Está en la página 1de 30

JOSÉ DE RIBERA (1591 – 1652)

La Santísima Trinidad, hacia 1635


Óleo/lienzo, 266 x 118 cm.
ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 167
ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

%/$1&$

168
9
Trauma de tórax
LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

Manejo inicial del trauma torácico FXHQWUDHQDOUHGHGRUGHOVLQHPEDUJRHQXQWUDEDMR


22
realizado por Lalsie y cols. se concluyó que del total de
Introducción PXHUWHVYLROHQWDVHQ&DOLHQHO SDFLHQWHV 
El trauma continúa siendo una de las principales causas IXHURQGHELGDVDWUDXPDWRUiFLFR\VXFRPSRUWDPLHQWRFRQ
GHPRUWDOLGDGHQHOPXQGR\GHQWURGHpOHOGHWyUD[UH- UHVSHFWRDOPHFDQLVPRGHOWUDXPDIXHHOVLJXLHQWH
SUHVHQWDDSUR[LPDGDPHQWHHOGHODVPXHUWHV
2,4 ‡ SRUWUDXPDFHUUDGR
En contraste con estas cifras, menos del 10% de los ‡ 16% por trauma penetrante por arma cortopunzante.
traumas cerrados y entre el 15% y 30% de los penetrantes ‡ SRUWUDXPDSHQHWUDQWHSRUDUPDGHIXHJR
requerirán manejo con cirugía. La mayoría pueden ser En un segundo estudio adelantado en el H.U.V. durante
23
tratados con procedimientos y técnicas que se encuentran los años 2002 y 2003 por Chavarro y cols. se han repor-
al alcance de cualquier PpGLFR3,8,9 tado un total de 374 pacientes, de los cuales 284 (75%) se
En un trabajo no publicado realizado en el H.U.V. se debieron a trauma penetrante (45% por bala y 35% por
recogieron 300 pacientes en un estudio retrospectivo que arma cortopunzante) y 90 pacientes se debieron a trauma
abarcó un período comprendido entre enero y junio de ese penetrante (14% por accidentes de tránsito, 4% por peatón
14 arrollado por auto y 6% por otros).
año y se encontró una mortalidad del 10%.
Los servicios de urgencia de los hospitales, así como 1. Trauma abierto o penetrante: Cuando los mecanis-
los centros y puestos de salud urbanos y rurales, se ven en- mos causantes de la lesión producen comunicación
frentados a situaciones de emergencia que exigen decisio- GH¿QLWLYDRWHPSRUDOHQWUHORVHVSDFLRVSOHXUDOHVRHO
nes rápidas y el inicio de medidas terapéuticas que pueden mediastino con el exterior.
salvar pacientes moribundos, acción que en los casos de Se basa en el principio físico
trauma de tórax se ha convertido en uno de los estándares y
parámetros de calidad de la atención hospitalaria moderna. E= 1/2 m.v

Mecanismo del trauma Donde E = energía,


6HKDQFODVLÀFDGRHQGRVJUDQGHVJUXSRVDVt m = masa
1. Trauma penetrante. v = velocidad.
1
2. Trauma cerrado. Con estas premisas podemos decir que los traumas
Como se mencionó anteriormente, la mortalidad por ocasionados por arma de fuego producen lesiones que
trauma torácico reportada en la literatura mundial se en- dependen de la velocidad y de la masa del proyectil, consti-

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 169


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

tuyéndose la velocidad en el elemento más importante de la ‡ 0XHUWHV LQPHGLDWDV GHELGDV D OHVLRQHV PD\RUHV GHO
lesión, pues al aumentar la velocidad la cantidad de energía corazón o de la aorta ascendente o descendente, en el
transmitida se incrementa en proporción geométrica. 77% de los pacientes.
6HKDQFODVL¿FDGRORVSUR\HFWLOHVFRPRGHEDMDYHORFLGDG ‡ 0XHUWHV GHQWUR GH ORV WUHLQWD PLQXWRV \ WUHV KRUDV
(menos de 1.200 pies/s), velocidad intermedia (entre 1.200 y Generalmente son secundarias a taponamiento cardiaco
2.500 pies /s) y de alta velocidad (mayores de 2.500 pies/ s). u obstrucción de la vía aérea.
Después de la penetración y durante su paso a través ‡ 0XHUWHVWDUGtDV6HGHEHQHQJHQHUDODFRPSOLFDFLRQHV
GH ORV WHMLGRV HVWRV HOHPHQWRV WUDQV¿HUHQ HQHUJtD D ORV respiratorias e infecciosas, más raramente a lesiones no
4,6
mismos y el daño es proporcional a esta transferencia, por reconocidas.
un fenómeno llamado efecto cavitacional. Este comportamiento en la ciudad de Cali mostró que
Los misiles de baja velocidad causan laceración y dentro de las doce primeras causas de mortalidad violenta
destrucción local de los tejidos en su camino, similares a HQFXDWURFRUUHVSRQGLHURQDOHVLRQHVGHOWyUD[ FRUD-

las lesiones por arma blanca, y esos proyectiles requieren ]yQDRUWDWRUiFLFDYDVRVSXOPRQDUHV\SXOPyQ 
para penetrar una velocidad de impacto de 37.5 a 45 m/s.
/DDXVHQFLDGHXQDKHULGDGHVDOLGDVLJQL¿FDTXHODWRWDOL- Perspectiva histórica
dad de la energía de la bala en movimiento se agotó en la Los primeros registros de trauma torácico incluyen un
producción de la herida de la entrada. reporte de 40 casos descritos en el Edwin Smith Surgical
Los misiles balísticos rara vez se desplazan en línea Papyrus, escrito en el 3000 a.C.
recta por el cuerpo, ya que tienen como obstáculos los Descripciones hechas por griegos y romanos consi-
huesos y planos faciales. deraban las lesiones penetrantes del tórax como mortales.
La dirección del misil y la magnitud del daño no pue- Posteriores reportes mencionan que Galeno (130-200
den ser pronosticadas por la simple información acerca del a.C.) trató con empaquetamiento este tipo de lesiones por
sitio de perforación inicial y el ángulo en que fue disparado. armas cortopunzantes, en gladiadores.
Los misiles de alta velocidad arrastran fragmentos de ropa, 0iVUHFLHQWHPHQWH$PEURLVH3DUH  SXGR
piel y tejidos a través de la herida, causando contaminación cerrar dos heridas penetrantes de tórax tres días después
de la misma. del hecho.
2. Trauma cerrado:Cuando los mecanismos de lesión El Barón Larrey en 1807 y Henson en 1967 observa-
no producen una comunicación entre los espacios ron una mejoría de la dinámica respiratoria en pacientes
pleurales o del mediastino con el exterior. Las lesio- en quienes se cerraban las heridas penetrantes del tórax.
nes producidas así se pueden generar por aceleración, Hasta mediados del siglo xx en las confrontaciones
desaceleración, compresión y cizallamiento. bélicas se reportaban mortalidades entre el 24.6% y el 79%
Se basa en el principio físico a causa del trauma torácico. Pero en la Segunda Guerra
฀ 0XQGLDOODLQFLGHQFLDGHHVWDVOHVLRQHVHQODPRUWDOLGDG
fue del 12%, al adoptar guías para su manejo, incluida la
฀ ฀฀ ฀ toracotomía en aquellos sangrados masivos.
m = masa El principal avance en el manejo de la vía aérea, como
a = aceleración componente fundamental en el adecuado tratamiento de
El trauma torácico cerrado usualmente compromete los pacientes con traumatismos torácicos, se dio durante
1
varios sistemas u órganos. la guerra de Vietnam.
Las muertes por trauma torácico presentan en general $XQTXHGXUDQWHORVSHUtRGRVGHFRQÀLFWRVHJHQHUDURQ
un comportamiento trimodal: importantes avances en el manejo de este tipo de traumas,

170 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

en la vida civil se han venido presentando cada vez con más o quinta vértebras torácicas en el paciente de pie. La bi-
frecuencia este tipo de lesiones, dadas básicamente por el furcación traqueal se sitúa en este mismo plano, mientras
incremento del uso de armas, tanto de fuego como cortopun- que el vértice del arco de la aorta está un poco más arriba.
zantes y por la frecuente ocurrencia de eventos terroristas.4 La longitud de las costillas aumenta de manera gradual,
de la primera a la séptima, con desplazamiento lateral
5 12
Correlaciones anatómicas progresivo de las uniones costo-cartilaginosas.
El tórax es una estructura músculo esquelética que contie-
ne el corazón, los pulmones y otra serie de formaciones, Músculos del tórax
incluidas algunas abdominales. El conocimiento de sus ele- Los músculos de la pared torácica están dispuestos en su
5
mentos anatómicos básicos es fundamental para enfrentar mayoría en capas: externa, media e interna.
5
de manera adecuada el manejo de sus lesiones.
Tiene forma ovoidea, con un extremo superior estrecho Paredes anterior y lateral
y un extremo inferior ancho, con la particularidad de que  0~VFXORVGHOWyUD[UHODFLRQDGRVFRQHOPLHPEUR
ambos extremos están cortados oblicuamente: el superior, superior: músculo pectoral mayor, pectoral menor,
de delante y abajo hacia atrás y arriba; y el inferior, en subclavio y serrato anterior.
GLUHFFLyQFRQWUDULD$GHmás, el ovoide está algo aplanado  0~VFXORVSURSLRVGHOWyUD[LQWHUFRVWDOHVH[WHUQRV
de delante hacia atrás. La pared anterior, formada por el e internos; subcostales y transverso del tórax.
esternón, es más corta que la posterior, en cuya composi-
ción entra la columna vertebral. La cavidad torácica tiene Pared posterior
GRVRUL¿FLRVXQRVXSHULRU DSHUWXUDWRUiFLFDVXSHULRU \ 6HGLYLGHHQVXSHU¿FLDO\SURIXQGD
otro inferior (apertura torácica inferior), obturados por un 0~VFXORVVXSHU¿FLDOHV7UDSHFLRODWtVLPRGHOGRUVR
tabique muscular, el diafragma. El diámetro transversal romboideos mayor y menor, elevador de la escápula y
supera el antero-posterior. serratos posteriores.
La caja torácica consta del esternón, doce vértebras 0~VFXORVSURIXQGRV(VSOHQLRHUHFWRUGHODHVSLQD
torácicas, diez pares de costillas que terminan en segmentos transversos y elevadores de las costillas.
cartilaginosos en la cara anterior y dos pares de costillas La arteria (arteria intercostal anterior –rama de la arteria
ÀRWDQWHV (O DQLOOR VXSHULRU LQFOX\H HO PDQXEULR GHO HV- mamaria interna; arteria intercostal posterior– rama de la
ternón, las primeras y cortas costillas semicirculares y la arteria interósea posterior), la vena y el nervio de cada es-
columna vertebral. La clavícula brinda cierta protección a pacio intercostal están en un plano profundo a los músculos
las estructuras vasculares y neurológicas que atraviesan la intercostales internos y externos y se sitúan justo por detrás
base del cuello, en virtud de su articulación con el manubrio del borde inferior de la costilla. Es considerable el traslape
y la inserción de los ligamentos costo-claviculares. de la distribución de nervios adyacentes, de modo que por
Los cartílagos de las primeras seis costillas tienen cada lo general no ocurre la anestesia completa de un espacio
uno su articulación con el esternón, mientras que los de las intercostal a menos que se aplique también a los espacios
9
costillas, siete a diez, se fusionan y forman el borde costal, inmediatos superior e inferior correspondientes.
antes de su inserción en el extremo inferior del esternón. La
once y la doce son libres y son llamadas FRVWLOODVÀRWDQWHV.
5
Compartimiento interior del tórax
El ángulo de Louis casi siempre es palpable y per- La caja torácica en su interior está recubierta por la pleura,
PLWHODLGHQWL¿cación rápida de la segunda costilla por TXH HV XQD VHURVD GH FpOXODV PHVRWHOLDOHV /D VXSHU¿FLH
su articulación con el esternón en dicho punto. Un plano SOHXUDOVHFRPSRUWDPiVELHQFRPRXQVLQFLWLRHQÀXMRSRU
paralelo a la horizontal atraviesa dicho ángulo y la cuarta el que se mueve de manera muy activa líquido, hay fagoci-

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 171


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

tosis intensa de células y desechos (lo que contribuye a la Diafragma


resistencia general del espacio pleural a las infecciones) y 0HQFLyQHVSHFLDOUHTXLHUHHOGLDIUDJPDSXHVHVHOOtPLWH
12
se sellan las fugas de aire y de líquido capilar. Se divide inferior de la cavidad torácica y separa ésta de la abdominal.
en pleura parietal y pleura visceral. La parietal está adosada Cada mitad de la porción muscular se divide en tres partes:
a la pared interna de la caja torácica y al diafragma, y la esternal, costal y lumbar. Las tres porciones se insertan en el
YLVFHUDOHVWiDGRVDGDDODVXSHU¿cie pulmonar, la cual se tendón central, formación trifoliada ubicada por debajo del
continúa sobre el hilio pulmonar y el mediastino con la corazón y sin inserciones óseas. El tendón central presenta
pleura parietal. Entre las dos pleuras existe un espacio que XQRUL¿FLRSDUDHOSDVRGHODYHQDFDYDLQIHULRU
se llama espacio intrapleural, y normalmente tiene una La inervación del diafragma está dada por los nervios
presión de -4 torr. Cuando los pulmones están muy dis- IUHQLWRVFRQ¿EUDVPRWRUDVVHQVLWLYDV\YDVRPRWRUDV/D
WHQGLGRVSRUHMHPSORDO¿QDOGHXQDLQVSLUDFLyQSURIXQda, región periférica recibe además inervación de los nervios
la presión intrapleural necesaria para dilatar los pulmones toracoabdominales.
13
puede ser hasta de -12 a -18 torr. Este músculo es el de mayor trascendencia en la res-
piración. Desciende cuando se contrae e impulsa el centro
Mediastino tendinoso hacia abajo; el volumen del tórax aumenta y la
El interior del tórax se ha dividido en mediastino superior presión intratorácica disminuye.
y mediastino inferior. El superior se extiende entre dos 3RVHHWUHVRUL¿FLRVDyUWLFRHVRIiJLFR\SDUDODYHQD
5
planos, uno superior y oblicuo, desde la incisura yugular cava inferior.
del esternón hasta el séptimo proceso espinoso cervical y En las correlaciones anatómicas es preciso hacer
corresponde a la abertura superior del tórax. El otro, inferior FODULGDGVREUHODViUHDVHVSHFt¿FDVGHOWyUD[TXHGHQWUR
y horizontal, se extiende del ángulo esternal al borde inferior del manejo de sus traumas requieren igualmente manejos
de la cuarta vértebra torácica. El mediastino inferior, situado HVSHFt¿FRV(VWDVVRQ
entre este plano y el diafragma, se subdivide en tres partes: 1. Área precordial: Limitada por arriba con el borde
el anterior, localizado entre el esternón y el pericardio; inferior de las clavículas y por abajo por el reborde
el medio contiene el pericardio, el corazón y los grandes costal inferior, entre las líneas medio claviculares.
vasos; el posterior se extiende por detrás del pericardio y 2. Área toracoabdominal: Limitada por arriba en la
5
el diafragma, por delante de las vértebras cinco a doce. parte anterior por una línea imaginaria trazada a nivel
Las estructuras contenidas en el tórax y que son de del cuarto espacio intercostal por detrás; una segunda
vital importancia para la evaluación y manejo del trauma línea trazada cruzando los ángulos de las escápulas. El
torácico son: límite inferior corresponde por delante y por detrás al
‡ 7UiTXHD reborde costal inferior.
‡ (VyIDJR 3. Área de los grandes vasos: Localizada entre las líneas
‡ $RUWDTXHFRPSUHQGHDVXYH] paraesternales desde el segundo espacio intercostal por
‡ $RUWDDVFHQGHQWH abajo, hasta el cartílago cricoides por arriba.
‡ &D\DGRDyUWLFR
‡ $RUWDGHVFHQGHQWH Fisiopatología
‡ $UWHULDPDPDULDLQWHUQD5 /DSDUHGWRUiFLFDFXPSOHGRVLPSRUWDQWHVIXQFLRQHV
‡ 9HQDV 1. La estructura rígida dada por las costillas, clavículas,
‡ &DYDVXSHULRU HVWHUQyQHVFiSXOD\PXVFXODWXUDVXSHUÀFLDOSURWHJH
‡ 9HQDDFLJRV los órganos vitales intratorácicos y abdominales supe-
‡ &RQGXFWRWRUiFLFR5,11 riores.

