Está en la página 1de 22

,.

-
8 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS

20. Lo singular y lo social. El problema de la culpa Capítulo 1


y la responsabilidad ............................................................... 433
2 1. Algunas herramientas para pensar los modos de Algunos conceptos para pensar la
aparición de la violencia en la clínica de niños ..................... 459
22. Aporías en Freud que deben ser revisadas ........................... 481
sexualidad en psicoanálisis*
23. Sadismo primario y sadomasoquismo .................................. 503
24. Perversión sádica. Imputabilidad e inimputabilidad ............ 527
2 5. Sobre la relación entre el sujeto y la sexualidad ................... 543
26. Una vuelta sobre el concepto de sublimación ........................ 567
27. Simbolización, sexualidad y psicopatología ......................... 589
Como siempre, empezar el año en este seminario es enorme-
mente estimulante para mí. Seguiremos intentando que este sea un
lugar de reflexión sobre ciertos problemas que nos preocupan, y de
elaboración compartida de los temas que iré exponiendo, sobre los
cuales haremos un ejercicio de aproximación problemática a partir
de algunos ejes planteados por el psicoanálisis.
El programa sobre el que trabajaremos este año gira en base a los
siguientes ejes:

QuÉ PERMANECE DE NUESTRAS TEORÍAS SEXUALES PARA LA


PRÁCTICA ACTUAL

1. Una puesta al día de nuestras concepciones de la sexualidad


Orígenes de la sexualidad humana: del biologismo al es-
tructuralismo, un siglo de teorizaciones.
Qué se sostiene del modelo clásico del Edipo.
Puesta a prueba en la teoría y en la clínica de los modelos
psicoanalíticos de la sexualidad.
Relaciones entre la psicopatología y los modos de ejerci-
cio de la sexualidad.

2. Alcances y limitaciones de las categorías masculino-femenino


Reposicionamiento de la formulación psicoanalítica de
la castración en el siglo XXI.
Enigmas y fantasmas infantiles de la diferencia anatómi-
ca y de la diversidad de género. Travestismo, transexualis-
mo, vicisitudes de la identificación.

*Clase del 12 de abril de 2004.


,.
10 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 11

Aportes para la constitución de una teoría psicoanalítica to con el superyó, que se encuentra atravesado por la culpabilidad.
de la masculinidad. N 0 solo, por supuesto, según Freud sino también en los desarrollos
Homosexualidad-heterosexualidad: su posición tópica y posfreudianos, tan~? ~n la ob~a ?e
Kle~ coi:no en la. d~ Lac~, la
sus destinos en la genitalidad. cuestión de la tens1on intrasubJetiva que implica el pos1c1onarniento
ante la ley ocupa un lugar central. Y cuando decimos "la ley" nos re-
3. De nuestros prejuicios por fin cuestionados. Las formas ferimos al sentido fuerte del término, vale decir, a aquella norma que
actuales de representación y circulación de la sexualidad rige los contratos interhurnanos más allá de las vicisitudes históricas.
Producción de subjetividad y constitución psicosexual: Sin embargo, hay procesos de desconstrucción muy evidentes
confrontación de la sexualidad infantil con la del adulto. que, incluso, han sido extensamente examinados por algunos soció-
Lugar del cuerpo: narcisismo-autoerotismo, los modos logos. Para quienes tengan interés en ver estos ternas, mencionaré
del placer y su captura. ciertos autores que he leído con mucho entusiasmo este último vera-
El niño como lugar de goce del adulto: formas de cir- no. Por ejemplo, El respeto 1 es un texto extraordinario: en él Richard
culación del cuerpo infantil en una cultura mercantilizada. Senett analiza los efectos en la subjetividad de los nuevos modelos
laborales y de lo que llama "la flexibilización". También Zygrn.unt
El programa gira en torno a cuestiones que me parecen impor- Bauman, un sociólogo polaco radicado en Estados Unidos, trabaja
tantes, sobre todo en el sentido de dar una vuelta sobre ciertos aspec- el concepto de comunidad y analiza todos los problemas planteados
tos que podríamos considerar en revisión respecto al psicoanálisis. respecto a la cuestión de identidad y comunidad en un mundo en el
Vale decir, sobre el anquilosamiento de algunos enunciados y la idea cual la relación comunitaria con el semejante parece desconstruida, 2
de que gran parte de los descubrimientos del psicoanálisis quedan ternas muy importantes para nosotros, para entender algunos cua-
invalidados por las transformaciones que se dieron en la subjetividad dros psicopatológicos que se van produciendo. Textos como los de
en los últimos treinta o cuarenta años. Digo en los últimos treinta Sennett o Baurnan permiten incluso comprender modalidades de la
o cuarenta años porque es indudable que ha habido un salto en los angustia en cuanto a la forma en que se constituye un psiquismo a
modos de organización de la subjetividad a partir de una serie de va- corto plazo; a la forma en que lo que fluye cambia el modo de colo-
riables, entre las cuales se incluyen los modos en que han empezado carse de aquello que antes tenía permanencia y trascendencia en las
a operar los medios y, en particular, la cuestión de la imagen. Nues- relaciones interhumanas.
tro plan es también explorar las formas en que cierta circulación del
cuerpo como mercancía ha dejado de tener el sitio sacrosanto que Transforniaciones en los niodos de
ocupaba en la sociedad victoriana a comienzos del siglo XX. ordenaniient:o de los int:ercanibios
A partir, entonces, de una serie de cambios producidos en los sexuales.
últimos años, una de las preguntas que uno viene haciéndose desde
hace tiempo es qué es lo que queda de las grandes formulaciones Más allá de estos aspectos, está también lo que se ha dado en
psicoanalíticas; muy en particular, las referidas a la sexualidad. Es llamar "las transformaciones en los modos de ordenamiento de los
indudable que todos los que partimos del psicoanálisis venimos pen- intercambios sexuales". En relación con esto, el libro de Elizabeth
sando que las estructuras básicas del psiquismo, con ciertas modifi- Roudinesco llamado La familia en desorden 3 alude de una manera
caciones, se conservan. Por ejemplo, uno podría preguntarse qué ha
pasado con el superyó, qué nivel de estructuración tiene actualmen-
1. R. Sennett, El respeto. Sobre la dignidad del hombre en un mundc de desigualdad,
te el superyó; qué pasa con las leyes que rigen la relación al semejan-
Barcelona, Anagrama, 2003.
te y cuál es, hoy, la concepción con la cual el ser humano se define 2. Véase Z. Bauman, Modernidad líquida, Buenos Aires, Fondo de Cultura Eco-
respecto a la culpabilidad, como ser moral. El año pasado decíamos nómica, 1999.
en cierto momento que el psicoanálisis fue pensado para un sujeto 3. E. Roudinesco, La familia en desorden, Buenos Aires, Fondo de Cultura Eco-
moral; para un sujeto que tiene, de una u otra manera, un conflic- nómica, 2003.
~

12 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 13

muy clara a las formas con las cuales se han producido procesos de teoría en psicoanálisis (pueden ver esto muy bien desarrollado por
desestructuración y de recomposición de los modelos familiares. Y, él en un artículo de su obra Entre seducción e inspiración, el hombre, un
además, tiene algunas cosas muy interesantes, que yo les recomien- texto titulado "El psicoanálisis, mitos y teoría''), 5 pero me he dado
do revisar para ir introduciéndose en algunos temas relativos a la cuenta de que una de las cuestiones centrales del psicoanálisis en
cuestión de la pautación. El texto de Roudinesco atraviesa dos ejes este momento es, precisamente -como lo vengo proponiendo desde
fundamentales vinculados con la cuestión del Edipo y la función hace un tiempo-, la diferencia entre producción de subjetividad y
del padre en la sociedad actual. Terna muy importante este último, constitución del psiquismo. En otras palabras, concebida la produc-
porque prácticamente todos hemos sido, de alguna manera, tocados ción de subjetividad corno los modos históricos, sociales y políticos
por la idea de la función del padre en la constitución subjetiva, muy instituyentes -para hablar en términos de Castoriadis- de formas
particularmente a partir de la propuesta de Lacan. Es por ello que de organización de los sistemas representacionales, la pregunta es
considero que la pregunta respecto a la posición actual del padre es qué ha caducado de lo que venimos arrastrando en un siglo de psi-
fundamental. coanálisis respecto a las formas de producción de subjetividad y qué
Otro tema relevante examinado por Roudinesco es qué ocurre a sigue siendo vigente respecto a los ordenadores del funcionamiento
partir de los nuevos modelos de integración de la homosexualidad. psíquico.
Mientras que en los años setenta la homosexualidad se planteaba
como contestataria -pensemos en Foucault, por ejemplo- respecto Lógi.ca binaria y lógi.ca de la diferencia:
de la pautación del deseo en el interior de la familia, actualmente ¿son asiniilables a teoría fálica y lógi.ca
todo lo relacionado con los pedidos de legalización de las relaciones de la castración?
de alianza en parejas gay, incluso los pedidos de adopción, marcan
un deseo de integración que revisa los modelos de los setenta y pro- En relación con esta cuestión, por ejemplo, lógica binaria y lógica
duce mucho escándalo, porque arranca a la homosexualidad de su de la diferencia ¿son asimilables a teoría fálica y lógica de la castra-
lugar marginal. ción? Vamos a trabajar sobre este tema de manera extensa, porque
Está también el libro Hombre-mujer, 4 de Elisabeth Badinter, una me parece que algo que circula es el cuestionamiento al psicoanálisis
suerte de evaluación del feminismo de los últimos treinta años, que desde las teorías de género respecto a las teorías falocéntricas de
toca sobre todo una cuestión muy importante: de qué manera los la castración y, al mismo tiempo, la dificultad del psicoanálisis para
desarrollos de las teorías de género han posibilitado un acceso de repensar sus propios paradigmas y para recortar de ellos lo que sí
la mujer a ciertas formas de circulación del placer. Por ejemplo, el aporta algo a la producción de una antropología, en el sentido más
otro día se me ocurrió una idea malévola, realmente. Veía a una chi- amplio del término, de una manera de concebir lo humano. Lo mis-
ca joven, muy encantadora, tratando de convencer a un muchacho mo ocurre con el complejo de Edipo. Quienes han participado en
muy complicado sobre la racionalidad de sus argumentos. La veía otros momentos de este seminario o han tenido acceso a mis escritos
tan comprometida y trabajando tanto que le dije a mi marido: "La saben que tengo una profunda diferencia con el sostenimiento del
verdad, creo que las mujeres eran más felices cuando eran frígidas". modelo clásico del Edipo para nuestra sociedad; el modo en que se
Porque es tan brutal el esfuerzo que las mujeres tienen que hacer conciben, a partir de él, los posicionamientos masculino y femenino
actualmente para obtener el goc~, que uno se pregunta si valió la en el interior de la pareja y, en particular, la idea de que el complejo
pena. Más allá de esta broma malévola, que de alguna forma atra- de Edipo es la novela simple que requiere de tres términos actuales,
viesa el libro de Badinter, creo que todo esto pone sobre el tapete siguiendo a Lacan, y de cuatro, tomándolos estructuralmente, por-
la cuestión siguiente: Laplanche trabajó la diferencia entre mitos y que está presente la circulación del falo como significante. También

