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ORIGINAL

Crisis psicógenas no epilépticas y crisis epilépticas: pistas


para un diagnóstico diferencial. Hallazgos de un estudio
colombiano
Esteban Jaramillo-Jiménez, Cristian Vargas-García, Iader Rodríguez-Márquez, Juliana Sandoval-Barrios, María A. Vélez,
Juan F. Álvarez, Norma L. Muñoz, Alex R. Flórez, Mónica Massaro-Ceballos, Marta E. Jiménez-Jaramillo

Introducción. Las crisis psicógenas no epilépticas (CPNE) son cambios paroxísticos en el comportamiento que se asemejan University of Western Australia;
Perth, Australia (C. Vargas-García).
a las crisis epilépticas, aunque no tienen correlación electrofisiológica ni evidencia clínica de epilepsia.
Unidad de Neurofisiología
Objetivo. Comparar las características clínicas y sociodemográficas entre pacientes diagnosticados con CPNE, con y sin (E. Jaramillo-Jiménez, J.F. Álvarez,
N.L. Muñoz, A.R. Flórez, M.E. Jiménez-
epilepsia concomitante. Jaramillo); Departamento de
Neurología (I. Rodríguez-Márquez);
Pacientes y métodos. Estudio transversal de pacientes consecutivamente diagnosticados de CPNE durante un período de 20 Instituto Neurológico de Colombia.
meses. A todos los participantes se les realizó un videoelectroencefalograma (video-EEG). Se compararon las características Universidad CES (E. Jaramillo-
sociodemográficas, clínicas y semiológicas entre los que presentaban y los que no presentaban epilepsia concomitante. Jiménez, M.A. Vélez, J.F. Álvarez,
M. Massaro-Ceballos, M.E. Jiménez-
Resultados. Se incluyó a 65 pacientes, 35 con CPNE (53,9%), y 30 con CPNE y epilepsia (46,1%). La edad mediana en el Jaramillo). Universidad Pontificia
Bolivariana (J. Sandoval-Barrios).
inicio del video-EEG fue de 33 años, y un 70,8% eran mujeres. La edad mediana de inicio de las crisis fue de 16 años. En el Medellín, Antioquia, Colombia.
grupo de CPNE hubo un inicio más tardío (23 años) en comparación con el grupo de CNPE y epilepsia (11 años), pero la
Correspondencia:
diferencia no fue significativa. La proporción de pacientes en terapia con fármacos antiepilépticos fue significativamente
Dr. Esteban Jaramillo Jiménez.
mayor en el grupo con CPNE y epilepsia comparado con el grupo con CPNE. Las características semiológicas más frecuen- Unidad de Neurofisiología.
temente encontradas fueron el inicio gradual de las crisis (69,2%) y una duración de más de dos minutos (63,1%). Departamento de Neurología.
Instituto Neurológico de Colombia.
Conclusión. La variabilidad en los síntomas sugiere un origen no epiléptico de los eventos paroxísticos, los cuales se pre- Calle 55, n.º 46-36. Medellín,
Colombia.
sentan frecuentemente en pacientes con epilepsia.
Palabras clave. Crisis psicógenas no epilépticas. Crisis epilépticas. Electroencefalografía. Epilepsia. Manifestaciones neuro- E-mail:
esteban.jaramillo@neurologico.
lógicas. Trastornos de conversión. org.co

Aceptado tras revisión externa:


26.03.19.

Cómo citar este artículo:


