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“Año del Diálogo y la Reconciliación Nacional”

Curso: Gestión Financiera

Escuela: Escuela Profesional de Ingeniería Industrial

Ciclo: VIII

Semestre: 2018-A

Docente: VIDAL ALVAREZ NATHALIE

Integrantes:

1. Dodero Yactayo Jeyshon Andre (1315160185)


2. López Paredes Kevin Alberto (1315160113)
3. García Armaulia Jesús (1315160327)
4. Maeda Arias Adolfo (1315160024)
5. Huamán Barragán Cristhian J(1315160566)
6. Pelaez Arias Juan Gassma Jr (1315160077)

Cañete – Lima

2018
1.- Riesgo Financiero

¿Qué es el riesgo?
El concepto de Administración del Riesgo se introduce en las entidades
públicas, teniendo en cuenta que todas las organizaciones independientemente
de su naturaleza, tamaño y razón de ser están permanentemente expuestas a
diferentes riesgos o eventos que pueden poner en peligro su existencia.

Riesgo es la posibilidad de que suceda algún evento que tendrá un impacto


sobre los objetivos institucionales o del proceso. Se expresa en términos de
probabilidad y consecuencias.

La tendencia más común es la valorización del riesgo como una amenaza; en


este sentido, los esfuerzos institucionales se dirigen a reducir, mitigar o eliminar
su ocurrencia.

Pero existe también la percepción del riesgo como una oportunidad, lo cual
implica que su gestión está dirigida a maximizar los resultados que este
genera.

2.- Clases de Riesgos

El riesgo está vinculado con todo el quehacer; se podría afirmar que no hay
actividad de la vida, negocio o cualquier asunto que deje de incluirlos como una
posibilidad.

Las entidades, durante el proceso de identificación del riesgo, pueden hacer


una clasificación de los mismos, con el fin de formular políticas de operación
para darles el tratamiento indicado; así mismo este análisis servirá de base
para el impacto o consecuencias durante el proceso de análisis del riesgo
contemplado dentro de la metodología.

Entre las clases de riesgos que pueden presentarse están 5:

Se debe tener en cuenta que los riesgos no sólo son de


carácter económico o están únicamente relacionados con
entidades financieras o con lo que se ha denominado
riesgos profesionales; estos hacen parte de cualquier
gestión que se realice.
 Riesgo Estratégico: Se asocia con la forma en que se administra la
Entidad. El manejo del riesgo estratégico se enfoca a asuntos globales
relacionados con la misión y el cumplimiento de los objetivos
estratégicos, la clara definición de políticas, diseño y conceptualización
de la entidad por parte de la alta gerencia.

 Riesgos de Imagen: Están relacionados con la percepción y la


confianza por parte de la ciudadanía hacia la institución.

 Riesgos Operativos: Comprenden riesgos provenientes del


funcionamiento y operatividad de los sistemas de información
institucional, de la definición de los procesos, de la estructura de la
entidad, de la articulación entre dependencias.

 Riesgos Financieros: Se relacionan con el manejo de los recursos de


la entidad que incluyen: la ejecución presupuestal, la elaboración de los
estados financieros, los pagos, manejos de excedentes de tesorería y el
manejo sobre los bienes.

 Riesgos de Cumplimiento: Se asocian con la capacidad de la entidad


para cumplir con los requisitos legales, contractuales, de ética pública y
en general con su compromiso ante la comunidad.

 Riesgos de Tecnología: Están relacionados con la capacidad


tecnológica de la Entidad para satisfacer sus necesidades actuales y
futuras y el cumplimiento de la misión.
3.- Administración de Riesgos

La administración del Riesgo comprende el conjunto de Elementos de Control y


sus interrelaciones, para que la institución evalúe e intervenga aquellos
eventos, tanto internos como externos, que puedan afectar de manera positiva
o negativa el logro de sus objetivos institucionales. La administración del riesgo
contribuye a que la entidad consolide su Sistema de Control Interno y a que se
genere una cultura de Autocontrol y autoevaluación al interior de la misma.

Las etapas sugeridas para una adecuada administración del Riesgo son las
siguientes:

Compromiso de las alta y media dirección, como encargadas de estimular la


cultura de la identificación y prevención del riesgo y de definir las políticas para
la gestión de los riesgos identificados y valorados entre las que se encuentran
la definición de canales directos de comunicación y el apoyo a todas las
acciones emprendidas en este sentido, propiciando los espacios y asignando
los recursos necesarios.