4. E. Badinter, Hombres/Mujeres. Cónzo salir del camino equivocado, Fondo de Cul- 5.]. Laplanche, "El psicoanálisis, mitos y teoría", en Entre seducción e inspiración,
tura Económica, Buenos Aires, 2003. el hombre, Buenos Aires, Arnorrortu, 2001, p. 213.
.
14 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 15

es cierto que una de las cuestiones que propongo hace tiempo es la trata del hecho de que se ha producido, por primera vez en la his-
revisión de dos aspectos que considero centrales. El primero de ellos toria de la humanidad, un estallido tecnológico de las formas de la
se da cuando Freud dice que el complejo de Edipo es pregnante en procreación. Y este estallido tecnológico corrobora lo más fecundo
la cultura humana y hace que el psicoanálisis merezca entrar en la del psicoanálisis, vale decir, el modo en que, ya a comienzos del si-
historia de la cultura. Uno se pregunta: ¿es válido postular esto, pro- glo XX, se planteó la disociación entre procreación y sexualidad,
poner que el complejo de Edipo es lo que le da un lugar particular para decirlo de algún modo. La época de Freud se caracterizó por el
al psicoanálisis? descubrimiento de los anticonceptivos o el intento de uso de losan-
Podemos dejar en suspenso la absolutización de esta idea, pero no ticonceptivos, y mostró sus consecuencias en el psiquismo: neurosis
se puede dejar en suspenso que, para el psicoanálisis, el Edipo pone de angustia, neurastenia, en fin, las formas de su época, los modos
el acento en la prohibición del goce intergeneracional, que sería el en que el control de la natalidad producía un tipo de perturbación
segundo aspecto. Y a partir de plantearlo en estos términos se abre en la sexualidad.
la posibilidad de salir de los modos en los que ha quedado estable- Actualmente ocurre lo contrario: la humanidad pasó muchísi-
cida la idea de que la cuestión del Edipo remite únicamente a las mos siglos tratando de tener relaciones sexuales sin engendrar, pero
prohibiciones entre padres e hijos biológicos (lo cual considero el ahora se plantea engendrar sin tener relaciones sexuales (broma que
segundo aspecto a revisar). Hemos hablado alguna vez de lo ridículo hago a veces). Esto implica un salto tecnológico de un calibre ab-
de la discusión acerca de si Woody Allen era o no padre y si cometió solutamente novedoso, que nos lleva a preguntarnos qué lugar van
o no incesto con su pareja actual, con la joven criada por él y Mia a tener algunas teorías biologistas en psicoanálisis. Por ejemplo, la
Farrow; 6 si son los lazos de sangre o los lazos de filiación de cual- teoría de la pulsión de vida unida a la conservación y reproducción
quier tipo los que definen el incesto. Me parece que la prohibición de la especie tal como fue presentada en Más allá del principio de pla-
del goce intergeneracional y la cuestión de la disparidad son temas cer. 7 De manera que hay que darle una vuelta a estas cuestiones para
que el psicoanálisis ha marcado y que tienen que ser recuperados, que no caigan todas las teorías psicoanalíticas con el surgimiento de
siempre y cuando nos permitamos invertir también los términos, es los nuevos modelos. ¿Por qué digo "que no caigan"? No solamente
decir, no considerar al Edipo como el deseo del niño sobre el adulto porque yo piense que deban ser conservadas en función de nues-
sino como la vuelta sobre el niño de los modos en que se ejerce la tra propia supervivencia, sino porque considero que todavía no hay
seducción del adulto en términos de lugar de apropiación y de lugar ninguna teoría de la subjetividad capaz de proponer un modelo más
de goce; el cuerpo del niño concebido de este modo y la prohibición fecundo. El día que la tengamos, podernos replantearlo. Por ahora,
del incesto entendida como las formas en que la cultura acota la: lo único que podernos hacer es trabajar para separar lo más fecundo
apropiación del cuerpo del niño como lugar de goce. Todo esto nos de lo que no lo es, y no abandonar la posibilidad de transformar en
ha llevado en algún momento a redefinir la perversión en términos alguna medida estos paradigmas.
de desubjetivación del otro, y no de ejercicio de la pulsión parcial o Como mencioné antes, Laplanche trabaja con la idea de mito
de castración. Sobre todo esto vamos a ir trabajando. y teoría, y propone que algunas teorías funcionan como mitos. Se
Hay un punto, además, que viene asomando con mucha fuerza y pregunta cuáles son mitos y cuáles constituyen teorías en el sentido
que pone en desbalance la teoría psicoanalítica clásica; por eso creo estricto. Así, abre un debate con Popper sobre si el psicoanálisis es
que tornarlo en cuenta permitiría un reequilibrio de otro orden: se o no falsable, 8 cuántas de sus teorías son falsa bles. A mí me gusta
la idea de diferenciar entre producción de subjetividad y constitu-
ción del psiquismo para ir clivando los aspectos de permanencia, y
6. En 1992 Woody Allen inició una relación sentimental con Soon-Yi Previn
(nacida el 8 de octubre de 1970), hija adoptiva de Mia Farrow y el pianista y director
de orquesta André Previn. La pareja contrajo matrimonio el 24 de diciembre de
1997 en el Palazzo Cavalli en Venecia, Italia. Tienen dos hijos adoptivos, Bechet 7. S. Freud, Más allá del principio de placer, en OC, vol. XVIII, Buenos Aires,
Dumaine Allen y Manzie Tio Allen, por los músicos de jazz Sidney Bechet y Manzie Amorrortu, 1 980.
Johnson. 8. Véase K Popper, La lógica de la investigación científica, Madrid, Tecnos, 1972.

......
..
16 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 17

los modos históricos de funcionamiento. Hay algo inevitable: la de- anatomía y su representación. Precisamente, la identidad femenina
pendencia de la cría humana respecto al adulto. Esta asimetría, esta se funda en esa discontigüidad, esto es, en el hecho de que para lle-
dependencia de base, es la condición misma de la humanización. De gar a serlo, una mujer tiene que. atravesar por el deseo de no serlo.
manera que podrán tener hijos las parejas homosexuales, las parejas En cambio, en el hombre no aparece nunca el camino de la mascu-
heterosexuales o los hombres y las mujeres que no estén en pareja, linidad, porque lo que se sostiene es la pregnancia anatómica como
pero lo que no va a dejar de existir es esta asimetría. Más todavía, modelo sobre el cual se desarrollará la masculinidad, a tal punto que
supongamos que en algún momento de la historia la diferencia ana- Freud no plantea en ningún momento una transmutación de objeto
tómica pasa a un segundo plano en la medida en que no sea funda- en el hombre; lo que propone es que en el hombre el objeto perma-
mental para el engendramiento y el acoplamiento: lo que no podría nece. Este es un tema a debatir: si este objeto primario es el objeto o
dejar de ocurrir es la existencia de esta asimetría. Salvo que los seres no lo es, y qué pasa con la mujer en ese sentido.
humanos pasaran a ser algo distinto a un ser humano, es decir, que Creo que todo esto es muy importante porque, además, el psi-
ya no se los "produjera" para tornar a su cargo las tareas inconclusas coanálisis tiene que resolver varios atolladeros que lo atraviesan: por
de las generaciones anteriores. un lado, su teoría de la homosexualidad, que a partir del centra-
Lo mismo ocurre con la teoría psicoanalítica de femenino y mas- miento en la castración, ha oscilado entre el cuestionamiento, de la
culino. Sabernos que tenernos aspectos absolutamente fundantes, salud o la anormalidad psíquica, y el reconocimiento de la castración
sobre todo la idea del carácter de la alteridad como constitutiva de entendida de una forma vulgar como reconocimiento de la diferen-
la identidad. Si hay algo interesante en el planteo freudiano respecto cia anatómica. De manera que arrastramos una historia de enormes
a la constitución sexual anatómica es la noción de que la identidad dificultades en la reconsideración de la homosexualidad; en particu-
no puede constituirse sino sobre la base de la alteridad. Es decir, no lar, una cierta homogeneización de la cuestión de la homosexualidad
hay posibilidad de que un ser humano devenga hombre o mujer si debida a lo que Freud llamó "bisexualidad constitutiva". Por eso, mi
no es por diferencia. Justamente, en la clínica psicoanalítica -muy propósito al volver a los orígenes de la sexualidad, al biologismo y al
particularmente la de niños-, se ha llegado a veces a la banalización estructuralismo, es repensar si estos modelos que están en la base de
de pensar que, para hacerse hombre, un niño necesita de un papá la obra freudiana siguen siendo útiles o no.
con el cual jugar y no de un papá que salga a pasear con la mamá, Aún más, si estos mismos modelos resultan fecundos para pensar
que duerma con ella o que haga esas cosas de un hombre: lo que los modos en los cuales se van perfilando y produciendo identidades
esto muestra es el absurdo de creer que la identidad se produce por muy complejas permitiéndonos, además, pensar cuestiones relati-
similitud y no por diferenciación. Es la alteridad la que define. Sin vas a, por ejemplo, el travestismo, el transgénero, la homosexualidad
embargo, nuestras teorías de lo masculino y lo femenino son pobres, y la heterosexualidad, cuestiones que, por supuesto, no pueden ser
eso es indudable. Son pobres pero, además, en mi opinión, se ha es- reducidas todas al mismo ordenamiento. Por otra parte, tampoco
crito mucho sobre el problema de la constitución sexual femenina, deben ser resueltas según un modo demagógico de acoplamiento
se ha discutido mucho el carácter falocéntrico de la teoría freudiana. a las demandas de quienes se sienten imputados -tal corno lo hizo
Vamos a trabajar una vez más sobre esto; veremos así qué aspectos la Federación Americana de Psiquiatría-. De manera que tenernos
no convendría abandonar aún y cuáles podrían revisarse. que trabajar más a fondo la cuestión masculino-femenino sin quedar
capturados por las cuestiones de género, pero teniendo en cuenta
El psicoanális.is carece de una teoría de cómo las transformaciones de género ponen en debate los modos en
la constitución sexual masculina. que concebimos la problemática de la diferencia.
El tercer aspecto de este programa tiene que ver con nuestros
Es indudable que el psicoanálisis carece de una teoría de la cons- prejuicios por fin cuestionados; entre otros, en relación con la asi-
titución sexual masculina. Freud se sostuvo en una teoría de la con- metría, las formas en que podernos salir de la impasse que nos lleva
tigüidad entre la anatomía y la representación, a diferencia de lo a concebir al niño, por ejemplo, corno una víctima de la sexualidad
que ocurre con la mujer, en la que hay una discontigüidad entre su del adulto o corno un seductor del adulto -para señalar dos polari-
,,...-
18 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 19

dades-, cuando en realidad lo que nos interesa como analistas -más que se abre en cuanto sexualidad llamada "parcial", "pregenital" o,
allá de que en los casos de abuso, de seducción, sin duda uno tiene que siguiendo a Laplanche, "paragenital" en la vida adulta, es decir, no
plantearse de qué manera la víctima ocupa ese lugar- son los efectos reductible a la genitalidad. Y, en los primeros tiempos de la vida,
de estas acciones en la subjetividad y no su victimización, porque si no, como una sexualidad "presubjetiva", vale decir, que no está definida
no hay posibilidad de modificar nada. De manera que tenemos do- por una posición del sujeto sino que captura, de distintos modos,
ble tarea: por un lado, replantear qué lugar ocupa la sexualidad del diferentes formas de las representaciones deseantes y de los investi-
otro como fuente de la excitación de un sujeto (se darán cuenta de mientos del mundo.
que esto ya está proponiendo el abandono del concepto de fuente en Decir "no reductible a la genitalidad" implica también salir de
términos biológicos y somáticos, que vamos a tratar en algunas reu- cierta modalidad que ha asumido la clínica desde hace algunos años,
niones más); y, por otra parte, revisar la idea de un sujeto en el cual muy regida por los ordenamientos masculino-femenino, fálico-cas-
permanece invariable lo que ha recibido, vale decir, la consideración trado. Esto es, en las representaciones inconcientes para el sujeto, en
de la víctima como tábula rasa sobre la cual se inscribe una realidad un sentido amplio, la sexualidad paragenital, pregenital o presubje-
vivida, y no como productora metabólica de representacionés que tiva no se caracteriza por la subjetivación de la pulsión sino, precisa-
transforman la realidad padecida. mente, por la ausencia de subjetividad en juego. Quiero aclarar que
Es más, esto conduce a la cuestión de la diferencia entre la res- cuando digo "subjetividad" me refiero al sujeto en sentido estricto.
ponsabilidad y la culpa, tema muy importante para nosotros, porque Hace poco salió un número de Topía dedicado a la subjetividad, en el
en psicoanálisis muchas veces se confunde una con otra. Y la culpa cual aclaro por qué pienso que el inconciente es parasubjetivo y por
es el modo subjetivo en que un sujeto se representa su propia con- qué la subjetividad no es del orden del inconciente, sino del orden
cepción desde el punto de vista deseante, y no necesariamente la del sujeto volitivo, del sujeto cognoscente, del orden del sujeto que
forma en que ha operado en la realidad. Me parece muy importante se enfrenta al mundo. Es un ordenamiento que tiene consecuencias
establecer la diferencia entre culpa y responsabilidad, lo que abre clínicas importantes, por eso lo defiendo. No por razones metafí-
cuestiones centrales también para todos los temas de penalización: sicas sino porque esa concepción, como parasubjetivo, me permite
gran parte del debate penal actual se basa en la manera en que se formular de una manera muy diferente la interpretación, no como
asume la responsabilidad frente a ciertas acciones, más allá de que la algo definido por sus efectos sino por sus móviles. Cuando digo "no
patología del sujeto que las ha producido corresponda a una estruc- definido por sus efectos" me refiero a que es diferente que alguien,
tura que está alterada. por su compulsión, ponga en riesgo su vida a que busque matarse.
Son dos cosas distintas. Definirla por sus efectos es pensar que pro-
Para un acercantiento a la definición del cura la muerte; definirla por sus móviles es tratar de entender de qué
concepto de sexualidad. manera se ha constituido ese movimiento compulsivo que el yo no
puede controlar como lugar de resguardo de la vida, como lugar de
En primer lugar, vamos a ir definiendo, en los términos en que representación autoconservativa.
venimos pensándolo, el concepto de sexualidad en sentido amplio, Entonces, hablamos de un concepto de sexualidad no reductible a
no reductible a la genitalidad y tampoco a los ordenamientos de la genitalidad, no sometida a ciclos. Esto es muy interesante; ha sido
género. Con "los ordenamientos de género" me refiero a una sexua- formulado más claramente por Lacan, como una sexualidad que, a di-
lidad que, como la definimos hace ya años, se vincula con un plus de ferencia de la del animal, no está regida por ciclos biológicos sino por
placer que no se reduce a la autoconservación: tiene que ver con los movimientos deseantes. Más allá de que el embate biológico pueda
órdenes de placer. Por lo que este concepto de sexualidad no puede producir desarticulaciones de los sistemas representacionales. ¿Qué
ser encuadrado en los términos de la sexualidad genital-reproducti- quiero decir con esto? Que, ante el embate puberal, las excitaciones
va y del ordenamiento que esta implica; tampoco puede ser pensa- sin respondiente simbólico pueden invadir de tal manera a un chico
do en términos de los ordenadores de género, que son ordenadores de 1O u 11 años con una estructura con riesgo psicótico que lo lleven
sociales, sino que tiene que ver, precisamente, con todo el espectro a desorganizarse. Esto no es lo mismo que le ocurriría a un animal:
......
'1
'/
1