172 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

2. Juega un papel importante durante el trabajo respiratorio. proporciona 3.5 ml de oxígeno/100 g de tejido. Cuando
La expansión de la pared por los músculos de la respira- no es posible suministrar esta cantidad ocurre vasodilata-
FLyQ\HOFRQFRPLWDQWHGHVFHQVRGHOGLDIUDJPDUHVXOWDQ ción cerebral, igualmente pasa en la circulación coronaria,
en disminución de la presión intratorácica, con el con- mientras que en la circulación pulmonar ocurre vaso-
secuente ingreso pasivo de aire dentro de los pulmones. constricción (aumento de la resistencia) para desviar el
La expulsión activa del aire resulta de la elevación del ÀXMRVDQJXtQHRDiUHDVPHMRUSHUIXQGLGDV\DVtFRPSHQsar
GLDIUDJPD\ODFRQWUDFFLyQGHODUtJLGDSDUHGWRUiFLFD HOGp¿FLW(QHOVLVWHPDDUWHULDOSHULIpULFRWDPELpQRFXUUH
La adecuada ventilación y oxigenación dependen de vaso-constricción. En el caso de hipovolemia y a pesar de
la integridad de la pared torácica para cumplir con estas la anemia, pequeñas cantidades de oxígeno adicionales
dos funciones. pueden ser transportadas en disolución, y ello a su vez
Lesiones importantes de la pared torácica y disrupción SXHGHVLJQL¿FDUODGLIHUHQFLDHQWUHODYLGD\ODPXHUWH
de los músculos podrían llevar a lesiones de estructuras Los efectos de la hipoxia son disminución de la activi-
subyacentes: pulmones, corazón, grandes vasos y vísceras dad mental y del trabajo muscular (músculos respiratorios),
abdominales superiores. que llevan al paciente al coma y a la muerte.
$GLFLRQDOPHQWHVHSXHGHQJHQHUDUSUREOHPDVUHVSLUD-
torios serios si se presentan movimientos paradójicos de Hipercapnia
la pared torácica. Es el aumento de CO en la sangre. Lo habitual es que
DFRPSDxHDODKLSRYHQWLODFLyQRDXQDKLSRSHUIXVLyQ(V
2
Los traumatismos pueden ser penetrantes o cerrados.
Los penetrantes, además de lesionar las estructuras anató- secundaria a que los tejidos continúan produciendo CO y
DORFXUULUKLSRYHQWLODFLyQ\RKLSRSHUIXVLyQQRVRQHOLPL-
2
micas en su área, ocasionan lesión secundaria dada por la
disipación de energía, situación que se presenta en trauma por nados y se acumula en la sangre.
proyectiles de arma de fuego, y se encuentran directamente Cuando el PCO2 es mayor de 60-75 torr se encuentra
relacionados con la masa y la velocidad de los mismos. en el paciente polipneico «sed de aire», confusión, papile-
Este fenómeno se da en heridas ocasionadas por armas de dema y aumento de la presión intra-craneana. Cuando está
alta velocidad. Las heridas por armas cortopunzantes y por entre 80 y 100 torr entra en letargo y a veces en semi-coma.
proyectiles de baja velocidad producen lesiones de tipo local. Cuando alcanza cifras mayores de 100-150 torr ocurren la
Por su parte el trauma cerrado genera lesiones por anestesia y la muerte.
cuatro mecanismos:
1. Rápida desaceleración Acidosis
2. Rápida aceleración 6HFXQGDULDDODKLSRYHQWLODFLyQHKLSRSHUIXVLyQ
&L]DOODPLHQWR Se dispara la vía anaeróbica para producir energía. La
JOXFRVDHVWUDQVIRUPDGDHQiFLGRSLU~YLFR\iFLGROiFWLFR
5
4. Compresión
Son tres los eventos que se suceden en el trauma de ORTXHJHQHUDXQDSURGXFFLyQGHSURWRQHV + \GLVPL-

tórax: hipoxia, hipercapnia y acidosis, y son responsables QX\HHOS+
de las manifestaciones clínicas en este tipo de lesiones.
Manejo inicial
Hipoxia El trauma torácico exige un proceso racional de toma de
2,4
Se produce por dos mecanismos principales: hipoventila- decisiones y un manejo priorizado de las lesiones.
ción e hipoperfusión (compresión, colapso, hipovolemia, El 85% de las lesiones pueden tratarse con observación
etc.). DuranWHODKLSR[LDVHDIHFWDSULQFLSDOPHQWHHOÀXMR clínica, tubo de toracostomía, analgesia adecuada y soporte
sanguíneo cereEUDO\FDUGLDFR1RUPDOPHQWHGLFKRÀXMR
4
respiratorio.

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 173


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

Es necesario individualizar el tratamiento que debe pro- que en los últimos años ha cobrado relevancia el uso de la
GLJDUVHHQXUJHQFLDV\HOHVSHFt¿FRGHODVOHVLRQHVVXIULGDV máscara laríngea y del combitubo cuando otros métodos
1
En urgencias se debe efectuar una valoración inicial. han fallado, lo que ha reducido de manera gradual el uso
de técnicas quirúrgicas.
Revisión primaria y tratamiento /D6RFLHGDG$PHULFDQDGH$QHVWHVLRORJtD  KD
El manejo inicial del paciente con trauma torácico GH¿QLGRODREVWUXFFLyQGHODYtDDpUHDFRPROD©VLWXDFLyQ
debe consistir en: clínica en la cual un anestesiólogo con entrenamiento
D 5HYLVLyQSULPDULD FRQYHQFLRQDOH[SHULPHQWDGL¿FXOWDGSDUDJDUDQWL]DUYHQ-
E 5HVXFLWDFLyQGHODVIXQFLRQHVYLWDOHV
15
tilación con una máscara, con intubación o con ambas».
F 5HYLVLyQVHFXQGDULD La obstrucción de la vía aérea puede presentarse
G &XLGDGRVGHÀQLWLYRV de manera súbita o gradual y la taquipnea suele ser un
Todo el enfoque del manejo inicial debe dirigirse a signo temprano de ello. Es preciso realizar una adecuada
buscar la reversión de la hipoxia, que es el principal evento valoración iniFLDOGHOSDFLHQWHTXHSHUPLWDLGHQWL¿FDUHO
¿VLRSDWROyJLFRTXHVHGDHQHVWHWLSRGHWUDXPDV problema, y subsecuentes controles periódicos.
'HEHQVHULGHQWL¿FDGDV\WUDWDGDVHQODUHYLVLyQSUL- Existen algunos signos objetivos de la presencia de
maria aquellas lesiones que amenazan la vida del paciente obstrucción de la vía aérea como los siguientes:
de manera inmediata (en un tiempo menor de una hora). ‡ $JLWDFLyQRHVWXSRU
Estas lesiones son: ‡ &LDQRVLV
2EVWUXFFLyQGHODYtDDpUHD ‡ 8VRGHP~VFXORVDFFHVRULRVGHODUHVSLUDFLyQ
2. Neumotórax a tensión ‡ 5HVSLUDFLyQUXLGRVD
7yUD[LQHVWDEOH ‡ 5RQTXLGRVJRUJRWHRRHVWULGRU
+HPRWyUD[PDVLYR ‡ 'LVIRQtD URQTXHUD 

5. Taponamiento cardiaco En pacientes traumatizados existen múltiples causas
El manejo inicial de estas lesiones que amenazan de obstrucción de la vía aérea, como se muestra en la
la vida requiere usualmente un adecuado examen físico. siguiente tabla:
Exámenes de laboratorio y radiológicos no deben retrasar
2 Lesiones maxilofaciales ฀
la intervención terapéutica. ฀ ฀ ฀
Edema
1. Obstrucción de la vía aérea Pérdidas dentales
El mantenimiento de una vía aérea permeable y de un aporte Pérdida del soporte de la lengua
Inmovilización
de oxígeno a altas concentraciones es un procedimiento ฀ ฀
de la columna cervical
esencial durante la resucitación de todos los pacientes ฀ ฀
traumatizados. Se pueden utilizar diferentes técnicas y ฀ ฀
aditamentos para mantener la vía aérea permeable; sin Parálisis del nervio laríngeo
embargo, se sigue considerando la intubacion orotraqueal recurrente
como el estándar de oro. En pacientes traumatizados no es ฀ ฀
Lesiones subglóticas
posible con frecuencia realizarla debido a la presencia de
Obstrucción Coágulos
lesiones asociadas y a la necesidad habitual de inmovilizar Vómito
la columna cervical. Cuando esta situación se presenta es Cuerpos extraños
preciso el acceso a una vía aérea permeable quirúrgica o Quemaduras
utilizando instrumentos especiales. Vale la pena mencionar con edema asociado

174 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

Todas estas situaciones pueden presentarse asociadas Existen tres tipos:


en un paciente con traumatismos del tórax y requieren 1. Tubo orotraqueal.
15
atención inmediata. 2. Tubo nasotraqueal.
8QD YH] VH LGHQWLÀFD HO SUREOHPD VX PDQHMR GHEH  9tDTXLU~UJLFD FULFRWLURLGRWRPtDRWUDTXHRWRPtD 
UHDOL]DUVHHQIRUPDLQPHGLDWD Entre las razones que ayudan a tomar la decisión de
intubar a un paciente podemos mencionar:
A. Técnicas para mantener la vía aérea D  $SQHD
permeable E  ,QFDSDFLGDGGHPDQWHQHUODYtDDpUHDSHUPHDEOHSRU
otros medios.
1. Elevación del mentón F  5LHVJRGHDVSLUDFLyQFRQVDQJUHRYyPLWR
Los dedos de la mano se colocan por debajo de la mandí- G  &RPSURPLVRLQPLQHQWHRSRWHQFLDOGHODYtDDpUHD
EXOD\VHWUDFFLRQDGHPDQHUDVXDYHD¿QGHGHVSOD]DUHO H  &RPSURPLVRGHOHVWDGRGHFRQFLHQFLDFRQXQDHVFDOD
mentón hacia adelante, mientras el dedo pulgar deprime GH*ODVJRZPHQRURLJXDOD
suavemente el labio inferior para abrir la boca. No debe I  ,QFDSDFLGDG GH PDQWHQHU XQD DGHFXDGD R[LJHQDFLyQ
producir extensión del cuello. SRURWURVPpWRGRV
J  )DOODUHVSLUDWRULDSRUXQRRPiVFULWHULRV
2. Levantamiento mandibular
‡ 6LJQRVFOtQLFRVGHIDWLJDSURJUHVLYD
Se realiza tomando los ángulos de la mandíbula con ambas
‡ 3D22
manos, una a cada lado y empujando la mandíbula hacia
arriba y hacia adelante. ‡ )UHFXHQFLDUHVSLUDWRULD!y
‡ '$D22 a FiO2!
3. Cánula orofaríngea ‡ 3D&22D)L22…
Este dispositivo debe insertarse en la boca y llegar hasta ‡ 6KXQW)UDFWLRQ4V4W!3D&2 ! a FiO2…
2
la parte posterior de la lengua, de manera que mantenga
ésta fuera de la vía aérea; sin embargo, en pacientes con C. Vía aérea quirúrgica
traumatismos importantes de la cavidad oral, con lesiones
En el manejo inicial del paciente con trauma de tórax el
DFFHVRDXQDYtDDpUHDGH¿QLWLYDTXHQRVHKDORJUDGRSRU
del paladar y las piezas dentales, o en quienes no tienen un
grave compromiso del estado de conciencia, probablemente
medio de las técnicas anteriores se realizará a través de
será difícil el uso de la cánula
una cricotiroidotomía quirúrgica, considerado un método
4. Cánula nasofaríngea sencillo, asociado con menos incidencia de sangrado y
Esta es introducida por la nariz, pero busca el mismo ob- menor tiempo para efectuarse. Por estas razones sólo nos
jetivo de la anterior. En general se indica cuando la cánula referiremos a este procedimiento y no a la traqueotomía.
RURIDUtQJHDQRSXHGHVHUXWLOL]DGD6LQHPEDUJRFRPRHQ
pVWDOHVLRQHVLPSRUWDQWHVGHODVHVWUXFWXUDVGHODFDYLGDG Cricotiroidotomía
QDVDORODSUHVHQFLDGHIUDFWXUDVGHODEDVHGHOFUiQHRQR Se puede realizar con la inserción de una aguja No. 12 - 16
permitirán su uso. a través de la membrana cricotiroidea, ubicada entre los
cartílagos tiroides y cricoides, o por medio de una incisión
%9tDDpUHDGHÀQLWLYD a este nivel y el paso de un tubo orotraqueal o de traqueos-

(VWD LPSOLFD OD XELFDFLyQ GH XQ WXER FRQ EDOyQ LQÁDGR
tomía (de diámetro entre 5 - 6.5 mm). Esta última técnica
permite una más adecuada oxigenación, pero se asocia con
dentro de la tráquea, que permite la ventilación asistida
mayor índice de sangrado relacionado con la lesión de los
rica en oxígeno.