Introducción asociados con una variedad de manifestaciones mo­ Jaramillo-Jiménez E, Vargas-
toras, sensoriales y mentales, que representan una García C, Rodríguez-Márquez I,
Una crisis epiléptica se define como la ocurrencia respuesta experimental o conductual a la angustia Sandoval-Barrios J, Vélez MA,
Álvarez JF, et al. Crisis psicógenas
transitoria de signos y síntomas debidos a una acti­ emocional o social [4]. Generalmente se consideran no epilépticas y crisis epilépticas:
vidad neuronal anormal excesiva o sincrónica en el como un diagnóstico psiquiátrico caracterizado por pistas para un diagnóstico diferencial.
Hallazgos de un estudio colombiano.
cerebro. Una crisis puede clasificarse como epilép­ síntomas físicos y quejas para los cuales no se pue­ Rev Neurol 2019; 69: 145-51. doi:
tica o no epiléptica; esta última incluye las crisis psi­ de identificar un trastorno orgánico [5]. Distinguir 10.33588/rn.6904.2018442.
cógenas no epilépticas (CPNE), las cuales son epi­ entre estas entidades es esencial no solo para pro­ English version available
sodios de movimientos y sensaciones alteradas si­ porcionar un tratamiento adecuado al paciente, si­ at www.neurologia.com
milares a la epilepsia que no son causadas por des­ no también para evitar el costo abrumador asocia­ © 2019 Revista de Neurología
cargas eléctricas anormales en el cerebro, sino por do con un diagnóstico incorrecto [6].
procesos psicológicos [1]. Se ha notificado una incidencia anual de las CPNE
Las CPNE son cambios paroxísticos en el com­ de 1,4-3/100.000 personas y la prevalencia se ha es­
portamiento que semejan crisis epilépticas, aunque timado en 2-33/100.000 personas; hasta en el 20%
no tienen un correlato electrofisiológico o eviden­ de los pacientes se presentan con presuntos ca­sos de
cia clínica de epilepsia. La evidencia sugiere facto­ epilepsia médicamente intratable referidos a cen­
res psicógenos como posibles causas de crisis [2]. tros de epilepsia [7,8]. Estas crisis comienzan típi­
La mayoría de las CPNE se consideran más allá del camente en la segunda o tercera décadas de la vida,
control voluntario del paciente [3]. Dichos episo­ con un predominio del sexo femenino [9]. El 23%
dios de alteración paroxística del autocontrol están de los pacientes con supuestos estados epilépticos

