naciones, y todas las naciones conocerían
quien es el único Dios verdadero. Por otro lado, el pueblo llevaría la voluntad de Dios para con
la humanidad, siendo así un testimonio de la redención de todas las cosas en Él. Se indica
entonces, como en el pentateuco se explica la historia de Israel, pasando por su liberación de
la esclavitud de Egipto para concretar la promesa de la tierra prometida, junto con el gran
elemento que distingue a Israel: la desobediencia.
Israel es liberado de Egipto, en donde se muestra a un pueblo redimido por Dios,
demostrando que era el pueblo del Pacto, puesto que Dios recordó la éste hizo la promesa hecha
con Abraham, para liberarlos. Por otro lado, se hace mención a que los profetas, anunciaban la
restauración final en Cristo, siendo bendecidos por Dios. Este mensaje incluía una nueva forma
de mostrar la Gracia, añadiendo a los gentiles. Esto último implicaba el desentendimiento del
pueblo de Israel, puesto que para ellos los impíos no podían ser objeto de bendición dado que
por causa de los gentiles en sus distintas expresiones (Babilonios, Asirios, etc), habían sido
apresados y dispersados. Es por eso que los Celotes mataban buscando la limpieza del pueblo
de la presencia gentil, los Esenios aguardaban el día en donde Dios destruiría a los demás
pueblos con fuego y los Fariseos pensaban en que Dios les condenaba por el no cumplimiento
de la Ley. Es por esto que la aparición de Jesús, con su anuncio de salvación incluyendo a los
gentiles, era resistido y rechazado.
Pero Jesús, representaba el poder y la voluntad eterna de Dios en la tierra, que desde el
principio tuvo en mente a los gentiles. Es decir, lo que ya se había iniciado en el A.T., estaba
siendo continuado en el N.T. lo dispersado estaba siendo reunido, lo que era menos claro ahora
era totalmente claro. Es decir, como esquematiza el autor, Dios creo la tierra y al hombre. Dios
escogió un pueblo y le dio una tierra prometida, Dios incluye a la iglesia y les da todas las
naciones.
Jesús les da a sus discípulos la gran comisión y por lo tanto, estos son enviados a ser
testigos de Dios cumpliendo su misión en el poder del Espíritu Santo, yendo hasta los confines
de la tierra. Lo anterior incluyo distintas discusiones al inicio de la iglesia primitiva. Pedro
predicaba a los judíos y los gentiles no estaban siendo atendidos. Pero una vez que por el poder
el Espíritu Santo os gentiles se convirtieron, tuvieron que hacerse cargo de tal fenómeno
resistido por los judíos. Tal tarea de Evangelización cayó en manos de Pablo quien defendió la
evangelización a los gentiles, librándolos del judaísmo. Ya no existía Israel, ahora la Iglesia
pasaba a ser el verdadero Israel, el Israel escatológico que vive en y para el Reino de Dios
inaugurado por Jesús, pero que todavía aguarda a su cumplimiento pleno.
La predicación estaba encargada a los confines de la tierra, en donde la iglesia
actualmente es llamada a vivir de forma distinta al mundo para ser luz al mundo. Es invitada a
vivir una vida diferente, con palabra diferente, actos diferentes y testimonios diferentes,
enmarcados en el testimonio Bíblico, reconociendo su misión, el llamado a ser una comunidad
multicultural y que da testimonio al mundo de quien es el verdadero Dios y Señor.

CRÍTICA
El autor propone un elemento fundamental en la eclesiología, esto es, que en primer
lugar la eclesiología nos lleva a pensar en que es la iglesia para luego saber como debe
organizarse. Dicha idea es también respaldada por lo que dice George Hunsberger: “En
escencia, la eclesiología consiste en el entendimiento que la comunidad cristiana tiene de sí
misma, en el que luego se basa para ordenar su vida de una determinada manera. Simplemente,
es lo que esa comunidad piensa sobre qué es ella misma y por qué lo es.” Lo anterior propone
un correcta forma de acercase a la eclesiología, librándose de la perspectiva con la que
comúnmente se aprecia, es decir, desde la óptica de la administración de los sacramentos,
formas de gobierno, etc. Si la iglesia quiere saber como debe conducirse, entonces, debe saber
quien es, y para saber quien es debe necesariamente recurrir a las Escrituras, las que dan
testimonio de Dios y el plan que desde la eternidad a trazado para su pueblo escogido en donde
está inmerso la iglesia. Es así que la eclesiología cobra un papel fundamental, para contesta a
la pregunta: ¿quién es la iglesia?.

