Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
ÍNDICE
REFERENCIAS ..................................................................................................................................... 3
PLANIFICACIÓN ................................................................................................................................... 4
REFERENCIAS
Actividad en el foro.
Actividad grupal.
Actividad individual.
Atención.
Audio.
Bibliografía.
Glosario.
Sugerencia.
Video.
4
PLANIFICACIÓN
AÑO LECTIVO
2014
EQUIPO DOCENTE
PROFESOR
FUNDAMENTACIÓN
La mediación es una herramienta. Así como un martillo es útil para clavar clavos pero no para cortar
madera, la mediación es útil para resolver algunos conflictos y disputas, pero no para todos. Podría-
mos definirla como la situación donde dos o más partes interdependientes reconocen divergencias en
sus intereses y deciden intentar un acuerdo, por medio de la mediación.
La mediación es un proceso mediante el que un tercero, experto y neutral, asiste a dos o más perso-
nas a buscar soluciones negociadas a su conflicto. Basa su fundamento en la voluntad de las partes
a dialogar por muy distantes que sean sus respectivas posturas.
Las personas que desean acudir a la mediación deben hacerlo de modo abierto y dispuesto al diálogo
como paso previo imprescindible para alcanzar soluciones mutuamente satisfactorias. La mediación
pretende, en definitiva, plantear aspectos comunes sobre los que pueden construirse un acuerdo que
satisfaga a ambas partes.
5
Desde su imparcialidad y experiencia profesional, el mediador ayuda a las personas que acuden a la
mediación escolar pero para ello hay previamente que conocer cuestiones acerca de la naturaleza del
conflicto y las actitudes que su presencia dispara en los lugares donde se instala.
Los conflictos son situaciones en las que la persona, consigo misma o con otras, entra en oposición o
desacuerdo por que sus posiciones, sus intereses, sus necesidades o valores son incompatibles o
percibidos como tal, donde juegan un papel importante los sentimientos y las emociones.
CONTENIDOS
CONTENIDOS CONCEPTUALES
Unidad I
Unidad II
Respuestas comunes ante los conflictos escolares. RAC. Mediación. Arbitraje. Negociación. Estilos
de Resolución de conflictos. Negociación competitiva. Negociación Integrativa. Método Basado en
principios. Postulados de la negociación basada en principios. Educar en y para el conflicto en las
instituciones.
Unidad III
Unidad IV
CONTENIDOS PROCEDIMENTALES
CONTENIDOS ACTITUDINALES
METODOLOGÍA
EVALUACIÓN
CRITERIOS:
Para la regularización de la materia, los alumnos deberán cumplir con los siguientes requisitos:
- 80% de participación en los foros y actividades de la plataforma. 100% de los trabajos prácticos
aprobados o sus recuperatorios.
- Se contemplará un criterio de evaluación de proceso.
- NO HAY PROMOCION.
Los alumnos que no cursaron la materia o que no regularizaron. Realizara una investigación de ca m-
po con lineamientos dados por el docente oportunamente.
BIBLIOGRAFÍA
BIBLIOGRAFÍA BÁSICA
LUGAR Y AÑO
AUTOR TITULO EDITORIAL
DE EDICIÓN
ACLAND, Andrew Como utilizar la mediación para Paidós Barcelona, 1993.
resolver conflictos en las organiza-
ciones
ALCALDE, La mediación en la escuela Homo Sapiens Bs. As., 1998.
Rabean gvala
7
BIBLIOGRAFÍA COMPLEMENTARIA
LUGAR Y ANO
AUTOR TITULO EDITORIAL
DE EDICIÓN
FOLGER y JONES Mediación. Resolución de conflic- Lumisa México, 1992.
tos
HICKS, D. Educar para la paz Morata Madrid, 1993.
MELERO, J. M. Conflictividad y violencia en cen- Siglo XXI Madrid, 1993.
tros educativos
PORRO, Bárbara La resolución de conflicto de aula Paidós Ecuador, 1994.
CONSULTAS
UNIDAD I: EL CONFLICTO
La Real Academia define el conflicto:
Hoy, sin embargo, consideramos que el conflicto en un rasgo inevitable de las rela-
ciones sociales. El problema estriba en que todo conflicto se puede adoptar un cur-
so constructivo o destructivo y por lo tanto, la cuestión no es tanto eliminar o preve-
nir el conflicto sino saber asumir dichas situaciones conflictivas y enfrentarnos a
ellas, con los recursos suficientes para que todos los implicados en dichas situacio-
nes, salgamos enriquecidos. Como diría Morton Deutsch, uno de los pioneros en el
campo, el conflicto es como el sexo, un aspecto importante y permanente de la vida
que debería ser disfrutado y que ocurre con un razonable grado de frecuencia. Co-
mo el sexo, siguiendo con la analogía, evoca ansiedad que puede llevar a la repre-
sión, evitación del conflicto, a una resolución prematura, o, por el contrario, a una
gratificación plena y compartida que colabora en la adaptación y desarrollo equili-
brado del individuo.
- Morton Deutsch (Deutsch, 1973) entiende que: “un conflicto existe cuando ocurren
actividades incompatibles. Una actividad incompatible impide o interfiere con la
ocurrencia o efectividad de una segunda actividad. Esta actividades pueden tener
su origen en una persona, entre dos o más personas, o entre dos o más grupos”.
9
- Boulding (1982) define el conflicto como “una forma de conducta competitiva entre
personas grupos. Ocurre cuando dos o más personas compiten sobre objetivos
percibidos como incompatibles o realmente incompatibles, o sobre recursos limi-
tados”.
Según la formulación clásica de Max Weber, una relación social está en conflicto
cuando un actor realiza su voluntad contra la resistencia de otra parte. Para Coser
(1972), un conflicto es una lucha sobre valores, estatus, poder y recursos “en el
cual la intención de los oponentes es neutralizar, herir, o eliminar a sus rivales”. Tal
y como indican estas definiciones y muchas similares que podríamos citar, la cos-
mología social dominante sobre el conflicto, lo entiende como “algo” que ocurre
cuando dos o mas partes compiten entre ellas para asegurarse un resultado que es
mutuamente excluyente. Además, tal como nos sugieren las definiciones de Weber
y Coser, hay una clara tendencia a percibir el conflicto como algo destructivo.
A pesar de que esta concepción dominante del conflicto impregna toda la cultura
occidental, hay cada vez más ejemplos, dentro de la más reciente investigación
sobre el tema, que nos aporta conocimientos complementarios muy importantes. En
particular, nos interesan los realizados por el trabajo de John Burton (relaciones
internacionales), Johan Galtung (investigación sobre la paz), y distintos enfoques
dentro de la psicología.
Burton no se ocupa de los conflictos cotidianos, sino de aquellos por los que los Enfoque que
seres humanos están dispuestos a morir y matar, pues estos afectan a los valores profundiza en
fundamentales. Así distingue entre “Conflict Settlement”, y “Conflict Resolution” que la naturaleza
seria el enfoque que profundiza en la naturaleza del conflicto y se ocupa de los que del conflicto y
se ocupa de los
afectan a los valores fundamentales. Burton opina que está creándose una nueva
que afectan
ciencia de resolución de conflictos que pone el énfasis en el análisis de las necesi- a los valores
dades humanas –que serían aquellas al desarrollo, la identidad y la seguridad- y de fundamentales.
los intereses de los implicados en el conflicto así como en su satisfacción. En línea
parecida a la de este autor Mitchell (1981), Bercovitch (1984) y Banks (1984).
Como resultado de su trabajo, Burton sugiere una definición mas precisa de las
palabras disputa y conflicto, así como una distinción entre “acuerdo” y “resolución”.
Además, añade una nueva dimensión al proceso de manejo del conflicto introdu-
ciendo el concepto de “prevención”.
