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INTORUCCION
Hoy en día es un tema muy sensible, al momento que nos dirigimos o la forma en que
llamamos comúnmente a estas personas con la enfermedad de Síndrome de Down como
“mongolitos” pensamos que ellas tiene poca inteligencia despreciándoles su capacidad de
recepción de inteligencia. En el desenlace vamos a ver ciertas posturas de algunos autores
sobre la discapacidad en el derecho comparado, encontrando un caso del tribunal
constitucional peruano y jurisprudencia en Argentina y la conclusión que he llegado. Sin
más que decir paso a desarrollar mi trabajo.
2. DESARROLLO
El Síndrome de Down (SD), también llamado trisomía 21, es la causa más frecuente de
retraso mental identificable de origen genético. Se trata de una anomalía cromosómica que
tiene una incidencia de 1 de cada 800 nacidos, y que aumenta con la edad materna. Es la
cromosomopatía más frecuente y mejor conocida.
Se reemplaza la frase del inciso 1, que era “agente capaz”, por la de “plena capacidad de
ejercicio, salvo las restricciones contempladas por la ley”. Es importante resaltar que una
persona, como dice Fernández Sessarego “no pierde la capacidad jurídica que le es
inherente pese a no tener la posibilidad de ejercerla por sí misma”. (Cardenas & Luciñana,
2018)
3. CASUÍSTICA
Una persona con discapacidad intelectual (Síndrome de Down) solicitó a la ANSES que se
le otorgue la pensión derivada del fallecimiento de su padre. El organismo le indicó que,
dada la discapacidad que tenía, debía iniciar una curatela para poder percibir el beneficio.
En consecuencia, inició una acción de amparo a fin de que se ordene el otorgamiento del
beneficio previsional.
“Su situación debe analizarse a la luz de los principios protectorios que rigen la seguridad
social y de la doctrina sentada por nuestro Más Alto Tribunal en Fallos: 315:2616, entre
otros. En dicho precedente, el Máximo Tribunal sostuvo que ´El ámbito de la seguridad
social está regido por normas que se caracterizan por su finalidad tuitiva y uno de cuyos
objetivos es atender la situación de quienes quedan desamparados cuando fallece el pariente
que le proporcionaba los medios para su subsistencia y que, por sus condiciones de salud,
no pueden proporcionárselos con su trabajo.´ Asimismo, agrego: ´las leyes previsionales
deben interpretarse sin rigorismos lógicos y a fin de no desnaturalizar los fines que la
inspiran´”.
“También se tuvo en cuenta que el mandato contenido en el art. 14 bis se ha visto reforzado
con determinados instrumentos del derecho internacional de los derechos humanos que, a
partir de 1994, tienen jerarquía constitucional (Constitución Nacional, art. 75 inc. 22,
segundo párrafo). Así, la Declaración Universal de Derechos Humanos previó el derecho de
toda persona a los seguros en cualquier caso en que sufriera la pérdida de sus medios de
subsistencia por causas independientes de su voluntad (art. 25), al tiempo que el Pacto
Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales reconoció `el derecho de toda
persona a la seguridad social, incluso al seguro social´(art. 9) (CSJN, “P., A. c/ ANSES s/
Pensiones”, fallo del 28/06/2011)”.
El hecho de que la situación del actor no haya sido expresamente contemplada por el art. 53
de la ley 24.241, por tratarse de un hijo divorciado, no impide, con sustento en los
principios referidos y en la ratio legis de la norma citada, la concesión del beneficio.
Para ello cabe equipararlo a la situación de los hijos solteros mayores de edad incapacitados
para el trabajo y a cargo del causante a que se refiere el art. 53 de la ley 24.241. Es que el
régimen legal de pensiones no puede válidamente y sin contradecir su naturaleza sustitutiva
dejar de comprender situaciones como las del actor, pues de lo contrario se perpetuaría una
situación total de desamparo que el legislador justamente quiere evitar”.
4. CONCLUSION.
Para concluir podemos decir que las personas discapacitadas son personas
totalmente capaces, y por ende deben ser respetadas e incluidas en la sociedad, no
debemos discriminarlas y mucho menos verlas como seres inferiores a nosotros,
simplemente son personas que tienen otro tipo de necesidades que este país les debe
brindar, pues no se puede estandarizar a un solo modelo de personas, puesto que
todos somos diferentes, pero con los mismos derechos. La ley habla de que todos
somos iguales ante la ley entonces no hay por qué discriminar al contrario hay que
aprovechar sus capacidades e incluir a estas personas en la sociedad haciéndolas
partes de labores que puedan desarrollar ya sea en el trabajo, en el colegio, en actos
culturales etc.
Bibliografía
Cardenas & Luciñana. (2018). Comentarios a las recientes modificaciones del Código Civil en
materia de capacidad. GACETA CIVIL & PROCESAL CIVIL(65), 108, 109.
España, D. (2018). SÍNDROME de DOWN (Trisomia 21). (2. DOWN ESPAÑA, Ed.) Obtenido de
Sindrome de Down hoy: https://www.sindromedown.net/wp-
content/uploads/2019/02/S%C3%ADndrome-de-Down-hoy.pdf