UNIVERSIDAD NACIONAL

DE LOJA
FACULTAD JURÍDICA, SOCIAL Y
ADMINISTRATIVA

CARRERA DE DERECHO

DERECHO CIVIL DE
BIENES

INFORME:
LA TRADICIÓN

GRUPO #4

INTEGRANTES:
Enrique Cuenca, Osler Jaya,
Jorge Macas, María Román, Ammy Salinas

CUARTO CICLO “D”

DOCENTE:
DR. JORGE JARAMILLO MG. SC.

MAYO 2019
 LA TRADICIÓN

Concepto:

La tradición es un modo de adquirir el dominio, varios tratadistas del Derecho han asignado

una definición, entre ellos tenemos:

Según Alfonso Barragán, la tradición como forma de adquirir el dominio “es la entrega real o

simbólica, de una cosa corporal, para cumplir una obligación preexistente, cuyo objeto es

transmitir el derecho de dominio sobre esa misma cosa, requiriendo para su operatividad el

título respectivo como la tradición misma, además de realizar a cabalidad todas las

condiciones ordinarias de eficacia”.

Juan Larrea Holguín afirma que la tradición “consiste en la potestad que tiene el dueño del

bien para traspasar el dominio a favor de otra persona, realizándolo del modo más espontaneo

entregando el objeto de la propiedad con el ánimo de enajenar, este modo de adquirir el

dominio es válido únicamente para actos entre vivos”.

El tratadista español Albaladejo, define la tradición de la siguiente manera: “La tradición

consiste en la entrega de la posesión de la cosa con el ánimo del que da (tradens) y del que

recibe (accipens) de transmitir y adquirir respectivamente el derecho (propiedad, usufructo u

otro que sea) sobre ella”.

Nuestro Código Civil define la tradición en el artículo 686: “La tradición es un modo de

adquirir el dominio de las cosas, y consiste en la entrega que el dueño hace de ellas a otro,

habiendo, por una parte, la facultad e intención de transferir el dominio, y por otra, la

capacidad e intención de adquirirlo. Lo que se dice del dominio se extiende a todos los otros

derechos reales”.

Características de la tradición.
Entre las principales características de este modo de adquirir pueden destacarse:

1) Es un modo de adquirir entre vivos y derivativo, pues el adquiriente se hace dueño de

la cosa con fundamento en el dominio que pertenece al tradente.

2) Mediante ella puede adquirirse el dominio de todos los derechos transferibles: reales y

personales.

3) Puede ser a título gratuito (si su antecedente es una donación) o a título oneroso (si el

título es un contrato de compraventa)

4) Es una convención con efecto de pago, porque extingue la obligación de transferir que

gravaba al tradente.

Clases de Tradición:

La entrega de la cosa tradida –hecho en que consiste esencialmente este modo adquisitivo-

puede asumir distintas modalidades en función de su naturaleza, dando lugar a las diferentes

especies de tradición:

a) De derechos reales sobre bienes corporales muebles.

b) De derechos reales sobre bienes corporales inmuebles

c) Del derecho de herencia

d) De los derechos personales.

e) Tradición sujeta a modalidades.

a) Tradición de los derechos reales sobre bienes corporales muebles.

El artículo 700señala que la tradición de una cosa corporal mueble debe hacerse significando

una de las partes a la otra que le transfiere el dominio, y verificando esta transferencia por

uno de los medios que el mismo precepto establece, y que dan lugar a dos formas clásicas de

tradición: real y ficticia

1. La tradición real

Esta modalidad corresponde estrictamente al concepto del artículo 686 en cuanto consiste

efectivamente en la entrega de la cosa, la que se materializa, según el numeral 1º del

artículo 700, permitiéndole la aprehensión material de una cosa presente, sin olvidar por

cierto el elemento intencional enunciado en el encabezamiento del mismo artículo,

indispensable en toda modalidad de tradición.

Una forma de tradición real es la contemplada por el inciso primero del artículo 701

relativo a la tradición de los productos, frutos o cosas de un predio: Cuando, con permiso

del dueño de un predio, se toman en él piedras, frutos pendientes u otras cosas que

forman parte del predio, la tradición se efectúa en el momento de la separación de estos

objetos.

2. La tradición ficticia o ficta.

Como muy bien lo entendió el derecho romano, en ocasiones no es posible o conveniente

hacer la entrega real o material de la cosa tradida, ya sea porque ella no está presente,

porque lo dificulta su naturaleza, o simplemente porque ella ya se encuentra en poder del

adquiriente. Estas circunstancias dan origen a las distintas formas de tradición: ficticias

o fictas:

a. Tradición de larga mano: Esta modalidad cuya denominación viene del derecho

romano (traditio longae manus), tiene lugar cuando la entrega de la cosa se

representa extendiendo la mano para señalarla o, como expresa el numeral 2º del

artículo 700, mostrándosela al adquiriente.

b. La tradición simbólica: Mediante ella, en lugar de la cosa se entrega al adquiriente

las llaves del granero, almacén, cofre o lugar cualquiera en que esté guardada

la cosa (numeral 3º del artículo 700); o cualquiera otra especie que represente o
 simbolice a la cosa, como los títulos de dominio o el sello en que consta la marca

que la distingue. También es de esta clase la tradición que se verifica mediante el

compromiso del tradente de poner la cosa a disposición del otro, en el lugar

convenido (numeral 4º del artículo 700)

c. Tradición de breve mano (traditio brevis manus): Esta forma se verifica cuando

la entrega resulta innecesaria porque el adquiriente ya tiene la cosa en su poder a

otro título: usufructuario, arrendatario, comodatario, etc. A ella se refiere el

numeral 5º del artículo 700: Por la venta, donación u otro título de enajenación

conferido al que tiene la cosa mueble como usufructuario, arrendatario,

comodatario, depositario, o a cualquier otro título no traslativo de dominio…

d. Tradición figurada mediante el pacto de constitución posesoria: Consta en la

parte final del numeral 5º del artículo 719: … y recíprocamente por el mero

contrato en que el dueño se constituye usufructuario, comodatario, arrendatario,

etc.

b) Tradición de los derechos reales sobre bienes corporales inmuebles.