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 175


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

vasos sanguíneos que se encuentran vasodilatados por la la atención y la experiencia de quien atiende el caso así lo
15
hipoxia y la hipercarbia. permitan.
/DWpFQLFDGHFULFRWLURLGRWRPtDTXLU~UJLFDQRVHUHFR-
mienda en niños menores de doce años, dada la posibilidad 3. Tórax inestable
que existe de lesionar el cartílago tiroides, que es el único Se presenta cuando un segmento de la pared torácica
VRSRUWHFLUFXQIHUHQFLDOTXHWLHQHODWUiTXHDVXSHULRU pierde la continuidad ósea con el resto de la caja torá-
cica, situación generalmente asociada con la presencia
2. Neumotórax a tensión de múltiples fracturas costales y que genera alteraciones
Se presenta cuando la lesión que genera comunicación importantes en la dinámica respiratoria normal. Sin
de la cavidad pleural con el exterior produce una válvula embargo, es preciso anotar que la hipoxia presente es
de una sola vía. La lesión puede estar ubicada en la pared consecuencia del traumatismo del parénquima pulmonar
torácica o en el pulmón. Esta situación produce colapso que subyace lesionado.
del pulmón afectado. Entre las causas del problema, el $O PRPHQWR GHO H[DPHQ ItVLFR GH XQ SDFLHQWH FRQ
traumatismo, tanto abierto como cerrado, constituye una traumatismos de la pared torácica y con tórax inestable, no
de las principales. VLHPSUHHVHYLGHQWHVXSUHVHQFLD$XQFRQ5[GHWyUD[TXH
En cualquier caso, el diagnóstico del neumotórax a muestran las fracturas costales no es evidente la separación
tensión es clínico, y ningún tipo de examen puede retardar condrocostal.
el manejo del problema.
Manejo
Manifestaciones clínicas El tratamiento inicial incluye la ventilación necesaria, la
'RORUWRUiFLFRIDOWDGHDLUHGL¿FXOWDGUHVSLUDWRULDWDTXL- administración de oxígeno húmedo y como pilar funda-
cardia, hipotensión, desviación de la tráquea, ausencia mental el manejo de analgesia adecuada que facilite el
unilateral del murmullo vesicular, distensión de las venas segundo pilar del tratamiento, la terapia respiratoria, pues el
del cuello, cianosis. En el hemotórax masivo se presentan dolor produce inmovilización torácica con hipoventilación,
3,8
los mismos signos, pero la presencia de hiperresonancia a atelectasias y retención de secreciones.
la percusión puede considerarse un hallazgo semiológico $SHVDUGHORDQWHULRUQRVHSXHGHSHUGHUGHYLVWDHO
que orienta el diagnóstico. hecho de que en algunos casos se requerirá manejo con
ventilación mecánica, y la principal indicación para esta
Manejo conducta es la presencia de falla respiratoria, apoyada la
Una vez establecido el diagnóstico clínico se debe realizar decisión en el seguimiento de los gases arteriales, la fre-
XQDGHVFRPSUHVLyQLQPHGLDWDTXHEXVFDUHYHUWLUODÀVLR-
8
cuencia respiratoria y la mecánica respiratoria.
patología del cuadro al disminuir la presión dentro de la En la actualidad la estabilización quirúrgica de la pared
cavidad pleural. WRUiFLFDKDPRVWUDGREHQHÀFLRVFRPSDUDGDFRQHOPDQHMR
El manejo se establece mediante la colocación de una no quirúrgico.
DJXMD JUXHVD FDOLEUH    )  HQ HO VHJXQGR HVSDFLR
LQWHUFRVWDOFRQOtQHDPHGLRFODYLFXODUHQHOODGRDIHFWDGR 4. Hemotórax masivo
(OWUDWDPLHQWRGH¿QLWLYRXQDYH]VXSHUDGRHOPDQHMR El hemotórax masivo resulta de la acumulación de ma-
inicial, corresponde a la colocación de un tubo de tórax nera rápida de más de 1.500 cc de sangre en la cavidad
3,16,17
en el quinto espacio intercostal, que permita la adecuada torácica.
(OHYHQWR¿VLRSDWROyJLFRSUHVHQWHGHELGRDODPDVLYD
3
evacuación del aire. Es preciso mencionar que este manejo
puede ser considerado inicial cuando las circunstancias de acumulación de sangre en el tórax tiene que ver con el au-

176 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

mento de las presiones dentro de la cavidad torácica, con (QODGpFDGDGHORVDxRVVHWHQWD6KRHPDNHU\FROD-


la subsiguiente compresión mecánica del mediastino, que ERUDGRUHV FODVLÀFDURQ HO WDSRQDPLHQWR FDUGLDFR HQ WUHV
lo desvían y producen la disminución del retorno venoso grados, así:
responsable de las manifestaciones clínicas de la entidad Grado I: Se presenta con 200 cc o menos de sangre y
(distensión de las venas del cuello, hipotensión), asociadas se caracteriza por aumento de PVC, con taquicardia
con la grave pérdida sanguínea, responsable a su vez de compensadora, índice cardiaco bajo y tensión arterial
las manifestaciones del choque hipovolémico presente en media baja.
estos pacientes. Grado II: Con más de 200 cc de sangre y mayor aumento
de la PVC, taquicardia, índice cardiaco bajo y tensión
Manejo arterial baja.
El manejo inmediato de este tipo de lesiones se hace con el Grado III: Si no se libera, la presión intrapericárdica iguala
drenaje de la colección intrapleural mediante la inserción de la presión de llenado ventricular, lo que ocasiona un
un tubo de toracostomía. Cuando se drenan 1.500 cc o más marcado aumento de la PVC, con hipotensión grave,
de sangre, este paciente se considera candidato a cirugía bradicardia y caída del gasto cardiaco, que conllevan
y debe ser trasladado a sala de operaciones para una tora- HQVXIDVH¿QDOKLSRSHUIXVLyQFRURQDULDJUDYH\SDUR
cotomía inmediata. cardiaco subsecuente.
En algunos pacientes en los cuales el drenaje inicial ha La liberación del taponamiento debe hacerse a través de
sido menor de 1.500 cc se presentan eventos posteriores que toracotomía (pericardiotomía) y no de pericardiocentesis,
terminan siendo indicación para toracotomía con base en debido a la alta posibilidad de resultados positivos falsos
la adecuada observación clínica del paciente. Básicamente y negativos falsos, además de lesiones iatrogénicas secun-
el drenaje de más de 200 cc por hora por tres horas ha sido darias. La toracotomía sólo debe ser realizada en presencia
de un cirujaQRFDOL¿FDGR\FRQH[SHULHQFLD
7
aceptado como un valor que motiva la realización de la
3,17
toracotomía de urgencia.
$OPDQHMRLQGLFDGRDQWHULRUPHQWHVHGHEHVXPDUOD Toracotomía de resucitación
adecuada restauración de los líquidos endovenosos y de Existen varias denominaciones que es preciso aclarar. En
la volemia. ese sentido se debe diferenciar toracotomía de urgencias,
toracotomía inmediata, toracotomía en el servicio de ur-
5. Taponamiento cardiaco gencias, toracotomía de resucitación.
La causa más frecuente corresponde a las lesiones penetran- Esta última se aplica a la toracotomía realizada a los
tes; sin embargo, en casos de lesiones por trauma cerrado pacientes LQH[WUHPLVo agónicos y cuyo propósito es evitar
también puede encontrarse acumulación de sangre en la la muerte que está por ocurrir. Estos pacientes son aquellos
3
cavidad pericárdica. que se encuentran «casi muertos» pero que conservan sig-
Dada la acumulación de sangre en el saco peri- nos vitales, o por lo menos de vida, detectables. Se debe
cárdico, una cavidad virtualmente inexpandible, se entender por signos vitales presentes una tensión arterial
produce un aumento de la presión intracavitaria, lo medible, un pulso palpable, con una frecuencia mayor a
que restringe el llenado ventricular diastólico y la 40 x`y una frecuencia respiratoria superior a 8 x`. Por su
perfusión coronaria. parte, los signos de vida son: reactividad pupilar a la luz,
Los signos clásicos de taponamiento son ingurgitación cualquier esfuerzo respiratorio, cualquier respuesta al dolor
7,19,20
venosa, hipotensión y velamiento de los ruidos cardiacos, y una actividad eléctrica supraventricular.
que constituyen la denominada tríada de Beck que sólo se Objetivos de la toracotomía de resucitación:
encuentra presente en el 30% - 65% de los casos. 1. Manejo del trauma cardiaco.

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 177


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

2. Control de la hemorragia intratorácica exanguinante. Toracotomía traumática no resucitativa


 2FOXVLyQGHDRUWDWRUiFLFD 1. Urgente
4. Masaje cardiaco directo. ‡ 7UDXPDGHJUDQGHVYDVRV
 0DQHMRGHOHPEROLVPRDpUHR ‡ /HVLyQWUiTXHREURQTXLDO
 $GPLQLVWUDFLyQ LQWUDFDUGLDFD GH FULVWDORLGHV \ ‡ /HVLyQSXOPRQDUFRQGUHQDMHGHDLUHPDVLYR
sangre. ‡ 7UDXPDGHHVyIDJR
‡ +HPRWyUD[QRUHVXHOWR
Indicaciones para toracotomía ‡ +HULGD WUDQVPHGLDVWLQDO DKRUD FRQ WHQGHQFLD DO
de resucitación manejo selectivo.
‡ /HVLRQHVFDUGLDFDVSHQHWUDQWHV
2
Tiene como objetivo primario la restauración de signos
vitales que permitan el manejo de un paciente en la sala En las páginas anteriores se hizo un registro de las
de operaciones, mientras que la toracotomía urgente no lesiones que deben ser reconocidas y manejadas en la
resucitativa es aquella que tiene lugar en pacientes con revisión primaria, objeto de la presentación; sin embargo,
signos vitales que requieren la intervención dentro de las se debe recordar que no son las únicas lesiones que pueden
siguientes horas de su admisión, basados en las indicaciones ocasionar la muerte de un paciente con trauma torácico.
que se darán. $FRQWLQXDFLyQVHPHQFLRQDQODVOHVLRQHVTXHGHEHQVHU
7RUDFRWRPtDWDUGtDHVDTXHOODTXHVHHIHFW~DGHVSXpV LGHQWLÀFDGDVHQODUHYLVLyQVHFXQGDULD\TXHHYHQWXDOPHQWH
SXHGHQWDPELpQGHVHQFDGHQDUODPXHUWHGHOSDFLHQWH
2
de un día de la admisión. Debe realizarse en sala de ope-
raciones y por un cirujano con experiencia. 1. Contusión pulmonar.
Entre las indicaciones de la toracotomía de resucita- 2. Contusión cardiaca.
ción están:  5XSWXUDDyUWLFD
3DURFDUGLDFRSRVWUDXPiWLFRFRQIUHFXHQFLDGHELGRD  5XSWXUDGHOGLDIUDJPD
exsanguinación, sangrado intraabdominal o intratorácico 5. Ruptura traqueobronquial.
no controlado, o taponamiento cardiaco.  5XSWXUDHVRIiJLFD
En trauma cerrado causa mortalidad por encima del  1HXPRWyUD[VLPSOHRFRPXQLFDQWH
 En la valoración secundaria del trauma de tórax está
‡ +HPRWyUD[PDVLYR indicada, en la mayoría de los casos, la utilización de ayudas
Generalmente debido a lesión cardiaca, de la aorta o GLDJQyVWLFDVFRPRODUDGLRJUDItDODHFRJUDItDODWRPRJUDItD
de los grandes vasos. D[LDOFRPSXWDUL]DGD\ORVHVWXGLRVGHHVyIDJR\GHODYtD
‡ 7DSRQDPLHQWRFDUGLDFR DpUHDHQWUHRWURVTXHVHUiQREMHWRGHRWURWLSRGHUHYLVLyQ
‡ (PEROLVPRDpUHR 'HVSXpV GH LQGDJDU OD OLWHUDWXUD OD UHFRPHQGDFLyQ
Lesión simultánea de bronquio y vena pulmonar, que TXH VH SURSRQH HV OD TXH VH PXHVWUD HQ ORV ÁXMRJUDPDV
FUHDXQDItVWXODEURQFRSXOPRQDU siguientes:

178 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

Manejo inicial del trauma torácico

Trauma de tórax

Inestable Estable

Obstrucción Neumotórax ฀ Neumotórax


de vía aérea a tensión masivo abierto cardiaco

Intubación ฀ ฀ ฀ ฀
cricotiroidotomía ฀
toracostomía Cierre de la herida

Trauma de tórax

Estable

฀ ฀

Manejo de área Rx de tórax


específica
Colección
significativa
Sí No

฀ ฀ Monitoría clínica

฀ ฀
Inestable

฀ ฀ ฀ ฀ ฀
o más
Sí ฀ ฀ ฀ No

Observación clínica

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 179


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

Anexo

Evaluación en los servicios de urgencias

En los servicios de urgencias el trauma torácico es una de Lesiones amenazantes


ODVVLWXDFLRQHVTXHPiVDPHQXGRFRQIURQWDQODFDSDFLGDG para la vida en forma inmediata
de rápida decisión y procedimiento del equipo a cargo.
+D\YDULRVSRVWXODGRVTXHGHEHQWHQHUVHHQFXHQWD Neumotórax a tensión
al manejar esta situación, ya que de ninguna manera No espere que su paciente tenga toda la gama diagnóstica
requiere de la presencia inmediata, en la mayoría de que tradicionalmente se plantea en los textos de trauma,
los casos, de un cirujano de tórax o de un cirujano de pero tampoco se precipite a puncionar o a hacer toraco-
trauma: WRPtD DQWH FXDOTXLHU FDVR GH GLÀFXOWDG UHVSLUDWRULD FRQ
‡ $SUR[LPDGDPHQWHHOGHORVFDVRVSXHGHQVHU OHVLyQWRUiFLFDHYLGHQWH(VWpDWHQWRDHVWDSRVLELOLGDGHQ
manejados sin necesidad de cirugía. cualquier paciente con trauma torácico cerrado o pene-
‡ 9DULDVGHODVVLWXDFLRQHVDPHQD]DQWHVSDUDODYLGD WUDQWHTXHSUHVHQWHDOJ~QJUDGRGHGLÀFXOWDGUHVSLUDWRULD
UHTXLHUHQ HQ PXFKRV FDVRV VyOR GH XQ PpGLFR GH Practique juiciosamente inspección, palpación, percusión
urgencias entrenado en detectar los eventos más co- y auscultación. La presencia de disnea, timpanismo a la
munes y en las maniobras básicas para solucionarlos. percusión y disminución o ausencia de ruidos respiratorios a
‡ 8QEXHQH[DPHQItVLFREDVDGRHQVHPLRORJtDHOH- ODDXVFXOWDFLyQHVPX\VLJQLÀFDWLYD\FDVLVLHPSUHFRQÀUPD
mental: inspección, palpación, percusión y auscul- su diagnóstico. La cianosis es muy tardía y la ingurgitación
tación, es la piedra angular de cualquier decisión. yugular o desviación traqueal no siempre estarán presentes.
‡ /RVUHVLGHQWHVTXLU~UJLFRV\HOSHUVRQDOGHSODQWD\ La hipotensión, la condición de choque, pueden existir y
en entrenamiento deben tener claros los criterios de desviar la atención a otros diagnósticos. Tenga cuidado. El
FLUXJtDLQPHGLDWD\DTXHGLIHULUXQDGHFLVLyQSXHGH neumotórax a tensión es una de las causas de choque que
VHUODGLIHUHQFLDHQWUHXQSDFLHQWHYLYR\XQDYLGD no tiene manejo quirúrgico.
que se pierde. No envíe al servicio de radiología a un paciente con esta
&XDQGR VH PDQHMD HO HVTXHPD$%&'( TXH VH sospecha diagnóstica. Recuerde que una placa de tórax que
presenta en el capítulo sobre pautas generales se hace le muestra un neumotórax a tensión indica que el paciente
claridad en que el primer postulado es detectar y manejar VHJXUDPHQWHQRIXHELHQHYDOXDGR\TXHDOJXLHQFRPHWLy
las situaciones amenazantes para la vida. XQHUURUVLJQLÀFDWLYR\DUULHVJyODYLGDGHOOHVLRQDGRDO
Una vez que ha sido valorado y manejado el com- omitir acciones de solución inmediata.
SRQHQWH$ YtDDpUHD\FRQWUROGHFROXPQDFHUYLFDO VH Proceda a colocar tubo de tórax con los lineamientos
pasa a evaluar el componente ventilatorio en busca de las que puede encontrar en la sección PROCEDIMIENTOS
VLWXDFLRQHVTXHFRQPD\RUIUHFXHQFLDDPHQD]DQODYLGD de este texto.