20 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 21

un perro, en el momento de la maduración biológica, iría a encontrar en una regulación con el placer sin que eso lo destruya: cuestión
el objeto de resolución de la tensión. Mientras que en el momento fundamental en relación a la regulación, a la normativización de los
de la maduración biológica, un niño debería tener estructurados los modos de aquello que los lacanianos han llamado "formas del goce
sistemas representacionales que le posibiliten hacerse cargo de esa no adaptativo y no funcional". Vale la pena ver esto en Castoriadis,
maduración. Justamente el problema del ser humano es -como decía en El psicoanálisis, proyecto y elucidación, donde está muy bien desarro-
Freud- la permanente prematuración, es decir, esta ausencia de co- llado, y también en Vida y muerte en psicoanálisis, de Laplanche.
rrespondencia entre la organización representacional y la maduración Contrario o contrapuesto a la autoconservación, decía recién.
biológica, que puede aparecer antes o después. En el niño pequeño va Paradójicamente, surge una dominancia en zonas de autoconser-
como prematurado; en algunos casos, como incapacitado de organi- vación por apuntalamiento. En otras palabras, lo paradójico de la
zar los sistemas representacionales frente al embate biológico. sexualidad -y esto es lo que produce la situación compleja a nivel
Por lo tanto, "no sometida a ciclos" quiere decir que el deseo es teódco y que lo lleva a Freud, en los textos de la rnetapsicología,
independiente de los ciclos biológicos. A tal punto, que no se enten- a dar al apuntalamiento un sentido de apuntalamiento de lo psí-
dería de ninguna manera que los seres humanos consuman Vi.agra, quico en lo biológico-:- es que aparece la dominancia en las zonas
si no fuera porque no hay ningún tipo de sometimiento del deseo al de autoconservación sin ser por ello un desprendido directo de los
ciclo biológico. Más todavía, el enojo de algunas mujeres respecto procesos autoconservativos, que sabemos que pueden transformarse
de que el marido no recurra a esa medicación tiene que ver con que en procesos mecánicos cuando no hay libidinización de las zonas.
se sienten no deseadas representacionalmente y no desde el punto Por ejemplo, esto se aprecia en las formas de alimentación en si-
de vista biológico. Porque la razón para que un hombre incluya algo tuaciones de deprivación afectiva extrema y los modos de autismo
que le permita sostener la potencia es el deseo psíquico de mante- producido por situaciones de deprivación, donde las funciones de
nerse en cierto lugar, y no tiene nada que ver con el ciclo biológico. incorporación y de excreción se cumplen totalmente regidas por
De manera que "no sometida a ciclos" implica una sexualidad con leyes naturales; esto marca que en realidad no se producen ahí los
una independencia relativa y de relaciones complejas con los proce- modos del intercambio libidinal que requieren del otro para poder
sos biológicos o madurativos. instituirse. Entonces, un terna para trabajar en este primer módulo
Respecto del carácter no adaptativo, me parece fundamental la es esta paradoja de la dominancia en zonas de autoconservación que
idea de una sexualidad que no marcha por los carriles de la adap- no son, sin embargo, actividades autoconservativas sino puramente
tación. En Tres ensayos, Freud termina planteando el instinto reen- autoeróticas, corno diría Freud; vale decir, regidas por el placer de
contrado como una posibilidad de reencuentro con la procreación. órgano y no por su función.
En realidad, en todo caso se trata de un reencuentro con un objeto Otro punto es que la sexualidad es vicariable, transponible, des-
genital. Lo pre o paragenital no es adaptativo de ninguna manera; plazable; terna que todos conocernos, importante respecto a los mo-
es más, intercepta los procesos de adaptación. Todo el psicoanáli- dos en que se establecen dos vías de resolución, una de las cuales
sis ha trabajado sobre la desadaptación, con lo cual la sexualidad se tiene que ver con lo que Piera Aulagnier llamó destinos del placer; vale
inmiscuye en los procesos de adaptación, tanto en la alimentación decir, modos de resolución en el interior de los procesos psíquicos
como en la evacuación: lo que los analistas llamamos oralidad y ana- a partir de determinaciones de cultura, de la forma que tomarán las
lidad intercepta permanentemente los procesos naturales y les da un resoluciones pulsionales. "Vicariable" significa que puede ser toma-
carácter que, en muchos casos, resulta absolutamente contrario a la da a cargo por otra instancia, por otra zona, por otro orden. Trans-
autoconservación. No hay más que ver a un niño con una encopresis ponible y desplazable, sabemos que tienen que ver con el modo en
por rebalsamiento con adherencias intestinales, o alguien con un que se juega entre las instancias y en relación a la forma en que el
bolo fecal como efecto de un fantasma retentivo, o bien una diarrea cuerpo mismo va encontrando las vías de resolución.
corno producto de un fantasma expulsivo, para darse cuenta de que Otra cuestión a considerar en la sexualidad: es reprimible. Este
la sexualidad y la adaptación tienen muy poco que ver, y, más aún, punto resulta muy importante, porque lo reprimible se relaciona
que el problema del ser humano es la forma de poner la adaptación con el debate sobre las llamadas "pseudopulsiones": qué es reprimi-
r---
22 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 23

ble y qué no es reprimible a nivel psíquico y, si es posible considerar Indefensión, fetalización y


pulsional algo que no es reprimible, qué destino puede tener. premat:uración.
En el octavo punto señalaremos qué es determinante para pro-
ducir un pasaje a sistemas simbólicos. Esto remite a la idea de que, Ustedes saben que hay tres modelos o tres palabras usadas con
como plus de placer que no se reduce a la autoconservación, la cierta equivalencia, pero que son totalmente diferentes en psicoa-
sexualidad genera las primeras representaciones psíquicas y es, de nálisis: indefensión, fetalización y prematuración. La prematuración
alguna manera, productora de los inicios de cualquier simbolización es en realidad el concepto que Freud usa en la correspondencia con
posible. Voy a volver en este seminario sobre el modelo de la aluci- Fliess, y después prácticamente desaparece. ¿Por qué desaparece de
nación primitiva y su función como rudimento de toda simboliza- la obra ese término? Porque en la correspondencia con Fliess hay
ción posible, sin ser en sí misma simbólica. Pero es indudable que la dos ejes que abren el concepto de prematuración. Por un lado, está
simbolización no parte de la función sino de aquello que la excede. vigente la teoría de la seducción, por lo cual la función de la sexuali-
Es decir que la función se resuelve o se agota: la alimentación se dad del otro tiene mucha importancia tanto en esta corresppndencia
agota en la cantidad de alimento que se necesita para mantenerse como en el Proyecto. 9 Por otra parte, no hay un determinismo ins-
con vida; la excreción o lo anal, si no fuera organizado por un des- tintivista sino estamentario respecto a las determinaciones. Cuando
tino de placer, se agotaría también en la pura evacuación; todo lo Freud empieza a trabajar con Tres ensayos, 10 se sostiene más en la teo-
que se va armando a partir de estos modos representacionales fan- ría de Abraham de los estadios del desarrollo evolutivo donde no hay
tasmáticos, que pueden producir el pasaje a sistemas simbólicos, no prematuración, porque lo que hay es primero oralidad, después ana-
es del orden de la autoconservación sino, precisamente, de aquello lidad y va siguiendo cierta evolución determinada linealmente, lo que
que viene a meterse como un inter entre la autoconservación y el no pasa ya con Klein. Si bien el concepto de prematuraciÓn en Klein
mundo, en el momento en el cual se introduce el placer en sistemas no existe, sí existe el concepto de genitalización precoz. En efecto, en
representacionales. Klein aparece el descubrimiento de que no hay que esperar lo genital
Y el último punto consiste en que la sexualidad no es desenrai- como un resultado sino como algo que se puede dar precozmente, si
zable de su carácter somático en términos de excitación. Aquí voy a bien la razón que da de esta genitalización precoz es endógena. En
plantear una pequeña diferencia, sobre todo con algunas corrientes todo caso, lo vamos a trabajar, pero es una de las opciones que se han
que, en mi opinión, dan cuenta de lo que hemos denominado un planteado teóricamente: a partir del endogenismo de Klein se pue-
"cierto espiritualismo deseante", que tiende a equiparar los mode- de producir una genitalización, vale decir, una impronta de deseos
los representacionales con los modelos deseantes sin tener en cuen- genitales excesivamente temprana en el niño, que Klein considera
ta que los primeros no pueden dejar de estar inscriptos en formas efecto de las fallas en las relaciones con los objetos primarios. Esto es
de excitación somática, o producirlas, o recibirlas. ¿Qué quiero de- muy interesante, porque en el caso de Erna -tema que hemos traba-
cir con esto? Que cuando Freud habla de autoerotismo, se refiere jado mucho en años anteriores en este seminario y sobre el cual he
a placer de órgano. Una cosa es que ese placer de órgano pueda escrito- aparece muy claramente la genitalización, y no es efecto de
ser producido incluso por una palabra que rememore una acción ningún desplazamiento de la pobre Erna, sino de su sometimiento a
-esto es lo extraordinario del descubrimiento psicoanalítico: que presenciar la escena primaria de manera reiterada. De manera que lo
la palabra puede, de alguna manera, reinvestir una representación que Klein llama "genitalización" tiene que ver con eso.
de tal modo que genere algo que no estaba presente-, y otra cosa Volviendo a Freud, entonces, él trae el concepto de prematura-
es pensar que el deseo e~ algo puramente del orden del logos. Vale ción en relación con los atentados que puede sufrir el psiquismo del
decir, que el logos es una forma de regulación de la energía psíquica
que se vincula con la excitación somática concebida no como exci-
tación biológica sino como efecto de intercambios y de procesos de
9. S. Freud, Proyecto de psicología, en OC, vol. I, Buenos Aires, Amorrortu, 1978.
sexualización. 1O. S. Freud, Tres ensayos de teoría sexual, en OC, vol. VII, Buenos Aires, Amo-
Este es el ordenamiento del primer tema, como para presentarlo. rrortu, 1978.

