PREGUNTA GRUPAL

11. ¿Por qué la no distinción entre pensar y conocer, y la no consideración

de la crítica de la razón, pueden conducir al dogmatismo, y al dogmatismo
de la incredulidad?
Los objetos, aunque no podamos conocerlos, podemos al menos pensarlos.
Porque conocer exige que yo pueda demostrar su posibilidad mientras que para
pensar basta que mi concepto sea un pensamiento posible y no contradictorio a sí
mismo. La crítica de la razón pura indica que el objeto se toma en dos
significaciones: como fenómeno y como cosa en sí misma. En este sentido, si no
hacemos la consideración de la crítica de la razón pura, por ejemplo, no podría
decir que el la voluntad del alma es libre y, al mismo tiempo, está sometida a una
necesidad natural, pues caería en una contradicción ya que habría tomado al alma
en una y la misma significación, es decir, como cosa en sí misma. En cuanto a la
no distinción entre pensar y conocer, por ejemplo, no puedo conocer la libertad ya
que tendría que conocer a un ser con dichos efectos presente en el mundo
sensible pero sí puedo pensarla ya que basta que mi pensamiento no encierre
contradicción alguna. En conclusión, si no hacemos la distinción entre pensar y
conocer vamos a creer que al no poder conocer algo, no podemos pensarlo y esto
nos va a llevar a la incredulidad de dicho concepto o fenómeno, es decir, a ser
dogmáticamente incrédulos frente a dicho concepto o fenómeno. Y si no hacemos
la consideración de la crítica de la razón pura, al no poder conocer la cosa en sí
misma, sino solo en cuanto la cosa es objeto de la intuición sensible, vamos a caer
nuevamente en el dogmatismo de la incredulidad.

PREGUNTAS INDIVIDUALES
1. ¿Por qué la proposición “todo cambio tiene su causa” es a priori, pero
no pura? (B3)
Porque es un conocimiento independiente de la experiencia, y aún de toda
impresión de los sentidos, mas sí se mezcla algo empírico. En la expresión
“todo cambio tiene su causa" sí es a priori porque el conocimiento no tiene
lugar absolutamente de toda la experiencia mas no es pura porque el
cambio es un concepto que no puede ser sacado de otra forma que no sea
la experiencia.

2. “…existen en nuestro conocimiento principios puros a priori… estos

son indispensables para que sea posible la experiencia misma y,
consiguientemente, exponerlos a priori. Pues de dónde sacaría la
misma experiencia su certeza si todas las reglas conforme a las cuales
avanza fueran empíricas y, por tanto, contingentes” (B5) Explique el
 sentido de éste fragmento como crítica a la teoría del conocimiento de
David Hume.
En nuestro conocimiento, existen principios puros a priori (juicios
necesarios y universales) porque son indispensables para hacer posible la
experiencia. No habría manera de que la experiencia sacase su certeza si
todas las reglas en las que se basa fueran conocidas mediante la
experiencia (empíricas) y cuyo nexo entre el sujeto y el predicado no
tendría que ser necesariamente de esa manera (contingentes).

3. ¿En qué sentido la Metafísica procede dogmáticamente?

La metafísica procede dogmáticamente porque sin previo examen de la
capacidad o incapacidad de la razón para una empresa tan grande,
emprende confiada su realización. Esto quiere decir que sin conocer si
mediante la razón es posible resolver los problemas propios de la
metafísica, se aboca a esta tarea de manera confiada.

4. ¿Por qué el juicio: “Todo lo que sucede tiene su causa” es un juicio

sintético a priori?
En los juicios sintéticos, el predicado está enteramente fuera del concepto
del sujeto. En el juicio “todo lo que sucede tiene una causa”, el concepto
“una causa" me ofrece información nueva respecto al concepto “lo que
sucede”, es decir, que este último concepto está totalmente fuera del
concepto “una causa”. Es, además, priori porque el conocimiento es
independiente de la experiencia ya que el principio citado añade esta
representación a la primera, no únicamente con más universalidad de la
que podría proporcionarnos la experiencia, sino con la expresión de la
necesidad, esto es de ser un juicio necesario.