180 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

Hemotórax masivo FRQIUHFXHQFLDFRQFRQWXVLyQSXOPRQDU\GHEHRULHQWDUVH


Mientras las maniIHVWDFLRQHVGHOQHXPRWyUD[DWHQVLyQ la atención a evitar complicaciones y a descartar lesiones
VRQDQWHWRGRUHVSLUDWRULDV YLPRVTXHSXHGHQVHUKHPR- asociadas en otros sistemas.
GLQiPLFDV  ODV PDQLIHVWDFLRQHV GHO KHPRWyUD[ PDVLYR 8QDH[FHOHQWHWHUDSLDUHVSLUDWRULDHVIXQGDPHQWDOXQ
plan de analgesia estrictamente cumplido y objetivamente
son ante todo hemodinámicas. Un paciente con trauma
valorado; medición secuencial de gasimetría arterial; oxi-
torácico que se presente con algo de palidez, sudoración,
genoterapia y seguimiento clínico constante son vitales para
disnea, taquicardia, hipotensión, matidez a la percusión
el resultado. Los equipos de trauma deben recordar que a
torácica y disminución del murmullo vesicular debe HVWRVSDFLHQWHVOHVDTXHMDXQVLJQLÀFDWLYRGRORU\TXHHV
hacerle pensar de inmediato en este diagnóstico. Con la YLWDODWDFDUHVWHIDFWRUFRQWRGDVODVDUPDVWHUDSpXWLFDVDO
certeza diagnóstica debe proceder a colocar un tubo de DOFDQFH6LODDQDOJHVLDSHULIpULFDFRQPHGLFDPHQWRVGH
toracotomía, determinando cuidadosamente la cantidad SRWHQFLDVLJQLÀFDWLYDQRGDUHVXOWDGRHOSDSHOGHOHTXLSR
de drenaje. Mil centímetros cúbicos de sangre o más al GHDQHVWHVLRORJtDFRQODDSOLFDFLyQGHFDWpWHUSHULGXUDOHV
momento de la colocación del tubo de tórax obligan a IXQGDPHQWDO<DQRQRVGHEHSUHRFXSDUPiV´HQPDVFDUDUµ
considerar la posibilidad de cirugía torácica inmediata. probables lesiones abdominales con la analgesia. Sencilla-
Primero, porque se presume que puede existir sangrado mente entramos con todo contra el dolor, y al perder los
DFWLYR\VHJXQGRSRUTXHVHFRQÀJXUDXQULHVJRLPSRU-
criterios objetivos de valoración abdominal pedimos de
rutina un Scan de abdomen.
tante de hemotórax residual.
Si la condición del paciente llena criterios clínicos de
En algunos equipos de trabajo se acostumbra esta-
IDOODUHVSLUDWRULDTXHQRUHVSRQGHGHLQPHGLDWRDPHGLGDV
EOHFHUODFLIUDGHFFFRPRLQGLFDFLyQGHFLUXJtD
básicas, la conducta lleva a intubar el paciente y manejarlo
(OHTXLSRGHWUDXPDGHO+RVSLWDO8QLYHUVLWDULRGHO9DOOH con respiración asistida. Frecuencias respiratorias persis-
FRQVLGHUD TXH  FF VRQ VXÀFLHQWHV SDUD HVWDEOHFHU WHQWHPHQWH DFHOHUDGDV PD\RUHV GH  D   JDVLPHWUtD
XQ VLJQLILFDWLYR VLJQR GH DODUPD TXH MXQWR FRQ XQD FRQKLSR[HPLDSHUVLVWHQWHGHWHULRURGHOVHQVRULRRIDOWDGH
valoración integral de cada caso conduce a la decisión UHVSXHVWDDWHUDSLDUHVSLUDWRULDGHVRSRUWHSRUGLÀFXOWDGHV
quirúrgica inmediata. de entendimiento del paciente deben conducir precozmente
Una vez colocado el tubo de tórax la valoración de cada a ventilación asistida.
SDFLHQWHGHEHVHUFXLGDGRVD\DTXHXQGUHQDMHGHFFD Debemos aclarar que idealmente todo paciente con
FFSRUKRUDHQODVSULPHUDVFXDWURKRUDVLQGLFDWDPELpQ diagnóstico de tórax inestable debe ser manejado en una
unidad de terapia intensiva.
la necesidad de cirugía.
+R\HQGtDGHEHFRQVLGHUDUVHODÀMDFLyQGHORVDUFRV
costales con osteosíntesis.
Tórax inestable
EVWDFRQGLFLyQHVPX\IUHFXHQWHHQORVSDFLHQWHVTXHDUUL-
Neumotórax soplante o comunicante
EDQDOHVFHQDULRGHXUJHQFLDVGHO+RVSLWDO8QLYHUVLWDULRGHO
8QGHIHFWRWRUiFLFRDWUDYpVGHOFXDOXVWHGSHUFLEDHVFDSH
9DOOH$VtPLVPRVHUHSRUWDFRPRFRP~QHQORVVHUYLFLRV
de trauma de todo el mundo. GHDLUHREXUEXMHRFRQÀJXUDVXGLDJQyVWLFRGHOHVLyQFR-
&RPRFDXVDVGHFRQÀJXUDFLyQGHOFXDGURVHGHVFUL- municante o soplante. La solución de continuidad puede
EHQIUDFWXUDVFRVWDOHVP~OWLSOHVRFRVWLOODVIUDFWXUDGDVHQ ser amplia o pequeña. Lo trascendente es que si el diámetro
varios segmentos. En nuestro servicio de urgencias la gran DOFDQ]DFLHUWDVGLPHQVLRQHV JHQHUDOPHQWHGHVFULWDVFRPR
PD\RUtDGHFDVRVFRUUHVSRQGHQDSDFLHQWHVFRQIUDFWXUDV VXSHULRUHVDGRVWHUFLRVGHOGLiPHWURWUDTXHDO HOÁXMRGH
FRVWDOHVP~OWLSOHV+HPRVFRUURERUDGRTXHODPHMRURSFLyQ DLUHYDD´HVFRJHUµHQWUDU\VDOLUSRUHOGHIHFWR\QRSRU
es la dedicación disciplinada de atención a cada paciente y ODYtDDpUHDVXSHULRU(VWHHYHQWRÀVLRSDWROyJLFRJHQHUDUi
el enlace transdisciplinario sintonizado. El paciente cursará colapso pulmonar, desplazamiento mediastinal y com-

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 181


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

plicaciones de carácter respiratorio y hemodinámico que DRIUHFHUXQDRSRUWXQLGDGWHUDSpXWLFDHIHFWLYDHQPXFKDV


UHFODPDQPHGLGDVLQPHGLDWDV$PD\RUWDPDxRGHOGHIHFWR ocasiones y que requiere personal entrenado.
mayor posibilidad de este problema.
Una lesión soplante no requiere de estudio radiológico Algunas consideraciones
torácico para su diagnóstico. Usted debe proceder a limpiar Colocar un tubo de tórax no es una maniobra libre
PX\ELHQFHUUDUHOGHIHFWR\DSDVDUGHLQPHGLDWRXQWXER de complicaciones. Las situaciones amenazantes para
GHWyUD[SRUXQDLQFLVLyQGLVWLQWDGHODGHOGHIHFWR OD YLGD GHVFULWDV UHTXLHUHQ FRQ IUHFXHQFLD GH OD WRUD-
Recuerde que la lesión comunicante implica penetra- FRVWRPtD \ GH DOJXQD IRUPD HVWD VH KD PLQLPL]DGR
ción en la caja torácica y que un examen cuidadoso debe delegándola en el residente de menor experiencia o en
GHWHFWDUODHQODIDVHGHYDORUDFLyQYHQWLODWRULD el interno de turno en los servicios de urgencias. Los
WXERV GH WyUD[ SXHGHQ VDOLUVH FRQ IDFLOLGDG VL QR VRQ
Taponamiento cardiaco ELHQÀMDGRV3XHGHQUHFODPDUFDPELRLQPHGLDWRVLVH
La herida cardiaca tiene una connotación especial en el FRORFDQHQIRUPDLQDGHFXDGDRLQFOXVRSXHGHQDJUDYDU
PXQGRGHOWUDXPD(VPX\GLItFLOSDUDODVJHQWHVTXHQR condiciones preexistentes.
manejan estos eventos, entender que un paciente con una Sea muy cuidadoso al evaluar la cinemática del trauma,
lesión cardíaca penetrante puede tener un excelente pronós- el vector de la lesión y la condición clínica del paciente,
tico si se maneja con oportunidad. Las lesiones en el área pues precipitarse a colocar un tubo podría determinar ya-
precordial deben hacer sospechar siempre esta posibilidad. trogenia inaceptable.
Cualquier paciente que presente herida penetrante en este Colocar un tubo de tórax en presencia de una hernia
VHJPHQWRWRSRJUiÀFR\TXHLQJUHVHDOVHUYLFLRGHXUJHQ- GLDIUDJPiWLFD TXH VH SDVH SRU DOWR SRU HMHPSOR SXHGH
cias en estado de descompensación hemodinámica debe agravar la situación del paciente.
VHUFRQGXFLGRGHLQPHGLDWRDVDODGHRSHUDFLRQHV'LIHULU Colocar un tubo de tórax por el hallazgo de una
el manejo operatorio dos o tres minutos puede marcar el RSDFLGDGGLIXVDWRUiFLFDTXHVHDWULEX\DDXQKHPRWyUD[
ÀQDO6LODOHVLyQSUHFRUGLDOHVWiSUHVHQWHHQXQSDFLHQWH y que corresponda en realidad a una atelectasia puede
hemodinámicamente estable la conducta en el equipo de ser un error común si no se evalúa con cuidado el estu-
WUDXPDGHO+RVSLWDO8QLYHUVLWDULRGHO9DOOHHVXQDHFRJUD- GLR\VLQRVHLQWHUFRQVXOWDFRQIUHFXHQFLDDOHTXLSRGH
ItDVXE[LIRLGHDTXHHVWiHQSURFHVRGHYDOLGDFLyQ3RUOR radiología.
SURQWRHOFRQVHQVRGHOHTXLSRHVSUDFWLFDUHFRVXE[LIRLGHD (QOD8QLGDGGH7UDXPDGHO+RVSLWDO8QLYHUVLWDULRGHO
VHJXLGDGHYHQWDQDSHULFiUGLFDPLHQWUDVVHJDQDODVXÀ- Valle hemos establecido la sana costumbre de interactuar
FLHQWHH[SHULHQFLDHQODSUiFWLFDGHODHFRJUDItDTXH\DKD
FRQVWDQWHPHQWHFRQHOHTXLSRGHUHVLGHQWHV\SURIHVRUHV
sido aceptada en la mayoría de grupos de trauma como el
de radiología ante cualquier duda de interpretación radio-
estándar diagnóstico.
lógica, y esto nos ha enseñado mucho.
La pericardiocentesis no es una opción válida en mu-
FKRVFDVRVSXHVWLHQHDOWRVFKDQFHVGHIDOVRVQHJDWLYRVR
positivos, y porque en presencia de taponamiento cardiaco
Indicaciones de toracostomía
usualmente hay coágulos abundantes en el saco pericárdico
en el trauma torácico
TXH QR YDQ D SRGHU VHU GUHQDGRV D WUDYpV GH OD SXQFLyQ
Usted debe colocar un tubo de tórax en las siguientes

VXE[LIRLGHD7DOYH]HQFDVRVH[WUHPRVHQGRQGHQRKD\
circunstancias :

ninguna opción de cirujano y en los que las distancias o el ‡ 1HXPRWyUD[PD\RUGHO


escenario son muy alejados de un centro de trauma pudiera ‡ 1HXPRWyUD[PHQRUGHOHQSDFLHQWHVLQWRPiWLFR
ser una opción, aunque debe tenerse en cuenta que no va ‡ +HPRWyUD[*UDGRV,,R,,,

182 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

‡ +HULGDVRSODQWHGHOWyUD[ /DUDGLRJUDItDGHWyUD[HVLQHVSHFtÀFDSHURGHEHQWH-
‡ &XDOTXLHUQHXPRWyUD[HQSDFLHQWHOOHYDGRDFLUXJtD nerse siempre en cuenta los signos radiológicos compatibles
‡ &XDOTXLHUQHXPRWyUD[HQSDFLHQWHFRQHFWDGRDUHVSL- con lesión vascular mayor:
rador. Ensanchamiento mediastinal. Tiene una sensibilidad
GHOXQDHVSHFLÀFLGDGGHO\XQYDORUSUHGLFWLYR
‡ &XDOTXLHUQHXPRWyUD[HQSDFLHQWHTXHYDDVHUWUDVOD-
SRVLWLYRGHOHQWRGDVODVHGDGHV(QSDFLHQWHVPHQRUHV
GDGRSRUYtDDpUHD
GHDxRVWLHQHXQDVHQVLELOLGDGGHOXQDHVSHFLÀFLGDG
GHO\XQYDORUSUHGLFWLYRSRVLWLYRGHO
Lesiones amenazantes para la vida
‡ )UDFWXUDVGHODSULPHUD\VHJXQGDFRVWLOODV
detectadas durante la valoración
‡ %RUUDPLHQWRGHOERWyQDyUWLFR
secundaria
‡ 'HVYLDFLyQGHODWUiTXHDKDFLDODGHUHFKD
Un objetivo primordial de la valoración primaria es la
‡ 3UHVHQFLDGHRSDFLGDGDSLFDOSOHXUDO
detección y manejo de lesiones amenazantes para la vida.
‡ (OHYDFLyQRGHVYLDFLyQKDFLDODGHUHFKDGHOEURQ-
Por su connotación y sus características, dichas le-
TXLRIXHQWHGHUHFKR
siones suelen ser obviamente más evidentes y de mayor
‡ 'HSUHVLyQGHOEURQTXLRIXHQWHL]TXLHUGR
FRQWXQGHQFLD VHPLROyJLFD HQ VX SUHVHQWDFLyQ +D\ RWUR
‡ 2EOLWHUDFLyQGHODYHQWDQDDRUWRSXOPRQDU
tipo de lesiones que aunque podrían ser evidentes desde
‡ 'HVYLDFLyQKDFLDODGHUHFKDGHOHVyIDJR
HOSULQFLSLRSXHGHQHQRFDVLRQHVPDQLIHVWDUVHPiVVLOHQ-
3RUORSURQWRODQRUPDGHWUDEDMRHQHO+RVSLWDO8QL-
ciosamente o ser la escala para llegar a complicaciones
versitario del Valle al sospechar lesión aórtica es la toma
posteriores que pueden cobrar la vida de nuestros pacientes
GHHVWXGLRDQJLRJUiÀFRDXQTXHSURJUHVLYDPHQWHHOVFDQ
si no son manejadas con parámetros claros.
KHOLFRLGDO\HOHFRWUDQVHVRIiJLFRVHSHUÀODQFRPRH[FH-
OHQWHVDOWHUQDWLYDVSDUDHOLQPHGLDWRIXWXUR
Ruptura traumática de la aorta
Naturalmente, una vez hecho el diagnóstico debe
Es una causa común de muerte súbita en la escena de acci-
procederse a la cirugía correctiva.
dentes automovilísticos o en caídas de grandes alturas. La
OLWHUDWXUDUHSRUWDLQFLGHQFLDVGHODOHQHOSDFLHQWH
WUDXPDWL]DGR SUHVHQWiQGRVH HO  GH ODV OHVLRQHV D OD
Lesión traumática del diafragma
(OiUHDWRUDFRDEGRPLQDOHVGHÀQLGDFRPRDTXHOHVSDFLR
altura del istmo aórtico.
WRSRJUiÀFRGHOLPLWDGRDQWHURVXSHULRUPHQWHSRUXQDOtQHD
/DYLGDGHOSDFLHQWHTXHVHHQIUHQWDDXQDUXSWXUDDyU-
LPDJLQDULDTXHSDVDDWUDYpVGHODVWHWLOODV(OOtPLWHSRV-
WLFD\TXHDUULEDDXQKRVSLWDOGHSHQGHIXQGDPHQWDOPHQWH
WHURVXSHULRUHVXQDOtQHDTXHSDVDDWUDYpVGHODSXQWDGH
GHODVDJDFLGDG\ODWHUDSpXWLFDWHPSUDQDTXHHVWDEOH]FDHO
ODVHVFiSXODV(OOtPLWHLQIHULRUDQWHULRU\SRVWHULRUPHQWH
equipo de atención en urgencias. No suele haber signos y
HVHOUHERUGHFRVWDOLQIHULRU
VtQWRPDVHVSHFtÀFRV\HYLGHQWHVHQXQSULQFLSLR
(OGHORVOHVLRQDGRVPRULUiQHQODHVFHQD\HO
Toda lesión que comprometa el área toracoabdominal
REOLJDDSHQVDUHQODSUREDELOLGDGGHOHVLyQGLDIUDJPiWLFD
TXHVREUHYLYHSXHGHKDFHUORJUDFLDVDODFRQWHQFLyQ
$XPHQWRVV~ELWRVGHODSUHVLyQDEGRPLQDOFRQDXPHQWR
del hematoma en la adventicia aórtica.
GHO JUDGLHQWH GH SUHVLyQ WRUDFRDEGRPLQDO FRQÀJXUDQ HO
Todo paciente que usted atienda como consecuencia
HYHQWR ÀVLRSDWROyJLFR PiV FRP~QPHQWH DVRFLDGR D OD
de situaciones de desaceleración o de cinemática de trauma
OHVLyQGLDIUDJPiWLFDSRUWUDXPDFHUUDGR
que comprometa el componente mediastinal debe ser tribu-
Cuando la lesión es penetrante el mecanismo natu-
tario de evaluación cuidadosa. El dolor torácico, particular-
UDOPHQWHWLHQHTXHYHUFRQHOHIHFWRPHFiQLFR\ELRItVLFR
mente medioescapular, signos discretos de hipovolemia y
GLUHFWRGHODJHQWHDJUHVRUVREUHHOGLDIUDJPD
DOWHUDFLRQHVGLIHUHQFLDOHVHQORVSXOVRVVXJLHUHQODOHVLyQ

