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MONOGRAFÍA LOS MAYAS

1. Introducción.
En una vasta y rica región de América, el pueblo maya creó una de las más
originales y grandiosas civilizaciones antiguas. Los mayas no constituyen a
un grupo homogéneo, sino un conjunto de etnias con distintas lenguas,
costumbres y realidades históricas, pero que comparten rasgos que nos permiten
integrarlas en una unidad cultural. A la vez, esta unidad forma parte de otra mayor,
la cultura mesoamericana.
En este trabajo podemos observar los tres grandes períodos de la trayectoria
histórica mayense, los cuales son: preclásico, clásico y postclásico.
También se ha hablado mucho de la "desaparición" de los mayas, pero esto
constituye un error, ya que lo que desapareció fue su libertad y la gran cultura que
crearon en la época prehispánica; pero los hombres mayas con sus costumbres
cotidianas y buena parte de todas sus creencias permanecen aun en sus regiones
originales, sustentados en su misma concepción ancestral del mundo y la vida.
2. Ubicación geográfica
La cultura maya cubrió el territorio sureste de lo que es hoy la República mexicana
y que corresponde a los estados de Yucatán, Campeche, Tabasco, Quintana Roo
y la zona oriental de Chiapas, lo mismo que la mayor parte de Guatemala,
Honduras, El Salvador y Belice, cubriendo una extensión territorial que varía, de
acuerdo con los diversos arqueólogos e historiógrafos, entre 325,000 a 400,000
Km2, teniendo por límite el Golfo de México y mar de las Antillas; el océano
Pacífico; el río Grijalva (conocido en Guatemala como río Usumacinta), en el
estado de Tabasco y el río Ulúa en Honduras y el río Lempa en El
Salvador actuales.
Se les dividió para su estudio en tres grandes regiones o zonas naturales:
1ª - Zona Norte:
Que incluye los actuales estados de Yucatán, en su totalidad y la mayor parte de
Campeche y Quintana Roo. En tal territorio el terreno es pedregoso y semiárido
con partes bajas donde predomina una vasta planicie calcárea con vegetación de
monte bajo, con clima regularmente seco y cálido en demasía. No hay ríos de
superficie, pero el terreno es permeable y el agua se filtra rápidamente, formando
corrientes subterráneas que se abren en bocas naturales llamadas "cenotes".
2ª - Zona Central:
Cuenta desde el río Usumacinta o Grijalba en el actual estado de Tabasco, hasta
la parte oriental de Honduras, incluyendo también el Petén guatemalteco, Belice y
parte de Chiapas. Tiene un clima caliente y húmedo, con lluvias abundantes en la
temporada. La vegetación es de tipo tropical.
3ª - Zona Sur:
Comprende las tierras altas y la faja costera del océano Pacífico, con parte de
Chiapas, Guatemala y El Salvador. El clima es templado y frío en las serranías,
con zonas calientes y húmedas, pobladas de densos pinares y cipreses en su
mayoría. Hay alturas que sobrepasan los 1500 metros sobre el nivel del mar.
https://www.monografias.com/trabajos10/maya/maya.shtml
MONOGRAFÍA LOS MAYAS