24 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 25

niño, al ser expuesto precozmente a la sexualidad del adulto. Incluso El otro es la condición de la
en una de las cartas formula como riesgo de psicosis el atentado sexualización precoz de la cría humana.
sexual precoz. Es interesante, porque esto quedó totalmente descar-
tado durante años en psicoanálisis, como si fuera protopsicoanálisis. Lo que me interesa marcar es lo siguiente: el otro es la condición
En cuanto a la fetalización, es un concepto tomado por Lacan de de la sexualización precoz de la cría. Sin embargo, esta sexualización
la neurología, para plantear la insuficiencia motriz y la función del precoz no inscribe las representaciones ni los fantasmas del otro, sino
semejante en relación a la Gestalt pregnante que precipita la identi- que produce inscripciones metabólicas respecto a ellas. Y lo que me
ficación primaria. El concepto de fetalización en Lacan se relaciona importa mucho es, justamente, que el carácter productivo del psi-
con que la inmadurez neurológica, el hecho de que el bebé naz- quismo implica la transformación de lo que recibe y la producción
ca con montantes insuficientes desde el punto de vista adaptativo, de algo nuevo. Así, trato de romper con la idea de un endogenismo
lo somete a la relación con el otro desde los comienzos de la vida autosuficiente en el cual todo surgiría de la mente en una suerte de
en una relación de captura; "niños en mantillas" dice, si recuerdan paralelismo psicofísico: fantasmas universales, fantasías originarias
ustedes el pequeño poema del epígrafe del texto. La fetalización, en Klein, las protofantasías en otros autores. Pero, al mismo tiempo',
entonces, es desde el punto de vista neurológico la condición de la el reconocimiento de que lo que se recibe del otro no es puro exoge-
indefensión; esto es, del hecho de que el sujeto quede capturado en nisrno, sino que nos interesa el modo en que es procesado. Puede de-
el deseo del otro y, a partir de ello, se prernature la forma de sí mis- cirse que el concepto de Piera Aulagnier de autoengendramiento tiene
mo en una Gestalt que lo precipita. Como dice él, "de la insuficiencia que ver con esto. El material que se recibe es exógeno, pero lo que se
a la anticipación" quiere decir que se constituye sobre una forma produce ya no es exógeno. Y esto es lo que abre una distancia pro-
alienada a través de la cual el otro lo ve corno una totalidad que no ductiva entre el psiquismo del niño y el del adulto que lo constituye.
es, desde el punto de vista de la coordinación. Tiendo a pensar que también hay una diferencia entre el incon-
He tenido mi debate con este tema, hace muchos años, al plantear ciente pulsional y el superyó. Sin dudas. Sobre todo porque el su-
que el cuerpo fragrrientado que Lacan lee corno problema de la fetali- peryó está constituido por fragrrientos discursivos; está construido
zación arrastra consigo el concepto de pulsión parcial y de un cuerpo con una lógica que no es la del inconciente en el sentido estricto. Es
horadado erógenamente, y no disyunto desde el punto de vista de la un terna para reflexionar, ya que en realidad el superyó funciona con
maduración biológica, de la maduración neurológica. Pero, de todos algunos aspectos que son claramente del inconciente; por ejemplo,
modos, aparece esta idea de indefensión, corno el temor a quedar sin el hecho de que no haya imperativo hipotético sino que el impe-
la ayuda del otro, que Laplanche retorna después corno desauxilio: la rativo sea categórico: en realidad, cuando el superyó prohfbe algo
angustia de aniquilamiento sostenida por esta ausencia. es porque ya fue deseado. Por lo tanto, en el momento en que lo
Volviendo a la cuestión de fondo, el único de todos estos concep- prohíbe, lo prohfbe como un deseo realizado y no como un deseo a
tos que posibilita pensar la sexualidad es la prernaturación. La fetali- realizar. No me refiero a los aspectos preconcientes de la ley, sino de
zación es la condición neurológica de inmadurez que hace que el ser los modos en que el superyó opera intrapsíquicamente. De manera
humano quede subordinado al otro en una disparidad asimétrica de que queda abierta esta cuestión de qué aspectos del psiquismo son
saber y de poder, y de producciones simbólicas y sexuales. Creo que parasubjetivos y cuáles no. Hay aspectos del yo que no están subjeti-
justamente una de las cosas más interesantes de los ternas que esta- vados, eso es indudable. Hay modos de las identificaciones que fun-
rnos trabajando es pensar a la madre corno sexuada, y no solo como cionan corno adherencias. Y yo insisto en conservar la idea de subje-
"madre suficientemente buena" o "suficientemente mala". Con esta tividad corno algo relativo a la conciencia y la voluntad, aunque sea
última expresión aludo a que Laplanche plantea, bromeando con acotado. Ahora, volviendo a la sexualidad, si hay algo que me parece
Winnicott, la necesidad de una madre "suficientemente mala", vale fecundo de la idea del inconciente corno parasubjetivo, es que no se
decir, capaz de producir excitaciones, capaz de romper el plano au- trata de que la pulsión busque realizar algo de manera intencional,
toconservativo. sino que produce algo en la búsqueda de descarga que no está regido
por la intencionalidad. (Creo que el inconciente funciona así.) Algo
~

26 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 27

muy fecundo de la idea del inconciente corno parasubjetivo es que presión "paragenital"- no es subsumido en lo genital. Quiero decir
permite no intencionalizar la pulsión, sobre todo cuando debe ser que hay una idea teleológica ahí, en Freud, corno si fuera una con-
interpretada. Y que no se interpreten corno intencionales las conse- cepción hegeliana: "viene la síntesis y al final todo se junta en la geni-
cuencias de los actos de los sujetos compulsados. Me parece que se talidad. Y entonces lo oral, lo anal ... ". ¡No!, porque si fuera así, sería
abre una línea muy importante de trabajo práctico para reconocer horrible. En realidad, es verdad que residuos de lo oral y de lo anal
cuáles son los deseos de un sujeto y cuáles los modos compulsivos forman parte. Pero, incluso esto requiere represión, requiere subli-
con los cuales no puede controlar su acción; mientras que, en una mación. Lo que sí es verdad es que el autoerotismo sigue los carriles
tendencia más clásica, cuando el sujeto no puede parar se interpreta de lo paragenital. Esto tiene que ver -lo he dicho de una manera un
que es porque eso es "lo que quiere en el fondo". No sé si es clara la poco escatológica- con lo oral, con lo anal y con lo nasal, que nuestra
diferencia con la creencia de que "Usted dice que quiere esto, pero cultura no denuncia nunca pero que está muy presente y Freud, por
en realidad, por lo que usted hace, es evidente que quiere otra cosa": finura, nunca lo dijo (o en su cultura nadie hacía esas porquerías);
no, no quiere otra cosa; quiere lo que quiere, pero no puede parar pero en todos los semáforos de Buenos Aires uno ve la impronta del
de hacer lo otro. • erotismo nasal desplegándose alegremente frente al horror de los
Entonces, me interesa mucho esta desubjetivación corno una for- que rodean al personaje. Más todavía, gran parte de los reproches en
ma de repensar los modelos clínicos, las formas de intervención. Y, las parejas tienen que ver con el autoerotismo. ¿De qué se quejan las
sobre todo, para no sustancializar el inconciente. Porque, en la me- parejas? Se quejan de que el autoerotisrno invade constantemente la
dida en que uno le dice a alguien: "En el fondo lo que usted quiere es relación amorosa, de que el ejercicio autoerótico no tiene en cuenta
eso", lo que está expresando es que todo el resto es epifenómeno, es al otro, resulta irrespetuoso. Este es un terna central en la evolución
engañ.oso. No que el preconciente y el yo tienen su densidad, y que de la pareja, que indica, precisamente, que lo autoerótico nunca es
el inconciente tiene otra y son dos instancias diferentes, no: se está integrado a lo genital sino que mantiene su vía paralela.
manifestando que todo es "falsa conciencia", que la verdad está en Ahora, yendo a la edad madura del señor de la película, hay algo
el fondo. Y creo que esto no tiene nada que ver con el psicoanálisis. muy interesante: la fuerza que torna lo autoerótico en la declinación
Considero que se trata de una impronta fenomenológica; en algunos de la genitalidad. Y hay que tener en cuenta esto, porque se ve mu-
casos se podrían pensar muchas de las formas de la falsa conciencia cho en el trabajo con alguna gente mayor: no se produce solo una
corno modos de manifestación en psicoanálisis de una ideología es- pérdida jacksoniana del control sino que hay una especie de regre-
pontánea de anulación de los efectos del inconciente. Ahora, respec- sión, diría Freud, autoerótica a partir de una declinación del deseo
to al superyó y demás, hay que ir pensándolo. genital. Y esta declinación del deseo genital aparece también con
Hay una escena extraordinaria en la película Alguien tiene que una declinación del interés amoroso por el semejante. En la medida
ceder, 11 en el momento en que el protagonista abraza a la mujer y en que aparece como una declinación en el interés amoroso por el
dice: "Alguien se está despertando". Y se refiere a que tuvo una erec- semejante, caen los diques que controlan el autoerotismo, porque en
ción sin Viagra. Es una escena preciosa de la película, porque indica realidad esos diques están en función de la conservación del vínculo
cómo el deseo puede ser activado en este hombre a partir de que con el otro. Entonces, me parece que es un tema para tener en cuen-
hace un enlace al objeto. Mientras que todos los otros modelos con ta cuando uno trabaja.
los cuales tenía que insuflarse potencia estaban articulados por su En realidad, voy pensando esto a medida que lo desarrollarnos.
propio narcisismo y no por el deseo. Eso es extraordinario. Pero hay algo que proviene de la observación, y que aparece, a veces,
Entonces, por un lado, está la cuestión de la prematurez. Por otra como uno de los problemas más serios de la convivencia entre gente
parte, está la cuestión de que lo paragenital -por eso me gusta la ex- mayor. Es muy llamativo comprobar hasta qué punto esto va ligado
en general a formas de pérdida de la autoestima y del autorrespeto. A
mí me impresiona mucho cuando Freud dice, en la rnetapsicología,
11. Alguien tiene que ceder (Somethings gotta give, 2003), dirección de Nancy que las.represiones se realizan por autoestima yoica, porque el self
Meyers, con Diane Keaton y J ack Nicholson. se ama a sí mismo y se respeta y se reconoce. De manera que, en los