De acuerdo con Burton una disputa es una situación en la que los asuntos de diver- Diferencias
gencia son negociables, el compromiso es posible, y no se considera necesario entre disputa y
alterar las instituciones y estructuras. Son rasgos normales y constructivos de la conflicto.
vida social. Por el contrario, el conflicto esta enraizado profundamente en las nece-
sidades humanas. Implica asuntos que no son negociables, necesidades humanas
sobre las cuales no se puede llegar a ningún compromiso. Resulta en comporta-
mientos que destruyen -o tienen el potencial de destrucción- a las personas, pro-
piedades y sistemas. El autor considera esta distinción entre disputa y conflicto co-
mo de vital importancia, aunque en ocasiones ambas se encuentran relacionadas,
como en los casos en los que las disputas son síntomas de conflictos subyacentes.
Según Burton se llega a una solución acordada; manejamos o suprimimos un con- El conflicto,
flicto a través de mecanismos tales como la negociación, la mediación, la concilia- solo es resuelto
ción o las reglas judiciales. En todas ellas, en las que alguna o todas las partes cuando
pierden algo, el resultado es consecuencia de la aplicación de algún tipo de norma el resultado final
satisface
social o legal. El conflicto, sin embrago, solo es resuelto cuando el resultado final completamente
satisface completamente las necesidades de todas las partes. Esto, con frecuencia, las necesidades
requiere importantes cambios políticos y una restructuración del entorno. Sin em- de todas las
bargo,, ha determinadas áreas de conflicto -relacionadas con las drogas, violencia partes.
11
juvenil, terrorismo, sistema internacional, etc…- en las que puede que no haya reso-
lución en estas circunstancias, se debe dar la “prevención”.
Resumiendo:
De acuerdo con Johan Galtung (1969, 1980, 1988, 1989ª, 1989b) hay dos tipos
básico de conflictos:
- Los conflictos directos que ocurren “sobre valores claramente articulados entre
actores conscientes y planificadores de estrategias”;
- y conflictos estructurales que ocurren entre partes “sobre intereses empotrados en
la estructura social -partes que, en cierto sentido, incluso, pueden no saber lo que
está ocurriendo” (1989b, p.4).
- la emotiva y
- la cognitiva.
Estructura
Valores
Recursos
Datos
Relaciones
Situación
Comportamiento Actitudes
Coerción Cognitivo: Imágenes
Violencia Emotivo: Evaluación
Competición
Autodestrucción
Este último elemento de la resolución depende del tratamiento del conflicto. Hay
muchos modos de tratar el conflicto, tanto para resolverlo como para reprimirlo. Ese
tratamiento puede llevar a su resolución a través de trascenderlo (cambio en la si-
tuación o en su definición), del compromiso, la profundización (añadiendo más
asunto), el ensanchamiento (añadiendo más partes) o el abandono.
Resumiendo:
Sus enfoques, sin embargo, difieren en dos aspectos importantes. Galtung enfatiza
la complejidad de la formación del conflicto, en concreto, lo relacionado con sus
manifestaciones actitudinales y comportamentales. Finalmente, Burton confía en el
enfoque denominado “solución de problemas” (que no tratamos en esta ocasión)
para afrontar el conflicto; por su parte Galtung defiende la necesidad de que, en
muchas ocasiones, se use la lucha no violenta para solucionar los conflictos (Gal-
tung, 1980).
Aunque en los próximos apartados vamos a presentar con más detalle la perspecti-
va psicológica del conflicto, aquí comentaré algunas ideas que los psicólogos –al
margen de sus orientaciones y teorías particulares-, han aportado a la comprensión
general del conflicto, en esta línea relativa a las necesidades humanas, que veni-
mos comentando.
El interés por la identificación de las necesidades humanas como parte del intento
por entender la naturaleza humana, ha sido objetivo continuo de la psicología, a
través de su historia. Este objetivo ha sido especificado de distintas formas en la
literatura psicológica -p.e., “instintos”, “deseos”, “motivos”, “impulsos”, etc… -pero
sea cual sea su formulación, su importancia, según Otto Klinberg, es incuestiona-
ble, ya que el fracaso en la satisfacción de las necesidades humanas llevaría inevi-
tablemente, a la infelicidad y a la frustración como mínimo, a veces a la patología
física o mental, y en casos extremos, incluso, a la muerte” (citado en Burrowes,
1996, p.69).
De acuerdo con la mayoría de los psicólogos que estudian el conflicto, como por
ejemplo Herbert Kelman (1986), los factores psicológicos contribuyen a la perpe-
tuación y escalada de los conflictos, y no pueden ser separados de las condiciones
objetivas subyacentes. Así, un conflicto político puede ser solucionado a nivel políti-
co por medio de procesos políticos, pero la superación de las barrera psicológicas
presentes ofrece un nuevo terreno que llevará a una resolución estable.
Además, la mayor parte de la investigación psicológica sobre el conflicto, como ve- La distorsión
remos más adelante, resalta la importancia de la percepción en relación a estos perceptiva de
motivos. De hecho, la investigación sugiere que la distorsión perceptiva de la otra la otra parte es,
parte es, prácticamente, automática en las situaciones de conflicto. Las distorsiones prácticamente,
automática en
perceptivas pueden ocurrir por distintas razones. Jervis en su libro ya clásico, Per- las situaciones
ception and Misperception in International politics (1976), realizó una distinción fun- de conflicto.
14
1.- Una ilusión de invulnerabilidad compartida por la mayor parte de los miembros,
lo cual crea un excesivo optimismo que lleva a tomar riesgos excesivos.
2.- Creencia incuestionable en la moralidad inherente al grupo, lo que lleva a que
sus miembros ignoren las consecuencias éticas o morales de sus decisiones.
3.- Esfuerzos colectivos de racionalización encaminados a descartar las adverten-
cias que podrían llevar a los miembros a reconsiderar sus supuestos antes de
comprometerse en una decisión.
4.- Visiones estereotipadas de los rivales e imágenes del otro como demasiado
diabólico como para considerar intentos serios de negociar, o como demasiado
débiles o estúpidos como para poner en peligro los intentos arriesgados de de-
rrotarles.
5.- Autocensura de las desviaciones del consenso aparente del grupo, lo que refle-
ja la inclinación de cada individuo de minimizar ante sí mismo la importancia de
sus dudas y contrargumentos.
6.- Ilusión compartida de unanimidad en los juicios conforme al punto de vista ma-
yoritario (parcialmente resultado de la autocensura de las desviaciones, au-
mentado por el falso supuesto de que silencia significa consenso).
7.- Presión directa sobre los miembros que expresan sólidos argumentos contra
cualquier estereotipo, ilusión o compromiso del grupo, dejando claro que este
tipo de desacuerdos es contrario a lo que se espera de un miembro leal.
8.- Aparición de autoproclamados guardianes de la pureza de pensamiento –
miembros que protegen al grupo de la información adversa que pueda debilitar
la complacencia compartida sobre la efectividad y moralidad de sus decisiones.
Dadas todas estas distorsiones asociadas al conflicto, cabe preguntarse si hay al-
guna posibilidad de que sean corregidas. De acuerdo con White (1982) la empatía
es el gran corrector de muchas distorsiones. A diferencia de la simpatía no implica
afecto o aprobación, sino que supone una comprensión realista de los pensamien-
tos y sentimientos de los otros. Sin embargo, tal y como puntualiza Jarvis (1976),
dada la dificultad de percibir adecuadamente la perspectiva del otro, es necesario
empatizar con una variedad de puntos de vista. Además, puntualiza que hay distin-
tas formas de minimizar las distorsiones, por ejemplo, haciendo los valores y creen-
cias más explícitos, exponiendo las suposiciones implícitas a mayor escrutinio, po-
15
Además, Kelman (1986) argumenta que el análisis psicológico indica que la interac- Los factores
ción directa entre las partes en conflicto lleva a cambios en las actitudes y percep- psicológicos
ciones, lo que facilita cambios a otros niveles. Según su punto de vista, los factores interactúan con
psicológicos interactúan con los sociales y políticos, y deben ser integrados si que- los sociales y
políticos, y deben
remos una teoría comprensiva del conflicto y su resolución. Consecuentemente, ser integrados
Deutsch (1986), señala que si se quieren crear las condiciones para un proceso si queremos
constructivo de resolución, se debería introducir en el conflicto los elementos típicos una teoría
de un procesos cooperativo, estos incluyen la buena comunicación, compartir la comprensiva del
información, la confianza y el respeto mutuo, percepción de las semejanzas en va- conflicto y su
resolución.
lores y creencias, aceptación de la legitimidad del otro, y un proceso centrado en el
problema.