La civilización maya habitó una vasta región denominada


Mesoamérica, en el territorio hoy comprendido por cinco estados del
sureste de México que son, Campeche, Chiapas, Quintana Roo,
Tabasco y Yucatán; y en América Central, en los territorios actuales de
Belice, Guatemala, Honduras, y El Salvador, con una historia de
aproximadamente 3.000 años.
Los mayas hicieron grandes e impresionantes construcciones desde el
Preclásico medio y grandes ciudades como Nakbé, El Mirador, San
Bartolo, Cival, localizadas en la Cuenca del Mirador, en el norte del
Petén, y durante el Clásico, las conocidas ciudades de Tikal,
Quiriguá,Palenque, Copán, Río Azul, Calakmul, Comalcado y muchos
otros sitios en el área. Se puede clasificar como un imperio, pero no se
sabe si al momento de colonizar impusieron su cultura o si fue un fruto
de su organización en ciudades-estado independientes cuya base
eran la agricultura y el comercio. Los monumentos más notables son
las pirámides que construyeron en sus centros religiosos, junto a los
palacios de sus gobernantes y los palacios, lugares de gobierno y
residencia de los nobles, siendo el mayor encontrado hasta ahora el
de Cancuén, en el sur del Petén, muchas de cuyas estructuras
estaban decoradas con pinturas murales y adornos de estuco. Otros
restos arqueólicos importantes incluyen las losas de piedra tallada
usualmente llamadas estelas (los mayas las llamaban Tetún, o “tres
piedras”), que describen a los gobernantes junto a textos
logográficos que describen sus genealogías, victorias militares, y otros
logros. La cerámica maya está catalogada como de las más variadas,
finas y elaboradas del mundo antiguo.
Los mayas participaban en el comercio a larga distancia en
Mesoamérica, y posiblemente más allá. Entre los bienes de comercio
estaban el jade, el cacao, el maíz, la sal y la obsidiana.
https://blogs.ua.es/losmayas/introduccion/
La civilización Maya fue la
forma de expresión social
política e ideológica de uno
de los pueblos más
interesantes de la América
Prehispánica. Sus
manifestaciones abarcan
todas las técnicas y
materiales que podamos
imaginar y se extiende en el
tiempo durante
más de dos mil años.
Grupo de pueblos indígenas
mesoamericanos
perteneciente a la familia
lingüística maya o mayense,
que
tradicionalmente han
habitado en los estados
mexicanos de Yucatán,
Campeche, Tabasco y
Chiapas, en la mayor
parte de Guatemala y en
regiones de Belice y
Honduras. El pueblo más
conocido, el maya
propiamente dicho, que da
nombre a todo el grupo,
ocupa la península de
Yucatán.
El periodo de mayor auge
fue el clásico (300-900 d.C.),
después sobrevino el
llamado colapso maya de las
tierras
bajas del Petén, el abandono
de los centros más
importantes y el resurgir de
la civilización más al norte,
en la
península de Yucatán,
durante el periodo
posclásico (900-1500 d.C.).
El arte maya hunde sus
raíces en la cultura
olmeca
(1200-400 a. C.) recibiendo
posteriores influencias
de
Teotihuacán
y Tula. Nos encontramos,
pues, ante un arte
mesoamericano que
participa de sus mismos
patrones y
concepciones.
Desde el siglo XVI
laarquitectura mayaha
llamado poderosamente la
atención de los occidentales.
Sus pirámides, templos y
palacios habían sido
abandonados tiempo atrás,
pero la selva y la falta de
información actuaron como
acicates para sus primeros
estudiosos.
Los materiales de que
dispusieron los arquitectos
mayas fueron la piedra
caliza para los sillares de
revestimiento y tierra,
cascajo y lajas de piedra p
el relleno de los núcleos y
basamentos, obteniendo
cemento para la sujeción del
carbonato cálcico. La
madera de caoba y zapote
proporcionaba lo
dinteles de las puertas, los
refuerzos para las bóvedas,
así como andamios,
escaleras y rodillos que
facilitaban el trabajo.
El logro técnico más
característico fue la falsa
bóveda, que no es otra cosa
que dos muros que se juntan
e
parte superior por
aproximación de hileras de
piedras. El estuco se usó
para enlucir pavimentos,
paredes
