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Teoría de la atribución

y análisis de las explicaciones

Mansur Lalljee
FUENTE: Ch. Antaki (ed.), The Psychology of Ordinary Explanations of Social Behaviour.
Academic Press, 1981, pp. 119-138.

En este trabajo se pretende situar las distingue entre causalidad personal e im-
ideas actuales sobre los procesos de atri- personal. Sin embargo, en el análisis de
bución en el contexto más amplio de la la causalidad personal distingue una serie
psicología de las explicaciones. Una serie de factores diferentes. El concepto de
de presupuestos centrales a la teoría de «poder» (si una persona tiene o no la ca-
la atribución se pone en cuestión y la pacidad de realizar un acto particular) se
orientación, fundamentalmente intrapsí- distingue de un factor motivacional, que
quica, de la teoría de la atribución se si- incluye tanto el esfuerzo personal como
túa dentro de un análisis de los procesos la intención. En el mismo análisis, Hei-
interpersonales y societales. der distingue también entre diferentes
clases de factores ambientales. En este
contexto, menciona en especial los con-
DOS NOCIONES CENTRALES DE ceptos de suerte y de dificultad, recono-
LA TEORIA DE LA ATRIBUCION ciendo así la heterogeneidad de las expli-
caciones ambientales.
Centrales a las ideas actuales sobre los Las explicaciones en términos causales
procesos de atribución son las nociones se han considerado tradicionalmente
de (1) explicaciones en términos de cau- como centrales a la tarea científica. Sin
salidad, y (II) la distinción entre atribu- embargo, no son el único tipo de expli-
ciones a causas internas o externas. Estas" cación que se ha tenido en cuenta. En
dos nociones aparecen de forma clara en un reciente trabajo de Buss (1978) se in-
el trabajo de Heider (Heider, 1958). En dica que las explicaciones teleológicas,
su versión del análisis ingenuo de la ac- con frecuencia, se han considerado vita-
ción, Heider parece concebir las explica- les, especialmente en relación con la ex-
ciones causales como el caso paradigmá- plicación de la acción humana. Las expli-
tico de las explicaciones ordinarias, y caciones en términos de causa no deben
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confundirse con las explicaciones en II. Le hablé porque se encontraba
términos de razones. Buss dice que el ex- solo.
plicar la propia conducta en términos Le hablé para que se sintiese en
causales, a no ser que sea casual o inin- su casa.
tencional, supone un error categorial.
Aunque algunos filósofos de la ciencia Si las dos primeras deben concebirse
social mantienen que cualquier explica- como explicaciones de causa o de razón,
ción de la conducta social en términos y si la tercera se ve como una explica-
de causas resulta inadecuada, Buss acepta ción implícitamente causal (tal vez basa-
que los observadores puedan dar explica- da en la idea de estar obligado por senti-
ciones causales de la conducta ajena. Uti- mientos de deber y responsabilidad), son
liza este argumento, con buenos resulta- ciertamente cuestiones empíricas que no
dos, en el análisis de las diferencias entre pueden decidirse en base a un análisis
actor y observador. Pero el argumento conceptual. Las cuestiones generales son
de Buss de que no es permisible el que de dos tipos. Una, relativa a la interpre-
una persona explique su propia conducta tación del hombre común de las explica-
en términos causales, no parece adecua- ciones de causa y de razón. ¿Se perciben
do. Señala que una serie de filósofos han éstas como fundamentalmente iguales o
tratado de analizar las intenciones como diferentes?, y en este último caso ¿en qué
un tipo particular de causa, pero es que, sentido? La segunda cuestión se refiere a
aun cuando estuviese unánimemente la presentación de una u otra de las for-
aceptado que las intenciones deben tra- mulaciones en la explicación de un suce-
tarse de diferente manera, ya que cons- so. Esta última cuestión ha constituido
tituyen un tipo conceptualmente diferen- un tema permanente en el estudio de los
te de explicación, no sería adecuado jus- procesos de atribución y se puede resol-
tificar el punto de vista de Buss. Aun ver de forma satisfactoria incluyendo
cuando sea un tipo de error conceptual una dimensión interpersonal en lo que
el tratar las razones como causas, podría hasta ahora ha sido una teoría intrapsí-
ser muy bien que la persona ordinaria quica.
cometiese este tipo de errores en sus ex- Debemós señalar, por último, que las
plicaciones. La cuestión para los psicólo- explicaciones en términos de razones y
gos debería ser comprender cómo el de causas no agotan los tipos de explica-
hombre común interpreta las explicacio- ción que los filósofos han distinguido.
nes en términos de razones y en térmi- Bunge (1959), por ejemplo, tras dis-
nos de causas. tinguir cuatro tipos de explicación cau-
Este argumento puede clarificarse si sal, enumera ocho tipos de explicaciones
consideramos los ejemplos presentados no causales. Estas incluyen las explica-
por Buss. Dice que, precisamente porque ciones estadísticas, las explicaciones dia-
una explicación se expresa en términos lécticas y las explicaciones basadas en la
causales, no debería aceptarse en su sig- afirmación de que un suceso particular
nificado literal como explicación causal. es un ejemplo de una clase general. Estas
Cuando una persona dice «La causa de distinciones pueden ser de valor para los
que me saliese del aula fue que la clase psicólogos en la medida en que puedan
era aburrida», la idea, dice Buss, puede relacionarse con procesos cognitivos o
expresarse de forma más adecuada con la interpersonales.
fórmula «La razón de que me saliese del Un segundo principio fundamental de
aula fue que encontraba aburrida la cla- la teoría de la atribución se refiere a la
se». Consideremos las siguientes explica- distinción entre causas que son internas
ciones plausibles en respuesta a la pre- a una persona particular y aquellas que
gunta «¿Por qué fuiste a hablar con él?»: le son externas. Tratar tal distinción
1. Hablé con él porque me daba como fundamental es minimizar la im-
lástima. portancia de la heterogeneidad de expli-
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caciones que caen dentro de cada catego- medio de los cuales deben ofrecer su ex-
ría. Así, las explicaciones «personales» plicación de lo que está pasando. Heider,
incluyen otras en términos de estado de sin embargo, pone de manifiesto que el
ánimo de la persona, su estado fisiológi- perceptor logra predictibilidad sobre los
co, sus rasgos de personalidad, su con- diversos sucesos de su entorno refirien-
ducta pasada, su rol, objetivos y catego- do los fenómenos a condiciones estables
ría social. Es posible que sean muy dife- subyacentes. Entre estas invariantes sub-
rentes en su valor predictivo, en la medi- yacentes están, en primer lugar, los mo-
da en que se consideren bajo el control tivos de los otros. Tal vez el hombre se
del actor, y en términos de las atribucio- vea a sí mismo con mayor control sobre
nes de responsabilidad y culpa. Han sido los motivos ajenos que sobre otros as-
estas características las que, con frecuen- pectos de su entorno. Heider plantea
cia, se han considerado como el presu- que, por lo general, sólo hacemos atribu-
puesto subyacente en la construcción de ciones a factores personales o ambienta-
explicaciones. les, en lugar de recurrir a explicaciones
Las explicaciones situacionales inclu- que impliquen tanto factores personales
yen, asimismo, una diversidad de posi- como ambientales. Esto ocurre así, según
bles factores. El mismo Heider distingue él, porque el último tipo de explicaciones
entre los casos en que la causa externa es tiene poco valor predictivo.