.a..
y---

28 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS ALGUNOS CONCEPTOS PARA PENSAR LA SEXUALIDAD EN PSICOANÁLISIS 29

momentos de pérdida de esa autoestima, de ese respeto, la pérdida vertiente relacionada con la propia autoestima, y no solamente con
de normas sociales es muy clara. Hay que tener en cuenta que todo la relación al otro. Y esto es algo a tener en cuenta.
lo que hace a las formas de la pautación del autoerotismo son las La producción de subjetividad va a determinar las formas con las
normas básicas de la cultura -esto lo vamos a trabajar más adelante-. cuales se llenen de contenido los enunciados identificatorios y las
Días atrás tuve que escribir el prólogo para un colega de San Pablo, relaciones con el mundo. Quiero decir lo siguiente: se nos plantea
que publica un libro sobre enuresis y encopresis, y entonces releí en constantemente la cuestión respecto a cómo la relación al semejante
el Deuteronomio, 12 en el Libro de Moisés, las reglas de la salud. Y es un elemento determinante en la constitución de las instancias psí-
ahí dice que cada persona tiene que llevar un bastoncito, una estaca quicas. Y un aparato psíquico puede, de todos modos, tener formas
para que, al hacer sus necesidades, pueda cubrir lo excretado des- de organización semejantes sin que necesariamente permanezcan en
pués. Y da una serie de reglas, lo que indica que estamos hablando de cualquier época histórica los mismos contenidos. Por ejemplo, en
algo que no forma parte de una evolución natural de las cosas sino nuestra cultura, la generosidad o el egoísmo no tornan el mismo ca-
que ha llevado mucho tiempo pautar a la humanidad. La pautación rácter que en otras épocas de la historia, de manera que una persona
de la analidad o de la excreción ha sido muy compleja para lbs hom- no siempre siente una culpa horrible por haber sido egoísta, y una
bres. Ahí aparece muy claro el hecho de que las leyes sanitarias estén vergüenza espantosa por haber sido estafador. En el texto de Topía
simplemente centradas en eso. No hay ninguna otra ley sanitaria en explico que en la Argentina de 2000 sería muy difícil que el hombre
el libro quinto, no hay normas alimenticias. Son leyes ligadas a la re- de las ratas hiciera un síntoma porque el padre se casó por dinero:
gulación de la segregación excrementicia, para parafrasear un poco lo que le habría preocupado es si le fue bien o mal, pero no sentiría
a Lacan, que hablaba de segregación urinaria. ninguna vergüenza de que el padre se hubiese casado por dinero. Al
Entonces me parece que hay que tener en cuenta la relación en- contrario, pensaría que el padre es "un piola bárbaro", que "gracias
tre autoestima y autoerotismo, porque no siempre las formas trans- al viejo nos salvamos todos".
gresivas son el efecto de una modalidad narcisista extrema. Muchas Pienso lo siguiente: las instancias se constituyen igual, el superyó
veces son, precisamente, una caída de los modos de los investimien- existe (vamos a pasar un poco revista a esto, porque creo que inclu-
tos narcisísticos y expresión de la pérdida del valor de sí. Y esto se ve so se constituye en épocas de enorme conflicto histórico); pero el
a menudo en procesos de desubjetivación en sectores marginados, o modo en que es concebido el universo de pertenencia de los objetos
que van perdiendo la capacidad de conservar ciertas pautas a partir a los que aluden las leyes es distinto. Y lo mismo ocurre con ciertos
de la desubjetivación. Esto se ha visto durante la Segunda Guerra en enunciados del yo. Lo vamos a retomar.
los campos de concentración, o se ve ahora en los procesos de mar- Hasta la próxima.
ginación en estos años; va apareciendo cada vez más algo que degra-
da los procesos de control del llamado autoerotismo, en este caso.
Me parece que eso es muy interesante. Y ocurre en la gente mayor.
Por lo que hay que tener en cuenta que muchas veces estamos frente
a un proceso fisiológico, claramente determinado, y en otros casos,
frente a un proceso de deterioro de la propia imagen yoica. Creo
que lo que no se puede perder de vista es que una vez que se instau-
ra la represión en el ser humano, la renuncia autoerótica tiene una

12. Deuteronomio es un libro del Antiguo Testamento y del Tanaj hebreo. Se


ubica en el quinto lugar, precedido por Números y es, en consecuencia, el último
texto de la Torá ("la Ley" o "enseñanzas de Dios"). La tradición religiosa judía atri-
buye el Pentateuco al mítico libertador Moisés.
pr'"

·rr
i
r

Gapítulo 17
· · Cómo redefinir género, sexualidad
;~pliada y sexuación para reubicar la
,~;·
identidad y la masculinidad*

·Me pareció adecuado, p<;>rque ya nos queda menos tiempo, revi-


-~guno de los.puntos en que estamo~posici~nados del p~ograma
· · to. En particular, abordar la cuestton de como redefirur, en re-
: : a una teoría psicoanalítica de la sexualidad, los tres ejes sobre
bS:que veni~os trabajando, que tien_en que ver con la_ sexualidad en
sentido ampliado; los tres grandes eJeS con que defirumos las cues-
. nones, que son género, sexualidad ampliada y sexuación, para reu-
, licar el tema de la identidad y el de la masculinidad. ¿Por qué digo
la masculinidad? Porque en realidad la sexuación, desde el punto
1 de vista de la feminidad, es lo que más ha sido trabajado en psicoa-

nálisis, por lo que uno de los grandes problemas es la sexuación en


· relación a la masculinidad.
i Entonces, quiero redefinir las tres grandes áreas y los modos en
1 que se van produciendo los ensamblajes entre la sexualid~d en senti-
; do amplio y, en primer lugar,_el gé1:1ero, porque son los que.<:.<?~~~~~~
m_!..es de g:iJ.e_se rea!~~ul~J-ª__f__l!~sti<?!Ul~J~-~~~ac~?_n. ¿Qué quiere
áecir esto? Que en los primeros tiempos de la vlcla, en relación a la
sexualidad ampliada, la coexistencia se da con la identidad de géne-
ro, a diferencia de lo que estamos acostumbrados a pensar en psi-
coanálisis: la identidad como una resultante de la elección de objeto,
como algo que coexiste con la sexualidad ampliada, antes de que se
defina la sexuación respecto a la diferencia anatómica.
( Esta es la primera cuestión que me parece importante desde dos
puntos de vista: desde el teórico y desde el clínico. En primer lu-
gar, porque identidad y sexo, en el sentido más amplio (sexualidad,
placer, formas de goce) siempre van a estar ubicados tópicamente

'Clase del 13 de septiembre de 2004.

1
P'"'
·~
364 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS cóMO REDEFINIR GÉNERO. SEXUALIDAD AMPLIADA Y SEXUACIÓN ... 365

en lugares diferentes, con ciertas coincidencias parciales. Por . Esto abre la cuestión de una diferencia, incluso estructural, entre
plo, la identidad siempre será del orden del yo, nunca del ord:Je:- el trallsexu.ali~mo y el trav~s?smo, ya que -aunque desde el punto de
inconciente, aunque hunda sus raíces, aunque se afirmen ide n .¡1 ,jsta descnpnvo o fenomeruco la gente pueda confundirse y pensar
caciones. Pero, en todo caso, no va a ser del orden del inconn~ - que todo .aquel q~e. ~s anatóm.icamente hombre y se viste de mujer
te estrictamente hablando, del inconciente en el sentido sisté~en­ uavesn- la pos1c1on travesn o transexual estará dada, fundamen-
atravesado por la lógica del proceso primario, sino siempre por 1 ~?· :imente, po~ el modo de ejercicio de la organización representacio-
gica del proceso secundario. Es decir, será siempre del orden d: ¡°"' pa.l que el suJeto tenga respecto a las concordancias o discrepancias
aspectos inconcientes del yo del preconciente y nunca del inconcie os entre su anatomía y su identidad. El debate se hace más complejo en
en sentido estricto. De manera que es un producto segundo. Tamb: situaciones en que no se sabe muy bien si el sujeto está operado o no,
podemos señalar que el otro aspecto que está en juego es que, a dife- parque a veces se pretende que lo que marca la diferencia es la ci-
rencia de la sexualidad, la identidad es siempre del orden simbólico rugía, lo cual no siempre es determinante. En algunos casos alguien
nunca del orden erótico o erógeno. A lo sumo, entra en conflicto co ' puede, como ciertos sectores de los transexuales en la actualidad,
el erotismo o con la erogeneidad, pero se define por su organizació~ plantear que pueden ser mujeres aun sin pasar por la cirugía. De ma-
simbólica. Simbólica en sentido estricto, en tanto instituyente -como nera que hay que redefinir sobre qué ejes se va a articular la cuestión.
lo hemos hablado muchas veces en relación con Castoriadis- institu- Es indudable que el transexualismo es anterior, desde el punto
yente/instituido. Vale decir, desde el ángulo de aquello que produce de vista de la organización defensiva, al travestismo, en la medida en
o construye o arriba a la producción de subjetividad. La identidad es que no se constituye sobre el reconocimiento de la diferencia anató-
algo que preexiste, incluso en los modos fantasmáticos organizadores mica sino sobre los modos ortopédicos con los cuales el yo organiza
a las formas en que se precipita el cuerpo, en una anticipación qu~ la representación primaria identitaria. Es anterior al reconocimiento
no es simplemente yoica sino una anticipación en el sentido más es- de toda diferencia. Se basa, estructuralmente, en una cuestión que,
tricto identificatorio; no es solamente una precipitación ontológica de en términos ampliados, es de género, pero en términos estrictos,
alguien que articula la representación de otro ser humano en el mo- es identificatoria. Su característica es que el sujeto biológicamente
mento de concebirlo, sino de un conjunto de elementos identitarios masculino establece una suerte de protección en la superficie del yo,
que van a definir formas de organización del sujeto en relación al lugar que es la superficie del cuerpo, con la que intenta la construcción de
donde se va a insertar. Dentro de estos elementos va a aparecer la cues- una suerte de membrana envolvente de carácter femenino. De allí
tión identitaria en relación al género, o sea, los modos en que se arti- viene luego el debate al que nos vamos a introducir, en que muchos
culan los proyectos deseantes de los adultos vinculados con el género. sectores del psicoanálisis piensan que esto es un fenómeno psicótico
Sin embargo, podríamos decir que aun antes de género, ya el y queda abierto el problema de la relación entre la psicosis y los
sujeto tiene un lugar instituido en un sistema. Podrá ser hombre o fenómenos clínicos. Vale decir, si se pueden considerar como psicó-
mujer, pero va a ser incluido en un conjunto de categorías que lo ticos modelos de creencia que no necesariamente aluden a fenóme-
determinan; categorías identitarias, de las cuales la posición sexuada nos clínicos singulares o que dan estallido a formaciones clínicas. Se
será un elemento que se jugará en el interior de estas y será, de algún puede pensar que esto es un delirio o no lo es. No estoy afirmando
modo, dominante en relación a la forma en que luego se articulen las nada, estoy diciendo que queda totalmente abierta esta cuestión de
posibilidades de lo que será reprimido y lo que no será reprimido. que en el sujeto hay una convicción que no implica una escisión del
Con esto tratamos de ubicar esta coexistencia inicial, que quisiera yo, no implica un mecanismo renegatorio como el que clásicamente
marcar hoy, teóricamente, en la medida en que ya hemos señalado la se ha planteado en psicoanálisis respecto al travestismo.
limitación que ha planteado en psicoanálisis la idea de considerar las Por eso lo considero como parte de un modo restitutivo de la
ambigüedades en la determinación del género como ambigüedades identificación primaria. Esto es muy interesante porque toma ca-
en la elección de objeto, como parte del polimorfismo perverso o rácter de convicción, no tiene escisión. No hay renegación. Voy a
como indefiniciones a las cuales se arriba. Son, en realidad, anterio- volver sobre la cuestión, de todos modos, pero quiero ubicar que
res a todo reconocimiento de la diferencia anatómica. esto no se produce en el momento en que el yo se escinde sino en

l.
~
~
LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS cóMO REDEFINIR GÉNERO. SEXUALIDAD AMPLIADA Y SEXUACIÓN ... 367
366