Otro aspecto importante dice relación con Israel y su visión contra la inclusión de los
gentiles. El pecado y sus consecuencias, evidentemente enfriaron el corazón del pueblo y su
visión del mensaje que Dios les había anunciado a través de los profetas: su restauración y por
ese mismo medio la inclusión de las demás naciones. Israel comprendía que sólo ellos eran el
pueblo de Dios y que quienes no creían en Dios debían ser destruidos. La idea anterior, puede
tener relación además, con que el Pueblo perdió su visión misional, dado la historia que estaban
viviendo. Cuando el pueblo era pequeño, evidentemente la visión de ser un pueblo apartado,
que vivía de forma distinta a los demás pueblo era mucho más latente. Es decir, en Egipto el
pueblo se distinguía por el pueblo de Dios por su forma de vivir. Posteriormente cuando fue
libertado, de manera magnifica por Dios, quedó aún más evidentemente demostrado dado los
prodigios y milagros que Dios hizo para liberar al pueblo. Posterior a eso, y producto de todas
las batallas ganadas de la mano de Dios, y por el cumplimiento por parte de Josué de destruir
todo lo que había en las ciudades que tomaban, hacían ver que el pueblo de Dios no era igual
que los demás pueblo. El cumplimento de los diez mandamientos debía ser una vitrina hacia
los de más pueblo, para que vieran como era la vida verdadera y buena en Dios. Pero como es
de esperar el pecado entró en el pueblo y esta imagen fue distorsionada. Dado el sufrimiento y
opresión, el pueblo del norte inclusive desapareció. Posteriormente fue dispersado el pueblo
del Sur. El templo destruido, Jerusalén tomada, el pecado hizo que el pueblo permitiera la
entrada de la idolatría en su corazón la adopción de algunas costumbres paganas, y por lo tanto
ya no ser un pueblo que vivía conforme a la voluntad de Dios, ya no siendo luz para el mundo.
El pueblo en definitiva, perdió su visión misional, lo cual lo llevó a la destrucción. Las
Escrituras indican, tal como dice el autor, que Jesús vino a restaurar lo anterior. A continuar lo
iniciado en Israel. Lo anterior es correcto, pues en definitiva, lo que Jesús viene a hacer es a
recuperar y reimpulsar el sentido misional que siempre se consideró para el pueblo de Dios.
Esto da a entender el porque de enviar a sus discípulos a hacer mas discípulos y en todas las
naciones. También explica el porqué son enviados a vivir en contra de la cultura, no porque
en esencia sea algo nuevo, sino porque Jesús vino a confirmar y a reimpulsar lo que ya le había
pedido a Israel.

Finalmente, se destaca la visión que general que el autor propone respecto del hacer
misión. En definitiva, según lo que se puede extraer, el hacer misión tiene que ver con el volver
a la Voluntad de Dios desde el principio: ser un pueblo apartado. En la actualidad la iglesia
debe ser nada más que eso: un pueblo apartado. Un pueblo conforme a la voluntad de Dios
claramente expresa en las Escrituras, para que todo el mundo vea qué es vivir conforme a los
designios de Dios. Esto redefine la forma práctica de hacer misiones y su motivación. Ya no es
simplemente salir a la plaza con la cara pintada simplemente para ser vistos. Lo que la iglesia
hace al salir, es mostrar el mensaje y la vida del Evangelio. La iglesia ya no sale simplemente
por aumentar el número de personas en tal o cual comunidad local, la iglesia debe considerara
que su misión es ser una luz a las naciones. No es posible ser luz a las naciones si se olvida que
Israel fue enviada a ser luz a las naciones. La historia bíblica debe ser conectada con la historia
de la Iglesia hasta la actualidad, toda vez que la iglesia ha sido derrotada y pisoteada ha tenido
que ver con que pierde su identidad, se conforma a los siglos y no a la Palabra de Dios. Ser luz
a las naciones encuentra entonces su base en la frase sostenida por los reformadores, que versa:
ecclesia reformata semper reformanda secundum verbum dei, dando a entender que somos a
llamados a vivir de forma distinta, según la palabra de Dios.

UBICACIÓN BIBLIOGRÁFICA DEL LIBRO

 La ubicación del presente libro ha sido comparada respecto del libro “La verdadera
Historia del Mundo” que Michael Goheen escribe en conjunto con Carig Bartolomew. El libro
anterior, a grandes rasgos cuenta la historia de la redención. Es un acercamiento a las Escrituras,
para comprender la historia de Dios y el hombre, su creación, su caída y redención. Es decir,
propone el marco sobre el cual se desarrolla la historia del pueblo de Dios. Luego, el libro “Una
Luz a las Naciones”, como ya se ha comentado, propone una mirada de la misión de la iglesia
a partir de la teología bíblica, desde A.T. y N.T. Con todo lo anterior, ambos libros son
complementarios, pero se pueden enumerar de la siguiente forma:

1. La Verdadera Historia del mundo.

2. Una luz a las Naciones.

Puesto que el primero entrega el marco o escenario en donde se desarrolla la historia

del segundo. En otras palabras, el primero es el drama que está ocurriendo detrás del desarrollo
práctico de la misión de la Iglesia restaurada y redimida por Dios.