el ambiente físico y los casos en que la El punto de vista de Heider de que las
causa externa es otra persona. Cuando la invariantes subyacentes del mundo son
causa externa es otra persona hay tam- disposiciones ambientales o personales, y
bién que hacer distinciones importantes. que la gente por lo general explica los
Brown y Lalljee (en prensa) señalan que sucesos en términos de factores persona-
en el caso de los actos criminales, se da les o ambientales, pero rara vez incluyen
una distinción entre aquellos casos en ambos elementos en una explicación, no
que la persona que produce el suceso es puede dejar de ser puesto en cuestión.
también la víctima del delito (como a Este es un problema empírico que no
menudo se cita en los casos de viola- puede resolverse fácilmente con experi-
ción), o una tercera persona cuyas accio- mentos que utilizan como variable de-
nes influyeron en el autor. Las leyes cri- pendiente índices de atribuciones de cau-
minales distinguen, además, las situacio- salidad a factores personales o situacio-
nes que razonablemente se podrían haber nales, basados en puntuaciones en una
previsto, y de las que una persona es res- escala. Los datos recogidos por el autor
ponsable, aun cuando no tuviera inten- (Lalljee, 1979), que permitía que los su-
ción de cometer una determinada acción jetos explicaran los sucesos con sus pro-
(Cross y Jones, 1964). Atribuimos res- pias palabras en lugar de hacerlo a través
ponsabilidad por meterse en una situa- de escalas, muestran que, con frecuencia,
ción particular o permitir que ocurra, la gente utiliza explicaciones que recu-
aun cuando los factores ambientales sean rren a elementos personales y situaciona-
la causa inmediata de la conducta. les, y que las explicaciones en términos
Hay que poner de relieve la falta de de factores personales, situacionales, o
homogeneidad de las causas personales y de ambos a la vez, se relacionan de for-
ambientales. Aunque Heider introdujo ma sistemática con los sucesos a explicar.
una serie de distinciones relevantes, con La invarianza subyacente, cuya adscrip-
frecuencia no se han tenido en cuenta en ción constituye sólo una de las funciones
otros influyentes trabajos sobre los pro- de una explicación, puede que no esté en
cesos de atribución (p. ej., Kelley, 1967; términos de disposiciones ambientales o
Jones y Davis, 1965; Nisbett y otros, personales sino que, como más adelante
1973). Van der Pligt (1981) cuestiona se planteará, puede que resida en unos
asimismo el acierto de dar a la gente mo- esquemas o estructuras socialmente acep-
dos de respuesta predeterminados, por tados.

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Así, pues, dos de las características mún ve las causas. En la teoría de Kelley
centrales de la teoría de la atribución se se especifica qué tipo de información usa
ha visto que son limitadas. La heteroge- una persona para hacer atribuciones a
neidad de las explicaciones personales y causas internas y externas. Enumera tres
ambientales en términos de sus implica- tipos de información:
ciones para el control, la predictibilidad
y la culpa, hace que sea discutible la im- a) Información de consistencia, rela-
portancia de la distinción personal-am- tiva a la reacción del individuo frente a
biental. Es más, las explicaciones no son la entidad en diferentes ocasiones.
sólo causales, y esto debe de tenerse en b) Información de distintividad, so-
cuenta para un estudio adecuado de las bre si la reacción del individuo ocurre
explicaciones. Un punto de partida ade- únicamente cuando la entidad está pre-
cuado para la psicología de las explica- sente y no ocurre en su ausencia.
ciones sería el análisis de las explicacio- c) Información de consenso, relativa
nes ofrecidas en la vida cotidiana, como
base para el desarrollo de una taxonomía a las reacciones de otros frente a la mis-
funcional. ma entidad.
Si una entidad es experienciada de una
forma determinada por todos los obser-
¿RECOLECTOR DE vadores (alto consenso), si un individuo
INFORMACION O VERIFICADOR particular responde a ella de la misma
DE HIPOTESIS? forma en diferentes ocasiones (alta con-
sistencia) y si responde de forma diferen-
Las nociones de explicación en térmi- te a como lo hace con otras entidades
nos de causalidad y de atribuciones in- (alta distintividad), la causa de la reac-
ternas/externas están inmersas en una ción se atribuye al estímulo. Kelley con-
teoría de los procesos de atribución de- cibe al científico como un inductivista,
sarrollada por Kelley (1967). Kelley pos- que se aproxima a la naturaleza sin teo-
tula explícitamente una teoría sobre los rías, y que contabiliza los acontecimien-
modos en que la persona común asigna tos en clases particulares bajo diferentes
causas a los acontecimientos. Considera condiciones, sacando de aquí sus conclu-
que es fructífero concebir a la persona siones.
corriente como un científico, por la for- Las ideas de Kelley sobre la omnipre-
ma en que recoge información. Siguien- sencia de estos tres tipos de información
do a Heider y a John Stuart Mill, el y su influencia en la atribución de causa-
principal concepto que invoca es el de lidad a fuerzas internas o externas a la
covariación. Tal concepción de la causa- persona, han atraído considerablemente
lidad logró prominencia con el trabajo la atención. Se han realizado diversos es-
de Hume, pero no es en absoluto el úni- tudios para explorar estas ideas, pudien-
co concepto de causa. Diversos auto- do distinguirse dos categorías principales
res han indicado que la causalidad impli- de estudios.
ca algo más que covariación, incluyendo La primera categoría incluye estudios
en la causa alguna concepción de meca- en los que la información relativa al con-
nismo generativo o de poder para pro- senso, consistencia y distintividad se pre-
ducir el efecto (Wallace, 1972). De he- senta y manipula dentro de un cuestiona-
cho, esta última concepción de la causa rio. El caso típico es aquel en que se
parece mucho más cercana al análisis ini- presenta a los sujetos una breve descrip-
cial llevado a cabo por Heider (1944). ción de un suceso, así como una infor-
No es necesario, de nuevo, que los psi- mación de consenso, consistencia y dis-
cólogos entren en este debate concep- tintividad, y se les pide que valoren la
tual, pero plantea la interesante cuestión causa del suceso en unas escalas seleccio-
sobre los modos en que la persona co- nadas. McArthur (1972), por ejemplo,
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presentó a los sujetos unos ítems relati- los procesos implicados en la explicación
vos a la ocurrencia de un suceso (p. ej., del suceso.