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E. Jaramillo-Jiménez, et al

refractarios tienen un ‘pseudoestado’ epiléptico [10]; Se obtuvo la aprobación para este estudio por
Adicionalmente, la falta de reconocimiento de un parte del comité de ética institucional, y todos los
‘pseudoestado’ epiléptico tiene un potencial riesgo pacientes o cuidadores proporcionaron consenti­
de intubación y su morbimortalidad asociada. miento informado por escrito antes de la monitori­
El electroencefalograma (EEG) es una herramien­ zación por video-EEG.
ta efectiva para identificar una crisis epiléptica. Sin
embargo, no es adecuado para el diagnóstico de Criterios de elegibilidad
CPNE, para las cuales se ha implementado efecti­
vamente el uso del video-EEG. Se ha demostrado Se incluyó a todos los pacientes sospechosos de te­
que la monitorización durante 24 y 144 horas me­ ner CPNE registradas con video-EEG, previamente
jora la precisión diagnóstica en comparación con el confirmados de representar sus eventos habituales.
EEG convencional [11]. El video-EEG prolongado La población estudiada incluyó tanto pacientes adul­
es la prueba de referencia para el diagnóstico de cri­ tos como pediátricos. Se excluyó a los pacientes con
sis epilépticas y CPNE en pacientes resistentes a los eventos sensoriales EEG negativos (p. ej., hormi­
medicamentos, principalmente mediante la corre­ gueo, entumecimiento), ya que los trazados de EEG
lación de cambios electrográficos con eventos clíni­ de superficie pueden no descartar definitivamente
cos, con respecto a la capacidad de respuesta del pa­ una actividad epileptiforme sutil. Además, se exclu­
ciente [12]. yeron las auras epilépticas confirmadas por EEG
Las CPNE constituyen uno de los diagnósticos para evitar el sesgo de una representación excesiva
diferenciales más importantes de la epilepsia [13], de eventos sensoriales aislados de origen epiléptico.
sin embargo, nuestra comprensión de la etiología,
los procesos mentales subyacentes y posteriormen­ Variables y fuente de los datos
te la subdiferenciación y su tratamiento siguen sien­
do muy deficientes [9]. Los estudios han demostra­ Se incluyeron variables sociodemográficas (edad en
do un alto grado de confusión no sólo entre los pa­ el momento del diagnóstico, edad de inicio de las
cientes con CPNE y su familia, sino también entre crisis, sexo, nivel educativo, empleo, residencia),
los médicos de atención primaria [14,15]. El fallo clínicas (historia personal de ansiedad, historia per­
para reconocer la naturaleza psicológica de estas sonal de depresión, tipo de evento ictal, estructura
crisis también retrasa la implementación del trata­ anatómica afectada, frecuencia de la crisis, años en­
miento psicológico apropiado [16]. La mayoría de tre el inicio de la crisis y un diagnóstico correcto,
los estudios se han centrado en las CPNE como un número de fármacos antiepilépticos utilizados) y
diagnóstico diferencial de la epilepsia [5,17-20], cuan­ variables semiológicas (inicio gradual, sacudida de
do en realidad se pueden manifestar simultánea­ la cabeza de lado a lado, ojos cerrados en el inicio
mente, convirtiéndolas en reto diagnóstico. del evento, duración superior a dos minutos, movi­
El objetivo del presente estudio es describir y mientos pélvicos rítmicos, movimientos asincróni­
comparar las características sociodemográficas y clí­ cos de las extremidades). Se realizó una entrevista
nicas de pacientes junto con las comorbilidades psi­ estandarizada enfocada en epilepsia, y su diagnósti­
quiátricas en dos grupos de estudio (CPNE y CPNE co diferencial fue realizado como parte del proceso
con epilepsia) en un centro de atención terciaria en rutinario de ingreso a la unidad de neurofisiología.
Colombia. La mayoría de los datos obtenidos se derivan de di­
cha entrevista o de la información recopilada du­
rante el período de evaluación de video-EEG. Se
Pacientes y métodos revisaron los registros médicos para los datos de­
mográficos y las evaluaciones psiquiátricas preexis­
Diseño y parámetros del estudio tentes y el diagnóstico relacionado.
Se definió que un paciente tenía CPNE cuando
Se llevó a cabo un estudio transversal en pacientes todos los tipos de eventos descritos por el paciente y
consecutivamente diagnosticados con CPNE me­ los testigos presenciales fueron registrados e identi­
diante video-EEG entre abril de 2011 y diciembre ficados correctamente, junto con una adecuada co­
de 2012 en el Instituto Neurológico de Colombia, rrelación electroclínica (descartando las anomalías
en Medellín, Colombia. Se compararon las caracte­ epileptiformes interictales en los registros de video-
rísticas sociodemográficas, clínicas y semiológicas EEG de hasta 168 horas), así como el tener un diag­
entre los que tenían y los que no tenían epilepsia con­ nóstico de trastorno de conversión formal por un
comitante. psiquiatra. En contraste, se definió que los pacientes

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Crisis psicógenas no epilépticas y crisis epilépticas