esculturas, y se obtenía
mezclando la cal con agua
en una solución de goma
vegetal. El enorme peso de
bóvedas y las cresterías
(muros de mampostería que
se alzaban sobre ellas)
obligaba a aumentar el
groso
de las paredes y a reducir
los vanos.
Los estilos más importantes
son los del Petén (Tikal,
Uaxactún), caracterizado por
imponentes masas
frontales suavizadas por la
altura de los paramentos y
santuarios macizos, de
planta irregular, con una so
puerta; el valle del Motagua
(Copán, Quiriguá) se hace
singular por la utilización de
sillares de traquita, la
abundancia de esculturas y
la profusa decoración de los
frisos; la región del
Usumacinta (Yaxchilán, Piedr
Negras) posee inmensas
acrópolis, y destaca por la
decoración en estuco y la
sensación de ligereza que l
imprimen sus amplios
pórticos y las figuras de las
fachadas; la zona Puuc
(Uxmal, Kabah, Sayil) se
caracteriza por el empleo de
columnas, los zóca
sencillos, las paredes lisas y
los frisos enormes y
decorados profusamente con
mosaicos de piedra; y en la
región Chenes (Hochob,
Dzibilnocac)
decoraban toda la superficie
de las fachadas con
mascarones de piedra.
Por último, el estilo Río Bec
incluye torres ficticias de
mampostería revestida
parecidas a las auténticas de
Tikal.
La escultura incluye una gran
variedad de
manifestaciones: altares,
estelas, lápidas, dinteles
zoomorfos, tableros,
tronos, jambas, columnas,
figuras de bulto y
marcadores de juego de
pelota.
Sus principales
características son la
utilización del relieve, la
monumentalidad en el
tratamiento de los temas, el
uso
del color en el acabado
superficial, la dependencia
del ámbito arquitectónico, la
profusión de signos
caligráficos y
ornamentales, la relevancia
de las líneas curvas y el
carácter abigarrado y
escenográfico de la
composición.
Las estelas conmemorativas
son magníficos trabajos
entre los que destacan las
de Tikal, Copán, Quiriguá y
Cobán.
Se trata de enormes lajas de
piedra clavadas
verticalmente en el suelo, en
las que los escultores mayas
tallaron en
bajorrelieve imágenes del
jubileo de sus reyes.
Se erigían al finalizar un
periodo temporal concreto,
cada cinco y cada veinte
años, y en ellas, mediante
jeroglíficos,
se narraban los
acontecimientos más
importantes del reinado.
Excelentes son los dinteles
figurativos que flanqueaban
las puertas de los palacios y
templos de Yaxchilán, los
altares de Piedras Negras y
los
zoomorfos de Quiriguá,
aunque quizá la cumbre de
la escultura maya sean los
paneles de los edificios de
Palenque.
La civilización Maya fue la
forma de expresión social
política e ideológica de uno
de los pueblos más
interesantes de la América
Prehispánica. Sus
manifestaciones abarcan
todas las técnicas y
materiales que podamos
imaginar y se extiende en el
tiempo durante
más de dos mil años.
Grupo de pueblos indígenas
mesoamericanos
perteneciente a la familia
lingüística maya o mayense,
que
tradicionalmente han
habitado en los estados
mexicanos de Yucatán,
Campeche, Tabasco y
Chiapas, en la mayor
parte de Guatemala y en
regiones de Belice y
Honduras. El pueblo más
conocido, el maya
propiamente dicho, que da
nombre a todo el grupo,
ocupa la península de
Yucatán.
El periodo de mayor auge
fue el clásico (300-900 d.C.),
después sobrevino el
llamado colapso maya de las
tierras
bajas del Petén, el abandono
de los centros más
importantes y el resurgir de
la civilización más al norte,
en la
península de Yucatán,
durante el periodo
posclásico (900-1500 d.C.).
El arte maya hunde sus
raíces en la cultura
olmeca
(1200-400 a. C.) recibiendo
posteriores influencias
de
Teotihuacán
y Tula. Nos encontramos,
pues, ante un arte
mesoamericano que
participa de sus mismos
patrones y
concepciones.
Desde el siglo XVI
laarquitectura mayaha
llamado poderosamente la
atención de los occidentales.
Sus pirámides, templos y
palacios habían sido
abandonados tiempo atrás,
pero la selva y la falta de
información actuaron como
acicates para sus primeros
estudiosos.
Los materiales de que