«John se ríe con el cómico») y manipuló La conducta de las demás personas
el resto de la información presentada al con respecto a la misma entidad, o de la
sujeto con declaraciones del tipo de «casi misma persona a través del tiempo, pue-
todos los que escuchan al cómico se den jugar un papel importante en la ex-
ríen» (alto consenso) o «casi nadie que plicación que se da de la conducta de
escucha al cómico se ríe» (bajo consen- una persona. En muchas ocasiones, la
so). Se hicieron manipulaciones similares respuesta adecuada a la pregunta ¿por
con la información de consistencia y clis- qué hizo esto? es: «todo el mundo lo
tintividad. hace», o «él suele actuar así». Sin embar-
La segunda categoría incluye los expe- go, incluso en tales casos, lo que se ofre-
rimentos en que se pide a los sujetos que ce como explicación no es un elemento
hagan atribuciones de la conducta de de información. Decir que «todo el mun-
una persona, en base a la información de do lo hace» puede que no tenga nada
su conducta, así como a la información que ver con la atribución de causas a los
relativa a la conducta de otros en la mis- sucesos. Puede ser una forma de negar
ma situación. Wells y Harvey (1977), por que este individuo particular tenga unas
ejemplo, pidieron a los sujetos que leye- características únicas que necesitan ser ex-
sen un reportaje sobre el procedimiento plicadas. De forma similar, la explicación
de un experimento psicológico (tal como «siempre lo hace así» niega que esta ocu-
el de Nisbett y Schachter, donde se da- rrencia particular de la acción necesite
ban descargas eléctricas) y les presenta- mayores explicaciones, ya que puede ver-
ron información (no siempre auténtica) se como un caso de una forma de regu-
sobre cómo se había comportado otra laridad. De esta manera, mientras que la
gente durante el experimento. Se les dice conducta de otros (y de la misma perso-
entonces a los sujetos cómo se comportó na a lo largo del tiempo) pueden ser re-
una persona determinada y se les pide levantes para la explicación aportada,
que hagan atribuciones sobre las causas puede que no operen como elementos de
de su conducta. Los resultados de ambos información usados para seleccionar pre-
tipos de experimentos apoyan amplia- guntas de causalidad, sino como explica-
mente las hipótesis de Kelley, aunque se ciones que pueden ser socialmente acep-
discute la importancia de la información tables y adecuadas en un determinado
de consenso para los sujetos (véase Nis- contexto. Kelley (1967) mantiene que la
bett y Borgida, 1975; Wells y Harvey, información de consenso hace referencia
1977, 1978; Borgida, 1978). a la información sobre la conducta de to-
A pesar de este aparente apoyo a la dos o de la mayoría de las demás perso-
teoría de Kelley, las nociones centrales nas en relación con esa entidad, pero es
de ésta presentan una serie de dificulta- difícil de aceptar esta afirmación en sen-
des, que se han prestado aún más a confu- tido literal. «Todos» y «la mayoría» se
sión por el tipo de formato experimental usa- refieren literalmente a instancias conta-
do. Aunque la información sobre cómo bles de la raza humana. Esto claramente
se comporta una persona concreta en no es lo que se quiere decir. ¿Podría, tal
otras ocasiones y sobre cómo actúa otra vez, referirse a la contabilización de los
gente en un contexto particular, es una miembros de un grupo concreto, por
información relevante para nuestra expli- ejemplo, «la mayoría de la clase media
cación de su conducta, no es probable americana» o «la mayoría de los indivi-
que opere en términos de búsqueda de duos de la clase media americana de raza
información general e inductiva, tal blanca»? La información de consenso
como la postula Kelley. Estas nociones que se manipula en el curso de un expe-
se van a analizar ahora, y a través de rimento puede interpretarse por los suje-
ellas presentaré un modelo alternativo de tos dentro del contexto de uno de estos
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grupos, más que en términos de nocio- Aunque la conducta de la persona en
nes tales como «toda» o «la mayoría» de ocasiones previas es, por supuesto, rele-
la gente. vante para la explicación que se da de su
Es posible que la teoría, con esta for- conducta, ¿opera tal información de la
ma ligeramente modificada, sea también forma descrita por la teoría de la atribu-
inadecuada. Es bastante poco probable ción? «Siempre lo hace» puede ser una
que la información relativa a la conducta explicación adecuada ante la pregunta
de cualquier grupo se considere relevan- «epor qué sale de paseo a las 6 de la tar-
te para una serie de tipos de sucesos di- de?», pero difícilmente lo es para «epor
ferentes. Es admisible explicar la ves- qué sale de paseo a medianoche?», aunque
timenta aparentemente excéntrica de un el número de veces que se va de paseo
adolescente diciendo que «siempre se sea el mismo en ambos casos. Lo que es
viste así». Tal explicación sería adecuada, diferente es la pre-existencia de un es-
ya que aceptamos que en lo referente a quema social sobre los móviles plausi-
la vestimenta y otras formas de conducta bles de la acción, en el que encaja una de
social, el «grupo adolescente» puede ver- las explicaciones y no la otra. Además,
se como una fuente aceptable y apropia- no se puede determinar la consistencia
da de conducta. Para otras actividades se contando casos de comportamiento. Si
puede recurrir a otros grupos como una persona se divorció cuatro veces en
fuente de información sobre lo que hace cinco arios, su quinto divorcio se podría
la gente. En el caso de un robo, por explicar con la expresión «es que lo hace
ejemplo, no es previsible que la explica- siempre», pero si salió a pasear a las 6 de
ción «todos lo hacen» (en el caso, por la tarde cuatro veces en cinco años, difí-
ejemplo, de un adolescente) se considere cilmente pensaremos que «lo hace a me-
satisfactoria. La cuestión aquí es que, si nudo». La cuestión de que se trata es
bien la información sobre cómo actúa que no se puede clasificar la consistencia
«otra gente» es relevante, la «otra gente» en base simplemente a la contabilización
relevante variará con las diferentes clases de casos. Lo que se considere «hacerlo a
de actos. El modelo ampliamente induc- menudo» es diferente según el tipo de
tivo de Kelley, en el que la persona sim- sucesos; además, hay cierto tipo de con-
plemente cuenta el número de indivi- ductas para las que la consistencia resulta
duos del grupo que actúan de una forma adecuada como explicación y otras con-
determinada y lo compara con la acción ductas para las que no lo es. El inducti-
de un individuo, debe reemplazarse por vismo vacío de Kelley, dedicado a una
el de un ser mucho más selectivo que búsqueda de información amplia y com-
observa a diferentes grupos con vistas a prensiva a lo largo de dimensiones parti-
la información que considera relevante culares, no puede por tanto funcionar.