tenían CPNE y epilepsia si se registraron anomalías


epileptiformes durante las crisis o el período inte­ Tabla. Características de los pacientes diagnosticados con CPNE y CPNE con epilepsia.
rictal junto con eventos paroxísticos. Los resultados
de las pruebas anteriores, como el EEG de superficie Total CPNE CPNE con epilepsia
p
(n = 65) (n = 35; 53,9%) (n = 30; 46,1%)
y las imágenes de resonancia magnética, se incluye­
ron para el análisis cuando estaban disponibles. Edad al diagnóstico (años) a 33 (17-53) 32 (17-50) 43 (15-59) 0,298 b
La semiología ictal de las CPNE se dividió entre
crisis convulsivas (incluida la actividad parcial o ge­ Edad al inicio de la crisis (años) a 16 (5-35) 23 (9-40) 11 (2-32) 0,104 b
neralizada) y las crisis no convulsivas (incluidas al­
Sexo (femenino) 46 (70,8%) 23 (65,7%) 23 (76,7%) 0,333 c
teraciones en la sensación y la falta de respuesta).
Se clasificaron como eventos video-EEG positivos a Sin educación 3 (4,6%) 1 (2,9%) 2 (6,7%)
manera de crisis epilépticas si el neurofisiólogo do­
cumentaba la presencia de una correlación ictal Nivel
Escuela primaria 16 (24,6%) 7 (20%) 9 (30%)
epileptiforme en los registros del EEG. Se catego­ 0,060 d
educativo
Escuela secundaria 30 (46,2%) 15 (42,9%) 15 (50%)
rizaron como eventos video-EEG negativos como
CPNE si la semiología y los registros de EEG y elec­ Nivel superior 16 (24,6%) 12 (34,3%) 4 (13,3%)
trocardiograma no podían explicar una etiología fi­
siológica (p. ej., migraña, síncope y vértigo posicio­ Con empleo 22 (33,9%) 16 (45,7%) 6 (20%) 0,029 c
nal). Con respecto al diagnóstico diferencial, se uti­
Rural 9 (13,9%) 7 (20%) 2 (6,7%)
lizaron grabaciones de sueño y montajes especiales
Residencia 0,161 e
de video-EEG, incluyendo oculograma y electrodos Urbana 56 (86,2%) 28 (80%) 28 (93,3%)
de mentón cuando fue necesario, en caso de sospe­
char un diagnóstico alternativo. Historia de ansiedad 16 (24,6%) 8 (22,9%) 8 (26,7%) 0,722 c
Con base en los datos disponibles publicados has­
Historia de depresión 23 (35,4%) 11 (31,4%) 12 (40,0%) 0,471 c
ta la fecha en relación con las CPNE, se enumera­
ron seis signos semiológicos para potencialmente dis­ CPNE: crisis psicógenas no epilépticas. a Mediana (rango intercuartílico); b U de Mann-Whitney; c Prueba de inde-
tinguir las CPNE de las crisis epilépticas [21]. Tras pendencia χ2; d Prueba de tendencia a través de grupos ordenados; e Prueba exacta de Fisher.
identificar a los pacientes previamente diagnostica­
dos con CPNE, otro neurofisiólogo que desconocía
el diagnóstico y los registros del video-EEG realizó menino. Un valor de p < 0,05 se consideró estadísti­
una segunda revisión. De forma independiente se camente significativo. Se utilizó el programa esta­
evaluó la semiología de los eventos y se determinó dístico Stata v. 14.
la presencia o ausencia de cada signo semiológico.

Métodos estadísticos Resultados


Se realizó un análisis descriptivo en un grupo de La edad del diagnóstico, la edad de inicio de las cri­
pacientes con CPNE y otros con CPNE y epilepsia. sis, la frecuencia de las crisis, el número de fárma­
Para variables cualitativas, se estimaron las frecuen­ cos antiepilépticos utilizados y el tiempo entre ini­
cias absolutas y relativas. La normalidad de las va­ cio de la crisis y el diagnóstico correcto presentaron
riables cuantitativas se evaluó mediante la prueba una distribución no normal (p < 0,05). Durante el
de Shapiro-Francia. período seleccionado, 773 pacientes se sometieron
Se realizó un análisis bivariado entre las caracte­ a video-EEG, de los cuales el 10,6% tuvo al menos
rísticas sociodemográficas y clínicas en los grupos un evento paroxístico no epiléptico con o sin una
de CPNE, y CPNE y epilepsia. Las variables cualita­ crisis epiléptica concomitante. Se excluyó a cinco
tivas se analizaron mediante la prueba de indepen­ pacientes con onanismo, cuatro pacientes con para­
dencia de chi cuadrado y la prueba exacta de Fisher somnias, tres pacientes con migraña y cinco pacien­
cuando el valor esperado era menor o igual a cinco. tes con otras condiciones clínicas. La edad al diag­
Para las variables cuantitativas, se aplicó la prueba nóstico, la edad del inicio de las crisis, la frecuencia
U de Mann-Whitney para la comparación de las de las crisis, el tiempo entre el inicio de la crisis y un
medianas. Para el nivel de educación, utilizamos diagnóstico correcto y el número de fármacos an­
pruebas para tendencias en grupos ordenados, de­ tiepilépticos utilizados presentaron una distribu­
sarrollados por Cuzick [22]. Además, se realizaron ción no normal (p < 0,05). Se incluyó a 65 pacientes,
análisis univariados y bivariados en el subgrupo fe­ de los cuales el 53,9% (n = 35) se diagnosticaron

