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Objetivo: Que Los Jóvenes Tomen Conciencia que ser un buen hijo es asumir nuestra
Responsabilidad Dentro De nuestro Hogar
De una manera u otra todos somos hijos y nunca dejamos de serlo, hijos naturales, hijos de
Dios (cuando reconocemos a Jesucristo como salvador) e hijos espirituales (de nuestros
padres espirituales).
Siempre nos preocupamos por ser buenos esposos y esposas, buenos padres, buenos
profesionales, buenos amigos, pero ¿nos preocupamos por ser buenos hijos?
¿Cuáles son algunas cualidades que debemos tener para ser buenos hijos?
1. Un buen hijo tiene pasión por Dios y ve a su Padre espiritual como un medio de
bendición
Eliseo fue consciente de esto (2 Reyes 2:6), sabía que estando con su padre espiritual
(Elías) recibiría bendición de parte de Dios.
Dios bendice a los hijos a través de sus padres (aún cuando estos no son conscientes de
ello)
Tengamos presente siempre tres aspectos en los cuales honrar a nuestros Padres:
• Hablar siempre bien de nuestros padres.
• Obedecer a nuestros padres en todo.
• Compartir de lo que Dios nos ha dado económicamente con nuestros padres.
Conclusión
Cuando nos volvemos adultos no significa que dejamos de ser hijos, lo seremos siempre ya
sea en nuestra familia, en nuestra congregación o en nuestra relación con Dios, por lo tanto
debemos buscar siempre transformarnos en mejores hijos.