para diversos tipos de conducta. Su teoría, sin embargo, conduce a un ni-
Se pueden encontrar problemas simila- vel de cuestiones que se pueden desarro-
res con el concepto de consistencia. La llar considerando el tipo de alternativa
información de consistencia se refiere a que podría funcionar en su lugar.
cómo actúa la persona en otras ocasio- Tanto Kelley como Heider basaron
nes. En los paradigmas experimentales sus hipótesis sobre el modo en que el
utilizados, esto se traduce en informa- hombre común llega a las atribuciones
ción sobre si la persona actúa «casi siem- de causalidad, en las ideas de John
pre» o «rara vez» de una determinada Stuart Mill sobre el método científico y
manera con respecto a un objeto dado. en particular en su método de la diferen-
La idea tiene de nuevo un cierto carácter cia. La historia de la ciencia presenta un
inductivista. El perceptor cuenta los ca- modelo alternativo viable, el del científi-
sos en que se da una reacción particular co como verificador de hipótesis más
frente a una entidad determinada y de que como recolector de información.
aquí llega a una atribución de causalidad. Una alternativa al enfoque de Heider-
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Kelley postularía que el hombre común cas es cuando buscará en una amplia
se acerca a un suceso con un rico bagaje gama de dimensiones generales.
de hipótesis relativas a su explicación. En resumen, pues, el argumento pre-
Tiene de antemano un conjunto de hipó- sentado intenta mostrar que la teoría de
tesis acerca de por qué ocurrió el suceso, Kelley sobre la forma en que las perso-
desde el momento en que éste se ha cla- nas hacen atribuciones es inadecuada. El
sificado. En lugar de comprometerse en inductivista de Kelley, que contabiliza
una búsqueda general inductivista, a lo casos en las dimensiones de consenso,
largo de las líneas sugeridas por Kelley, consistencia y distintividad, puede ser
buscaría, según este enfoque alternativo, reemplazado por un explicador que se
elementos específicos de información aproxima a un hecho con una serie de
para distinguir entre sus hipótesis. Tó- hipótesis acerca de su explicación, y que
mese, por ejemplo, el caso del robo ante- busca información que le saque de la
riormente mencionado. Al saber que un ambigüedad. Algunas de estas hipótesis
determinado chico ha robado algo, se- contendrán teorías culturalmente com-
gún Kelley, el que da la explicación bus- partidas sobre dicho suceso. Qué son las
caría entonces información sobre consen- teorías culturales, cómo se transmiten y
so, consistencia y distintividad, con vis- cuándo se recurre a ellas son considera-
tas a clasificar las causas del suceso. El ciones vitales para una psicología de las
modelo alternativo que aquí se plantea, explicaciones.
postularía un tipo de proceso diferente.
Quien da la explicación es posible que se
enfrente al suceso con un bagaje de hi- CONSIDERACIONES
pótesis. Puede creer que los niños roban INTERPERSONALES
«porque provienen de hogares pobres» o
«porque no se les da suficiente dinero La teoría de la atribución se ha intere-
para sus gastos» o «porque son atrevi- sado, por lo general, por procesos in-
dos», y buscaría entonces información trapsíquicos. El presupuesto general que
que le permitiese elegir entre estas teo- se hace en el estudio de los procesos
rías. En los paradigmas experimentales atributivos es que cuando una persona se
utilizados para probar las ideas de Ke- enfrenta a un suceso hace una atribución
lley, los experimentos se centran en el de causalidad a factores personales o am-
uso de información, en un contexto muy bientales. Este enfoque genera proble-
restringido; lo que se necesita son es- mas cuando se trata de relacionar el len-
tudios sobre la búsqueda de información. guaje con la atribución de causalidad a
En este contexto se puede reintroducir los polos personal y situacional. El pos-
una variante de los tipos de factores tulado principal de este trabajo es que
mencionados por Kelley. ¿Cuándo busca un hablante tiene ante sí un conjunto de
la gente información sobre la conducta explicaciones, de las que todas pueden
de otros? ¿Cuándo se pregunta cómo ac- ser ciertas. El contexto interpersonal de
tuó esa persona en anteriores ocasiones? la explicación puede ser el factor crítico
Este tipo de información tal vez sea más en la comprensión de la explicación que
importante cuando la persona no tenga se presente. La consideración de esta di-
una teoría cultural adecuada para el mensión interpersonal puede conducir a
acontecimiento. Así, cuando el explica- la solución de uno de los problemas per-
dor prospectivo encuentra que el niño manentes de la teoría de la atribución.
tenía suficiente dinero, que no lo hizo En su influyente trabajo sobre las di-
por osadía, y pasa revista a sus otras teo- ferencias de atribución causal entre actor
rías culturales, tal vez entonces haga pre- y observador, Nisbett y otros (1973) dis-
guntas como ¿lo ha hecho antes alguna cuten la interpretación de la afirmación
vez? Es plausible afirmar que cuando «elegí química porque es un campo bien
una persona agota las hipótesis específi- pagado», en comparación con «elegí quí-

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mica porque quiero ganar mucho dine- quiero ganar mucho dinero» o «elegí la
ro». Señalan que la primera se podría casa porque quería estar aislado pero,
tratar como una atribución de causa a por supuesto, la casa no está retirada».
una entidad (química... porque es un Van der Pligt (1981) hace una revisión
campo bien pagado), y la segunda como muy completa de las dificultades a las
una atribución de causa a la persona que los teóricos de la atribución han te-
(yo... porque quiero ganar mucho dine- nido que enfrentarse al usar este par de
ro). Nisbett y otros encuentran que los conceptos aparentemente simples. Las
sujetos tienden a explicar sus propias diferencias entre las dos formulaciones
elecciones de facultad y de novia en tér- puede que no se deban a diferentes per-
minos de entidad, mientras que las elec- cepciones de causalidad sino a los dife-
ciones que hacen sus mejores amigos las rentes contextos interpersonales en que
explican más en términos de las caracte- se dan las explicaciones.