el momento en que ese yo se constituye. O en los momentos desautorizaciones del sujeto respecto a las consecuencias de la
teriores a los que tendría que producirse la constitución, cornopos-. ~rencia sexual anatómica ~n relación a la angustia de castración.
forma organizadora que evita, precisamente, la desorganización~ \12.le decir, la forma anulatona.
splitting o el déficit organizativo. Por eso se estabiliza tanto. De~
una de la preguntas de un abogado que tiene en sus manos el caso d Catacresis y 7netáfora.
aquel chico transexual que quiere ser operado, era que si él hace ~
alegato puede haber un pedido, cuando este chico llegue a la rnay e : , Aquí se abre otro problema: la relación entre percepción y dis-
ría de edad, de revisión de estas posiciones con juicio en su conO: (orSO· La teoría clásica tiende a pensar la cuestión de la creencia
Y le dije: "No, eso es imposible". Lo que no se puede evitar es qu algo directamente organizado por la percepción de lo real. En
él se desestabilice psíquicamente algún día. Esto no lo garantiza~
1110
~ rexto freudiano, la percepción está determinada por la existencia
cirugía, pero no hay la menor posibilidad de que él dé marcha atrás no del atributo, como si el atributo se impusiera en sí mismo. Pero
pidiendo ser un hombre. Porque toda su identidad está constituida :}vamos al gran problema que está planteado desde esa época, que
alrededor de eso. No es un capricho ni un momento circunstancial, eS una concepción binaria de la relación sujeto-objeto en términos
es una convicción que se mantiene desde la primera infancia. Aquí se de gnoseología clásica; mientras que toda la concepción posterior es
introduce una cuestión con el concepto de legalidad en psicoanálisis una concepción terciaria, en la que el lenguaje es constitutivo de la
en la medida en que esta persona dice que la naturaleza se equivocó: percepción.
Es muy interesante pensar esto, porque al hablar de que la natura- ·Existe una discusión entre el estructuralismo y el posestructura-
leza se equivocó está diciendo que falla una legalidad. Y cuando se lism.o sobre si el lenguaje abarca totalidades existentes y las organiza
plantea que es la legalidad de la naturaleza la que falla, la pregunta de cierto modo, o parcialidades existentes -no importa-, pero es una
es cómo se constituye o articula el conjunto de las legalidades. Esto fOnna de ordenamiento de lo real o es algo en lo cual lo real se cons-
es una cuestión muy interesante para pensar cómo concibe él/ella tituye, no se ordena, que es muy diferente. Desde el punto de vista
las legalidades. de la perspectiva más estructuralista, lo real no se ordena sino que se
Vuelvo entonces al transexualismo corno una forma de ordena- constituye a partir del discurso, lo cual es cierto y es falaz. Es cierto
miento identitario coexistente con el autoerotisrno, coexistente con porque el discurso o la palabra es el umbral del mundo visible, pero
la sexualidad parcial, parte de los ordenadores narcisísticos de las es falaz, precisamente, porque el mundo visible irrumpe permanen-
formas con las cuales se precipitan los primeros modelos yoicos, an- temente sobre lo ya estructurado del lenguaje, produciendo y mar-
tes del reconocimiento de la diferencia anatómica. Dejo abierta la cando sus insuficiencias y generando nuevos modelos lenguajeros.
cuestión respecto al travestisrno en los términos en que fuera plan- Recordarán que alguna vez hemos hablado de dos ángulos de la
teado por el psicoanálisis, no exactamente por Freud. Porque acá problemática de la insuficiencia del lenguaje en la articulación de
hay un problema. Lo que Freud analizó es el fenómeno del fetichis- lo real o en las dos caras del lenguaje. Una que tiene que ver con la
mo, no el del travestismo. Lo que él analizó, respecto a la proble- imposibilidad del lenguaje de capturar totalmente la vivencia. Y esto
mática de la renegación o de la Verleugnung -para usar un término a su vez tiene que ver con el impacto permanente de lo real en la
común a todos-, es la idea de que esta escisión longitudinal del yo producción de la vivencia. Por lo que tenemos para el lenguaje social
se produce en relación a la castración, pero se restituye en un objeto lo que hemos trabajado en otros momentos del concepto de catacresis
del mundo y no en una metamorfosis del propio cuerpo. Freud nun- como lexicaciones que se producen a partir de metáforas sociales.
ca afirmó que esto se produjera en el sujeto mismo. El síntoma se Hablamos de esto en un seminario anterior tomando la idea de los
constituye en la relación en que se articula el deseo a un objeto que piqueteros. La catacresis es una figura del lenguaje; consiste en una
no aparece como el objeto genital prescripto. Después se presenta la metáfora que se lexica. Quiere decir que entra a jugar un papel en
cuestión del travestisrno más vinculada con la idea de la ampliación la circulación de la cultura y deja de ser un elemento simplemente
del concepto de renegación, en la medida en que la renegación apa- poético de la lengua, para ser una forma de denominación de nuevos
rece como el mecanismo con el cual se considera que se esrructuran fenómenos. Yo usaba el ejemplo de "piquetero": es un desocupado
i

_L

368
LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS 'T cóMO REDEFINIR GÉNERO. SEXUALIDAD AMPLIADA Y SEXUACIÓN ... 369

organizado y en lucha. No se trata simplemente de un marginal [lttichis1n0, I Freud J?~~pone que lo que se tien~ ,que conjugar para que
"madres". Cuando se dice "Madres" en la Argentina, todos~ nstituya la escision que lleva a la renegacion o a la desestimación
mos que estarnos hablando de Madres de Plaza de Mayo. y al ' se~el juicio, es algo visto con alg? oíqo. ~a conju~ción del genital
a una categoría de hijo desaparecido y en búsqueda o en Iuch 1ldc ~ente entre el hombre y la muJer. El dice el genital castrado; aquí
· · frente a eso. N osotros, 1os argentinos,
resistencia · somos produa,en está produciendo sentido, y sentido de su época.Yo voy a decir "la
res permanentes de catacresis, porque somos productores pe:- ~encia entre el hombre y la mujer, biológicamente articulada", y
nentes de fenómenos inéditos: "corralito". En Europa ahora se di , que da cuenta de la posibilidad discursiva de definirlo en una
"corralito". Los yanquis dicen "corralito". No hay otra palabra~ ~zación. Es decir que no es solamente la percepción. Por supues-
"corrali to". si no está construida la lógica del preconciente, es imposible que
:·note la diferenci~ anatómica. Porque ~a lógica del preconciente es
Intervención: "Desaparecido". 12 que articula totalidades y elementos discretos, es la que plantea lo
incluyente y lo excluyente. La lógica del inconciente, o los modos en
Bueno, missing usan los estadounidenses, pero "corralito", no ha que se organiza el inconciente, son siempre conjuntivos, y-y. De ma-
otra. Cada lengua tiene lo suyo y es imposible la traducción. so! nera que la disyunción solo puede ser del preconciente. El concepto
de castración es inherente, no solo al preconciente sino al sujeto ya
formas de catacresis. En México me preguntaban qué era "mufa". y
yo decía que era una mezcla de humedad, mal humor y calor pone, con un proceso de constitución y diferenciación de los articuladores
ño. Eso es "mufa", es imposible transmitirlo. Entonces la catacresis lógicos. Esto es muy importante cuando uno ve niños; hay que tener
tiene esa característica, marca la insuficiencia del lenguaje cuando en cuenta, entonces, qué es lo que se está produciendo ahí. Con esto
irrumpe un fenómeno nuevo. Del mismo modo ocurre con la me, último quiero decir si hay angustia de castración -corno piensan al-
táfora. La metáfora marca permanentemente la insuficiencia del gunos- cuando un chico psicótico se masturba cornpulsivamente, o
lenguaje. El neologismo marca a nivel individual, como fenómeno si en realidad es una forma de organización de la descarga bajo for-
patológico, la imposibilidad del sujeto de apelar a formas comuni- mas no ordenadas que pretenden un reordenamiento libidinal, más
cacionales con las cuales organizar la vivencia, en la medida en que ligado a los que Melanie Klein llama angustia de muerte, en el sentido
hay una imposibilidad de ordenamiento de algo que está excediendo de un ataque absolutamente desorganizante y no una angustia de
todo el tiempo. castración específica. En otros casos sí puede estar organizado de
esta manera, pero el conocimiento de la articulación estructural del
El concepto de castración es inherente psiquismo nos permite saber cómo posicionar esto.
no solo al preconciente sino al sujeto Retomo la cuestión de la diferencia entre travestisrno y tran-
ya con un proceso de constitución y sexualismo. El travestisrno se caracterizaría, desde el punto de vista
diferenciación de los articuladores Mgicos. metapsicológico -después tendríamos que cotejarlo-, por una pre-
sencia permanente de dos corrientes psíquicas que implican una es-
Aquí se abre la cuestión de si el lenguaje es un ordenador de lo cisión con un reconocimiento de la diferencia anatómica pero, al
real o si el lenguaje constituye lo real. Para el estructuralismo, el mismo tiempo, del valor posicional que ella determina. Vale decir que
lenguaje constituye lo real. Pero uno podría pensar que constituye el el travestismo estaría articulado, en psicoanálisis, por la idea de que la
real que puede ser transmitido y que puede transformar -como diría predominancia está dada por el mecanismo de la renegación. Esto
Freud- el das Ding en Sache. Transforma aquello que es del orden de plantearía, entonces, que las formas exageradas, restitutivas, e incluso
lo existente en algo capturable por el sujeto. caricaturescas que aparecen, se relacionan con este proceso de des-
El problema con la diferencia anatómica es que durante años ha mentida, con este modo en que aparece el cuerpo permanentemente
quedado planteado como algo del orden perceptual. Pero en el textO
l. S. Freud, Fetichismo, op. cit.

1
1
_l
,..,.
370 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS 1 CÓMO REDEFINIR GÉNERO, SEXUALIDAD AMPLIADA Y SEXUACIÓN ...
371

irrumpiendo en su carácter masculino o atribuido masculinarnente Intervención: Es lo que digo, hay una legalidad. Pero me cuesta
Y de allí, entonces, la forma con la cual esto se cubre. No ºCUrr . Jllucho pensarlo.
. lo mismo en el transexualismo. En el transexualismo la solución e
mucho más radical y se trata de una adaptación de la anatolllÍaes Porque lo que plantea es que hay una legalidad "espiritual" -lla-
la representación. Como dijimos antes, el problema se plantea po ª émosla- simbólica, que está por encima de la legalidad biológica.
lo siguiente: si uno parte de la idea de que lo real se impone por ~ ~ero no dice que no hay ninguna legalidad. El misterio de la Virgen
mismo, piensa que todo sujeto que no acepta su condición biológi~ Maria tendría ese carácter. El misterio de la Concepción de la Vir-
como determinante de su identidad está siempre desmintiéndola gen es, indudablemente, el efecto de un proceso simbólico sobre un
Si uno parte de la idea de que la representación puede constituir l~ roceso biológico. La predominancia de lo simbólico sobre lo bio-
real, de articularla bajo ciertas formas, puede pensar que no nece. ~gico. Marca eso en la historia de la humanidad, la posibilidad de
sariamente este sujeto va a tener que descompensarse ni desarticu. que la naturaleza sea alterada en función de la presencia del Espíritu
lar las representaciones que lo constituyen porque ha encontrado Santo. Y si uno toma la idea de Espíritu Santo en sentido amplio
un modo de ordenamiento de lo real mucho más estable. Resulta como el espíritu que habita el cuei;po, o que viene a posicionarse en
interesante que, paradójicamente, el transexualismo aparece como el cuerpo, uno podría decir que hay una dominancia de lo simbólico
mucho más estable que el travestismo. sobre lo real. Es una herejía terrible comparar el transexualisrno con
el misterio de la Virgen María, pero no importa. Yo sé, hay varias
Intervención: Antes yo estaba muy convencida que en el tran. caras de censura, pero lo que quiero decir es que se puede pensar
sexualismo no había renegación, y en el travestisrno sí, pero me que. desde un punto de vista más auspicioso. Se puede pensar la fuerza
dé pensando en dos cosas. Por un lado, en la relación que usted que tiene la religión en la inscripción de lo simbólico respecto a lo
hizo con la psicosis. Estoy pensando en voz alta. Decíamos que en biológico, el carácter transmutador que tiene la religión. Nadie dice:
el transexualisrno no hay escisión. Escisión y luego renegación, sino "La naturaleza se equivocó con la Virgen María". Lo que se dice es
que a partir de la identificación se impone una identidad que no par- que Dios tomó la decisión de venir a posicionarse en el interior de
te de la evidencia de la diferencia anatómica. Cuando el transexual ella para engendrar a su hijo. Pero no lo puede hacer de otra forma
dice: "La naturaleza se equivocó" ... que no fuera a través del Espíritu. Esto no es simplemente por una
cuestión de prejuicio sexual, porque en la época en que esto se pro-
"Yo soy una mujer en cuerpo de hombre", bien. "Hubo un error". duce no está planteado en términos de prejuicio sino en términos
de atribución simbólica constituyente. No la podemos leer desde
Intervención: Entonces, ahí es donde me confundo con el tema de nuestra realidad actual. Esto es muy interesante.
las legalidades, porque me pregunto, ¿a través de qué mecanismo se Entonces digo que grandes modelos de la humanidad han coexis-
reemplaza -o aparece- una legalidad en lugar de otra? La legalidad que tido con la convicción biológica sin alterarla. La pregunta es: ¿por
dice, por ejemplo, "La naturaleza se equivocó". Porque ahí también está qué un religioso no está psicótico y un transexual sí? Esa sería mi
legislando de algún modo, está diciendo "La naturaleza se equivocó" pregunta. Entonces, yo podría encontrar una respuesta en algunos
corno otro podría decir "Yo tengo un cuerpo de hombre y soy hombre". delirios, porque el delirio es individual, pero el transexualismo no
es individual, es social. Quiero decir, el sujeto tiene una bipartición,
Perdón pero hay algo muy interesante. Que el transexual que no elige ser marciano, está sostenido en articuladores de su propia
sostiene eso no me dice: "Yo elijo ser mujer". cultura.