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 183


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

/RV SDFLHQWHV TXH FXUVDQ FRQ OHVLyQ GHO GLDIUDJPD resultados de una mediastinitis como complicación usual
pueden encontrarse asintomáticos aún en muchos casos y el IUHQWHDOPDQHMRWDUGtRWLHQHQXQSpVLPRSURQyVWLFR
H[DPHQItVLFRSXHGHVHUQRUPDOHQDGHSHUVRQDV (QODPD\RUtDGHRFDVLRQHVODVOHVLRQHVHVRIiJLFDVVRQ
/DQRUPDGHOHTXLSRGHWUDXPDGHO+RVSLWDO8QLYHUVLWD- resultantes de trauma penetrante y el segmento que más
ULRGHO9DOOHGHWHUPLQDTXHDWRGRSDFLHQWHGHEHGHÀQtUVHOH IUHFXHQWHPHQWHVHFRPSURPHWHHVHOFHUYLFDO(OWUDXPD
antes de su salida la existencia o inexistencia de lesión del FHUUDGRHVRIiJLFRSRUVXSDUWHVXHOHFRPSURPHWHUSRUOR
GLDIUDJPDVLWLHQHFRPSURPLVRWRUDFRDEGRPLQDO común el segmento distal.
/DUDGLRJUDItDGHWyUD[SXHGHVHUQRUPDORLQHVSHFtÀFD Clínicamente es importante poner mucha atención al
KDVWDHQGHORVFDVRV(O7$&WRUiFLFRRWRUDFRDE- dolor torácico abdominal de características inusuales o de
GRPLQDOQRRIUHFHFHUWH]DQLHVSHFLÀFLGDGGLDJQyVWLFD/D XELFDFLyQLPSUHFLVD/DGLVIDJLDODGLÀFXOWDGUHVSLUDWRULD
HFRJUDItDQRHVWDPSRFRXQHVWXGLRGHHOHFFLyQ+R\HQGtD \HOHQÀVHPDVXEFXWiQHRSXHGHQHVWDUSUHVHQWHV
la conducta es la de practicar laparoscopia si el estudio de 5DGLRJUiÀFDPHQWHHOHQÀVHPDVXEFXWiQHRHOHQÀVHPD
tórax es normal, o toracoscopia si existen anormalidades mediastinal, el aumento del espacio entre la tráquea y las
HQ OD SODFD GH WyUD[ TXH MXVWLÀFDQ WRUDFRVWRPtD 6L KD\ YpUWHEUDVHOQHXPRWyUD[HOKLGURWyUD[RHOHQVDQFKDPLHQWR
neumotórax o hemotórax se practicará toracoscopia y el PHGLDVWLQDOREOLJDQDFRQVLGHUDUODRSFLyQGHOHVLyQHVRIiJLFD
paciente quedará con su tubo de tórax. (OPpWRGRGLDJQyVWLFRGHHOHFFLyQHVODFRPELQDFLyQ
6LSRUHOFRQWUDULRODUDGLRJUDItDWRUiFLFDHVQRUPDO FRPSOHPHQWDULD GH HVRIDJRJUDPD \ HVRIDJRVFRSLD 8QR
se procede a practicar laparoscopia para evitar invadir VRORGHORVGRVQRRIUHFHVXÀFLHQWHFRQÀDELOLGDG6LKD\
innecesariamente el tórax. GLÀFXOWDGHVORJtVWLFDVSDUDSUDFWLFDUHVWRVHVWXGLRV\GX-
1RDFODUDUODSRVLELOLGDGGHOHVLyQGHGLDIUDJPD\GDU UDQWH OD HVSHUD HO SDFLHQWH GHVDUUROOD ÀHEUH XQ H[DPHQ
GHDOWDDOSDFLHQWHVLJQLÀFDSRQHUORHQULHVJRGHFRPSOL- ItVLFRFXLGDGRVRTXHGHVFDUWHRWUDIXHQWHREOLJDDFLUXJtD
FDFLRQHVIXWXUDVLQDFHSWDEOHV/DKHUQLDGLDIUDJPiWLFDTXH inmediata ante la sospecha de mediastinitis.
se desarrolla progresivamente conduce a encarcelamiento
y probable estrangulamiento del componente abdominal Lesión traqueobronquial
en el tórax y esta situación se asocia a una mortalidad Entre la gama de posibilidades a considerar durante la eva-
VLJQLÀFDWLYD DGHFDVRV  luación secundaria, la lesión del árbol traqueobronquial es
Toda herida penetrante toracoabdominal debe ser so- WDPELpQGHPXFKDWUDVFHQGHQFLD
metida a estudio laparoscópico o toracoscópico, excepción /HVLRQHVJUDYHVGHODYtDDpUHDVXHOHQGHVHQFDGHQDUOD
hecha de las lesiones toracoabdominales posteriores dere- PXHUWHHQODHVFHQDGHOWUDXPD/HVLRQHVGHPHQRUVLJQLÀ-
FKDVVLWXDFLyQHQODFXDOHOKtJDGRHMHUFHXQDHIHFWLYDSUR- cancia o que son tratadas prontamente en el hospital suelen
tección contra la posibilidad de herniación. Los pacientes PDQLIHVWDUVHSRUGLÀFXOWDGUHVSLUDWRULDGLVIRQtDHQÀVHPD
con esta última situación no se intervienen, y se tratan con subcutáneo o aun por descompensación hemodinámica.
observación que descarte lesiones asociadas. Naturalmente, /DUDGLRJUDItDWRUiFLFDPRVWUDUiDOWHUDFLyQGHOHVSDFLR
si la lesión toracoabdominal derecha posterior cursa con UHWURIDUtQJHR QHXPRWyUD[ QHXPRPHGLDVWLQR FRODSVR
DEGRPHQDJXGRRFRQFKRTXHUHIUDFWDULRHOSDFLHQWHGHEH pulmonar o una combinación de estas.
ser llevado a cirugía inmediata independientemente de las (OSDVRGHWXERGHWyUD[FRQIUHFXHQFLDVHDVRFLDD
consideraciones anteriores. drenaje abundante y persistente de aire sin resolución del
neumotórax.
Lesión esofágica Si usted maneja un paciente con trauma cerrado o
(OHVyIDJRHVXQyUJDQRFX\RVHIHFWRVWUDXPiWLFRVVXHOHQ SHQHWUDQWHWRUiFLFRFRQLPSRUWDQWHGLÀFXOWDGUHVSLUDWRULD
ser devastadores si no se detectan a tiempo, ya que los y drenaje abundante de aire por el tubo de toracostomía,

184 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

la conducta debe ser decidida. Mientras no se demuestre \ DJRVWR GH  GH  SDFLHQWHV FRQ WUDXPD FHUUDGR
lo contrario el paciente debe ir de inmediato a cirugía para WRUiFLFRGHORVFXDOHVVHLQFOX\HURQHQHOHVWXGLRGH
manejo de lesión de la vía respiratoria. Conductas contem- contusión cardíaca. Este estudio encontró que cambios
plativas o medidas de observación en estos casos suelen HOHFWURFDUGLRJUiÀFRVFRPRHOHYDFLyQRGHSUHVLyQGHOVHJ-
WHQHUGHVHQODFHVIDWDOHV mento ST, inversión de la onda T o anormalidades de la
conducción sugerían pacientes en riesgo de complicaciones.
Trauma cardiaco cerrado /DQRUPDGHWUDEDMRGHO+RVSLWDO8QLYHUVLWDULRGHO9D-
Esta situación involucra una gama de posibilidades que OOHIUHQWHDHVWDSRVLELOLGDGGLDJQyVWLFDHVODGHSUDFWLFDUXQD
incluyen la contusión miocárdica, la ruptura de la cavidad UDGLRJUDItDWRUiFLFD\FRPRPtQLPRXQHOHFWURFDUGLRJUDPD
cardiaca o la ruptura valvular. La contusión genera una /DHFRFDUGLRJUDItDKDFHSDUWHGHODUVHQDOGLDJQyVWLFRGH
GLVIXQFLyQWUDQVLWRULDRSHUPDQHQWHGHOPLRFDUGLRVLQOD acuerdo con la evaluación inicial.
SUHVHQFLDGHOHVLyQFRURQDULDRHQIHUPHGDGFRURQDULDFRPR (OHQIRTXHWHUDSpXWLFRUHTXLHUHLGHDOPHQWHPRQLWRULD
WDO(OSDFLHQWHSXHGHPDQLIHVWDUPDOHVWDUUHWURHVWHUQDOR durante doce a veinticuatro horas en unidad de cuidado
puede llegar a un cuadro complejo en el que se presentan LQWHUPHGLR$QWHFXDOTXLHUGDWRFRQÀUPDWRULRHOPDQHMR
DUULWPLDVFDUGLDFDVKLSRWHQVLyQKLSRSHUIXVLyQHLQFOXVR debe hacerse en una unidad de terapia intensiva con los
FKRTXHGHFDUiFWHUFDUGLRJpQLFR FULWHULRVGHWHUDSLDGHXQSDFLHQWHFRQLQIDUWRPLRFiUGLFR
Estudios prospectivos han demostrado que la mayoría (OWUDXPDWRUiFLFRHVXQDFRQGLFLyQPX\IUHFXHQWH
GHODVFRPSOLFDFLRQHVIXHURQDUULWPLDV La disciplina en el cumplimento de pautas cuidadosas para
+DFLDXQHVWXGLRGHVFULSWLYRGHO+RVSLWDO8QLYHU- VXGLDJQyVWLFR\PDQHMRHVIXQGDPHQWDOVLVHHVSHUDQORV
VLWDULRGHO9DOOHUHYLVyODFDVXtVWLFDHQWUHIHEUHURGH mejores resultados posibles en cada paciente.

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 185


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

Trauma cardiaco

La herida del corazón es uno de los temas que más Presentación clínica
controversia han generado tanto para el mundo artístico
FRPRSDUDHOPXQGRFLHQWt¿FR6HWUDWDGHOyUJDQRYLWDO
La herida del corazón tiene tres formas de presentación
clínica: taponamiento cardíaco, hemorragia exsanguinan-
relacionado por los antiguos con el lugar donde habitaba te o paciente con herida precordial y sospecha de herida
el alma. Desde la Ilíada\SDVDQGRSRU$ULVWyWHOHV*DOHQR cardiaca que se encuentra estable hemodinámicamente
y Paré se trató de describir la forma en que se lesionaba (Figuras 1 y 2).
el corazón y cómo esta lesión indefectiblemente conducía
a la muerte.
En nuestro tiempo las lesiones cardiacas están aso-
ciadas a un alto índice de mortalidad y por ello una mejor
comprensión y conocimiento de este tema deberán contri-
buir a aumentar la sobrevida de los pacientes.
Se reporta que en los Estados Unidos alrededor de
nueve millones de lesiones traumáticas comprometen el
tórax cada año, y de las muertes traumáticas un 22% a
25% se deben a traumas torácicos. $SHVDUGHOGHVDUUROOR
70

de los sistemas hospitalarios que han ido incrementando


la velocidad con que se transporta a los pacientes hasta el
VLWLR¿QDOGHDWHQFLyQ\DODPHjoría en el recurso para la
atención misma, alrededor de un 60% de las personas que
sufren una herida penetrante del corazón mueren en el
sitio de la escena. Esta muerte se debe a exsanguinación, Figura 1. Imagen de derrame pericárdico en el paciente estable.
taponamiento cardíaco, laceración de una arteria coronaria
o un daño vascular mayor. Sin mencionar el cambio en la
epidemiología de las lesiones cardiacas, que antes en su
mayoría se debían a las armas cortopunzantes y ahora a
proyectiles de arma de fuego y a trauma de alta velocidad
en accidentes de tránsito, dichas lesiones continúan repre-
sentando un reto para los cirujanos de trauma y para los
70,71,72
centros donde se atiende a estos pacientes.
En nuestro medio la mortalidad en el sitio de la escena
es del 53%, y el 37% de los heridos fallecen en el hospital,
87
según un trabajo realizado por Ferrada y colaboradores. Figura 2. Clásica herida precordial con paciente estable.

186 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

En los pacientes que logran llegar vivos al hospital la y a su vez en las ciudades se construyen avenidas y calles
sangre se acumula en el pericardio, inicialmente con un efec- donde se puede circular a mayor velocidad.
to protector frente a la hemorragia, pero con el transcurso Lo anterior ha hecho que el trauma cerrado de tórax
del tiempo esta sangre acumulada empieza a restringir los sea una de las consultas más frecuentes en los centros de
movimientos cardiacos, disminuyendo así el volumen de urgencias. En una revisión hecha en Finlandia entre 1972
latido y su efecto llega a ser deletéreo; esto se compensa y 1985 encontraron 3.468 accidentes de tránsito con 1.121
con un aumento en la presión de la aurícula derecha y un (26.9%) traumatismos del tórax, representando la segunda
73
incremento de la presión de llenado del ventrículo derecho; causa de lesión y la primera de muerte.
luego este aumento en la presión desvía el septum hacia En nuestro medio en el año 1995 se realizó un estudio
la izquierda y disminuye el llenado ventricular izquierdo; durante nueve meses que incluyó a 4.961 pacientes de
termina en hipotensión, isquemia miocárdica, acidosis sisté- accidentes de tránsito, y de ellos el 70% tenían trauma de
95
mica y lleva al taponamiento. En este momento un 40% de tórax y abdomen.
los pacientes presentan ingurgitación yugular, hipotensión y El trauma cerrado del corazón es uno de los mayores
velamiento de los ruidos cardíacos, que se conoce como la retos diagnósticos a los que se enfrenta el cirujano de trau-
76,84,86
tríada de Beck. Sin embargo, otros signos que ayudan ma; si bien esta lesión puede variar desde una contusión
para establecer el diagnóstico son el pulso paradójico, un cardiaca menor hasta una ruptura cardiaca. Las lesiones
paciente que no es capaz de permanecer en posición supina, provocadas por un trauma contuso del corazón se deben
y taquicardia. No se debe olvidar que toda herida precordial principalmente a los accidentes de tránsito a alta veloci-
88
compromete el corazón hasta no demostrar lo contrario. dad, y en menor proporción a caídas de alturas, traumas
El otro tipo de pacientes, aquellos en los que la sangre violentos directos o lesiones por estallido; más raras son las
QRVHFRQWLHQHHQHOSHULFDUGLRVLQRTXHÀX\HOLEUHPHQWH lesiones iatrogénicas al aplicar maniobras de masaje cardía-
a la cavidad pleural o al exterior, la mayoría muere en el co durante una reanimación cardiopulmonar. Las lesiones
sitio de la escena. Si alcanzan la atención en un hospital, encontradas varían desde una contusión cardiaca, ruptura
76,84,88
presentarán signos de choque hipovolémico. de la pared cardiaca, ruptura del septo, daño valvular,
En pacientes que se presentan estables pero con una hasta daño a un vaso coronario y laceración al pericardio.
herida con alta sospecha de lesión cardiaca se debe recurrir Los mecanismos implicados en la lesión comprenden la
a alguno de los métodos diagnósticos disponibles en cada desaceleración rápida, la transferencia directa de energía
centro de atención. Empero, el desenlace de este grupo de durante el impacto en el tórax y la compresión del corazón
75,76,77
pacientes puede llegar a ser potencialmente desastroso por entre el esternón y la columna.
presentarse con un taponamiento tardío que en cualquier Se ha comprobado que los pacientes con lesiones gra-
PRPHQWRSXHGHKDFHUHOFXDGURFOtQLFRGH¿QLWLYRFRQXQD ves del corazón que no alcanzan a recibir atención médica
76
gran posibilidad de fallecer. fallecen en el lugar de la escena, mientras que los que
3DUDHVWXGLDUHOWUDXPDFDUGtDFRGHEHPRVFODVL¿FDUOR logran acceder a un centro de trauma con signos vitales
en dos cuadros principales: el trauma cerrado y el trauma presentes tienen una sobrevida de alrededor de un 50%, y
SHQHWUDQWH\DTXHODFLQpWLFD\OD¿VLRSDWRORJtDGHODOHVLyQ ello depende de la efectividad con que se busque la lesión
75
son diferentes aunque pueden coincidir en un mismo punto cardiaca. La mayoría de los pacientes al momento de la
que es el taponamiento cardíaco y la muerte. consulta son asintomáticos, y se ha reportado que fracturas
costales múltiples, presencia de soplos nuevos en la auscul-
Trauma cerrado tación cardiaca y estigmas de traumatismo en el tórax son
Debido al desarrollo tecnológico y a la industria automoto- indicadores para aumentar la vigilancia y sospechar una le-
73,75,76
ra, cada día aparecen en el mercado vehículos más veloces sión del corazón. El enfoque del tratamiento en dicho