rísticas de sus amigos. Relacionan esto Si vamos a estudiar las explicaciones
con la tesis general de que los actores como sucesos que tienen lugar en con-
explican su propia conducta más en tér- textos sociales particulares, se ponen de
minos de factores situacionales, mientras relieve una serie de conceptos que se han
que los observadores son más propensos utilizado en el análisis del discurso. En
a explicar la misma conducta en térmi- lugar de considerar que la persona está
nos de las características disposicionales haciendo atribuciones causales a factores
del actor. Nisbett y otros consideran la personales o ambientales, un enfoque al-
posibilidad de que las diferencias entre ternativo, que ya ha sido estudiado en
explicaciones orientadas hacia la entidad relación con otros temas, mantendría
y las orientadas hacia la persona, como que el hablante posee un conjunto de ex-
las del ejemplo anterior, se deban más a plicaciones alternativas para cualquier
una diferencia del uso del lenguaje que suceso, todas las cuales pueden concor-
de atribuciones de causalidad. Intentan dar con los hechos. Schegloff (1972), en
reducir el peso de este argumento sugi- su análisis de cómo la gente hace refe-
riendo que se pueden encontrar diferen- rencia a una posición concreta, señala
cias similares incluso cuando los sujetos que se puede hacer referencia a un lugar
no tienen que dar explicaciones por sí determinado de diversas maneras, todas
mismos, sino que eligen entre explicacio- las cuales son igualmente ciertas. Para
nes redactadas en términos de entidad y especificar dónde están mis notas de tra-
disposición. Ross (1977) vuelve a este bajo, existen una variedad de formula-
problema con un ejemplo diferente: ciones que van desde «frente a mí» o
«Jack compró la casa porque está retira- «encima de la mesa de trabajo» hasta «en
da» (formulación de entidad), en compa- Oxford» o «en Inglaterra», todas las cua-
ración con «Jill compró la casa porque les pueden ser ciertas. La presentación
quería estar aislado» (formulación perso- de una formulación particular, por su-
nal). Señala que es improbable que éstas, puesto, no es aleatoria, y Schegloff in-
por sí mismas, se refieran a diferencias tenta analizar algunos de los conceptos
en la atribución de causas a factores per- relevantes a la formulación de lugar en
sonales o situacionales. Desde luego, pa- una ocasión determinada. Se podrían
rece poco probable que tal diferencia se aplicar razonamientos similares para la
refiera a modos fundamentalmente dife- formulación del tiempo. En respuesta a
rentes de percibir las causas de un acto la pregunta ¿cuándo ocurrió?, hay una
concreto. Para que una de las explicacio- serie de respuestas verdaderas que van
nes del suceso sea cierta, la otra tiene desde «a las seis en punto» o «a la tarde»
que serlo también, y estar implicada por hasta «en Navidad» o «cuando estaba en
ella. No tendría sentido decir que «elegí la facultad», siendo de esperar que haya
química, en efecto, porque es un campo algunos principios sistemáticos que go-
bien pagado, pero, por supuesto, yo no biernan la formulación del tiempo. El
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adoptar tal enfoque en el estudio de las química porque quería ganar mucho di-
explicaciones supone poner de manifies- nero» o «compró la casa porque está re-
to la importancia del contexto en que se tirada». Se podría, por tanto, pensar que
dan las explicaciones. el hablante presenta una atribución per-
La importancia del contexto y de la sonal a unos y situacional a otros, de-
comprensión del sistema de comunica- pendiendo de sus presupuestos sobre lo
ción entre actores ha sido puesta de re- que los oyentes ya saben. Es previsible
lieve por diversos autores. Rommet- que el oyente registre una cadena de in-
veit (1974), por ejemplo, dice que el len- terpretaciones para una frase (Clark,
guaje debe estudiarse en términos de co- 1978). En experimentos sobre memoria y
municación entre personas en un contex- tiempo de reacción, Clark ha explorado
to concreto, y examina algunos de los las interpretaciones que se dan y los pre-
conceptos necesarios para analizar la co- supuestos intermedios que el oyente tie-
municación. Considera que la comunica- ne que adoptar para interpretar una fra-
ción se basa en cierto conocimiento se. La interpretación de las frases expli-
compartido y en expectativas sobre lo cativas y la forma en que se relacionan
que es relevante. La codificación supone con los juicios de causalidad y con los
una decodificación anticipatoria; la deco- presupuestos sobre el conocimiento de
dificación pretende la reconstrucción de los participantes es otra área potencial-
lo que el hablante intenta que se conoz- mente prometedora del estudio de las ex-
ca. Coulthard pone también de manifies- plicaciones.
to la importancia del conocimiento com- II) La relación entre inter-actores. Un
partido para el entendimiento de las re- aspecto de la relación entre las personas,
glas de interpretación y comprensión del que con frecuencia los psicólogos han
hablante y del oyente (Coulthard, 1975); considerado fundamental, es el de la afi-
los autores relacionados con la etno- liación (véase Brown, 1965; Argyle,
metodología (véase Garfinkel, 1967) han 1969). Las relaciones entre esta dimen-
puesto de relieve la idea de expectativas sión y el concepto, relacionado con ella,
previas para la comprensión de cómo un de «distancia interpersonal» con diversas
inter-actor se orienta hacia su contexto. características estilísticas, sintácticas y ex-
Ideas semejantes han sido formuladas tralingüísticas, han sido consideradas por
por Grice (1957, 1975), quien representa diversos autores (p. ej., Joos, 1962; Ro-
una teoría del significado, basada en las binson, 1972). Sin embargo, se ha pres-
intenciones del hablante. Lo importante tado escasa atención al contenido del ha-
aquí es la noción de que hablantes y bla y a la forma en que las diferentes
oyentes observan unos principios coope- áreas de contenido están conexionadas
rativos en la conversación. Esta coopera- con diferentes tipos de relación. Los pre-
ción no se refiere sólo a los mecanismos supuestos sobre el tipo de información
del habla, sino también a ciertos acuer- que quiere y espera la otra persona, sin
dos tácitos de que los participantes serán duda ,están relacionados con el tipo de
informativos, veraces, relevantes y cla- explicación que se da. La intimidad del
ros. contenido de la explicación aportada de-
Esto nos conduce al primer principio bería estar relacionada con la intimidad
que subyace a la presentación de una ex- de la relación.