Conformación de un Equipo MECI o de un grupo interdisciplinario: Es


importante conformar un equipo que se encargue de liderar el proceso dentro
de la entidad y cuente con un canal directo de comunicación con los
designados de la dirección y de las diferentes dependencias.

Capacitación en la metodología: Definido el Equipo MECI o el grupo


interdisciplinario, debe capacitarse a sus integrantes en la metodología sobre
administración del Riesgo y su relación con los demás Subsistemas y
Elementos del Modelo Estándar de Control Interno- MECI, de modo que se
conviertan en multiplicadores de esta información al interior de cada uno los
procesos donde sea que participen.

El adecuado manejo de los riesgos favorece el desarrollo y crecimiento de la


entidad, con el fin de asegurar dicho manejo es importante que se establezca el
entorno y ambiente organizacional de la entidad, la identificación, análisis,
valoración y definición de las alternativas de acciones de mitigación de los
riesgos, esto en desarrollo de los siguientes elementos:

• Contexto estratégico

• Identificación de riesgos

• Análisis de riesgos

• Valoración de riesgos

• Políticas de administración de riesgos


¿Qué es el contexto estratégico?
Son las condiciones internas y del entorno, que pueden generar eventos que
originan oportunidades o afectan negativamente el cumplimiento de la misión y
objetivos de una institución. Las situaciones del entorno o externas pueden ser
de carácter social, cultural, económico, tecnológico, político y legal, bien sean
internacionales, nacionales o regionales según sea el caso de análisis. Las
situaciones internas están relacionadas con la estructura, cultura
organizacional, el modelo de operación, el cumplimiento de los planes y
programas, los sistemas de información, los procesos y procedimientos y los
recursos humanos y económicos con los que cuenta una entidad.

¿Cómo se identificar el Riesgo?


La identificación del riesgo se realiza determinando las causas, con base en los
factores internos y/o externos analizados para la entidad, y que pueden afectar
el logro de los objetivos.

Una manera para que todos los servidores de la entidad conozcan y visualicen
los riesgos es a través de la utilización del formato de identificación de riesgos
el cual permite hacer un inventario de los mismos, definiendo en primera
instancia las causas con base en los factores de riesgo internos y externos
(contexto estratégico), presentando una descripción de cada uno de estos y
finalmente definiendo los posibles efectos (consecuencias).

Es importante centrarse en los riesgos más significativos para la entidad


relacionados con los objetivos de los procesos y los objetivos institucionales.
Es allí donde, al igual que todos los servidores, la gerencia pública adopta un
papel proactivo en el sentido de visualizar en sus contextos estratégicos y
misionales los factores o causas que pueden afectar el curso institucional, dada
la especialidad temática que manejan en cada sector o contexto
socioeconómico.

¿Cómo se analiza el Riesgo?


El análisis del riesgo busca establecer la probabilidad de ocurrencia del mismo
y sus consecuencias, este último aspecto puede orientar la clasificación del
riesgo, con el fin de obtener información para establecer el nivel de riesgo y las
acciones que se van a implementar.

El análisis del riesgo depende de la información obtenida en la fase de


identificación de riesgos.

¿Cómo se valora el riesgo?

La valoración del riesgo es el producto de confrontar los resultados de la


evaluación del riesgo con los controles identificados, esto se hace con el
objetivo de establecer prioridades para su manejo y para la fijación de políticas.
Para adelantar esta etapa se hace necesario tener claridad sobre los puntos de
control existentes en los diferentes procesos, los cuales permiten obtener
información para efectos de tomar decisiones.
¿Políticas de administración del riesgo?
Para la consolidación de las Políticas de Administración de Riesgos se deben
tener en cuenta todas las etapas anteriormente desarrolladas. Las políticas
identifican las opciones para tratar y manejar los riesgos basadas en la
valoración de los mismos, permiten tomar decisiones adecuadas y fijar los
lineamientos, que van a transmitir la posición de la dirección y establecen las
guías de acción necesarias a todos los servidores de la entidad.

4.- Varianza y Desviación Típica

El Riesgo Financiero
El riesgo financiero o riesgo de inversiones financieras, es la probabilidad de
perder dinero. Para medirlo nos fijamos en un concepto; la volatilidad.

La volatilidad es la rapidez con que cambian los precios y la magnitud de


estos cambios. Mayor rapidez significa mayor volatilidad, mayor magnitud de
los cambios significa también mayor volatilidad, aunque la velocidad no sea
alta.