Intervención: No, "yo soy". Intervención: Se me hacía difícil pensar cómo se instituye esta le-
galidad en lugar de la otra. Entonces usted hablaba de la preeminen-
"Y yo no puedo ser otra cosa que ... ". Ahí hay una nueva legalidad cia de lo simbólico.
instalándose, porque no hay una elección.

_j__
~ 372 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS
.,,. CÓMO REDEFINIR GÉNERO. SEXUALIDAD AMPLIADA Y SEXUACIÓN. .. 373

No, la legalidad se instituye en lugar de la otra porque eum 1 salir de lo fenoménico para pensar el modo en que se constituye
una función reguladora en el sujeto. Esto está claro. En este enfu ~sujeto mismo en relación a todo esto.
indudablemente se instaura esta legalidad porque le resulta factiblo
organizarse bajo algo que permite que tenga el objeto continente e Intervención: Cuando usted empezó a hablar del terna de consti-
sí mismo. Uno podría decir que en ese sentido se ha producido
forma alienada de sí mismo, no muy diferente a otras formas aliena-
U: tuir lo real, me pregunté a qué se refería con eso. Usted había to-
aiado esta idea de una constitución ternaria de lo real, donde había
das. Pero que en la medida ·en que se sostiene, evita la psicosis y n0 un elemento que tenía que ver con lo visto y otro, con lo oído. Ahí
la articula o no la produce. se me abría la dificultad de que esto también implicaba la forma en
Hay una regularidad. En general, en el transexualismo se habla que se podía constituir una fantasía, en términos de los restos de lo
del error de la naturaleza. Y se habla con convicción del cuerpo, de visto y lo oído. Entonces, qué planteaba la diferencia o dónde estaba
ser mujer metida en un cuerpo de hombre. Quiero decir que esto es aquello ... Más allá de que recién cuando decía lo del carácter trans-
un elemento regular y el sujeto nunca dice que eligió. Ahí hay regu- mutador de la religión, una de las cosas que pensé es que tal vez hay
laridades que plantean la cuestión. algo que opera en ese aspecto, dándole un estatuto diferente a aque-
llo que podría constituirse solamente como fantasía o que podría
Intervención: Una pregunta corta: ¿qué es lo que se desmiente en iinplicar una constitución de lo real de otro orden.
el travestismo?
El problema del estructuralisnto: solo
En la teoría clásica lo que se desmiente es la castración femenina. existe lo que el sujeto puede conocer.
En la teoría clásica -lo vamos a retomar- se desmiente la idea de
que la mujer no tiene pene y entonces, aquí aparece una cuestión Justamente, cuando hablamos de las teorías sexuales de Hans, y
-por eso hablo de la diferencia entre travestismo y fetiche-: en el Freud plantea la relación entre teoría y fantasía, ¿qué es lo que di-
fetichismo se constituye en el fetiche. El zapato es el equivalente del ferencia desde el punto de vista clásico una teoría y una fantasía? El
pene castrado de la mujer. Aquí aparece la restitución en el cuerpo. carácter operatorio sobre la realidad, la posibilidad de que la teoría
"Existe una mujer con pene porque yo puedo ser para un hombre permita una instrumentación. Sin embargo, sabemos que hay fanta-
una mujer con pene", lo que no es lo mismo que ser una mujer para sías que se han convertido en instrumentales sobre la realidad. Así el
un hombre. Esta es la diferencia entre el travestismo y el transexua- problema se complica, en la medida en que una fantasía no es sim-
lismo. Más aún, uno tiene todo lo que hace al travestismo ocasional. plemente un producto subjetivo sino algo que puede circular entre
Vale decir, al que se juega solamente en el momento de la relación los seres humanos, sobre todo si uno rompe el concepto endógeno
sexual y no en la vida, este es otro punto; que está totalmente loca- de fantasía, de algo producido por el propio psiquismo. El terna de la
lizado en la vida erótica -en algunos casos no está localizado en la creencia, en última instancia, tiene que ver con transitoriedades his-
vida erótica porque se ha convertido en oficio-. En algunos travestis, tóricas. Nosotros lo hemos tomado muchas veces respecto al modo
en la medida en que se dedican a la prostitución, lo que tendría que en que se articulan ciertos paradigmas, el ADD. Hace unos años yo
ser una vicisitud de la vida erótica se convierte en un modo de vida. decía que hasta que se compruebe que realmente la neurotransrni-
sión es neurotransmisión, todavía puede ser corno el flogisto o corno
Intervención: [Inaudible.] el éter, una teoría que constituye una forma de llenar un vacío que
permite una cierta operatoria durante un período histórico. De allí
No, no es un problema de identidad. Si es prostituta, anda todo el la función de la imaginación creativa en la ciencia.
día vestida de prostituta. El travesti vive de eso; la vida erótica ha to- Pero quiero volver al punto más firme, que es la capacidad de
mado a su cargo la totalidad de la vida. El ejecutivo anda vestido de eje- la cultura de la producción representacional, no fantasmática: son
cutivo. Si se gana la vida corno travesti, anda siempre vestido de traves- dos cosas distintas. Porque la capacidad representacional implica no
ti. No se cree una mujer. Entonces, me parece que acá el problema solo el posicionamiento subjetivo sino la posibilidad de que lo sub-

J._
~
LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS
1 !
CÓMO REDEFINIR GÉNERO. SEXUALIDAD AMPLIADA Y SEXUACIÓN. .. 375
374

jetivo encuentre un espacio en el cual organizarse, desde el punto d binarismo- y otra cosa, confundir la arbitrariedad de la cultura con
vista de la confluencia en la relación al otro y en la posibilidad de
construcción de espacios de cultura. Cuando digo lo "subjetivo" rn e
refiero al sentido más básico; en el sentido de algo que aparece corn~
t
1
arbitrariedad del sujeto. Porque la arbitrariedad de la cultura es
galidad, al menos hasta que llega a su límite. El problema surge
~do la cultura, en su arbitrariedad llegó al límite. Cuando este
puesto objetivo, aunque en realidad sabernos que usarnos "subjetivo" chico dice: "La naturaleza se equivocó", se refiere, precisamente, a
para hablar de los modos en que se establecen las representaciones que la arbitrariedad llegó a su límite con él. Pero la naturaleza tam-
que hacen a la inserción de los sujetos sociales. bién instaura algo que no es sino del orden de la arbitrariedad. Lo
Por lo que vuelvo al problema de lo binario y lo terciario. Te- que yo estoy trayendo es la idea de que lo arbitrario es necesariedad
nernos una primera cuestión, romper el binarismo en psicoanálisis en el fenómeno simbólico, hasta que llega a su límite. La pregunta
romper la idea de que la percepción se produce por sí misma. Ese~ que se abre, entonces, es: ¿cómo no confundirnos lo manifiesto o
un primer problema y a ese primer problema apunta Lacan cuan- lo que se presenta a los ojos con aquello que lo determina? Por eso
do discute la cuestión del perceptum. Claramente, él fija una nueva traigo el ejemplo de transexualisrno y travestisrno: en ambos casos
posición en la historia del psicoanálisis. La alucinación no es una uno puede decir "Son hombres vestidos de mujer", pero no, no son
percepción sin perceptum. No es simplemente algo de la mente de hombres vestidos de mujer. Son otra cosa, en ambos casos. Más aún,
alguien. La alucinación tiene que ver con algo de lo real que vuelve y en algunos casos no está claro para el sujeto qué es él, hay pasajes
con algo que no termina de constituirse desde el punto de vista sim- entre una y otra organización, aunque no es el caso del transexualis-
bólico. Es una falla en la terceridad, pero da cuenta de su existencia. mo originario corno el que yo estoy trayendo desde hace un tiempo
No existe el perceptum sin algo que lo constituya entre el percipiens y con este chico.
lo que registra. No existo yo mirando este vaso sin nada en el medio.
Para que esto se constituya corno un vaso tiene que haber algo que Algunos.fragmentos del relato de un
me permita constituirlo corno un vaso. Este conocimiento del vaso joven "lravesti.
es de lenguaje, discursivo, histórico, cultural. Lacan dice: "Es de len-
guaje"; el problema se presenta si yo no sé que existe el vaso o no Existe el caso del travestí que termina operándose relatado en la
tengo la palabra "vaso", si lo real desaparece, ese es el problema del revista dirigida por Bourdieu. 2 Algunos fragmentos del relato de ese
estructuralisrno. El problema del estructuralisrno es que solo puede joven travestí, recogido en una zona marginal de México llamada <;iu-
existir aquello que el sujeto puede conocer. De manera que en la dad Nezahualcoyotl, pueden servir para ampliar nuestra reflexión en
cosa incognoscida se esconde el agnosticismo. Y, en última instancia, aras de articular las categorías que venirnos proponiendo. Corno ve-
vuelve a aparecer una dominancia del discurso sobre lo real. Esto rán, la complejidad del caso no permite un encasillarniento fácil, ni
nos deja nuevamente en un déficit operatorio. mucho menos un encuadramiento psicopatológico, menos aún dado
El concepto con el cual Freud articula, entonces, en Fetichismo la que la entrevista fue realizada en el marco de una investigación lleva-
idea de algo visto y oído, no es lo mismo que en la fantasía, porque da a cabo sobre personas que se reunían en casa de Merna 3 (femenino
lo que se conjuga no son solamente restos. Retorna algo de la teoría de Memo), un homosexual de la zona que acoge jóvenes del barrio,
de la fantasía, es verdad, pero al mismo tiempo lo que plantea es que
la visión en sí misma no puede producir una teorización infantil.
Esto es lo novedoso, para mí, del texto Fetichismo, que la teoría no
surge de la percepción sino de un encuentro entre la percepción y el 2. Véase A. Prieur "Little Boys in Mother's Wardrobe", Actes de la Recherche en
discurso. Esto es absolutamente innovador. Este es el problema que Scimces Sociales (dir. por Pierre Bourdieu), nº 125, Homosexualidades, diciembre de
1998.
me parece que articula toda la problemática que estarnos trabajando
3. Véase A. Prieur, Mema's House, Mexico Cit:y: On Transvestites, Queens, and
de la identidad donde, por un lado, indudablemente hay instituyen- Machos, Chicago Univ. Press, 1998, col. Worlds of Desire: The Chicago Series on
tes. U na cosa es que la diferencia sexual esté instalada en la cultura Scxua!ity, Gender, and Culture. En español: La casa de la Mema, México, UNAM,
bajo un modo de la arbitrariedad -corno dicen los que se rehúsan 411 2008.