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nivel educativo correspondiente a secundaria o su­


Figura 1. Características de las crisis en crisis psicógenas no epilépticas perior (Tabla). La edad mediana de los pacientes en
(CPNE) y CPNE con epilepsia por sexos (U de Mann-Whitney).
el inicio del video-EEG fue de 33 años (rango inter­
cuartílico, RIC: 17-53), y la mediana en el inicio de
las crisis, de 16 años (RIC: 5-35). Un inicio tardío se
registró en el grupo de CPNE (23 años; RIC: 9-40)
en comparación con el grupo de CPNE y epilepsia
(11 años; RIC: 2-32), pero no fue estadísticamente
significativo (U de Mann-Whitney; p = 0,103).
La mayoría de los pacientes vivía en áreas urba­
nas (86,2%) y un tercio estaba desempleado. Esta
proporción fue hasta del 80% en el subgrupo de
CPNE y epilepsia, y fue significativamente más alta
que el 54,3% de los pacientes diagnosticados con
CPNE (prueba de χ2 de independencia; p = 0,029).
Además, el 24,6% y 35,4% de los pacientes tenían
antecedentes personales de ansiedad y depresión,
respectivamente. No hubo diferencias significativas
entre los grupos con respecto a sus antecedentes.
En el subgrupo de CPNE y epilepsia, el 86,7% de
los pacientes presentó eventos ictales focales, y el
10%, eventos ictales generalizados. La estructura ana­
tómica mayormente afectada fue el lóbulo temporal
(50%), seguido del lóbulo frontal (20%) y el lóbulo
parietal (16,7%).
La figura 1 muestra la frecuencia de algunas ca­
racterísticas de las crisis entre los grupos de acuer­
do con el sexo. Las mujeres con CPNE presentaron
una menor mediana de crisis mensuales (mediana:
5; RIC: 3-30) que las mujeres con CPNE y epilepsia
(mediana: 8; RIC: 1-20). Sin embargo, esta diferen­
cia no fue estadísticamente significativa (U de Mann-
Whitney; p = 0,843). Se observó una mayor fre­
cuencia de crisis en hombres con CPNE (mediana:
27; RIC: 5-30). En contraste, se produjo una mayor
latencia entre el inicio de los síntomas y la confir­
mación del diagnóstico en el grupo de mujeres con
CPNE, con una mediana de 13 años (RIC: 5,5-40), y
una mediana de 3,5 años (RIC: 1-12) para los hom­
bres. Estos hallazgos no fueron significativos (U de
Mann-Whitney; p = 0,241).
Al comparar los pacientes con CPNE, la frecuen­
cia del uso de fármacos antiepilépticos fue signifi­
cativamente mayor en los pacientes con CPNE y
epilepsia (U de Mann-Whitney; p = 0,009). Esta di­
ferencia continuó siendo significativa al comparar
solo las mujeres (U de Mann-Whitney; p = 0,041),
como CPNE y el 46,1% (n = 30) como CPNE y epi­ aunque el grupo de hombres diagnosticados con
lepsia. El 97% de los pacientes incluidos requirió CPNE y epilepsia tuvo mayor uso de fármacos an­
hasta 120 horas de monitorización de video-EEG tiepilépticos (mediana: 4; RIC: 1-5).
para determinar una clasificación precisa, y sólo dos Las características semiológicas más frecuentes
pacientes requirieron estudios más prolongados. fueron inicio gradual de las crisis (69,2%) y una du­
La proporción de mujeres en la muestra fue del ración mayor de dos minutos (63,1%). Los movi­
70,8% (n = 46), y el 70,8% de los pacientes tenía un mientos rítmicos de la pelvis ocurrieron con menos

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Crisis psicógenas no epilépticas y crisis epilépticas