Si tienes, por ejemplo, una acción en cartera que hace un mes cotizaba a 10
euros, hace 6 meses estaba a 9,7 euros, hace un año a 9,3 euros y hoy está a
9,8 euros, ya puedes intuir que la volatilidad será baja porque los cambios de
precio a lo largo de un año han sido pequeños. El precio se ha movido en un
rango máximo que no llega al 10% en todo un año.

Ahora supón que todo ese cambio se ha dado en un mes. Aunque los cambios
en el precio han sido los mismos, se han dado en un periodo de tiempo 12
veces menor, por lo que la velocidad de los cambios en el precio es mucho
mayor. La volatilidad es mayor.

También puede darse el caso de que, moviéndose poco el precio, de vez en


cuando pase de 10 euros a 13 euros y a los 6 meses estar en 7 euros. El
precio se mueve en un rango de precios que varía un 30%, una variación muy
alta y por lo tanto una volatilidad mayor.

De forma intuitiva apreciamos el riesgo en esta última.

Para calcular este riesgo la estadística utiliza un parámetro muy sencillo de


medir y calcular; la desviación típica o desviación estándar.
La desviación típica es la raíz cuadrada y la varianza. La varianza es la suma
de diferencias de cada precio respecto a su media histórica.

Si no utilizase el cuadrado, la suma sería cero. Pero al elevar al cuadrado cada


diferencia, tenemos en positivo todas las diferencias (tanto las positivas como
las negativas).

Ejemplos

Acción “XYZ” a 10 euros del ejemplo anterior

La media del precio es de 11,86 euros. Fácil


de calcular, sumas los 12 precios y lo divides
entre 12.

Para ver la volatilidad calculamos la varianza,


que es la diferencia de cada precio respecto a
su media al cuadrado.
La suma de las 12 diferencias es cero. Por eso se eleva al cuadrado cada
diferencia, para hacer positivas todas las
diferencias.

La varianza es la suma de los cuadrados.

Ahora simplemente se calcula su raíz cuadrada, para volver a la dimensión del


precio. La raíz de 8,37 es 2,89.

La desviación típica o estándar de esta serie de 12 meses es de 2,89 euros.

La desviación estándar es el promedio de variaciones del precio. Se define


como una medida de “dispersión”, cuanto más dispersa más variación y por lo
tanto más riesgo y a la inversa.

Este dato por sí solo no nos dice mucho. Para ello la estadística utiliza otra
herramienta de análisis; la función de probabilidad.
Distribución normal o Gaussiana
Una distribución de probabilidad nos indica en qué rango de precios podemos
esperar que se mueva el precio de un activo con una probabilidad esperada.

Para hacer esto en finanzas se utiliza la conocida distribución normal o


gaussiana.

Distribución normal de los precios de la acción “XYZ”


Así se puede saber en dónde se moverá el precio respecto a su precio medio
con una probabilidad del 68%, del 95% y del 99,7%.

Para ello solo se utilizan dos datos: la media de los precios y su desviación
típica.

Así tenemos que:

El precio tiene una probabilidad del 68% de estar a una desviación de su


media. En nuestro ejemplo a estar entre 8,97 euros (11,86-2,89) y 14,75 euros
(11,86+2,89).

El precio tiene una probabilidad del 95% de estar a dos desviaciones de su


media. En nuestro ejemplo a estar entre 6,07 euros (11,86-5,79) y 17,64 euros
(11,86+5,79).
El precio tiene una probabilidad del 99,7% de estar a tres desviaciones de su
media. En nuestro ejemplo a estar entre 3,18 euros (11,86-8,68) y 20,54 euros
(11,86+8,68).

Para los cálculos se suele utilizar el 95% de probabilidades, la segunda opción.


Y se sobreentiende que el 5% no contemplado es despreciable o marginal.

El precio se mueve con “variaciones” que están dentro de esa área, con esa
frecuencia.

Desde una perspectiva puramente conceptual, de lógica, los resultados que


arroja la estadística convencional no tienen una causalidad en una gran parte
de las ocasiones.