~
. 376 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS
~
CÓMO REDEFINIR GÉNERO, SEXUALIDAD AMPLIADA Y SEXUACIÓN ...
3n

y sobre todo jóvenes homosexuales afeminados. El trabajo realizad realizadas por la cultura respecto a aquello que corresponde asumir
por Annick Prieur, la investigadora que nos permite el acceso al lllate~ COJilº conducta social en conc?rdanci~ ~on el sexo biológico. Estas
rial, da cuenta de la dificultad para articular estas cuestiones relativas tribuciones son del orden social y pohoco, y corresponden a lo que
sexualidad, género y sexuación, en razón de la estrechez de la hipan¡~ ;einos den?~nado ,,~el orden de la ~'~roducc~ón de s"?bjetividad",
ción mas~o-femenino que no pe~te dar cuen~a de estos modos odos histonco-políocos de producc1on de SUJetos sociales.
de la sexualidad: homosexuales masculinos y femerunos. Por ejemplo IP El segundo se caracteriza por el lanzamiento precoz a la sexualidad
la denominación de "jotas" -versión femenina de "joto" (una fo~ ·ta1, intromisionada por el adulto que genitaliza el momento de
equivalente a "trolo") para las mujeres homosexuales. ~brimiento y fascinación por la diferencia anatómica. En este se-
Se trata de un joven llamado Martín -Marta, en la actualidad- gundo tiempo podemos decir, siguiendo a Freud, que por regla general
quien relata que desde su primera infancia se siente atraído por los Jadiferencia anatómica-que él denomina etapa fálica- anticipa a nivel
roles femeninos (trastorno, en este caso, de género): "Yo jugaba a la representacional la fase genital, que tendrá lugar en el mome~to de la
muñeca, y quería hacer siempre de mamá. Tenía ya esta tendencia, pubertad. En el caso de Martín/Marta, la genitalidad produce un abro-
me gustaban las muñecas, las adoraba. Para Navidad recibía un re- dwniento precoz entre enigma de la diferencia y goce genital antici-
galo, un autito o un camión. Entonces, durante un momento, jugaba pado, que fija el modo de evolución de toda la constitución psicosexual.
con mis autitos, pero lo que me interesaba eran las muñecas de mi Vayamos ahora a un tercer tiempo: se constituye cuando, al lle-
hermana". Este trastorno de género, anterior a la diferencia, se en- gar al colegi~, sus compañeros y profesores si~ifican este _mod? de
garza luego con la curiosidad por los genitales: "Me gustaba ver a los dección gerutal, lo que establece un anudarmento entre idenodad
varones hacer pipí[ ... ] lo que más me fascinaba era ver a los adultos y deseo sexual: "Ellos me llamaban puto, incluso los profesores. Yo
en la sala de baño, ver su aparato. Ya tenía yo esta ... eso ... lo que me decía que no, porque tenía terror de que se lo dijeran a mis padres".
llevaría a la homosexualidad. Y no lo lamento. Pero lo que ocurrió, Expulsado de la escuela por sus inclinaciones sexuales, se produce el
es que antes de que yo quisiera hacerlo, se me forzó a hacerlo. Un siguiente movimiento.
vecino me forzó a hacer el amor con él. .. yo tenía 6 años". Ante la Cuarto tiempo: descubre otros homosexuales, en este caso, tra-
pregunta, realizada por la entrevistadora, acerca de si él creía que vestís. "Yo creía que eran mujeres, pero alguien me dijo: 'No, son
el vecino había notado aspectos feminizados en él antes de tener hombres vestidos de mujeres'. Yo no lo podía creer, pero me dije:
relaciones sexuales responde: "Sin duda. ¿Pero yo qué sé? Imagino 'Si son hombres, entonces puedo ir con ellos, ser como ellos, quiero
que él había notado que tenía tendencias homosexuales. Tal vez él parecerme a una mujer'. Entonces ellos me sostuvieron, me ayuda-
lo notó, o tal vez era precisamente un perverso, uno de esos que les ron". En este momento, el travestismo es el modo de acceder a la
gusta hacer el amor con chicos, y que hacen de ellos homosexuales, relación con un hombre a partir de la asunción de una identidad fe-
incluso si no tienen tales tendencias". menina. El deseo de vestirse de mujer no aparece en la infancia, solo
El trastorno de identidad -cuya causa desconocemos, en razón el deseo de poseer los objetos que tienen las mujeres -no es difícil, a
de que la entrevista no está tomada bajo un modo psicoanalítico sino partir de otros desarrollos que ya hemos iniciado, sospechar que se
sociológico y, en particular, constructivista- aparece precozmente. trata de obtener algo del orden del padre a partir de asumir el lugar
Se trata de un deseo por los objetos femeninos, un deseo de ser de la niña-; es notable que la curiosidad se -establezca con el pene,
mujer, antes de que ello represente algo desde el punto de vista de la que 51uiera ver cómo son los penes de Otros hombres.
sexualidad genital. Luego, sobre esto, se impone el abuso, y el abuso Ultima etapa: Martín, asumido definitivamente como Marta, de-
inscribe un modo de goce que el niño no ha escogido; no porque no cide abandonar la ropa masculina y devenir mujer a través del inten-
pudiera escogerlo a posteriori, sino porque es "anticipado", por el to de una cirugía. Sin embargo, es acá donde se plantea el conflicto,
adulto, y es en este movimiento donde se forja algo del orden de la él continúa considerándose homosexual, no mujer:
articulación trastorno de género/elección de objeto sexual.
Señalemos, entonces, varios tiempos: uno, relativo al trastoca- Siento mucho orgullo. Soy un homosexual, pero sé que he
miento de la identidad de género, entendido como las atribuciones devenido casi una mujer. Quiero decir físicamente, todo, mi

l
.,--·'
378 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS
...,..,. CÓMO REDEFINIR GÉNERO, SEXUALIDAD AMPLIADA Y SEXUACIÓN ...
379

cara, mi cuerpo. Soy una mujer, ¿no? Eso no quiere d .


. . h ecir Entre la biología y el género, el psicoanálisis ha introducido la
que, para ser una rnu1er, yo renuncie a ser un omoseXUal.
Es porque tengo miedo de la gente que me camuflo en Ill sexuaJ.idad en ~us dc_:>s f~:>nnas: pulsional Y. de objeto, que no se _r~­
du en ni a la biologia ni a los modos dormnantes de representacion
jer. Pero en mí mismo, estoy orgulloso de ser homosexu:t
Porque he oído decir que muchos homosexuales han sid
~ sino que so?, precisamente, los que hacen entrar en confüc;o
gente importante en la historia, ¿verdad? Escritores, Pint:
~enunciado~ atribu?-vos con l~s ~ales se pretende una regulacion
res ... Entonces, sí, se puede estar orgulloso. 51·eIDpre ineficiente, siempre al hrmte.
Como ven, primero tiene un trastorno de género; después es abu-
do· luego se hace homosexual; después, travestí, y termina operán-
Su discurso no es muy distinto del de todas las otras minorías qu
apelan a las realizaciones del estamento para revalorizar su posició:
~' para convertirse en mujer. Es decir que la transformación de la
icfenódad consiste en intentos reequilibrantes a lo largo de la vida por
Einstein, Freud, Salk ... Todos los judíos comparten, de uno u otro
articular una posición con menos conflicto y menos contradictoria.
modo, sus logros, así corno Martín/Marta quiere compartir los de
pero el trastorno de género no derivó directamente en un transexua-
Jean Genet, Foucault, Bacon, Osear Wilde, que lo salvan del despre.
fÍSDlO, en ese caso, sino que tuvo que atravesar'una serie de vicisitudes.
cio y la marginación.
Me parece muy interesante esta cuestión porque hace a aspectos
Cada uno de los elementos presentes en este somero material
no pensados de la relación con el cuerpo. Quiero introducir un pe-
da cuenta de que la identidad sexual, los rasgos atribuidos al género
queño ejemplo q':1e ya no es de travesti~-?'1º y transexualisrno sino un
la elección sexual de objeto, la curiosidad fálica, el goce genital, n~ caso clínico relacionado con esta cuestton ...
forman parte de un continuo ni se manifiestan en una línea de articu-
lación por sumatoria, o que dependa uno del otro. Cada uno de ellos
Intervención: Quería comentar un ejemplo de una transe:xual que
debe ser remitido a sus propias determinaciones, cada uno juega como
en el tribunal planteó algo realmente muy interesante. Ella dice que
causa eficiente en la adquisición del otro, pero sin que ello implique
que se puedan ordenar genéticamente. cuando tenía 6 o 7 años, jugando con unas amiguitas se sacan la ropa.
Ella descubre la diferencia anatómica y le parece terrible; a partir
de ahí odia a la madre. Cómo podía ser que ella no fuera como las
La génesis de la sexualidad debe ser amigas.
construida por aprés-coup.
Porque era un nene que fue criado como nena y tenía un pene.
Algunas conclusiones se imponen, al final de estas observaciones:
si hay génesis de la sexualidad, esta génesis debe ser construida por Intervención: Tal cual.
aprés-coup, guardándonos muy bien, los analistas, de establecer un
exceso de generalización respecto a causas y consecuencias. La iden- Entonces ella descubre la diferencia anatómica. Esto es extraor-
tidad de género no basta para recubrir la identidad sexual, en tanto dinario, maravilloso ...
prioriza los modos histórico-sociales de producción de subjetividad.
insuficientes para dar cuenta de las formas de articulación del deseo Intervención: Lástima que le contestaron con el derecho natural.
que se genera en la intersección entre los sistemas psíquicos. Los
estudios de género deben entonces encontrar su lugar preciso, como ¿Qué le contestaron?
parte del sistema ideológico-representativo que intenta una biparti·
ción representacional respecto a los sexos biológicos, pero en modo . Intervención: Con el derecho natural. Porque era por un cambio
1
alguno puede retroceder el psicoanálisis ante la afirmación realizada de nombre. Se había operado en Chile.
por quienes propician el sexo del lado de la biología y el género, del
lado de la representación. 1
1 Es extraordinario porque ahí, muy claramente la madre instituye
1 el género y un día esta niña descubre que su anatomía es diferente.

i
_j_
r:
380 LAS TEORÍAS SEXUALES EN PSICOANÁLISIS
~ CÓMO REDEFINIR GÉNERO, SEXUAUDAD AMPUADA Y SEXUACJÓN...
381

Bueno, ahí tenemos un caso en que la cuestión identitaria fue defi 'cter fantasmático y la posibilidad de que el propio cuerpo sea
nida desde el proyecto indentificatorio, que es diferente al caso - 11
Cl[laüsroo tiempo el cuerpo del otro -por eso lo relaciono con la
traje. Porque cuando ella se saca la ropa y nota que tiene un ~ I ~ón del transexualismo-, que en esta mujer se está jugando no
descubre que su anatomía es distinta porque ya fue educada co ¡ ~ente la pérdida de un interior sino una envoltura y el lugar
niña. Entonces, no se trata de que hubo un error en la natural: ~e ella se aloja, se produce esta angustia infinita, que no tiene
sino que se debe ver con qué representaciones se articula eso.~ f1'! V"er con el narcisismo en términos de pérdida de un bastión de la
caso marca perfectamente las variables, porque no es una psiCOsis iáJinidad sino de enclave primario de constitución. Por eso me pa-
lo que estás trayendo. En realidad ella se inscribe en una legalidad aeóa interesante traerlo, para que se entienda que las formas en que
primaria en la que es instituida como mujer antes de que sepa lejnega el cuerpo están relacionadas con los modos en que el sujeto
qué corresponde lo masculino y lo femenino desde el punto de~ ,eposiciona frente a su interior, a veces como si fuera un exterior. O
anatómico. Es decir que no se rehúsa a ninguna legalidad sino que de su exterior como si fuera una piel que lo constituye, en el caso
se instituye en una legalidad. Quien rehúsa la legalidad biológica es ddtraDSexualismo. O, en este caso, algo que la protege.
sw madre, que no acepta que ella sea un varón. Al mismo tiempo es Nos vemos en el próximo encuentro.
interesante que esta madre no ambivalente no constituye una bi;a
psicótica sino una hija transexual. La tenía clara, es extraordinario
esto. Entonces, digo esto para las concepciones pecaminosas en psi-
coanálisis en que a mayor pecado, mayor locura. No es verdad. A
veces, a mayor locura, mayor salud, depende. En este caso se ve cla-
ramente que la madre, en la medida en que no dudó, constituyó una
transexual y no una psicótica, o lo que fuera.
Cuento brevemente un caso clínico porque me parece interesan-
te. Es un ejemplo que no tiene que ver con el travestismo ni con el
transexualismo sino con la representación fantasmática del propio
cuerpo. Se trata de una mujer que hace un tiempo padeció una extir-
pación de útero y que me viene a consultar en un estado de mucha
angustia. Le han pasado varias cosas en el análisis en el que estaba
pero, entre otras, aparece un intento permanente del analista de re-
mitirla a lo real de la edad y del envejecimiento del cuerpo y de su
narcisismo como intolerancia frente a esto que le ocurrió. A medida
que voy viendo algunas cosas que ella me cuenta en la entrevista, me
doy cuenta de que es una mujer que viene de un estado de carencia
primaria muy importante. Su útero no fue solamente el lugar donde
se instalaron los hijos sino la propia membrana en la que ella se alojó
durante años. Para ella, la pérdida del útero no es la pérdida de un
órgano de reproducción sino de un órgano de "piel", de protección.
Y, en la medida en que ella lo pierde y el analista no se da cuenta,
se produce una expulsión de los modos en que la defensa se había
organizado como un modo de auxilio, o de envolturas que estaban
en el interior de su propio cuerpo. Además es una mujer de 40 años
-quiero aclarar-, no se trata de una mujer que está envejeciendo,
es joven. Pero, en la medida en que el analista nunca entiende d

1
__J.__

También podría gustarte