Desde la antigüedad la transferencia de bienes raíces estuvo rodeada de especiales

solemnidades que tenían por objeto dificultar la dispersión de la riqueza familiar, llamar la

atención de las partes sobre la significación especial del acto enajenatorio y, finalmente hacer

conocer a la colectividad este acontecimiento de reconocida trascendencia social

Nuestro código civil se inclina por la modalidad registral como forma de tradición simbólica

de los bienes raíces, consignada en el artículo 702: Se efectuará la tradición del dominio de

bienes raíces por la inscripción del título en el libro correspondiente del Registro de la

Propiedad.

De la misma manera se efectuará la tradición de los derechos de usufructo o de uso, de

habitación o de servidumbre constituidos en bienes raíces, y del derecho de hipoteca.

Acerca de la tradición de las minas se estará a lo prevenido en las leyes especiales respectivas.

El artículo 1º de la Ley de Registro señala que la inscripción de los instrumentos públicos,

títulos y demás documentos que la Ley exige o permite que se inscriban en los registros

correspondientes, tiene principalmente los siguientes objetos:

a) Servir de medio de tradición del dominio de los bienes raíces y de los otros derechos

reales constituidos en ellos.

En este sentido, la Ley reitera la norma del artículo 702 del Código Civil, de manera que no

existe otra forma de operar la tradición de estos bienes.

b) Dar publicidad a los contratos y actos que trasladan el dominio de os mismos bienes

raíces o imponen gravámenes o limitaciones a dicho dominio.

Mediante la inscripción en este registro públicose pretende que las personas puedan informarse

de las transferencias gravámenes de inmuebles y adoptar las providencias necesarias para

proteger sus intereses. Por ejemplo el sistema registral permite conocer si un inmueble se

encuentra hipotecado, afectado por una prohibición de enajenar o si está siendo materia de una

partición, un juicio posesorio o uno de reivindicación.

c) Garantizar la autenticidad y seguridad de los títulos, instrumentos públicos y

documentos que debe registrarse.

A estos objetivos declarados por la ley, podemos agregar uno adicional: el sistema de

inscripción permite conservar la historia de la propiedad raíz, mediante la relación en los

Registros, en las distintas transferencias de un mismo inmueble, sus cargas y divisiones.

c) Tradición del Derecho de Herencia

El dominio de la herencia lo adquieren los herederos ipso iure mediante el modo de adquirir

mortis causa denominado sucesión por causa de muerte, de manera que en este aspecto no

tiene sentido hablar de la tradición de la herencia. Como corolario de este principio, el artículo
723 expresa que en el momento de diferirse la herencia, esto es al fallecimiento del causante,

la posesión de ella se confiere por el ministerio de la ley al heredero. Y si a continuación el

mismo precepto ordena que se practiquen algunas inscripciones, ellas no tienen la función de

tradición de un derecho que ya fue adquirido, sino que constituyen simplemente una

circunstancia habilitante para que el heredero pueda disponer de los bienes raíces hereditarios.

Hecha esta aclaración, se comprende que al hablar de la tradición del derecho de herencia no

nos referimos a aquella adquisición del dominio por parte del heredero, sino a la transferencia

de todo o parte de esta universalidad que hace el heredero en favor de terceros. Y hablamos de

universalidad, porque si se enajena especies o cuerpos ciertos que integran la herencia,

obviamente la tradición de cada uno de ellos se practicará en la forma correspondiente a la

naturaleza de cada bien

d) Tradición de los derechos personales.

De conformidad con lo dispuesto por el artículo 714, la tradición de los Derechos personales

se efectúa por la entrega del título, hecha por el cedente al cesionario.

La transferencia de dominio del derecho personal tiene lugar por la entrega del título, tal como

lo expresan los artículos 714 y 1841, para que este cambio de propiedad produzca efectos frente

al deudor y terceros, es necesario que se cumplan las reglas sobre cesión de derechos personales

del Título XXIV del Libro Cuarto, entre ellas la notificación de la cesión al deudor o su

aceptación (artículo 1842)

e) Tradición sujeta a modalidades

El artículo 696 señala que la tradición puede transferir el dominio bajo condición suspensiva o

resolutoria, con tal que se exprese.

1) Tradición sujeta a condición suspensiva

En este caso la existencia de la condición suspende la adquisición del dominio hasta que se

verifique el hecho en que aquella se cumplió.

2) Tradición sujeta a condición resolutoria

En presencia de una condición de este tipo se produce la adquisición del dominio por el

adquiriente, pero queda sujeto a la contingencia de perderlo si se verifica el hecho en que

consiste dicha condición.

3) Tradición sujeta a plazo

Según el artículo 697 se puede pedir la tradición de todo aquello que se deba, desde que no

haya plazo pendiente para su pago; salvo que intervenga disposición judicial en contrario. Por

consiguiente, pendiente el plazo no puede celebrarse la tradición.

BIBLIOGRAFÍA:

 Albaladejo, M. (1977), Derecho Civil, Derecho de Cosas. Volumen 1. 3era. Edición,

T. III. Barcelona: Librería Bosch.

 Barragán, A. (1979). Derechos reales. Bogotá́ : Ed. Temis.

 Código Civil

 Larrea, J. (2008). Manual elemental de Derecho Civil 3. Volumen 2. Quito:

Corporación de Estudios y Publicaciones.

 Ley de Registro