plicación concreta. I). Presupuestos relati- Otra consideración importante es la
vos al conocimiento del otro. En la conver- del rol. Schegloff (1972) señala que la
sación uno se compromete a ser infor- formulación de lugar depende de los
mativo. Así, si el hablante considera que presupuestos del hablante acerca de la
el oyente sabe que la química es un cam- membrecía de grupo del otro. Un aspec-
po bien pagado, o que la persona a to de ésta es el rol. Sería de esperar que
quien se refiere le gusta el aislamiento, la explicación de un accidente que se da
responderá con las expresiones «eligió a un policía y la que se da a los padres
Estudios de Psicología a.. s2 - saz

yó Estudios
fuese diferente —aun cuando los temas su trabajo sobre la filosofía del lenguaje,
relativos a culpa, responsabilidad, etc., Austin (1962) señala que el lenguaje no
fueran irrelevantes— ya que existe la es sólo un medio para hacer afirmaciones
creencia de que en tales relaciones la verdaderas o falsas, sino que es algo que
gente se interesa en cosas diferentes. La tiene consecuencias. «Decir cosas produ-
aceptabilidad de una excusa concreta de- cirá a menudo, e incluso con bastante
pendería, asimismo, de la relación entre frecuencia, ciertos efectos consecuentes
las personas implicadas. Un marido de- sobre los sentimientos, pensamientos o
primido, por ejemplo, tal como señalan acciones de la audiencia, del hablante o
Scott y Lyman (1968), puede obtener el de los demás hablantes» (p.101). La teo-
apoyo de su mujer porque su equipo fa- ría de la atribución ha prestado cierta
vorito haya perdido un partido impor- atención a las consecuencias de una ex-
tante, pero esa misma explicación de la plicación para el propio hablante. Se han
depresión parecería extraña si se la diese realizado numerosos estudios en lo que
a su jefe. Además, una sociedad permite se ha dado en llamar «sesgos al servicio
a cierto tipo de personas dar cierto tipo de uno mismo» dentro de la teoría de la
de explicaciones. Como han señalado Se- atribución (véase Zuckerman, 1978 para
cord y Backman (1974), un empleado una revisión del tema). Aquí no nos in-
perteneciente a los niveles inferiores pue- teresa saber si es acertado o no conside-
de explicar sus acciones diciendo «yo rarlos como sesgos, lo que importa es
sólo cumplía órdenes», mientras que esta que pueden servir para repartir elogios y
explicación se considera inaceptable para culpas, para aumentar o disminuir la es-
alguien de rango superior. Cada partici- tima. Esto se consigue presentando el
pante se enfrentará, pues, a la interacción tipo adecuado de explicación de una ac-
con ciertos presupuestos sobre lo que los ción en un contexto concreto. Estas
demás consideran relevante, tanto en el «versiones», por medio de las cuales la
terreno de la información como en el de gente intenta excusar o justificar su con-
las explicaciones aceptables dentro de la ducta, han sido documentadas en el ya
relación. clásico estudio de Scott y Lyman (1968)
III) Implicaciones sobre temática), activi- y elaboradas por Tedeschi y Reiss
dad. En el análisis de las explicaciones (1981). Mientras que la teoría de la atri-
de Schegloff es de particular importancia bución ha considerado la atribución de
la idea de que una formulación de lugar causa y las cuestiones, relacionadas con
es relevante para la temática o actividad ésta, de atribución de culpa en esencia
a desarrollar. La respuesta a «adónde está como sucesos interpersonales, Scott y
John?», puede ser «en la biblioteca», si el Lyman conciben las excusas y justifica-
hablante quiere hablar inmediatamente ciones presentadas ante otros como ac-
con él, o «aún está en Oxford» si el ha- ciones interpersonales.
blante está pensando en organizar una Además, igual que las explicaciones
fiesta. La elección al decir que «estuve pueden ser para excusarse de culpa uno
en Zermatt», en lugar de «estuve en Sui- mismo, también pueden servir para diri-
za» influiría, asimismo, sobre la temática gir la culpa o el elogio hacia otra perso-
en la apertura de la interacción. De for- na o, de forma más general, para inten-
ma similar, la explicación dada por la tar persuadirle de que actúe de una for-
compra de una casa puede darse de dife- ma determinada. Un ejemplo interesante
rentes maneras, según sus implicaciones puede ser el del niño al que se le coge
de temática y actividad. Si es a otro pa- robando. La misma persona puede pre-
dre que vive en el vecindario, en la ex- sentar una serie de explicaciones diferen-
plicación puede incluirse la escuela local. tes a los diversos participantes implica-
Si es a un horticultor, la explicación po- dos en el hecho. Al tendero se le puede
dría referirse al jardín. decir: «Lo hizo porque Vd. lo puso en
IV) Consecuencias interpersonales. En un sitio tentador» si la intención es con-
Estudios de Psicologia n.. sz - '982
Estudios
seguir que el tendero coloque los objetos por McArthur (1972) «John se ríe con el
de forma diferente; al padre del niño se cómico. ¿Por qué?», nuestro enfoque su-
le puede decir: «Lo hizo porque Vd. no geriría que la respuesta adecuada se dará
le da suficiente dinero para sus gastos» en el contexto en que se formuló la pre-
(si el objetivo es que se le dé más dinero gunta. ¿Por qué hacer la pregunta en
al niño) o tal vez «porque estaban en un primer lugar? Al hacerlo así el interroga-
sitio tentador» (para consolarlo), y en dor está ya singularizando el suceso
una conversación en el bar se diría: como algo digno de ser explicado. La
«Porque son pobres» o «porque así son pregunta se podría hacer, al menos, en
hoy en día los jóvenes» o cosas por el dos contextos bien diferentes:
estilo. En cada uno de estos casos, los 1) El que pregunta acaba de escuchar
efectos que puede producir una explica- la broma del cómico y no la ha encon-
ción concreta pueden ser vitales para su trado graciosa.
presentación en un determinado contex- 2) El que pregunta, aunque no ha
to. oído lo que el cómico acaba de decir,
Estos son algunos de los factores que sabe que John normalmente no se ríe
es posible relacionar con la presentación con los cómicos. Plantear la pregunta en
de una explicación en lugar de otra. Es- cualquiera de estos contextos implica ya
tos conceptos pueden usarse también presupuestos y conocimientos previos
para analizar si una explicación es acep- diferentes. De hecho, suponen distintos
tada o no por la otra persona. Así, el tipos de explicaciones plausibles, y es
que da la explicación puede hacer presu- probable que den como resultado formas
puestos falsos sobre el conocimiento del diferentes de búsqueda de información a
otro, sus criterios de relevancia o la na- nivel intrapsíquico, en lugar de una bús-
turaleza de la relación. Además, puede queda que es de naturaleza similar, como
que el oyente desee abordar una temática postula Kelley, así como diferentes expli-
o actividad diferente a la que se orienta caciones a nivel interpersonal.
la explicación dada, y puede que desee Hemos tratado de demostrar, pues,
unas consecuencias diferentes a las desea- que es errónea la concepción de la teoría
das por quien da la explicación. de la atribución según la cual la persona
El enfoque adoptado en esta sección se preocupa fundamentalmente de hacer
es el de que las explicaciones deberían atribuciones de causas a la persona o al
tratarse como sucesos que se dan en un ambiente. El modelo alternativo pro-
marco interactivo. Las explicaciones se puesto es el de una persona que da una
suelen dar como respuestas a preguntas, explicación a otra, en un contexto social
y de hecho el enfoque aquí adoptado ha particular. Se ha examinado una serie de
sido el de que quien da explicaciones factores interpersonales concebibles en
está respondiendo de acuerdo a sus pre- relación con las explicaciones presenta-
supuestos sobre las intenciones de quien das y con su aceptación o rechazo por la
pregunta. Las preguntas se pueden for- otra persona.