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 187


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

paciente debe incluir un electrocardiograma y monitoreo Se reporta en la literatura un cambio en el comporta-


cardíaco continuo durante 24 horas mientras se le practica miento, a través del tiempo, en el tipo de arma utilizada.
una ecocardiografía para detectar la presencia de derrame (QXQDUHYLVLyQKHFKDSRU0DWWR[PXHVWUDTXHGH
pericárdico. Ya se ha visto relegada la necesidad de hacer heridas cardiovasculares, 539 afectaban el corazón y un
PRQLWRUHRFRQ&3.0%VHULDGDFRQHOHFWURFDUGLRJUDmas
81
50% fueron por arma de fuego. En una revisión de autop-
seriados u otro tipo de procedimientos diagnósticos, ex- sias durante los años 1985 y 1986 realizada por Naughton
cepto en el paciente con trastornos metabólicos, paciente y colaboradores reportan un 57% de heridas cardiacas por
71
anciano o cardiaco y/o hemodinámicamente inestable, arma de fuego y un 39% por arma cortopunzante. Sin
GHELGRDODVOHVLRQHVDVRFLDGDVFXDQGRVHMXVWL¿FDHOVH- HPEDUJR$VHQFLRUHSRUWDXQGHKHULdas producidas
72
guimiento. En nuestro hospital, si el paciente está estable por arma de fuego. En el Hospital Universitario del Va-
y la ecocardiografía fue positiva, se le debe practicar una lle se han realizado tres estudios al respecto. El primero
ventana pericárdica subxifoidea. Si el paciente está ines- de ellos por Ferrada y colaboradores entre 1980 y 1989,
table, con ecocardiografía positiva o negativa, debe ser donde observaron 437 heridas cardiacas, de las cuales un
74,75,76,77
llevado a toracotomía. 86% fueron por arma cortopunzante y un 12% por arma de
85
fuego. Posteriormente el mismo Ferrada y colaboradores
Trauma penetrante revisaron 634 necropsias y hallaron un 47% de heridas por
Debido al aumento de la violencia en nuestro país y a la arma cortopunzante y un 42% por arma de fuego. En otra
relativa facilidad de la población para acceder a un arma, revisión hecha por Currea y colaboradores mostraron un
cada día nos vemos enfrentados a una mayor incidencia de 63% de heridas por arma cortopunzante y un 37% por arma
86
personas heridas con diferentes objetos. En la Figura 3 se de fuego, entre 1993 y 1997, en 1.101 pacientes.
muestra el área precordial que en el Hospital Universitario En cuanto al compromiso de las estructuras cardiacas,
GHO9DOOHVHKDGH¿nido para sospechar compromiso del los estudios muestran resultados similares, con alrededor
corazón. de un 37% para el ventrículo derecho, 30% para el ven-
trículo izquierdo, 7% para la aurícula derecha y 2% para
70,71,72,86
la aurícula izquierda Esto parece explicarse por
la posición anterior de los ventrículos, especialmente el
derecho, y la relativa protección que le ofrece su posición
posterior a las aurículas.
La mortalidad de las lesiones cardiacas se ha analizado
en diIHUHQWHVHVWXGLRV(VGHDQRWDUTXHHQHOODLQÀX\HQ
varios factores como la estructura cardiaca comprometida y
el estado del paciente al ingreso. En el Cuadro 1 se aprecia
la mortalidad comparativa entre los estudios mencionados.

Cuadro 1. Mortalidad comparativa entre estudios.

No. de casos Mortalidad


Autor HPAC HPAF HPAC HPAF
Naughton2 28 (39%) 41 (57%) 68% 97%
18 303 (47%) 279 (42%) 60% 81%
3 68 (64%) 37 (35%) 35% 83%
Figura 3. Área precordial. 1 130 (67%) 62 (32%) 20% 40%

188 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

Métodos diagnósticos Ecocardiografía


Este método ha demostrado tener una sensibilidad del 90%,
Ventana pericárdica subxifoidea XQDHVSHFL¿FLGDGGHO\XQDH[DFWLWXGGHOHQHO
Es el método gold-stándard para el diagnóstico de hemo- diagnóstico de derrame pericárdico, y detecta líquido a
pericardio. Se realiza con una incisión vertical por la línea partir de 50 cc. Su gran inconveniente se presenta cuando
PHGLDVREUHHODSy¿VLV[LIRLGHRVLQHQWUDUHQODFDYLGDG concomitantemente existe derrame pleural o neumotórax,
peritoneal se visualiza el pericardio y se comprueba si pues puede conIXQGLUDOREVHUYDGRU$GHPiVHVXQH[D-
existe sangre dentro de él. Si bien es un método invasivo, men costoso y de disponibilidad limitada debido al recurso
$XQTXHVHDVRFLDFRQXQ
76,90 84,89,91
es seguro, rápido y preciso. humano que no está presente las 24 horas del día.
aumento de la morbilidad y alrededor de un 80% de exá-
menes negativos, continúa siendo el método diagnóstico Ecografía subxifoidea
76,90
en nuestro hospital. Sin embargo, hoy en día ha sido Este método, derivado del Eco-Fast para detectar líquido
desplazado por otros métodos no invasivos. En la Figura 4 libre en la cavidad peritoneal, demostró un excelente
se observa un paciente con una herida precordial que ingre- comportamiento al momento de evaluar la presencia de
só al hospital hemodinámicamente estable y fue llevado a derrame pericárdico, con la ventaja de ser repetible, fácil
ventana pericárdica, hallándosele una herida cardiaca, por de realizar y de costo bajo. Se demostró además que puede
lo que hubo que realizársele una toracotomía. ser desarrollado por un cirujano con entrenamiento, en
la misma sala de admisiones, con una alta sensibilidad y
HVSHFL¿FLGDG'HEHFRQYHUWLUVHHQHOH[Dmen de elección
en el paciente con trauma cardíaco, hemodinámicamente
92,97,98,99
estable. En la Figura 5 observamos un fotograma
de una ecografía subxifoidea donde se ve el líquido libre en
el espacio pericárdico, compatible con hemopericardio en la
parte superior, y en la parte inferior la pared del ventrículo
izquierdo desplazada por el derrame.

Figura 5. Ecografía subxifoidea

Dentro del estudio del trauma cardíaco, debido a su


complejidad y a su alta mortalidad, se ha tratado de desarro-
Figura 4. Herida precordial y cicatriz de ventana pericárdica y
toracotomía. llar algún método que permita, a través de una evaluación

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 189


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

rápida, predecir la evolución de los pacientes y con ello (QXQWUDEDMRGHFRUUHODFLyQHQWUHORVGLIHUHQWHVtQGL-


aproximarse al mejor tratamiento posible; además, que ces de trauma, realizado por Coimbra y colaboradores, se
posibilite la confrontación entre el tipo de pacientes aten- PXHVWUDXQDPRUWDOLGDGGHOFRQSXQWRV\GH

didos reportados en los diferentes trabajos que se publican con 15 puntos, corroborando lo encontrado por Ivatury.
y la información entre diversas hospitales. Para ello se han
Tabla 2. Índice fisiológico
desarrollado, luego de muchos estudios, los índices de
WUDXPDTXHSXHGHQVHUDQDWyPLFRVR¿VLROyJLFRV
Clasificación Puntaje Signos clínicos

/D6RFLHGDG$PHULFDQDSDUDHO(VWXGLRGHO7UDXPD
Choque 5 ฀ ฀ ฀ ฀

$$67 HVWDEOHFLyXQDWDEODSDUDHVWUDWL¿FDUHOJUDGRGH
฀ 10 Semiconsciente, pulso filifor-
me Sin presión, respiración
lesión cardíaca en cirugía, convirtiéndose en el índice débil.
anatómico más aceptado (Tabla 1). ฀ 15 ฀ ฀ ฀ ฀ ฀
en el transporte.
Muerto al arribo 20 Sin signos vitales desde el
Tabla 1. Clasificación de la AAST para lesión cardiaca. primer contacto.
Escala orgánica de lesiones cardiacas
Grado Descripción de la lesión
(Q  &KDPSLRQ \ FRODERUDGRUHV SXEOLFDURQ XQD
I ฀ ฀ ฀ ฀
฀ ฀ ฀ ฀ ฀ UHYLVLyQGHO6FRUHGH7UDXPD 76SRUVXVVLJODVHQLQJOpV 
II
Sin taponamiento. y demostraron cómo el nuevo índice resultante, conocido
฀ ฀ ฀ ฀ ฀ FRPRHOÌQGLFH5HYLVDGRGH7UDXPD 576SRUVXVVLJODV
฀ ฀ ฀฀ ฀ ฀ ฀ ฀
HQLQJOpV TXHLQFRUSRUDODHVFDODGHFRPDGH*ODVJRZ
oclusión de vasos coronarios sin insuficiencia.
III
฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ OD SUHVLyQ DUWHULDO VLVWyOLFD \ OD IUHFXHQFLD UHVSLUDWRULD
Con taponamiento. Como en III pero con SHUPLWHGHXQDPDQHUDUiSLGDIiFLO\FRPSDUDEOHREWH-
insuficiencia cardiaca asociada.
ner dos medidas que pueden ser útiles en dos escenarios
฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ 
IV ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ GLIHUHQWHV
Lesión con oclusión coronaria proximal. En el primer caso es en el ambiente prehospitalario,
Perforación del ventrículo izquierdo. donde se conoce como el t-RTS, con una escala de 1 a 12
V
฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀
y en la que cualquier puntaje igual o menor de 11 debe
Lesiones extensas con pérdida de > 50% de una
VI
cámara cardiaca. LQGLFDUDODSHUVRQDTXHDWLHQGHDOSDFLHQWHTXHpVWHGHEH
VHUWUDVODGDGRFRQXUJHQFLDDXQFHQWURGHWUDXPD 7DEOD 
6LVHHYDO~DODFODVLÀFDFLyQGHOD$$67VHHQFXHQWUD
que con lesiones entre los grados IV y VI la mortalidad

Tabla 3.฀ ฀ ฀ ฀
RVFLODHQWUH\
Escala de Presión
Ivatury y colaboradores desarrollaron el Índice Fisioló- Frecuencia Valor
coma arterial
respiratoria asignado
gico, que se basa en el estado clínico del paciente al ingreso. de Glasgow sistólica
De acuerdo con los parámetros que se observan en la Tabla 13-15 >89 10-29 4
2 se asignan 5 puntos a cada categoría, y se puede llegar a
9-12 76-89 >29 3
SUHGHFLUHOUHVXOWDGRÀQDOGHGLFKRSDFLHQWH(QHVWHHVWXGLR
ninguno de los pacientes que llegó con un índice superior 6-8 50-75 6-9 2
DSXQWRVVREUHYLYLy\HQFDPELRHQORVTXHOOHJDURQ 4-5 1-49 1-5 1
FRQXQtQGLFHGHPHQRVGHSXQWRVODVXSHUYLYHQFLDIXH
3 0 0 0
VXSHULRUDO

190 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

En el segundo caso es en el ambiente hospitalario, EUHYLGD\HOULHVJRGHPRUWDOLGDGGHORVGLIHUHQWHVtQGLFHV


donde los valores de las tres variables se multiplican por \ORVSULQFLSDOHVVRQHO5HYLVHG7UDXPD6FRUH 576 \OD

un valor constante y se obtiene un número que se asocia escala de coma de Glasgow.
con un porcentaje de supervivencia. La escala va de 1 a En este mismo estudio se evalúa la presencia de
 7DEOD  WDSRQDPLHQWRTXHVHKDSRVWXODGRFRPRXQIDFWRUSURWHF-
(Q HO HVWXGLR SURVSHFWLYR UHDOL]DGR SRU$VHQFLR \ tor para la mortalidad en el trauma cardiaco penetrante, y
FRODERUDGRUHVVHUHDÀUPDODXWLOLGDGSDUDSUHGHFLUODVR- la conclusión a la que llegan es que la verdad es elusiva
hasta el momento y se necesitan estudios que evalúen el
Tabla 4.฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ ฀ WLHPSRGHHYROXFLyQGHODVOHVLRQHVSDUDGHWHUPLQDUHQTXp
Porcentaje de PRPHQWRHOWDSRQDPLHQWRFDUGLDFRSDVDGHVHUXQIDFWRU
Valor del RTS 
supervivencia SURWHFWRUDVHUXQIDFWRUGHOHWpUHR
8 0.988 Como se ha visto, el trauma cardiaco es un tema
7 0.969
DSDVLRQDQWHSRUORVUHWRVTXHUHSUHVHQWD\HQHO+RVSLWDO
6 0.919
Universitario del Valle es motivo de constante revisión.
5 0.807
4 0.605 Se pretendió con este capítulo dar a conocer los aspectos
3 0.361 relevantes de este tipo de lesiones y las razones de la apro-
2 0.172 ximación diagnóstica que se practica en esta institución,
1 0.071 KDFLHQGRpQIDVLVHQODVOLPLWDFLRQHVGHQXHVWURPHGLR\
0 0.027 con la intención de entusiasmar a otros a continuar con el
estudio del trauma en nuestro país.

Manejo del trauma cardiaco


Inestable Estable

Ecografía subxifoidea

Cirugía Ventana pericárdica


subxifoidea

Positiva Negativa

Salida

(QHO+RVSLWDO8QLYHUVLWDULRGHO9DOOHOXHJRGHXQDHFRJUDItDVXE[LIRLGHDVHUHDOL]DXQDYHQWDQDSHULFiUGLFDVXE[LIRLGHDLQGHSHQGLHQWHPHQWHGHO
resultado, hasta que un estudio que está en marcha permita evaluar su validez.

