Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Departamento de Música
Cátedra: ANÁLISIS Y MORFOLOGÍA MUSICAL I
Profesora Titular: María Inés García
En esta propuesta nos estamos ubicando en un análisis estructural, un análisis del nivel
inmanente, es decir, del objeto mismo y su organización interna, el cual debe luego
complementarse con un análisis del contexto, que contemple los códigos y rasgos de
una época histórica, de un estilo y aún códigos personales del compositor.
2. Motívico-temática.
4. Funciones formales.
Para una mejor discriminación en el análisis, será necesario observar estas áreas por
separado, para luego ver sus interrelaciones. Esta diferenciación de las áreas no implica
una concepción de jerarquías ni de compartimentos separados, ya que estos aspectos
interactúan entre sí permanentemente.
En esta área el primer paso del análisis consiste en definir el lenguaje en el cual ha sido
compuesta la obra.
En una obra tonal, el código de relaciones tonales sirve de hilo conductor del discurso
musical: sobre él se organizan las relaciones de tensión y reposo, se construye la
sintaxis y se apoyan las funciones formales. Por ello debemos definir:
En una obra tonal no funcional observaremos los campos de polarización tonal que se
producen por medios no funcionales, definiendo esos medios.
El modo general.
Las cadencias interiores y la cadencia final.
Interválica usada, melódica y armónica y tratamiento de consonancias y disonancias.
El conjunto más pequeño con sentido musical es el motivo. Es la unidad mínima con
sentido musical que genera elaboraciones. Es el elemento mínimo que nos permite
reconocer todo un trozo musical. Generalmente, y especialmente en músicas tonales, el
motivo genera el tema de una obra, que es una construcción melódico-rítmica que
caracteriza la obra. Por ello es importante determinar los rasgos distintivos propios de
un motivo. El tema está presentado generalmente por medio de una unidad sintáctica
destinada a hacerlo comprensible y puede estar constituido por uno o varios motivos.
En música tradicional, definir los rasgos distintivos de un motivo suele ser suficiente
con una descripción de los rasgos rítmicos y de los rasgos melódicos. En música del
siglo XX hay otros rasgos que caracterizan a los motivos y que a veces reemplazan
incluso a los rasgos melódicos, como el factor tímbrico, la dinámica, el modo de ataque
y el movimiento en el registro de alturas.
- simple : si contiene un solo acento (por lo tanto, una sola célula o figura)
- compuesto: si contiene más de un acento (más de una célula)
♦ Rasgos rítmicos:
♦ Rasgos melódicos:
Tendremos en cuenta:
- dirección de los intervalos: si asciende, desciende o ambas direcciones
simultáneamente
- repetición de notas
- melodía por grados conjuntos (giros escalísticos)
- melodía acórdica (acorde desplegado)
- contenido interválico
Una vez descripto el motivo podemos observar las modificaciones que sufren sus rasgos
a lo largo de la obra, tanto en sus rasgos rítmicos como melódicos. Por otro lado,
pueden producirse transferencia de rasgos entre dos células o figuras de un mismo
motivo, como también entre motivos diferentes. Es importante la diferenciación de
rasgos rítmicos y rasgos melódicos, puesto que las modificaciones pueden producirse
independientemente entre unos y otros rasgos.
Unidades sintácticas.
Oración: enunciado musical con sentido completo, constituido a nivel sintáctico por
una o más frases. Es un segmento del discurso que cierra una idea musical; por eso su
determinación debe tener en cuenta también los aspectos temáticos.
Frase: unidad sintáctica mínima completa. A su vez la frase puede estar segmentada en
miembros de frase, unidades sintácticas menores interdependientes.
Esta clasificación pretende describir los rasgos distintivos de tipos de estructuras que se
presentan con cierta frecuencia, pero no siempre nos encontramos con estas estructuras
paradigmáticas que contienen todos los rasgos mencionados. En muchos casos
hallaremos combinaciones de rasgos que será necesario analizar cuidadosamente para
comprender la naturaleza de la obra musical sin pretender reducirla a alguno de estos
tipos standard.
Por otro lado, estos tipos de estructuración se pueden encontrar en diferentes niveles
estructurales. Lo más habitual es que los determinemos al nivel de la estructura
sintáctica de la oración, pero podemos encontrarlos a niveles más bajos, a nivel de las
frases, como también a niveles más altos donde dos o más oraciones pueden asociarse y
constituir uno de los tipos de organización estructural señalados anteriormente. Un
ejemplo de ello es el doble período, donde dos oraciones -generalmente evolutivas-
asociadas presentan las características de la estructuración en período: simetría temática
y complementación de cadencias (ahora entre las oraciones).
