IL DOTTORE

(DOCTOR)

CREACIÓN DEL PERSONAJE

Con el inicio de la comedia del arte en la didáctica de la representación, surgen los ejercicios
prácticos de postura y su significado, el poder de la figura es crucial para la imagen que queremos
personificar en escena, por ende los ejercicios se basaron en las diferentes formas de caminar en
el espacio, alterando el movimiento o posición de alguna parte del cuerpo, siendo la del doctor
una persona, estirada, recatada que raya en lo arrogante, sus pasos tienden a ser algo cortos e
incluso en algunas ocasiones, torpes pero al final siempre se repone para mantener su postura de
hombre importante.

Para la construcción del personaje del doctor, fue necesario realizar primero que todo una
investigación sobre su origen, como nació la figura del personaje en la historia de la comedia del
arte, entonces se obtuvo que Il doctore era tan solo la representación arquetípica de aquél
hombre pedante, con un marcado poder intelectual pues a pesar de haber estudiado por
muchísimos años en la universidad de Bolonia, de donde es originario, sale a flote su descaro
plasmado en la incoherencia de las palabras vacías, cuando se jacta de un extenso dialogo.
Particularmente tiende a confundir a las personas cuando se ve enfrentado en una situación a la
que no sabe responder, y esto lo hace citando frases en latín para de esa forma, salir bien librado
sin que la gente lo confronte.

Otra característica significativa del doctor es la avaricia y el egoísmo; es un hombre gordo con un
vientre prominente que le impide inclinarse con facilidad, además de limitarle su movilidad, esto
trae como consecuencia que su postura sea inclinada levemente hacia atrás, con una mano en la
cintura para apoyar el peso de su sobredimensionado cuerpo.

Posterior a la búsqueda de las características morfológicas del personaje, fue necesario realizar
propuestas de voz, que se realizaron en sesiones de clase, esto para darle peso a la personificación
del personaje. La voz del doctor, es un tanto gruesa pero sin llegar a ser grave, así mismo tiende a
ser pesada pero no rasgada, para dar la impresión de ser una persona vieja pero que aun se
sostiene y además es gordo.

El proceso de caracterización parte de las prácticas de dialogo, donde el personaje de doctor, se

siente cómodamente alegre por el casi confirmado casamiento de su hijo Silvio y Clarissa, la hija
de Pantaleón, puesto que, por ese suceso se vería favorecido económicamente. Entonces por
medio de la dirección de la docente a cargo, surgen los movimientos dentro de escena y
claramente su intensión, como también la guía en cuanto a las expresiones y la respuesta al
contexto en el que se encuentra el personaje. Es preciso mencionar las recomendaciones asertivas
sobre el posicionamiento en la escena, como por ejemplo no darle la espalda al público, equilibrar
la escena de manera que no se posicione de un solo lado sino que toda la acción sea centrada.
Con el paso de las sesiones y los ensayos, poco a poco se fue dando forma al personaje del doctor,
correcciones como el cuerpo estático dentro de una acción, sugería una acción para responder al
entorno de la escena, así mismo proponer una postura dependiendo de la evolución del dialogo de
los demás personajes, como también caminar dentro del espacio para buscar el mejor lugar y así
estar al tanto de todo lo que sucede, pues estaba en juego su futuro económico. Siempre debía
estar atento a lo que decía su amigo Pantalone, pues él era quien poseía el poder económico en la
trama de la historia; en cuanto tuviera la oportunidad el doctor se alababa de ser una persona
instruida y honorable, eso aumentaba cada vez más su ego de hombre fanfarrón, de creer saber
mucho pero al final no saber ni decir nada relevante y coherente.

Otros de los consejos dictados por la docente fue evitar la obstrucción de la vista del público con
dirección a otro personaje, como solución, acertó en manifestar que podría haber un
posicionamiento escalonado para que aunque se estuviera a diferentes distancias pudieran ser
observados cada unos de los personajes en escena, también se refirió a que se debía impregnar las
acciones típicas del personaje con cierto aire de comicidad, o sea exagerar las acciones para que
de esa forma pudiera notarse lo ridículo y sarcástico de las cualidades del típico personaje
sabiondo.