De acuerdo con distintos autores (por ejemplo, Rubin y Pruitt, 1986, Rubin, Pruitt y
Kim, 1994) hay cinco estrategias de afrontamiento del conflicto (veremos luego con
más detalle): pasividad, abandono, confrontación, cesión, y solución de problemas.
Está claro que es bastante improbable que la pasividad, el abandono y la cesión,
puedan llevar a la resolución de los conflictos; la evidencia indica que la confronta-
ción –estrategia basada en “dureza”, “enfrentamiento”, “competición”, “negociación
posicional”, no es la mejor, ya que, aunque parezca ser efectiva, en raras ocasiones
lleva a un resultado estable, ya que no se dirige a todos los problemas que están en
juego.
El conflicto es ubicuo, está por todas partes, un modo de clasificarlo es por niveles;
habitualmente se distinguen cuatro niveles (Lewicki, Litterer, Minton y Saunders,
1994):
De Procedimiento Psicológico
Substancial
Triángulo de satisfacción
17
PERSONAS
PROCESO PROBLEMA
Las personas
Este elemento de la estructura del conflicto incluye tanto a las personas implicadas
en el conflicto, (¿quién está involucrado?), como a los efectos psicológicos tales
como los sentimientos, emociones, autoestima, percepciones individuales, y con-
ceptualización del problema y personas, por parte de los implicados en el conflicto.
En segundo lugar, debemos dirigir nuestra mirada hacia los aspectos más estricta-
mente psicológicos. Debemos tener en cuenta que cada persona involucrada en un
conflicto tiene valores, intereses, necesidades, y una perspectiva sobre el problema
que motivan y encauzan sus acciones. Además, su perspectiva se forma de acuer-
do a como le afectó lo sucedido; cuando se explica la propia perspectiva, siempre
se mezclan los sentimientos con los hechos.
Proceso
B.- La comunicación.
1.- ¿De qué manera se comunican?
2.- ¿Quién habla a quién, cuándo, cuánto y por qué?
3.- ¿Existen alteraciones entorno a la comunicación (estereotipos, mala infor-
mación, rumores, etc…)
4.- ¿De qué manera podría mejorarse la comunicación?
El problema
Hace referencia a las diferencias y asuntos que enfrentan a las personas. Los pro-
blemas pueden ser de distinto tipo, tal y como hemos visto en el círculo del conflicto
-diferentes valores, diferentes puntos de vista sobre como tomar las decisiones,
incompatibilidad de necesidades o intereses, diferencias en torno al uso y distribu-
ción de recursos limitados (tierra, dinero, tiempo), etc… Frecuentemente, nos refe-
rimos a este aspecto como las raíces “reales” que causan el conflicto, con respecto
a las cuales la gente tiende a desarrollar posiciones a las que se apega.
cionar el problema, los intereses son los beneficios potenciales por alcanzar un ob-
jetivo particular, es decir, el por qué cada uno de los asuntos importa a las perso-
nas, las necesidades son lo indispensable, lo mínimo necesario para satisfacer a
una persona en cuanto a los sustantivo, lo psicológico, y al proceso seguido para
resolver el problema, las posiciones hacen referencia a los comportamientos y acti-
tudes concretas adoptados para resolver el conflicto.
C.- Análisis de los recursos existentes que puedan regular las diferencias esencia-
les:
1.- ¿Qué factores limitan las acciones y posturas extremistas de cada uno?
2.- ¿Quiénes son las personas que pueden jugar un papel constructivo?
3.- ¿Cuáles son los objetivos alcanzables que todos pueden aceptar?
4.- ¿Cuáles son los intereses y necesidades que tienen en común o los que
no son mutuamente exclusivos y opuestos?
5.- ¿Qué propuestas están dispuestos a hacer?
1.- Clarificar las áreas de interés y los problemas específicos, separando las per-
sonas de los problemas.
2.- Descubrir las necesidades e intereses básicos subyacentes a los problemas.
3.- Identificar los principios y valores comunes
Resumiendo:
Supongamos que todas las cartas de la figura 1.6., tienen un número por un lado y
una letra por el otro, y alguien te dice: “Si una carta tiene una vocal por un lado,
entonces tiene un número par por el otro”, ¿Qué carta deberías dar la vuelta para
comprobar si es cierta dicha afirmación? (Plous, 1993).
23
E K
4 7
Como es obvio, una vez que el conflicto estalla, estos tres tipos de selección per-
ceptiva -evaluación selectiva del comportamiento, búsqueda de la evidencia confir-
matoria y distorsión atribucional- harán que el conflicto escale con facilidad y es
difícil una marcha atrás.
rentemente, los profesores prestaron más atención y reforzaron más a estos estu-
diantes que a los demás, lo cual llevo a una mejoría significativa.
Sin embargo, hay otra variante del mecanismo en la que la profecía se cumple por-
que la otra parte no hace nada para contradecir las expectativas de uno. En esta
variante, las concepciones previas de una parte son confirmadas por la ausencia
del comportamiento del otro. Imaginemos la siguiente situación: te encuentras en
una fiesta cuando súbitamente observas a una persona que parece reservada y se
encuentra sentada aparte del resto de la gente. Tu hipótesis es que es persona es
poco amistosa, arrogante, y engreída. La verdad es que es muy tímida, pero tú no
lo sabes. No le diriges la palabra y ella tampoco te la dirige a ti. Cuando termina la
velada estás convencido de que es un auténtico engreído. Esta es quizás, la forma
más perniciosa de la profecía autocumplida fuera del proceso. Hay muchos ejem-
plos de este tipo de profecías autocumplidas tanto en las relaciones interpersonales
como en las internacionales.
c.- Entrampamiento
Con el objeto de entender mejor la dinámica del apego a los compromisos y del
entrampamiento en cursos de acción ¡cada vez más intensos!, consideramos dos
fenómenos muy conocidos en la literatura de toma de decisiones: el juego de la
subasta del dólar y el efecto del coste invertido.
El juego de la subasta del dólar, fue presentado por primera vez por un profesor de
la Universidad de Yale Martin Shubik (1971), e investigado en profundidad por Allan
Tejer (1980). En una de sus posibles formulaciones dice de la manera siguiente:
Imagínate que estás en una habitación con treinta personas. Alguien en la tarima de
la clase toma un billete de 2000 pts de su bolsillo y dice lo siguiente: “voy a subastar
un billete de 2000 pts, cada uno de ustedes es muy libre de participar en la subasta
o simplemente mirar. Pueden realizar todas las ofertas que queráis en múltiplos de
100pts., hasta que nadie más ofrezca, en cuyo momento la persona que haya ofre-
cido más alto, pagará el precio de la puja y se llevará las 2000pts. La única diferen-
cia entre esta subasta que les propongo y una tradicional, es que la segunda puja
mas alta, deberá pagar también el precio de su puja, pero al contrario del primero,
no conseguirá nada a cambio. Por ejemplo, si tapujas por 500 pts. y otro compañe-
ro por 600 pts., y la subasta se interrumpe, yo pagaré a tu compañero 1400 pts
(2000pts menos el precio de la puja), y tu como segundo pujador mas alto pagarías
las 500 pts, sin obtener nada a cambio.