El modelo descrito, que es sobre el que se basa toda la ingeniería financiera,


todos los modelos que se explican en las escuelas de negocio de todo el
mundo y todos los productos y modelos financieros, tiene dos problemas que
nacen en sus dos hipótesis de partida:

a) Los precios son independientes

b) Se distribuyen con normalidad (distribución normal)

Los precios no son independientes, así de sencillo. La realidad el último siglo


nos dice que lo que ocurrió ayer influye en lo que ocurre hoy y en lo que
ocurrirá mañana. No existirían tendencias, ni medias, ni expectativas sobre
precios que van aumentando o disminuyendo, ni análisis posible. Sería puro
caos. La historia nos muestra las tendencias de forma clara, y cómo tomamos
decisiones en base a los patrones que se van formando a lo largo del tiempo.

La segunda hipótesis es que se distribuyen de forma normal, la distribución


normal que hemos visto. El problema es que la historia nos demuestra que los
cambios en los precios no se distribuyen de esta manera, son mucho más
bruscos. De hecho, la distribución de las cotizaciones en los mercados
financieros se aparta bastante del modelo oficial.

En realidad hay mucho más riesgo.

Esto implica problemas en todo el edificio. Los tres pilares sobre los que
descansa todo el edificio financiero moderno están sustentados en estas
premisas, originarias del matemático francés Louis Bachelier a principios del
siglo XX y popularizadas entre la profesión económica por Paul Samuelson
(para variar).
Los tres grandes pilares sobre las que descansan el estudio de los mercados
financieros, la gestión del riesgo, valoración y gestión de carteras son:

 Teoría de carteras eficientes de Markowitz


 Modelo de valoración CAPM de Sharpe
 Modelo de valoración del riesgo Scholes-Merton

Todo lo que se da en las escuelas de negocio, consultoras financieras,


gestoras etc, está basado en esto. Hasta los famosos gestores automáticos –
“roboadvisors”– que están dándose a conocer ahora también.

La valoración del riesgo de tus productos contratados, también se basan en


esto.

El problema es que hay muchísimo más riesgo. La distribución de precios


normal suaviza los resultados, estos no se mueven de la manera suave del
modelo, sino que se concentra una gran parte en pequeñas variaciones y unas
pocas gigantescas destructoras, con mucha mayor frecuencia de las que
predice el modelo estándar.

Y como los precios no son independientes, las pérdidas y ganancias vienen en


rachas, donde quiebran y se hunden los inversores.

Medir el riesgo de esta manera tiene un punto positivo. Si una medida es


limitada, pero se utiliza es porque ofrece cierta eficiencia en algún sentido. En
el caso de las medidas de riesgo convencionales esto también sucede, nos
aportan una información valiosa en una fracción de segundo. Esto no quiere
decir que sean exactas, sino que son valiosas.

Por ejemplo, nos permiten comprar el riesgo o la rentabilidad-riesgo de un


activo financiero en relación a otros, ya que todos están medidos en base a los
mismos parámetros e hipótesis.

Yo mismo las utilizo, todos las utilizamos. En este sentido es muy útil. Por
ejemplo, cuando decimos que determinado activo financiero tiene una
volatilidad del 30% (medida por su desviación típica) sabemos que es un activo
con mucho riesgo, porque sabemos que los índices de referencia tienen
aproximadamente un histórico de la mitad.

Esto no quiere decir que la volatilidad real sea del 30%, porque en realidad es
mayor, sino que sabemos en un vistazo rápido que ese activo es “demasiado
arriesgado”. Esta información es muy valiosa.

Uno de los parámetros que más utilizamos es el Ratio de Sharpe, que nos dice
qué rentabilidad tienen un activo en relación a su riesgo. Este dato todavía es
más completo porque nos da dos variables en lugar de una y además podemos
compararlo mejor.
5.- Apalancamiento Operativo
El apalancamiento operativo consiste en utilizar costes fijos para obtener una
mayor rentabilidad por unidad vendida. Dado que al aumentar la cantidad de
bienes producidos los costes variables aumentarán a un menor ritmo y con ello
también los costes totales (costes variables más costes fijos) aumentarán a un
ritmo más lento, según vayamos aumentando la producción de bienes,
resultando en un mayor beneficio por cada producto vendido.

Se conoce al apalancamiento operativo como la relación entre costes


fijos y variables utilizados por una empresa en la producción de bienes.

¿Para qué sirve el apalancamiento operativo?

Gracias al apalancamiento operativo un negocio logra reducir los costes totales


de producción una vez haya producido más de una determinada cantidad, es
decir, a medida que el volumen de ventas en la empresa aumenta, cada nueva
venta contribuye menos a los costes fijos y más a la rentabilidad.