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 191


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

Trauma transmediastinal

El trauma transmediastinal es un trauma penetrante del HVWXGLRVTXHVHGHEHQVROLFLWDUSDUDGHVFDUWDUODVGLIHUHQWHV


tórax con un tipo de vector especial en el que se atraviesa lesiones según el compromiso visto clínicamente.
HOPHGLDVWLQRHVWUXFWXUDDQDWyPLFDHQODFXDOFRQÁX\HQ
varios elementos que generalmente se analizan por sepa- Evaluación clínica
rado, pero que en este tipo de lesión se unen y representan 1. Se deben seguir los lineamientos dados por el Colegio
un reto importante para el equipo de trauma. $PHULFDQRGH&LUXMDQRVHQVXFXUVR$7/6GHHYDOXD-
El análisis de este tipo de trauma es a menudo una ción del paciente politraumatizado y que divide los
VLWXDFLyQFRQÁLFWLYDVLELHQHQODVUHYLVWDVGHXUJHQFLDV pacientes en dos grupos: paciente en choque, el cual
se deben tratar de dilucidar los vectores de los mecanis- debe ser llevado inmediatamente a cirugía; y paciente
mos causantes de la lesión, lo cual no siempre es lógico y estable, que permite ser dejado en observación y tomar
IiFLO\JHQHUDFRQWURYHUVLDHQWUHORVFLUXMDQRVTXHGHEHQ los estudios pertinentes.
atender el caso. Por lo tanto, en esta revisión se trata de dar 2. El paciente inestable no representa ninguna contro-
XQHQIRTXHJHQHUDOGHODIRUPDHQTXHVHGHEHDERUGDUD versia, debe ser llevado a cirugía; sin embargo, es el
estos pacientes que, repetimos, siempre serán un gran reto paciente estable el que se convierte en un reto por la
para las unidades de trauma. necesidad de estudios complementarios que en nuestro
El mediastino es una estructura localizada en la por- medio y en su mayoría no son accesibles para la pobla-
ción central del tórax, entre las dos cavidades pleurales, el ción general.
GLDIUDJPD\HORSpUFXORWRUiFLFR8VXDOPHQWHVHGLYLGHHQ  (QODHYDOXDFLyQVHFXQGDULDGHOSDFLHQWHVHGHEHWHQHU
‡ $QWHULRU&RUUHVSRQGHDOHVSDFLRHQWUHODSDUHGSRV- en cuenta que los posibles órganos comprometidos son:
WHULRUGHOHVWHUQyQ\HOSHULFDUGLR$OOtVHHQFXHQWUDQ FRUD]yQJUDQGHVYDVRVYtDDpUHD\HVyIDJR
JUDVDPHGLDVWLQDOHOWLPR\DOJXQRVJDQJOLRVOLQIiWLFRV Evaluación del trayecto cardiaco: Cuando al hacer
‡ 0HGLR&RUUHVSRQGHDOHVSDFLRHQWUHHOSHULFDUGLRDQ- el análisis del paciente estable se sospecha que pueda tener
WHULRU\ODIDVFLDSUHYHUWHEUDO$OOtVHHQFXHQWUDQWRGDV una herida cardíaca, en nuestra institución la recomenda-
ODVHVWUXFWXUDVYDVFXODUHV FRUD]yQ\JUDQGHVYDVRV  FLyQHVKDFHUXQDHFRJUDItDVXE[LIRLGHD\SRVWHULRUPHQWH
YtD DpUHD GH FRQGXFFLyQ WUiTXHD EURQTXLRV IXHQWH  FRQILUPDU ORV KDOOD]JRV FRQ XQD YHQWDQD SHULFiUGLFD
\HOHVyIDJRSRUORTXHVHOHKDGHQRPLQDGRHVSDFLR VXE[LIRLGHD/RDQWHULRUGHELGRDTXHODHIHFWLYLGDGGHOD
visceral. HFRJUDItDHQQXHVWURPHGLRQRKDVLGRHYDOXDGD\DSHVDU
‡ 3RVWHULRU&RUUHVSRQGHDOHVSDFLROODPDGRVXUFRSDUD- de que en otros centros de trauma tiene una sensibilidad
vertebral, donde se encuentran principalmente estruc- \HVSHFLÀFLGDGFHUFDQDVDOHQQXHVWURKRVSLWDOVH
turas nerviosas. espera la conclusión de un estudio que está comparando
Por lo tanto, cuando se tiene la sospecha de una herida HOUHVXOWDGRGHODHFRJUDItDFRQHOUHVXOWDGRGHODYHQWDQD
transmediastinal, generalmente es porque se considera SHULFiUGLFD< DGHPiV HQ QXHVWUD LQVWLWXFLyQ Vt KD VLGR
TXHDIHFWDDOPHGLDVWLQRPHGLR\HVOyJLFRSHQVDUHQORV demostrado el desempeño de la ventana pericárdica, que

192 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

PXHVWUDXQDVHQVLELOLGDG\HVSHFLÀFLGDGFHUFDQDVDO respiratoria en un paciente con una placa antero-posterior de


con una morbilidad mínima. tórax, que puede mostrar desde la presencia de un neumotó-
Evaluación de los grandes vasos: La primera sos- rax hasta una disección del mediastino o neumomediastino
pecha de lesión vascular mediastinal ocurre cuando en y que hace del paciente una urgencia para realizarle una
la placa anteroposterior de tórax, que en nuestra institu- ÀEUREURQFRVFRSLDTXHSHUPLWDHYDOXDUHOJUDGR\HOVLWLR
ción se toma habitualmente en el servicio de trauma, se de la lesión.
encuentra un ensanchamiento mediastinal. Si a esto se Evaluación del esófago:(OHVyIDJRHVWDOYH]GHWRGRV
le suma un vector sospechoso la indicación es realizar el que representa el mayor reto pues se debe tener siempre
un angioscan que permite visualizar y reconstruir los en mente pero usualmente no se considera, y cuando se
elementos vasculares del mediastino. En caso de no tener sospecha su lesión el paciente ha desarrollado una respuesta
HVWHUHFXUVRODRSFLyQHVUHDOL]DUXQDRUWRJUDPDPpWRGR LQÁDPDWRULDVLVWpPLFDJUDYHSRUORWDQWRODFRUUHFWDDFWLWXG
que es invasivo y que implica un costo similar. SDUDHOGLDJQyVWLFRGHXQDOHVLyQHVRIiJLFDHVODGXGDSRU
Evaluación de la vía aérea:$OLJXDOTXHHQODHYD- parte del cirujano de urgencias. Segundo, se debe realizar
luación de los grandes vasos, la sospecha de lesión de la XQHVRIDJRJUDPD\XQDHVRIDJRVFRSLDTXHVXPDGDVUHSUH-
YtDDpUHDQDFHGHXQH[DPHQItVLFRTXHUHYHODGLÀFXOWDG VHQWDQXQDVHQVLELOLGDG\HVSHFLÀFLGDGFHUFDQDVDO

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 193


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

Bibliografía  $PHULFDQ&ROOHJHRI6XUJHRQV&RPPLWWHHRQ7UDXPD$7/6


´7UDXPDWRUiFLFRµ&DS3URJUDPD$YDQ]DGRGH$SR\R
 )HUUDGD5LFDUGR*DUFtD$OEHUWR3HQHWUDWLQJWURVRWUDXPD 9LWDOHQ7UDXPDSDUD0pGLFRV((88
$GYDQFHVLQ7UDXPDDQG&ULWLFDO&DUHYRO  'HYLWW - +XJK ´%OXQW 7KRUDFLF WUDXPD $VVHVVPHQW
 %DU1DWDQ0DUFRV5LFKDUGVRQ-'DYLG*DUFtD$OEHUWR 0DQDJHPHQWDQG$QDHVWKHVLDµ:LQWHUOXGH0DLQ3DJH
Sociedad Panamericana de Trauma. 'HSDUWPHQW RI$QHVWKHVLRORJ\ 2WWDZD +RVSLWDO  *HQHUDO
 $GYDQFHG7UDXPD/LIH6XSSRUW$7/66H[WD(GLFLyQ 6LWH)LOH$_ZOBKWPO
Capítulo 4.  7UXSND:D\GKDV+DOOIHOGW1DVWNROE3IHLIHUDQG6FKZHL-
 0DWWR[.HQQHWK3LFNDUG/DXUHQV7KRUDFLFWUDXPD*H EHUHU´9DOXHRI7KRUDFLF&RPSXWHG7RPRJUDSK\LQWKH)LUVW
QHUDOFRQVLGHUDWLRQVDQGLQGLFDWLRQVIRUWKRUDFRWRP\&DS $VVHVVPHQWRI6HYHUHO\,QMXUHG3DWLHQWVZLWK%OXQW&KHVW
21 Trauma. 1991. 7UDXPD5HVXOWVRID3URVSHFWLYH6WXG\µ7KH-RXUQDORI
 *DUGQHU(*UD\'-2·5DKLOO\$QDWRPtD 7UDXPD,QMXU\,QIHFWLRQDQG&ULWLFDO&DUH9RO1$
 /HUHU /HRQDUG % 3UHYHQWDEOH PRUWDOLW\ IROORZLQJ VKDUS ((88
SHQHWUDWLQJ FKHVW WUDXPD7KH -RXUQDO RI7UDXPD9RO   $OOHQ5REOHH3´&KHVW7UDXPDµ)LOH$_WUDXPDKWP
No 1. 1994.  4XLQWHUR//RQGRxR0/RUHV)´5HYLVLyQGHFDVRV
 )HUUDGD50HMtD:LOVRQ&XLGDGRFUtWLFR\WUDXPD7RUD- GH WUDXPD GH WyUD[µ 6RFLHGDG &RORPELDQD GH &LUXJtD
FRWRPtDGH5HVXFLWDFLyQ3iJV ;9,, &RQJUHVR 1DFLRQDO $YDQFHV HQ &LUXJtD$JRVWR
 7DSLDV/HRQLGDV&DOD+HUQDQGR*RQ]iOH]*LOEHUWR5RGUt- 1995.
guez, Juan Manuel. Orozco, Luis Carlos. Trauma de tórax.  )HUUDGD5*DUFtD$´3HQHWUDQWLQJ7RUVR7UDXPDµ$GYDQFHV
$VRFLDFLyQ&RORPELDQDGH)DFXOWDGHVGH0HGLFLQD LQ7UDXPDDQG&ULWLFDO&DUH9RO
 &HOLV (GJDU 2VRULR -RUJH 6DQtQ$OHMDQGUR 7UDXPD GH  'DYLV-+´+LVWRU\RI7UDXPDµ&DS/LEUR7UDXPD(G
WyUD[&XLGDGRFUtWLFR\WUDXPD $SSOHWRQ/DQJHGD(GLFLyQ((88
 3DWLxR 5 -RVp )pOL[ 0' )$&6 3UHPLVDV HQ HO PDQHMR  .LQJ7KRPDV & 6PLWK &UDLJ 5 ´3DUHG WRUiFLFD SOHXUD
general del trauma de tórax. SXOPRQHV\PHGLDVWLQRµ3ULQFLSLRVGH&LUXJtD&RQVLGHUD
 6LQHOQLNRY$WODVGH$QDWRPtD+XPDQD7RPR,,(G0,5 ciones Basicas.
0RVF~(GLFLyQ  0DWWR[ .HQQHWK ´5HG 5LYHU$QWKRORJ\µ7KH -RXUQDO RI
12. King, Thomas C. Smith, Craig R. «Pared torácica, pleura, 7UDXPD,QMXU\,QIHFWLRQDQG&ULWLFDO&DUH9RO1$
SXOPRQHV\PHGLDVWLQRª3ULQFLSLRVGHFLUXJtD&RQVLGHUD 
ciones básicas.  3ULYHV /LVHQNRY %XVKNRYLFK$QDWRPtD +XPDQD 7RPR
 *X\WRQ$UWKXU7UDWDGRGH)LVLRORJtD0pGLFDHGLFLyQ ,,,(G0,50RVF~4XLQWD(GLFLyQ
,QWHUDPHULFDQD0F*UDZ+LOO(VSDxD  0DWXN'DHV´'UHQDMH7RUiFLFRµ5HYLVWD6RFLHGDG&RORP
 *DUFtD$OEHUWR7UDXPDGHWyUD[+897UDEDMRQR ELDQDGH&LUXJtD9RO1$$EULO
publicado.  *X\WRQ$UWKXU 7UDWDGR GH )LVLRORJtD 0pGLFD  HGLFLyQ
 %U\GHQ'&$LUZD\PDQDJHPHQWWKHGLIÀFXOWDLUZD\7UDX ,QWHUDPHULFDQD0F*UDZ+LOO(VSDxD
PD  &KDWHQ$QDWRPtD
 5REHUW & -DFRE\ DQG )pOL[ ' %DWWLVWHOOD +HPRWKRUD[  %UDJKHWWR&VHQGHV´5HÁXMRJDVWURHVRIiJLFR\WUDVWRUQRV
6HPLQDUVLQUHVSLUDWRU\DQGFULWLFDOFDUH0HGLFLQH9ROXPH PRWRUHVGHOHVyIDJRµ3DWRORJtD%HQLJQDGHO(VyIDJR(G
1XPEHU 0HGLWHUUiQHR6DQWLDJRGH&KLOH
 3HWHU +:HLO ,UYLQJ % 0DUJROLV 6LVWHPDWLF DSSURDFK WR  6LQHOQLNRY$WODVGH$QDWRPtD+XPDQD7RPR,,(G0,5
WUDXPDWLF KHPRWKRUD[7KH$PHULFDQ -RXUQDO RI 6XUJHU\ 0RVF~(GLFLyQ
9ROXPHQ'HFHPEHU  )O\QQ0DU\EHWK%RQLQL6XVDQ´%OXQW&KHVW7UDXPD&DVH
 *yPH] 0LJXHO$ \ FRO 0DQHMR WiFWLFR GHO KHPRWyUD[ 5HSRUWµ&ULWLFDO&DUH1XUVH9RO2FWXEUHGH
WUDXPiWLFRPHGLDQR3DQDPHULFDQ-RXUQDORI7UDXPD9RO &RKQ6WHSKHQ0´3XOPRQDU\&RQWXVLRQ5HYLHZRIWKH&OL-
No 2. December, 1992. QLFDO(QWLW\µ9RO1$7KH-RXUQDORI7UDXPD,QMXU\
 5LH$LKDUD FRO(PHUJHQF\URRPWKRUDFRWRP\IRUSHQHWUD- ,QIHFWLRQDQG&ULWLFDO&DUH
WLQJFKHVWLQMXU\(IIHFWRIDQLQVWLWXWLRQDOSURWRFRO-7UDXPD 42. Tapias Díaz, Cala Rueda, González Delgado, Rodríguez
 0XWLV2UR]FR´3UR\HFWR,66$VFRIDPH*XtDVGH3UiFWLFD
 3UDFWLFH PDQDJHPHQW JXLGHOLQHV IRU HPHUJHQF\ GH- &OtQLFD%DVDGDVHQOD(YLGHQFLDµ
SDUWPHQWKRUDFRWRP\%\7KH$PHULFDQ&ROOHJHRI6XUJHRQV  .HQQHWK/0DWWR[$VKHU+LUVEHUJ&KHVW,QMXULHV&KRLVH
 RQ,QFLVLRQ&DS&LHQWLÀF$PHULFDQ,QF
 .HQQHG\)UDQN6KDULI6KDUDUHK(PHUJHQF\URRPWKRUD- 44. Bar Natan, Marcos F. Richardson J., David, García M.,
FRWRP\$6LQJOH6XUJHRQV7KLUWHHQ<HDUV([SHULHQFH7KH $OEHUWR´7UDXPD7RUiFLFR,QGLFDFLRQHVSDUD7RUDFRWRPtDµ
$PHULFDQ6XUJHRQ9RO Sociedad Panamericana de Trauma.
 /DOVLH5/\FRO$QiOLVLVGHPRUWDOLGDGSRUFDXVDYLROHQWD .HVWHQEHUJ+$EUDKDP´7UDXPDGH7yUD[µ8UJHQFLD4XL
HQ&DOL&RORPELDGXUDQWH U~UJLFD(GLWRULDO;<=&DOL2FWXEUHGH
 &KDYDUUR35RGUtJXH]&6RWR0:LOFKHV(*DUFtD$  7ULQNOH\FROV$QQ7RUFD6XUJYRO3JV
)DFWRUHVGHULHVJRGHFRPSOLFDFLRQHVUHVSLUDWRULDVGHVSXpV  :HLO3HWHU+0DUJROLV,UYLQJ%´6\VWHPDWLF$SSURDFKWR
GHWUDXPDWRUiFLFR+89 7UDXPDWLF+HPRWKRUD[µ7KH$PHULFDQ-RXUQDORI6XUJHU\
 3LFNDUG/DXUHQV0DWWR[.HQQHWK´7KRUDFLF7UDXPD*HQHUDO 9RO'LFLHPEUH
&RQVLGHUDWLRQV DQG ,QGLFDWLRQV IRU 7KRUDFRWRP\µ  &DS   *yPH]3pUH]3HWLW(VNHQD]L'H*UDFLD&RYHOOR3DGLOOD
/LEUR7UDXPD(G$SSOHWRQ/DQJHGD(GLFLyQ((88 ´0DQHMRWiFWLFRGHOKHPRWyUD[WUDXPiWLFRPHGLDQRµ *UDGR