Los especialistas han jugado este juego miles de veces, tanto en seminarios, sesio-
nes de entrenamiento, como en el ámbito universitario, pero el patrón es, más o
menos, siempre el mismo. La subasta empieza muy rápidamente subiendo el precio
de la puja casi inmediatamente entre 1200 y 1600 pts. en este momento, todos me-
nos los dos pujadores mas altos, abandonan la subasta. En este momento, los dos
últimos participantes de la subasta sienten que están atrapados. Si uno ha ofrecido
1600 pts, y el otro 1700, el pujador de 1600 se encuentra ante una disyuntiva. Pue-
de subir la puja a 1800 o aceptar una perdida de 1600. En general, seguir pujando
con la esperanza de que el otro abandone, parece más atractivo que una pérdida
segura de 1600. Cuando las pujas son de 1900 y 2000 pts., la lógica de ofrecer
2100 es muy similar a las de las decisiones previa, podemos aceptar una pérdida
de 1900, o seguir esperando reducir pérdidas. Por supuesto, cuando la barrera su-
pera los 2000 pts, el resto de compañeros comienzan a reírse y hacer comentarios
jocosos. Obviamente, lo pujadores están actuando irracionalmente.
Este juego, que a veces no lo es tanto, puesto que produce tensión, escalando, en
ocasiones las pujas a límites que fríamente pueden resultar insospechados -no es
raro encontrar pujas de 25000 y 30000 pts, por un billete de 2000 pts., tiene cuatro
reglas sencillas, que mencionamos por si algún lector escéptico quiere probar el
juego con un grupo de amigos:
La situación puesta en manifiesto por el juego de la subasta del dólar, ilustra lo que
denominamos escala irracional del conflicto, que se produce cuando continuamos
con los cursos de acción previamente seleccionados, mucho más allá de lo que un
análisis irracional recomendaría. En estas situaciones, deberíamos reconocer que
nuestra inversión de dinero, tiempo, o cualquier otro recurso, es algo perdido, y que
no debe afectar a las decisiones que adoptemos sobre nuestro comportamiento
futuro. Nuestro punto de referencia debe ser el presente, debemos considerar nues-
tras alternativas evaluando sólo los costes y beneficios relacionados con el futuro.
2.- Estancamiento
Rubin, Pruitt y Kim (1994) consideran que hay, fundamentalmente, cuatro razones
que pueden producir el estancamiento del conflicto: el fracaso de las tácticas com-
petitivas, el agotamiento de los recursos necesarios, la pérdida de apoyo social, y la
inaceptabilidad de los costos.
26
En el pasado, hemos podido utilizar tácticas competitivas con relativo éxito, pero
llegado un momento, estas tácticas pierden se efectividad. Esto puede ocurrir o
bien porque hemos abusado tanto de las amenazas y chantajes, que finalmente
dejan de ser creíbles, o bien por que el otro a lo largo del tiempo, ha aprendido a
anticipar nuestras tácticas y neutralizarlas antes de que consigamos obtener el ob-
jetivo propuesto.
3.- La desescalada
Por otra parte, se han dado cuenta de que existe una interdependencia con el otro,
y que necesitan de él para avanzar en la solución del problema. Estamos en un
punto muerto en el que ninguna de las partes puede avanzar. Todos son conscien-
tes de que se debe empezar a solucionar el problema, de que dependemos del otro
y de que ambos estamos en la misma situación. Por otra parte, temen que si se
mueven demasiado enérgicamente en la dirección del acuerdo, pueden perder ima-
gen y parecer débiles. Todo sería más fácil si el otro empezara también a moverse
en la misma dirección. Hay una serie de estrategias que tanto una parte, las dos, o
la intervención de una tercera, pueden poner en marcha para facilitar este desblo-
queo.
27
En cualquier caso, para desescalar los conflictos hay que trabajar las habilidades
de comunicación -la escucha activa, leer entre líneas, entender no sólo lo que se
dice, sino lo que se quiere decir, emisión de mensajes claros, sin ambigüedad, etc.
Cuando se da este caso, uno puede hacer concesiones unilaterales, que no requie-
ren la aprobación del otro, con el objetivo de mostrarle que ha llegado el momento
de cooperar y comunicarse. Osgood (1962, 1966), diseñó una estrategia de iniciati-
28
vas conciliatorias que puede ser usada en este .Este procedimiento debe seguir
unas reglas sumarizadas por Lindskold
1.- Las iniciativas de las partes deben ser anunciadas con antelación, en un es-
fuerzo por reducir la tensión.
2.- Cada iniciativa debe ser explicada como parte de esta serie.
3.- Se debe observar el plan anunciado.
4.- Se debe invitar al otro a ser recíproco en cada iniciativa.
5.- La serie de iniciativas debe continuar durante algún tiempo, incluso aunque no
sean contestadas recíprocamente por el otro.
6.- Las iniciativas deben ser claras y de fácil verificación.
7.- Las partes deben conservar cierta capacidad de desquite, por si el otro respon-
de siendo más competitivo.
8.- Las partes deben actuar desquitándose si el otro se vuelve más competitivo.
9.- Las iniciativas deben ser de distinto tipo, lo único en común será la naturaleza
cooperativa.
10.- Premiar al otro si coopera, el nivel del esfuerzo debe ir en consonancia con el
nivel de cooperación.
29
NEGOCIACIÓN
Para resumir, diremos que la palabra negociación la podemos vincular con los si-
guientes conceptos:
Proceso
+
Partes interesada
+
Conflictos de intereses entre las pares
+
Beneficios individuales y colectivos
+
Oportunidad para realizar concesiones
+
Acuerdo para realizar concesiones
+
Acuerdo de partes
No podríamos decir que esta pregunta es tan vieja como la que provine de lideraz-
go, pero encuentra los mismos matices en cuanto a su respuesta. Hubo mucha dis-
cusión acerca de si los líderes nacen o se hacen, y lo mismo cabe de los negocia-
dores.
31
Los negociadores nacen, pero también se hacen. Si bien existen ciertas condicio-
nes naturales, también existe la vocación, que proviene de la palabra latina vocare
que, significa “llamar”: es un llamado, es el deseo de emprender una carrera o una
profesión. De alguna manera, representa un predisposición natural, una forma de
expresar la personalidad frente a un trabajo, a un estudio o actividad; y los cristia-
nos la vinculan con el destino de la personas.
Por eso puede haber personas naturalmente adaptadas para negociar que no sien-
tan la vocación, y otras, que necesitan prepararse y capacitarse para ello.
Los aspectos internos están vinculados con nosotros, con nuestra creencia y
nuestras limitaciones mentales.
A.- GERENTE 1: Otra vez llegas tarde, tienes una tarjeta amarilla. ¿sabes con quién
estas hablando, no? Bueno. ¡la próxima es roja! Tómalo bien en cuenta, ¡si vuel-
ve a ocurrir voy a actuar con todo el peso de mi cargo y la vas a pasar mal!
B.- GERENTE 2: -Otra vez llegas tarde, te sugiero que corrijas esta costumbre, lo
digo por tu bien, eres un excelente profesional, ¿para qué manchar tu legajo
por algo así? Sabes que tengo una responsabilidad aquí y tengo que actuar en
consecuencia, no obstante ello quiero hablarte de colega a colega, te aseguro
que te irá mucho mejor si resuelves este punto. Ahora, por favor, recuerda lo
que te acabo de decir. Si puedo ayudarte con esto no tienes más que pedírme-
lo. Quiero darte una oportunidad y confiar en ti.
Fases de la negociación:
1.- PREPARACIÓN.
-Objetivos cooperativos.
-Objetivos individualistas.
-Objetivos defensivos.
Eleccion de la estrategia:
- Acomodar.
- Competir.
- Evitar.
- Colaborar.
- Comprometer.
2.- EXPLORACIÓN:
3.- INTERACCIÓN:
Punto de resistencia: límite a partir del cual una de las partes estaría dispuesta a
romper la negociación.
Objetivo: acuerdo final que cada una de las partes desea alcanzar y que estaría
situado a un margen de distancia del punto de resistencia.
ZOPA: Esta delimitada por los puntos de resistencia de cada una de las partes.
33
Si la oferta inicial está fuera de la zopa puede ser ofensivo y cerrar la negocia-
ción. A partir de la oferta inicial, el adversario responde con una contraoferta o
nos pide que modifiquemos lo que para él es inaceptable.
