Acompañante Terapéutico

Origen. El acompañamiento terapéutico (A.T.)2 es un recurso que surge a mediados de la

década de los ‘60 en Argentina, si bien algunos autores mencionan antecedentes de este rol
en algunos países europeos a principios del siglo XX.
El acompañante terapéutico es un agente de salud que se ubica en lo cotidiano, lo vincular,
lo subjetivo, lo social, y apunta a contener empáticamente al paciente y a su contexto
familiar. La esencia del Acompañamiento Terapéutico está en el acto de acompañar.
En un sentido coloquial acompañar es "estar con otro”*, este trabajo no significa una mera
compañía sino una labor con objetivos definidos a corto y largo plazo.
El valor del acompañamiento radica justamente en el denominador “Terapéutico”,
"acompañar terapéuticamente”, en sí es un acto terapéutico, entendiéndose por tal: el que
“cura”, cuida, alivia y minimiza las molestias derivadas de una enfermedad desde un marco
teórico y referencial que fundamenta ese accionar terapéutico, y posee una operatoria
direccionada.
La tarea permite acercar a los profesionales intervinientes datos clínicos o de relevancia, a
través de la escucha, la contención, el apoyo y de comprensión psicológica de los procesos
del acontecer cotidiano del sujeto de la atención.
El Acompañante Terapéutico dispondrá de información ampliada, sobre los vínculos que
mantiene con los miembros de la familia, el tipo de personas con las que prefiere
relacionarse, las emociones que lo dominan. Registrará también conductas llamativas de la
vida diaria en relación a la alimentación, el sueño, higiene personal, etc., todo
ello contribuirá a una mejor evaluación de las alternativas a la hora de trazar una estrategia
clínica por parte del equipo.
Es básicamente sostenimiento emocional en pos del bienestar del paciente y su familia,
respetando la singularidad de cada paciente y su entorno.
Responde a un dispositivo alternativo nuevo que trabaja con patologías complejas que hasta
el momento los métodos tradicionales no podían cubrir.
Supone la facilitación de la inclusión social de las personas que padecen un malestar psíquico,
físico, situaciones sociales, educativas. Busca permitir que el paciente continúe o retome sus
actividades. Se transforma, entonces, en un servicio de apoyo sanitario y social, desde una
perspectiva integradora y preventivo de la salud.

* El término acompañar deriva del vocablo latino Cumpanis, el cual designaba a los compañeros que
se reunían para elaborar una materia prima, el pan. La inclusión del prefijo “a” a la palabra compañero
provoca algunos cambios: introduce una asimetría en el vínculo y marca una dirección, el acompañante
es quien camina junto a otro, es una presencia comprometida (Saurí F 1997).

Rol

El Acompañante Terapéutico (AT) es un colaborador de la salud, que integra equipos

interdisciplinarios, brinda una atención personalizada a personas con el objetivo de mejorar
su calidad de vida y autonomía, fortaleciendo sus aspectos resilientes,
El A.T. cuenta con conocimientos que le permiten desempeñar un rol centrado en el
apoyo y sostén frente a las dolencias de su asistido. Implica estar al servicio del paciente
y su familia y ofrece una presencia terapéutica en lo cotidiano de las actividades de quien
padece.
El rol del acompañante terapéutico se asocia a la tarea de proveer “una adaptación
ambiental” al mundo del acompañado que de soporte y apoyo, y abra posibilidades al
crecimiento de la persona y su entorno. Es el sostén del paciente mientras desarrolla su
tratamiento.
La labor del A.T. se adapta a las características, necesidades y situación de cada paciente. Es
un recurso asistencial que ofrece a os pacientes una alternativa estratégica de abordaje y es
una intervención para mejorar su condición y adquirir toda la autonomía posible. Enfatiza su
acción desde la ética del cuidado que implica el cuidado de sí mismo y del otro, respetando
la libertad propia y la del otro.

Trabajo en Grupo

El Acompañante Terapéutico (AT) es un colaborador de la salud, que integra equipos

interdisciplinarios, desempeña en su labor coparticipando con profesionales de: psiquiatría,
psicología, terapia ocupacional., asistencia social, etc. Está bajo la supervisión y coordinación
de los profesionales tratantes del paciente, además de no menos importante es la
psicoterapia personal y la supervisión de su trabajo. Los acompañantes trabajan enmarcados
por un encuadre de trabajo, este va a variar dependiendo de la línea teórica en la cual se
enmarque el equipo que está coordinando el caso.
Comienza como una necesidad del terapeuta. Se destaca el abordaje interdisciplinario de
pacientes y la construcción de un lenguaje común. Abarca los campos de la psicología, lo
biológico, lo social, laboral, educativo, lo comunitario, lo político y los valores socioculturales.
El trabajo se realiza en tres niveles: individual, familiar, comunitario y permite completar el
carácter holístico de la intervención.
Las reuniones de equipo frecuentes y periódicas sostienen el acompañamiento como parte
integral del tratamiento. Es tarea de los acompañantes la elaboración de informes a partir
de los cuales el equipo pueda obtener la información necesaria para tomar decisiones sobre
el devenir del tratamiento.

Funciones

1. Empatía. Ponerse en el lugar del otro.

2. Contención a través de un vínculo humano que posibilita que el sujeto no sea segregado
de la trama social y relacional a la que pertenece. Contener es la primera función del A.T.