Figura 2. Semiología de las crisis (%): a) Todos los participantes; b) Subgrupo femenino.

a b

frecuencia (18,5%). De manera similar, en el subgru­ cia fue más notoria en el grupo de CPNE y epilep­
po femenino, las características más frecuentes fue­ sia. Un estudio realizado en Islandia [8] describió
ron inicio gradual en el 73,9% en las que tenían CPNE una mayor incidencia de crisis psicógenas entre los
y epilepsia, y en el 65,2% en las que tenían solo 15 y 24 años. Otro estudio encontró una edad pro­
CPNE. El signo semiológico menos frecuente entre medio de pacientes con CPNE de 40 ± 16 años, un
las mujeres fue el movimiento rítmico de la pelvis: resultado similar al encontrado en el presente estu­
13% en el grupo con CPNE y 17,4% en el grupo con dio; sin embargo, estos pacientes tuvieron un inicio
CPNE y epilepsia (Fig. 2). de convulsiones a una edad posterior (media: 34 ±
16 años) [23]. La edad de inicio de las crisis suele
ser más temprana en el grupo de CPNE y epilepsia;
Discusión sin embargo, el diagnóstico correcto se realiza más
tempranamente en el grupo con CPNE [17]. Esto
Este estudio comparó las características sociodemo­ podría explicarse por el hecho de que cuando la
gráficas, clínicas y semiológicas entre dos grupos epilepsia se asocia con CPNE, un diagnóstico co­
de pacientes, el primero con diagnóstico de CPNE y rrecto puede ser más complejo.
el otro con CPNE y epilepsia. Uno de los objetivos Las mujeres tuvieron una mayor frecuencia tanto
del estudio fue comparar las características claves de CPNE como de CPNE y epilepsia; Asadi-Pooya
entre las crisis paroxísticas epilépticas y no epilép­ y Sperling [18] informaron de hallazgos similares.
ticas, que pueden expresarse de forma simultánea. Otro estudio realizado en Sudáfrica encontró que el
De los 773 pacientes referidos para video-EEG, 73% de los casos de CPNE ocurrió en mujeres [20].
el 10,6% informó al menos un evento no epileptó­ Una hipótesis que podría explicar esta situación es
geno, y aproximadamente la mitad de éstos también que existen diferencias entre sexos en relación con
tenía epilepsia. O’Sullivan et al [15] informaron ha­ los procesos emocionales y cognitivos que llevaría a
llazgos similares, con coexistencia de CPNE y epi­ una mayor predisposición en mujeres de CPNE [24].
lepsia hasta del 43%. Otro estudio informó interva­ Las mujeres tienden a tener una respuesta más afec­
los más amplios, que fluctuaron entre el 5 y el 40%, tiva cuando procesan experiencias emocionales ne­
en pacientes diagnosticados inicialmente como epi­ gativas [25].
lepsia refractaria y posteriormente remitidos a cen­ Con respecto al nivel educativo, una gran propor­
tros de epilepsia [16]. Estos datos pueden reflejar la ción de la población alcanzó un nivel de educación
falta de aspectos claves cuando se hace diagnóstico medio y tenía altas tasas de desempleo, y los más
de pacientes con CPNE. afectados correspondieron al grupo de CPNE y epi­
En general, los participantes del estudio fueron lepsia. Se ha planteado otra cuestión sobre cómo la
adultos jóvenes. Sin embargo, para la mayoría, las educación y las oportunidades de empleo se ven
crisis comenzaron en su adolescencia. Esta tenden­ afectadas por el estigma que existe hacia los pacien­