4.- CIERRE
¿Por qué?
Las personas:
Los intereses:
Las Opciones:
Los Criterios:
El primer punto responde al hecho de que los seres humanos no somos compu-
tadoras. Somos criaturas intensamente emotivas que tenemos con frecuencia,
percepciones radicalmente diferentes y a las que nos cuesta trabajo comunicar-
nos en forma clara. Por lo general, las emociones se entremezclan con los méri-
tos objetivos del problema. La toma de posiciones acentúa ese problema porque
los egos o parte consciente de las personas, se identifican con sus posiciones.
Por estos motivos, antes de empezar a trabajar sobre el problema de fondo, de-
be identificarse y solucionarse separadamente el "problema de las personas".
Cuando los intereses son directamente opuestos, el negociador puede ser capaz
de obtener un resultado favorable: sencillamente, siendo terco. Ese método tien-
de a premiar la intransigencia y a producir resultados arbitrarios. Sin embargo,
ese tipo de negociador puede enfrentarse, insistiendo en que lo que él diga, no
es suficiente y que el acuerdo debe reflejar algún criterio justo, independiente de
la sola voluntad de cada parte. Esto no significa que se deba insistir en que los
términos se basen en el criterio que usted seleccione, sino solamente que el re-
sultado se rija por algún criterio justo, tal como el valor en el mercado, la opinión
de un experto, la costumbre, o la ley. La discusión de estos criterios, más que lo
que las partes están dispuestas a hacer o no hacer, conducirá a que ninguna de
ellas tenga que ceder ante la otra; ambas pueden acoger una solución justa. De
ahí el cuarto punto básico: insista en criterios objetivos.
Los participantes son los Los participantes son Los participantes están so-
amigos. adversarios. lucionando un problema.
Sea suave con las perso- Sea duro con el problema Sea suave con las personas
nas y con el Problema. y con las personas. y duro con el problema.
Confíe en los otros. Desconfíe de los otros. Proceda independientemen-
te de la confianza.
Percepción:
Emoción:
Comunicación:
Es importante conocer a los otros, saber qué les gusta o que les disgusta para
establecer una relación de confianza en la que apoyarse.
Tanto los intereses compartidos como los intereses diferentes pero complemen-
tarios, pueden ser las bases de un acuerdo prudente.
Pregunte: “¿Por qué?” Una técnica básica es ponerse en el lugar del otro.
Pregunte: “¿Porqué no?” Piense sobre la opción del otro. Una de las maneras
más útiles de descubrir los intereses es identificar primero la decisión básica que
la otra parte probablemente cree que usted le está pidiendo, y después pregun-
tarse porqué no la han tomado. ¿Cuáles son los intereses que le impiden hacer-
lo? Si usted quiere que cambien de opinión, debe empezar por descubrir qué
opinión tienen en la actualidad.
estén escuchando el uno al otro. ¿Cómo se pueden discutir los intereses sin en-
cerrarse en posiciones rígidas?
Si usted quiere que la otra parte tenga en cuenta sus intereses, explíquele cuáles son. Haga que sus
intereses sean
Haga que sus intereses sean vivos. vivos.
Uno de los fines para hacer que la otra parte tenga en cuenta sus intereses, es Reconozca que
establecer la legitimidad de éstos. ¿Quiere que los otros no sientan que usted los los intereses de
está atacando personalmente, sino que se den cuenta que su problema requiere ellos son parte
atención? Necesita convencerlos de que ellos se sentirían lo mismo si estuvieran del problema.
en el lugar de usted. “¿Usted tiene hijos? Entonces que haría en mi lugar si…”
Cada uno de nosotros tiende a preocuparse tanto por sus propios intereses, que
presta poca atención a los intereses de los otros. Las personas escuchan con
más atención si sienten que usted las ha comprendido. Propenden a pensar que
aquellos que las comprenden son personas inteligentes y amables, cuyas opinio-
nes vale la pena escuchar.
Será mejor para sus intereses si habla sobre a donde le gustaría ir, que si habla
sobre de dónde viene. En lugar de discutir con la otra parte sobre el pasado –
sobre los costos del último semestre (que fueron demasiado altos), o el rendi-
miento de ayer (que fue inferior a lo esperado)- hable sobre lo que quiere que
suceda en el futuro. En lugar de pedirles que justifiquen lo que hicieron ayer,
pregúnteles, “¿Quién debe hacer tal cosa mañana?”.
Es mejor ser duro. Quizá lo mejor no sea comprometerse con su posición, pero
es necesario comprometerse con sus intereses. Aquí es donde debe emplear su
energía agresiva en una negociación. Dos negociadores que defienden enérgi-
camente sus intereses, con frecuencia se estimularán mutuamente para ser crea-
tivos en la búsqueda de soluciones mutuamente ventajosas.
Una tormenta de ideas tiene como objeto producir tantas ideas como sea posible
para solucionar el problema. No existe una única manera de realizar una tormen-
ta de ideas. Más bien, usted debe acomodarla a sus necesidades y recursos. Al
hacerlo, puede ser útil tener en cuenta las siguientes indicaciones.
41
1.- Acomode a los participantes uno al lado del otro y frente al problema: las
personas que se encuentran frente a frente tienden a responder personal-
mente y a entrar en un diálogo o discusión; las que se sientan una al lado de
la otra en un semicírculo de asientos, de frente a un tablero, tienden a res-
ponder al problema que se especifica allí,
2.- Aclare las reglas, incluyendo la regla de que no se critica,
3.- Suministren las ideas,
4.- Registre las ideas de manera que todos las vean.
Piense en la posibilidad de una tormenta de ideas con la otra parte. Es más difícil de
realizar por el riesgo de decir algo que perjudique sus intereses, a pesar de las re-
glas establecidas en la sesión de tormenta de ideas. Puede revelar información con-
fidencial sin darse cuenta o conducir a la otra parte, a creer que una opción que us-
ted inventó es un ofrecimiento. Sin embargo, tormentas de ideas conjuntas tienen la
gran ventaja de producir nuevas ideas que tienen en cuenta los intereses de todos
los asociados, de crear un clima de solución común de problemas, y de hacer que
cada una de las partes tome conciencia de las preocupaciones de la otra.
Una tormenta de ideas libera a las personas y les permite pensar creativamente.
Una vez liberadas, necesitan maneras para pensar sobre sus problemas y para
generar soluciones constructivas.
- Uno es pensar sobre el problema particular -la situación actual que no le gusta,
por ejemplo, el río contaminado que pasa por su terreno.
- El segundo tipo de pensamiento es el análisis descriptivo -usted hace el dia-
gnóstico de una situación existente en términos generales. Organiza los pro-
blemas en categorías y sugiere tentativamente algunas causas.
42
Identifique los intereses comunes. Es obvio que en teoría los intereses comunes
ayudan a llegar a un acuerdo. Por definición, la invención de una idea que tiene
en cuenta los intereses comunes es buena para usted y buena para ellos. En la
práctica, sin embargo, el asunto es menos claro. En la negociación sobre un pre-
cio, los intereses comunes pueden no ser ni obvios ni relevantes.
En casi todos los casos, su propia satisfacción depende en gran medida de lo-
grar que la otra parte quede lo suficientemente contenta como para querer cum-
plir un acuerdo.
Por lo general es más fácil, por ejemplo, abstenerse de hacer algo que no se
está haciendo, que detener algo que ya está en marcha. Y es más fácil suspen-
der algo que se está haciendo que iniciar algo enteramente nuevo. Si los em-
pleados quieren oír música en el trabajo, será más fácil para la empresa convenir
en que durante unas semanas no interferirá un programa experimental dirigido
por los empleados, que acordar en dirigir ese programa.
Cualquiera que sea el método de negociación que usted utilice, es mejor prepa-
rarlo con anticipación. Esto es cierto respecto a la negociación de principios, por
eso es conveniente identificar algunos criterios objetivos de antemano y pensar
cómo sería la aplicación en su caso.