Por tanto, el apalancamiento operativo permite a las empresas gozar de un


mayor margen bruto (precio de venta menos costes variables) en cada venta.
Podemos saber que una empresa tiene un alto grado de apalancamiento
operativo si el margen bruto de sus ventas es muy elevado.

Cuantos más costes fijos se utilicen, mayor será el apalancamiento


operativo. Un alto grado de apalancamiento operativo tiene un mayor riesgo
para la empresa, ya que conlleva grandes desembolsos al inicio de una
actividad. Si al final la venta de bienes es menor de la esperada y debe
producir menos productos de los que había pronosticado que iban a ser
necesarios para superar el umbral de rentabilidad, los costes totales y las
pérdidas derivadas de esa actividad serán mayores que si hubiera tenido un
menor grado de apalancamiento operativo.

Ejemplo apalancamiento operativo

Vamos a ver de forma gráfica lo que le ocurriría a la rentabilidad de dos


empresas iguales, pero con dos grados de apalancamiento operativo
diferentes, según las unidades o productos que vendan.
6.- Apalancamiento Financiero

El apalancamiento financiero consiste en utilizar algún mecanismo (como


deuda) para aumentar la cantidad de dinero que podemos destinar a una
inversión. Es la relación entre capital propio y el realmente utilizado en una
operación financiera.

El término “apalancamiento” viene de apalancar. Una definición rigurosa de


apalancar es: “levantar, mover algo con la ayuda de una palanca”. Como
vamos a ver, este concepto no está muy lejos de lo que significa
el apalancamiento financiero, que utiliza mecanismos financieros a modo de
palanca para aumentar las posibilidades de inversión.

El principal mecanismo para apalancarse es la deuda, que permite que


invirtamos más dinero del que tenemos gracias a lo que hemos pedido
prestado (a cambio de unos intereses). Pero no solo mediante deuda se puede
conseguir apalancamiento financiero, sino que en muchos instrumentos
financieros (sobretodo derivados como los futuros o los CFDs) solo es
necesario dejar una garantía del total invertido, por lo que también se puede
apalancar la operación. Además, en las opciones financieras, como
compramos un derecho sobre un activo subyacente, que generalmente tiene un
precio mucho mayor a la prima, se genera un efecto apalancamiento.

¿Para qué sirve el apalancamiento financiero?

Gracias al apalancamiento financiero logramos invertir más dinero del que


realmente tenemos y así podemos obtener más beneficios (o más pérdidas)
que si hubiéramos invertido solo nuestro capital disponible. Una operación
apalancada (con deuda) tiene una mayor rentabilidad con respecto al capital
que hemos invertido. Esto se puede hacer por medio de deuda o a través
de derivados financieros.

Cuanta más deuda se utilice, mayor será el apalancamiento financiero. Un alto


grado de apalancamiento financiero conlleva altos pagos de interés sobre esa
deuda, lo que afecta negativamente a las ganancias.
¿Cómo se calcula el apalancamiento financiero?

El grado de apalancamiento se suele medir en unidades fraccionadas. Un


apalancamiento de 1:2 por ejemplo, significa que por cada euro invertido se
está invirtiendo dos euros, es decir, la deuda es también de un euro.
Apalancamiento 1:3 es que por cada euro invertido hay dos euros de deuda, el
capital propio supone el 33% de la inversión.

Por lo tanto, la fórmula para calcular el apalancamiento financiero de una


operación será:

Por ejemplo, si hemos invertido de nuestro propio dinero 1.000 euros, pero el
valor de nuestra inversión (ya sea porque estamos utilizando deuda
o productos derivados) es de 10.000 euros. El apalancamiento será de 1:10:

Cuando el apalancamiento financiero es resultado de deuda se suele utilizar


esta otra fórmula para calcular el porcentaje de apalancamiento que estamos
utilizando:

Ejemplo de apalancamiento financiero

Supongamos que queremos comprar acciones de una empresa y disponemos


de 10.000€ que hemos ahorrado. Las acciones tienes un precio de 1€ por
acción, por lo que podríamos comprar 10.000 acciones. Así que compramos
10.000 acciones a 1€. Pasado un tiempo, la acciones de esta empresa se
sitúan a 1,5€ por acción y decidimos vender 10.000 acciones por 15.000€. Al
final de la operación ganamos 5.000€ con una inversión de 10.000€, es decir,
obtenemos una rentabilidad del 50%.