dispusieron los arquitectos
mayas fueron la piedra
caliza para los sillares de
revestimiento y tierra,
cascajo y lajas de piedra p
el relleno de los núcleos y
basamentos, obteniendo
cemento para la sujeción del
carbonato cálcico. La
madera de caoba y zapote
proporcionaba lo
dinteles de las puertas, los
refuerzos para las bóvedas,
así como andamios,
escaleras y rodillos que
facilitaban el trabajo.
El logro técnico más
característico fue la falsa
bóveda, que no es otra cosa
que dos muros que se juntan
e
parte superior por
aproximación de hileras de
piedras. El estuco se usó
para enlucir pavimentos,
paredes
esculturas, y se obtenía
mezclando la cal con agua
en una solución de goma
vegetal. El enorme peso de
bóvedas y las cresterías
(muros de mampostería que
se alzaban sobre ellas)
obligaba a aumentar el
groso
de las paredes y a reducir
los vanos.
Los estilos más importantes
son los del Petén (Tikal,
Uaxactún), caracterizado por
imponentes masas
frontales suavizadas por la
altura de los paramentos y
santuarios macizos, de
planta irregular, con una so
puerta; el valle del Motagua
(Copán, Quiriguá) se hace
singular por la utilización de
sillares de traquita, la
abundancia de esculturas y
la profusa decoración de los
frisos; la región del
Usumacinta (Yaxchilán, Piedr
Negras) posee inmensas
acrópolis, y destaca por la
decoración en estuco y la
sensación de ligereza que l
imprimen sus amplios
pórticos y las figuras de las
fachadas; la zona Puuc
(Uxmal, Kabah, Sayil) se
caracteriza por el empleo de
columnas, los zóca
sencillos, las paredes lisas y
los frisos enormes y
decorados profusamente con
mosaicos de piedra; y en la
región Chenes (Hochob,
Dzibilnocac)
decoraban toda la superficie
de las fachadas con
mascarones de piedra.
Por último, el estilo Río Bec
incluye torres ficticias de
mampostería revestida
parecidas a las auténticas de
Tikal.
La escultura incluye una gran
variedad de
manifestaciones: altares,
estelas, lápidas, dinteles
zoomorfos, tableros,
tronos, jambas, columnas,
figuras de bulto y
marcadores de juego de
pelota.
Sus principales
características son la
utilización del relieve, la
monumentalidad en el
tratamiento de los temas, el
uso
del color en el acabado
superficial, la dependencia
del ámbito arquitectónico, la
profusión de signos
caligráficos y
ornamentales, la relevancia
de las líneas curvas y el
carácter abigarrado y
escenográfico de la
composición.
Las estelas conmemorativas
son magníficos trabajos
entre los que destacan las
de Tikal, Copán, Quiriguá y
Cobán.
Se trata de enormes lajas de
piedra clavadas
verticalmente en el suelo, en
las que los escultores mayas
tallaron en
bajorrelieve imágenes del
jubileo de sus reyes.
Se erigían al finalizar un
periodo temporal concreto,
cada cinco y cada veinte
años, y en ellas, mediante
jeroglíficos,
se narraban los
acontecimientos más
importantes del reinado.
Excelentes son los dinteles
figurativos que flanqueaban
las puertas de los palacios y
templos de Yaxchilán, los
altares de Piedras Negras y
los
zoomorfos de Quiriguá,
aunque quizá la cumbre de
la escultura maya sean los
paneles de los edificios de
Palenque.
Monografía Los Mayas
los mayas ocuparon la península de Yucatán, actualmente Honduras
y Guatemala. Su origen se remonta probablemente al segundo milenio
a.C., aunque alcanzó su apogeo entre los años 600 y 900 d.C. A pesar
de que vivían en tierras de escaso valor agrícola, crearon
monumentos y centros de ceremonias casi tan impresionantes como
los erigidos en Egipto. La extensión de sus construcciones
ceremoniales es sorprendente, ya que su religión era relativamente
primitiva. También lo era su arquitectura, aunque innegablemente
admirable, comparada con los avances de la época en el resto del
mundo. Inventaron un lenguaje escrito que todavía no se ha logrado
descifrar. En la actualidad se conservan tres códices de la
civilización maya, restos de un elevado número destruido por los
europeos, quienes temían que contuvieran herejías.