- Criterios equitativos: hay más de un criterio objetivo disponible como base para
un acuerdo.
- Los criterios objetivos: deben no solo ser independientes de la voluntad, sino
también ser legítimos y prácticos. Debe ser aplicables, por lo menos en teoría, a
ambas partes. En esta forma, se puede utilizar la prueba de aplicación recípro-
ca para saber si el criterio propuesto es equitativo e independiente de la volun-
tad de ambas partes.
- Procedimientos equitativos: Para lograr un acuerdo que sea independiente de la
voluntad, se pueden usar, o criterios equitativos para juzgar el asunto de fondo,
o procedimientos equitativos para resolver los intereses en conflicto.
Una variación del procedimiento "el uno corta y el otro escoge", es que las partes
negocien lo que creen es un acuerdo equitativo antes de decidir qué papel va a
desempeñar, cada una en su cumplimiento. Por ejemplo, en un divorcio, antes de
decidir quién ha de recibir la custodia de los niños, los padres pueden acordar
cuáles serían los derechos de visita de uno de ellos. Esto ayuda a obtener dere-
chos de visita que ambos consideren equitativos.
La negociación según los méritos del caso tiene tres elementos básicos:
1.- Formule cada aspecto como una búsqueda común de criterios objetivos.
2.- Sea razonable, y escuche razones, respecto a los criterios que puedan ser
los más apropiados y respecto a la manera de aplicarlos.
3.- Nunca ceda ante la presión, solo ante los principios. Concéntrese en criterios
objetivos con firmeza pero también con flexibilidad.
1.- Formular cada aspecto como una búsqueda común de criterios objetivos
Si usted está negociando la compra de una casa, puede empezar diciendo: "Mi-
re, usted quiere que el precio sea alto y yo quiero que sea bajo. Tratemos de ver
cuál sería el precio justo. ¿Qué criterios objetivos serían los más relevantes?"
Usted y la otra parte pueden tener intereses conflictivos, pero ahora ambos tie-
nen una meta común: determinar cuál sería el precio justo.
Cada criterio propuesto por la otra parte se convierte en una palanca que más
tarde usted puede usar para persuadirlos.
Cuando cada parte está proponiendo un criterio diferente, busque una base obje-
tiva para decidirse, como qué criterio han utilizado antes las partes o cuál se utili-
za más comúnmente. Así como el problema mismo no debe solucionarse con
base en la voluntad, tampoco debe decidirse así el asunto del criterio que se uti-
lizará.
Si en verdad la otra parte no cede y no presenta una base persuasiva para afian-
zar su posición, entonces se acaba la negociación.
La razón para negociar es obtener algo mejor de lo que se obtendría sin nego-
ciar.
¿Cuáles son esos resultados? ¿Cuál es su MAAN: su mejor alternativa para ne-
gociar un acuerdo?
"Primero negociemos y veamos qué sucede. Si las cosas no salen bien, enton-
ces pensaré en algo". Pero para negociar con prudencia es absolutamente nece-
sario tener por lo menos una respuesta tentativa para esa pregunta. El que usted
llegue o no llegue a un acuerdo en una negociación, depende enteramente de lo
atractiva que sea la mejor alternativa.
Mientras mejor sea su MAAN, mayor será su poder. La gente cree que el poder
de la negociación está determinado por los recursos tales como la riqueza, las
46
Ejemplo:
Piense cómo se sentiría en la entrevista para un empleo sin otra oferta segura de
empleo, solo algunas sugerencias inciertas. Piense cómo sería la discusión so-
bre el salario. Compare eso con la manera como se sentiría si usted llegara a la
entrevista seguro de otras dos ofertas de empleo. ¿Cómo sería entonces la dis-
cusión sobre el salario? La diferencia es poder.
1.- inventar una lista de acciones que se podrían realizar en caso de no llegar a
un acuerdo;
2.- mejorar algunas de las ideas más prometedoras convertirlas en opciones
prácticas; y
3.- seleccionar, en forma tentativa, la mejor de estas opciones.
La segunda etapa es superar la mejor de las ideas y convertir las más promete-
doras en opciones reales.
Mientras más fuerte parezca ser la otra parte en cuanto a poder físico o económi-
co, la medida en que ellos tengan fuerza y usted cuente con sus principios, más le
conviene a usted que el papel preponderante lo desempeñen los principios.
Un buen MAAN puede ayudarle a negociar con base en los méritos. Usted puede
convertir sus propios recursos en poder efectivo en la negociación si encuentra y
mejora su MAAN. Utilice sus conocimientos, su tiempo, su dinero, las personas
47
El mediador ayuda a éstos en forma cooperativa para que se encuentre una solu-
ción al conflicto.
Ventajas de la Mediación
La Mediación preserva la relación entre las personas involucradas en la disputa. La
Mediación ayuda a la gente a resolver disputas en forma rápida y económica, en
comparación a los procesos judiciales en cuestiones de negocios, entre vecinos,
entre familiares, dentro de una comunidad o en disputas en el interior de organiza-
ciones. Ayuda a las partes a preservar su capacidad de auto-determinación, al invi-
tarlas a generar soluciones con las cuales puedan en el futuro manejarse mayor en
sus relaciones interpersonales.
Elementos de la Mediación
1.- Es una negociación asistida: en la Mediación, las partes actúan por sí mis-
mas; las partes actúan, negocian y proponen las soluciones.
2.- Es un acto voluntario: las partes deciden participar o no en el proceso de me-
diación y ponerle fin en cualquier momento y no están obligadas a llegar a un
acuerdo.
3.- Es un proceso que tiende al acuerdo y/o a la reparación.
4.- Se basa en el principio ganar/ganar (no tiende a la competencia).
5.- El mediador utiliza una estructura ya pautada y técnicas específicas para al-
canzar los objetivos.
6.- Está basada en el principio de confidencialidad: es decir que el mediador y
las partes no pueden revelar lo sucedido en las sesiones; salvo con la autoriza-
ción de las partes.
7.- La Mediación no está sujeta a reglas procesales: el procedimiento es absolu-
tamente informal y flexible.
8.- El acuerdo de Mediación parte de los propios interesados, protegiendo así los
intereses de ambos.
48
Fases de la mediacion
1.- Previa premediación: Fase previa a la mediación propiamente dicha, en ella
se crean las condiciones que facilitan el acceso a la mediación. En ella se
habla con las partes por separado, se explica el proceso a seguir y se solicita
su consentimiento para acudir a la mediación.
2.- Presentación y reglas del juego: Fase dedicada a crear confianza entre el
equipo de mediación y los mediados, también se presenta el proceso y las
normas a seguir en la mediación.
3.- Cuéntame: Fase en la que las personas que son mediadas exponen su versión
del conflicto con los sentimientos que le acompañan. Las partes han de ser es-
cuchadas.
4.- Aclarar el problema: Fase dedicada a identificar los nudos conflictivos, los pun-
tos de coincidencia y de divergencia del mismo. Se trata de establecer una plata-
forma común sobre los temas más importantes que han de ser solucionados.
5.- Proponer soluciones: Fase dedicada a la búsqueda creativa de soluciones y
a la evaluación de las mismas por las partes.
6.- Llegar a un acuerdo: Fase dedicada a definir con claridad los acuerdos. Estos
han de ser equilibrados, específicos, posibles. También se suele dedicar un
tiempo a consensuar algún procedimiento de revisión y seguimiento de los
mismos.
Habilidades en la mediación
Las principales habilidades para la mediación son:
- Escucha activa.
- Mostrar interés.
- Clarificar.
- Parafrasear.
- Reflejar.
- Resumir.
- Estructurar.
- Ponerse en lugar del otro.
- Mensajes en primera persona.
- Escucha activa
Distintos modos de realizar esta escucha activa son: mostrar interés, aclarar, para-
frasear, reflejar, resumir.
- Mostrar interés
Se refiere a las intervenciones realizadas por la persona que escucha estén enca-
minadas a establecer una relación de cordialidad.