3. Motivar la continuidad de los tratamientos, acompañando los vaivenes emocionales del

paciente en relación al mismo

4. Paciencia. Tolerancia. Respetar el ritmo que la persona marca en su proceso.

5. Capacitar para el autoaprendizaje.
6. Favorecer el intercambio con el medio social, funcionando como un semejante con quien
compartir actividades recreativas, laborales y/o educativas, ofreciendo presencias en los
lugares donde el acompañado desarrolla sus actividades.
7. Ofrecer un espacio de diálogo donde lo subjetivo se pueda expresar a través de la
palabra, acompañando con una escucha empática. Inducir al dialogo
8. Observar.
9. Acompañar al paciente y a su familia en sus cuadros afectivos, mediando en posibles
situaciones de conflicto, apuntando a generar convergencia.
10. Promover calidad y estilo de vida, reduciendo factores de riesgo y potenciando factores
protectores.
11. Fomentar la capacidad creativa del paciente, favoreciendo una adaptación activa y
aportándole una vía de expresión.
12. Favorecer el desarrollo de las potencialidades sanas del paciente, potenciando las
posibilidades y capacidades del sujeto y apoyando en lo anímico y lo concreto la realización
de actividades.
13. Cooperar con la construcción de un vínculo cotidiano.
14. Facilitar las condiciones que le permitan el diseño de hábitos sanos.
15. Limitar en situaciones interpersonales en donde el paciente pueda resultar perjudicado.
16. Precaución no alarmante. Flexibilidad para hacer frente a imprevistos.
17. Intentar entenderlos.
18. No compadecerse de ellos. Abstenerse de emitir juicios de valor.
19. Aportar una mirada amplia del mundo objetivo del paciente, vínculos familiares, personas
con las que prefiere relacionarse, emociones que lo dominan.
20. Registrar conductas llamativas, alimentarias, sueño, higiene personal, etc.

Competencias

Con el devenir del tiempo el campo de abordaje del AT se fue ampliando a diversas patologías
y diferentes contextos.

El trabajo en el área de la salud mental, psicosis, las adicciones, los trastornos borderline,
momentos de desorganización y crisis en pacientes neuróticos, duelos patológicos, etc.

La discapacidad, tanto la discapacidad mental, los trastornos severos del desarrollo como la
discapacidad física y la discapacidad física adquirida

Los trastornos neurológicos y las demencias, demencias en general, el mal de Alzheimer y

una amplia variedad de trastornos diagnosticados y tratados desde la neurología

Pacientes con enfermedades orgánicas crónicas, de cuidados paliativos con pacientes

terminales, etc.
El ámbito judicial acompaña a familias que, por diversos motivos, se encuentran bajo
regímenes de visitas controlados dispuestos por Tribunales de Familia.

El acompañamiento en el ámbito educativo, sostener la escolaridad, anticipando,

conteniendo, planificando, problemáticas de socialización, o conductuales, trastornos de
conflictiva psíquica que interfirieren en el proceso educativo, el jardín de infantes, nivel pre-
escolar, primario, y con menor frecuencia en el nivel medio y terciario. Actualmente
encontramos muchos acompañantes trabajando en escuelas públicas y privadas, de
escolaridad normal y en escuelas especiales.

Etapas de la vida del sujeto, el Acompañamiento al vínculo temprano, de la madre y el bebé,

por diversas razones (psicosis puerperales, psicosis en general, situaciones traumáticas
simultáneas al embarazo, el parto o el puerperio); niños, adolescentes, adultos, tercera edad.

Indicaciones

El acompañamiento terapéutico es un recurso que puede ser utilizado en los tres niveles de
abordajes, en la prevención, el tratamiento y la rehabilitación en el campo de la salud mental.

 Etapa diagnostica
 Situaciones de crisis
 Procesos de externación
 oncológicos, con dificultades motrices, la rehabilitación e integración social de
pacientes con adicciones; terminales.
 Gerontológicos.
 en tratamientos psicoterapéuticos.
 con discapacidades mentales.
 con trastornos de alimentación.
 con problemáticas neurológicas.
 vínculo temprano de la madre y el bebé.

Modalidades El acompañamiento adopta diferentes modalidades de acuerdo a los

contextos en los que interviene:

Institucionales: pueden ser individuales o grupales. El A.T. se inserta en una institución acorde
a una estrategia de un equipo, como es el caso de las escuelas, hospitales, psiquiátricos,
geriátricos, hospitales de día, etc. Instituciones de salud; Instituciones en abordaje de la
discapacidad; Instituciones geriátricas; Instituciones de salud mental; Instituciones
educativas; Instituciones del área de desarrollo social.

Acompañamientos Ambulatorios: en este caso el acompañamiento se desarrolla fuera de la

institución.
Internaciones domiciliarias: en caso de ser necesario se cubren todas las horas del día con
un grupo rotativo de acompañantes.

Abordajes familiares: El dispositivo de A.T. en lo cotidiano permite el abordaje de toda la

familia en caso que la indicación así lo indique.

Asistencia Domiciliaria.

Asistencia en áreas ambulatorias y/o extra institucionales:

Área Laboral.

Áreas comunitarias y sociales.

Áreas recreativas.