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tes con CPNE [26]. Se ha descrito que un bajo ren­ milar, la naturaleza retrospectiva del estudio con­
dimiento escolar fue más frecuente en los pacientes tribuyó al sesgo de selección y al sesgo de medición
jóvenes con CPNE [18]. Las mujeres con CPNE tien­ con respecto a la edad de inicio de la crisis y la fre­
den a mostrar mayores dificultades para realizar ta­ cuencia de las crisis. Destaca que la mayoría de los
reas que involucran memoria de trabajo y atención estudios establecen comparaciones entre CPNE y
[27]. Todo esto podría explicar los malos resultados epilepsia. Este estudio permitió comparar pacientes
académicos y laborales. con CPNE y CPNE y epilepsia, un desafío diagnós­
Las comorbilidades psiquiátricas más frecuentes tico que requiere investigaciones adicionales. Para
descritas en la literatura médica en estos pacientes futuras investigaciones se recomienda incluir un ma­
son los trastornos de personalidad (62%), el estrés yor número de instituciones, buscar activamente
postraumático (49%), la ansiedad (47%) y la depre­ pacientes masculinos, identificar factores de pro­
sión mayor (47%) [28]. Este estudio exploró la de­ nóstico adicionales para CPNE y considerar comor­
presión y la ansiedad. Se ha descrito que la ansiedad bilidades psiquiátricas, la semiología de las crisis y
explícita es significativamente más frecuente en las hallazgos de video-EEG.
CPNE. Adicionalmente, existe una correlación po­
sitiva entre la frecuencia de las crisis y los rasgos de En conclusión, los pacientes con CPNE y epilepsia
ansiedad [29]. Los pacientes con CPNE se caracte­ podrían tener un inicio clínico a una edad más tem­
rizan por tener antecedentes de abuso sexual y ras­ prana que los pacientes con CPNE, y se caracteriza­
gos de personalidad con un alto grado de inestabili­ rían por tener una mayor tasa de desempleo. En re­
dad emocional, con un bajo nivel de conciencia del lación con las características clínicas, la prescrip­
problema, lo que restringe sus habilidades de afron­ ción de fármacos antiepilépticos fue mayor en el
tamiento [30]. Estos hallazgos justifican la evalua­ grupo de CPNE y epilepsia. Desde la perspectiva se­
ción, el tratamiento y el seguimiento por parte de miológica, no fue posible concluir diferencias relevan­
un equipo multidisciplinario, incluidos los servicios tes entre los subgrupos. Los hallazgos anteriores po­
de neurología, neuropsicología y psiquiatría, entre drían ser útiles en la práctica clínica neurológica.
otros.
La mayoría de los pacientes mostraron un retra­
Bibliografía
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nóstico correcto. Este hallazgo es consistente con 1. Bromfield EB, Cavazos JE, Sirven JI. An introduction to epilepsy.
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Crisis psicógenas no epilépticas y crisis epilépticas

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Psychogenic non-epileptic and epileptic seizures: clues for a differential diagnosis. Findings from a Colombian
study

Introduction. Psychogenic non-epileptic seizures (PNES) are paroxysmal changes in behavior that resemble epileptic seizures,
although they have no electrophysiological correlation or clinical evidence of epilepsy.
Aim. To compare clinical and sociodemographic characteristics of patients diagnosed with PNES-alone and PNES-and-
epilepsy.
Patients and methods. A cross-sectional study of consecutive patients diagnosed with PNES in a 20-month period was
carried out. A video-EEG was performed in all patients. Socio-demographical, clinical and semiological characteristics were
compared between those patients with and without concomitant epilepsy.
Results. Sixty-five patients were included, 35 (53.9%) had PNES-alone and 30 (46.1%) had PNES-and-epilepsy. The proportion
of women in the study was 70.8%. The median age at seizure onset was 16 years. A late start was recorded in PNES-alone
group (23 years) compared to PNES-and-epilepsy group (11 years), however, it was not significant. There was a lower
frequency of antiepileptic drugs use in the PNES-alone group compared with the PNES-and-epilepsy group. The most frequent
semiological features were the gradual onset of events (69.2%) and the duration longer than two minutes (63.1%).
Conclusion. The waxing and waning pattern during paroxysmal events suggest a non-epileptic origin. However, it is not
uncommon to find patients with concomitant epileptic seizures.
Key words. Conversion disorder. Electroencephalography. Epilepsy. Neurologic manifestations. Psychogenic non-epileptic
seizures. Seizures.

www.neurologia.com  Rev Neurol 2019; 69 (4): 145-151 151

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