Pero… y si hubiésemos decidido apalancarnos y pedir dinero prestado:


Digamos que conseguimos pedir prestado al banco un crédito por 90.000€ y
podemos comprar 100.000 acciones por 100.000€. Pasado un tiempo, la
acciones de esta empresa se sitúan a 1,5€ por acción, así pues nuestras
100.000 acciones pasan a valer 150.000€ y decidimos venderlas. Con esos
150.000€ vamos a pagar los 90.000€ del crédito que pedimos, más 10.000€ en
concepto de intereses del crédito. Al final de la operación tenemos 150.000-
90.000-10.000= 50.000€, es decir, que si no lo contamos sobre los 10.000€
iniciales, tenemos unos beneficios de 40.000€. Esto es, una rentabilidad de un
400%!!

Y si… las acciones en vez de subir a 1,5€, bajan a 0,5€.

Pues ocurriría que tendríamos 100.000 acciones valoradas en 50.000€, con lo


cual no podríamos ni siquiera hacer frente a los 90.000€ del crédito más los
10.000€ de intereses. Acabaríamos sin dinero y con una deuda de 50.000€, es
decir, perdemos 60.000€. Pero si no hubiésemos pedido prestado dinero y
bajaran las acciones solo hubiéramos perdido 5.000€.

Vamos a ver gráficamente la rentabilidad que tendríamos según sea una


operación con apalancamiento financiero o no dependiendo del precio de la

acción.

Llegados a este momento, parece que quedan bastante claras las ventajas y
desventajas de realizar operaciones con apalancamiento financiero.

Como último inciso, es muy importante tener en cuenta el grado de


apalancamiento, no es lo mismo cuando la deuda supone el 90% de la
operación como en el ejemplo visto (poco real), que cuando supone un 50%. A
mayor grado de apalancamiento, la rentabilidad puede ser mucho mayor, pero
el riesgo también.

7.- APALANCAMIENTO TOTAL O COMBINADO

Cuando el apalancamiento financiero se combina con el apalancamiento


operativo, el resultado se conoce como apalancamiento total o combinado. El
efecto de combinar el apalancamiento financiero y el operativo es una
amplificación en dos pasos de cualquier cambio en las ventas que logra un
cambio relativo en las utilidades por acción más grande. Una medida
cuantitativa de esta sensibilidad total de las utilidades por acción de una
empresa a un cambio en las ventas en ella, se conoce como el grado de
apalancamiento total.

Es el reflejo en el resultado de los cambios en las ventas sobre las utilidades


por acción de la empresa, por el producto del apalancamiento de operación y
financiero.

Si una empresa tiene un alto grado de apalancamiento operativo, su punto de


equilibro es relativamente alto, y los cambio en el nivel de las ventas tienen un
impacto amplificado o “Apalancado” sobre las utilidades. En tanto que el
apalancamiento financiero tiene exactamente el mismo tipo de efecto sobre las
utilidades; cuanto más sea el factor de apalancamiento, más altos será el
volumen de las ventas del punto de equilibrio y más grande será el impacto
sobre las utilidades provenientes de un cambio dado en el volumen de las
ventas.

Riesgo Total
Es el peligro o inseguridad de no estar en condiciones o capacidad de cubrir el
producto del riesgo de operación y riesgo financiero.

Luego entonces, el efecto combinado de los apalancamientos de operación y


financiero, se denomina apalancamiento total, el cual está relacionado con el
riesgo total de la empresa.

En conclusión, entre mayor sea el apalancamiento operativo y financiero de la


empresa mayor será el nivel de riesgo que esta maneje.

Grado de apalancamiento total


Es la medida numérica del apalancamiento total de la empresa. Se calcula de
la misma manera que se determina el apalancamiento operativo y financiero.

Se puede decir que es la combinación de ambos grados de apalancamientos


(GAO y GAF); lo que significa, que mientras más utilidad antes de intereses e
impuestos, a los cambios de ventas; y mientras más grande sea el grado de
apalancamiento financiero, más sensible serán las utilidades por acción antes
de los cambios de la utilidad antes de intereses e impuestos. Se puede calcular
de la siguiente manera:

𝑈𝐵
𝐺𝐴𝑇 = 𝐺𝐴𝑇 = 𝐺𝐴𝑂 ∗ 𝐺𝐴𝐹
𝑈𝐴𝐼

GAT = Grado de Apalancamiento Total

UB = Utilidad Bruta

UNI = Utilidad Antes de Impuestos

GAO = Grado de Apalancamiento Operativo

GAF = Grado de Apalancamiento Financiero

Razones de apalancamiento
Las razones de apalancamiento, que miden las contribuciones de los
propietarios comparados con la financiación proporcionada por los acreedores
de la empresa, tienen algunas consecuencias.