Modificaciones en la estructura
♦ Trunquez: o unidad trunca. Se detiene el fluir del discurso o se desvía del modelo
esperado.
♦ Extensión: prolongación de la estructura por repetición del fragmento final.
♦ Ampliación: agregado de un elemento, al comienzo, en el medio o al final de una
estructura periódica o reiterativa, o prolongación temporal de sus elementos. Supone
la comparación con un modelo antes escuchado.
♦ Contracción: reducción temporal o del número de elementos en una estructura ya
escuchada o en una estructura de fuerte tendencia periódica.
♦ Elisión: un mismo elemento es a su vez final de un segmento y comienzo del otro.
Llamaremos funciones formales a los pasos o etapas del devenir del discurso musical,
que van sosteniendo la atención del oyente, ayudándolo a reconstruir la forma de la obra
a lo largo de su desarrollo temporal. Las funciones formales transmiten los picos de
tensión, los momentos de reposo, la preparación para la nueva información (las nuevas
ideas), los tramos en que esta información es suministrada, los diversos aspectos que esa
información contenía en potencia, etc. El discurso musical anuncia a través de ellas las
etapas de su desarrollo.
♦ Conclusiva: anuncio del final del discurso. Puede presentar las etapas de
liquidación, cadencia y coda. La liquidación tiene por función dar por terminado el
tratamiento del tema por repetición de sus rasgos o por una paulatina disolución de
los mismos.
Algunas funciones formales son imprescindibles, ya que sin ellas no hay discurso
musical: la expositiva y la conclusiva. Las otras aparecerán o no según el tipo y el
grado de complejidad de la obra.
Además de ello, más allá de las “formas históricas”, es decir de los prototipos que se
dieron a lo largo de la historia de la música, toda obra musical tiene forma, responda a
un determinado prototipo o no; y si responde, esa obra de todos modos tendrá
características particulares que darán un mayor o menor acercamiento al esquema
formal, tendrá su propia configuración de ese esquema.
1
Ver bibliografía indicada.
Cátedra: Análisis y Morfología Musical I Página 8 de 11
Profesora Titular: María Inés García
Un análisis actual, orientado hacia el análisis sintáctico-temático, tiende por lo tanto a
estudiar la naturaleza única de una obra en particular, y luego definirla respecto del
esquema más próximo.
♦ Introducción
♦ Transición
♦ Coda
Cuando en una obra estos tres elementos –o introducción y coda- presentan el mismo
material temático, se suelen designar como preludio, interludio y postludio.
En música tonal, normalmente el estudio de las áreas citadas nos provee una
comprensión cabal de la obra. Pero en la música donde lo armónico, y por lo tanto lo
melódico, no son los aspectos estructuradores, otros parámetros pasan a tener primera
importancia en la segmentación del discurso y su organización. Estos parámetros,
también presentes e importantes en la música tonal, son en ésta más bien de segundo
orden, y en todo caso refuerzan lo que salta a la vista desde el punto de vista armónico,
sintáctico y temático.
1. La textura
Se refiere a la relación entre las diferentes líneas que constituyen el tejido de la obra
musical. Suelen ser un factor importante en la definición de la forma y la sintaxis. Hay
diversas clasificaciones de texturas, entre las que podemos destacar:
Cátedra: Análisis y Morfología Musical I Página 9 de 11
Profesora Titular: María Inés García
La clasificación tradicional de texturas las divide en monodía, homofonía y polifonía.
Copland señala en su texto citado previamente: “Hay tres especies de textura musical: la
monofónica, la homofónica y la polifónica”.
- monodía
- homofonía (igual ritmo y melodía)
- polifonía vertical (igual ritmo y distinta melodía)
- polifonía vertical con jerarquización de parte superior
- polifonía horizontal (distinto ritmo y melodía)
- melodía acompañada
- polifonía oblicua.
2. Análisis fenoménico
En ciertas obras del siglo XX, en las que el sonido ha dejado de cumplir el rol de ser
“portador” del discurso musical para convertirse en protagonista y constructor de la
estructura, este es uno de los aspectos más importantes del análisis.
3. El texto
4. La coreografía
Copland, Aaron
1989 Cómo escuchar la música. Bs. As.: Fondo de Cultura Económica,
Colección Biblioteca Actual.
Green, Douglas M.
1964 Form in Tonal Music. New York: Holt, Rinehart and Winston.
Kröpfl, Francisco
1987/1988 Apuntes de clases particulares.
Kühn, Clemens
1992 Tratado de la forma musical. Barcelona: Labor.