194 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA


Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

,, 3DQDPHULFDQ-RXUQDO2I7UDXPD9RO1$'LFLHPEUH  *XQGU\:LOOLDPV%XUQH\&KR0DFNHQ]LH´,QGLFDWLRQVIRU


de 1992. $RUWRJUDSK\LQ%OXQW7KRUDFLF7UDXPD$5HDVVHVVPHQWµ
 )HUUDGD5LFDUGR0HMtD:LOOLDP&RUUHD'LDQD´7UDXPD -RXUQDORI7UDXPD9RO1$
&DUGLDFR3HUÀOGH0RUWDOLGDGµ5HYLVWD6RFLHGDG&RORP  /HH +DUULV 'XNH :LOOLDPV ´1RQFRUUHODWLRQ EHWZHHQ
ELDQDGH&LUXJtD;;&RQJUHVR$JRVWR 7KRUDFLF6NHOHWDO,QMXULHVDQG$FXWH7UDXPDWLF$RUWLF7HDUµ
 $QWKRQ\ 0 ,V HPHUJHQF\ WKRUDFRWRP\ DOZD\V WKH PRVW -RXUQDORI7UDXPD9RO1$
DSSURSLDWHLPPHGLDWHLQWHUYHQWLRQIRUV\VWHPLFDLUHPEROLVP  7KRXUDQL9et al.: Penetrating Cardiac Trauma at an Urban
DIWHUOXQJWUDXPD"5HYLVWD&KHVW&KLFDJRYRO-XOLR 7UDXPD&HQWHUD\HDUSHUVSHFWLYH$QQ6XUJ9RO
 %HMDUDQR&DVWUR0yQLFD´7UDXPDGHWyUD[\VXVFRPSOLFD 
FLRQHV+RVSLWDO8QLYHUVLWDULR6DQ-RVpGH3RSD\iQµ  1DXJKWRQ 0 et al. 'HPRJUDSK\ RI 3HQHWUDWLQJ &DUGLDF
5HYLVWD0HGLFDV8LV9RO;,1$2FWXEUH'LFLHPEUHGH 7UDXPD$QQ6XUJ9RO
  $VHQFLR - et al. 2QH +XQGUHG )LYH 3HQHWUDWLQJ &DUGLDF
 6HUYLFLR GH (VWDGtVWLFD +RVSLWDO 8QLYHUVLWDULR GHO 9DOOH ,QMXULHVD\HDUSURVSHFWLYHHYDOXDWLRQ-WUDXPD9RO
1999. 
 %ORVWHLQ+RGJPDQ´&RPSXWHG7RPRJUDSK\RIWKHFKHVW  6DQWDYLUWD$UDMDUYL ( 5XSWXUHV RI WKH +HDUW LQ 6HDWEHOW
LQ%OXQW7KRUDFLF7UDXPD5HVXOWVRID3URVSHFWLYH6WXG\µ ZHDUHUV-WUDXPD9RO
-RXUQDORI7UDXPD9RO1$3J  %HUHVN\5.OLQJHU53HDNH-0\LRFDUGLDO&RQWXVLRQ
 &KHQ0DUNPDQQ.DXGHU6FKZDE´+HPRSQHXPRWKRUD[ :KHQGRHVLWKDYHFOLQLFDOVLJQLÀFDQFH-7UDXPD9RO
0LVVHGE\$XVFXOWDWLRQLQ3HQHWUDWLQJ&KHVW,QMXU\µ7KH 
-RXUQDORI7UDXPD9RO1$  0D\$et al.: Combined Blunt Cardiac and Pericardial Rup-
 3pUH]*DUFtD/RDL]D5DPRV¢(OH[DPHQItVLFRUHHPSOD]D WXUHUHYLHZRIWKHOLWHUDWXUHDQGUHSRUWRIDQHZGLDJQRVWLF
ORVUD\RV;HQSDFLHQWHVSROLWUDXPDWL]DGRV"+RVSLWDO8QL DOJRULWKP$QQ6XUJ9RO
versitario del Valle. 1999.  ,YDWXU\57KH,QMXUHG+HDUWHQ0DWWR[.)HOLFLDQR'
 -XG:*XUQH\$%&VRI%OXQW&KHVW7UDXPD/LEUDULDQ# 0RRUH(7UDXPD0F*UDZ+LOOIRXUWKHGLWLRQ
vh.radiology.uiowa.edu  2UOLDJXHW*)HUMDQL05LRX%7KH+HDUWLQ%OXQW7UDX
 0DHQ]D 5O 6HDEHUJ ' '·$PLFR ) ´$ PHWDDQDO\VLV PD$QHVWKHVLRORJ\9RO
RI EOXQW FDUGLDF WUDXPD (QGLQJ P\RFDUGLDO FRQIXVLyQ  (PDQXHOOH5et al.0HFKDQLVPRU9HQWULFXODU$UUK\WKPLDV
$PHULFDQ-RXUQDORI(PHUJHQF\0HGLFLQ9RO1$SS Induced by Myocardial Contusion: a high resolution mapping
 VWXG\HQOHIWYHQWULFXODUUDEELWKHDUW$QHVWKHVLRORJ\
 )XOGD*LEHUVRQ+DLOVWRQH/DZ6WLOODERZHU´$QHYDOXDWLRQ 9RO
RI6HUXP7URSRQLQ7DQG6LJQDO$YHUDJHG(OHFWURFDUGLRJUD  .XOVKUHVWKD3et al.:&DUGLDF,QMXULHV$&OLQLFDODQG$X-
SK\LQ3UHGLFWLQJ(OHFWURFDUGLRJUDSKLF$EQRUPDOLWLHVDIWHU WRSV\3URÀOH-7UDXPD9RO
%OXQW&KHVW7UDXPD7KH-RXUQDORI7UDXPD9RO1$  )R\0et al.)DFWRUV,QÁXHQFLQJ2XWFRPHLQ6WDE:RXQGV
 RIWKH+HDUW$P-6XUJ9RO
 3DGLOOD5DPtUH]+DUROG/RVDGD0RUDOHV+pFWRU)DELR  0DWWR[.et al.)LYH7KRXVDQG6HYHQ+XQGUHG6L[W\&DU-
/R]DGD$GULDQD´&RQWXVLyQPLRFiUGLFD¢(VXQDYHUGD- GLRYDVFXODU,QMXULHVHQ3DWLHQWV$QQ6XUJ9RO
GHUDHQWLGDGFOtQLFD"µ&RORPELD0pGLFD9RO1$ 
1996.  ,YDWXU\ 5 et al. 3HQHWUDWLQJ &DUGLDF 7UDXPD$QQ 6XUJ
 &XUUHD'))HUUDGD57UDXPDWRUDFRDEGRPLQDO5HYLVWD 9RO
&RORPELDQDGH&LUXJtD9RO1$  &RLPEUD5et al.: Penetrating Cardiac Wounds: predictive
 &RUZHOO \ FROV ´7UDQVPHGLDVWLQDO *XQVKRW :RXQGV$ YDOXH RI WUDXPD LQGLFHV DQG WKH QHFHVVLW\ RI WHUPLQRORJ\
5HFRQVLGHUDWLRQRIWKHUROHRI$RUWKRJUDSK\Q$UFKLYHVRI VWDQGDUGL]DWLRQ$QQ6XUJ9RO
6XUJHU\9RO6HSW  $VHQFLR-et al.: Penetrating Cardiac Injuries: a complex
 )UDVHU5REHUW3DUH3HWHU-$3DUH3')UDVHU5LFKDUG FKDOOHQJH6XUJ7RGD\9RO
*HQHURX[*HRUJH´'LVHDVHVRIWKHWKRUD[FDXVHGE\H[WHU-  )HUUDGD5*DUFLD$3HQHWUDWLQJ7RUVR7UDXPD$GY7UDX
QDOSK\VLFDODJHQWVµ'LDJQRVLVRI'LVHDVHVRIWKH&KHVW PDDQG&ULWLFDO&DUH9RO
Edición. Philadelphia, 1991.  &XUUHD')HUUDGD5et al.: Pericardial Window Experience
 *ROGPDQDQG0LOOHU´)UDFWXUDGH(VWHUQyQµ7KH$PHULFDQ ZLWKFDVHVLQ&DOL&RORPELD3UHVHQWDGRHQHOo Con-
6XUJHRQ(QHUR 6HOHFWHG5HDGLQJ*HQHUDO6XUJHU\ JUHVRGHOD6RFLHGDG3DQDPHULFDQDGH7UDXPD0LDPL
9RO1$GH   )HUUDGD50HMtD:&XUUHD'7UDXPD&DUGLDFRSHUÀO
 =LHJOHU$JDUZDO´7KHPRUELOLW\DQGPRUWDOLW\RI5LE)UDFWX GHPRUWDOLGDG3UHVHQWDGRHQHO;;&RQJUHVR©$YDQFHVHQ
UHVµ7KH-RXUQDORI7UDXPD9RO1$ cirugía», Bogotá, Colombia, 1994.
 2UGRJ:DVVHUEHUJHU%DODVXEUDPDQLXQ6KRHPDNHU´$V-  6DYD - 'HPHWULDGHV ' 3HQHWUDWLQJ DQG %OXQW &DUGLDF
\PSWRPDWLF6WDE:RXQGVRIWKH&KHVWµ-RXUQDORI7UDXPD Trauma: Diagnosis and management. Emergency Medicine
9RO1$ 9RO
 +DUULQVRQV 3ULQFLSOHV RI ,QWHUQDO 0HGLFLQH  (GLFLyQ  -LPpQH](et al.: Subxiphoid Pericardiotomy versus Echo-
(GLWRULDO0F*UDZ+LOO FDUGLRJUDSK\DSURVSHFWLYHHYDOXDWLRQRIWKHGLDJQRVLVRI
 )ULFN&LSROOH3DVTXDOH:DVVHU5KRGHV6LQJHU1DVWDVHH RFXOWSHQHWUDWLQJFDUGLDFLQMXU\6XUJHU\9RO
´2XWFRPHRI%OXQW7KRUDFLF$RUWLF,QMXU\LQD/HYHO,7UDX-  $QGUDGH50RQ/3HULFDUGLDO:LQGRZLQWKH'LDJQRVLVRI3H-
PD&HQWHU$Q<HDU5HYLHZ7KH-RXUQDORI7UDXPD9RO QHWUDWLQJ&DUGLDF7UDXPD$QQ7KRUDF6XUJ9RO
  $DODQG 0 &XUWLV ) 6KHUPDQ 5 7ZR 'LPHQVLRQDO

ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS 195


ABORDAJE INICIAL EN LOS SERVICIOS DE URGENCIAS

(FKRFDUGLRJUDSK\HQ+HPRGLQDPLFDOO\6WDEOH9LFWLPVRI )HUUDGD5LFDUGR*DUFtD$OEHUWR3HQHWUDWLQJWURVRWUDXPD
3HQHWUDWLQJ3UHFRUGLDO7UDXPD$QQ6XUJ9RO $GYDQFHVLQ7UDXPDDQG&ULWLFDO&DUHYRO
 5R]\FNL*et al.7KH5ROHRI8OWUDVRXQGLQ3DWLHQWVZLWK 3DWLxR 5 -RVp )pOL[ 0' )$&6 3UHPLVDV HQ HO PDQHMR
3RVVLEOH3HQHWUDWLQJ&DUGLDF:RXQGV$SURVSHFWLYH0XOWL- general del trauma de tórax.
FHQWHU6WXG\-7UDXPD9RO $PHULFDQ&ROOHJHRI6XUJHRQV&RPPLWWHHRQ7UDXPD$7/6
 $VHQFLR-et al.3HQHWUDWLQJ&DUGLDF,QMXULHV$SURVSHFWLYH Trauma torácico. Cap. 4. Programa avanzado de apoyo vital
6WXG\RIYDULDEOHVSUHGLFWLQJRXWFRPHV-$P&ROO6XUJ HQWUDXPDSDUDPpGLFRV((88
9RO )HUUDGD 5LFDUGR 0HMtD:LOOLDP &RUUHD 'LDQD7UDXPD
7\EXUVN\-et al.)DFWRUV$IIHFWLQJ3URJQRVLVZLWK3HQH- FDUGLDFR3HUÀOGH0RUWDOLGDG5HYLVWD6RFLHGDG&RORPELDQD
WUDWLQJ:RXQGVRIWKH+HDUW-7UDXPD9RO GH&LUXJtD;;&RQJUHVR$JRVWR
 4XLQWHUR/(VWDGtVWLFDVGHODXQLGDGGHXUJHQFLDVGHO+RV %ORVWHLQ +RGJPDQ &RPSXWHG 7RPRJUDSK\ RI WKH FKHVW
pital Universitario del Valle a diciembre de 1995. LQ%OXQW7KRUDFLF7UDXPD5HVXOWVRID3URVSHFWLYH6WXG\
96. Ordóñez, C. Ferrada, R. Flórez, G.: Trauma cardiaco -RXUQDORI7UDXPD9RO1R3J
SHQHW UDQWH 7UDEDMR SUHVHQWDGR HQ HO  &RQJUHVR &RUZHOO\FROV7UDQVPHGLDVWLQDO*XQVKRW:RXQGV$5HFRQ-
©$YDQFHVHQFLUXJtDª%RJRWi&RORPELD VLGHUDWLRQRIWKHUROHRI$RUWKRJUDSK\$UFKLYHVRI6XUJHU\
 5R]\FNL*et al.7KHUROHRIVXUJHRQSHUIRUPHGXOWUDVRXQGLQ 9RO6HSW
SDWLHQWVZLWKSRVVLEOHFDUGLDFZRXQG$QQ6XUJ9RO %ODGHUJURHQ05'LDJQRVLVDQGUHFRPHQGHGPDQDJHPHQW
 +DQ'5R]\FNL*6FKPLGW-)HOLFLDQR'8OWUDVRXQG RIHVRSKDJHDOSHUIRUDWLRQVDQGUXSWXUH$QQ7KRUDF6XUJ
WUDLQLQJGXULQJ$7/6DQHDUO\VWDUWIRUVXUJLFDOLQWHUQV- 
7UDXPD9RO :KLWH.0RUULV''LDJQRVLVDQGPDQDJHPHQWRIHVRSKD-
 5R]\FNL*6KDFNIRUG68OWUDVRXQGZKDWHYHU\WUDXPD JHDOSHUIRUDWLRQV$P6XUJ )HE 
VXUJHRQVKRXOGNQRZ-7UDXPD9RO )O\QQ$(7KRPDV$16FKHFWHU:3$FXWHWUDFKHREURQFKLDO
&KDPSLRQ+6DFFR:&RSHV:*DQQ'*HQQDUHOOL LQMXU\7KH-7UDXPD
7)ODQDJDQ0$UHYLVLRQRIWKH7UDXPD6FRUH-7UDXPD
9RO

196 Trauma de tórax LAUREANO QUINTERO B. - MARIO ALAIN HERRERA

También podría gustarte