mular también de diferentes maneras, lo
cual tendrá implicaciones en la naturale-
za de la respuesta relevante. Preguntan- PROCESOS HISTORICOS Y
do sobre el mismo hecho se puede decir: CULTURALES
¿Por qué robó los pasteles?, o ¿por qué,
robó?, o ¿por qué transgredió la ley?, y La importancia de la localización his-
las respuestas consideradas importantes tórica y cultural de un hecho social ha
serán diferentes en cada caso. El contex- sido puesta de manifiesto en un artículo
to específico en que se plantea la pre- sumamente influyente de Gergen (1973).
gunta es, pues, un elemento importante En el amplio tratamiento que hace Ger-
en el modo en que se formula la explica- gen, señala que el énfasis general de la
ción. Volviendo al ejemplo propuesto teoría de la atribución en concebir a las
Estudios de Psicología o.* 12 - 102

y8 Estudios
personas como origen de su propia con- siderado escandalosa hace un siglo. En
ducta puede ser un fenómeno con una otras culturas se considera que hay ma-
base cultural. Harré (1981) trata del et- yor continuidad entre las diversas clases
nocentrismo de gran parte del trabajo de seres y se adscribe vida y agencia de
sobre procesos de atribución. El interés una forma muy diferente a como se hace
omnipresente por la predicción y el con- en occidente (véase, por ejemplo, Levy-
trol que se encuentra en los escritos so- Bruhl, 1928). Es obvio que el adscribir
bre procesos de atribución puede ser «vida» a las rocas, «agencia» a los árbo-
función de un tipo particular de orienta- les, y poderes particulares a los ancestros
ción religiosa y social. Los diferentes difuntos sobre los vivos, permite una se-
grupos tendrían diferentes formas de rie de explicaciones que no están dispo-
concebir su control sobre el mundo. La nibles para la mayoría de los occidenta-
investigación sobre el lugar de control, les. La concepción de ciertos tipos con-
concebible como una investigación sis- cretos de sucesos ha sufrido un conside-
temática de los distintos modos de expli- rable cambio, a menudo como conse-
car los sucesos, pone de manifiesto la cuencia de los avances científicos. La
existencia de diferencias significativas en concepción cultural de un suceso estaría
función de factores sociales. En su revi- relacionada con los tipos de explicacio-
sión de los trabajos sobre el tema, Pha- nes dominantes y fácilmente aceptables
res (1976) indica que los negros america- en esa cultura. A partir del siglo XVI la
nos están más externamente orientados enfermedad se concibe como algo ente-
que los blancos, y las personas de nivel ramente físico, caracterizada por una
social bajo están más externamente «orientación corporal» (Herzlich, 1973).
orientadas que las de nivel social alto. Herzlich señala que esto va íntimamente
La localización histórica y cultural es unido al desarrollo de la anatomía y la
de particular importancia para el estudio fisiología. Sin embargo, hoy en Francia
de las explicaciones, ya que las diferentes se considera a la enfermedad tanto en
culturas no sólo tienen acceso a distintos términos psico-sociales como orgánicos,
tipos de explicaciones, sino que también teniendo el primer tipo de explicaciones
tienen diferentes tipos de categorización, tanta importancia como el segundo. En
siendo también diferentes sus teorías cul- su estudio sobre las concepciones actua-
turales sobre la naturaleza de los hechos les de la enfermedad en Francia, Herz-
en el mundo y sus concepciones del lich encontró que la forma de vida de la
hombre. Es dentro del contexto de estas persona era central a las nociones sobre
teorías y categoríartulturales donde se las causas de la enfermedad, teniendo
puede recurrir a una explicación. Tocare- que ver con ello la urbanización y sus
mos algunos de estos temas en esta sec- consecuencias de ruido, contaminación y
ción. El objetivo es ilustrar el tema y demás. Extrapolándolo de aquí, se po-
poner de relieve la importancia de lo so- dría esperar que para quien busca una
cialmente dado en el análisis de las expli- explicación a su enfermedad y vive en la
caciones. ciudad, le sería posible hacerlo en térmi-
Las diferentes culturas construyen la nos ambientales, mientras que si vive en
unidad del mundo de diferentes maneras. el campo e intenta explicar su falta de sa-
En Occidente, se da una clara distinción lud en referencia al ambiente (Herzlich
entre lo animado y los inanimado. El ser refiere un caso de este tipo), encontrará
humano ha sido concebido como radical- más dificil dar una explicación inteligi-
mente diferente a los otros seres, aunque ble, ya que va en contra de la concep-
el advenimiento y popularización del ción cultural prevaleciente sobre las cau-
pensamiento darwiniano permita ahora sas de la enfermedad.
explicaciones de la conducta humana en Herzlich hace referencia al hecho de
términos de continuidad con otros ani- que la enfermedad se ve de diferentes
males, de una forma que se hubiese con- maneras en las diferentes culturas. Un
Estudios de Psicología 11.° 11- 1912
Estudios 19
ejemplo importante de esto se puede en- papel en el debate educativo (véase Tuc-
contrar en el trabajo de Ngubane (1977) ker, 1977). Nuestra concepción del niño
sobre la medicina zulú. Aparentemente ha sufrido importantes cambios. Cove-
el zulú distingue dos clases de enferme- ney (1967) ha documentado estos cam-
dad: las que considera fruto de causas bios en la descripción del niño en la lite-
naturales, cuyo tratamiento es de base ratura inglesa. Las primeras representa-
empírica, y para las cuales puede fácil- ciones bajo la influencia de Rousseau y
mente consultar a médicos formados en los románticos describieron al niño
Occidente, y las que considera enraizadas como inocente; los tratamientos en el si-
en las condiciones del orden social zulú, glo xx, después de la publicación de los
cuya causa es mística y no natural, y escritos de Freud sobre la sexualidad in-
cuyo tratamiento toma formas simbólicas fantil, son muy diferentes. Tucker cita a
en lugar de empíricas. La noción de que Aries, quien defiende que la noción glo-
la enfermedad está causada por hechice- bal de infancia es algo que se ha cons-
ría o brujería no está disponible para el truido en Europa en los últimos 300
occidental típico, pero juega un papel vi- años. Con anterioridad, la noción del
tal en el sistema explicativo de otras mu- niño como un tipo separado de categoría
chas sociedades. Evans-Pritchard (1937) de persona, aparentemente no existía.