Los mayas destacaron en ciencias como las matemáticas y la


astronomía. El conocimiento y la capacidad de predicción del
movimiento de las estrellas y los planetas fue esencial para calcular
su calendario y establecer las fechas de las ceremonias importantes.
Vivían en pequeños poblados que no se conservan, pero se reunían en
los centros para los actos importantes. Los guerreros nobles y los
sacerdotes controlaban la sociedad.

La civilización maya comenzó a decaer en el siglo X, tal vez a causa


de un terremoto o una erupción volcánica en la zona. Muchas de las
construcciones ceremoniales se abandonaron a partir de entonces.
Los guerreros del centro de México invadieron este territorio y se
agruparon en pequeñas comunidades en el bosque pluvial. El último
centro maya sucumbió a manos de los españoles en el siglo XVII,
pero actualmente hay más de dos millones de descendientes mayas
en la península de Yucatán.

La civilización Maya fue la


forma de expresión social
política e ideológica de uno
de los pueblos más
interesantes de la América
Prehispánica. Sus
manifestaciones abarcan
todas las técnicas y
materiales que podamos
imaginar y se extiende en
el tiempo durante
más de dos mil años.
Grupo de pueblos
indígenas mesoamericanos
perteneciente a la familia
lingüística maya o
mayense, que
tradicionalmente han
habitado en los estados
mexicanos de Yucatán,
Campeche, Tabasco y
Chiapas, en la mayor
parte de Guatemala y en
regiones de Belice y
Honduras. El pueblo más
conocido, el maya
propiamente dicho, que da
nombre a todo el grupo,
ocupa la península de
Yucatán.
El periodo de mayor auge
fue el clásico (300-900
d.C.), después sobrevino el
llamado colapso maya de
las tierras
bajas del Petén, el
abandono de los centros
más importantes y el
resurgir de la civilización
más al norte, en la
península de Yucatán,
durante el periodo
posclásico (900-1500 d.C.).
El arte maya hunde sus
raíces en la cultura
olmeca
(1200-400 a. C.) recibiendo
posteriores influencias
de
Teotihuacán
y Tula. Nos encontramos,
pues, ante un arte
mesoamericano que
participa de sus mismos
patrones y
concepciones.
Desde el siglo XVI
laarquitectura mayaha
llamado poderosamente la
atención de los
occidentales. Sus
pirámides, templos y
palacios habían sido
abandonados tiempo atrás,
pero la selva y la falta de
información actuaron como
acicates para sus primeros
estudiosos.
Los materiales de que
dispusieron los arquitectos
mayas fueron la piedra
caliza para los sillares de
revestimiento y tierra,
cascajo y lajas de piedra p
el relleno de los núcleos y
basamentos, obteniendo
cemento para la sujeción
del carbonato cálcico. La
madera de caoba y zapote
proporcionaba lo
dinteles de las puertas, los
refuerzos para las
bóvedas, así como
andamios, escaleras y
rodillos que facilitaban el
trabajo.
El logro técnico más
característico fue la falsa
bóveda, que no es otra
cosa que dos muros que se
juntan e
parte superior por
aproximación de hileras de
piedras. El estuco se usó
para enlucir pavimentos,
paredes
esculturas, y se obtenía
mezclando la cal con agua
en una solución de goma
vegetal. El enorme peso de
bóvedas y las cresterías
(muros de mampostería
que se alzaban sobre ellas)
obligaba a aumentar el
groso
de las paredes y a reducir
los vanos.
Los estilos más
importantes son los del
Petén (Tikal, Uaxactún),
caracterizado por
imponentes masas
frontales suavizadas por la
altura de los paramentos y
santuarios macizos, de
planta irregular, con una
so
puerta; el valle del
Motagua (Copán, Quiriguá)
se hace singular por la
utilización de sillares de
traquita, la
abundancia de esculturas y
la profusa decoración de
los frisos; la región del
Usumacinta (Yaxchilán,
Piedr
Negras) posee inmensas
acrópolis, y destaca por la
decoración en estuco y la
sensación de ligereza que l
imprimen sus amplios
pórticos y las figuras de las
fachadas; la zona Puuc
(Uxmal, Kabah, Sayil) se
caracteriza por el empleo
de columnas, los zóca
sencillos, las paredes lisas
y los frisos enormes y
decorados profusamente
con mosaicos de piedra; y
en la región Chenes
(Hochob, Dzibilnocac)
decoraban toda la
superficie de las fachadas
con mascarones de piedra.
Por último, el estilo Río Bec
incluye torres ficticias de
mampostería revestida
parecidas a las auténticas
de Tikal.
La escultura incluye una
gran variedad de
manifestaciones: altares,
estelas, lápidas, dinteles
zoomorfos, tableros,
tronos, jambas, columnas,
figuras de bulto y
marcadores de juego de
pelota.
Sus principales
características son la
utilización del relieve, la
monumentalidad en el
tratamiento de los temas,
el uso
del color en el acabado
superficial, la dependencia
del ámbito arquitectónico,
la profusión de signos
caligráficos y
ornamentales, la
relevancia de las líneas
curvas y el carácter
abigarrado y escenográfico
de la composición.
Las estelas
conmemorativas son
magníficos trabajos entre
los que destacan las de
Tikal, Copán, Quiriguá y
Cobán.
Se trata de enormes lajas
de piedra clavadas
verticalmente en el suelo,
en las que los escultores
mayas tallaron en
bajorrelieve imágenes del
jubileo de sus reyes.
Se erigían al finalizar un
periodo temporal concreto,
cada cinco y cada veinte
años, y en ellas, mediante
jeroglíficos,
se narraban los
acontecimientos más
importantes del reinado.
Excelentes son los dinteles
figurativos que
flanqueaban las puertas de
los palacios y templos de
Yaxchilán, los altares de
Piedras Negras y los
zoomorfos de Quiriguá,
aunque quizá la cumbre de
la escultura maya sean los
paneles de los edificios de
Palenque.
https://www.taringa.net/+apuntes_y_monografias/los-mayas-historia-resumida_i4yxv

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