 Primero, examinan el capital contable, o fondos aportados por los


propietarios, para buscar un margen de seguridad. Si los propietarios
han aportado sólo una pequeña proporción de la financiación total. Los
riesgos de la empresa son asumidos principalmente por los acreedores.
 Segundo, reuniendo fondos por medio de la deuda, los propietarios
obtienen los beneficios de mantener el control de la empresa con una
inversión limitada.
 Tercero, si la empresa gana más con los fondos tomados a préstamo
que lo que paga de interés por ellos, la utilidad de los empresarios es
mayor.
Las empresas con razones de apalancamiento bajas tienen menos riesgos de
perder cuando la economía se encuentra en una recesión, pero también son
menores las utilidades esperadas cuando la economía esta en auge. En otras
palabras, las empresas con altas razones de apalancamiento corren el riesgo
de grandes pérdidas, pero tienen también, oportunidades de obtener altas
utilidades.

Las perspectivas de grandes ganancias son convenientes, pero los


inversionistas son reacios en correr riesgos. Las decisiones acerca del uso del
equilibrio deben comparar las utilidades esperadas más altas con el riesgo
acrecentado.

En la práctica, el apalancamiento se alcanza de dos modos. Un enfoque


consiste en examinar las razones del balance general y determinar el grado
con que los fondos pedidos a préstamo han sido usado para financiar la
empresa. El otro enfoque mide los riesgos de la deuda por las razones del
estado de perdidas y ganancias que determina el número de veces que los
cargos fijos están cubiertos por las utilidades de operación. Estas series de
razones son complementarias y muchos analistas examinan ambos tipos de
razones de apalancamiento.

Relación entre los apalancamientos operativo, financiero y


total.
El apalancamiento operativo es una forma de medir el riesgo comercial de una
compañía. Este apalancamiento ocasiona que un cambio de volumen de las
ventas ejerza un efecto amplificado sobre las utilidades, antes de interés e
impuestos. Como se conoce, al imponerse el apalancamiento operativo, los
cambios de en las utilidades antes de interés e impuestos tendrá un esfuerzo
amplificado sobre los ingresos netos, sobre el capital contable y sobre las
utilidades por acción. Por lo tanto, si una empresa utiliza una cantidad
considerable, tanto de apalancamiento financiero como operativo, aun los
cambios más pequeños de niveles de ventas producirán amplias fluctuaciones
en los ingresos netos, en el capital contable y en las utilidades por acción.

El apalancamiento total refleja el impacto combinado del apalancamiento


operativo y financiero de la empresa. Los apalancamientos operativos y
financieros elevados generan que el apalancamiento total sea alto, y si éstos
(los apalancamientos operativos y financiero) son bajos, de igual modo generan
que el apalancamiento total descienda.
En toda empresa es necesario en algún momento tener financiamiento externo,
por lo que se requiere el análisis y medición de éste ya que el uso
desproporcional hace que se pierda autonomía.

Es responsabilidad del administrador financiero la toma de decisión, de


acuerdo al nivel deseado de apalancamiento tanto operativo como el financiero.

EJEMPLO:

Tenemos unas ventas de 20,000 soles con unos costes variables de 7,000
soles y unos costes fijos de 2,000 soles. Asimismo, existen unos intereses de
700 soles.

Calcular los grados de apalancamiento Operativo, Financiero y Total.

Ventas 20,000
𝑈𝐵 13,000
𝐺𝐴𝑂 = = = 1.1818
Costes variables 7,000 𝑈𝐴𝐼𝐼 11,000

UB 13,000 𝑈𝐴𝐼𝐼 11,000


𝐺𝐴𝐹 = = = 1.0679
𝑈𝐴𝐼 10,300
Costos fijos 2,000
𝑈𝐵 13,000
UAII 11,000 𝐺𝐴𝑇 = = = 1.262
𝑈𝐴𝐼 10,300
Intereses 700
𝐺𝐴𝑇 = 𝐺𝐴𝑂 ∗ 𝐺𝐴𝐹 = 1.1818 ∗ 1.0679 = 1.262
UAI 10,300

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