ha estudiado la noción de brujería y la Esto indicaría que ciertas explicaciones y
forma sistemática en que se usa en el sis- excusas aceptables de la conducta de un
tema explicativo de los azande, cuándo niño, en términos de su status infantil
puede ser invocada y las consecuencias («sólo es un niño»), serían inaceptables y
de su invocación, poniendo de manifies- las atribuciones sobre el poder de cum-
to el papel coherente y funcional que plir ciertos fines serían también diferen-
juega en el sistema explicativo de su so- tes. Margaret Mead (1928) ha señalado,
ciedad. asimismo, que el concepto de adolescen-
Además de considerar la relación entre cia prevaleciente en Occidente no es
los diferentes aspectos del mundo y las compartido por otras culturas, y que los
concepciones culturales de los distintos tipos concretos de explicaciones para la
tipos de sucesos, la concepción que de sí conducta de un adolescente deben de es-
mismo tiene el hombre establece una di- tar restringidos por la naturaleza del
ferencia fundamental en el tipo de pre- concepto cultural de este estadio de la
guntas que se consideran dignas de ex- vida.
plicación, el tipo de explicaciones que se En un terreno más limitado, Averill
buscan, y las que se consideran acepta- (1974) ha considerado, desde una pers-
bles. Parece que en este área no se han pectiva histórica, el contraste existente
realizado muchos trabajos. Al revisar la en el pensamiento psicológico, y proba-
investigación sobre socialización, Zigler blemente también en el pensamiento co-
y Child (1969) señalan que se puede con- mún, entre emociones e intelecto. Las
ceptualizar a los diferentes investigado- emociones son concebidas, por lo gene-
res que trabajan en este área según con- ral, en términos negativos. Se consideran
ciban al niño como primariamente activo algo irracional, brutal, «biológico», y no
o pasivo, y según lo vean como funda- totalmente controlables. Apoyo para tal
mentalmente bueno o malo. ¿Y cuál es la concepción de las emociones por parte
visión que los padres tienen del niño? del hombre de la calle se puede encon-
¿Lo ven activo o pasivo? ¿Bueno o trar en el estudio de McArthur (1972),
malo? Si lo ven como primariamente ac- quien mostró que las emociones se con-
tivo, es presumible entonces que su acti- ciben más situacionalmente causadas
vidad no necesite ser explicada, pero sí que, por ejemplo, las acciones. Tal con-
su pasividad, y viceversa. Los presupues- cepto de las emociones permite dar ex-
tos relativos a la inherente bondad o no plicaciones de la conducta emocional en
de los niños han jugado un importante términos de «ser arrastrado por», y sir-
Estudios de Psicología n. o 12 - 1982
6o Estudios
ven como mecanismo para reducir la atribuciones de causalidad a fuerzas per-
culpa. Averill considera que la distinción sonales o situacionales, puede que haya
es el resultado de una tradición occiden- sido un punto de partida productivo
tal de pensamiento, que se remonta a dentro de un área inexplorada. Estos
Platón, y que se basa en conceptualiza- presupuestos quedan ahora como anteo-
ciones simplistas e ideas preconcebidas jeras teóricas y empíricas innecesarias. La
más que en evidencias. Las diferentes teoría de la atribución ignora claramente
culturas conciben las emociones de for- diversos procesos sociales. La con-
mas diferentes (Izard, 1971). Parece pro- cepción de cómo la gente hace atri-
bable también que las emociones no sean buciones, caracterizada aquí como la de
la única área en la que las diferentes cul- un inductivista que contabiliza casos en
turas pueden adscribir diferentes grados las dimensiones de consenso, consisten-
de control al funcionamiento humano. cia y distintividad, ignora el hecho de
Así, por ejemplo, Scott y Lyman (1968) que una persona tiene diversas ex-
cuentan cómo la primera y segunda ge- plicaciones plausibles para un suceso.
neración de italianos emigrados a Améri- En lugar de dedicarse a una búsqueda de
ca tenían la creencia de que el sexo es el información general e inductiva, es más
resultado de factores biológicos, desata- probable que la gente busque una infor-
dos cuando el varón y la hembra están mación específica que le ayude a ordenar
juntos y solos, lo cual podía servir de las explicaciones que ya tiene. Es proba-
excusa para las relaciones sexuales, al ble que la búsqueda de información sea
menos para los hombres. Pero para que diferente según los tipos de sucesos,
esto no parezca un alegato totalmente a aunque sistemáticamente guiada por sus
favor de las diferencias históricas y cul- hipótesis. No es probable que estas hipó-
turales, puede merecer la pena referirse tesis sean idiosincráticas; muchas deben
al trabajo de Douglas (1970), quien man- estar derivadas culturalmente. La con-
tiene que las actitudes hacia el self y ha- cepción de la persona como realizadora
cia el cuerpo se relacionan de forma sis- de atribuciones a fuerzas personales o si-
temática, si bien compleja, con aspectos tuacionales no tiene en consideración el
más generales de la estructura social y de hecho de que las explicaciones se dan a
las creencias cosmológicas. otras personas, en contextos concretos.
Un análisis de los contextos interperso-
nales nos lleva a la opinión de que las
COMENTARIOS FINALES personas dan sistemáticamente diferentes
tipos de explicaciones en diferentes tipos
La teoría de la atribución ha tratado de contextos. Una persona puede, para
sólo un limitado subconjunto de temas, un mismo suceso, hacer una atribución
que podrían ser tratados por una psico- personal en un contexto interpersonal y
logía de las explicaciones. Se ha centrado una atribución situacional en otro. Las
exclusivamente en procesos intrapersona- explicaciones, finalmente, tienen que ser
les y, dentro de éstos, en un limitado aceptables, concepto que destaca su na-
subconjunto. El análisis que aquí se turaleza social. Las explicaciones se en-
aporta ha intentado mostrar que los pro- cuentran inmersas no sólo en contextos
cesos interpersonales y sociales constitu- interpersonales, sino también en contex-
yen un elemento vital de cualquier psico- tos sociales.
logía de las explicaciones. La interrela- Un análisis de las explicaciones impli-
ción entre estos tres niveles implica que ca, por tanto, una serie de consideracio-
la investigación de todos ellos es vital nes sobre diferentes tipos de procesos.
para la comprensión de las explicaciones Las amplias categorías en que las dis-
en la vida cotidiana. tintas culturas clasifican los diferentes ti-
El énfasis en la explicación causal y en pos de sucesos, y las concepciones cultu-
la realización, por parte del perceptor, de rales de estos sucesos, forman el telón de
Estudios de Psicología a.. 12 - 102
Estudios
fondo sobre el cual los diferentes tipos dado, y tiene consecuencias tanto intra-
de explicación para un suceso pueden psíquicas como interpersonales. Ampliar
desarrollarse. Para relacionar estas expli- la perspectiva, de forma que se incluyan
caciones con un caso particular el indivi- los procesos tratados, clarifica los defec-
duo se dedica a una búsqueda de infor- tos de la teoría de la atribución en el te-
mación relevante que le saque de la am- rreno de sus propios intereses, y apunta
bigüedad. La explicación se da a otras a una nueva serie de temas susceptibles
. personas concretas en un contexto social de investigación empírica.

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