- Clarificar
Hace referencia a las intervenciones realizadas por la persona que escucha y que
permite precisar qué se dijo o sucedió, cómo ocurrió (hechos, datos, etc.) y tam-
bién, ayudar a ver otros puntos de vista.
- Parafrasear
- Reflejar
Indagar sobre el o los sentimientos que han afectado a la persona que estamos
escuchando.
- Resumir
- Estructurar
Promover entre las dos partes del conflicto expresiones que demuestran a la perso-
na que está hablando que la estamos comprendiendo, haciendo que quien está
escuchando repita con sus propias palabras lo que la otra parte nos ha contado.
MEDIACIÓN ESCOLAR
Es última no por menos importante, sino por más compleja, ya que necesitaremos
de todos las habilidades previamente comentadas para poder intervenir como me-
diadores. Este es el modelo conocido como de peacemakers o pacificadores. Su
50
Este cambio generará otro clima en la escuela y una mejor actitud frente al aprendi-
zaje.
En algunos programas de mediación escolar, los mediadores son los propios alum-
nos, que realizan mediación entre sus propios compañeros, que es el modelo más
extendido. Es la conocida como mediación entre iguales. Este modelo tiene como
inconveniente que es el tiempo de formación y entrenamiento de los mediadores,
pero es una de las mejores maneras de imbricar esta forma de resolver los conflic-
tos en la cultura del centro.
con una solución impuesta. También está el tema de la apertura que tenga la es-
cuela para aceptar la “intromisión” de alguien desde afuera. Por otro lado, tampoco
puede llegar en algunos casos a ser positivo que algunos miembros de la comuni-
dad educativa resuelvan sus propios problemas, ya que puede llegar a perderse la
imparcialidad.
- En educación primaria,
- En educación secundaria,
- En educación universitaria.
La mediación es mucho más que una técnica concreta para gestionar conflictos. El
aprendizaje para poder aplicar esta técnica en los centros educativos puede gene-
rar una cultura de la paz y desarrollar unas competencias sociales que nos permitan
relacionarnos mejor.
Hay muchas razones por las que las personas nos preocupamos por nuestra co-
munidad. La gente se reúne instintivamente, los seres humanos nunca hemos vivi-
do solos, vivimos de acuerdo con las normas sociales en evolución. Es a través de
la comunidad, de la interacción significativa con los demás, como nos reconoce-
mos, como damos sentido a nuestra vida.
- Reconocer los conflictos como parte natural de la vida y como fuentede aprendizaje.
- Adquirir capacidades dialógicas para comunicarse abiertamente y efectivamente.
- Saber conocer y expresar las propias emociones y sentimientos, fomentando la
revalorización de uno mismo y de los demás.
- Desarrollar actividades de pensamiento reflexivo, creativo y crítico como herra-
mientas de anticipación, solución y opción personal frente al conflicto.
- Participar activamente y con responsabilidad en la construcción de la cultura del
diálogo, de la no-violencia activa y de la paz transformando el propio contexto.
- Contribuir al desarrollo de un entorno social equitativo, pacífico y cohesionado.
- Incorporar la mediación como proceso de encuentro interpersonal para la elabora-
ción de los propios conflictos y la búsqueda de vías constructivas de consenso.
Es, sin duda, en este primer nivel formativo donde la mediación escolar constituye
un verdadero revulsivo contra la violencia. Aprender a vivir y a convivir en el seno
del centro enseña, ciertamente, a relacionarse constructivamente en esferas de la
vida social que sobrepasan los límites de la escuela. Las personas educadas en la
no-violencia como práctica cotidiana pasan a enriquecer el tejido social próximo con
estilos relacionales participativos, asertivos y empáticos al mismo tiempo.
Por otro lado, aquéllos que muestran dificultades de autocontrol y reactividad frente
a cualquier conflicto agradecen, igualmente, la posibilidad de La mediación, desde
la óptica de la prevención, conforma una instancia de escucha que respeta la inti-
midad de las personas, contempla sus puntos de vista y sus sentimientos, impulsa
la toma de conciencia y permite detener la escalada del conflicto y reconducirlo. A
nivel informal, es decir, prescindiendo de la presencia de un servicio de mediación
en el centro, las personas con conocimientos mediadores invitan a las que están
inmersas en un conflicto a tratarlo por la vía del diálogo. Según Ury “cada uno de
nosotros puede abrir puertas y dar acceso a recursos que permitirán a otros ayu-
darse a sí mismos”. Queda claro, pues, que no se trata de preparar a personas
apaciguadas, dóciles, pasivas y obedientes, sino pacíficas, autodisciplinadas, con
espíritu crítico, participativas y dispuestas a luchar en pro de la erradicación de
cualquier tipo de violencia.
53
Un objetivo de este tipo de mediación es que los alumnos acaben por llevar a sus
hogares las habilidades de mediación aprendidas en el ámbito escolar, reafirmán-
dose como un modo de relación general tendente a la paz, el efecto multiplicador es
fundamental, porque lo que empieza siendo clima de centro llega a ser parte del
clima de una comunidad educativa toda.
Los mediadores no buscan culpables porque no son jueces. Tampoco dan la solu-
ción al problema sino que ayudan a buscarla. Si el conflicto se resuelve favorable-
mente, las partes pueden firmar un acuerdo por escrito o hacerlo verbalmente.
El Plan de Mediación Escolar del Ministro de Educación, Daniel Filmus fue lanzado
con bombos y platillos pero posiblemente haya docentes que ni siquiera estén ente-
rados del mismo. Y en la actualidad es un plan entre otros sin repercusión en la
práctica cotidiana de las escuelas, al menos en Salta.
En medio de tal panorama, sin querer ser pesimista, sino intentando ser absoluta-
mente realista, avizoro que próximamente habrá nuevos hechos como el de Car-
men de Patagones, pues la mediación todavía no llegó a las instituciones.
Es bueno recordar que a mediados del siglo veinte "la comunicación" comienza a
formar parte del vocabulario científico.
Esto puede ser posible en la medida que entendamos la mediación, como un pro-
ceso de comunicación y podamos implementarla no como una técnica sino como un
método pedagógico, válido para todos los actores sociales: padres, alumnos, do-
centes, directivos, administrativos… basado en la escucha, la aceptación, la com-
prensión y el respeto por los miembros de un sistema, donde la diversidad, el otro,
tiene cabida y aceptación.
55
En cada institución escolar, sea esta una escuela de frontera o un colegio de elite,
se expresa una gran diversidad de formatos familiares, culturales, económicos, reli-
giosos, éticos y morales se presentan conflictos susceptibles de ser trabajados a
partir de la mediación. Pero la realidad de las escuelas tiene que ver con un anclaje
frente al conflicto, con una paralización y una cierta resignación frente a lo que ocu-
rre por considerarlo insoluble.
AXIOMAS DE LA COMUNICACIÓN
Paul Watzlawick” da un grupo de leyes para la comunicación a las que las llama:
Axiomas Pragmáticos
NO ES POSIBLE LA NO-COMUNICACIÓN
Tiene que ver con el hecho de que cuando uno piensa en la comunicación, piensa
en la comunicación consciente, voluntaria, intencional, donde el mensaje que se
trasmite al otro es "yo quiero comunicarme con vos”. Por ejemplo, estamos senta-
dos en el banco muy enojados con los brazos cruzados sin decir una palabra. Si
nos hablan no respondemos porque no queremos comunicarnos. En realidad con
nuestra postura corporal o no contestando estamos comunicando que no deseamos
comunicarnos. En general en la familia se dice que no hay comunicación, o que
entre padres e hijos no existe esta interacción y en realidad lo que sucede es que la
comunicación es incompleta, insuficiente. No es que no haya comunicación sino
que a veces por situaciones de indiferencia, de desencuentros con el otro, el men-
saje que recibimos no es el mensaje que esperamos o deseamos.
El lenguaje digital es aquel de las palabras (hablada y escrita). Se llama digital por-
que guarda una relación solamente convencional entre el signo y aquello que re-
presenta; por ejemplo: no hay nada en la palabra “tenedor” que represente a un
tenedor. El lenguaje analógico es el lenguaje de los gestos, de la postura corporal,
del uso del espacio, de la distancia, del tiempo, del tono, la decadencia, el contexto.
Se llama analógico porque guarda una relación de semejanza entre el gesto y
aquello que representa. El lenguaje onomatopéyico de los chicos (“tu-tu” por ejem-
plo) también forma parte de este lenguaje.
56
A veces puede haber coherencia entre al lenguaje analógico y el digital y otras pue-
de haber contradicciones. En general privilegiamos el lenguaje digital, pero hay si-
tuaciones en donde atendemos primordialmente al lenguaje analógico, por ejemplo,
si una persona dice “te quiero” más allá del uso de estas palabras se estará atento
al tono de voz, de los gestos, la cercanía...
Definir la relación entre los comunicantes, lo que implica una información sobre la
comunicación, es decir, una "metacomunicación". Esta comunicación servirá para
definir la relación cuando la comunicación haya sido confusa o ambivalente
ción, sino que lo opuesto también resulta sumamente difícil: hablar acerca de una
relación requiere una traducción adecuada del modo analógico de comunicación al
modo digital.
- El nivel de contenido tiene que ver con la información que nosotros transmitimos
y lo que hacemos a través del lenguaje digital, a través de la palabra;
- mientras que el nivel de relación es transmitido a través del lenguaje analógico,
es decir a través del uso de la distancia, el espacio, los gestos, la postura corpo-
ral... Yo le transmito al otro cómo debe ser entendida la comunicación.
La puntuación de la secuencia
En general, tenemos la tendencia a ver las cosas desde nuestro punto de vista.
Entendemos que la conducta del otro, es la causa de que nosotros seamos de dis-
tinta manera. Por ejemplo: cuando vemos a un hombre callado y una mujer charla-
tana. Si nosotros indagamos a cada uno de ellos, la mujer dice “yo soy conversado-
ra porque él es tan callado que nunca me cuenta nada, y si yo no pregunto no me
entero de lo que pasa”; y si le pregunto al hombre diría “yo soy callado porque mi
mujer me vuelve loco a preguntas y me habla todo el día”.
En los simétricos cada una de las personas que se comunican tratan de igualar las
conductas recíprocas, sea bondad, maldad, fuerza o debilidad; tratan de ponerse al
mismo nivel; mientras que los complementarios se caracterizan por tener una
máxima diferencia. Por ejemplo: la conducta de las dos personas que se relacionan
es distinta pero enganchan, son complementarios, por ejemplo la relación jefe-
subordinado.
58
Como por ejemplo, la relación entre hermanos, entre amigos, entre marido y mujer.
También puede ser el estilo propio de una díada particular.
El contexto de la comunicación
Es fundamental arbitrar los medios adecuados para que existan comunicaciones
eficaces dentro de la institución. Por consiguiente, las comunicaciones deben plani-
ficarse según las características del contexto en la que se desarrollan.
59
Al analizar la naturaleza del conflicto, hemos visto cómo (desde los fundamentos de
los métodos no adversariales).
Los modelos mentales inciden en forma profunda sobre los mecanismos intentados
para resolver las crisis pero también sobre la concepción del proceso de cambio en
sí mismo.
Cuando nos referimos a la naturaleza del proceso de cambio nos referimos tanto a
los que se producen espontáneamente en la vida cotidiana como a los cambios
más trascendentes que pueden provocarse en una organización, una comunidad o
una nación.
dentro del clima creado y mantenido es el otro objetivo, cuyo límite en acercar a las
partes llega hasta donde la voluntad negociadora de ellas lo permita.
En la mayoría de los casos, las partes no son conscientes de sus mensajes no ver-
bales. Es ahí en donde el mediador debe prestar mucha atención a las contradic-
ciones entre el mensaje verbalizado y el gestual. Por ejemplo: Slaikev nos da el
ejemplo del hombre que expresa “no tengo problema con eso”, mientras cierra fuer-
temente el puño o se aferra al apoyabrazos de su silla. El mediador tendrá que ob-
servar el mensaje no verbal y compararlo con el mensaje hablado.
El saber escuchar
"El escuchar es el factor fundamental del lenguaje. Hablamos para ser escuchados.
El hablar efectivo sólo se logra cuando es seguido de un escuchar efectivo. El es-
cuchar valida el hablar. Es el escuchar, no el hablar, lo que confiere sentido a lo que
decimos. Por tanto, el escuchar es lo que dirige todo el proceso de la comunica-
ción." Según Rafael Echeverría.
Existe una diferencia entre escuchar de verdad y limitarse a esperar que llegue tu
turno para hablar.
El no saber escuchar genera malas relaciones y lleva a vicios como “la adivinación
de pensamientos”, es decir, suponer que la persona siente o piensa, muchas veces
poniéndole aspectos que pertenecen a nosotros mismos.
mental de trabajo. Por ello, en el caso específico del directivo puede decirse que,
antes que un instrumento de control, autoridad o poder, es más bien un instrumento
de comunicación dentro de la dinámica organizacional.
Estos aspectos pueden abordarse con bastante efectividad mediante diversos en-
foques. (Ver Lectura Complementaria al final de esta Unidad)
El área principal de acción, debe ser el conjunto de creencias limitantes que sobre
nosotros mismos tenemos. El corazón de las creencias sobre nuestra identidad
como pueblo está plagado de creencias denigrantes que producen nuestra propia
subvaloración y que signan nuestras conductas desde las profundidades del in-
consciente.
Una de las herramientas más poderosas que ofrece la Programación Neuro Lin-
güística (PNL) para los gerentes, es la detección de los Meta Programas (MP) cuya
descripción mas acertada es la de patrones o filtros para percibir la realidad que
muestran una relativa estabilidad en su funcionamiento en un rango de contextos y
sus procesos.
1.- El establecimiento de una óptima relación ("rapport") con las personas con
quienes se trabaja, para disminuir así grandemente la resistencia hacia la eje-
cución de la tarea.
2.- La recolección adecuada de la información que se necesita, basando esa in-
formación tanto como sea posible en un lenguaje sensorial específico (ver, oír,
sentir, gustar y oler) y prestando cuidadosa atención a las señales verbales y
no verbales del interlocutor.
3.- La conducción efectiva de entrevistas y presentaciones de ideas y sugerencias
en una forma consistente y congruente con los estilos y "modelos" de los inter-
locutores.
4.- La detección más fina del efecto que el mensaje y los metamensajes del comu-
nicador -directivo o líder- provoca en los demás, para responder adecuadamen-
te, variando flexiblemente la conducta según sea la retroalimentación recibida.
65
5.- La observación cuidadosa del lenguaje verbal y no verbal del interlocutor para
identificar, por ejemplo, ciertos estilos de comportamiento o estilos de interac-
ción, o para manejar objeciones en procesos de enseñanza - aprendizaje.
6.- La identificación de las estrategias de acción que usan las personas para el
logro de resultados, con el fin de evaluar la funcionalidad de esas estrategias o
instalar unas más efectivas.
7.- La aplicación de procedimientos de modelado o modelaje, como herramientas
para el aprendizaje de alguna destreza efectiva de otra persona, o para actuar
como modelo de sí mismo y reproducir la propia excelencia demostrada en al-
guna ocasión anterior. Hoy es bastante conocido el proceso denominado
"benchmarking", mediante el cual toda una organización puede aprender la efi-
cacia de otra mediante instrumentos de modelado.
8.- La posibilidad de "anclar" conductas positivas y "desanclar" comportamientos
limitantes, en forma controlada e intencional, tanto en otras personas como en
sí mismo, mediante procedimientos de anclaje y autoanclaje.
9.- La oportunidad que ofrecen los procedimientos de reencuadre -una destreza
eminentemente lingüística- para aprender a redefinir o resignificar situaciones
aparentemente negativas, a través de un cambio de perspectiva que permita
percibir los hechos de manera distinta y en consecuencia actuar en forma dife-
rente.
34